DE LA REFUNDACIÓN DICTATORIAL A LA TRANSICIÓN DEMOCRÁTICA . CHILE, 1973-1994 FROM THE DICTATORIAL REFUNDATION TO THE ...

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Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100                                                      ISSN: 1696-2060

DE LA REFUNDACIÓN DICTATORIAL A LA TRANSICIÓN
DEMOCRÁTICA. CHILE, 1973-1994

FROM THE DICTATORIAL REFUNDATION                                                                       TO      THE
DEMOCRATIC TRANSITION. CHILE, 1973-1994

Igor Goicovic Donoso*
*
    Universidad de Santiago de Chile, Chile; E-mail: igor.goicovic@usach.cl

Recibido: 14 abril 2020 / Revisado: 26 mayo 2020 / Aceptado: 9 junio 2020 / Publicado: 15 junio 2020

Resumen: El modelo económico neoliberal y el                    the occasional pressure from the military power.
régimen político autoritario impuestos por la                   In this scenario, a part of the opposition to the
dictadura chilena entre 1973 y 1990, experimen-                 dictatorship, composed by political-military or-
taron cambios parciales a partir del retorno de                 ganizations, chose to maintain the strategy of
la democracia (1990). Es más, el modelo econó-                  armed struggle, in order to modify the trajectory
mico de mercado alcanzó un alto grado de vali-                  of the political process, partially destabilizing the
dación y fue profundizado por las nuevas autori-                democratic system. In this article we propose
dades civiles, a la vez que la Constitución Política            to analyze the characteristics of the transitional
de 1980 y el entramado normativo asociado a la                  process, highlighting the centrality of violence in
misma, sufrió muy pocas modificaciones dada                     its different phases.
la falta de voluntad política tanto del gobierno,
como del parlamento, y la presión ocasional del                 Keywords: Dictatorship, Transition, Democracy,
poder militar. En este escenario, una franja de la              Violence, Chile
oposición a la dictadura, compuesta por organi-
                                                                PRESENTACIÓN
zaciones político-militares, optó por mantener la

                                                                A
estrategia de lucha armada, a efectos de modifi-                       comienzos de octubre de 2019 tanto el
car la trayectoria del proceso político, desestabi-                    gobierno (“Chile Vamos”), como los par-
lizando parcialmente al sistema democrático. En                        tidos políticos de la oposición (“Ex Nueva
este artículo nos proponemos analizar las carac-                Mayoría”), se aprestaban a conmemorar los 31
terísticas del proceso transicional destacando la               años del triunfo de la opción No en el plebiscito
centralidad de la violencia en sus diferentes fa-               convocado por la dictadura de Augusto Pinochet
ses.                                                            para el 5 de octubre de 1988. En ambos casos,
                                                                tanto los líderes como los partidos políticos que
Palabras Clave: Dictadura, Transición, Democra-
                                                                representan, se sentían herederos de ese triunfo
cia, Violencia, Chile
                                                                y, a la vez, corresponsables del sistema econó-
Abstract: The neoliberal economic model and                     mico, social y político que se edificó a partir del
the authoritarian political regime imposed by the               retorno de la democracia (1990). No constituyó,
Chilean dictatorship between 1973 and 1990, ex-                 en consecuencia, un exabrupto las declaracio-
perienced partial changes since the return of de-               nes que el Presidente de la República, Sebastián
mocracy (1990). Moreover, the market economic                   Piñera Echenique, emitió a un canal de la tele-
model reached a high degree of validation and                   visión chilena el 9 de octubre de 2019. En esa
was deepened by the new civil authorities, while                ocasión el jefe de Estado señaló:
the Political Constitution of 1980 and the norma-
                                                                      “En medio de esta América Latina convul-
tive framework associated with it, suffered very
                                                                      sionada veamos a Chile, es un verdadero
few modifications due to the lack of political will
                                                                      oasis, con una democracia estable, el país
of both the government and the parliament, and
© Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100                                                                     85
De la refundación dictatorial a la Transición democrática                                  Igor Goicovic Donoso

     está creciendo, estamos creando 170 mil                la capacidad de organización y movilización de
     empleos al año, los salarios están mejoran-            los sectores populares y sobreestimaron la capa-
     do”1.                                                  cidad de cooptación que las estructuras locales
                                                            de poder (municipios, gobernaciones e inten-
El Presidente expresaba, de esta forma, no solo             dencias) podían desplegar en contextos de crisis.
su satisfacción personal, sino que, por extensión,          Lo más sorprendente es que los antecedentes
la del conjunto de la élite de poder.                       de la crisis se venían manifestando desde el año
                                                            2006 (movilización pingüina), involucrando cada
Por eso el conjunto de la élite se sorprendió y no
                                                            vez más sectores sociales y adquiriendo crecien-
fue capaz de construir una adecuada respuesta
                                                            tes niveles de masividad y radicalidad4. Lo que
política ante la revuelta social que se desenca-
                                                            estas protestas ponían de relieve era que el “oa-
denó en el país solo unos días después de estas
                                                            sis neoliberal” del Presidente Piñera solo benefi-
declaraciones (18 de octubre) y que se prolongó
                                                            ciaba a una franja muy delgada de la población
hasta los primeros días de marzo de 20202. Efec-
                                                            y se transformaba en un espejismo inalcanzable
tivamente, a partir de ese día, y en las semanas
                                                            para las amplias mayorías5. Pero las razones más
posteriores, miles de estudiantes, trabajadores,
pobladores de las barriadas pobres, profesiona-
les, funcionarios públicos, transportistas, indí-           4
                                                              Efectivamente, a partir del año 2007 las protestas
genas e integrantes de movimientos feministas               se intensificaron con las huelgas de trabajadores sub-
y ambientalistas, ocuparon las calles, tocaron              contratistas de la minería del cobre, trabajadores de
                                                            la industria salmonera y trabajadores forestales. El
cacerolas, levantaron barricadas, destruyeron
                                                            2008, tras la muerte de Matías Catrileo se intensifi-
infraestructura y equipamiento urbano, saquea-              caron las protestas de la población mapuche en La
ron establecimientos comerciales y financieros              Araucanía. Entre los años 2011 y 2013 los estudiantes
y se enfrentaron violentamente con la policía y             de educación secundaria y universitarios se moviliza-
unidades del ejército. Como consecuencia de los             ron en demanda de un sistema de educación estatal
violentos enfrentamientos, más de 30 personas               público y gratuito. También a partir del año 2011 se
perdieron la vida, cientos quedaron con daño                comienzan a desarrollar una serie de manifestaciones
ocular irreparable (como consecuencia de las                regionales que repudiaban la postergación de sus lo-
heridas recibidas por perdigones o proyectiles              calidades y la depredación de los recursos existentes
lacrimógenos disparados por la policía antidis-             en sus ecosistemas, como en Dichato (2011), Cala-
                                                            ma (2011-2012), Punta Arenas (2011), Aysén (2012),
turbios), y cerca de 2.500 permanecen en prisión
                                                            Freirina (2012) y Caimanes (2015). A estas moviliza-
acusados de diferentes delitos contra el orden              ciones cabe sumar, hacia esta misma época, las ma-
público3.                                                   nifestaciones de los grupos ambientalistas contra
                                                            los megaproyectos energéticos, la constitución del
Pero, ¿por qué la sorpresa?, ¿por qué la evidente           Movimiento No Más AFPs, que rechaza el modelo de
falta de iniciativa que caracterizó al gobierno y a         capitalización individual de las pensiones y el movi-
la élite en los primeros días de la revuelta? No            miento feminista, que repudió con fuerza la cultura
cabe duda que las autoridades actuales, y tam-              patriarcal. Ver al respecto, Goicovic, Igor, “Sistema de
bién quienes le precedieron al mando del Esta-              dominación, conflicto político y organización revolu-
do, minimizaron los problemas estructurales que             cionaria en Chile”, en Ponce, José (comp.), Marx 200
afectaban a la sociedad (desigualdad, bajos sala-           años. Impactos y vigencias en el siglo XXI, Valparaíso,
rios, problemas de acceso a la salud y a la educa-          Editorial América en Movimiento, 2019, pp. 181-214.
ción, pensiones miserables, etc.), subestimaron
                                                            5
                                                              De acuerdo a las cifras proporcionadas por el Banco
                                                            Central de Chile (2017), el quintil más rico de la pobla-
                                                            ción (Quintil 5: 3.400.000 personas), concentra el 72%
1
  “Presidente Piñera: Chile es un verdadero oasis en        de la riqueza, pero si luego desagregamos este dato y
una América Latina convulsionada”, El Diario de Coo-        lo llevamos al 1% más rico del total (170.000 perso-
perativa / Cooperativa, 9 de octubre de 2019 [06:43].       nas), esta concentración llega al 33% de la riqueza.
2
  El 18 de marzo de 2020 el ejecutivo decretó “Estado       Por otro lado, y de acuerdo los antecedentes entre-
de excepción constitucional de catástrofe” a propósi-       gados por el Instituto Nacional de Estadísticas (2017),
to del arribo al país de la pandemia de COVID 19. Este      el ingreso mediano de los trabajadores llegaba a los
decreto restringió los movimientos de la población, a       $ 379.673 (US$ 491). Ver: Martínez, Felipe y Uribe,
la vez que la amenaza viral generó un clima de pánico       Francisca, Distribución de la riqueza no previsional de
e incertidumbre. Las movilizaciones, a partir de este       los hogares chileno, Santiago de Chile, Banco Central,
momento, se fueron atenuando.                               Documentos de Trabajo, 806, 2017, p. 6 e Instituto
3
  Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH),            Nacional de Estadísticas, Encuesta suplementaria de
Reporte de estadísticas. Disponible en: https://www.        ingresos. Síntesis de resultados, Santiago de Chile,
indh.cl/ [Consultado el 18 de enero de 2020] .              INE, 2017, pp. 4-5.
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Igor Goicovic Donoso                                    De la refundación dictatorial a la Transición democrática

