LA BANDA ANCHA EN ESPAÑA: COMPARATIVA CON LA UNIÓN EUROPEA - MADRID, 2010
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introducción Desde hace algún tiempo se polemiza sobre la situación de la banda an- cha en España, no sólo sobre su crecimiento o expansión como eje virtual para el acceso a la Sociedad de la Información por parte de la población en general, sino también sobre las características de la prestación en sí misma. Con el objetivo de conocer de un modo aproximado cuál es la verdadera situación de la banda ancha en España, desde la Unión de Consumidores de España-UCE se ha procedido a estudiar qué estado vive esta tecnología en la vecina Europa, para así identificar mejor el lugar que ocupa España en el mapa europeo de la banda ancha. Cuando se habla de la banda ancha en España, siempre se hace desde la impresión de estar hablando de un país situado en las antípodas de la tec- nología necesaria para conexiones de alta velocidad, y a la cola si compara- mos la situación española con la que disfrutan nuestros socios europeos. El afán de las operadoras de telefonía por captar clientes ha generado una oferta ingente, en la que cada promoción se saca con el objetivo de superar a las de la competencia. De esta manera se multiplican las ofertas, con precios atractivos, en las que se combina además del servicio de la banda ancha, opciones de teléfono o televisión de distintas plataformas de pago. El servicio de internet que se ofrece por parte de las operadoras de telefonía se caracteriza a través de dos variables, velocidad nominal –aquella que es objeto de promoción por parte de la operadora y que termina contratando el usuario– y el precio que se paga por el servicio –en cuotas y desagrupado en diferentes conceptos–. Las velocidades vienen estructuradas en tres gru- pos según el volumen de megas que se contrata: bajas, ofertas de hasta 3 MB; las medias –que también son las más contratadas–, que se distribuyen entre 3 MB y 10 MB, y las altas, que se sitúan por encima de los 10 MB, y que llegan hasta los 50MB. Además, se deberá tener en cuenta también la velocidad de descarga y la velocidad de subida. Y los precios resultan de la intención con la que se lanza la promoción. Sin embargo, ¿quiénes son los potenciales beneficiarios de dichas ofertas? 2
¿oferta o fraude? Las ofertas de los operadores de internet que, a priori, suponen un descuen- to o rebaja en el recibo final de usuario están destinadas, principalmente a la captación de nuevos clientes, ya sea por una nueva alta, a través de una portabilidad o por el cambio de prepago a contrato o viceversa. Sin em- bargo, cuando un ciudadano desea contratar un nuevo servicio de internet, en la mayoría de las ocasiones, se ve obligado a permanecer atado a dicha compañía por un tiempo determinado. La llamada permanencia se ha convertido en la llave que impide que el usuario cambie libremente de compañía. Dicha claúsula es uno de los motivos que ha incrementado el número de quejas entre los usuarios respecto a este servicio –que también es propio de los clientes de servicios telefónicos–. De hecho, las penalizaciones por baja en la compañía son un tema recurrente de consulta y queja. Hay que aclarar que la permanencia es una práctica legal y supone, en el caso de la telefonía, la contraprestación a la entrega de un terminal gratis o a un bajo coste y se generaliza en el servicio de internet por ofertas con impor- tantes descuentos en las tarifas a cambio de un compromiso de permanencia. Según la Directiva 2002/21/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 7 de marzo de 2002, relativa a un marco regulador común de las redes y los servicios de comunicaciones electrónicas, “los consumidores deben poder tomar decisiones con conocimiento de causa y cambiar de proveedor cuando les interese, con el fin de beneficiarse plenamente del entorno competitivo”, sin embargo, no hay obstáculo “para la imposición de períodos mínimos de contratación razonables en los contratos celebrados con los consumidores”. Como asociación de consumidores, UCE recuerda que, según la directiva 2002/22/CE (Directiva servicio universal), en su artículo 20.1.e. se regula el modo que se deberá presentar el contrato, en el que precisará, “de manera clara, comprensible y fácilmente accesible, como mínimo: la duración del contrato y las condiciones para su renovación y para la terminación de los servicios y la resolución del contrato, incluidos; cualquier uso o duración mínimos requeridos para aprovechar las promociones; todos los gastos relacionados con la conservación del número y otros identificadores, y to- 3
