CERTAMEN MATER SALVATORIS - FIESTA MATER SALVATORIS - 25 DE MARZO DE 2021 - Colegios Mater Salvatoris

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CERTAMEN MATER SALVATORIS - FIESTA MATER SALVATORIS - 25 DE MARZO DE 2021 - Colegios Mater Salvatoris
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                   CERTAMEN
MATER SALVATORIS
    F I E S T A   M A T E R   S A L V A T O R I S   -   2 5   D E   M A R Z O   D E   2 0 2 1
CERTAMEN MATER SALVATORIS - FIESTA MATER SALVATORIS - 25 DE MARZO DE 2021 - Colegios Mater Salvatoris
2   CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021
CERTAMEN MATER SALVATORIS - FIESTA MATER SALVATORIS - 25 DE MARZO DE 2021 - Colegios Mater Salvatoris
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GANADORAS
ESO Y BACHILLERATO
RELATO BREVE
CATEGORÍA A : 1.º Y 2.º DE BTO
           PRIMER PREMIO: Una luz en el desierto, de Limón y sal
                Alejandra Bertrán León - 1.º Bto. A
           DOS SEGUNDOS PREMIOS:
           Unas horas con José, de Viena
                Adriana Delgado Romera - 2.º Bto E
           El protagonista mudo, de Pipas y kikos
                Berta Fernández Ponce - 1.º Bto A
CATEGORÍA B: 3.º y 4.º ESO
           PRIMER PREMIO: Camina junto a mí, de Atenea
                Natalia del Real Leira - 4.º ESO D
CATEGORÍA C - 1.º y 2.º ESO
           PRIMER PREMIO: Cartas de un padre a un hijo, de Pelo Ceniza
                Laura Sánchez Gullón - 1.º ESO C
           SEGUNDO PREMIO: Diario del Niño Jesús, de Osito gominola
                María Molero Marina - 1.º ESO C

POESÍA
CATEGORÍA A : 1.º Y 2.º DE BTO
           PRIMER PREMIO: San José (inspirado en: Soneto a Cristo Crucificado, de autor
           desconocido), de Mascarilla
                Teresa Respaldiza Rubio - 1.º Bto A
           SEGUNDO PREMIO: Romance de san José, de Brown Hare
                Ana M.ª Tenorio López - 2º Bto E
CATEGORÍA B: 3.º y 4.º ESO
           PRIMER PREMIO: El carpintero que supo pulirse para brillar, de Shapira Beor
                M.ª Pilar Pujadas Morales - 3.º ESO D
CATEGORÍA C - 1.º y 2.º ESO
           PRIMER PREMIO: Amor de padre, de Eowyn
                Sabina Villalba Pascual - 2.º ESO D
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DIBUJO
CATEGORÍA A : 1.º Y 2.º DE BTO
           PRIMER PREMIO: Mi padre José, de Aluminio
                Almudena de Gregorio Castellanos - 2.º Bto E
CATEGORÍA B: 3.º y 4.º ESO
           PRIMER PREMIO: Querido papá, de Pop corn
                Berta Shakya Cobo - 4.º ESO A
CATEGORÍA C - 1.º y 2.º ESO
           PRIMER PREMIO: Padre virtuoso, de Mrs. Holmes
                Pilar Martínez del Peral Usón - 2.º ESO E
           CUATRO SEGUNDOS PREMIOS:
           El refugio de un abrazo, de Eowyn
                Sabina Villalba Pascual - 2.º ESO D
           El árbol que da sombra, de Elda Shurtugal Alfa-Kona
                Raquel Ortiz Monserrate - 2.º ESO C
           La puesta de sol, de Nessi
                Inés Peña Garnica - 1.º ESO D
           Mi otro padre, de Almanzar
                Catalina Torroba Cervera - 1.º ESO C

FOTOGRAFÍA Y DIBUJO DIGITAL
CATEGORÍA A : 1.º Y 2.º DE BTO
           PRIMER PREMIO: El amor del Padre
                Mercedes Antoñanzas Fernández-Durán - 1º BTO C
CATEGORÍA A : 1.º Y 2.º DE BTO
           PRIMER PREMIO: Amor en la sombra
                Gabriela Arribas Azagra - 4º ESO A
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GANADORAS
PRIMARIA
DIBUJO
PRIMERO DE PRIMARIA
        1.º A
        PRIMER PREMIO: Blanca Martín Barbeito
        SEGUNDO PREMIO: Sol Blasco
        1.º B
        PRIMER PREMIO: Carla Conejero
        SEGUNDO PREMIO: Patricia Parga Doncel
        1.º C
        PRIMER PREMIO: Cristina Alepuz
        SEGUNDO PREMIO: Martina Moreno
        1.º D
        PRIMER PREMIO: Almudena Asís
        SEGUNDO PREMIO: Martina Cabezuela
SEGUNDO DE PRIMARIA
        2.º A
        PRIMER PREMIO: Paloma Vargas
        SEGUNDO PREMIO: Cayetana Dieguez
        2.º B
        PRIMER PREMIO: Inés Figueiras
        SEGUNDO PREMIO: Lucía García Solans
        2.º C
        PRIMER PREMIO: Águeda Alberti
        SEGUNDO PREMIO: Alejandra Moreno
        2.ºD
        PRIMER PREMIO: Micaela Fraile
        SEGUNDO PREMIO: María Carrera
TERCERO DE PRIMARIA
        3.º A
        PRIMER PREMIO: “Fresita” Piluca Fernández Maldonado
        3.º B
        PRIMER PREMIO: “Merengue Fresa” Matilde Beteta
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         3.º C
         PRIMER PREMIO: “Buganvilla” Jimena Manjón
         3.º D
         PRIMER PREMIO: “Fresa Kiwi” Daniela Beteta
CUARTO DE PRIMARIA
         4.º A
         PRIMER PREMIO: “Avellana” Carlota Arias
         4.º B
         PRIMER PREMIO: “Flor de Campo” Isabel Osborne
         4.º C
         PRIMER PREMIO: “Moñoguita” Catalina Martínez
         4.º D
         PRIMER PREMIO: “Kalalé” Sofía Lamana
         4.º E
         PRIMER PREMIO: “Buena Corazoncita” Teresa Moreno
QUINTO DE PRIMARIA
         PRIMER PREMIO : “Florecita” Jimena Kipp (5ºC)
         SEGUNDO PREMIO : “Pepa Juana Jorjdi” María de Liñán (5ºE)
         TERCER PREMIO : “Capitana kínder bueno” Mencía Fernández Maldonado (5ºD)
         CUARTO PREMIO : “Carolina Méndez” Jimena López (5ºD)
SEXTO DE PRIMARIA
         PRIMER PREMIO : “Pasta de manzana” Victoria Pobes (6ºB)
         SEGUNDO PREMIO : “Gordimari” Ana Piñar (6ºC)
         TERCER PREMIO : “Dora la exploradora” Pía Royo-Villanova (6ºD)
         CUARTO PREMIO : “Tortitas con Sirope” Elena de Urbina (6ºA)