profundas de este desencuentro están relacio-                 (AD, 1983), con algunos representantes políticos
nadas con las características que asumió la tran-             de la dictadura a partir de 1985, allanaron el ca-
sición de Chile a la democracia y, por ende, con              mino al restablecimiento de la institucionalidad
las herencias que el pasado dictatorial dejó pro-             democrática, en especial después del plebiscito
fundamente arraigados en el modelo económico                  de octubre de 1988, no es menos efectivo que la
y en el sistema político de Chile.                            violencia, tanto represiva como insurgente, con-
                                                              tinuó siendo un obstáculo relevante para la plena
Efectivamente, tanto la dictadura como la transi-             consolidación sistema democrático en Chile. En
ción a la democracia, dejaron muchos problemas                este artículo nos proponemos observar la cen-
sin resolver. Desde aquellos que decían relación              tralidad de la violencia política tanto en el ciclo
con las inequidades del sistema económico, has-               refundacional liderado por la dictadura (1973-
ta los vinculados a las violaciones a los derechos            1990), como en la fase transicional (1990-1994),
humanos. No es extraño, en consecuencia, que                  encabezada por la Concertación de Partidos por
el proceso refundacional haya dado origen, por                la Democracia (en adelante Concertación, 1988).
primera vez en la historia de Chile, a formas de
organización y a diseños de intervención política             1. REPRESIÓN Y PROCESO REFUNDACIONAL
que reivindicaron y operacionalizaron la lucha
armada6. La represión desplegada por la dicta-                El golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973
dura, desde el mismo 11 de septiembre de 1973,                no solo puso fin al gobierno socialista liderado
frente a la cual se alzó la política de resistencia           por Salvador Allende, también abolió el régimen
popular impulsada por el MIR, a partir de 1973                democrático inaugurado en 1925 y profundizado
y más tarde la adopción por parte del Partido                 a lo largo de las décadas siguientes. A ese efecto,
Comunista de Chile (PCCh), de la estrategia de                la dictadura suspendió la Constitución Política de
rebelión popular de masas (1980), configuraron                1925, declaró el receso del Congreso Nacional,
un escenario en el cual la violencia se transfor-             colocó fuera de la ley a los partidos políticos de
mó en el campo preferente de la acción política7.             izquierda e intervino a la mayoría de las organi-
Cabe señalar que si bien los acuerdos políticos               zaciones de base de la sociedad civil (sindicatos,
adoptados por la oposición de centro-izquier-                 agrupaciones barriales y organizaciones de estu-
da, articulada en torno a la Alianza Democrática              diantes). En una primera fase, que se extendió
                                                              entre el golpe de Estado y la creación de la Di-
                                                              rección de Inteligencia Nacional (DINA), en mar-
6
   Si bien organizaciones como el Movimiento de Iz-
quierda Revolucionaria (MIR) y la Vanguardia Orga-
                                                              zo de 1974, la represión se extendió por todo el
nizada del Pueblo (VOP), fundadas en 1965 y 1969              cuerpo de la sociedad: Miles de chilenos fueron
respectivamente, reivindicaron el uso de la violencia         encarcelados, torturados y algunos de ellos ase-
como estrategia política, no es menos efectivo que            sinados y sus cuerpos hechos desaparecer. Otros
el alcance de sus acciones fue más bien limitado. En          fueron confinados a inhóspitos parajes y muchos
el caso del MIR, su quehacer más activo entre 1969            más enviados al exilio. También fueron miles los
y 1973, se volcó preferentemente a la movilización            que perdieron sus empleos o fueron expulsados
rupturista de masas y no a la lucha armada. Ver, al           de sus centros de estudio. La represión se trans-
respecto, Goicovic, Igor, Trabajadores al poder. El Mo-       formó, de esta manera, en una herramienta de
vimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y el pro-
                                                              uso recurrente, al servicio de un proceso de pa-
yecto revolucionario en Chile, 1965-1994, Santiago
de Chile, Ediciones Escaparate, 2016, pp. 117-122 y
                                                              cificación y control social y político8.
Guerra, Felipe, La Vanguardia Organizada del Pueblo
                                                              Una vez pacificado el país la represión se redu-
y su escalamiento en la violencia política. Cultura po-
lítica y militancia (1969-1971) (Tesis de Magíster en
                                                              jo en extensión, pero no modificó sus orienta-
Historia), Santiago de Chile, Universidad de Santiago
de Chile, 2019, pp. 60-101.                                   8
                                                                Los antecedentes de la represión en Chile se en-
7
  Nuestro análisis de la violencia política es tributario     cuentran contenidos en: Rettig, Raúl (coord.), Informe
de diferentes enfoques; entre otros: Michaud, Yves,           de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación,
La violence, Paris, Presses Universitaires de France,         Santiago de Chile, Imprenta de La Nación, 1991 y Va-
1986, pp. 20-31; Arostegui, Julio, “Violencia, socie-         lech, Sergio (coord.), Informe de la Comisión Nacional
dad y política: la definición de la violencia”, Ayer, 13      sobre Prisión Política y Tortura, Santiago de Chile, Mi-
(1994), pp. 17-55; Sofsky, Wolfgang, Tratado sobre la         nisterio del Interior, 2004. La problemática de la vio-
violencia, Madrid, Abada Editores, 2006, pp. 209-226;         lencia represiva ha sido analizada por Calveiro, Pilar,
y Scheidel, Walter, El gran nivelador. Violencia e histo-     Violencias de Estado. La guerra antiterrorista y la gue-
ria de la desigualdad desde la Edad de Piedra hasta el        rra contra el crimen como medios de control global,
siglo XXI, Barcelona, Editorial Crítica, 2018, pp. 19-41.     Buenos Aires, Siglo XXI Editores, 2012, pp. 9-66.
© Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100                                                                     87
De la refundación dictatorial a la Transición democrática                                 Igor Goicovic Donoso

