Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar Discursos de orden 2014 2019 - José Vicente Rangel

Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar
              Discursos de orden
                 2014 – 2019

                               José Vicente Rangel

Eleazar Díaz Rangel

                              Desirée Santos Amaral

 Walter Martínez
                                 PJ Numa Molina

   Earle Herrera

Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar
Discursos de orden
2014 – 2019
Fundación Premio Nacional de Periodismo
Final Bulevar Panteón, Torre Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información.
Piso 4. Parroquia Altagracia, Caracas-Venezuela.
Teléfonos (0212) 802.84.71 / Rif: G-200078049
WWW.FPNP.GOB.VE

Nicolás Maduro Moros Presidente de la República Bolivariana de Venezuela
Jorge Rodríguez Vicepresidente Sectorial de Comunicación y Cultura (E)
Milagros Pérez Presidenta Fundación Premio Nacional de Periodismo
Compilación y diagramación: Lorena Almarza

Depósito Legal: DC2019001707
ISBN: 9789807917018

Edición digital en la República Bolivariana de Venezuela
Caracas, octubre de 2019

Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar
            Discursos de orden
               2014 – 2019

Índice

Presentación                                             7

Premio Único Simón Bolívar, la más alta distinción       8

Eleazar Díaz Rangel, Premio Único Simón Bolívar 2014     18

José Vicente Rangel, Premio Único Simón Bolívar 2015     26
Walter Martínez, Premio Único Simón Bolívar, 2016        31
Desirée Santos Amaral, Premio Único Simón Bolívar 2017   41

Earle Herrera, Premio Único Simón Bolívar 2018           46

PJ Numa Molina, Premio Único Simón Bolívar 2019          51

Veredictos 2014 - 2019                                   57

Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

     “Zenit”, es la estuilla que se entrega desde el año 2015 a ganadores y ganadoras del Premio Nacional de Pe-
     riodismo. En su definicón, “Zenit”, es el punto más alto en la cúpula celeste, visto con relación al observador.
     La escultura se desarrolla con un repertorio reducido de elementos, donde el círculo es el protagonista que
     representa la totalidad. La composición se construye entre formas triangulares y lineas rectas ascendentes,
     creando dinamismo y armonía. Los elevados ideales del periodismo están perfectamente identificados con
     el titulo y concepto de la obra / Foto: Prensa Presidencial

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                                    Presentación

E   ntre los años 1942 y 1948, a propósito del Día del Periodista, la recordada Aso-
ciación Venezolana de Periodistas (AVP) convocaba concursos y premios de es-
tímulo a fin de reconocer la actividad periodística. A partir de 1949, se oficializó el
Premio y recibió el nombre de Juan Vicente González. No obstante, gracias a la pre-
sión de periodistas que consideraban al personaje, como “muy venal y ambiguo,
cambiante de opinión y mal ejemplo para los periodistas”, según refirió el profesor
Eleazar Díaz Rangel, ocurrió que en 1968 el Ministerio de Educación, organismo con-
vocante, lo tituló sólo Premio Nacional de Periodismo. Cuarenta años después, en
la entrega de la edición del 2011, se anunció que a partir del 2012, en homenaje al
padre de la patria y primer periodista, el galardón se reconocerá con el nombre de
Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar.

Respecto a las categorías para optar al galardón, brevemente podemos referir que
en las primeras convocatorias se premiaban Reportajes, Crónicas, Fotografías y Cari-
caturas. A partir de 1950, se reconocieron Mejor Órgano de Prensa, Periodista de la-
bor sobresaliente en constancia y calidad profesional, Mejor columnista o colaboración
periodística y Mejor reportero gráfico o caricatura; y en 1952 se incluyó Periodista con
antigüedad y competencia en la profesión. Hasta entonces, los reconocimientos se
otorgaban fundamentalmente a los periodistas de la prensa escrita, y será a partir
de 1965, cuando se incorporen los reconocimientos a los periodistas de Radio y Tele-
visión. En 1968 se agregó la categoría Docencia e Investigación, y a fines de la década
de los setenta se sumó la Diagramación y se abrieron los premios hacia el deno-
minado Periodismo de provincia. Hasta el 2009 se entregaron los galardones sólo a
periodistas colegiados y desde el 2010 se incluyeron categorías como Trayectoria
Periodística, Infografía y Audiovisual. En el 2011 se sumó Interpretativo y Publicación
(Libro); y es hasta la edición del año 2012 cuando se incorporó la categoría Digital.
En el 2014, se estableció el Premio Único Simón Bolívar, como la más alta distinción
y en el 2017 se creó la categoría Derechos Humanos para promover el periodismo a
favor de la paz y la vida.

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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

                     Premio Único Simón Bolívar, la más alta distinción

En el año 2014, y en atención a propuesta del Jurado Calificador de dicha edición, in-
tegrado por Taynem Hernández, Soledad Ramírez, Esther Quiaro, Werther Sandoval
y Armando Carías, se retomó la entrega de un Premio Nacional Único como se reali-
zó hasta finales de la década de los años 80 del siglo XX. Es así como la Fundación
Premio Nacional de Periodismo aprobó la creación de una mención única que re-
presentara “la más alta distinción, y que solo sea entregada a un ganador o ganadora
excepcional, de probada trayectoria y alto sentido ético que esté en el ejercicio activo
de la profesión y quien, a través de los valores humanistas, sean ejemplo de todo aquel
profesional que trabaja en la construcción de un periodismo para la vida y la paz”. A su
vez, se estableció, que dicha opción, se evaluara por seguimiento y se denominará
Premio Único Simón Bolívar.

