AYUDAR A HIJOS E HIJAS FRENTE A LAS DROGAS - GUÍA PARA FAMILIAS
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Coordinación Plan Foral de Drogodependencias de Navarra. Sección de Promoción de Salud Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra Autoría Gorka Moreno Arnedillo (Programa Suspertu. Fundación Proyecto Hombre Navarra), en colaboración con: Jesús Domínguez*, Raquel González*, Mariví Mateo*, Rosa Múgica* y Mª José Pérez*. *Plan Foral de Drogodependencias y Sección de Promoción de Salud. Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra. Departamento de Salud. Edita Gobierno de Navarra Financian Gobierno de Navarra y Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Delegación del Gobierno para el Plan Nacional de Drogas Diseño Exea Comunicación Impresión Gráficas Alzate Depósito Legal NA 1160-2013
índice de contenidos Por qué y para qué esta guía..............................................................................................................................................5 1. Por qué algunos adolescentes consumen drogas..........................................................7 2. Lo que desde la Familia podemos hacer.........................................................................11 A. Dedicarles tiempo..............................................................................................................13 B. Participar en su entorno.....................................................................................................14 C. Darles cariño y apoyo incondicional...................................................................................15 D. Establecer normas y límites...............................................................................................18 E. Comunicarnos de manera eficaz........................................................................................22 F. Hablar sobre Drogas...........................................................................................................25 3. ¿Estará mi hijo o hija consumiendo drogas?.................................................................27 Señales de tranquilidad y de alarma......................................................................................28 4. Afrontando situaciones relacionadas con el consumo. Tres historias.................31 Historia 1. Cuando las cosas parece que van bien.................................................................32 Historia 2. Cuando hay motivos para la preocupación...........................................................34 Historia 3. Cuando la situación es insostenible.....................................................................36 5. Información sobre las drogas.............................................................................................37 Desmitificar falsas creencias.................................................................................................38 Información sobre las diferentes sustancias..........................................................................42 6. Pedir ayuda: dónde acudir..................................................................................................45
POR QUÉ y para qué esta guía E sta guía pretende ayudaros a proteger a vuestros hijos e hijas adolescentes frente a las drogas. Esta guía pretende ayudaros a los padres En ella encontraréis información sobre el fenómeno de y madres a proteger a las drogas, orientaciones para favorecer la prevención vuestros hijos e hijas adolescentes frente desde la familia, herramientas para detectar posibles a las drogas. signos de alarma, y si fuera el caso, estrategias para afrontar sus consumos de drogas. Si exceptuamos el alcohol, la gran mayoría de la juven- tud navarra no es consumidora de drogas. Sin embar- go, a pesar de ser una minoría, el consumo de drogas afecta a un número importante de jóvenes y sus con- secuencias son lo suficientemente importantes como para invertir mucho esfuerzo en su prevención. Es habitual, no obstante, que cuando hablamos de dro- Si exceptuamos gas se nos olvide hablar del alcohol. Y sin embargo, es la el alcohol, la gran droga por la que más personas acuden a tratamiento en mayoría de la Navarra, por encima de la cocaína. Ninguna droga cau- juventud navarra no sa tanto sufrimiento en tantas familias, ni tantas aten- es consumidora de ciones en los servicios de urgencias de los hospitales, drogas. Sin embargo, ni tantos accidentes de tráfico. Así pues, la prevención ninguna droga causa tantos problemas como del abuso de alcohol debería ser uno de los objetivos el alcohol. más importantes, también para la familia. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 5
En la adolescencia se dan una serie de circunstancias Retrasar la edad de que podrían favorecer el inicio del consumo de drogas: se inicio de todas las da una especial tendencia a reafirmar la propia identidad, sustancias tienen menos ganas de estar con los padres y más ganas es importante porque de estar con los amigos (y de mostrarse además “en sin- el cerebro adolescente tonía” con ellos), la capacidad de razonamiento alcanza está creciendo y es más vulnerable su máximo nivel de desarrollo y comienzan a exponerse a a sus efectos. la información favorable y a la oferta de las sustancias. Ya no les valdrán argumentos simples sobre las cosas (tam- poco sobre la bondad o maldad de las drogas), y descu- brirán que existen muchos puntos de vista, y que cada uno de ellos puede tener parte de razón. La prevención del consumo de drogas y retrasar la edad de inicio lo más posible en la adolescencia, es espe- cialmente importante por varias razones: › El cerebro adolescente es más vulnerable que el cerebro adulto a los efectos de las drogas. Las regio- nes cerebrales que más tardan en madurar están en pleno desarrollo, lo que las hace más vulnerables a los efectos de las drogas. › Empezar muy pronto a consumir sustancias como el alcohol, el tabaco o el cannabis favorece la aparición de problemas con éstas u otras sustancias en el futu- ro. Cuanto más pronto se empiece, el riesgo es mayor. Así pues, es muy importante conseguir al menos retra- sar la edad de inicio del consumo de cualquier droga. › Y por último, en la adolescencia el consumo de dro- gas suele ir acompañado en la mayoría de los casos de otros problemas importantes, tales como trastor- nos de conducta, problemas en el instituto, conflictos familiares, conductas sexuales de riesgo, accidentes, etc. Por este motivo, prevenir el consumo de drogas Estas orientaciones puede resultar útil para prevenir también este tipo de son también útiles para comportamientos, y viceversa. mejorar la salud y bienestar de vuestros Muchas de las estrategias contenidas en esta guía han hijos e hijas y prevenir demostrado ser eficaces también para prevenir esos otros problemas otros problemas, así como para ayudar a vuestros hijos como las conductas e hijas a crecer en salud y bienestar. Esperamos que os sexuales de riesgo o los resulte de utilidad. accidentes. 6 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