dos los gastos relacionados con la resolución del contrato, incluida la recu- peración de costes relacionada con los equipos terminales”. Por otra parte, los estados miembros deberán garantizar que “los abonados tengan derecho a rescindir sin penalización sus contratos cuando las empresas proveedoras de redes o servicios de comunicaciones electrónicas les notifiquen propues- tas de modificación de las condiciones contractuales. Toda modificación de tales condiciones habrá de ser notificada adecuadamente, con un mes como mínimo de antelación, a los abonados, a los que se informará al mismo tiempo de su derecho a rescindir sin penalización sus contratos en caso de no aceptación de las nuevas condiciones”. UCE aconseja que es conveniente informarse sobre la duración del mismo y, en caso de baja anticipada, solicitar un prorrateo de la penalización en función del tiempo de permanencia que falte por cumplir. comprometidos durante 12 meses Según el estudio Los operadores de banda ancha: España versus Europa, realizado por la Unión de Consumidores de España-UCE, en el que se anali- zan 213 ofertas pertenecientes a 30 operadores diferentes, en nueve estados de la Unión Europea (: Portugal, Francia, Alemania, Italia, Bélgica, Holan- da, Reino Unido, Irlanda y España), podemos ver como la permanecia es una práctica generalizada en la mayoría de las promociones que lanzan los operadores de internet. El siguiente gráfico muestra los índices de concentración de los 30 opera- dores analizados en 2009, según los meses de permanencia exigidos. Como se puede observar, Alemania y Reino Unido son los países que muestran mayor número de ofertas con la máxima permanencia permitida, 24 meses. En España, la permanencia mayoritariamente exigida se situa en 12 meses 4
24 Meses 18 Meses ALEMANIA REINO UNIDO IRLANDA 12 Meses ESPAÑA FRANCIA 6 Meses Sin Permanencia 0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 gráfico 1 de duración, sólo por detras de Irlanda y Francia. Alemania y Francia ob- tienen niveles de concentración mayores para aquellos operadores que no requieren contrato de permanencia dentro de esta categoría. En el caso de España, las ofertas se distribuyen por distintos niveles de concentración, siendo el más ofertado 12 meses de permanencia, posteriormente son 6 meses los más ofertados y 18 meses en tercer lugar. En la memoria semestral que realiza la Unión de Consumidores de España- UCE se presentaba, entre los principales motivos de queja, el retraso en la gestión de la baja del servicio. Es importante que el usuario tramite la baja en la forma indicada en las condiciones generales del contrato (normal- mente por escrito). No obstante, es conveniente notificar en la petición de baja a la compañía que pasen a recoger los equipos. Son muy frecuentes los casos en que a pesar de que la compañía ya no preste el servicio de internet, siga cobrando el mantenimiento de los aparatos. 5
El servicio de internet se ha convertido en uno de los servicios que mayor incremento en el número de consultas ha experimentado. Algo que parece lógico si tenemos en cuenta el aumento en número de líneas contratadas experimentado por el sector. Según datos de la última Nota Mensual de la CMT, durante el mes de junio de 2010 se dieron de alta 49.804 nuevas líneas de banda ancha, un 10 % más respecto del año anterior. En España ya hay un total de 10, 2 millones de líneas de banda ancha: 21,8 líneas por cada cien habitantes. Se constata que el crecimiento del 16,8 % de las portabilidades de líneas fijas, está directamente relacionado con el hecho de que el cam- bio de telefonía fija suele estar asociado a la contratación de un paquete de banda ancha y con voz con un operador alternativo. Cuando se habla de la banda ancha en España, siempre se hace con la im- presión de estar hablando de un país situado en las antípodas de la tec- nología necesaria para conexiones de alta velocidad, y a la cola si compara- mos la situación española con la que disfrutan nuestros socios europeos. El