       Igualmente, se aprobó que el ganador o ganadora de esta mención única, tu-
viera el honor del protagonizar el discurso de orden en el marco del acto de entrega
del Premio.

2014, breve resumen sobre la censura

Ese año, la máxima distinción se otorgó, por primera vez, al periodista ELEAZAR DÍAZ
RANGEL, “dada su larga trayectoria que incluye su experiencia como reportero, co-
rresponsal, periodista de medios impresos y televisivos, maestro de periodistas en
la escuela de comunicación social de la Universidad Central de Venezuela, en la que
formó nuevas generaciones hasta su designación como Director de la Escuela. En su
trabajo como Director del diario Últimas Noticias, posición que ha ocupado durante
13 años, ha fomentado un periodismo por la paz y la vida, veraz, ético, equilibrado
y combativo”. Díaz Rangel recibió el reconocimiento en el palacio de Miraflores de
manos del Presidente de la República Nicolás Maduro Moros y fue el Orador de or-
den.
       El profe, como solíamos llamarlo, fue testigo y protagonista de la historia polí-
tica del país y de la historia del periodismo; y ofreció en su intervención un resumen
impecable y preciso, sobre la censura en el periodismo desde los tiempos de Juan
Vicente Gómez, con fue el caso de Rafael Arévalo González y Félix Montes, y la des-
trucción de los talleres del periódico El Pregonero, la clausura de El Fonógrafo en
1917, así como la persecución permanente a Leoncio Martínez “Leo” y su semanario
Fantoche, durante el mandato de López Contreras.

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Discursos de Orden 2014 - 2019

       Destacó a su vez, que durante el gobierno de Medina Angarita hubo respeto a
las libertades, y se eliminó de la Constitución el inciso, según el cual se consideraba
a los comunistas como traidores a la patria. Recordó que fue en ese período cuando
se legalizó Acción Democrática y el Partido Comunista de Venezuela, aparecieron
Últimas Noticias y El Nacional; y se fundó la Asociación Venezolana de Periodistas.
En este recorrido, relató que tras el derrocamiento de Medina Angarita y ya durante
la dictadura perezjimenista se instalaron juntas de censura a las que debían llevarse
diariamente la edición del día siguiente para ser revisados. Inolvidables días de lápiz
rojo.
       Llegada la IV República afirmó que “los 40 años de democracia representativa,
fueron igualmente años donde la censura y otras formas de represión a los medios y
a los periodistas, se hizo presente con demasiada frecuencia”. Por ejemplo, el diario
La Razón fue eliminado, se clausuraron por solo mencionar algunos como el Clarín,
Tribuna Popular, El Independiente, Izquierda, La Hora, El Imparcial de Maracay, El
Tiempo de Valera y El Día de Acarigua. Los diarios Últimas Noticias, La Esfera y El
Mundo fueron allanados. Tiempos de mucha persecución y periodistas presos.

       Según Díaz Rangel, ese panorama cambió con la llegada de la Revolución Bo-
livariana, “Desde que asumió Hugo Chávez la Presidencia, se acabaron las censuras
y otras formas de represión a los medios (…) Se acabaron las llamadas telefónicas
intimidatorias a los periódicos para exigir la publicación o no de ciertas noticias”.
Señaló que este proceso de libertades deviene de lo expresado en la Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela, aprobada en Referéndum, en los artículos
57 y 143. Según Díaz Rangel “(…) ni siquiera decretado un Estado de emergencia
en Venezuela puede limitarse la libertad de informar, yo creo que una disposición
como ésta no existe en ninguna Constitución de ningún país del mundo”.

       En esta edición fueron revisados 271 trabajos, siendo que 247 fueron vía pos-
tulación y 24 por modalidad del seguimiento por el equipo de la Fundación. De los
cuales, 94 fueron provenientes de distintos estados de Venezuela y 150 trabajos en-
tre Caracas, Miranda y Vargas.

2015: Crítica al periodismo mercenario y usurpador

En el año 2015, el Jurado Calificador, estuvo conformado por Mercedes Chacín, Ma-
deleine García, Alfredo Carquez, Carlos Zavarce y Hernán Carrera, quienes otorgaron
el Premio Único Simón Bolívar a JOSÉ VICENTE RANGEL, quien “ha logrado, con su
palabra y acción, promover la práctica de un periodismo ético, equilibrado y com-
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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

bativo”.

       En su discurso, el insigne periodista destacó el acoso al que es sometido nues-
tro país, y en especial, el que se ejerce a través del poder mediático, el cual calificó de
“periodismo del cartel mediático que responde a los designios supranacionales que
lo conforman”.

       Para Rangel, “el Día del Periodista tiene que ser un reconocimiento de las vir-
tudes fundadas sobre la verdad, el ejercicio de la justicia y la ética, al margen de
esos valores no se puede concebir un ejercicio cabal del oficio del periodista”. En
atención a dichas virtudes refirió como ejemplo de “periodismo combatiente, digno,
veraz frente al periodismo mercenario, usurpador de la realidad y de la verdad” a los
Fabricio Ojeda y a Rodolfo Walsh.

       A su vez, refirió el destacado comunicador de generaciones, el ejercicio de-
mocrático pleno de la Revolución Bolivariana y su compromiso con los Derechos
Humanos; así como con el respeto y promoción de la libertad de expresión, afirman-
do, “y si alguien conoce esta materia, bien lo saben ustedes, soy yo”.

      Rangel hizo un llamado al Presidente Constitucional, Nicolás Maduro a per-
severar en el diálogo, espacio para la construcción de la democracia y, a su vez, a
emprender una lucha implacable contra la corrupción. Para este luchador, “El Día del
Periodista es un día de combate, de decir verdades, de no callar, de estar atentos”.
      En esta edición, fueron recibidos 261 trabajos, de los cuales 174 fueron postu-
lados en el Distrito Capital, Vargas y Miranda; y los 87 restantes de otros estados del
país.