Muchas cosas pueden influir en que algunos E l hecho de que un/a adolescente consuma drogas depende de muchas cosas: la accesibilidad de las sustancias y la información que obtiene acerca de las adolescentes consuman mismas, el tipo de sociedad en que vivimos y los mode- drogas: la accesibilidad los de conducta que observa a su alrededor, su satisfac- de las sustancias, el ción consigo mismo/a o autoestima, su nivel de satisfac- tipo de sociedad en que vivimos, la escuela, ción con la escuela o con la familia, sus alternativas de amistades, su forma de ocio, etc. Estas y otras muchas cosas les influyen, pero ser, la familia… a la vez ninguna de ellas parece suficiente por sí sola. Y también obtener cosas como superar La familia, por ejemplo, es una influencia muy impor- su timidez, sentirse tante, pero no la única. Por eso, lo realmente impor- mayores o parte del tante es saber qué podemos hacer para favorecer la grupo… prevención desde casa y neutralizar en la medida de lo posible otras influencias de su entorno que a veces van en contra de nuestros intereses. Además, cuando consumen drogas, algunos adolescentes consiguen cosas que valoran. Consumir puede servirles para superar su timidez, sentirse mayores, reafirmar su autonomía, aguantar bailando toda la noche, tratar de dar una determinada imagen ante sus compañeros, olvidarse Los factores de de los problemas que tienen en casa o en el instituto, o protección protegen atreverse a hacer determinadas cosas; y todos estos son a nuestros hijos e hijas frente a los riesgos. resultados que en ocasiones algunos/as adolescentes va- loran especialmente y no saben obtener de otra manera. ¿Qué son los factores de protección? E n su desarrollo, los niños y adolescentes transitan por un camino lleno de oportunida- des y de experiencias que son fuente de salud y de bienestar, pero también de algunas curvas y zonas empedradas (como las drogas) que pueden poner en riesgo su desarrollo. En este viaje, algunos niños conducen coches todo-terreno, con frenadas de emergencia, buenos neumáticos y airbags, mientras que otros conducen coches destartalados. Los factores de protección son como los elementos de seguridad de un coche. Alimen- tan la probabilidad de que nuestros hijos gestionen adecuadamente los riesgos que habrán de afrontar y salgan “sanos y salvos”. Se ha demostrado que los adolescentes con muchos factores de protección suelen sentirse menos atraídos por las drogas, y en caso de probarlas, tienen menos proba- bilidades de tener problemas con ellas. 8 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
1. Por qué algunos adolescentes consumen drogas ¿Cuáles son los principales factores de protección? Imaginemos una situación como la del siguiente ejemplo: el caso de luis Luis (17 años) se encuentra una noche en el parque con sus amigos en las fiestas de su pueblo. Desde hace un tiempo, se ha juntado con su grupo un chico de 19 años que tiene un coche “tuneado”. Esta noche, este chico les ha propuesto llevarles a dar una vuelta. A Luis no le gusta la idea, sabe además que ese chico conduce como un loco y le ha visto bebiendo y fumando porros durante la noche. No desea jugarse el tipo. Sin embargo, los amigos le insisten para que no sea un “aguafiestas”, y entre ellos se encuentra además la chica que le gusta… Luis, el protagonista de nuestra historia, se enfrenta a una curva realmente peligrosa. Sin embargo, la probabilidad de sortearla sin tener un accidente será mayor si se dan determinadas condiciones (factores de protección): ~ Tener información adecuada sobre los efectos ~ Tener otras alternativas de ocio: si tiene alter- de las drogas: en este caso, Luis necesitaría sa- nativas saludables de ocio estará expuesto en ber que beber alcohol y conducir multiplica las menos ocasiones a riesgos de este tipo. probabilidades de sufrir un accidente. ~ Vivir en un barrio o pueblo en el que existen ~ Tener una buena autoestima y confianza en recursos y oportunidades para realizar activi- sí mismo: hace falta tener mucha seguridad en dades alternativas y saludables: polideportivos, uno mismo para tomar una decisión tan impopu- locales, oferta de actividades, etc. lar en una situación así. ~ Tener un buen clima familiar: si la relación en ~ Tener la capacidad de tomar decisiones sin casa es buena: dejarse llevar por la impulsividad: implica saber ~ Seguro que tendrá más confianza en sí mis- anticipar riesgos, pararse a pensar, buscar al- mo, y mejor autoestima. ternativas, y mantener la propia decisión. ~ Estará más dispuesto a hacer caso a sus ~ Tener habilidades sociales que le ayuden a re- padres cuando le advierten de que no se sistir la presión de sus amigos, a comunicarles monte con alguien que ha bebido o que ha de forma adecuada su decisión y a no parecer un consumido drogas. “pringado”. ~ No necesitará “válvulas de escape” para ~ Sentirse a gusto en la escuela o en el instituto: de olvidar los problemas de casa. esta manera, no necesitará construir su identidad y encontrar el reconocimiento de sus amigos median- ~ Etc. te la implicación en comportamientos de riesgo. Así pues, hacer prevención no es sólo advertir a los chavales de que consumir drogas tiene riesgos. Además de eso, necesitaremos desarrollar estos “airbags” o factores de protección. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 9
1. Por qué algunos adolescentes consumen drogas ¿Cuáles son los principales factores de protección relacionados con la familia? Algunos factores de protección familiares S e ha demostrado que es más probable que un/a adolescente no tenga problemas con las drogas si en su familia se dan estas características: son: un buen clima de relación, ser modelos › Existe un buen clima familiar, con cariño y afecto en- de salud para los hijos tre todos los miembros de la familia. e hijas, manejar bien el › Los padres son modelos de salud, y tienen hábitos cariño y las normas, y saludables que inculcan a sus hijos e hijas desde que mantener un estilo de son pequeños. educar “fortalecedor”. › En la familia existen normas y límites claros, también en relación con las drogas. Una actitud firme de los padres, contraria a las drogas, previene el consumo. › Los padres tienen un estilo de educar fortalecedor o positivo, dando siempre muestras de cariño y de reco- nocimiento a sus hijos, pero también manteniéndose firmes en las normas más elementales. De todo ello hablaremos en el siguiente capítulo. 10 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
-2- LO QUE DESDE LA FAMILIA PODEMOS HACER...