POESÍA
TERCERO DE PRIMARIA
         3.º A
         PRIMER PREMIO: Adriana Conejero
         3.º B
         PRIMER PREMIO: “Jessie” Isabel Roca
         3.º C
         PRIMER PREMIO: “El perrito caliente” Lola Parreño
         3.º D
         PRIMER PREMIO: “Ley llenderman” Piluca Barceló
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CUARTO DE PRIMARIA
         4.º A
         PRIMER PREMIO: “Pompón” Andrea Esteve
         4.º B
         PRIMER PREMIO: “La gran caramela” Carmen Álvarez
         4.º C
         PRIMER PREMIO: “Unicornio feliz” Cristina Klinderberg
         4.º D
         PRIMER PREMIO: “Mater Salvatoris” Gabriela Blanco
         4.º E
         PRIMER PREMIO: “Mozart” Rocío Díez Llovet
QUINTO DE PRIMARIA
         PRIMER PREMIO : “Chupa chups” Carmen Cebrián (5.ºC)
         SEGUNDO PREMIO : “La reina de la poesía” Eva Esteras (5.º A)
         TERCER PREMIO : “Rombo” Mencía Hernández-Lahoz (5.ºC)
SEXTO DE PRIMARIA
         PRIMER PREMIO : “Mafalda” Almudena Roca (6.ºE)
         SEGUNDO PREMIO : “Koinonía” Almudena López de Pablo (6.ºE)
         TERCER PREMIO: Marta Parra (6.ºD)

CARTA
QUINTO DE PRIMARIA
         PRIMER PREMIO : “Tolkien” Berta Valdés (5ºA)
         SEGUNDO PREMIO : “Tortita” Teresa Guzmán (5º B)
SEXTO DE PRIMARIA
         PRIMER PREMIO : “Leche merengada” Lola Hergueta (6ºB)
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    ESO Y BACHILLERATO
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    X EDICIÓN RELATO BREVE
CERTAMEN MATER SALVATORIS - FIESTA MATER SALVATORIS - 25 DE MARZO DE 2021 - Colegios Mater Salvatoris
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                                    RELATO BREVE (CATEGORIA A)
                                    PRIMER PREMIO

                                 UNA LUZ EN EL DESIERTO

La luz era su guía. Los diminutos puntos              el suelo de la tienda. El rostro de María, vuelto
luminosos se extendían sobre un denso fondo           hacia él, era un frágil cristal y los mechones
oscuro, bailando y jugando como luciérnagas.          azabache de su cabello se extendían sobre
La intensidad de su estela iluminaba el grande        la tela raída. María respiraba intensamente,
y vasto desierto. El hombre avanzó rodeado de         con fuerza, tratando de calmar el dolor que la
estrellas, caminando a su ritmo. Alzó la mirada       envolvía. Desde hacía días, su esposa sufría
a sus aliadas y sonrió al distinguir una pequeña      agotamiento por calor y sus fuerzas disminuían
silueta entre ellas. Era una paloma. La esperanza.    a cada segundo, por lo que había interrumpido
Y José amplió su sonrisa.                             el viaje, para que ella descansara. José acarició la
                                                      suave mejilla de María y suspiró intranquilo.
Sonaba un llanto, el suave quejido de un
niño. Las gruesas telarañas del sueño fueron          El sol comenzó a alzarse en el horizonte.
desenredándose poco a poco, y José abrió los          José salió de la tienda y acarició el hocico del
ojos. Un delicado gorjeo llegó a los oídos de         pequeño burro que descansaba sobre la dura
José, y éste, sorprendido, se incorporó para          arena. El burro emitió un tierno roznido al notar
observar el solitario desierto. Una paloma            su presencia y abrió los ojos.
blanquecina, posada con delicadeza sobre el
                                                      —Levanta, chico—le susurró José, mientras
palo que sostenía la tienda, miraba con atención
                                                      comprobaba el estado de las magulladas patas
al humilde carpintero. «¿Qué hará una paloma
                                                      del animal.
en mitad del desierto de Egipto?», pensó
José. Se frotó los ojos para comprobar que no         José volvió a la tienda y cogió el desgastado
continuaba soñando. Y, al hacerlo, la paloma          macuto con la comida que tan cuidadosamente
había desaparecido.                                   había guardado María. Preparó un pequeño
                                                      fuego en el exterior de la tienda y, más tarde,
El delicado llanto continuó, y José se levantó del
                                                      calentó las últimas cucharadas de crema de
suelo. El desierto era interminable, y las dunas
                                                      berenjenas. En el macuto solo quedaban dos
se extendían como grandes gigantes mientras
                                                      mendrugos de pan, y José los guardó con cariño
la tienda en la que dormían se balanceaba al
                                                      para María y el niño, aun cuando sus tripas
son del viento. José caminó hasta donde el niño
                                                      rugían como animales hambrientos.
dormía y se arrodilló frente a la improvisada
cuna. El niño sonreía, no lloraba, reía dulcemente.   —José, deja que te ayude—suspiró una débil
José observó cómo el niño jugueteaba con un           voz a su espalda.
pequeño trozo de trapo y lo miraba como si
fuese un precioso tesoro. Acarició la pequeña         Al girar la cabeza, José se encontró con unos ojos
cabeza de Jesús, y dejó que el niño continuara        oscuros, brillantes y vivos que por un instante
riéndole a la mañana.                                 pensó que le abrazaban. María sostenía una
                                                      vieja y raída manta sobre sus hombros, y, a pesar
Llevaban diez días de camino. Los pies de José        del árido paisaje que envolvía su presencia, su
estaban quemados por el calor intenso de la           belleza seguía impresionando al humilde José.
arena y cada paso provocaba un pinchazo que
le rozaba el corazón. José escuchó una débil          —María, debes descansar. Vuelve a la cama, por
voz a lo lejos y se acercó a observar a su esposa,    favor—suplicó José a su esposa, al tiempo que
que dormía sobre unas mantas acomodadas en            se levantaba para besarla en la frente, y tomarle
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la temperatura con un tierno beso.                   del enredado pelaje. José observó a su hijo con
                                                     orgullo. Él era esperanza, era alegría y era amor.
Los labios de José sintieron el calor abrasador
                                                     Llenaba el desierto con su presencia y, también,
que emitía la frente de su esposa. Durante
                                                     el alma de su padre. Abandonar, aunque fuese
tres días, el sueño había atrapado a María y sus
                                                     por unas horas a Jesús, hacía que José sintiese
fuerzas se habían marchitado ante el poder de
                                                     unos pequeños pellizcos en el pecho, como si
la enfermedad. José sentía la desesperación en
                                                     su cuerpo reaccionara a la distancia anticipada.
su pecho. Su esposa apenas podía mantener
                                                     Pero, a pesar de la pena que el abandono de
los ojos abiertos y la comida se agotaba a cada
                                                     Jesús despertaba en su padre, debía hacerlo.
segundo que pasaba.
                                                     «El amor requiere sacrificios» pensó José. Y aun
María abandonó el contacto de José y anduvo          cuando sus piernas no se sostenían y sus fuerzas
lentamente hasta la pequeña hoguera. Poco            le habían abandonado, debía luchar. Por Jesús.
a poco se fue inclinando hasta que finalmente        Por María.
se sentó frente al pequeño pero fuerte fuego.
                                                     José depositó al niño en los brazos de su madre
José, conociendo a su esposa, no trató de hacer
                                                     y acarició con los labios la frente de este.
que volviese a la tienda, y se sentó junto a ella,
para protegerla del frío matutino de Egipto. El      —José, ten cuidado—susurró María con la voz
silencio se instaló entre ambos, como una suave      rasposa y los ojos húmedos.
caricia de paz. José observó el viejo macuto,
                                                     —Lo tendré, María. Siento dejaros solos, pero
con su cuero desgastado, el asa andrajosa y los
                                                     es la única manera de conseguir alimento—
bolsillos descosidos. Y no pudo evitar pensar
                                                     estableció José, temblando.
en la comida. No quedaba. Nada. Ni una miga.
Tampoco agua. Imágenes terribles cruzaron la         —No te preocupes por nosotros. Estaremos
mente del joven carpintero: el llanto de un niño,    bien. Vuelve sano y a salvo, José—suplicó María,
el quejido de una mujer y gritos. Debía encontrar    alzando la mirada hacia el hombre que amaba.
alimento.
                                                     José abrazó a María y a Jesús durante una
—María—llamó José a su esposa.                       eternidad, acariciándolos entre sus brazos. Y,
                                                     tras un último adiós, abandonó la tienda. Las
—Dime, José—contestó         ella   con   la   voz
                                                     lágrimas continuaban descendiendo por su
resquebrajada.
                                                     mejilla a medida que se alejaba de su familia.
—Debo marcharme.                                     Abandonarlos, aunque fuese durante unas
                                                     horas, provocaba que el corazón del humilde
—¿A dónde, José?
                                                     carpintero se resquebrajara un poquito. Temía
—A buscar alimento y medicinas—José                  por el frío del desierto, por la enfermedad de
suspiró, sintiendo un nudo en la garganta—. Si       María, por la sonrisa de Jesús y por muchas cosas
continuamos así, no aguantaremos mucho.              más, pero no temía por su propia seguridad.

