Imaginarios en conflicto: mente rica, vida pobre - Saber UCAB

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Imaginarios en conflicto:
mente rica, vida pobre
HUMBERTO JAIMES QUERO

La sociedad venezolana está despertando de una larga borrachera.
Se acabaron los sueños de riqueza fácil. La apuesta a la disposición de eternos
y abundantes recursos naturales se desinfló. Los discursos se oxidaron.
Una mentalidad más realista y menos fantasiosa habría significado menos
trauma y menos dolor.

H
        asta hace dos lustros, una gran parte de     LOS IMAGINARIOS
        los venezolanos pensaba que vivía en una     Las ciencias sociales incorporaron el término
        de las naciones más florecientes del         imaginario como una categoría que hace refe-
mundo y que su patria podría convertirse en el       rencia a las creencias de las personas en torno a
quinto país más próspero del planeta, apenas         un objeto o tema relacionado con sus vidas. De
superado por Dinamarca, Suecia, Canadá y             allí que usualmente haya sido asociado a sistema
Australia (Britto García, 2018: 51).                 de creencias, mentalidad y cosmovisión1. Ima-
   Sin embargo, la profundización de la crisis       ginario implica la elaboración y reproducción de
económica desde 2014 generó una percepción           ideas, conceptos y afectos a partir de la forma en
muy diferente, al punto que para economistas,        que las personas perciben e interpretan el mundo
historiadores y sociólogos Venezuela dejó de ser     presente, pasado y futuro.
definitivamente un país rico. El imaginario             El DRAE lo define como la “Imagen que un
social cambió de una manera drástica, ya             grupo social, un país o una época tienen de sí
empezó a apuntar hacia un signo contrario: el        mismos o de alguno de sus rasgos esenciales”.
país pobre, de escasas oportunidades. Esto ex-       También lo considera la “Imagen simbólica a
plica, entre otras cosas, la inmensa migración de    partir de la que se desarrolla una representación
venezolanos a otras latitudes, que en 2020           mental” (DRAE, 2020).
superó las 5 millones de almas y cuyo desenlace         Imaginario implica las construcciones men-
en el tiempo todavía es difícil de precisar.         tales que desarrollan las personas al interpretar
   Este conflicto en los imaginarios tiene una       y apropiarse del mundo. Constituye, también, un
enorme repercusión en los medios de comunica-        proceso natural en los seres humanos relacio-
ción y las redes sociales, donde suelen ventilarse   nado con su educación, la socialización que
los discursos que pretenden dirigir el pensa-        experimentan a diario, la información que
miento de las mayorías hacia una u otra direc-       reciben de diversas fuentes, procesan y com-
ción.                                                parten con sus semejantes, proceso que conduce       comunica ción 194
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AGENDA PÚBLICA          a generar un sistema de creencias compartido         derado por las personas como “algo natural”,
                        que al mismo tiempo facilidad la cohesión            cuando en el fondo sabemos que se forma a
                        social.                                              partir de procesos y estructuras que le dan sus-
                           La teoría sobre los imaginarios de Cornelius      tento. (Pintos, 1994). Se trata de representa-
                        Castoriadis ha tenido una gran aceptación en las     ciones colectivas que rigen los sistemas de iden-
                        ciencias sociales y otros ámbitos. Según este        tificación y de integración social. (Idem).
                        autor, el ser humano necesita darle significación        Como fenómeno, los imaginarios pueden ori-
                        a las instituciones, las relaciones y los modos de   ginarse a partir de unos datos concretos perci-
                        producción sobre los que se basa la sociedad. En     bidos por el ser humano, los cuales al ser proce-
                        este sentido, los imaginarios constituyen las sig-   sados pueden dar origen a creencias. Unos veinte
                        nificaciones que da el hombre a todos esos           años atrás, por ejemplo, en los sectores más
                        aspectos de la vida en sociedad. En tales signifi-   empobrecidos de Caracas existía la idea de que
                        caciones encontramos creencias, valores y            en la urbe podían distinguirse espacios “peli-
                        normas que permiten mantener la cohesión, la         grosos” y espacios “no peligrosos” (Mejías,
                        cultura y la identidad en la sociedad (Anzaldúa      1992: 16 y ss.), elaboración lograda a partir de la
                        Arce, 2017: 3).                                      experiencia cotidiana en una ciudad compleja
                                                                             donde ciertamente existían zonas con altos
                                                                             índices de criminalidad, a las cuales era difícil
  En el imaginario social de países como Venezuela,
                                                                             acceder, e igualmente donde era difícil estar,
       existió y existe todavía la idea de vivir en una                      hacer vida.