Desarrollar un estilo de educar fortalecedor o positivo C omo hemos visto hasta ahora, el consumo de dro- gas también depende en gran medida de cosas que no tienen que ver con la familia. Sin embargo, des- de la familia se pueden desarrollar importantes fac- tores de protección que fortalecerán a nuestros hijos frente a las drogas. En este apartado de la guía vamos a profundizar en el llamado estilo de educar fortalecedor o positivo por parte de la familia, que ha demostrado ser un impor- tante elemento protector frente a las drogas. Este estilo se basa, entre otros, en tres aspectos fundamentales que desarrollaremos a lo largo del capítulo: › Mantener una adecuada comunicación con los hijos Un estilo de educar › Establecer normas y límites razonables a su compor- fortalecedor incluye: tamiento. dedicarles tiempo, › Considerar al menor como sujeto de protección frente participar en su a los riesgos, y a los padres como responsables prin- entorno, darles cariño cipales de procurar dicha protección. y apoyo, poner normas y límites, escucharles y comunicarnos con A continuación os ofrecemos algunas orientaciones para ellos, hablar sobre ayudaros a padres y madres a desarrollar este estilo for- drogas y protegerles talecedor: frente a ellas. A. Dedicarles tiempo B. Interesarse por lo que hacen y participar en su entorno C. Darles cariño y apoyo incondicional... pero enseñándo- les que no todo vale D. Establecer normas y límites de forma adecuada E. Comunicarnos de manera eficaz con nuestros hijos F. Hablar sobre Drogas con los hijos/as 12 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... A. Dedicarles tiempo S abemos que no siempre es posible dedicarles todo el tiempo que quisiéramos, pero educar implica estar con los hijos, dedicarles tiempo desde que son pequeños, “perder el tiempo” con ellos. Es verdad que la calidad es más importante que la cantidad del tiempo que les dedicamos, pero la educa- ción (y también la prevención) requiere un mínimo de disponibilidad. Disfruta con tu hijo/a hasta donde te deje, comparte con él cuantas situaciones y momentos te sean posi- Aunque la calidad bles. Aunque ahora quiera estar menos contigo, valorará del tiempo que les muchísimo tu disponibilidad. Si te es posible, comparte dedicamos es más con él las comidas, pierde el tiempo charlando con él de importante que la cualquier cosa, o viendo la televisión. Si se mantienen cantidad, educar abiertos estos canales de comunicación, obtendrás mu- requiere un mínimo de disponibilidad. chísima información relevante, de una forma natural. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 13
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... B. Interesarse por lo que hacen y participar en su entorno L a familia es posiblemente la influencia más impor- tante en el desarrollo de los niños y adolescentes, pero no la única. Hay muchas otras, como los amigos, la escuela, los medios de comunicación, internet, o las características del barrio o entorno en el que viven. En ocasiones, la influencia que ejercen es muy positiva, y constituyen un gran apoyo para los padres. Sin em- bargo, otras veces su influencia va en contra de aquello que deseáis para vuestros hijos. Por eso, es importante que los padres y madres conozcáis el entorno en el que se mueven vuestros hijos, tratando de influir en él positivamente, por ejemplo: › Participando en la escuela: acudiendo a las reuniones de inicio de curso, asistiendo a las tutorías, partici- pando en las actividades del centro, teniendo con- tacto con otros padres y madres, participando en las Apymas, etc. A veces, esto supone participar en deci- siones tan importantes como las normas del centro, la organización, o las actividades que se realizan. Ade- más, si en algún momento hubiera problemas, esto permite conocerlos y abordarlos a tiempo. Es útil conocer y › Manteniendo un contacto natural con sus amigos/as: relacionarse con su entorno: escuela, conocerlos, invitarles a casa, conocer a sus padres y amistades y sus tener cierta relación con ellos…, os facilitará conocer familias, barrio o mejor cómo son los entornos en los que se mueven, pueblo, tele e Internet… qué hacen, etc. › Conociendo y utilizando los recursos comunitarios de vuestro barrio o pueblo, participando en sus asocia- ciones, utilizando sus equipamientos, contactando con otras personas, y contribuyendo así al desarrollo comunitario. › Ayudándoles a analizar los mensajes que aparecen en los medios de comunicación e internet, estando tiem- po con ellos, supervisando y compartiendo lo que ven, ayudándoles a desarrollar un pensamiento crítico, etc. 14 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... C. Darles cariño y apoyo incondicional… pero enseñándoles que no todo vale L a familia cubre las necesidades más importantes de los hijos para completar su desarrollo como personas. Los padres aportan a sus hijos los cuidados La familia cubre dos necesidades muy básicos que necesitan para vivir (protección, abrigo, importantes de los y las adolescentes: la de alimentación, etc.), pero además deben satisfacer otras sentirse queridos, y necesidades, de carácter psicológico, que también son la de tener límites a clave para completar su adecuado desarrollo y su bien- su comportamiento. estar. Entre estas necesidades destacan dos: Ambas son necesarias para su bienestar y para › La necesidad de sentirse queridos/as incondicional- prevenir problemas de mente, de recibir cariño y apoyo emocional, de sentir- conducta. El estilo de se seguros de poder contar siempre con sus padres. educar fortalecedor › La necesidad de límites, de control, de aprender a incluye las dos. regular su propio comportamiento, de tener en cuenta también los intereses y las necesidades de los demás, de aprender a tomar decisiones pensando en sus con- secuencias a corto y largo plazo. El estilo fortalecedor o positivo es aquél que facilita el afecto y el buen clima en la familia sin por ello renun- ciar a educar a nuestros hijos en el autocontrol y en la asunción de límites en su comportamiento. En este estilo hay normas, pero no son excesivas, los límites están claros y se promueve la responsabilidad, pero se fomenta la comunicación y el afecto. Los con- flictos se resuelven entre todos, se escuchan, se expre- san opiniones y sentimientos y se negocian posibles soluciones con los hijos en función de su edad. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 15