Al no recibir respuesta, José bajó el rostro para    Anduvo durante horas. El desierto era un mar
observar el de María. Ella continuaba observando     en calma, constante y solitario. El calor mareaba
el amanecer, inmersa en una conversación             a José y sentía clavos atravesando la piel de
con el sol. María cerró los ojos unos instantes,     sus pies a medida que el árido paisaje se iba
y al abrirlos José observó la melancolía que los     sucediendo. Cada paso era una agonía. Cada
hundía.                                              segundo era una tortura.

—Ve, José. No necesitas mi permiso, confío en ti.    La imagen de Jesús apareció, de pronto, en
                                                     la mente de José. El dolor disminuyó y unas
La risa de Jesús retumbó en el corazón de            burbujas de esperanza comenzaron a removerse
su padre. El pequeño jugaba con las rudas            en el estómago del carpintero. José alzó el rostro
barbas de José y sonreía al tiempo que tiraba        y contempló el camino con firmeza. Anduvo
12                                                                  CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

más, y más, y más, y más. Hasta que, de pronto,         del desierto. Recogió los dátiles y las medicinas,
vislumbró a lo lejos una mancha oscura y difusa.        e, ignorando el dolor que le envolvía, continuó
A medida que José avanzaba, la mancha se hacía          caminando.
cada vez más grande hasta que, finalmente,
                                                        Caminó sin descanso, durante horas. La imagen
distinguió la silueta de unas diminutas chozas.
                                                        de Jesús llenaba su pensamiento y sabía que
Continuó caminando y divisó la figura de varios
                                                        cada paso que daba le acercaba más al Hijo de
hombres y sus camellos. La emoción creció en
                                                        Dios. Alzó la vista al cielo y observó el suave vuelo
el pecho de José.
                                                        de una paloma lechosa. Su mirada se enredó en
Llegó al pequeño poblado con paso débil,                las tersas alas de la paloma, que amasaban el
pero con el alma fortalecida. José fue dejando          aire con delicadeza, hasta que el ave posó sus
atrás pequeños edificios de piedra y niños              patas sobre la tienda en la que había vivido José
jugando en las calles. Finalmente, llegó a un           durante los últimos tres días. Y bajo la tienda
pequeño mercado en el centro del poblado                estaba María, con su mirada dulce, que sostenía
de piedra y buscó entre los abarrotados                 a su vez a Jesús.
puestos las medicinas de María. Tan solo tenía
                                                        José, al verlos, se llenó de gozo y comenzó
cuatro cuadrantes en sus bolsillos, y con ello
                                                        a sonreír. Contempló a su pequeña familia,
consiguió comprar el antídoto para salvar la
                                                        mientras sus piernas temblaban de cansancio.
vida de su esposa y la comida y el agua que
                                                        Contempló a María, la mujer que amaba, con
necesitaban para sobrevivir. A cambio de la
                                                        amor de esposo. Y contempló a Jesús, el Mesías,
venta de sus sandalias harapientas le compró
                                                        con amor de padre.
a un viejo barbudo y cascarrabias unos dátiles
de almendra y miel, sacrificando sus doloridos
pies por un manjar para Jesús, que ya tenía dos
años. Abandonó el mercado que había salvado
a la pequeña familia, y guardó la comida, las
                                                                         Alejandra Bertrán León, 1.º Bto A
medicinas y el agua en una vieja tela que
convirtió en un improvisado morral.

Continuó caminando, dejando atrás el poblado
de piedra, mientras sus magullados pies sentían
cada piedra en el camino. El calor abrasador
del desierto, junto con el cansancio acumulado,
hacía que los ojos de José no alcanzarán a ver
el camino que tenía por delante. Las fuerzas
comenzaron a fallarle y las piernas a temblarle.
Cayó al suelo y exhaló un último suspiro. Los
dátiles rodaron por el árido suelo y las medicinas
se mancharon con la sucia arena. Lo último que
pensó, antes de caer rendido al cansancio, fue
en la sonrisa de Jesús.