      nación con cuantiosos recursos naturales, con                              Si bien la división del territorio obedecía a
    una abundante riqueza. Es lo que autores como                            datos “objetivos”, concretos, al mismo tiempo
                                                                             constituía una simplificación un tanto arbitraria.
           Axel Capriles denominan “psicología de la                         Esto no debe sorprendernos. A menudo los ima-
      abundancia”, fenómeno que, sin embargo, ha                             ginarios implican procesos de distorsión, mag-
    sido seriamente afectado por la dramática crisis                         nificación y tergiversación de la realidad. De allí
                                                                             que pensar que Caracas toda es un espacio “peli-
               económica de principios del siglo XXI.
                                                                             groso” o simplemente una “ciudad peligrosa”,
                                                                             implica un proceso de simplificación en el cual
                           Como la sociedad está en permanente trans-        se discrimina aquellos escenarios donde tal vez
                        formación, dice Castoriadis, las personas suelen     no existe tal peligrosidad.
                        crear nuevos imaginarios que sustituyen a los            En América Latina existen poderosos imagi-
                        que entran en desuso. Estas novedades buscan         narios relacionados con la historia, los mitos, las
                        organizar o reorganizar nuevamente la vida. De       leyendas, las religiones y la cultura de las socie-
                        hecho, para este autor existe el imaginario social   dades, procesos a los que no escapan las expe-
                        radical, que es la capacidad de la sociedad para     riencias, esperanzas, frustraciones y traumas de
                        la autocreación, la capacidad “instituyente”, es     la población. En algunos países como Colombia,
                        decir, para crear e instaurar nuevos imaginarios,    Brasil y Venezuela, por ejemplo, existe la idea de
                        y existe el imaginario social efectivo, que          vivir en naciones de abundantes (y eternas)
                        corresponde a lo que ha sido instituido. Todos       riquezas naturales. Hace unos decenios, las
                        estos procesos responden tanto a la psique de        elites sociales y políticas de Brasil concebían
                        cada persona como a la incidencia del orden his-     este país como un “gigante”. Tales simplifica-
                        tórico-social. Pero, no existe un determinismo       ciones se basaban no solo en el extenso territorio
                        al respecto, más bien hay espacio para que haya      de la nación, dato evidente e ineludible, sino en
                        un elemento de azar, un no sé qué. (Idem).           el pasado imperial. Pero, las sucesivas crisis
                           Por su parte, José Luis-Pintos destaca que los    económicas y la creciente pobreza minaron ese
                        imaginarios son creencias básicas de los indivi-     imaginario, de modo que avanzado el siglo XX,
                        duos interrelacionadas, las cuales dan cuerpo a      Brasil comenzó a ser percibido como un “gigante
    comunica ción 194   un sistema social y responden a un orden consi-      con pies de barro”, o como un país pobre típica-
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mente tercermundista, con pobreza por doquier.          El petróleo ha irrumpido en medio de la existencia        AGENDA PÚBLICA
La dimensión imperial quedó hecha añicos.               de una nación atrasada, pobre y débil. Esa irrup-
   En el imaginario social de países como Vene-         ción unilateral de riqueza ha desarticulado la exis-
zuela, existió y existe todavía la idea de vivir en     tencia venezolana. La ha desarticulado y cambiado
una nación con cuantiosos recursos naturales,           de mil formas. Pero entre sus más inquietantes con-
con una abundante riqueza. Es lo que autores            secuencias están dos: ha hecho imposible el regreso
como Axel Capriles denominan “psicología de             a lo que antes éramos; y no ha creado las posibili-
la abundancia”, fenómeno que, sin embargo, ha           dades de que continuemos siendo lo que ahora
sido seriamente afectado por la dramática crisis        somos. (Uslar Pietri, 1949/2001: 302).
económica de principios del siglo XXI. Tal ha
                                                         Para Uslar Pietri había dos países que cohabi-
sido el impacto de la crisis, que este imaginario
                                                      taban en un mismo territorio, pero que eran dis-
parece cosa del pasado en un buen tajo de la
                                                      tintos entre sí. Y en ese espacio había “Una
población.