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... Cuando hay mucho apoyo, pero no hay límites Es un estilo que trata ante todo de preservar el buen cli- ma en casa, de evitar conflictos, de mantener una buena relación con los hijos, o al menos de no deteriorarla. Los padres no ponen límites a la conducta de sus hijos, fa- voreciendo así la aparición de actitudes de tiranía y una escasa capacidad para tolerar las frustraciones. Los niños aprenden que tienen derecho a todo y que Los límites son no tienen ninguna obligación, y no aprenden a poner necesarios. Decir límites a su comportamiento. “no” a un hijo puede En ocasiones, los padres pretenden así convertirse en ser costoso, pero a determinadas edades amigos de sus hijos, desatendiendo su responsabilidad de no son capaces de educar. En otros casos, es un estilo motivado por el miedo tomar determinadas a las reacciones de los hijos, que trata ante todo de evitar decisiones por sí conflictos (“no le voy a decir nada porque se pone…”). mismos. Decir “no” a un hijo suele ser costoso para muchos pa- dres y madres, y esto es algo muy natural. A nadie nos gusta entrar en conflicto con nuestros hijos y deseamos mantener una buena relación con ellos. Sin embargo, educar implica que a determinadas edades los niños y adolescentes no son capaces de tomar determinadas de- cisiones por sí mismos, sin la supervisión de un adulto. 16 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... Cuando sólo hay límites y normas, pero falta el cariño Si la relación de los padres con sus hijos es solamente para poner límites, decir “no”, contarle “lo que debe hacer” o aplicar castigos, y no existen expresiones de reconocimiento de su valía, ni manifestaciones de ca- riño y apoyo emocional, la probabilidad de que se im- plique en comportamientos de riesgo como el consumo de drogas, los robos, las agresiones o los problemas en el colegio también se multiplica. Con este estilo, al niño sólo se le tiene en cuenta para corregir su comportamiento, favoreciendo un gran dis- El autoritarismo puede tanciamiento entre padres e hijo y desarrollándose en conseguir que los hijos éste una baja autoestima, sobre todo si los límites se modifiquen en parte ponen con agresividad y con mucho autoritarismo. o por un tiempo su comportamiento, pero a costa de deteriorar A diferencia del anterior, este estilo puede conseguir en enormemente la algunos casos que el hijo modifique al menos en parte relación y la capacidad o por un tiempo su comportamiento. Sin embargo, lo de influencia positiva hace a costa de deteriorar enormemente la relación, de de los padres. Quererles favorecer su distanciamiento y de limitar así la capaci- y demostrárselo es dad de influencia de los padres. fundamental. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 17
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... D. Establecer normas y límites de forma adecuada L os límites y las normas actúan a modo de señales de tráfico o de barandillas de un puente para la conducta de los hijos, proporcionándoles un sentimien- to de seguridad y de control, ayudándoles a regular su comportamiento, a tolerar la frustración, y a tener en cuenta las consecuencias de su conducta para sí mis- mos y para los demás. A continuación os ofrecemos algunas orientaciones para manejar las normas y los límites con vuestros hi- jos e hijas: › Lo importante no es que existan muchas normas; lo más importante es que éstas se refieran a las cosas Es importante que las más importantes y que estén claras. normas sean pocas, claras, positivas, › Las normas deben ser ajustadas y coherentes, adecua- adecuadas a su edad y das a su edad. No conviene correr demasiado. Exponer- razonadas . También les demasiado pronto a los riesgos de consumir drogas pedir su cumplimiento (horarios, salidas, dinero…) aumentará los riesgos. con firmeza pero sin › Las normas tienen que ser claras, concretas y senci- agresividad y que llas de entender para los hijos. Son mejores cuantas tengan consecuencias menos dudas permitan respecto de lo que se desea razonables que se que suceda. Debería quedar claro qué se tiene que conozcan y se cumplan. hacer, cuándo y cómo. 18 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... En lugar de… …es mejor… “Me gustaría que hicieras la cama “Tienes que ser más ordenado” y recogieras la mesa de tu cuarto todos los días antes de desayunar” › Es más probable que las normas se cumplan si son razonadas, algo tanto más importante cuanto mayor En el caso de las sea la edad de los hijos. Una vez que la norma ha sido parejas, es fundamental suficientemente argumentada y discutida (si fuera el que ambos padres caso), basta con recordarla sin necesidad de repetir muestren ante los hijos una y otra vez estos argumentos. el mismo criterio, y que › Las normas tienen que ser consistentes, aplicándose se apoyen mutuamente las consecuencias de cumplirlas o de incumplirlas, tal frente a ellos. cual se haya acordado o anunciado. Si las circunstan- cias cambian, las normas habrán de ser revisadas. › Siempre que sea posible, es mejor que las actividades más placenteras para tu hijo/a se ofrezcan después de las que les resultan menos placenteras, y/o las que tienen que ver con sus obligaciones. En lugar de… …es mejor… “Bueno ¡venga!, te dejo ir. Pero la próxima vez me tienes que prometer “Cuando tengas el cuarto recogido que recogerás tu cuarto. ¡Siempre claro que podrás ir, ¡por supuesto!” te sales con la tuya!” › Es mejor definir las normas de forma positiva, infor- mando de lo que “se debe hacer”, más que de lo que “no se debe hacer”. En lugar de… …es mejor… “Te agradecería que saludaras al “¡Nunca saludas al llegar a casa!” entrar en casa” › De nada sirve poner normas si después no vamos a ser capaces de controlarlas. Por eso, debemos poner normas que nos permitan establecer cierto control respecto de su cumplimiento. › Una vez establecida la norma, habrá de establecerse cuáles serán las consecuencias de su cumplimiento, o de su incumplimiento, y actuar en coherencia con lo pacta- do o anunciado. Por eso, es mejor no anunciar sanciones o premios que no vamos a ser capaces de cumplir. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 19