Unas suaves garras acariciaron el áspero brazo
de José. Un delicado arrullo llegó a los oídos del
carpintero. Un tierno picoteo en la mejilla hizo
despertar ligeramente al humilde y cansado
hombre. «Levanta José, Jesús te espera» suspiró
una voz firme. Al oír aquella voz, José sintió que
las fuerzas volvían a él. Abrió los ojos y, emitiendo
un sufrido e intenso grito, se levantó del suelo
13                                                                   CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

                                      RELATO BREVE (CATEGORIA A)
                                      SEGUNDO PREMIO

                                  UNAS HORAS CON JOSÉ

Belén, noche del 25 de diciembre.                        amor de tu madre… La mujer más pura, tierna
                                                         y santa del mundo, llena de virtudes en lo más
En un humilde establo, José arropa a María y             profundo de su ser. Estoy seguro de que será la
contempla la cara de Jesús con mucha ternura.            mejor madre para ti y para todos los hombres,
Hace frío y es tarde; aun así, José no puede             pues la misión que tan obedientemente aceptó
dormir. Mirando al cielo estrellado piensa para          encaja a la perfección con su naturaleza maternal
sí mismo: “Y tú le pondrás por nombre Jesús              y cariñosa. Recuerdo con cuánta dedicación
porque Él salvará a su pueblo de los pecados…            preparó todo antes de tu llegada. También
aunque en un principio no comprendí del todo             vuelve a mí su serenidad cuando recibimos
el Plan de Dios, lo acojo con fe pues confío             el decreto de empadronamiento. Y a pesar de
plenamente en Él. Mirando a este niño, estoy             su estado, nunca perdió su sonrisa y sentido
mirando al Mesías”.                                      del humor durante las adversidades del viaje
                                                         desde Nazaret hasta aquí, ni siquiera cuando no
Ya es noche cerrada, y José entra en el cobertizo al     conseguíamos alojamiento en ninguna posada.
oír a Jesús llorar. En su afán por colaborar y ejercer   ¡Su fortaleza es admirable! Soy el hombre más
como padre para dejar que María descanse, lo             afortunado de la Tierra por poder llamarla mi
coge en sus brazos y lo arrulla. Mirándolo con           esposa. No me extraña que Dios la eligiera a ella
cariño e inmenso afecto le susurra: “Aunque              entre todas las mujeres…”
pareces pequeño y frágil, sé que has venido a
este mundo con una misión tremendamente                  José deja al niño en el pesebre y sigue
importante. Voy a esforzarme por colaborar               observándole maravillado. Se recuesta al lado
con el proyecto de Dios, obedeciendo en todo,            de María e intenta dormirse, sin embargo, la
dejando que Él guíe mis pasos. Le ruego que              responsabilidad que siente como custodio
me dé la fortaleza para ser un buen ejemplo en           del gran regalo de Dios le mantiene en vigilia
tu vida. Tú eres el Hijo de Dios, el Rey de reyes, el    casi una hora más, preguntándose si será un
Mesías, Emmanuel…pero para mí siempre serás              buen padre y repasando las cualidades a las
Jesús. Serán multitudes las que te seguirán, pero        que debe aspirar: “Pero ¿por qué me eligió a
también tendrás enemigos muy poderosos                   mí? ¿Qué tengo yo de especial? Yo solo soy un
que querrán hacerte daño movidos por su sed              simple carpintero; no soy un rey como David,
de poder. Pero no te preocupes, porque yo te             ni un líder como Moisés, ni tan fuerte como
protegeré siempre. Haré lo que esté en mi mano           Abraham; pero te aseguro, Jesús, que, aunque
pues prefiero morir antes de verte sufrir”.              es mi primera experiencia en este oficio que me
                                                         ha encargado el Señor, procuraré ser un buen
Aunque consigue dormir al niño, lo quiere seguir         padre para ti y un buen marido para tu madre;
teniendo cerca de él: “Desprende tanta paz,              te prometo ser un padre modelo y maestro.
es tan bello”. La ilusión de ser padre le llena de       Con mi ejemplo te transmitiré los valores de
inmenso gozo y le impide frenar en su discurso:          la humildad, la fidelidad y la obediencia, de la
“Tu Madre y yo crearemos un hogar en armonía             justicia, también el esfuerzo y la disciplina en el
en el que, pese a ser humilde, no te faltará nunca       trabajo. Te mostraré la belleza que reside en las
el amor…” Al decir esto, mira instintivamente a          labores sencillas; seré tu muleta cuando caigas y
María, que está durmiendo junto al bebé. “El             curaré tus heridas; sabré escuchar tus sueños y
14                                                                  CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

respetaré tus decisiones, aunque no siempre las        las tinieblas.
comprenda. Así te ayudaré a crecer en sabiduría
y gracia ante Dios y ante los hombres; intentaré       Se arrodilla y en silencio empieza a rezar:
cumplir con la ley de los profetas, te presentaré      “Señor, no quiero olvidar tu ejemplo de Padre
en el Templo de Jerusalén; te llevaré a celebrar       misericordioso y bueno, eres el modelo que
la fiesta de la Pascua, acudirás a la sinagoga los     marca las directrices y las cualidades de un
sábados según la costumbre, allí aprenderás a          buen padre. Dame la fuerza y la fe para no
leer la Ley y a recitar los salmos; y haré que tu      olvidarlo nunca. Tu amor es infinito, tu juicio
pueblo se sienta orgulloso de ti”.                     es misericordioso, tu perdón es grande y tu
                                                       generosidad es inmensa pues nos has entregado
Mirando el cielo a través de la ventana, José          a tu único hijo para salvarnos del pecado y poder
alza sus ojos dirigiéndose a Dios: “Prometo            llegar así al gozo de la vida eterna. Gracias por tu
cumplir todo esto, porque soy consciente de            ejemplo y por bendecirnos con la presencia de
mi deber y con serenidad y prudencia asumiré           tu Hijo”.
mi responsabilidad para con Él y la historia de
la salvación, aunque no sea el protagonista de         Al abrir los ojos, se da cuenta de que falta poco
esta historia”.                                        para el amanecer y oye un alboroto que se va
                                                       acercando. Su temor inicial se desvanece al
Recostándose de nuevo junto a María y a punto          comprobar que solo son un grupo de pastores de
de dormirse se sincera con Dios: “Aunque sé            la región que con pequeños regalos preguntan
que es tu Hijo y tiene naturaleza divina, no           si es en aquel lugar donde hay un niño envuelto
quiero olvidarme de su dimensión humana.               en pañales y acostado en un pesebre. Pues tal y
Será un niño, un adolescente y un hombre de            como les anunció el ángel, esa noche en Belén
gran fortaleza; yo, como su padre en la tierra,        de Judá había nacido el Hijo de Dios, el Mesías y
intentaré entenderle y apoyarle en las distintas       quieren adorarle.
etapas de su vida. Seré compasivo y atento
como Tú lo eres con nosotros. Sabrá que puede          José les confirma la Buena Nueva y abriendo
contar conmigo para jugar, reír, llorar, cantar,       la puerta del establo muestra la más bella
leer, pasear, conversar, disfrutar, pescar… ¡lo        estampa que aquellos humildes pastores
pasaremos muy bien juntos! Quiero que sienta           pueden contemplar, la Virgen María sostiene
mi cercanía en todo momento”.                          en brazos a Jesús. La Sagrada Familia se reúne
                                                       frente a los pastores que fascinados se arrodillan
Un ruido en las cuadras le sobresalta. Se acerca       ante el Niño y le ofrecen lo poco que tienen
para atender a la mula y al buey, pues sabe que        adorándole.
los pobres animales llevan sin comer desde
antes de la media noche y ya han pasado más            José y María les muestran su hospitalidad y les
de tres horas. Les acerca un poco de agua, heno        invitan a calentarse junto al fuego. José escucha
y paja. De esta forma, les quiere agradecer el         atentamente y con ganas de aprender los
calor que le han proporcionado al bebé.                consejos de muchos de los pastores que son
                                                       también padres de familia. Ellos le ofrecen una
Apoyándose en su cayado decide salir a tomar           visión realista de la paternidad. Entre anécdotas,
el aire. Nada más salir divisa a lo lejos una          le adelantan que cometerá errores, pero que
estrella que irradia más luz que el resto de sus       la voluntad de procurar la felicidad de su hijo
compañeras celestes. La curiosidad le empuja           compensará cualquier traspié. José no teme
a preguntarse: “¿Por qué brilla más que las            enfrentarse a la tarea que Dios le encomendó,
demás? ¿Qué significará? Seguro que es una             pues sabe que nunca le dejará solo. De los
señal de Dios para los hombres, sin duda quiere        pastores aprende que un buen padre es aquel
demostrarles que esa luz guiará el camino hacia        que independientemente de su personalidad,
el verdadero rey”. José, en silencio y en la quietud   debilidades, costumbres, origen, raza, religión…,
de la noche, comprende que Jesús es la luz que         da lo mejor de sí mismo con el fin de procurar el
ha enviado Dios a la humanidad y la salvará de         bienestar de su hijo.
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Mientras los pastores marchan, los primeros
rayos de luz empiezan a asomarse entre las
rendijas del tejado del establo, iluminando la
cara del bebé. Después de haber pasado la
noche sincerándose con Dios, José está lleno
de energía, pues sabe que cuenta con un gran
aliado que le guiará todo el camino. Su vigilia
ha terminado y su nueva vida como padre de
familia ha comenzado. Toca poner en práctica
todo aquello que ha prometido cumplir esa
noche, obrando siempre con amor de padre.