2016: clase magistral sobre la guerra de cuarta generación

Para la edición del año 2016, el Jurado Calificador, conformado por las y los comu-
nicadores Cristina González, Yamila Bonilla, Wilmer Poleo Zerpa, Abraham Istillarte
y Alberto Cova otorgó el Premio Único Simón Bolívar al periodista WALTER MARTÍ-
NEZ, “por la veracidad, equilibrio, análisis y sentido crítico demostrado en su vasto
ejercicio periodístico en televisión, prensa y radio como corresponsal, reportero y
analista del acontecer nacional e internacional. Mantiene, día tras día, un estilo pro-
fundo, sobrio y ético en la conducción y producción del programa Dossier transmi-
tido por Venezolana de Televisión y Telesur, desde el cual desarrolla un periodismo
apegado a los valores de la paz y la vida”.
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Discursos de Orden 2014 - 2019

       En su discurso como orador de orden, el periodista, de dilatada trayectoria
y ganador en diversas oportunidades del Premio Nacional de Periodismo en Tele-
visión y Radio, señaló, tras referencia histórica sobre un hecho en el periodismo de
guerra, que contra el país se desarrolla una guerra de cuarta generación o guerra no
convencional, en la cual, los medios de comunicación son arma fundamental.

       Aseguró que en la actualidad, existen “dos teatros de operaciones, el teatro
real y el paralelo o alternativo en esto, los medios de comunicación en un mundo
interconectado vía satélite”. En su intervención, a modo de clase magistral, Martínez
citó a autores como Daniel Martínez Kunil, quien afirma que en este tipo de guerra,
los medios se constituyen como arma estratégica para desde la propaganda, y no a
través de la información, influir en la opinión pública. Igualmente hizo referencias a
Francisco Sierra Caballero, investigador español, doctor en Ciencias de la Informa-
ción, y a Fernando Buen Abad, filosofo mexicano que analiza la guerra simbólica; así
como a importantes documentos de la Universidad Experimental de las Fuerzas Ar-
madas (UNEFA), que desgranan las acciones intervencionistas de los Estados Unidos
de América para generar caos mediante acciones económicas y sociales desestabi-
lizadoras, y así lograr el derrocamiento del gobierno legítimamente elegido, para
avanzar en el ejercicio de su poderío político y militar en territorio nacional.

       Destacaron, en su intervención, documentos como el Manual de las Fuerzas
de Operaciones Especiales y el Manual de Campaña de las Fuerzas de Operaciones
Especiales de Estados Unidos, donde claramente se expresa el ideario intervencio-
nista del vecino imperial del norte.

        De igual modo, frente a este proceso de intento de aniquilamiento y de vuelta
al mundo unipolar, el periodista y analista internacional, refiere que para enfrentar
esa guerra no convencional, el presidente Chávez impulsó la Unión Cívico Militar,
y más precisamente, la doctrina sobre la defensa integral de la Nación, la cual está
“diseñada para disuadir o derrotar a un agresor mayor en número y mayor en tecno-
logía en referencia a la guerra popular prolongada”, y en la cual es necesario forta-
lecer el componente militar, contar con la participación popular en la defensa de la
nación, así como con el uso de los medios de comunicación y de los comunicadores
como sujetos responsables. Destacó que esa participación cívica tiene como base
fundamental, un profundo componente de formación política e ideológica. Al cie-
rre, afirmó que sí es posible derrocar la guerra convencional, a través de la formación
y el establecimiento de una gran red informativa, que “refleje las prácticas estéticas
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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

e idiosincrasia de los pueblos del sur”.

2017: siempre luchamos por un periodismo digno

En el año 2017, el Jurador Calificador conformado por Zaida Rausseo, Antonio Man-
rique, Ernesto Morgado, Martín Pacheco y José Numa Molina, concedió el Premio
Único Simón Bolívar a la periodista DESIRÉE SANTOS AMARAL, “por su amplia y
larga experiencia profesional e intensa actividad gremial y sindical en defensa de la
dignidad profesional, la libertad de expresión, la igualdad de género y los derechos
humanos”.

      Desirée, de larga trayectoria periodística y protagonista de la lucha gremial,
se convierte en la primera mujer en obtener tan alta distinción. En su intervención
recordó que el periódico fundacional Correo del Orinoco, semanario ideado por el
Libertador Simón Bolívar, cumplía 199 años de haber salido por primera vez, concre-
tamente el 27 de junio de 1818.

        Destacó que el objetivo fue el de “propagar las ideas emancipadoras, indepen-
dentistas para contrarrestar la campaña de odios y calumnias de la Gaceta de Cara-
cas”, y recordó que justamente, es este hecho el origen de la propuesta de Guillermo
García Ponce, de celebrar el Día del Periodista, cada 27 de junio, la cual fue acogida
por IV Convención Nacional de la Asociación Venezolana de Periodistas, donde a su
vez, se consideró, que el Día del Periodista en nuestro país debe significar el ejercicio
de un periodismo “al servicio de los valores morales y materiales que constituyen la
patria”.

       Desiree, combativa siempre, señaló que la lucha por lograr un periodismo con
dignidad ha sido muy larga, pero que por “intereses mercantiles y sensacionalistas
de dueños de los medios de comunicación, “el mejor oficio del mundo” ha sido des-
virtuado y convertido en un acto de “lanzar la mierda y lavarse las manos” refiriendo
al escritor Roger Goult.