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... En lugar de… …es mejor… “Te acuerdas de que hablamos “¡Te he dicho mil veces que como de que no se podía encender la no hagas las tareas voy a acabar consola hasta haber terminado las tirando la consola por la ventana!” tareas; lo siento, pero solo cuando las acabes podrás encenderla” › A medida que los hijos crecen, es mejor incorporarlos en el establecimiento de los límites, en la medida de lo posible. De esta manera, es más probable ganar su cooperación en el seguimiento de las normas (“me A medida que van gustaría que quedásemos de acuerdo en alguna hora creciendo, es bueno de llegada a casa los fines de semana”). negociar con ellos › Tan importante como corregir su comportamiento es algunas normas, aunque las normas reforzar todo aquello que hacen bien. Por eso, es im- fundamentales no son portante limpiarse las gafas, rastrear y reconocer abier- negociables. tamente sus aciertos y el cumplimiento de sus compro- misos, y por qué no, premiarles por su esfuerzo. En lugar de… …es mejor… “Ayer vi que llegaste a la hora que “Bueno, por una vez viniste a la hora, pactamos. Te agradezco de verdad ¡a ver si el señorito va entrando en que nos tengas en cuenta. Si cumples razón!” así claro que podrás quedarte hasta Tan importante como más tarde en fiestas del pueblo” poner normas es Ignorar que el hijo ha recogido su “Oye, gracias de verdad por hacerme cumplirlas también cuarto porque no hace sino “lo que caso y recoger el cuarto, esta mañana nosotros y reconocerles es su obligación” he estado menos estresado” abiertamente y con › Y sobre todo, no hay nada como predicar con el ejem- sinceridad lo que hacen plo: “te pido que no me chilles, y yo nunca te chillo; bien, y sus esfuerzos te pido que te disculpes, y yo me disculpo cuando por tenernos en cuenta. hace falta; te pido que recojas, y yo recojo”;… 20 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... No todo es negociable Evidentemente, hay normas que son más importantes que otras, porque hacen referencia a valores fundamentales como el respeto, la convivencia o la salud. Otras, sin embargo, hacen referencia a cuestiones de menos importancia, y pueden establecerse de común acuerdo con los hijos, a medida que se van haciendo mayores. En general, atendiendo a su importancia podemos clasificar las normas en tres grandes grupos: 1. Hacen referencia a cuestiones básicas Entre estas normas podrían estar: de la convivencia, al respeto a uno mis- ~ Tratarse con respeto, no permitiéndose 1 mo y a los demás, a las obligaciones o agresiones, insultos, robos… deberes inexcusables, y a la salud. ~ Acudir al colegio o instituto. 2. Tienen que ser pocas, y estar muy claras. ~ No consumir drogas. 3. NO son negociables en ningún caso. ~ Comer sano y dormir lo suficiente. Normas ~ Otras que la familia considere funda- mentales, de acuerdo con su criterio. fundamentales 1. Afectan a la convivencia familiar, pero Entre estas normas podrían estar: no de una manera tan decisiva como las ~ Horarios de llegada a casa. anteriores. ~ Tiempo y forma de realizar las tareas 2. Pueden negociarse con los hijos, y va- del colegio o instituto. lorarse en función de las circunstan- cias, pero deben cumplirse en cual- ~ Cuidado de materiales comunes de la quier caso. casa. 2 ~ Participación en determinadas tareas domésticas. ~ Uso de las pantallas: ordenador, televi- sión, móvil, etc. ~ Otras que la familia considere impor- Normas tantes, de acuerdo con su criterio. importantes Normas 3 1. Hacen referencia a cuestiones domésti- Entre estas normas podrían estar: cas que nos son básicas, pero que me- ~ Arreglo de la habitación. joran la convivencia si se cumplen. 2. Pueden ser aplicadas con mayor flexibi- lidad que las anteriores. ~ Otras que la familia considere acceso- rias, de acuerdo con su criterio. accesorias En cualquier caso, es importante que cada familia determine cuáles son sus normas fundamen- tales, importantes o accesorias, de acuerdo con sus valores, y que mantengan un criterio claro y coherente frente a los hijos (los dos miembros de la pareja, si existe, deben estar de acuerdo y apoyarse mutuamente frente a los hijos). Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 21
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... E. Comunicarnos de manera eficaz con nuestros hijos O s proponemos aquí un estilo de comunicaros con vuestros hijos e hijas que os ayudará a expresarles vuestro cariño y apoyo, a mejorar su autoestima, y al mismo tiempo, a manteneros firmes frente a las nor- mas y los límites que consideréis más importantes. Ahí van algunas recomendaciones: › Trata de ofrecer siempre un modelo de Escucha: pre- gúntale antes de actuar y escucha atentamente y sin interrupciones sus opiniones y sus explicaciones. En primer lugar es › Cuando desees hablar con tu hijo/a de algo importante, fundamental escuchar, elige el momento y el lugar más oportunos. Cuando hay intentar ponernos en tormenta y las emociones están “a flor de piel”, suele su lugar y aceptar sus ser mejor esperar. sentimientos, opiniones, explicaciones… (que no quiere decir estar de En lugar de… …es mejor… acuerdo con todo). ...tratar de resolver los conflictos ...esperar a que las cosas estén más cuando “estallan” y estamos todos calmadas y retomar lo sucedido en muy nerviosos... (por ejemplo, otro momento (por ejemplo, dejar que abordar al hijo a las tres de la se meta en la cama y abordarle a la madrugada, cuando llega con mañana siguiente). síntomas de haber bebido). Elige el momento adecuado para hablar, › Cuando estés en desacuerdo con su comportamiento y explícale con claridad desees hacerle una crítica o solicitarle algún cambio, y sin rodeos a tu hijo/a ten en cuenta que será más fácil que la tenga en cuenta lo que te preocupa. si se dan estas condiciones: Cuando estás en ~ Trata de centrarte en su comportamiento, y no en desacuerdo con su su persona. Describe aquello que no te gusta, y no forma de comportarse, utilices generalizaciones ni etiquetas. dile qué es lo que te molesta o preocupa, cuéntale cómo te En lugar de… …es mejor… sientes por ello, y mantente firme en la “Siempre estás igual... Pero tú qué te “Cuando veíamos la hora y todavía exigencia de cumplir has creído, qué horas de llegar son no habías llegado, nos pusimos muy las normas acordadas. éstas!...” nerviosos, nos sentimos fatal...” 