afán de las operadoras de telefonía por captar clientes ha generado una oferta ingente, en la que cada promoción se saca con el objetivo de competir directamente con la competencia. De esta manera se multiplican las ofertas, con precios atractivos, en las que se combina además del servicio de la ban- da ancha, opciones de teléfono o televisión de distintas plataformas de pago. El servicio de internet que se ofrece por parte de las operadoras de telefonía se caracteriza a través de dos variables, velocidad nominal –aquella que es objeto de promoción por parte de la operadora y que termina contratando el usuario– y el precio que se paga por el servicio –en cuotas y desagrupado en diferentes conceptos–. Las velocidades vienen estructuradas en tres gru- pos según el volumen de megabytes (MB) que se contrata: bajas, ofertas de hasta 3 MB; las medias –que también son las más contratadas–, que se distribuyen entre 3 MB y 10 MB, y las altas, que se sitúan por encima de los 10 MB, y que llegan hasta los 50MB. Además, se deberá tener en cuenta también la velocidad de descarga y la velocidad de subida. 6
En el estudio realizado por la Unión de Consumidores de España-UCE an- teriormente citado, se ha procedido a establecer una relación entre veloci- dades promocionadas y precio final de la oferta. Según las ofertas analizadas, y tomando una muestra significativa de diver- sas ofertas de banda ancha en función de velocidad de descarga y precio ofertado por distintos operadores en cada uno de los países, se desarrolla el gráfico 2, en el que se comparan los niveles de precios y velocidades de descarga en cada uno de los países. Como se puede observar, existen difer- encias evidentes entre unos países y otros. En el caso de España se observa cómo la línea de precio supera comparativamente la línea en velocidad de descarga, lo que evidencia que los españoles, comparado con el resto de países, tenemos una velocidad de descarga demasiado cara. Nuestros veci- nos más inmediatos, los portugueses, por ejemplo, disfrutan de unos pre- cios y una velocidad de descarga muy aproximados. Velocidad de descarga VS Precio- 2009 2,5 2 HOLANDA ESPAÑA 1,5 HOLANDA 1 FRANCIA 0,5 ALEMANIA BÉLGICA PORTUGAL R.U 0 ITALIA PORTUGAL -0,5 ESPAÑA IRLANDA ITALIA R.U -1 FRANCIA ALEMANIA BÉLGICA IRLANDA -1,5 valoracion_velocidad precio gráfico 2 7
En el gráfico 3 se otorga valores a los diferenciales entre precio y velocidad presentados en el gráfico 2. De esta manera se ve cómo el diferencial más elevado, con mayor peso del precio es para el caso de España, con cerca de 2.5 puntos de diferencia entre el precio y la velocidad. Es decir, España es el país de la UE donde predominan mayor número de velocidades bajas y donde se paga el precio más alto. Portugal es el de menor diferencial, de manera que la velocidad ofertada y el precio que se paga por ella guardan cierto equilibrio. Por último, destacar que Francia es el país donde mayor velocidad existe a cambio de menor precio. Diferenciales velocidad de descarga y precios 2009 1,98 1,21 0,88 -0,06 0,51 -1,21 -0,45 -0,65 -2,22 PORTUGAL R.U BÉLGICA ITALIA IRLANDA ESPAÑA ALEMANIA HOLANDA FRANCIA gráfico 3 Al tratarse de un estudio realizado durante 2009, UCE ha querido com- probar cuáles eran las tendencias que han dominado el sector de internet durante los primeros nueve meses de 2010, y se han analizado 89 ejemplos de ofertas, de 12 operadores de seis países europeos (Portugal, Reino Unido, Bélgica, Italia, Irlanda y España). 8
Velocidad descarga - Precios: 2010 1,5 España Portugal Irlanda 1 0,5 Bélgica Reino Unido 0 Portugal Bélgica -0,5 Reino Unido Italia -1 España Italia Irlanda -1,5 descarga precio gráfico 4 El principal cambio que se aprecia, tras observar el gráfico 4, en las ofertas de 2010 es que el diferencial de Portugal es mucho mayor que el resultado que dan los datos de 2009 en tanto que el precio sigue disminuyendo para unas mayores velocidades de descarga en banda ancha. Por su parte, España sigue la misma tendencia que mostraba en el pasado año; precios altos para velocidades de descarga bajas. A continuación, en el gráfico 5 sobre diferen- ciales entre velocidad de descarga y precios, se observa un incremento en el precio que los españoles pagan por la velocidad contratada. Diferenciales velocidad de descarga y precios 2010 1,49 1,27 1,03 0,60 -2,24 -2,14 Portugal Reino Unido Bélgica Italia Irlanda España 9 gráfico 5