ciones políticas. La creación de la DINA en 1974            estuvieron rápidamente de acuerdo, formó par-
conllevó la adopción de un modelo represivo de              te luego de la Constitución Política del Estado
carácter selectivo, inspirado ideológicamente en            (artículo 8) dictada por la dictadura (1980). Este
la Doctrina de Seguridad Nacional y fundado en              derrotero institucional, de naturaleza autorita-
la estrategia de contrainsurgencia, que buscó               ria, fue refrendado posteriormente por el propio
neutralizar a las organizaciones de la izquierda            dictador cuando, en julio de 1977, acuñó el con-
en la clandestinidad para, de esa manera, impe-             cepto de “nueva democracia”, la cual entendía
dir la reestructuración del vínculo entre las orga-         como: “(…) autoritaria, protegida, integradora,
nizaciones populares y sus antiguas vanguardias             tecnificada y de auténtica participación social”13.
políticas. Concordante con ello, cientos de mili-
tantes del MIR, del Partido Socialista (PSCh) y del         Fue en este contexto de violencia represiva y
PCCh, fueron detenidos, torturados y asesinados             reorganización institucional, que la dictadura
en las cárceles clandestinas de la policía de segu-         impuso el modelo económico neoliberal vigente
ridad. Tal fue así que, hacia 1977, prácticamente           hasta este momento en el país14. Ello se inició,
no existía resistencia organizada a la dictadura al         en 1973, con la devolución a sus antiguos patro-
interior del país9.                                         nes de las empresas que los trabajadores habían
                                                            ocupado durante el período de la Unidad Popu-
La represión política, en consecuencia, no fue              lar y continuó con la desregulación arancelaria
un exceso cuya responsabilidad exclusiva recae              de 1975 que abrió la economía chilena al merca-
en los perpetradores directos de las violaciones            do exterior. Más tarde se promulgó un nuevo có-
a los derechos humanos. Por el contrario, la re-            digo del trabajo (1979) que precarizó la situación
presión fue un componente fundamental del                   de los trabajadores al interior de las empresas
proyecto refundacional que la dictadura delineó             (despidos discrecionales) y redujo la capacidad
para el país y, a esa tarea, concurrieron múltiples         de defensa de las organizaciones sindicales (afi-
representantes del empresariado y de las élites             liación voluntaria, restricción al uso de la huelga,
intelectuales conservadoras. Sin la represión ha-           limitaciones a la negociación colectiva, etc.)15.
bría sido imposible introducir las transformacio-           Junto con ello se inició la privatización de los
nes económicas, sociales y políticas que realizó            servicios del Estado, partiendo por las pensiones
la dictadura, por ende, las mismas, son tributa-            (1980), poniendo fin al sistema de reparto soli-
rias de la “paz social” impuesta a sangre y fuego           dario y dando origen a las Administradoras de
por el terrorismo de Estado10.
                                                            13
                                                               Pinochet, Augusto, “Discurso en Cerro Chacarillas
De hecho, la comisión constituyente que asumió              con ocasión del Día de la Juventud, el 9 de julio de
la tarea de diseñar un nuevo orden jurídico-po-             1977”, en Nueva institucionalidad en Chile. Discursos
lítico para el país, fue formada por la dictadura           de SE el Presidente de la República General de Ejército
en el preciso momento en que arreciaba la re-               D. Augusto Pinochet Ugarte, 1977, Santiago de Chile,
presión sobre el territorio de la nación11. Ya en           Gobierno de Chile, 1977, p. 13.
su primera reunión (24 de septiembre de 1973),              14
                                                               Los fundamentos ideológicos y programáticos del
el Presidente de la Comisión, Enrique Ortúzar,              modelo económico de la dictadura se encuentran en
adelantó que para afianzar el nuevo sistema de              un documento redactado, entre 1969 y 1973, por un
                                                            grupo de académicos de la Pontificia Universidad Ca-
gobierno era necesario declarar como contrarios
                                                            tólica de Chile, titulado “El Ladrillo”. Este documento
a la Constitución “a los partidos o movimientos             circuló inédito entre las nuevas autoridades y sólo
que sustenten ideas o doctrinas marxistas”12.               fue publicado en 1992. Ver, De Castro, Sergio (ed.),
Este punto, en el cual todos los constituyentes             El Ladrillo. Bases de la política económica de del go-
                                                            bierno militar chileno, Santiago de Chile, Centro de
9
   Respecto de la creación de la DINA ver: Ministerio       Estudios Públicos, 1992. Las transformaciones intro-
del Interior de Chile, Decreto Ley Nº 521, 14 de junio      ducidas por la dictadura, en base a este programa, en:
de 1974.                                                    Larraín, Felipe y Vergara, Rodrigo, “Chile en pos del
10
   Constable, Pamela y Valenzuela, Arturo, Una nación       desarrollo. Veinticinco años de transformaciones eco-
de enemigos. Chile bajo Pinochet, Santiago de Chile,        nómicas”, en Larraín, Felipe y Vergara, Rodrigo (eds.),
Ediciones Universidad Diego Portales, 2013, pp. 147-        La transformación económica de Chile, Santiago de
174.                                                        Chile, Centro de Estudios Públicos, 2004, pp. 5-67.
11
   Ministerio de Justicia de Chile, Chile, Decreto Ley Nº   15
                                                               Este nuevo código del trabajo se amparó en dos de-
1.064, 25 de octubre de 1973.                               cretos leyes: Ministerio del Trabajo y Previsión Social
12
    Comisión Constituyente. Actas oficiales de la co-       de Chile, Decreto Ley Nº 2.756, 29 de junio de 1979 y
misión constituyente, Acta del 23 de septiembre de          Ministerio del Trabajo y Previsión Social de Chile, De-
1973.                                                       creto Ley Nº 2.758, 29 de junio de 1979.
88                                                                 © Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100
Igor Goicovic Donoso                                De la refundación dictatorial a la Transición democrática