22 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... ~ Exprésale con claridad y sin rodeos cuáles son tus opiniones, tus necesidades, tus sentimientos y tus de- El reconocimiento, la cisiones en relación con su comportamiento. Utiliza valoración positiva, para ello los llamados “mensajes en primera persona”. el agradecimiento... Son más eficaces que los reproches o las amenazas. son muy importantes en el estilo de educar En lugar de… …es mejor… fortalecedor. (Con firmeza) “Me sienta muy mal “¡Tú a mí no me vuelves a levantar la que me llames de esa manera; voz, ¿te enteraaaas?..¡Como vuelvas sinceramente, me duele un montón, a llamarme así no sales en un mes!” me parece injusto, y no lo voy a permitir” ~ Si acordasteis unos límites, mantente firme en su cumplimiento, y comunícale con serenidad, pero con firmeza tus decisiones al respecto. Recuerda las reco- mendaciones sobre las normas del apartado anterior. - Padre: lo siento, pero ya habíamos hablado de esto. La próxima semana no podrás salir. - Hijo: sois unos exagerados, si os sentís mal es vuestro problema. - Padre: (con serenidad, pero con firmeza) siento que digas eso, de verdad, pero en estas condiciones no te podemos dejar salir la próxima semana. ~ Gritar o ponerte agresivo no mejorará el problema. Quizá logres algún cambio, pero te distanciará de tu hijo. Trata de utilizar siempre un tono de voz firme, pero sereno, de mostrarte relajado, y de tratar de reforzar con tu postura y con tu tono de voz lo que estás tratando de comunicar. › A veces los chavales tienen dificultades para cambiar. Demostrarle a tu hijo/a que las tienes en cuenta y que te esfuerzas por ponerte en su lugar favorecerá una mejor aceptación del mensaje. - Hijo: no entiendo por qué no me dejáis ir al concierto. - Madre: ya lo hemos hablado. Es demasiado tarde, y sabes que no podemos ir a buscarte. No nos atrevemos a que te traiga a casa alguien que no conocemos. - Hijo: ¡sabes que es mi grupo favorito! - Madre: lo sé, y lo entiendo. Me imagino cómo te sientes, y lo siento de verdad, pero no podemos dejarte ir, puede ser peligroso. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 23
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... › Y sobre todo, ten en cuenta que los esfuerzos de tu hijo/a por hacer las cosas bien merecen tu aprobación y tu reconocimiento. Agradécele abiertamente y con sinceridad cualquier signo de tener en cuenta tus opi- niones y tus necesidades, y su esfuerzo por hacer las cosas bien. errar es humano Recuerda que lo que aquí te presentamos es un estilo, una forma más o menos estable de relacionarse con los hijos y de hacer frente a los problemas. A veces, sin embargo, puede ser difícil mantener el autocontrol: a veces no nos lo ponen fácil, o nos traemos a casa otros problemas y “no está el horno para bollos”. Reaccio- nar de una forma algo agresiva (no violenta) o perder el control en algún momento concreto no te hará peor padre o madre, siempre que ése no sea tu estilo. Será además una oportunidad de oro para pedir perdón, acercarte a tu hijo, e incluso ganar autoridad. - Padre: hijo, quería hablar un momento contigo de lo de ayer. Después de la bronca me quedé fatal. - Hijo: ya. - Padre: me puse muy nervioso y me puse a gritar como un loco. - Hijo: bueno. - Padre: eran las cuatro de la mañana y tu madre y yo estábamos muy preocupados. Perdí el control, pero es que llevaba toda la noche dando vueltas. Perdóname por haberte tratado así. - Hijo: Vale, no pasa nada. ¿Eso quiere decir que podré salir el sábado otra vez? - Padre: eso quiere decir que me equivoqué al gritarte y al llamarte tonto. De lo del sábado ya hemos hablado, y sabes que no podrá ser… No hay padres perfectos. Errar es humano. 24 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... F. Hablar sobre Drogas con los hijos/as C omo hemos visto, hacer prevención no es solamente informar o hablar sobre drogas con los hijos. No por darles más y más información vamos a prevenir mejor Tan importante o más que hablar de el consumo. Lo importante es que esa información sea drogas con tus hijos es predicar con el ejemplo de calidad, adecuada a su edad, y a sus conocimientos, y mantener unas opiniones y experiencias concretas con las sustancias. normas claras en casa frente a las drogas. Os presentaremos a continuación algunas ideas, pero antes hay que recordar dos cosas muy importantes: › Es más fácil hablar con ellos/as sobre drogas y ad- vertirles de sus riesgos si predicamos con el ejemplo: está demostrado, por ejemplo, que los hijos e hijas de personas fumadoras tienen más probabilidades de acabar siendo fumadores. Tampoco debería sorpren- dernos ver a nuestros hijos bebiendo grandes cantida- des de alcohol en una fiesta si nos han visto hacer lo mismo en nuestras reuniones y celebraciones. Y sobre todo es › Tan importante como la información que les podamos importante que adaptéis dar es que en casa existan unas normas claras en rela- la forma de afrontar las ción con las drogas (legales o ilegales): las familias en conversaciones sobre las que existen normas claras contrarias al consumo tie- drogas a la situación nen menos probabilidades de tener hijos consumidores. concreta de vuestro hijo. ~ La mejor prevención es la del ejemplo. ~ Los niños y niñas no suelen mostrar interés por el tema, y como mucho podrán hacer alguna pregunta o mostrar su sorpresa por ver a personas fumando en determinados lugares. Hasta ~ Basta responder a sus preguntas con naturalidad y sencillez, sin alarmismos, señalando los 7 años que también a nosotros nos molesta el humo del tabaco, y que fumar puede hacer mucho (aproxima- daño a nuestro cuerpo. damente) ~ A esta edad ya suelen ser conscientes de que las drogas existen, pero lo más habitual es que muestren rechazo hacia ellas. Pueden conocer que existen personas que defienden su consumo, pero por lo general aceptan lo que sus padres les dicen como verdadero. ~ A esta edad es importante que los padres muestren una actitud claramente contraria frente al consumo (“yo no fumo porque es muy malo para la salud”), sin alarmismos ni Entre mensajes exagerados o basados en el miedo. Evidentemente, nos resultará más fácil 7 y 12 años hacerlo si además no fumamos. (aproxima- damente) Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 25