      De manera enfática, indicó que la Revolución Bolivariana ha estado en perma-
nente ataque mediático, “Primero fue contra el presidente Hugo Chávez, vivimos en
toda su intensidad la furia de la canalla mediática, la transformación de los medios
en brazos ejecutores de una guerra antidemocrática contra un gobierno y un líder
que se convirtieron rápidamente en referencia de moral para todos los pueblos que
luchan por su soberanía”, así como, contra el presidente Nicolás Maduro, “para tratar
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Discursos de Orden 2014 - 2019

de quebrantar su voluntad de resistencia, ha sido una verdadera guerra psicológica
la montada a través de los medios de comunicación, que colocan la información
como mercancía que impone criterios, que irrespeta, que juega perversamente sin
importar ningún principio, ahogando con mentiras a usuarios y usuarias en intermi-
nables campañas a favor de la violencia”.

       Indicó que estos años tanto medios nacionales, como transnacionales de la
información han trabajado para “favorecer un escenario que permita, como ha ocu-
rrido en otros países, una invasión armada, el ataque mercenario, la provocación de
enfrentamientos y los actos terroristas”. Ante esto, refirió la necesidad de contrarres-
tar la manipulación mediática, “a través de un periodismo ético y de calidad profe-
sional”. Ante este contexto de violencia promovida desde la mediática que incluso a
dejado víctimas de odio en las calles, instó la periodista ejercer “Un periodismo para
la paz, para la vida, para preservar la paz, como lo reclama la fundación que otorga
este premio nacional. Hay que detener la violencia, hay que cerrarle el paso a los
bárbaros”. En su opinión, se trata de “la misma batalla de 1818 contra los gacetilleros,
los enemigos de la soberanía y la independencia”.

      Este año fueron evaluados 165 trabajos, de los cuales 111 correspondieron a
concursantes de la Gran Caracas (Distrito Capital, Miranda y Vargas) y 47 del resto
del país. Es importante destacar que las categorías del Premio Único Simón Bolívar,
Opinión y los Reconocimientos Internacionales fueron producto del seguimiento
directo por parte del Jurado Calificador.

2018: Ojalá florezcan mil Correo del Orinoco

En el año 2018, el Jurado Calificador estuvo conformado por los comunicadores y
comunicadoras sociales Érika Ortega Sanoja, Esther Quiaro, Víctor Hugo Majano, Fé-
lix Gerardi y Armando Carías, quiénes otorgaron El Premio Único Simón Bolívar al
periodista EARLE HERRERA “por su vasta trayectoria en prensa, televisión, docencia
y producción editorial. Produce y conduce el espacio dominical Kiosco Veraz, trans-
mitido por VTV, y escribe diariamente la columna El Kiosco de Earle, publicada en
los diarios Correo del Orinoco y Ciudad Caracas”.

El acto se realizó en el marco del Bicentenario del Correo del Orinoco y de manera
extraordinaria, en el Panteón Nacional, hecho referido por el periodista y constitu-
yente Earle Herrera, quien señaló en su intervención “el privilegio histórico y bendito
de poder celebrar los 200 años de un sueño que se hizo proyecto y de un proyecto
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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

que se hizo realidad y de una realidad que recibió el nombre de Correo del Orinoco”.

       Destacó a su vez, que la creación del semanario por el padre de la patria, obe-
deció a un actos de “inteligencia, el coraje y heroísmo que se expandió desde los
talleres de una vieja imprenta a los campos de batalla de Carabobo, Boyacá, Pichin-
cha, Ayacucho y más allá”.

       Refirió que aún hoy día, tal como hace 200 años, el imperio persiste en cercar
el país y no reconocer nuestra soberanía, por lo cual, nos corresponde responder
con la misma persistencia de lucha emancipadora: “Y si ellos, después de 200 años
andan en lo mismo, nosotros y nosotras debemos responderle de la misma manera
que nos enseñó el Libertador Simón Bolívar hace dos siglos desde las páginas heroi-
ca del Correo del Orinoco”.

       En este sentido, refirió que el presidente Chávez, dio continuidad al sueño
grancolombino de la Patria Grande a través de propuestas como la Unión de Na-
ciones Suramericanas (UNASUR), en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y
Caribeños (CELAC), en la Alianza Bolivariana para Los Pueblos de Nuestra América
(ALBA), en Petrocaribe, en Telesur, en la Radio del Sur así como en la refundación del
Correo del Orinoco en pleno siglo XXI. Y que, a su vez, como comunicador nato,
“insistía en la necesidad de prepararse y utilizar todos los medios con sapiencia para
enfrentar la colosal guerra mediática” que se ejerce contra nuestro país.

       En su emotivo mensaje, Herrera planteó que la mejor forma de celebrar los
dos siglos del semanario de nuestra independencia era hacer que “florezcan mil Co-
rreo del Orinoco en todos los rincones de la patria, en las paredes y en las redes (…)
en el ciberespacio y en el graffiti callejero, en los grandes medios y en los medios co-
munitarios y alternativos”, todo con el fin de dar a conocer la verdad de lo que pasa
en nuestro país y honrar nuestro legado independentista.

      Este año fueron evaluados 176 trabajos, de los cuales 133 correspondieron a
concursantes de la Gran Caracas (Distrito Capital, Miranda y Vargas) y 43 del resto
del país. Es importante destacar que la categoría del Premio Único Simón Bolívar,
fue producto del seguimiento directo por parte del Jurado Calificador.