                                                      minoría que vive como en el Nueva York del
                                                      siglo XX, y una mayoría que sigue viviendo
GÉNESIS DE LA PSICOLOGÍA
                                                      como en el Borburata del siglo XVI…”. (Ibid.)
DE LA ABUNDANCIA
                                                         El mismo autor comentaba:
A partir de los años veinte del siglo XX, Vene-
zuela comenzó a recibir importantes ingresos de         Esas dos Venezuela: la artificial y la real, la petro-
la actividad petrolera, hecho que tuvo una              lera y la agropecuaria, la moderna y la tradicional,
inmensa repercusión en la economía, en los              la rica y la pobre, la fingida y la verdadera, la tran-
aspectos de la vida cotidiana y en la formación         sitoria y la permanente, son la manifestación del
de un imaginario de riqueza, de país rico, pen-         grado extremo de desigualdad económica y social
samiento que se profundizará unas décadas des-          a que ha llevado a Venezuela la expansión súbita,
pués, especialmente en los años setenta, cuando         sin control y sin dirección de la riqueza petrolera.
surge lo que algunos autores califican como             (Ibid.)
Estado rico, o Estado mágico, que distribuye la
                                                         Con la administración de la riqueza petrolera
nueva riqueza, el petróleo, y de este modo incide
                                                      prácticamente Venezuela dio un salto cualitativo
en la mentalidad de la población.
                                                      y cuantitativo al siglo XX, en diversos ámbitos de
   Esta percepción constituyó un profundo con-
                                                      la vida: la población dejó de trasladarse en
traste respecto al país pobre de finales del siglo
                                                      caballo y mula, comenzó a hacerlo en auto-
XIX y los primeros lustros del siguiente, que
                                                      móvil; la gente dejó de lavar su ropa en ríos y
vivía de la exportación de café, rubro que no
                                                      quebradas, comenzó a hacerlo en lavadoras eléc-
garantizaba ingresos cuantiosos y estaba some-
                                                      tricas; las mujeres dejaron de cocinar en fogones
tido a permanentes ciclos de alzas y bajas de los
                                                      y fogatas, empezaron a usar cocinas a gas,
precios en el mercado internacional; hablamos
                                                      incluso eléctricas. La población que vivía en el
de una nación sometida a permanente inestabi-
                                                      campo, en situación de pobreza, marginalidad y
lidad política, donde eran visibles enfermedades
                                                      sin servicios, se movilizó hacia los centros de
como el paludismo, y donde la precariedad era
                                                      explotación petrolera como Cabimas, estado
generalizada; un país muy bien reflejado en
                                                      Zulia, con la esperanza de recibir los beneficios
obras como Casas Muertas 2.
                                                      de la riqueza generada por los hidrocarburos.
   La precariedad que caracterizaba a aquella
                                                      Así, poco a poco, fue surgiendo en la población
nación cambió drásticamente cuando la indus-
                                                      la idea de que era factible acceder a la riqueza.
tria petrolera comenzó a generar una importante
                                                         Sin embargo, esto no era un fenómeno com-
riqueza a partir de las exportaciones, tanto así
                                                      pletamente nuevo, pues en el pasado colonial ya
que Arturo Uslar Pietri (1949) hace referencia a
                                                      había existido un imaginario de riqueza en torno
una Venezuela artificial (rica, petrolera) que se
                                                      a la explotación de perlas, oro y otras piedras
levanta sobre una Venezuela real (pobre, agro-
                                                      preciosas. Recordemos la actividad minera
pecuaria). Así las describe:
                                                      desarrollada en el siglo XVI, así como la bús-              comunica ción 194
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AGENDA PÚBLICA          queda del oro estimulada por la aparición del        78). Y quizás ese Dorado será “redescubierto”
                        mito de El Dorado, que hacía referencia a la exis-   una vez más con la instauración del Arco Minero
                        tencia de una ciudad brillante donde era posible     (2016), proyecto que nuevamente planteará la
                        enriquecerse. Este mito suscitó numerosas expe-      explotación del oro a gran escala como alterna-
                        diciones de hombres deseosos de apropiarse de        tiva para superar la crisis económica y la caída
                        la célebre piedra adorada por el Homo sapiens        de la producción en materia de hidrocarburos.