Fondos de Pensiones (AFPs) que desarrollan un              dicha política encontramos, la ley antiterrorista
modelo de capitalización individual16. Posterior-          (1984), el endurecimiento de la ley de seguridad
mente se dio inicio a la privatización del sistema         interior del Estado (1937) y de la ley de control
de salud, con la creación de las Instituciones de          de armas y explosivos (1972), la ampliación de
Salud Previsional (ISAPRES, 1981), llamadas a              las atribuciones de los tribunales militares (fun-
entregar un servicio de seguros de salud cuya              damentalmente para conocer y resolver causas
calidad varía en función de los planes contrata-           criminales que afectaban a civiles), y la militari-
dos por los usuarios17. Un proceso similar experi-         zación de los organismos policiales de seguridad:
mentó el sistema de educación, pero a través de            Central Nacional de Informaciones (CNI), Carabi-
una línea más indirecta, que supuso el abandono            neros y Policía de Investigaciones20.
gradual de la función del Estado como garante
de los procesos educativos y, en subsidio, el cre-         No obstante, la eficiencia de la política represiva,
ciente nivel de injerencia que los privados co-            la oposición a la dictadura inició un lento pero
menzaron a tener en la gestión de los diferentes           sostenido proceso de rearme a partir del mis-
subsistemas educativos (primario, secundario y             mo golpe de Estado. El MIR, no obstante ser la
universitario). Ello partió con la educación supe-         organización más fuertemente golpeada por la
rior en 1980, reduciendo la incidencia formativa           política represiva de la dictadura, inauguró en
y de investigación de las dos universidades del            diciembre de 1973 la denominada política de re-
Estado (Universidad de Chile y Universidad Téc-            sistencia popular, que contemplaba la reanima-
nica del Estado) y continuó en 1986 con el tras-           ción del movimiento de masas y el despliegue de
paso desde el Ministerio de Educación hacia los            accionar armado para combatir la represión21.
municipios de la educación pública primaria y              Esta política se vio fortalecida, a partir de 1978,
secundaria18.                                              con la ejecución de la denominada “Operación
                                                           Retorno”, que conllevó el ingreso al país de mi-
No obstante, el modelo refundacional alcanzó               litantes con formación político-militar, que se
su consagración institucional con la Constitución          encontraban en el exilio, y que asumieron las
Política de 1980. En ella, los constituyentes de-          tareas de formar nuevos cuadros insurgentes
signados por la dictadura en 1973, plasmaron               y desplegar un accionar ofensivo en contra del
un sistema político fundado en instituciones au-           aparato represivo del régimen22. El accionar in-
toritarias, con un poder presidencial fuerte, un
parlamento debilitado, con gobiernos locales               20
                                                              El entramado normativo que regula cada una de
designados y con unas fuerzas armadas autóno-              estas disposiciones es el siguiente: Ministerio del In-
mas respecto del poder político y jugando el rol           terior de Chile, Ley Nº 18.314, 16 de mayo de 1984;
de garantes del orden institucional. El objetivo           Ministerio del Interior de Chile, Ley Nº 6.026, 11 de
era articular una sociedad de sujetos obedien-             febrero de 1937; Ministerio de Defensa Nacional de
tes frente al gobierno y leales a la patria (cuya          Chile, Ley Nº 17.798, 20 de octubre de 1972; y Minis-
definición correspondía y era atributo de sus              terio del Interior de Chile, Decreto Ley Nº 1.878, 12 de
defensores históricos: Las FFAA)19. Para ello se           agosto de 1977.
                                                           21
                                                              La temática de la lucha armada cuenta con un am-
dotaba a las autoridades correspondientes de
                                                           plio desarrollo historiográfico. Dos enfoques contra-
los instrumentos legislativos y operativos, que            puestos en: Pozzi, Pablo y Pérez, Claudio (eds.), Por
permitieran identificar a los enemigos de la pa-           el camino del Che. Las guerrillas latinoamericanas
tria para proceder a su extirpación. Entre los ins-        1959-1990, Buenos Aires, Imago Mundi, RELAHO,
trumentos más recurrentes de la aplicación de              Universidad de Buenos Aires, Universidad Academia
                                                           de Humanismo Cristiano, 2011, pp. 7-17 y González,
16
   Ministerio del Trabajo y Previsión Social de Chile,     Eduardo, El laboratorio del miedo. Una historia gene-
Decreto Ley Nº 3.500, 4 de noviembre de 1980.              ral del terrorismo, Barcelona, Editorial Crítica, 2013,
17
   Ministerio de Salud de Chile, Decreto con Fuerza de     pp. 10-23. Nuestro propio enfoque en, Goicovic, Igor,
Ley Nº 3, 27 de abril de 1981.                             “Temas y debates en la historia de la violencia política
18
   Ministerio de Educación Pública de Chile, Decreto       en Chile”, Contenciosa, 3/4 (2014), pp. 1-16.
con Fuerza de Ley Nº 1, 30 de diciembre de 1980 y          22
                                                              Entre 1980 y 1983 el MIR desarrolló varias acciones
Ministerio del Interior de Chile, Ley Nº 18.575, 12 de     armadas contra miembros del aparato de seguridad
noviembre de 1986.                                         de la dictadura, entre ellas, la ejecución del Director
19
   Sobre el proceso constituyente, el resultado del        de la Escuela de Inteligencia del Ejército, Coronel Ro-
mismo y los mecanismos de aprobación, ver Barros,          ger Vergara, el 15 de julio de 1980, el ajusticiamiento
Robert, La Junta Militar, Pinochet y la constitución       del agente de la Central Nacional de Informaciones
de 1980, Santiago de Chile, Editorial Sudamericana,        (CNI), Carlos Tapia Barraza, verificada el 6 de julio de
2005, pp. 61-262.                                          1981 y la emboscada del 18 de noviembre de 1981,
© Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100                                                                  89
De la refundación dictatorial a la Transición democrática                                 Igor Goicovic Donoso