De cuántos megas estamos hablando Cuando se habla de la velocidad de un servicio de internet, ya sea banda ancha, fibra o cable, surge la duda de si la velocidad que se contrata es real- mente la que disfruta el usuario. Pese a que la obligación de permanecer atado a una compañía por un tiempo determinado y las dificultades para darse de baja de una compañía agotan la paciencia de muchos usuarios, el primer motivo de queja respecto al servicio de internet, son las deficiencias en la conexión a internet, es decir, que el servicio no alcance la velocidad contratada o no exista cobertura en lugar donde se utilizan los equipos. Un dato que revela que se cumplen las sospechas ante un posible engaño por parte de los operadores de internet. Expertos en telecomunicaciones pertenecientes al ámbito docente, consulta- dos por la Unión de Consumidores de España, aseguran que, hoy por hoy, es imposible garantizar una cantidad mínima de velocidad. Y para empezar a justificar esta afirmación señalan tres razones principales. “La velocidad al final que un usuario obtiene depende de tres cosas. Por un lado, depende de la situación de su ordenador, el número de aplicaciones que tiene abiertas, el número de cosas que está haciendo. En segundo lugar, la velocidad que su operador le proporciona y, finalmente, la velocidad con la que el servidor des- de donde se está descargando la información se lo mande. No hay forma de garantizar en ningún momento una velocidad determinada, porque depende de estas tres elementos: del equipamiento, de la velocidad que le proporciona el operador y del servidor al que se ha conectado y que le proporciona infor- mación”. Asegurar a los internautas una velocidad determinada significaría que el operador debe reservar el espacio para cada usuario, aun cuando este no esté usando su conexión; es decir, que cuando el usuario no estuviera uti- lizando esa capacidad, su espacio tampoco podría ser utilizado por otros in- ternautas. Una práctica que es, precisamente, la manera en la que operan las compañías que comercializan servicios de internet. En palabras de los exper- tos anteriormente citados, “lo que hacen es distribuir toda su capacidad entre 10
la totalidad de los usuarios que en ese preciso momento quieren acceder a la red. Un proceso llamado multiplexación estadística y que funciona de la siguiente manera. Cuando se analiza una conexión, la trasmisión de datos da diferentes saltos, pasando de un nodo a otro. En cada salto, cada petición de trasmisión compite con las demás, y la capacidad que tiene ese nodo la reparte entre todos los usuarios que quieren acceder a la red en ese momento. Cuando un internauta se percate de dichos problemas deberá, siempre, poner la incidencia en conocimiento del operadora para que esta sea sub- sanada. En caso de persistir el problema y no estar conforme con la factura, debido a una mala prestación del servicio, el usuario debe saber que, si paga la parte de la factura relativa a llamadas telefónicas, no puede cortarse el acceso al servicio telefónico, aunque sí el acceso a Internet. Pero entonces, si es imposible garantizar una velocidad determinada, ¿que sentido tiene el lanzamiento de promociones con unas velocidades que nunca se alcanzarán por el internauta medio? Comparar la situación en España con la que viven nuestros socios europeos implica ciertas dificultades: las diferentes tecnologías que cohabitan en el espacio de las telecomunicaciones arroja un mapa desigual, en cuanto a pre- cios y tecnologías, en el que los usuarios deben luchar por discernir si de- sean contratar sólo una conexión a internet, o añadir llamadas y televisión de pago, a sus contrataciones con las diferentes compañías proveedoras. Las promociones, combinaciones de distintas servicios por un precio global, alcanzan un nivel de reproducción cada vez más alto. Ofertas con múltiples posibilidades que hacen difícil una comparación que establezca qué país obtiene mayor velocidad a un precio más económico. En el gráfico 6 se puede ver la siguiente tendencia. Los precios al por menor están bajando, aunque menos que en años anteriores. Los usuarios están re- cibiendo accesos a Internet mas rápidos por precios similares. La mayor dis- 11