                        desde tiempos remotos.                                  Este imaginario de riqueza y abundancia en
                                                                             gran medida se debe a varios factores que desde
              Durante el siglo XX y parte del presente,                      el siglo XVI influyeron en la conformación de la
                                                                             sociedad y el Estado, proceso en el cual encon-
         en los sucesivos planes de la Nación siempre                        tramos elementos importantes a tomar en
          se destacó la condición de Venezuela como                          cuenta: en primer lugar, el mercantilismo, doc-
          país rico, fórmula derivada de la existencia                       trina que señala como prioridad precisamente la
                                                                             necesidad de acumular riquezas; en segundo
                        de valiosos recursos naturales.
                                                                             lugar, el Estado minero, propietario de las minas,
                                                                             que vive de la explotación de recursos mineros y
                           Con el paso de tiempo, el oro perdió impor-       no de otras actividades; en tercer lugar, el modelo
                        tancia como actividad económica, fue despla-         económico estatista, que implica una alta parti-
                        zado por el cultivo del café, el cacao y la gana-    cipación del Estado en la actividad económica,
                        dería. No obstante, avanzado el siglo XIX            con la cual desplaza y minimiza a la iniciativa
                        irrumpió nuevamente como actividad econó-            privada. De hecho, el Estado ha sido el gran pro-
                        mica de interés, caso de las minas de El Callao      pietario de las riquezas del subsuelo, condición
                        (1879-1884). Tiempo después se desarrollarán         heredada de la legislación colonial; en cuarto
                        otros proyectos como las minas de El Pao (1925)      lugar, está el populismo, corriente que implica
                        y el Cerro Bolívar (1948), que abordaron tanto el    una visión de la economía en la cual privan,
                        oro como el hierro, la bauxita y el aluminio.        entre otras cosas, controles de precio, subsidios
                        Estas iniciativas constituyeron importantes          oficiales, políticas y expansión de la actividad
                        esfuerzos por impulsar la minería, actividad que     económica del Estado para atender los requeri-
                        nunca desapareció del escenario venezolano y         mientos de la población, incluso de manera gra-
                        mantuvo su incidencia en el pensamiento de la        tuita en muchos casos, a partir de la disposición
                        población y los gobernantes.                         de cuantiosos recursos que son del Estado o son
                           Un texto de 1952, por ejemplo, menciona la        administrados y distribuidos por este; en quinto
                        riqueza y “bonanza ilimitada” que estaba expe-       lugar, y como consecuencia de todo lo anterior,
                        rimentando el país, la cual, comenta, podría         el populismo, corriente que propone distribuir
                        continuar sin el petróleo, gracias a la producción   una riqueza “a la que tiene derecho el pueblo”,
                        de hierro en el Cerro Bolívar. Este documento        independientemente de que exista o no.