2019: la ética y la verdad a favor del pueblo

En la edición del año 2019, el Jurado Calificador estuvo conformado por las comuni-
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Discursos de Orden 2014 - 2019

cadoras Ana María Hernández, María Centeno y María Teresa Gutiérrez, y los comu-
nicadores Alcides Castillo, Orlando Ugueto y Alejandro Silva, quienes concedieron el
Premio Único Simón Bolívar al periodista y padre jesuita JOSÉ NUMA MOLINA, “por
su actividad en pro de un periodismo por la paz y la vida realizado desde la radio,
artículos de opinión y redes sociales”.

       En su discurso, el padre Numa recordó la carta de Simón Bolívar a Fernando
Peñalver, en la cual le pide “Mándeme usted de un modo u otro una imprenta que
es tan útil como los pertrechos”, con el fin de librar al pueblo del oscurantismo que
España utilizaba como arma. Refirió que ese periodismo naciente, era no solo por-
tador de la verdad sino también de ética. De modo que verdad y ética deben ser
parte del compromiso de quiénes ejercer el periodismo hoy día, “apegado a la ética,
es decir veraz y oportuno, con responsabilidad social, consciente de ser pregonero
de una paz con justicia”. En este sentido afirmó que las corporaciones mediáticas
inician guerras contra los pueblos a través de la demonización de su proyecto libe-
rador y sus líderes; y luego implementan sanciones económicas e injerencistas, bajo
la excusa de ayuda humanitaria.

      Para Molina, la comunicación “en un regalo de Dios al ser humano para que,
intercambiando lo íntimo de sus vivencias a través del gesto y la palabra, los seres
humanos pusiéramos en común nuestra hondura espiritual”. De modo que el perio-
dismo debe ser una vía para “contar historias y servir a la verdad como encuentro
para las diversas culturas”, lejos de un mecanismo para hacer la guerra y destruir a
los pueblos, tal y como se usa actualmente por las hegemonías.

       En su intervención citó al Papa Francisco, quien en una entrevista a un perio-
dista español, le expresó, “si amo de verdad, si tengo ética, no voy a los basureros
mediáticos a contaminarme de la inmundicia que hay allí (…) En lugar de eso, voy
donde está el pueblo, busco allí mi verdad sin adulterarla, sin manipularla. Y segui-
damente refirió al periodista polaco Kapuscinski, quien sobre el hacer manifestó
“estoy con la gente, la veo, la oigo, comparto con ellos sus vivencias, pienso y por
último escribo”.

       Para finalizar, hizo un homenaje al querido Eleazar Díaz Rangel, quien en opi-
nión de Molina, “nos enseñó que el periodismo más que una profesión es una voca-
ción hecha de amor y pasión por el pueblo al que servimos, y al que nos debemos”
y a su vez, hizo un llamado a enfrentar la guerra desde el diálogo, la reconciliación y
en apego a nuestra Carta Magna.
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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

       Este año fueron evaluados 185 trabajos, de los cuales 140 correspondieron a
concursantes de la Gran Caracas (Distrito Capital, Miranda y Vargas), 30 del resto del
país, y 15 evaluaciones por seguimiento directo.

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Discursos de Orden 2014 - 2019

Discursos de orden
   2014 – 2019

Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

     Eleazar Díaz Rangel, Premio Único Simón Bolívar 2014

                                                Eleazar Díaz Rangel / Foto: Presidencia

Bueno muy buenas tardes ciudadano Presidente de la República, ciudadana ministra de Comu-
nicación e Información, señores oficiales, colegas periodistas, señora embajadora, señor cónsul,
amigos y amigas.
        Como deben saberlo todos, la mayoría de ustedes, en las últimas semanas, he sido víctima
de una andanada de viles y cobardes agresiones infames, e injuriosas, casi siempre por las redes
sociales. La mayoría anónima, los más suaves calificativos han sido lo defensor de alguien que
mancha una limpia trayectoria en el periodismo, para ponerse al servicio de la represión a la pro-
fesión.
        La más reciente de esas agresiones salió de ese semiorganismo que debe asumir la defensa
de sus agremiados y que en febrero hace 5 meses, recibí una carta de Erick Alvarado, Josefina Ru-
giere, Hilda Carmona y de quien les habla, con denuncias concretas; para ser investigados contra
uno de sus afiliados. No hubo ni siquiera un acuse de recibo y su primera palabra fue precisa-
mente, descalificando al jurado que me otorgó este premio, por haberlo discernido, quien dice la
declaración; reconoció haber censurado un reportaje.
        No sé de dónde inventaron tal exabrupto, en primer término ignoran lo que en periodismo
significa censura, intervención que ejerce el sensor gubernativo, define la Academia de la Lengua
Española, y que más preciso con la expresión censura previa, como el examen y aprobación que
anticipadamente hace el sensor gubernativo de ciertos escritos antes de dársela a imprenta.
        Además de desconocimiento de tal magnitud, que demuestran no sólo ignorar mi escrito
con la otra versión, sino su crasa ignorancia en las elementales funciones de dirigir un diario o un
medio, responsable de la calidad del mismo, de la aplicación de la política editorial, del cumpli-
miento de los principios éticos y de las normas internas; y vigilar que no se incurra en expresiones
que puedan acarrear acciones judiciales.
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Discursos de Orden 2014 - 2019