minución de precios entre 2007 y 2008 se produce para las velocidades de descarga superiores a 30 MB, un descenso entre ambos años de 23.73 euros. Evolución Precios por Velocidad de Descarga en Europa 80 € 70 € precio 2007 60 € precio 2008 50 € precio 2009 40 € 30 € 20 € 512 Kb- 1 Mb 1- 2 Mb 2- 4 Mb 4- 8 Mb 8- 30 Mb > 30 Mb gráfico 6 De 2008 a 2009, la velocidad que más disminuye su precio es para aquellas entre 8-30 MB. Sin duda las ofertas que más han disminuido sus precios son las superiores a 30 MG para todo el período analizado. 12
La siguiente tabla permite apreciar con claridad la diferencia de precios en banda ancha entre España y otros países. Puede que el precio no sea el único factor decisivo a la hora de aproximar a más personas a la Sociedad de la Información, pero de lo que no cabe duda es que es un factor incómodo de soportar para los usuarios finales. 1MB-3MB 4MB-10MB > 10 MB BA FINAL* BA FINAL* BA FINAL* Otros EUROPA 22,50 28,75 28,27 34,58 34,63 39,56 ESPAÑA 32,60 40,44 41,92 50,73 49,73 52,29 DIFERENCIA % 30,99 36,67 32,58 31,84 30,37 24,34 *Final: Precio medio final con línea, sin impuestos. De la tabla se extraen algunas reflexiones que pueden resultar de interés: En primer lugar, señalar que la diferencia porcentual entre la cuota de BA en las compañías españolas y el resto de operadores europeos supera el 30% en todas las modalidades de velocidad contempladas. En segundo término, se observa que las diferencias, aunque siguen siendo abultadas, se acortan al considerar el precio final a pagar por el usuario. En este caso, la diferencia alcanza su punto máximo en el tramo 1MB a 3 MB (36%) y su cota mínima en los 10 MB o más (24%). En tercer lugar, haciendo la comparación entre tipos de operadores, el histórico español es, respecto a la cuota de banda ancha, con un precio medio en sus ofertas de 37,90 euros, un 15% más caro que sus homólogos europeos, recortándose el diferencial al examinar el precio final que se en- cuentra un 14% por encima al situarse en una media de 51,87 euros. La diferencia porcentual es casi el doble si se compara el comportamiento de los alternativos en Europa y España. En efecto, los operadores alternativos 13
españoles son, en cuota de banda ancha y precio, un 32,6% y del 33,6% más caros, respectivamente, que sus homólogos europeos, al obtener medias de precios en sus ofertas de 42,37 euros de cuota mensual de BA y 47,66 euros de precio final al mes. Se rompe así un mito que carga el encarecimiento de la banda ancha en España al operador de referencia, en tanto omite el peso de los operadores alternativos. Ahora bien, no terminan aquí las referencias al precio. Es preciso tomar en consideración las promociones de los operadores sobre sus precios defini- tivos. En el segmento de los operadores históricos debemos hacer mención al es- tímulo de Telefónica en esta materia. Sus promociones en relación con sus cuotas mensuales de BA permiten un ahorro que oscila entre los 180 euros y los 252 euros en el primer año, según el producto contratado. Si en el coste anual global se considerase este descuento que sólo alcanza a los nuevos clientes (como los del resto de operadores), la diferencia a favor de Telefóni- ca sobre el precio medio compuesto por el resto de operadores tardaría en ser amortizada por estos entre dos y tres años. Ningún otro operador histórico estira sus ofertas hasta un plazo de 12 me- ses. Seis es lo más corriente, como sucede en el caso de las operadoras en Holanda y Bélgica. En el primer caso, KPN fija bonificaciones de 9 euros. BT, por su parte, ofrece una promoción de 7,5 euros por 3 meses. Sólo los importantes descuentos de Belgacom en sus modalidades de 4 MB, 12 MB y 18 MB se aproximan a la magnitud del descuento de Telefónica, ya que el volumen en el caso del operador histórico belga va de 106 a 233 euros. Las promociones de Alice, que suelen durar entre los tres y cuatro meses, representan un descuento máximo de 41 euros y las de Eircom, unos 30 euros. 14