surgentes desplegado por el MIR coincidió con               (AD) y establecieron puntos de encuentro con
la adopción, por parte del PCCh de la política de           sectores civiles ligados a la dictadura, que aspi-
rebelión popular de masas (1980) y con la for-              raban a reducir el mandato presidencial de Pi-
mación del Frente Patriótico Manuel Rodríguez               nochet y restablecer un sistema de gobierno de
(1983), con lo cual la violencia política creció en         naturaleza democrática25. Estos acercamientos,
extensión y masividad23. El punto culminante de             mediados por la Iglesia Católica, cristalizaron en
este proceso fue el desarrollo de las protestas             1985 con la suscripción de un documento de-
populares inauguradas en 1983, en las cuales se             nominado “Acuerdo Nacional”, que definió los
combinó la ocupación del espacio público por el             contenidos generales del proceso transicional26.
movimiento de masas, con el despliegue del ac-              Por su parte, la izquierda radical (PCCh, PSCh
cionar militar y miliciano de las organizaciones            fracción Clodomiro Almeyda y MIR), se agrupó
de izquierda.                                               en el Movimiento Democrático Popular (MDP),
                                                            insistió en la movilización de masas rupturista y
Efectivamente, estas movilizaciones, que adqui-             patrocinó el desarrollo de la lucha armada. Su
rieron especial intensidad entre 1983 y 1987,               programa involucraba el derrocamiento del ré-
desestabilizaron al régimen y fracturaron su uni-           gimen, utilizando todas las formas de lucha (in-
dad política24. La Democracia Cristiana (PDC),              cluida la insurgencia armada) y la construcción
junto a un sector del PSCh, el MAPU y el Partido            de una democracia popular, que introdujera re-
Radical (PR), formaron la Alianza Democrática               formas políticas, sociales y económicas de rasgos
                                                            similares a los planteados por la UP en 197027.
en la que perdieron la vida tres agentes de la Policía
de Investigaciones, que custodiaban la casa del Ge-         En septiembre de 1986 el intento de ejecución
neral de Ejército, Santiago Sinclair. Este ciclo se cerró   del dictador Augusto Pinochet por parte de un
en agosto de 1983 con la ejecución del Intendente de        comando del FPMR, no sólo desató una violenta
Santiago, Mayor General de Ejército Carol Urzúa y de        represión sobre el movimiento opositor, también
dos miembros de su escolta. Urzúa fue el responsa-          dejó en evidencia, para todos los actores políti-
ble político de la represión de las protestas populares     cos chilenos y para quienes se preocupaban de
que se verificaron entre mayo y agosto de 1983, en su       la situación política de Chile desde el extranjero,
condición de Intendente de la Región Metropolitana;
                                                            que el desborde social y el accionar insurgente
ver Goicovic, Igor, “Formation and development of
the armed left in Chile (1965-1990)”, en Kruijt, Dirk,      decantaba rápidamente hacia la generación de
Rey, Eduardo y Martín, Alberto (eds.), Latin American       un escenario de guerra de baja intensidad como
guerrilla movements. Origins, evolutios, Outcomes,          el que existía en esos momentos en Centroamé-
New York, Routledge, 2020, pp. 111-119.                     rica, Perú y Colombia.
23
   Este tema ha sido tratado por Bravo, Viviana, Con la
razón y la fuerza, venceremos. La rebelión popular y
la subjetividad comunista en los ’80, Santiago de Chi-
le, Ariadna Ediciones, 2010, pp. 31-53; Rojas, Luis, De     25
                                                               Valdés, Gabriel, Sueños y memorias, Santiago de
la rebelión popular a la sublevación imaginada. An-         Chile, Editorial Taurus, 2009, pp. 287-329; Boeninger,
tecedentes de la historia política y militar del Partido    Edgardo y Serrano, Margarita, La igual libertad, San-
Comunista de Chile y del FPMR 1973-1990, Santiago           tiago de Chile, Uqbar Editores, 2009, pp. 77-117 y Ot-
de Chile, LOM Ediciones, 2011, pp. 11-88; y Álvarez,        tone, Ernesto, “Democratización y nueva hegemonía
Rolando, Arriba los pobres del mundo. Cultura e iden-       en Chile”, en VV.AA., Siete ensayos sobre democracia
tidad política del Partido Comunista de Chile entre de-     y socialismo en Chile, Santiago de Chile, VECTOR y Edi-
mocracia y dictadura. 1965-1990, Santiago de Chile,         ciones Documentas, 1986. pp. 137-164.
LOM Ediciones, 2011, pp. 151-253.                           26
                                                               El Acuerdo Nacional fue un documento, suscrito por
24
   Al respecto ver, Salazar, Gabriel, Violencia política    19 dirigentes políticos, pertenecientes a organizacio-
popular en las ‘grandes alamedas’ (1947-1987), San-         nes de derecha, centro e izquierda, que interpelaba
tiago de Chile, Ediciones SUR, 1990, pp. 368-393; Gui-      a las autoridades militares para definir un itinerario
llaudat, Patrick y Mouterde, Pierre, Los movimientos        preciso de retorno a la democracia. Este documento,
sociales en Chile, 1973-1993, Santiago de Chile, LOM        hecho público en agosto de 1985, fue publicado in ex-
Ediciones, 1998, pp. 154-173; Araya, Rodrigo, “Ha lle-      tenso por el Centro de Estudios Públicos en 1986. Se
gado la hora de decir basta. El movimiento sindical         incorporaron a esa publicación las actas del Semina-
y la lucha por la democracia en Chile, 1973-1990”,          rio en el cual se debatió sobre el tema y las réplicas a
Izquierdas, 37 (2017), pp. 191-211; y Bravo, Viviana,       que dio origen este documento en esa época. Al res-
Piedras, barricadas y cacerolas. Las jornadas nacio-        pecto ver, Avetikian, Tamara (ed.), “Acuerdo Nacional
nales de protesta. Chile, 1983-1986, Santiago de Chi-       y transición a la democracia”, Estudios Públicos, 21
le, Ediciones Universidad Alberto Hurtado, 2017, pp.        (1986), pp. 57-62.
241-410.                                                    27
                                                               Movimiento Democrático Popular, enero de 1984.
90                                                                 © Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100
Igor Goicovic Donoso                                  De la refundación dictatorial a la Transición democrática