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... ~ Si alguno de los padres fuma, es mejor no esconderlo frente a los hijos y reconocerlo abiertamente, señalando las dificultades para dejar de fumar (si fuera el caso), o la conveniencia de hacerlo de forma muy puntual o esporádi- ca, por sus riesgos para la salud. Entre ~ Si alguno de los padres bebe alcohol de forma moderada, es mejor recono- 7 y 12 años cer también este consumo de forma natural, señalando igualmente que en (aproximadamente) todo caso debe hacerse con moderación, para no perjudicar nuestra salud. Además, es importante enseñarles que el alcohol puede ser especialmente peligroso en niños y personas muy jóvenes, por lo que es mejor no consumir nada al menos hasta los 18 años. ~ Es posible que en torno a los 10 ó 12 años empiecen a saber que existen otras drogas, aunque por lo general no suelen saber muchas cosas acerca de ellas. Puede ser suficiente en estos casos explicarles que las drogas son sustancias que aunque algunas personas piensen que pueden ayudarles, pueden ser muy perjudiciales para la salud, y en muchos casos generar además una dependencia. ~ A estas edades, podemos utilizar multitud de estímulos “naturales” para hablar de las drogas sin grandes alarmismos y con naturalidad, reforzando la comprensión de sus riesgos: una noticia en la televisión, un comentario en una comida, etc. Sus preguntas sobre el asunto son una excelente opor- tunidad para conocer qué saben (siempre es mejor preguntarles a ellos antes de hablar), y tratar de aportarles información, o mejor aún, corregir la que manejan. ~ A estas edades suelen manejar información de otras fuentes: amigos, inter- net, televisión, etc. Además, empiezan a conocer consumos de drogas entre sus iguales, y a descubrir que las cosas no son tan simples como decir “las drogas son malas”. En su entorno encontrarán mensajes que pondrán en A partir de entredicho lo que hasta entonces les han contado. los 12 años ~ Una buena estrategia: tratar de conocer lo que saben y lo que piensan de (aproximadamente) las drogas, antes de hablar. ~ No transmitáis a vuestro hijo/a la idea de que consumir drogas es algo que hacen la mayoría de los jóvenes. Ayudadle a darse cuenta que de no es así. Pensar que consumir drogas es algo mayoritariamente extendido, además de ser falso, es contrario a la prevención. Es más fácil que un adolescente con- suma drogas si piensa que la mayoría lo hace. Refuerza, en cambio, la idea de que los jóvenes se preocupan por su salud, y por eso en la mayoría de los casos prefieren cuidar su cuerpo y no consumir tabaco, alcohol o drogas ilegales. ~ Aunque no es necesario ser un gran experto para hablar de drogas con vues- tros hijos, es bueno que tengáis cierta información. Encontraréis algo de in- formación útil al respecto al final de esta guía. 26 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
2. Lo que desde la Familia podemos hacer... -3- ¿estará mi hijo o hija consumiendo drogas?
Señales de tranquilidad y de alarma E n este capítulo de la guía encontraréis algunos síntomas para la tranquilidad y para la alarma. Conocer los signos y los comportamientos asociados al consumo de drogas os facilitará detectarlo a tiempo, y afrontar cuanto antes el problema. ¿Es tan habitual el consumo de drogas entre la juventud en Navarra? L as drogas más consumidas por adolescentes y jóvenes son, por orden de importan- cia, el alcohol, el tabaco, el cannabis, y a gran distancia, estimulantes como el speed (anfetaminas) y la cocaína. Al final de la guía encontraréis una pequeña descripción de cada una de ellas. No obstante, hay que advertir que a pesar de numerosas informaciones y noticias que parecen querer mostrar lo contrario, lo cierto es que la gran mayoría de los ado- lescentes y jóvenes navarros no son consumidores de drogas, ni parece que vayan a serlo en el futuro. Si atendemos a los resultados de las últimas encuestas de Salud entre jóvenes de 14 a 29 años: tres de cada cuatro jóvenes no son fumadores diarios de tabaco, más de ocho de cada diez no habían probado el cannabis (porros) en el último mes, y más de nueve de cada diez nunca habían probado una droga estimu- lante del tipo de las anfetaminas o la cocaína. Mención aparte merece el alcohol, tal y como seña- lábamos en la introducción de este material. Entre la juventud en Navarra se consume de forma habitual, y en demasiados casos en grandes cantidades. La gran mayoría de los jóvenes navarros no Recuerda que es más fácil que un/a adolescente con- consumen drogas, si suma una droga si piensa que la mayoría de los jóvenes exceptuamos el alcohol. lo hace. ¿Qué comportamientos pueden estar indicando un consumo de drogas por parte de los hijos/as? L o primero que hay que advertir antes de enumerar los posibles “signos de alarma” es que ninguno de ellos, por sí mismo, constituye un indicador definitivo de que existe un consumo. Aunque en algunos casos hay indicadores muy evidentes en sí mis- mos (por ejemplo, verle llegar borracho o encontrarle drogas en casa), por lo general es la combinación de varios de los signos que mencionamos a continuación la que podría constituir un indicador real del consumo de drogas por parte de un adolescente. 28 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
