Noticias sobre el Coronavirus 11 de marzo de 2020
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Noticias sobre el Coronavirus
11 de marzo de 2020
Este documento muestra las directivas más recientes de la Arquidiócesis de Seattle con respecto al
coronavirus y los pasos que pueden tomar nuestras comunidades para prevenir su propagación.
Seguiremos actualizando estas directivas de acuerdo con las recomendaciones del Departamento
de Salud del Estado de Washington y de las autoridades locales para la salud.
Continuamos observando de cerca el progreso del coronavirus, el cual ahora, de acuerdo con la
Organización Mundial para la Salud, es una pandemia global. Las autoridades locales predicen una
propagación significativa si no intentamos reducirla— especialmente en nuestra región, que es
considerada como el epicentro.
Teniendo esto presente, el Arzobispo Etienne anunció que no habrá celebración pública de misa en
toda la Arquidiócesis de Seattle. Esta decisión se tomó teniendo en cuenta el bienestar de todos y del
pueblo de Dios que nos fue confiado— donde muchas personas están consideradas de alto riesgo y
vulnerables. Debemos hacer nuestra parte para reducir esta epidemia.
En el marco de esta situación, los pastores tomaran las decisiones relacionadas con la vida
parroquial. No queremos que la vida parroquial pare bruscamente; sin embargo, sería irresponsable
de nuestra parte reunir a grandes grupos de personas. En cambio, instamos a los pastores a pensar
acerca de las actividades que son necesarias y posponer las reuniones que no son esenciales—
teniendo en mente el bien común.
En vista de la directiva del Arzobispo, las personas deberían saber que están temporalmente
dispensadas de la obligación de asistir a misa dominical hasta que disminuya el peligro del
coronavirus y sean reanudadas. Esta directiva, sin embargo, no significa que las iglesias estarán
cerradas, sino que permanecerán abiertas para la oración en privado.
Por favor recuerden seguir todas las recomendaciones de las autoridades para la salud pública de
quedarse en casa si están enfermos, lavarse las manos con frecuencia, y practicar distanciamiento
social de seis pies dentro de la iglesia.
Durante este tiempo, los pastores estarán disponibles para emergencias pastorales, reuniones
privadas, unción de los enfermos, etc. Al final, queremos asegurar que estamos reduciendo la
propagación del coronavirus y protegiendo a los vulnerables de nuestra comunidad, al mismo
tiempo que atendemos a las necesidades de nuestros feligreses.Aparte de las directivas del arzobispo, hoy el superintendente para escuelas católicas anunció que
las escuelas católicas de la Arquidiócesis de Seattle seguirán las normas de cierre del distrito de
escuelas públicas de Seattle. A partir de la próxima semana, las escuelas católicas que se encuentran
dentro del área del distrito de escuelas públicas de Seattle permanecerán cerradas hasta el 30 de
marzo de 2020. La Oficina para Escuelas Públicas continúa siguiendo de cerca esta situación y
anticipa que otros distritos podrán cerrar sus escuelas en las próximas semanas.
Estos dos anuncios afectan en gran medida a nuestra comunidad. Las personas pasarán más tiempo
en casa ahora, muchas parroquias comenzarán a transmitir videos para proveer misas online. Este
también es un momento para que los católicos manifiesten, más que nunca, el amor de Dios. Aquí
les presentamos algunas ideas de cómo demostrar este amor:
• Extender un saludo a través de llamadas telefónicas a aquellos que están confinados en sus
casas y a los residentes de los hogares de ancianos para acompañarles en espíritu.
• Ofrecer oraciones por teléfono.
• Ofrecer ir al supermercado por otros que necesitan estar en casa.
• Nuestros hermanos sin hogar estarán pasando más hambre en este momento en que
restaurantes locales y compañías de catering comienzan a reducir su preparación de comidas.
Podemos incrementar donativos a los bancos de alimentos locales, Servicios Católicos para la
Comunidad, y San Vicente de Paul.
• Considerar donar sangre o plasma.
• Comprar tarjetas para combustible para su hogar de ancianos local o para los trabajadores de
la salud en hospitales y deposítenlas en la recepción como agradecimiento de parte de la
iglesia católica local.
Bautismo
Se solicita a todas las parroquias de la Arquidiócesis de Seattle que observen algunas normas
prácticas temporales sobre el sacramento del bautismo hasta que se contenga el coronavirus. En
este momento, todavía se pueden realizar bautismos según la urgencia pastoral. Sin embargo,
para limitar cualquier posible propagación del virus a una población vulnerable, recomendamos
solo pequeños bautismos familiares privados. Recomendamos no realizar ningún bautismo de
"inmersión". En cambio, que se use agua fresca que haya sido bendecida para el Bautismo e
inmediatamente drenarla.