                        señala que “[…] las perspectivas son inmensas”          Durante el siglo XX y parte del presente, en
                        y apunta: “También en Ciudad Bolívar y la Gua-       los sucesivos planes de la Nación siempre se
                        yana venezolana hay grandes minas de oro y           destacó la condición de Venezuela como país
                        diamantes. Y todo eso traerá al país una bonanza     rico, fórmula derivada de la existencia de
                        ilimitada 3”. (Góngora, 1953, Parte II: 48).         valiosos recursos naturales. Estas ideas también
                           A propósito de la continuidad de la actividad     se encuentran en los discursos de dirigentes
                        minera y su impacto en la mentalidad de la           políticos, en opiniones de economistas, en cam-
                        población, Axel Capriles ha planteado que            pañas institucionales, incluso en textos de geo-
                        Venezuela experimentó una suerte de fusión del       grafía de bachillerato, obras ajustadas a los pro-
                        mito de El Dorado con la industria petrolera:        gramas oficiales. Un texto de Geografía de
                        “[…] el Dorado fue encontrado en la profun-          Venezuela de 9no grado (1986), expresaba estas
                        didad de los pozos petroleros”. (Capriles, 2014:     ideas:
    comunica ción 194
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  Además de la riqueza petrolera, Venezuela posee        GÉNESIS DE UN CONFLICTO                             AGENDA PÚBLICA
  diversos minerales: hierro, bauxita, níquel, oro,      Este imaginario de país rico tuvo su primer gran
  carbón, diamantes, plomo, manganeso, fosfatos,         momento durante los años setenta del siglo
  azufre, mercurio, talco, cromo, titanio, minerales     pasado, período mejor conocido la Venezuela
  radiactivos. Algunos de los últimos anotados apenas    saudita, metáfora de una nación que gozaba de
  están en estudio por parte del Ministerio de Energía   una renta petrolera extraordinaria, la cual llevó
  y Minas.                                               al Estado a una política de cuantiosos gastos. El
                                                         populismo estaba en su apogeo. El Estado
  No toda la riqueza minera del subsuelo está en
                                                         invirtió proyectos de gran envergadura como las
  explotación. Actualmente los más explotados con
                                                         empresas básicas de Guayana, en políticas de
  el petróleo y el hierro, también se explotan el
                                                         “pleno empleo” y subsidios por doquier. Se aspi-
  carbón…los diamantes, los fosfatos y el yeso, así
                                                         raba a construir una Gran Venezuela.
  como algunos otros en menor escala…

  La significativa importancia de los recursos del
                                                             Sin embargo, los dos primeros decenios del siglo
  subsuelo venezolano ha hecho suponer a muchos
  especialistas, que cuando éstos sean mejor eva-            XXI parecen mostrar una realidad mucho más
  luados, pudieran convertir a Venezuela en uno de           dura, menos optimista. El también denominado
  los países mineros más importantes del mundo y             “excremento del diablo” no da para tanto, y
  aportar posibilidades para un importante desarrollo
  económico4. (Bracho, 1986: 166).
                                                             en la medida que sea sustituido por otras energías,
                                                             perderá la importancia económica que llegó
   Desde hace décadas igualmente se insistió en
que el “futuro” del país estaba en ese líquido               a tener en el siglo XX.
oleaginoso e inflamable, particularmente en la
Faja Petrolífera del Orinoco, espacio que alberga           A la par se desarrollaron proyectos urbanos
un inmenso reservorio de hidrocarburos cuanti-           en el mejor estilo estadounidense, con grandes
ficado en más de 300 mil millones de barriles,           edificios tipo Parque Central, espacios de
los cuales alimentaban grandes expectativas de           shopping como el Centro Comercial Ciudad
progreso y riqueza.                                      Tamanaco (CCCT), la masiva importación de
   La Faja Petrolífera del Orinoco es la principal       vehículos, electrodomésticos y otros bienes
esperanza del futuro (se trata de una acumula-           propios del estilo
ción de petróleos pesados en el área que va desde           El escritor José Ignacio Cabrujas resumió
el Delta del Orinoco hasta el Oeste del Estado           muy bien esa mentalidad que explotó en los años
Guárico). Los proyectos para explorar y explotar         70, al comentar que con la presidencia de Carlos
dicha faja exigen el máximo cuidado científico,          Andrés Pérez “[…] encontramos la frase que nos
tanto en la solución de costosas tecnologías             definía. Estábamos construyendo La Gran Vene-
– puesto que se trata de petróleo pesado– como           zuela. Pérez no era un Presidente. Era un mago.
en la previsión del equilibrio ambiental de las          Un mago capaz de dispararnos hacia una aluci-
riberas de Orinoco y de los cambios que su               nación que dejaba pequeñas lagunas. Pérez
explotación pudiera determinar sobre nuestra             enrumbó el acto del poder hacia la fantasía”.
población. (1986: 171)                                   (Cabrujas, 2009: 55).