3. ¿Estará mi hijo o hija consumiendo drogas? Irritabilidad, cambios bruscos de actitud y en la relación con los padres Nos referimos a cambios realmente bruscos, y no a la rebeldía o al distanciamiento de los padres más o menos típicos de los adolescentes. Con el consumo de drogas son habituales la agresividad, la utilización persistente de mentiras, los comporta- mientos extraños, etc. Bajada brusca del rendimiento escolar y problemas en la escuela Señales de alerta de Con el consumo de drogas, son habituales los problemas un posible consumo de adaptación en el instituto y la bajada del rendimiento de drogas son: gran escolar, más allá de lo que pudiera considerarse normal. irritabilidad, cambios bruscos de humor, Estas situaciones suelen ser detectadas rápidamente por conflictividad en casa o el profesorado. Por eso es tan importante mantener siem- en el instituto, horarios pre una cierta relación natural con el centro escolar, fa- desfasados, manejo cilitándonos la puesta en contacto con los profesores si extraño del dinero, detectamos situaciones que nos preocupan. utilización persistente de mentiras, algunos Horarios de salida muy desfasados síntomas físicos… Sobre todo en el caso del consumo de estimulantes (an- fetaminas -speed-, éxtasis, cocaína…), el consumo suele Tienen que darse varias producirse en entornos de fiesta, especialmente en las de estas señales a la vez. primeras fases. Por eso, frecuentar entornos nocturnos de fiesta y mantener de forma habitual unos horarios exa- geradamente desfasados (por ejemplo, volviendo a casa a primera hora de la mañana, o incluso más tarde) puede constituir un síntoma de consumo de estas sustancias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas. Guía para familias. Gobierno de Navarra 29
3. ¿Estará mi hijo o hija consumiendo drogas? Cambio de amigos y de costumbres Cuando los/as adolescentes empiezan a consumir drogas suele ser habitual el acerca- miento a entornos de consumo y a grupos de consumidores (hay una cierta selección de amigos en este sentido), produciéndose un distanciamiento respecto de los amigos no consumidores. Es habitual dejar de tener noticias de los amigos de siempre y pasar a saber muy poco de los nuevos amigos y de los lugares por los que se mueven. Síntomas directos del consumo El consumo de drogas suele verse acompañado además de algunos signos directamente relacionados con los efectos de las propias sustancias, que en algunos casos dependen del tipo de droga consumida. Entre estos síntomas directos estarían los siguientes: Síntomas físicos Así, por ejemplo, el abuso de alcohol o el consumo de tabaco provoca en el aliento un olor característico, el consumo de cannabis (porros) se asocia con el enrojeci- miento de los ojos, o el de sustancias estimulantes (anfetaminas, cocaína…) con la dilatación de las pupilas (que no se contraen ante la luz). Además, con el paso del tiempo pueden aparecer otros síntomas: pérdida de peso y/o de apetito, ojeras, etc. Síntomas propios de encontrarse bajo los efectos de alguna droga Así, por ejemplo, en el caso del alcohol los síntomas son muy conocidos; en el caso de los estimulantes la llegada a casa bajo los efectos suele caracterizarse por presentar síntomas de euforia, locuacidad (hablar mucho), dificultades para dormir, falta de apetito, etc., que cuando pasan los efectos se convierten en cansancio extremo (el “bajón”), malestar emocional e irritabilidad. En el caso de sustancias depresoras como el cannabis (porros), es más habitual la sensación de cansancio y de sueño, que en el caso de un consumo prolongado tiende a ser persistente. Manejo injustificado y extraño de dinero Puede constituir un síntoma de trapicheo, y éste a su vez de consumo. Puede ser in- dicativo del consumo de drogas la presencia injustificada de mucho dinero en casa, los robos en el hogar o a otras personas, o el gasto excesivo, brusco e injustificado del dinero disponible. Otros síntomas directos, como la presencia de drogas en casa, denotan de forma casi definitiva la existencia del consumo, y en el caso de encontrarse grandes can- tidades, de tráfico de drogas. En algunos casos, la posesión de grandes cantidades de drogas por parte de un/a adolescente puede deberse también a que haya ejercido el papel de comprador o a que se haya encargado de la custodia de una droga que va a ser consumida por todo un grupo. 30 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
-4- afrontando situaciones relacionadas con el consumo de drogas: tres historias
E n este apartado de la guía encontraréis las histo- rias de tres adolescentes y de sus familias. Los padres y madres de estos tres protagonistas están pre- ocupados por el consumo de sus hijos/as, pero cada uno tiene una situación muy diferente. Los indicadores de consumo a los que hacíamos refe- La mejor manera de rencia en el capítulo anterior están alterados de dife- afrontar los problemas rente manera. Por eso, la forma de afrontar el problema depende en gran por parte de los padres deberá ser también distinta, en medida de la gravedad función de la gravedad de cada situación. Os propone- del caso. mos diferentes recomendaciones para cada caso1. historia 1 CUANDO LAS COSAS PARECE QUE VAN BIEN Iosu, 14 años Iosu es un chaval de 14 años que estudia 2º de ESO. La relación con sus padres es bastante buena, aunque como “buen adolescente” ya no quiere estar tanto tiempo con sus padres como cuando era un niño. A veces discuten con él por el tema de los horarios, o porque tiene su cuarto bastante desordenado. En los estudios no va mal, y aunque alguna vez ha suspendido alguna asignatura, va aprobando los cursos. Todavía no sabe si estudiará Bachillerato o algún ciclo de formación profesional, pero tiene claro que le gustaría hacer algo relacionado con los animales. Este año ha empezado a salir de noche en algunas fiestas, y aunque siempre ha terminado discutiendo con sus padres por los horarios, al final los ha cumplido, y siempre ha llegado a casa sin ningún síntoma de haber con- sumido nada. El otro día les reconoció a sus padres que en la bajera en la que estuvo en fiestas con sus amigos unos chavales les ofrecieron alcohol y tabaco, pero les respondieron que pasaban de esas cosas. 1 Adaptado de Moreno, G.; Gamonal, A. y Del Pozo, J. (2008): Habla con ellos de la cocaína. Gobierno de La Rioja. 32 Gobierno de Navarra. Guía para familias. Ayudar a hijos e hijas frente a las drogas
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