         No habría papel para imprimir todo cuanto llega a un periódico, por eso es necesaria la
selección que ellos llaman censura. Nunca antes, ni cuando los jurados estuvieron al servicio de
los gobiernos de la Cuarta República, que hubo algunos, se conocieron conductas similares. Es el
precio que debía pagar por ejercer la profesión, sin dejar de ser consecuente con mis posiciones
políticas y principios ideológicos, no podían tolerarlo.
         Colegas de la redacción de Últimas Noticias, hubo que me advertían, hubo quienes me ad-
vertían cuando comenzaron a especular luego de la venta de la Cadena Capriles, que en el fondo
tales ataques eran contra mí. En compensación, he recibido mensajes de aliento y reconocimiento,
de los cuales solo quiero leerle este llegado de Maracaibo: “Estimado Eleazar, quiero hacerte llegar
mis más sinceras felicitaciones por el justísimo reconocimiento que has recibido, al haber sido
designado con el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar 2014, galardón que tiene en
ti, a un gran ganador. En Panorama, nos hacemos eco de la decisión del jurado porque valoramos
los aportes éticos y profesionales que durante toda tu carrera has realizado al periodismo venezo-
lano, veraz, equilibrado y combativo, como lo rezan las palabras del sustento del juzgamiento. Te
reitero mis congratulaciones y las de todo nuestro equipo, que continúen los éxitos”. Está firmado
por Patricia Pineda, periodista y presidenta de la editorial Panorama.
         Este premio que recibo hoy, seguramente reconoce el camino andado en esta profesión y
debo suponer que los colegas periodistas miembros del jurado, estimaron además que era opor-
tuna respuesta a tan infundados ataques. Le estoy altamente agradecido. Y agradezco que lo hi-
cieran para hablar a propósito del Día del Periodista, que desde 1964 celebramos en homenaje a
la aparición del Correo del Orinoco, fecha que debemos a la ponencia de alguien cuyo fallecimien-
to ignoró el Colegio Nacional de Periodistas y del cual fue uno de sus fundadores, me refiero a
Guillermo García Ponce.
         Esta ocasión, me permite un recorrido por lo que ha sido la censura en Venezuela, pero no
se inquieten, daré unos saltos para detenerme en los momentos más importantes que simbolizan
cada época.
         Empecemos por los 27 años del gomecismo. Rafael Arévalo González fue detenido el 11 de
julio de 1913, por un artículo que escribió en el diario que él dirigía, El Pregonero, donde postulaba
al abogado Félix Montes como candidato a la presidencia de la República; no lo toleró el dictador
Juan Vicente Gómez, cuyo período vencía. Ordenó la destrucción de los talleres del periódico y la
detención de ambos, Montes pudo huir a Curazao; Arévalo González fue preso en su casa y llevado
a la cárcel de La Rotunda, derribada a la muerte del dictador y construye allí la Plaza La Concordia.
         Antes de entrar al calabozo, le remacharon un par de grillos, 75 libras, que apenas le permi-
tían caminar, recuperó su libertad en 1921, no pudo hacer periodismo y en 1928, cuando insurgie-
ron los estudiantes universitarios que después se conocerían como la generación del 28, se atrevió
a enviarle un telegrama a Juan Vicente Gómez pidiéndole su libertad, otra vez estuvo preso; esta
vez en el Castillo Libertador en Puerto Cabello, junto a varios de los bachilleres entre ellos, Jóvito
Villalba hasta 1935.
         Durante la primera guerra mundial, 1914 al 18, hubo un diario, El Fonógrafo que se atrevió
a mostrarse tímidamente partidario de los aliados, salió en junio de 1917 y tales simpatías apenas
mostrada, le valió la clausura de la imprenta y la prisión de los editores. El 6 de abril de 1923, le
tocó el turno a Panorama, porque reprodujo una nota de un diario colombiano donde Pedro Ma-
nuel Arcaya, representante de Venezuela en Washington, reclamaba por tantas informaciones de
opositores que publicaba la prensa neoyorquina; fue clausurado hasta 1931.
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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