            Adriana Delgado Romera, 2.º Bto E
16                                                                CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

                                    RELATO BREVE (CATEGORIA A)
                                    SEGUNDO PREMIO

                                 EL PROTAGONISTA MUDO

Página 235, 453, 537 … ¡Y ni una sola cita de         trayectoria de estos pequeños actores estaba
San José! Aparte de la espontánea mención             viendo su final.
en uno o dos versículos de Mateo y Lucas, san
José parece una figura oculta, un personaje           Sin embargo, la carrera del viejo Tom no podía
desterrado de la Biblia.                              llegar a su fin, había consagrado su vida a la
                                                      escritura de películas. Quería ayudar a cambiar
—¿Cómo lo vamos a personificar? —preguntó             la visión del mundo con sus pequeñas historias
Stella, muy agobiada.                                 y esta iba a ser su última colaboración con
                                                      la compañía, el último guion que iba a dejar
—Dándole vida, como llevamos haciendo                 escrito en este mundo. Además, él era el que
más de 50 años, pareces una novata —intentó           había insistido en aceptar este proyecto tan
disimular el director, aún más agobiado que           arriesgado, a pesar de las dudas del resto de
Stella, pues se encontraban a tan solo tres días      trabajadores, y estaba empezando a plantearse
del comienzo de la grabación y de esta última         si era una buena idea.
película pendía el futuro de la compañía a punto
de quebrar.                                           Tom ya había agotado la tinta de donde surgían
                                                      sus palabras; para su última creación tenía que
Ni la maquilladora, ni la estilista, ni siquiera el   reinventarse, las palabras ya estaban vacías de
viejo Tom, que todo lo sabía, parecían tener          contenido. Era consciente de ello, empezó a
memoria de José o de su papel en la historia.         profundizar en esta idea y finalmente dio con la
                                                      clave.
Espuma blanca, un trozo de roble, una vieja tela
marrón y dos chancletas completamente roídas          —Fijaos que yo creo que es precisamente su
era todo el vestuario del que disponían para          silencio y discreción lo que hace a nuestro
el protagonista de la película. Parecía misión        protagonista grande; quizá deberíamos reenfocar
imposible, un empeño destinado al fracaso.            nuestro trabajo y, en vez de empeñarnos en
                                                      escribir folios y folios de líneas para que salgan
—Renuncio a este proyecto, me niego a formar          por su boca, debemos centrarnos en su acción
parte de esta chapuza, donde el protagonista          y cambiar de perspectiva. En mis años aquí,
no tiene más de dos líneas —dijo Harry, que era       he comprobado cómo es la gente sencilla
el actor que iba a darle vida a san José. Harry       la que escribe la historia, no las actrices de
acababa de llegar a la compañía y su única            pasarela que pasan cada día por este estudio.
aspiración era conseguir el éxito en pantalla por     Hagamos de este personaje alguien grande,
lo que cogió sus pertenencias y cerró la puerta       representémoslo como se merece —dijo Tom al
del estudio.                                          resto de sus compañeros, que ya conformaban
                                                      su familia, reunidos en la sala de rodaje con una
El desánimo empezó a calar en cada uno de             desesperanza absoluta.
los integrantes de la compañía, todos habían
perdido la esperanza de sacar la película y su        El discurso del viejo Tom parecía ideal, dejaba
futuro adelante. Esta nunca se estrenaría y la        leer entre líneas su verdadera fe, oculta en lo
17                                                                CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

más hondo de su trabajo como guionista. Los            de José. Ninguno daba la talla, ninguno salvo
trabajadores de la compañía cinematográfica            uno: el viejo Tom. Tom había sido ejemplo de
seguían sin entender cómo iban a presentarle           paternidad para todos los actores, estilistas,
al público una película en la que todos los            productores, cámaras e incluso técnicos, había
personajes tenían un parlamento menos                  construido una verdadera hermandad en cuyo
José, pero siguieron escuchando atónitos las           seno destacaban los valores de la familia. Y era
indicaciones de Tom, como unos niños a su              ese espíritu paternal lo único que necesitaba
maestro.                                               tener el actor disfrazado de José. Tom quedó
                                                       envuelto en la espuma blanca, el trozo de roble,
—El vestuario ya lo tenemos y el guion lo hemos        la tela marrón y las chancletas completamente
hecho añicos. Solo nos queda crear una historia        roídas y en su mirada se percibía a un verdadero
en la que, a través de la consecución de los           PADRE.
sencillos movimientos de nuestro personaje
mudo, se llegue a entender su papel como               La película ya estaba lista para ser rodada y Tom
padre en la vida del personaje bebé.                   no dudaba de que sería un gran éxito, su último
                                                       propósito se había cumplido, ya podría dejar su
Todos los integrantes de la compañía se                pluma de guionista a un joven novato.
dispusieron a crear el espacio en el que se
desarrollaría la película, las cuatro paredes del      El espíritu de sencillez se acabaría impregnando
estudio se convirtieron en un taller de carpintería    en cada uno de los espectadores de la sala
casi prehistórico.                                     y la idea de un protagonista mudo acabaría
                                                       triunfando e inspirando a otros artistas.
La trama la dividieron en cuatro escenas, en las
cuales la figura sin voz no abandonaría el plano              —¡Luces, Cámara y acción!
central en ningún momento.
                                                                      Berta Fernández Ponce, 1.º Bto A
En la primera escena, se vería a un José honrado,
entregado al trabajo, un trabajo duro pero que
le dignificaría y que le convertiría en ejemplo de
perseverancia diaria. Más tarde, las circunstancias
se le vendrían encima, pues acogería a un niño
como hijo suyo poniéndole por nombre “Jesús”
sin haber contribuido él a procrearlo, y tendría
que decir un SÍ en mayúsculas al plan de Dios.
Pero, tras superar una serie de obstáculos,
finalmente se convertiría en un gran padre,
acogería la responsabilidad de guiar en la
experiencia de la vida al Hijo de Dios. Le cuidaría
desde el afecto, la ternura y la fe, y le enseñaría
desde lo mejor que sabía hacer: la carpintería, a
convertirse poco a poco en el Jesús que figura
hoy en día en la Biblia. Su entrega como padre
en la discreción, en el silencio, es lo que acabaría
otorgándole al protagonista tal merecido título.
Y aunque en la cuarta escena ya no apareciera
como tal, su espíritu se podría seguir inhalando,
igual que cuando estaba físicamente presente,
pues en Jesús se apreciaría su figura.