Confesión
Durante la Cuaresma, deseamos especialmente ofrecer a las personas la oportunidad del sacramento
de la confesión. Es importante proveer este sacramento, que es una manera importante de hacer
ministerio de sanación y del amor misericordioso de Dios. Aunque estemos en un estado de alerta
intenso, las condiciones aún no se dan para una absolución general. Por esto, continuaremos
ofreciendo el sacramento de la confesión solo a pedido de cada persona.
Comprendemos las inquietudes acerca del espacio pequeño del confesionario. Para ayudar a
minimizar el riesgo de exposición, recomendamos tomar las siguientes medidas si alguien está
preocupado acerca de una posible transmisión del coronavirus:• Mudarse fuera del confesionario si es que es un lugar pequeño y proveer el sacramento de la
confesión en una sala más grande donde se pueda tener una conversación confidencial.
• Si es posible, recomendamos el uso de algo que bloquee el flujo de aire entre el sacerdote y el
penitente. El penitente debe siempre tener la opción de confesarse anónimamente.
• Asegurarse de que haya al menos 6 pies de distancia entre el sacerdote y el penitente.
• Recomendamos el uso de una silla sin apoyabrazos, o que se limpien los apoyabrazos con un
desinfectante. Tal vez se deba considerar proveer este sacramento de tal manera que el
penitente se mantenga de pie para asegurar la apropiada distancia y minimizar las
superficies que se tocan.
Ministerio Pastoral para las personas confinadas al hogar, hospitalizadas o en cuarentena
Jesús nos llama a estar lo más presente posible para las personas en estas circunstancias a fin de
que no se sientan abandonadas o aisladas en este momento de necesidad. Deben conocer el amor
de Dios a través de nosotros. Recordemos las palabras bien claras de Jesús cuando nos enseñó las
obras de misericordia corporales:
“Porque tuve hambre, y me disteis de comer; estuve en la cárcel, y
vinisteis a mí”. Mateo 25, 26
Nuestra fe requiere que continuemos el ministerio de Nuestro Señor Jesús –incluyendo la unción de
enfermos – asegurándonos de seguir todos los protocolos apropiados de los hospitales (consultar
con el sector de enfermería antes de ingresar a la habitación de los pacientes si tienen alguna
pregunta). Además, continuaremos brindando cuidado pastoral a las personas que están confinadas
al hogar o en cuarentena. Sin embargo, hay ciertas consideraciones a tener en cuenta:
• Cualquier ministro que no desee realizar el trabajo de este ministerio –por cualquier razón-
podrá ser eximido contactando con su supervisor. El supervisor (Oficina del Vicario para el
Clero, pastor o líder parroquial) debe asegurarse de que otra persona provea de cuidado
pastoral a personas confinadas al hogar, hospitalizadas o en cuarentena. Este ministerio no
debe cesar sin notificación de superiores y de un seguimiento apropiado.
• Es particularmente útil para quienes visitan a personas confinadas al hogar que llamen por
teléfono anticipadamente para asegurarse de que las personas todavía aceptan visitas. La
comunicación diligente ayudará a confirmar que las personas y sus familias desean recibir
visitas de ese tipo.
• Lo más importante es que todos los que hacen visitas a personas confinadas al hogar tomen
las más estrictas precauciones de higiene, incluyendo un excelente lavado de manos, al
realizar su ministerio.
• Si se están preparando para visitar a alguien que tiene síntomas –o si le llaman para ungir a
una persona que tiene el coronavirus en situación de confinamiento en su hogar – se deben
seguir las siguientes normas del Departamento de Salud Pública del Condado de King para
evitar la cuarentena:
Utilizar barbijo y guantes
Lavarse las manos y utilizar gel desinfectante según lo indicado por los protocolos. No quedarse más tiempo del necesario en la habitación (menos de 15 minutos)
Si es posible, utilizar una bata de hospital encima de sus ropas de calle.
Si se ungirá a alguien que tiene el coronavirus, por favor contactar con Nick
Schoen, quien les ayudará a conseguir un Kit de Unción (ver detalles más abajo).