   Sin embargo, los dos primeros decenios del               Pero, cuando comenzó el declive de la prospe-
siglo XXI parecen mostrar una realidad mucho             ridad, que tuvo su hito histórico en el célebre
más dura, menos optimista. El también denomi-            Viernes negro (1983), las perspectivas comen-
nado “excremento del diablo” no da para tanto,           zaron a cambiar. En El caso Venezuela: una ilu-
y en la medida que sea sustituido por otras ener-        sión de armonía, cuya primera edición fue
gías, perderá la importancia económica que               publicada en 1984, diversos autores asomaron
llegó a tener en el siglo XX.                            claras advertencias sobre el fin del modelo ren-
                                                                                                             comunica ción 194
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AGENDA PÚBLICA          tista y de las vacas gordas, es decir, anunciaron     ricano desde Venezuela a Argentina (El Gaso-
                        el posible acabose del imaginario de país rico.       ducto del Sur), construir docenas de refinerías en
                           La escritora Elisa Lerner anotó que “[…] el        varios países, dar impulso a un Banco del Sur que
                        sueño petrolero ha terminado. Estamos a punto         se encargaría de financiar proyectos en la región,
                        de caer de la colina millonaria donde, tan falaz-     multiplicar la construcción de viviendas, entre
                        mente, nos elevamos”. Lerner se preguntaba qué        otros proyectos que acarreaban un financia-
                        futuro tendrá la democracia sin la riqueza, y         miento millonario. Todo ello fue dado a conocer
                        planteaba una cuestión elemental: “El compa-          a través de las numerosas cadenas de radio y tele-
                        triota que no supo organizarse dentro de la           visión que hacía el lenguaraz gobernante. Pero,
                        riqueza, ¿sabrá organizarse en la pobreza?”. Las      los académicos no dudaron en que tales promesas
                        cirugías plásticas y vestirse de jogging eran prác-   eran solo proyectos “faraónicos” e “irrealiza-
                        ticas que, a su entender, iban a desaparecer con el   bles”. Y, de hecho, nunca se realizaron.
                        fin del sueño petrolero. (Naím, 1999: 2-18).             Este abanico de ofertas “faraónicas” no era
                           La crisis económica se agravó hacia 1989, con      fruto del azar, sino de esa vieja mentalidad de
                        el célebre Caracazo. Y poco tiempo después            riqueza, de un poderoso síndrome que Cabrujas
                        reventó una profunda crisis financiera (1994). A      calificó como “la cultura del milagro”. Según
                        pesar de las advertencias de expertos y una           Cabrujas “[…] el petróleo es fantástico y por lo
                        buena camada de intelectuales, el modelo eco-         tanto induce a la ilusión de un milagro. Creó en
                        nómico centrado en el “aceite de piedra”, el          la práctica la ‘cultura del milagro’” (Cabrujas,
                        populismo y los otros elementos ya mencio-            2009: 54). Esta “cultura del milagro” nació,
                        nados, no fue modificado, como tampoco fue            según el dramaturgo, cuando el mené sustituyó
                        modificado el imaginario de país rico.                a la agricultura como actividad económica prin-
                           Según Carmen de Balbás, especialista en            cipal, proceso que condujo a un cambio drástico
                        opinión pública y estudios del comportamiento,        en el comportamiento del Estado (y de los vene-
                        a pesar de la crisis financiera de 1994, cuyas        zolanos): “El Estado adquirió rápidamente un
                        secuelas se sintieron en los años posteriores, en     matiz ‘providencial’. Pasó de un desarrollo lento,
                        líneas generales la población venezolana se           tan lento como todo lo que tiene que ver con la
                        negó a aceptar la nueva situación en términos de      agricultura, a un desarrollo ‘milagroso’ y espec-
                        consumo. Para la investigadora el problema era        tacular”. (Ibidem: 53).