Solo quedaba un último asunto que resolver: no
había actor que pudiera encarnar el personaje
18                                                               CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

                                   RELATO BREVE (CATEGORIA B)
                                   PRIMER PREMIO

                                CAMINA JUNTO A MI

—¡Vamos, María, ¡no queda nada! — tomo su            Son solo segundos, pero son mágicos. La luz de
mano con fuerza, intentando transmitirles            la luna se cuela por las rendijas en las paredes
mis ánimos. Respira agitada, el esfuerzo deja        del humilde establo e ilumina el rostro del bebé.
perlas brillantes sobre su frente y el cabello se    Rompe a llorar, quebrando el silencio, pero es
le adhiere a su cara. Siento cómo desgasta sus       un sonido celestial. Me acerco a él y lo arropo en
últimas energías y su fortaleza se desvanece.        pañales. Por unos segundos, le miro a los ojos
                                                     y el mundo para a mi alrededor. Entiendo en
Todo ha sido tan repentino.                          este momento que este niño es, en verdad, Dios
                                                     mismo, y que los ojos que me miran son los ojos
Hace apenas medio año, éramos unos jóvenes           del Padre.
enamorados, con grandes sueños e ilusiones
para el futuro, con ansias de vivir la vida que      Coloco al Niño en brazos de su madre y
teníamos por delante. Ni mucho menos                 retrocedo unos pasos para observarles. Es una
pensábamos en un hijo. ¡Si nos acabábamos de         estampa preciosa. Ha dejado de llorar y María le
casar! Y, de repente, todo cambió. Creo que para     mece con infinita ternura. Ojalá este momento
ella fue más fácil que para mí, o por lo menos       durara eternamente.
le quedó más claro. Al fin y al cabo, a ella se le
apareció un ángel explicándole todo.                 Han pasado ya varias horas desde que vino
                                                     Jesús al mundo y, sin embargo, han parecido
Yo me sentí desplazado al principio, reacio a        días. Nos visitaron unos pastores que afirmaban
creerme lo que pasaba e incluso dudé de ella.        que les había avisado un ángel, y nos ofrecieron
Pero mis dudas se disiparon la noche que yo          presentes, que agradecimos enormemente.
también recibí un mensaje del cielo.
                                                     Ahora María y el Niño duermen a mi lado,
Me gustaría decir que desde ese momento              recostados entre pajas sucias y arropados por el
todo fue un camino de rosas y fuimos una feliz       calor de los animales. Yo, en cambio, no consigo
pareja expectante; pero no fue así. No teníamos      conciliar el sueño. Mi cabeza da vueltas tratando
muchos recursos, ambos compartimos orígenes          de asimilar las últimas horas de mi vida, que ya
humildes. Depositamos nuestra confianza en           no es mía, sino de ellos. De mi familia.
Dios, y tomé la firme decisión de querer a ese
Niño como si fuese mío y criarlo con el más          ¿Qué he hecho para merecer esto? ¿Qué ha
puro amor y cariño. Concluí que, si María tenía      visto Dios en mí? ¿Seré capaza de criar al Hijo del
su misión, yo debía acompañarla en todo y            Altísimo? Estas dudas asaltan mis pensamientos
apoyarla. Esa era mi misión                          constantemente y me mantienen en vela.

—No puedo más, José—                                 Decido salir a tomar el aire para despejar mi
                                                     mente. Me aproximo lentamente al pesebre
— Sí puedes, confía en Dios—. Estas palabras         donde hemos improvisado una cuna. Con sumo
hacen inmediato efecto en ella. Grita, llora, su     cuidado, tomo a Jesús en mis brazos y le mezo
pecho sube y baja agitado por el esfuerzo. Y, de     suavemente para evitar que despierte. Salgo
repente, silencio.                                   del establo y me adentro en la fría noche de
19                                                               CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

diciembre. Una ligera brisa mece las copas de         capaz de ser el esposo de María y el padre de
los árboles y un leve ulular se escucha a lo lejos.   Jesús. Sé que Dios me ha otorgado su gracia
Bajo la mirada al bebé que descansa sobre mi y        para llevar a cabo esta misión; y que con Él nada
me quedo embelesado. Irradia santidad. Lo sé.         es imposible.
Es extraño, pero es cierto. No sabría explicarlo,
no creo que sea humanamente posible hacerlo.          Sé que Él camina junto a mí.
Cuando las palabras corrientes fallan, hablan las
del corazón, los sentimientos más profundos,
los que no se expresan con sonidos, si no con
miradas, caricias y gestos. Su rostro es puro,                        Natalia del Real Leira, 4.º ESO D
inocente, vulnerable y lleno de paz. Se me
encoge el corazón con solo estar cerca de él.

—Gracias, Jesús— es lo único que se me ocurre
decirle. Doy gracias a que siga dormido, si no, no
sería capaz de hablar.

—Has llegado para iluminar el mundo, para
salvarlo y redimirnos. Aún eres pequeño, y solo
llevas unas horas aquí, pero déjame decirte que
mi mundo ya lo has iluminado. Tu llegada fue
inesperada, una sorpresa; pero como la mayoría
de ellas, has sido un regalo. Nunca llegaré a
comprender qué hice para merecerte, para que
me eligieras como padre; a mí, a un humilde
habitante de Nazaret; pero prometo estar a la
altura, y con mi servicio, entrega y dedicación,
tratar de ser merecedor de ti. Prometo amarte,
cuidarte, educarte y darte todo mi amor.
Acogerte en mis brazos cuando tengas miedo,
sueño o estás cansado. Aconsejarte cuando no
sepas qué hacer. Levantarte cuando te caigas y
darte la mano para que sigas adelante. Prometo
ser tu padre, tu compañero de camino, tu
confidente y tu amigo. Quiero ser merecedor de
Ti. Prometo caminar a tu lado—.

Jesús abre perezosamente los ojitos, gira el
cuello y estira las manitas al aire, intentado
acariciar mi cara. Le acerco un dedo mío y lo
toma entre sus diminutas manos.

No sé si me habrá oído, si lo habrá entendido
o si, por el contrario, le he despertado con mi
palabrería. Pero mi oración ha sido escuchada
en el cielo. Me ha dado confianza en mí mismo,
y en mi interior, se han forjado a fuego todas las
promesas que le he hecho.