         La lista de periodistas presos es inmensa, más que la de los periódicos clausurados, pero
estos ejemplos son suficientes, después de estas experiencias, la prensa de todos esos años del
gomecismo, no necesitaba censura y sus páginas no tenían crítica o denuncia de ninguna especie.
         Veamos la imagen que de ese período tan oscuro nos pinta después, Gabriel Espinoza,
periodista que ejerció la profesión en esos años: “...Tal era el ambiente respirado en todas las re-
dacciones de periódicos, y era necesario decirlo, una verdadera aventura dedicarse al periodismo
o a la literatura. En ninguna redacción, nadie se tenía por seguro contra las decisiones arbitrarias
del gobierno, el menor desliz conducía al sepulcro, por el camino del hambre o de la tortura, y no
había amistad con los altos funcionarios que pudieran invocarse como recurso de salvoconducto,
siempre había para perder a quien perdía el equilibrio, la terrible frase sacramental, es una orden
del jefe”.
         A la muerte del dictador, se vivió un período de relativas libertades, pero un decreto en
época del presidente López Contreras, 1936 al 41, estableciendo una junta de censura, fue re-
chazado por la primera gran manifestación habida en Caracas, con tres muertos, producto de la
acción policial y hubo necesidad de revocarlo, la censura fue reemplazada por la multa que a cada
rato se le imponía a los periódicos que desbordaban los límites gubernamentales y por órdenes
para hacer presos a los periodistas incómodos.
         El famoso caricaturista Leoncio Martínez “Leo” y su semanario Fantoche, fueron las más asi-
duas víctimas de la persecución lopecista. Los años del gobierno del presidente Medina Angarita
1941 al 45 fueron de respeto a las libertades, se borra de la Constitución el inciso sexto del Artículo
32 según el cual se consideraban contrarios a la independencia y traidores a la patria, quienes
proclamen, propaguen o practiquen la doctrina comunista o la anarquista, se legaliza a los parti-
dos Acción Democrática y Comunista de Venezuela, aparecieron los primeros diarios modernos,
Últimas Noticias 1941 y El Nacional 1943; y se fundó la Asociación Venezolana de Periodistas.
         Su derrocamiento, promovido por dirigentes adecos y oficiales del Ejército, encabezados
por Rómulo Betancourt y Marcos Pérez Jiménez, significó limitaciones al periodismo, prohibieron
la publicación por la prensa, de toda noticia relacionada con movimientos de tropa y otras ope-
raciones o hechos de carácter militar. Y se advirtió, que se detendrá policialmente a toda persona
que desde las columnas de la prensa intente defender con su firma, lo que está definitivamente
condenado por la conciencia de todo un pueblo. Es decir, no se podía defender al medinismo.
         No se conformó con esas medidas, clausuró el diario El Tiempo y sus talleres, los del diario
Ahora, fueron expropiados. Informaciones como las relacionadas con los alzamientos habidos en
esos años, fueron silenciados y sólo se publicaba lo que ordenaba la Junta Revolucionaria de Go-
bierno.
         En las primeras elecciones directas fue escogido Rómulo Gallegos como presidente, poco
tiempo se mantuvo en la presidencia, asumió en febrero de 1948 y fue derrocado en noviembre
del mismo año, por los mismos militares que antes habían depuesto al militar Medina Angarita.
         La prensa fue, centro de sus primeras medidas represivas, clausuran todos los periódicos
simpatizantes obtenidos por tal de Acción Democrática, comenzando por los diarios El País; en
Maracaibo, Panorama; El Día, en Valencia; y Frontera de San Cristóbal. En Caracas funcionaba una
junta de censura, así como una en cada capital de estado donde había diarios.
         Todos los días, sobre las cinco de la tarde, mensajeros de los diversos periódicos que se edi-
taban en Caracas, se dirigían a la junta de censura con los originales que se supone se publicarían
al día siguiente, si los autorizaba el censor. Ese procedimiento, algunas veces en los primeros años,
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fue violentado. El 5 de abril de 1949, para instar la noticia sobre el establecimiento de relaciones
entre Venezuela y la España franquista; El Nacional insertó una foto donde aparecían Hitler y Fran-
co, motivo suficiente para ser suspendido por tres días. En abril de 1950, correspondió el turno a El
Universal, sus linotipistas intercalaron una nota, anunciando la huelga petrolera de mayo de 1950
y también fue clausurado temporalmente. Igual ocurrió nuevamente con El Nacional, porque otra
vez un linotipista, insertó en la nota que anunciaba la pre-inauguración del Estadio Universitario,
el 22 de abril de 1950, que entre comillas “los tres cochinitos” en lugar de los tres miembros de la
junta habían asistido al estadio. Esta vez, fueron detenidos por la tenebrosa Seguridad Nacional,
todos los empleados de ese periódico, y sólo pudo reaparecer 12 días después, a condición de que
prescindieran de los servicios de algunos redactores colaboradores militantes de AD y del PCV.
Hasta ese día, se toleraron tales desacatos. La prensa toda aprendió la lección y debió tolerar la
censura hasta de sus días finales.
        En los años 1950 al 52, circuló una revista de interpretación y análisis, Signo dirigida por
el doctor Ramón J. Velásquez, quien contaba años después, “escribíamos 10 páginas para que la
censura nos devolviera tres o cuatro, con el visto bueno del sello y el lápiz rojo”. A fines del 52,
hubo unas elecciones a la Constituyente, cuyos resultados fueron desconocidos y toda la prensa
fue obligada a publicar los boletines oficiales del Consejo Supremo Electoral, con los resultados
adulterados.
        Les voy a contar un episodio ocurrido en 1957, a poco de caer, poco antes de caer la dic-
tadura, que estaba yo de guardia en el diario El Nacional y llamaron una noche de un edificio de
Quebrada Honda para denunciar falta de agua, con un reportero gráfico nos hicimos presentes,
recibí las declaraciones de los vecinos y al día siguiente apareció la noticia con foto, lo que revela
lo calichoso que era el periodismo de esos años.
        El caso es que muy de mañana, increparon al jefe de redacción, José Moradel para que in-
formara por qué se había publicado esa noticia, él la leyó y releyó y les dijo que es una noticia sin
mayor trascendencia; pero la policía creyó que la habían publicado con toda intención para vincu-
lar al general Pérez Jiménez con la falta de agua. Ocurre que Moradel no entendió esa acusación
y más tarde yo le expliqué, que yo había observado que el edificio se llamaba GPJI y enseguida lo
asocié con general Pérez Jiménez.
        Y seguramente, había sido construido en homenaje por algunos de los italianos que en
esa época se enriquecieron con la construcción en Caracas. Veamos lo ocurrido en la democracia
representativa. Los 40 años de democracia representativa, fueron igualmente años donde la cen-
sura y otras formas de represión a los medios y a los periodistas, se hizo presente con demasiada
frecuencia.
        En el mismo año de 1959 hizo desaparecer al Diario La Razón, único periódico de oposición,
su director, Marco Aurelio Rodríguez y su editor Alfredo Abilahoud fueron expulsados del país sin
protesta alguna. Paso a leerles un acuerdo de la Cámara de Diputados aprobado el 2 de junio
de 1962 en cuya exposición previa se lee: “Con base a lo anteriormente expuesto, la Comisión de
Política Interior de la Cámara de Diputados, entonces presidía José Vicente Rangel, considera que
la prensa venezolana ha estado sujeta últimamente a la contingencia de un proceso que presenta
la siguiente características: liquidación progresiva mediante la acción de los cuerpos policiales
de voceros periodísticos políticos o partidistas; suspensión y clausura de diferentes órganos de
prensa ordenada por el ejecutivo nacional en forma que viola la Constitución y las leyes de la Re-
pública; implantación de un régimen de censura previa ejercido a través de un cuerpo de funcio-
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Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