Por lo que se refiere a los operadores alternativos las cosas no son uniformes. Todos los que actúan en España realizan descuentos de cierto interés, pero ninguno de los analizados que operan en la modalidad de xDSL (Ya, Or- ange y Jazztel) superan los 89 euros (por mes). Insuficiente para enjugar la diferencia respecto al precio medio del resto de operadores alternativos. Los operadores de cable, por el contrario, sí efectúan descuentos de cierto interés en comparación con sus homólogos europeos. Tal es el caso de Ono, con promociones que suponen ahorros que van desde los 60 a los 180 eu- ros, pasando por los 120 euros que se ahorra el usuario si se decide por su oferta de 6 MB más teléfono. No obstante, no es una cantidad suficiente para compensar el diferencial de precio con la media europea que se sitúa en 180 euros al año. No le sucede lo mismo a Euskaltel que con sus políticas agresivas de descuen- tos se aproxima a las que realiza Telefónica, e incluso en una ocasión la supera. Euskaltel establece períodos de descuento de 12 meses en sus pro- mociones, lo que hace posible que el ahorro vaya de los 143 a los 239 euros, llegando incluso a importes de 419. Aún así los operadores alternativos del resto de países amortizarían estos ahorros en un período de un año y medio. En Italia, Tiscali alcanza niveles de descuento de 145 euros. En Alemania, Unitymedia, 200 euros; 125 euros, con el operador de cable Zeeland en Ho- landa, o 143 euros, si el usuario británico se decanta por la operadora Virgin. 15
¿qué es lo que regalan? Además, los operadores de internet aprovechan la nomenclatura utilizada –oferta, promoción, precios de ocasión, router gratis– para incluir una serie de servicios adicionales que son presentados como el paso definitivo por el que el cliente debe decantarse por la oferta en cuestión. Sin embargo, di- chos servicios adicionales no son tan ventajosos como pueden aparentar a primera vista. En cuanto al equipamiento o servicios adicionales que suelen integrar las ofertas de los operadores analizados, los resultados no dejan lugar a dudas: el 81% ofrece cuentas de correo en mayor o menor número y con capacidad diversa. A este servicio adicional le sigue en popularidad el espacio para la web personal, que está presente en el 65% de las ofertas. El router inalámbrico es otra de las bazas de promoción: se ha registrado en el 53% de las ofertas. El antivirus alcanza el 26% de las ofertas y, finalmente, el decodificador de televisión está en el 15% de las promociones estudiadas. Servicios que entran dentro de la promoción, y que posteriormente pasan a formar parte de la factura, pues se ha observado como dicho servicio adi- cional pasa a ser considerado un servicio de pago, mediante el abono de una cantidad en concepto de alquiler del aparato –como en el caso del router o del decodificador–, o como su disfrute se ve acotado en el tiempo mediante periodos de prueba –como en el caso de los antivirus–. A estos servicios adicionales se debe añadir las limitaciones o restricciones que presentan las ofertas, tanto de banda ancha como los combos que in- cluyen llamadas y televisión. Con la comparativa de precios, aunque arroja resultados fundamentales para esta investigación, el estudio todavía resul- ta incompleto. A fin de conseguir una perspectiva más global es necesario abordar las prestaciones básicas del producto que ofrecen los distintos op- eradores, tanto en las limitaciones de descarga, si las hubiera, o las limita- ciones de llamadas nacionales a fijos (tal y como se entienden en España), si fuese preciso. 16
Entre las ofertas recogidas de los ex monopolios (BT, SAPO, Belgacom, Telefonica, KPN, Alice, Orange, DT, Eircom), el 58% presenta alguna limi- tación, básicamente de descarga. Cuando se toma en consideración los pro- ductos con limitaciones de Telefónica, el porcentaje sube al 61%, es decir, el peso del operador histórico español en las limitaciones aportadas por los ex monopolios tan sólo es de un 3%. En España los productos con limitaciones van de los 2 a los 20 GB. En el ámbito de los operadores alternativos, el porcentaje de las limitaciones es del 26%, frente al 61% de los operadores históricos. En este segmento, los operadores españoles no aportan ni un solo punto porcentual, a excepción de dos ofertas encontradas en el operador histórico. En relación con las limitaciones de descarga se considera preciso realizar unos ciertos apuntes. Por una parte, el modelo español de comercialización de productos de BA ha optado claramente por no introducir limitaciones de descarga. Además, estas ofertas con limitaciones son adecuadas para