Ahora sé que puedo hacerlo, que voy a ser
20                                                                 CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

                                    RELATO BREVE (CATEGORIA C)
                                    PRIMER PREMIO

                                 CARTAS DE UN PADRE A UN HIJO

El cálamo rasgaba el papel en el silencio de la        esas meteduras de pata y todos esos ratitos en
noche. “¿Qué hora debe ser?” se preguntaba             los que se había sentido como si el mundo se
el hombre, ya cansado. Escribió la última              hubiese parado, como si ya no existiese nadie
línea del texto y, junto el papiro con los otros       más que su familia. Su familia, la Sagrada Familia.
once, escondidos en una caja de madera que
                                                       Como cuando Jesús, con siete años, había roto
había tallado hacía ya más de diez años. Cada
                                                       un plato, y María le había encargado recogerlo.
cumpleaños de su hijo le escribía una carta,
                                                       Una semana después, el niño había aparecido
esperando dárselas todas algún día. “Mi hijo”.
                                                       con el plato pegado con alquitrán de corteza
Que bien sonaba eso, se dijo.
                                                       de abedul, el pegamento de aquella época.
Escondió la caja debajo de la cama, donde sabía        José lo había conservado, y de vez en cuando,
que Jesús nunca miraría (desde el momento en           preparaba la comida en él.
que se encontró una araña debajo).
                                                       O cuando María en la cocina había preparado
Doce cartas, por doce años que había estado            un delicioso potaje caliente y Jesús, hambriento,
con el niño, los doce años más felices de su vida.     había metido la mano en él como si fuese una
                                                       cuchara. Se había, claramente, quemado la
“Mi niño está creciendo –pensó– ¿Qué pasará
                                                       mano, y José se encargó de vendarla.
cuando crezca demasiado?”. Se tumbó en la
cama, boca arriba, y los párpados se le cerraron       Había tenido otros incidentes, pero hubo
al instante.                                           algunos en los que José estuvo implicado.

Todas aquellas cartas que había escrito durante        Una vez –pensó– María se había encontrado
esos años contenían las pequeñas cosas que             fatal, y José y Jesús la obligaron a sentarse,
Jesús había dicho –o hecho–, que a José le             estableciendo que prepararían ellos la cena. No
habían tocado el alma de una forma especial. A         sé qué salió peor: si la comida o el procedimiento.
él le encantaba todo lo que Jesús hacía, se dijo,      Al tratar de encender un fuego, lo primero que
escribiendo la primera carta. Pero si escribía         probó a hacer el niño de cinco años fue quemar
todo lo que había pasado en un año, jamás              una margarita. Casi se quemó la mano… Otra
acabaría.                                              vez.

Así que escribió menos cosas de lo que le              Después, decidieron que iban a cocinar. Al
gustaría, pero valió la pena. “Se las daré mañana”,    final, después de mucho esfuerzo, acordaron
había pensado cuando el niño tenía cuatro              que cordero hervido con un poco de pan era
años, y cumpliría cinco el día siguiente. No lo        lo mejor. Así que, para no tener más incidentes
había hecho. Lo mismo a los seis, y también se         con el fuego, se dijo José, él se encargaría del
lo había planteado a los siete. Y a los ocho, nueve    cordero y Jesús del pan.
y diez. Pero José lo tenía claro, mañana era el día.
                                                       Trajo un cordero y puso el recipiente en el fuego.
Mañana Jesús cumpliría doce años, y ya sería lo
                                                       Después puso el agua a hervir, y añadió lo que
suficientemente mayor.
                                                       parecía aceite y romero. En el otro lado de la
 El problema era si sería capaz de deshacerse de       cocina, Jesús echaba en un recipiente harina y
todos los recuerdos, todos los momentos que            huevos a su antojo, midiendo completamente
contenían aquellos trozos de papiro. De todas          a ojo. Un poco de esto, un mucho de lo otro,
21                                                              CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

se decía el niño. José lo miraba escéptico, pero     madera, y el chico le había dicho una respuesta
apartó la vista. “Sabrá lo que hace” –pensó,         muy clara: “Un osito”.
equivocadamente.
                                                     José tenía que admitirlo: no tenía ni idea de
Siguió con lo suyo, su cordero hervido con hierbas   cómo hacer un osito con madera, pero seguro
de jardín. Llegó el momento de echar el animal       que encontraría la forma.
a fuego, y José lo hizo. Se acercó lentamente y
                                                     Tardó semanas, con Jesús mirándole siempre por
echó el cordero al recipiente,
                                                     encima del hombro, solo parando para comer,
salpicando sin querer el aceite al fuego, haciendo   dormir y descansar. Cuando por fin lo terminó,
que la llama creciera durante unos segundos, y       después de mucho trabajo, se lo entregó a
su hijo gritó, asustado.                             Jesús. Le encargó la tarea de volver a hacerlo lo
                                                     mejor que pudiera en arcilla, y después José le
Después se calmó, y ambos hombres se relajaron.
                                                     enseñaría a tallar. Para ser un niño de diez años,
Jesús terminó con su extraña receta, muy             Jesús lo moldeó genial.
diferente a las que solía hacer María, y la metió
                                                     El gran problema llegó en el momento de tallar,
en el horno de ladrillo que ocupaba el mayor
                                                     cuando no se encontraron con un cincel del
espacio en esa cocina.
                                                     tamaño correcto para el niño.
Más decoraciones de ladrillo en la casa eran,
                                                     ¿Su solución? Hacer uno nuevo con hierro.
mismamente, la pared. Cuando Jesús tenía
                                                     Crearon un molde con cemento. No se les ocurrió
cuatro años, se había cansado del soso gris de
                                                     nada mejor para hacer el otro molde que crear
las paredes y había decidido darle un toque
                                                     un molde… Para el segundo molde.
más colorido, pintando media pared de amarillo.
Después, a María le había gustado la idea, y la      Extrañamente, con el cincel salió bastante bien,
cocina entera había quedado así.                     para estar hecho de esa forma.

Cuando el pan terminó de hacerse, José lo sacó       Lo más dificultoso para padre e hijo fue tratar de
del horno, con cuidado de no quemarse, y lo          tallarlo sin cortarse ningún dedo de la mano. Las
puso sobre la mesa. Lo cortó con un cuchillo de      astillas iban por todas partes, y provocaban las
sierra, un regalo de su madre.                       risas de los dos hombres al tratar de esquivarlas.