La agudización de los enfrentamientos sociales y             mediados de la década del 2000 este diseño no
políticos estimuló, entre 1987 y 1988, las nego-             enfrentó grandes desafíos, es más, las autorida-
ciaciones entre la oposición de centro-izquierda             des políticas del Estado se sucedieron de forma
y los representantes civiles del gobierno, lo cual           regular, en procesos electorales transparentes
concluyó en la aceptación por parte de los par-              que, si bien decrecían en adhesión, continuaban
tidos democráticos del calendario político y del             expresando importantes equilibrios a nivel de
marco institucional definido por las autoridades             la representación, especialmente parlamenta-
militares, a la vez que la dictadura, que aspira-            ria, mientras que las movilizaciones sociales del
ba a prolongar su mandato político hasta 1998,               período 1988-2000 carecían de envergadura e
aceptó a regañadientes el fallo adverso de las               intensidad y sólo expresaban las demandas pun-
urnas en el plebiscito del 5 de octubre de 1988 y            tuales de grupos de presión que aspiraban a ser
los resultados electorales de diciembre de 1989              reconocidos e integrados en el sistema30. El mo-
que dieron como ganador al representante de                  delo económico, a su vez, recuperado de la crisis
la Concertación de Partidos por la Democracia                financiera de comienzos de la década de 1980,
(Concertación, continuadora de la AD), Patricio              había dado inicio, hacia 1986, a un proceso sos-
Aylwin y entregó el gobierno en marzo de 199028.             tenido de crecimiento económico que promedió
Se abrió camino, de esta forma, a la denominada              el 8% anual hasta 199731. Esto le permitió al Es-
transición política a la democracia.                         tado ampliar su capacidad de intervención social
                                                             y, bajo estas condiciones, atender y resolver (a
2. LOS GRANDES ACUERDOS Y LA CONSOLI-                        lo menos de forma parcial), los acuciantes pro-
DACIÓN DE LA REFUNDACIÓN                                     blemas derivados de la pobreza y la exclusión so-
                                                             cial32. De esta manera, el crecimiento económi-
La transición de la sociedad chilena a la demo-
                                                             co, sumado a la estabilidad política y a la tregua
cracia (1988-1994) se articuló en torno a tres pi-
                                                             social relativa, permitió proyectar (hacia afuera
lares fundamentales: La continuidad del modelo
                                                             y hacia adentro), la imagen de una transición
económico neoliberal, los ajustes realizados en
                                                             exitosa, que había logrado superar los traumas y
1989 a la Constitución Política de la dictadura
                                                             divisiones del pasado y que ofertaba al país una
(1980) y la contención de la demanda social por
                                                             estrategia de desarrollo económico y social que,
parte de la alianza política que lideró el proce-
                                                             en palabras del Presidente de la República, Ri-
so: La Concertación29. Cabe señalar que hasta
                                                             cardo Lagos Escobar (2000-2006), nos conduciría
                                                             al pleno desarrollo al momento de conmemorar
28
   En el plebiscito realizado el 5 de octubre de 1988        el bicentenario de la independencia de Chile
se definía una eventual extensión del mandato presi-         (2010)33.
dencial de Augusto Pinochet hasta marzo de 1997. La
opción SI ratificaba la permanencia de Pinochet en el        Chile”, Les Cahiers de Framespa, 27 (2018), pp. 1-15;
poder y la opción NO abría un escenario de elecciones        González, Carmen, “Introducción. Una propuesta
abiertas. En el plebiscito antes mencionado se impu-         metodológica y transnacional para el estudio de las
so la opción No con un 54,7% de los votos. Disponible        transiciones contemporáneas”, en González, Carmen
en: https://www.bcn.cl/historiapolitica/elecciones/          (coord.), Transiciones políticas contemporáneas. Sin-
detalle_eleccion?handle=10221.1/63196&perio-                 gularidades nacionales de un fenómeno global, Ma-
do=1973-1990 [Consultado el 5 de abril de 2020].             drid, Fondo de Cultura Económica, 2018, pp. 9-20; y
Como resultado de este proceso se convocó a elec-            Molinero, Carmé e Ysas, Peré, “Introducción”, en Mo-
ciones presidenciales para diciembre de 1989. En esa         linero, Carmé e Ysas, Peré (eds.), Transiciones. Estu-
oportunidad resultó electo Presidente de la República        dios sobre Europa del sur y América Latina, Madrid,
el abogado demócrata cristiano, Patricio Aylwin Azo-         Los Libros de la Catarata, 2019, pp. 7-14.
car, con un 55,17% de los votos, en representación de        30
                                                                Ottone, Ernesto y Pizarro, Crisóstomo, Osadía de la
la Concertación de Partidos por la Democracia. Dispo-        prudencia. Un nuevo sentido del progreso, Santiago
nible en: https://historico.servel.cl/SitioHistorico/in-     de Chile, Fondo de Cultura Económica, 2003, pp. 155-
dex1989_pres.htm [Consultado el 5 de abril de 2020].         162.
29
   La transición chilena ha sido ampliamente analiza-        31
                                                                Schmidt-Hebbel, Klaus, El crecimiento económico
da, siendo el enfoque comparativo uno de los más             de Chile. Santiago de Chile, Banco Central de Chile,
recientes. Al respecto ver, González, Carmen, “La lu-        2006, p. 7.
cha por la democracia. Proceso de transición desde           32
                                                                Larrañaga, Osvaldo, Política social en Chile durante
la perspectiva comparada”, en Ortiz, Manuel (coord.),        la transición a la democracia: 1990-1993, Santiago de
La transición se hizo en los pueblos. El caso de la pro-     Chile, ILADES / Georgetown University, 1994, p. 1.
vincia de Albacete, Madrid, Biblioteca Nueva, 2016,          33
                                                                Ministerio Secretaría General de la Presidencia de
pp. 143-177; Soto, Álvaro, “Sociedad civil versus éli-       Chile, Discurso del Presidente de la República Ricardo
tes. Las transiciones a la democracia en España y            Lagos Escobar, 21 de mayo de 2003.
© Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100                                                                   91
De la refundación dictatorial a la Transición democrática                                  Igor Goicovic Donoso