deter- minado perfil de usuarios que pueden encontrarlas atractivas si van acom- pañadas de precios adecuados. Es un contrasentido realizar ofertas que limitan las descargas a pocos megas, acompañadas de velocidades altas, ya que el usuario ocasional, que se puede sentir atraído por las limitaciones (si son a precio razonable) y como modo de aproximarse a la BA, no requiere unos niveles de velocidad elevados. Por último, indicar que las descargas adicionales que se ofrecen entre los 1000 y los 2000 megas tiene un coste que suele oscilar entre los 0,96 euros y 1,25 euros. En cuanto a las limitaciones de las llamadas telefónicas de las ofertas consi- deradas, las más frecuentes son las que restringen las llamadas a fijos nacio- nales a las noches y los fines de semana. También hay restricciones que con- sisten en cobrar el establecimiento de llamada, haciendo gratuito el tiempo de comunicación o abaratando los precios de la llamadas a fijos nacionales. En ambos casos no estamos en presencia de comunicaciones gratuitas, sino de pseudo ofertas de gratuidad. 17
UNA TECNOLOGÍA TODAVÍA EN CIERNES La mayoría de líneas de banda ancha es Europa están basadas en tecnología ADSL. El desarrollo de banda ancha con elevada capacidad es todavía limi- tado, alrededor de una cuarta parte de líneas de banda ancha ofrecen más de 10 MB. España se sitúa por detrás de la media europea de los 27 en cuanto a ratio de penetración de Banda Ancha se refiere, para datos actualizados a enero de 2010. Concretamente este ratio es de 24.8 para la media de la UE de los 27, y España obtiene el 21.5. Países como Bulgaria, Rumania o Polonia es ratio ronda un nivel de 13. Países a la cabeza del ranking como Dinamarca, Holanda o Luxemburgo rozan un nivel de 38 para este ratio. Ratio de penetración de Banda Ancha enero 2010 Dinamarca Holanda Luxemburgo Suecia Alemania Francia Reino Unido Finlandia Bélgica Malta Estonia UE27 Eslovenia Austria Irlanda Chipre España Italia Letonia República Checa Lituania Hungría Portugal Grecia Eslovaquia Polonia Rumania Bulgaria 10 15 20 25 30 35 40 gráfico 7 18
conclusiones A raíz del examen desarrollado desde la Unión de Consumidores de España se concluye que: –Las velocidades de las ofertas españolas más comunes son, en general, más bajas que las del resto de operadores analizados que actúan en los otros países de la Unión Europea. La principal preocupación no es sin embargo que no haya una identidad plena con el resto de países, sino la permanencia de un alto porcentaje de velocidades bajas. –En cuanto a las velocidades de subida, que gozan de menor margen de diversidad, España tiene un comportamiento ligeramente mejor que el pre- sente en las ofertas de otros operadores. –La diferencia porcentual entre la cuota de BA de España y resto operadores supera el 30% en todas las modalidades de velocidad contempladas, pero estas diferencias se acortan en cuanto se considera el precio final a pagar por el usuario. En este caso, la diferencia alcanza su punto máximo en el tramo de los 3 MB (36%) y su cota mínima en los 10 MB o más (24%). Con todo, la principal diferencia de precios no recae sobre el operador histórico, sino sobre los alternativos, comparados unos y otros con sus homólogos. –Las ofertas del resto de operadores de la UE recurren mucho más a las limitaciones de descarga o llamadas que los operadores españoles. Conviene tenerlo en cuenta a la hora de hablar de precios. –También conviene considerar a la hora de comparar las promociones de los distintos operadores y su importe. Este aspecto, junto con el de las limi- taciones permite arrojar conclusiones totalmente distintas sobre la carestía o no de los operadores españoles. –Es positivo que haya oferta con limitaciones para adecuarse a los diferentes tipos de usuarios y para incorporar a todos a la SI, pero estas limitaciones deben verse acompañadas de un precio adecuado. 19
–La permanencia es una fidelización impuesta y una barrera a la libre com- petencia. Las ofertas de los operadores españoles están en consonancia con las de sus homólogos europeos, aunque se aprecian riesgos de extensión ar- tificial de la permanencia, ya sea mediante establecimiento de períodos más prolongados o mediante renovaciones por períodos semejantes al inicial. 20
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