En el interior, el pan no tenía mala pinta, como     Ninguna les dio, por suerte. Cuando por fin
tampoco lo hacía el cordero. Cuando lo probaron,     terminaron con el osito, Jesús le dio un último
fue un desastre. El pan estaba demasiado             retoque. Por el fondo, con el cincel, escribió
harinoso y no había crecido nada debido a la         cuatro palabras:
falta de levadura que el niño se había olvidado
                                                                                  “JESÚS AMA A JOSÉ”
de poner.
                                                     El padre mantuvo esa estatuilla guardada
En cuanto al cordero, José se había confundido
                                                     durante años y años, y nunca se cansó de mirar la
completamente. En vez de romero, había puesto
                                                     firma que su hijo pequeño había marcado para
salvia, y en vez de aceite, mantequilla fundida.
                                                     siempre en aquella estatua y en el corazón de su
Así que, con todo esto, la cena fue un auténtico     padre.
y completo desastre. La familia pasó a la casa
                                                     Se acordó también de la vez en la cual había
de enfrente, donde vivían los padres de María, y
                                                     enseñado a Jesús a leer.
cenaron allí. Después de haber
                                                     Habían empezado uniendo letras, como “la M
montado tal desastre, María nunca dejó a José ni
                                                     con la A”, o “la B con la E”, o cualquier otro tipo
a Jesús volver a acercarse a la cocina de la casa.
                                                     de letras que se pudieran juntar. Después, tres
O cuando enseñó a Jesús a hacer carpintería, y       letras: B, R e I; o T, R y O. Por último, frases.
casi se cortó un dedo. Recordaba ligeramente
                                                     A mitad de ellas, de repente, a Jesús se le había
haberle preguntado al niño que quería hacer en
22                                                               CERTAMEN FIESTA MATER SALVATORIS 2021

antojado una pregunta: “¿Qué sonido saldría si        Porque José nunca pensaba soltar la mano de
juntabas la M con la T? ¿Y la H con la R?”            Jesús, ni Jesús quería soltar la de José.

José no supo responder a esas preguntas, y se         No, hasta asegurarse de que siempre estaría a
pusieron a crear un montón de sonidos, nuevos         salvo, pasara lo que pasase en Nazaret, o quizá
y diferentes, sonidos solamente inventados por        en el mundo entero.
ellos y para ellos.
                                                      ¿Y por qué? ¿Por qué le quería proteger tanto?
José se pudo acordar de un montón de
                                                      “Porque le quiero –pensó–. Porque quiero a mi
momentos más, con los ojos cerrados, tirado y a
                                                      hijo como a nadie en este mundo.
punto de quedarse dormido.

Como cuando había enseñado a Jesús a pintar
cristales, o cuando habían hecho unas sandalias
caseras juntos. Cuando le regalaron flores a María,
                                                                       Laura Sánchez Gullón, 1.º ESO C
o cuando trataron de encerrarse a sí mismos en
una caja, cuando habían ido a visitar a Isabel y
a Juan por primera vez, o cualquier momento
en la vida del niño, había quedado grabado en
la cabeza de su padre para siempre. Al principio
se había resistido. “No es tu hijo –pensaba–. No
tiene tu sangre”.

Pero, cuando tienes a un niño correteando por
casa doce años, cuando sientes que alguien te
quiere, te ama y te admira incondicionalmente,
¿qué puedes hacer sino quererle? Cuando
has observado a alguien crecer, creer, vivir,
sonreír, llorar, desmayarse, dormir, estar furioso,
enfadarse, pedir perdón, contar chistes,
despertarse, leer, cocinar, comer, andar, correr,
hacer deporte; cuando has visto a alguien vivir su
vida segundo tras segundo, minuto tras minuto,
hora tras hora y año tras año, no puedes hacer
más que encariñarte con él.

Y allí, tumbado, con la mente en blanco y ningún
pensamiento preocupante, o sobre sus nuevas
obras de carpintería, se dio cuenta de cuánto
amaba a su hijo.

De que, si Dios había querido ponerle a él, a
nadie más en todo el planeta, a cargo de su único
hijo sería por alguna razón, no solo porque fuese
el primero al que había encontrado, o por que
fuese el marido de María.

No, por supuesto que no.

Él era alguien. Era alguien importante en la vida
de mucha gente. De su mujer, de su hijo, de su
familia entera.
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                                    RELATO BREVE (CATEGORIA C)
                                    SEGUNDO PREMIO

                                 DIARIO DEL NIÑO JESÚS

                                                      Cogí un par de clavos y papá me dio un
                                                      martillo que pesaba mucho… Los clavé, ¡era
22—03—0008 d.C.
                                                      muy divertido! Al cabo de un rato, a papá le
                                                      empezaron a sonar las tripas y las mías también
                                                      empezaron a rugir muy fuerte. Papá me miró y
Siglo I                                               dijo:

                                                      —¿Tienes hambre? Porque yo, sí...

Hoy va a ser un día maravilloso, papá me ha           Recogimos la comida que nos había preparado
dicho que me iba a enseñar… ¡Carpintería! Estoy       mamá y nos fuimos al monte. Al llegar, papá se
muy contento porque vamos a hacer una mesa            lanzó a comer, igual que yo… A los 20 minutos
para mamá, y lo mejor es que es una sorpresa.         ¡ya no quedaba nada! Nos echamos a reír:
Al levantarme, mamá me ha preparado el                ¿cómo era posible que en solo 20 minutos nos
desayuno con mucho amor, después me                   hubiéramos zampado toda la comida?
ha dado una bolsa que llevaba una comida
exquisita; mamá me dijo que era para almorzar         Papá me empezó a contar historias de cuando
y almorzaría con papá en el monte, yo me puse         él era pequeño (no sabéis qué travieso era…).
a saltar de alegría.                                  Estas travesuras las hacía con sus primos, y se
                                                      me ocurrió: ¿a lo mejor podría yo hacer esas
Fui corriendo a despertar a papá. Mi sorpresa         travesuras con Juan?
fue que, cuando llegué, ya estaba despierto y
preparado para irnos. Espero que esto que voy a       Lo que sucedió después, ya me lo esperaba… ¡Se
decir no le moleste, pero ¿sabéis?, papá es capaz     quedó dormido! Como no sabía qué hacer, decidí
de levantarse tardísimo… Me encanta su cara de        rezar las oraciones que me habían enseñado
recién despertado, ¡es muy graciosa!                  mami y papi. Después, no me acuerdo muy bien
                                                      de lo que pasó, porque creo que yo también me
Papi me miró sonriendo y me dijo:                     quedé dormido.

— ¿Preparado para hacerle a mamá la mayor             Papá me despertó y dijo que ya era hora de que
sorpresa que ha visto en su vida?                     volviéramos a trabajar; me levanté como él me
                                                      había dicho y me puse manos a la obra. Después
— Sí —dije yo con voz bajita, para que mami no
                                                      de un duro día de trabajo, nos fuimos a casa.
se enterara.
                                                      Allí nos esperaba mamá. Yo no podía contener
Cuando llegamos al taller, papi se fue un
                                                      el secreto, estaba ansioso por contárselo… ¡Nos
segundo a coger sus herramientas y yo,
                                                      había quedado tan bien! Al ir a lavarme, noté un
mientras, me quedé mirando todo lo que había
                                                      dolor en el dedo que me molestaba mucho. Fui
allí. Al principio fue papá el que hizo todo: cortó
                                                      a decírselo a mamá, pero me di cuenta de que
las planchas de madera, las lijó… Papá debió de
                                                      me había clavado una astilla y, si se la enseñaba,
verme aburrido, porque me dijo:
                                                      podría sospechar. Se lo dije a papá, que me
— Ahora te toca a ti.                                 gastó una broma un poco sin gracia (“¡Vaya! qué
                                                      faena, vamos a tener que cortarte el dedo…”).
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