• Cualquier ministro que haya tenido contacto cercano y sin protección con alguien que tiene el
coronavirus (por no seguir las reglas mencionadas más arriba) debe ponerse en cuarentena por
dos semanas y seguir las directivas publicadas por el Departamento de Salud del estado:
https://www.doh.wa.gov/Emergencies/Coronavirus
• Los ministros podrán encontrarse en situaciones donde no se les permite el acceso a
instalaciones – lo cual está sucediendo en varios hogares de ancianos. En esta situación,
recomendamos llamar a las personas directamente y compartir una oración con ellos:
Creo, Jesús mío, que estás real y verdaderamente en el cielo
y en el Santísimo Sacramento del Altar.
Os amo sobre todas las cosas y deseo vivamente recibirte
dentro de mi alma, pero no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente,
venid al menos espiritualmente a mi corazón.
Y como si ya os hubiese recibido, os abrazo y me uno del todo a Ti.
Señor, no permitas que jamás me aparte de Ti. Amén
Este anuncio es para aquellos sacerdotes que pueden ser llamados a ofrecer la unción de los
enfermos a cualquier persona confinada al hogar que manifieste síntomas posibles del coronavirus.
Por favor léanlo cuidadosamente.
Hemos recibido un buen consejo del departamento de salud pública del condado de
King con respecto a los pasos a seguir para proveer del sacramento de la Unción de
enfermos a personas que tienen el COVID-19. Sin embargo, tenemos insumos limitados
del equipo de protección personal que se recomienda. Por esto, estamos seleccionando a
algunos sacerdotes de cada región que estarán designados para proveer de este
sacramento a las personas en situación de confinamiento. Si están interesados, por favor
contactar con Nick Schoen, quien estará brindando capacitación sobre el uso apropiado
del equipo de protección personal que se incluye en el “Kit de Unción”. A medida que
recibamos más equipos, vamos a extender la lista de sacerdotes. Sin embargo, estamos
limitando esta tarea a sacerdotes menores de 60 años en este momento.
Favor observar que este protocolo específico para unción solamente se aplica a personas
confinadas a sus hogares que muestran signos de coronavirus o que dieron positivo en el
test. Los hospitales, hogares de ancianos y hogares para adultos ya tienen un proceso
claro y efectivo en funcionamiento para que los sacerdotes no tengan que ponerse en
cuarentena después de ungir a alguien con el coronavirus en un hospital.En caso de enfermedad de sacerdotes, diáconos y personal de la parroquia
Cualquier persona que se sienta enferma debe auto aislarse e inmediatamente llamar a su
proveedor de salud. Las preguntas esenciales que deberían hacer si están preocupados por el
coronavirus: ¿Han tenido contacto cercano con una persona que se sabe que tiene COVID-19?
¿Tienen fiebre o tos fuerte? Comuníquese con Nick Schoen si las personas de su personal han
estado expuestas y si necesita ayuda para encontrar reemplazante para su personal.
Preparación del lugar de alabanza de la Iglesia
Se solicita a todas las parroquias de la Arquidiócesis de Seattle que observen algunos
estándares intensificados de higiene en este momento.
Agradecemos a todo el personal de las parroquias, a los voluntarios y otras personas
que ayudaron a preparar y a desinfectar nuestras Iglesias en toda la arquidiócesis para
las misas el fin de semana pasado. Además de una mayor limpieza, recomendamos
tomar las siguientes precauciones para minimizar la expansión de virus y gérmenes:
• Los feligreses deben hacer el máximo esfuerzo por observar los más altos estándares de
higiene. Esto significa no tocarse la cara, la nariz ni toser mientras están dentro de la iglesia. Si
lo hacen, por favor salir a lavarse las manos.
• Por favor retirar objetos que están en áreas comunes y que son tocados con frecuencia.
• Por favor retirar todos los cancioneros de los bancos. Estos objetos pueden transmitir
inadvertidamente virus de una persona a otra.
• Por favor retirar todos los papeles de los bancos (como tarjetas de arte o de comentarios).
• Si su parroquia necesita una limpieza profunda debido a una potencial exposición, por
favor contactar con Ed Foster para conocer los siguientes pasos a seguir. Estamos
trabajando con expertos para desarrollar procedimientos de limpieza del coronavirus y los
vamos a distribuir cuando esté listo.
Recuerden orar
Como el Papa Francisco nos recuerda, debemos acercarnos a nuestras comunidades y
orar en solidaridad por la Iglesia en todo el mundo. En su misa de hoy, dijo:
“Oremos hoy al Señor también por todos nuestros sacerdotes, para que
tengan el coraje de salir y llegar hasta los enfermos para llevarles la
fuerza de la palabra de Dios y la Eucaristía, y para acompañar a los
trabajadores de la salud y a los voluntarios en este trabajo que están
realizando”.También puede leer