De esta manera, la denominada “política de los              litado a la vez que se consolidaba el economicis-
acuerdos”, garantizó la continuidad del modelo              mo como estrategia política37.
económico neoliberal, a la vez que intentaba
mitigar los efectos pauperizadores que la mis-              Por otro lado, en las periferias urbanas, las otrora
ma tenía sobre amplios sectores de la sociedad.             combativas organizaciones de pobladores, como
Efectivamente, las autoridades que asumieron la             la Coordinadora Metropolitana de Pobladores, la
conducción del país en 1990 optaron por ejecu-              Coordinadora de Organizaciones Populares o el
tar las orientaciones establecidas en el Consenso           Movimiento de Pobladores Dignidad, desapare-
de Washington (1989) y, en consecuencia, pro-               cieron a comienzos de la década de 1990. De la
fundizaron el modelo económico neoliberal he-               misma manera el giro político conservador expe-
redado de la dictadura, en la certeza que éste              rimentado por la Iglesia Católica, redujo el cam-
garantizaba un crecimiento sostenido de la eco-             po de acción social y político de las comunidades
nomía y que, por esta vía, era posible superar la           cristiana de base. Como consecuencia de todo
pobreza y las inequidades34. Se trataba, a juicio           esto las organizaciones poblacionales se frag-
de las autoridades y de los economistas, de pro-            mentaron, perdieron capacidad de vertebración,
fundizar el modelo de mercado, estimulando la               se desvincularon de las organizaciones políticas
reinversión productiva en el sector exportador,             y del Estado y se recluyeron en el asistencialismo
con énfasis en los productos con mayor valor                comunitario38.
agregado (industrialización). De esta manera se
                                                            A contrapelo de las condiciones de los más po-
podían mantener los indicadores de crecimiento
                                                            bres, la década de 1990 se convirtió en la etapa
y, a la vez, estimular el mercado laboral a objeto
                                                            de consolidación de los nuevos grupos económi-
de resolver las acuciantes necesidades de la po-
                                                            cos surgidos al calor de la política neoliberal de la
blación35.
                                                            dictadura. Grupos económicos como Luksic, An-
En paralelo, el debilitamiento de los movimien-             gelini, Paullman, Solari-Cuneo y Ponce Lerou, se
tos sociales y la reducción del volumen e in-               integraron al selecto equipo de conglomerados
tensidad de la acción colectiva contribuyó a la             empresariales que habían navegado y supera-
consolidación del modelo. Efectivamente, el mo-             do las turbulencias económicas de la década de
vimiento obrero, motor de los procesos de mo-               1980, como Matte, Said, Saieh, Sigdo Koopers o
vilización social y política hasta 1973, había sido         Yarur. La mayoría de estos grupos diversificaron y
duramente golpeado por la represión durante la              multiplicaron sus inversiones, instalándose en el
dictadura y con el Plan Laboral de 1979 se vio              sector minero, forestal, pesquero y agrícola, a la
reducido en su convocatoria y capacidad movi-               vez que controlaban la actividad manufacturera
lizadora36. No es extraño, por lo tanto, que con            más competitiva y el dinámico sector financie-
la llegada al poder de la Concertación el diseño            ro39.
no cambiara en lo fundamental, pero adquiriera,
                                                            Este proceso concentrador y expansivo estuvo
a través del llamado “Acuerdo Marco”, suscrito
                                                            acompañado de un discurso mediático, tanto en
por la patronal (Confederación de la Producción
                                                            Chile como en el exterior, que potenció la “mar-
y el Comercio) y la principal organización obrera
                                                            ca país”, destacando la originalidad y virtudes del
(Central Unitaria de Trabajadores), el carácter de
                                                            “milagro chileno”. Ello, en una sociedad crecien-
modelo compartido. A partir de este momento
                                                            temente despolitizada, inhibió la crítica y facilitó
el sindicalismo clasista se vio cada vez más debi-
                                                            la adscripción a un nacionalismo competitivo y
                                                            exitista. Para muchos, tanto en la administración
                                                            del Estado como en el entorno de los partidos de
34
   Fontaine, Juan, “Transición económica y política en      la Concertación, el nuevo régimen había cumpli-
Chile: 1970-1990”, Estudios Públicos, 50 (1993), pp.        do plenamente con sus objetivos. Se había pues-
273-275 y Ottone y Pizarro, Osadía de la prudencia…,
op. cit., pp. 63-103.                                       37
                                                                Araya, Rodrigo, “El Acuerdo Marco chileno: ¿Un
35
   Sunkel, Osvaldo, “La consolidación de la democra-        caso frustrado de pacto social?”, Tiempo Histórico, 2
cia y del desarrollo en Chile. Desafíos y tareas”, Estu-    (2011), pp. 43-63.
dios Públicos, 48 (1992), pp. 97-115.                       38
                                                               Iglesias, Mónica, “Saber y poder en la transición chi-
36
   Álvarez, Rolando, “El plan laboral y la negociación      lena: Los pobladores como campo de disputa políti-
colectiva: ¿Origen de un nuevo sindicalismo en Chile?       ca”, Revista de Historia, 23/2 (2016), pp. 65-94.
1979-1985”, Boletín del Instituto de Historia Argenti-      39
                                                               Centro de Estudios en Economía y Negocios (CEEN),
na y Americana “Dr. Emilio Ravignani”, 35/36 (2012),        Ranking de riqueza de grupos económicos, Santiago
pp. 92-115.                                                 de Chile, Universidad de Chile, 2012, p. 1.
92                                                                 © Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100
Igor Goicovic Donoso                                   De la refundación dictatorial a la Transición democrática

to fin al estado de emergencia, reinsertado a Chi-                  feccionar la democracia y eso exige algunas
le en la comunidad internacional, consolidado la                    reformas constitucionales”44.
política económica, restablecidas las confianzas
entre militares y civiles y alejado los fantasmas             No obstante, la imposibilidad de constituir una
del golpe de Estado. Para quienes acompañaron                 mayoría parlamentaria que permitiera imponer
a Patricio Aylwin en su gobierno se trataba de                un cambio de régimen condicionó tanto el rit-
despejar todo sentido de amenaza tanto para                   mo como la profundidad de los cambios consti-
empresarios como para militares y ese objetivo                tucionales y fortaleció, a su vez, la tendencia a
se había cumplido plenamente40.                               suscribir acuerdos con los herederos políticos
                                                              de la dictadura, tendencia que se vio reforzada
Con este mismo enfoque se pretendió profundi-                 por la formación de redes de poder a nivel del
zar la institucionalidad democrática y resolver los           Parlamento, articuladas en torno a mecanismos
problemas de violaciones a los derechos huma-                 y ámbitos de sociabilidad compartidos45. Efecti-
nos heredados de la dictadura41. Efectivamente,               vamente, en el mediano y largo plazo los parla-
los acuerdos suscritos entre 1985 y 1994 fueron               mentarios profesionalizaron los cargos públicos
tributarios de la Constitución Política impuesta              de representación popular, articulando redes de
por la dictadura en 1980, en consecuencia, la                 apoyo clientelar que se extendían en sus distri-
misma no sufrió transformaciones relevantes                   tos a través de los ayuntamientos, y que les per-
durante la transición temprana. Los cambios más               mitían ser reelegidos de manera sistemática. En
importantes de este ciclo fueron la derogación                esta misma línea de acción articulaban con sus
del artículo 8° de la Constitución Política, que              pares redes de negocios (empresas privadas e
declaraba como inconstitucionales a los partidos              instituciones educacionales y de salud), cama-
políticos rotulados como totalitarios o que adhe-             radería (clubes sociales) y de compadrazgo (vín-
rían a la lucha de clases. Esta derogación derivó             culos familiares), que facilitaban los encuentros,
de los acuerdos sancionados por la oposición y                negociaciones y suscripción de acuerdos46.
la dictadura en torno al plebiscito constitucional
de julio de 1989 y que se materializaron a tra-               En un sistema de esta naturaleza los militares se
vés de la ley N.° 18.825.42 Mientras que la ley N.°           reservaron el derecho a impugnar las decisiones
19.295, promulgada en 1991, sancionó el acuer-                políticas adoptadas por las autoridades democrá-
do entre gobierno y oposición en cuanto a redu-               ticas y, a ese efecto, se amparaban en el Consejo
cir el período presidencial de 8 a 6 años43.                  de Seguridad Nacional, un organismo creado por
                                                              la Constitución Política de 1980 y compuesto por
A pesar de la lentitud e insuficiencia de los cam-            los tres Comandantes en Jefe de las Fuerzas Ar-
bios constitucionales, el jefe de Estado sostenía,            madas, el general Director de la Policía de Cara-
a mediados de 1991, que la transición había dado              bineros, los Presidentes del Senado y de la Corte
paso a la democracia. Al respecto era enfático:               Suprema y el Presidente de la República. Entre
                                                              las principales funciones de este organismo des-
       “En Chile vivimos en democracia. Esta es               tacaban la de representar al Presidente de la Re-
       susceptible de perfeccionarse, sí, y una de            pública su opinión frente a algún hecho, acto o
       las tareas que tenemos por delante es per-             materia, que a su juicio atentaba gravemente en
                                                              contra de las bases de la institucionalidad o pu-