                        sencillo: “[…] el venezolano no quiere aceptar           Recordemos que cuando Venezuela se con-
                        que nos hemos transformado como otros países          virtió en país petrolero, el Estado efectivamente
                        de América Latina. Durante la bonanza petro-          comenzó a disponer rápidamente de recursos
                        lera, nos acostumbramos a un alto consumo,            abundantes, lo que le permitió acometer planes
                        ahora nuestro consumo es bajo”. (Jaimes Quero,        con una velocidad y un alcance no vistos en el
                        1997: 3).                                             pasado. Durante varios decenios, Venezuela
                           Durante la administración de Hugo Chávez           llegó a ser el país con el proceso de urbanización
                        (1999-2012) volverá a resurgir el imaginario de       más rápido del mundo.
                        riqueza que existió desde el primer gobierno de          La bonanza económica durante los gobiernos
                        Pérez, gracias al crecimiento de los ingresos por     de Chávez fue de tal magnitud que, en una
                        exportación de hidrocarburos. Recordemos que          célebre alocución pública del 5 de enero de 2009,
                        el precio de un barril de oro negro llegó a superar   el propio mandatario afirmó que si el precio del
                        los cien dólares. No en vano, el escritor Barrera     petróleo llegaba a cero “Venezuela no entra en
                        Tyzka apuntó que: “La imagen de Chávez era            crisis”. Pero a partir de 2014 se agudizó la crisis
                        una promesa de prosperidad, él resucitó ese           en la denominada “gallinita de los huevos de
                        sueño de la riqueza” (EFE, 2016).                     oro”: cayeron los ingresos por exportaciones,
                           En efecto, Chávez hizo ofertas de toda especie     debido a una situación del mercado interna-
                        amparadas tanto en los altos precios del petróleo     cional; la producción comenzó a declinar, al
                        como en su propia visión (épica) de la historia.      punto de llegar a menos de 900 mil barriles dia-
    comunica ción 194   Propuso levantar un inmenso gasoducto surame-         rios en 2020, niveles que existían para los años
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                                                            minerales e, inclusive, minerales que se desconocía
cuarenta del siglo XX. Y esto, por supuesto,                                                                            AGENDA PÚBLICA
                                                            su existencia, los indicadores socioeconómicos no
comenzó a afectar el pensamiento de millones
                                                            son los que debieran.
de almas.
                                                            No obstante, implementando las políticas ade-
CAMBIOS EN EL IMAGINARIO                                    cuadas, tenemos el potencial de salir de la crisis en
Como síntoma revelador de la crisis económica               un período relativamente corto. (Castrillo, 2013:
se produjo una inmensa diáspora de venezolanos              196)
hacia Estados Unidos, España, Argentina y
                                                            El imaginario de riqueza sostenido durante
otros países. En 2019, este éxodo ya superaba los
                                                         varios decenios tanto en los textos escolares
4.5 millones de personas, la mayor en el mundo
                                                         como fuera de estos, puede ser visto como un
desde mediados del siglo XX. Este desplaza-
                                                         signo de decadencia del sistema educativo,
miento forzado de seres humanos reveló un
                                                         porque no fue capaz de prever los efectos nocivos
cambio importante: el colapso del imaginario de
                                                         de vivir de la fantasía.
país rico, el ocaso de una “Tierra de Gracia”
                                                            Aquí recordamos a Leonardo Carvajal y su
donde hay pocas oportunidades de vida, de
                                                         libro: Nuestra Decadencia Educativa. Memo-
movilidad social, de enriquecerse.
                                                         rias de 44 jóvenes venezolanos (2017). Según
   Barrera Tyszka afirma que para el venezolano
                                                         este autor, el declive del sistema educativo está
este imaginario de riqueza era parte de su “iden-
                                                         en que no fue capaz de lograr muchos de los pro-
tidad histórica” pero al desmoronarse tal ri-
                                                         pósitos que se trazó, y en que sus egresados pre-
queza, se vio obligado a repensar las cosas. El
                                                         sentan muchas debilidades, entre ellas el desco-
escritor va más a fondo, argumenta que la
                                                         nocimiento de la “dimensión histórica” del país
pobreza es “[…] una cosa inédita en nuestro ima-
                                                         (Carvajal, 2017). A nuestro entender el imagi-
ginario”; estas “[…] imágenes de hambre, de
                                                         nario de riqueza también forma parte de esa
gente pasando necesidad” constituyen un pro-
                                                         decadencia.