40
   Martorell, Francisco, “Transición. Los desafíos de la      44
                                                                 Martorell, Francisco, “¿Transición o democracia?
segunda fase”, Revista Análisis, 14 al 27 de octubre de       Las dudas de la política”, Revista Análisis, 12 al 18 de
1991, pp. 11-12.                                              agosto de 1991, pp. 5-7.
41
   Goicovic, Igor, “Tensiones y conflictos en el proceso      45
                                                                 Espinoza, Vicente, “Redes de poder y sociabilidad
de transición a la democracia en Chile (1988-2000)”,          en la élite política chilena. Los parlamentarios, 1990-
en González, Carmen (coord.), Transiciones políticas          2005”, Polis. Revista de la Universidad Bolivariana,
contemporáneas. Singularidades nacionales de un fe-           9/26 (2010), pp. 251-286.
nómeno global, Madrid, Fondo de Cultura Económi-              46
                                                                 Pérez, Aníbal, “Más allá de la excepcionalidad.
ca, 2018, pp. 232-236.                                        Clientelismo político en Chile: Debates, antecedentes
42
   Ministerio del Interior de Chile, Ley Nº 18.825, 17 de     históricos y algunos rasgos generales en el tiempo
agosto de 1989.                                               presente” en Cavarozzi et al (eds.), Itinerarios políti-
43
   Ministerio del Interior de Chile, Ley Nº 19.295, 22 de     cos contemporáneos en Argentina, Brasil, Chile y Uru-
febrero de 1994.                                              guay, Rosario, UNR Editora, 2017, pp. 161-182.
© Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100                                                                     93
De la refundación dictatorial a la Transición democrática                                  Igor Goicovic Donoso

diera comprometer la seguridad nacional47. Esta             mejorar la vida de las personas ni a eliminar los
función tutelar de los organismos militares se vio          símbolos de la dictadura. Su mayor logro, en con-
fortalecida con la Ley Orgánica Constitucional de           secuencia, quedaba reducido a “realizar algunos
las Fuerzas Armadas, promulgada el 22 de febre-             ritos” que hicieron la diferencia con la dictadura,
ro de 1990, que garantizaba la autonomía de los             como: La sobriedad en las festividades, el recur-
mandos de las instituciones castrenses, respecto            so a una publicidad moderna y estéticamente
del poder político democráticamente constitui-              llamativa y un homenaje muy emotivo a las víc-
do48. De esta manera los mandos de las institu-             timas de violaciones a los derechos humanos en
ciones armadas del Estado se reproducían a sí               el Estadio Nacional51. El “rito de lo posible”, en
mismos, controlaban la promoción de nuevas je-              última instancia, se transformó en el sello distin-
rarquías y ejercían control político sobre el des-          tivo de la transición temprana.
empeño de las autoridades civiles del Estado49.
                                                            3. EL DILEMA DE LA TRANSICIÓN: ENTRE LA
Quienes hasta mediados de la década de 1990                 HERENCIA DE LA DICTADURA Y EL DESAFÍO
consideraban que la posición del ex dictador era            ARMADO
débil y solo amparada por algunos mandos in-
condicionales, debieron cancelar su estrategia de           El problema más complejo que debió enfrentar
presión asumiendo gradualmente la inviabilidad              la transición temprana fue el de las violaciones
de la misma. Hacia 1993, después de dos ma-                 a los derechos humanos cometidas en dictadura
niobres de presión sobre la autoridades Civiles             y las demandas de verdad y justicia levantadas
(“Ejercicio de Enlace”, 1991 y “Boinazo”, 1993),            por las agrupaciones de familiares de víctimas de
una comisión militar compuesta por los genera-              la represión y representadas por el mundo po-
les Jorge Ballerino y Jaime Lepe, le impuso a las           lítico de la izquierda. La expectativa construida
autoridades gubernamentales un petitorio que                al interior de este sector era esclarecer rápida-
contemplaba la regularización de los bienes in-             mente el paradero de las personas que habían
muebles del Ejército, el retiro del proyecto de ley         sido detenidas y luego hechas desaparecer por
de enmiendas a la Ley Orgánica Constitucional               los organismos de seguridad del Estado y, ade-
de las Fuerzas Armadas y la paralización de las             más, someter a juicio y castigar a quienes apa-
investigaciones sobre causas de derechos huma-              recían como responsables directos de las deten-
nos, entre otros aspectos50. Si bien estas presio-          ciones, torturas y ejecuciones sumarias, como a
nes no pusieron en riesgo la recién conquistada             sus cómplices políticos en el aparato del Estado.
democracia, no es menos efectivo que genera-                No obstante, las orientaciones fundamentales
ron desconcierto y vacilación entre las autorida-           de las nuevas autoridades del Estado, en mate-
des del Estado y le demostraron al conjunto de              ria de derechos humanos eran muy diferentes.
la población que las instituciones armadas conti-           Las mismas fueron establecidas por el Presiden-
nuaban gozando de poder político e impunidad                te de la República, Patricio Aylwin Azocar, en la
de acción.                                                  ceremonia de celebración de su asunción como
                                                            jefe de gobierno, el 12 de marzo de 1990. En esa
No obstante, el balance de la gestión de Patricio           oportunidad Aylwin señaló que se avanzaría en
Aylwin, construido en su entorno más cercano,               el esclarecimiento de la verdad, pero que habría
fue positivo. Para la periodista de la Revista Hoy,         justicia solo “en la medida de lo posible”52. Se
Lucy Dávila, la administración democrática ha-              trataba, a juicio de uno de los principales opera-
bía sido prudente, ya que no se comprometió a               dores del gobierno, de hacer política con sentido
                                                            de realidad, limitando las expectativas (sueños)
47
   Disponible en: https://es.wikisource.org/wiki/Cons-      de la población y asumiendo los costos propios
tituci%C3%B3n_Pol%C3%ADtica_de_la_Rep%C3%-                  de la administración de los posible (realidad)53.
BAblica_de_Chile_de_1980_(texto_original) [Consul-
tado el 1 de abril de 2020].
48
   Ministerio de Defensa Nacional de Chile, Ley Nº
18.949, 22 de febrero de 1990.                              51
                                                               Dávila, Lucy, “La llegada del heredero”, Revista Hoy,
49
   Fuentes, Claudio, La transición de los militares, San-   14 al 20 de marzo de 1994, p. 18.
tiago de Chile, LOM Ediciones, 2006, pp. 38-51.             52
                                                               Aylwin, Patricio, La transición chilena. Discursos es-
50
   Otano, Rafael, Nueva crónica de la transición, San-      cogidos, 1990-1992, Santiago de Chile, Editorial An-
tiago de Chile, LOM Ediciones, 2006, pp. 359-376 y          drés Bello, 1992, pp. 20-21.
Cavallo, Ascanio, La historia oculta de la transición,      53
                                                               Correa, Enrique, La estrategia político institucional
Santiago de Chile, Editorial Grijalbo, 1999, pp. 202-       para la transición en Chile, Santiago de Chile, Ministe-
216.                                                        rio Secretaría General de Gobierno, 1994, p. 13.
94                                                                 © Historia Actual Online, 52 (2), 2020: 85-100
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