fundo contraste con la bonanza que se vivió
                                                            El imaginario de riqueza supuso la disposi-
unos meses atrás, en el pasado; “[…] una crisis
                                                         ción de abundantes recursos que garantizaban
económica como la actual pone a la gente a
                                                         una ilusión de progreso, pero en lugar de ello
pensar en qué pasó, ¿fue todo una gran borra-
                                                         debió procurarse cultivar una mentalidad más
chera en la que nos metió este hombre? (Chávez),
                                                         realista y menos fantasiosa.
porque estamos ahora en una resaca espantosa”.
(EFE, 2016).
   Tyzka comenta que este cambio de menta-
                                                             HUMBERTO JAIMES QUERO
lidad no es fácil de digerir: “Eso es una imagen             Profesor e investigador del Centro de
de nosotros mismos que los venezolanos                       Investigación de la Comunicación (CIC-UCAB)
tenemos que procesar y eso apenas está empe-                 Lic. Comunicación Social. Magíster Historia
zando a suceder. Es una pobreza que no cono-                 de las Américas.
cíamos […]” (Ibid.).
   Algunos textos escolares (2014) ya advertían
la contradicción inherente a un país que contaba         REFERENCIAS
con una riqueza mineral importante pero que
presentaba indicadores socioeconómicos muy               Libros, revistas y ponencias
desalentadores.                                          ANZALDÚA ARCE , Raúl Enrique (2017): “Reflexiones sobre
                                                           la educación. Una mirada desde Cornelius Castoriadis”.
  Venezuela es un país afortunado al tener grandes         En: Congreso Nacional de Investigación Educativa
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                                                           trónica. Recuperado el 18 de febrero de 2021, en: https://
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  petróleo. Sin embargo, es una ironía que, a pesar      ÁVALOS, Ignacio (1984/1999): “Breve historia de la política
                                                           tecnológica venezolana (O una manera de saber por qué
  de conseguirse cada día más yacimientos de estos         Venezuela ha importado barredores a nieve y sistemas de      comunica ción 194
ÍNDICE
               34

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                          mento de la entrevista realizada por el equipo de la revista
                          Estado y Reforma: Trino Márquez, Luis García Mora,             Géneros de opinión en agencias de noticias,
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                          tiva. Memorias de 44 jóvenes venezolanos. Colección
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                                                                                           l&utm_campaign=Feed%3A+Prodavinci+%28Proda-
                          tung, abEdiciones.
                                                                                           vinci%29.
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                          Caracas: Ediciones IESA. Sexta Edición.
                        Observatorio Venezolano de Migración (2019): Horizontes
                                                                                         Notas
                          de la migración venezolana: retos para su inserción            1 El concepto fue propuesto originalmente por Cornelius
                          laboral en América Latina. Colección Ediciones Espe-             Castoriadis (1922-1997) como imaginario social, y des-
                          ciales. Caracas: Instituto de Investigaciones Económicas y       pués pasó a la psicología, los estudios culturales y de comu-
                          Sociales, Universidad Católica Andrés Bello.                     nicación. Su obra clave fue: La institución imaginaria de la
                        PÉREZ SCHAEL, María (1993): Petróleo, cultura y poder en           sociedad (1975).
                          Venezuela. Caracas: Monte Ávila Editores Latinoameri-          2 Esta célebre novela de Miguel Otero Silva fue representada
                          cana.                                                            en el teatro, en 2020, como ejercicio reflexivo respecto a la
                        PINTOS, José-Luis (1994): Los imaginarios sociales. La             crisis que experimenta el país y que, en opinión de escri-
                          nueva construcción de la realidad social. Recuperado en:         tores e intelectuales, significó un regreso a los niveles de
                          https://web.archive.org/web/20070603022231/http://web.           precariedad y pobreza pintados por Otero Silva.
                          usc.es/~jlpintos/articulos/imaginarios.htm                     3 Cursivas nuestras.
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                        SABINO, Carlos (1994): De cómo un Estado rico nos llevó a
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                          zuela. Selección y Notas Rafael Arraiz Lucca/ Edgardo
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