narios dependientes del Ministerio de Relaciones Interiores en las propias oficinas de redacción y
talleres de los diarios, con encargo expreso de revisar y objetar todo tipo de material destinado a
la imprenta; en consecuencia, concluido el estudio de los hechos planteados en su carta del 23 de
mayo del presente año por la ciudadana Ana Luisa Llovera, Presidenta de la Asociación Venezola-
na de Periodistas y hecha la anterior exposición la Comisión sugiere a la Cámara: 1.- Declarar que
la libertad de prensa en Venezuela atraviesa en los momentos actuales por una de sus más graves
y difíciles etapas debido a la suspensión sistemática de diversos órganos periodísticos a la perse-
cución de profesionales de la prensa, así como el régimen de censura vigente. 2.- Condenar como
contrario a la Constitución y a las conquistas democráticas alcanzadas por el pueblo venezolano
las medidas puestas en prácticas por el Ejecutivo Nacional ya mencionadas y denunciadas ante
la opinión pública nacional e internacional a través de sus parlamentos soberanos e instituciones
gremiales de prensa remitiendo copia del presente acuerdo”.
         Estábamos en los primeros años del rescate de la democracia luego del derrocamiento de
la dictadura de Pérez Jiménez, presidía el gobierno Rómulo Betancourt y fue posible que se come-
tieran tales atropellos a los medios de comunicación y se estableciera formalmente un régimen
de censura de prensa como había existido en épocas de las dictaduras; entre julio de 1960 y 63
fueron suspendidos temporalmente varios periódicos, asaltados los talleres de otros, clausurados
algunos entre otros Clarín, Tribuna Popular, El Independiente, Izquierda y La Hora y del interior del
país El Imparcial de Maracay, El Tiempo de Valera, El Día de Acarigua, fue en esa época cuando la
AVP hizo la formal denuncia ante la Cámara de Diputados, para las nuevas generaciones que no
conocieron a AnaLuisa Llovera, ella era una periodista militante de Acción Democrática y fue elec-
ta con la unidad de todas las fuerzas Presidenta de la AVP, y de ella dijo una vez Betancourt, que
cuando se acercaba a Miraflores a hacer un planteamiento sobre los problemas de la libertad de
prensa ella dejaba en su casa el carnet de AD y sacaba el carnet de la AVP, esa era AnaLuisa Llovera.
         El 9 de abril de 1964 fueron allanados los diarios Últimas Noticias, La Esfera y El Mundo y
su editor Miguel Ángel Capriles, el director de uno de ellos, Víctor Simone de Lima presos en la
Penitenciaría de San Juan de Los Morros, el gobierno procedía arbitrariamente y con la fuerza
cuando sospechaba que alguna información inconveniente iba a ser publicada; en octubre de
1971 fue decomisada una edición de El Mundo por contener un informe confidencial militar y
allanaron los talleres de Crítica, de Maracaibo y de La Religión aquí en Caracas en búsqueda del
mismo documento, años más tardes decomisaron las revistas Al Margen, que dirigía Simón Sáez
Mérida y Resumen, de Jorge Olavarría. Interesa ahora recordar lo que dijo en 1979 el presidente
Luis Herrera Campins en un foro sobre libertad de prensa: “en Venezuela los propietarios de los
medios determinan de antemano lo que debe ocurrir en el día y pautan a sus periodistas para que
encuentren los datos que corroboren esas supuestas informaciones, en efecto en Venezuela existe
más libertad de empresa que libertad de prensa” y como este presidente tuvo la osadía de pro-
hibir la publicidad de cigarrillos y licores en los medios audiovisuales la televisión comercial fue
implacable, resolvió silenciarlo hasta el resto de su vida hasta su muerte; en marzo de 1983 la Go-
bernación del Distrito Federal ordenó la detención de tres directores de revistas, Jorge Olavarría,
Rafael Poleo y Amable Rosales por supuestas ofensas a la dignidad y decoro del Presidente de la
República. Durante el gobierno de Jaime Lusinchi, 1984-89 la presión sobre los medios fue brutal y
a propósito de su matrimonio y relaciones con su secretaria logró que hasta los jueces prohibieran
publicar alguna información relacionada con este caso; el 10 de noviembre, por ejemplo, de 1987
la esposa del presidente Lusinchi ofreció una rueda de prensa a la que asistieron 73 periodistas
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de 41 medios, pero sólo tres de ellos la publicaron, en esta época apareció un nuevo método de
presión que era la capacidad de otorgar o no divisas de Recadi, al respecto Marcel Granier escribió:
“es el instrumento de control de la sociedad más poderoso de que ha dispuesto ningún gobierno,
ni la dictadura de Juan Vicente Gómez llegó en su tiempo más negro a disponer de la décima parte
del poder que representa el Régimen de Cambio Diferencial”.
         En una asamblea en marzo de 1988 de la Sociedad Interamericana de Prensa su repre-
sentante en Venezuela, Miguel Henrique Otero presentó un memorial de agravio a la libertad de
prensa con casos concretos de numerosas denuncias de editores y periodistas por las agresiones y
ataques a la libertad de prensa y en octubre del mismo año suministré unas declaraciones donde
afirmaba que nunca desde Pérez Jiménez se atropelló tanto la libertad de informar como ahora y
que consideraba igualmente grave el silencio del Bloque de Prensa, de las cámaras de radio y te-
levisión y del Colegio de Periodistas. Poco después Granier debió dejar su programa Primer Plano,
después de 10 años en el aire y la vicepresidencia del Diario de Caracas, el programa había sido
suspendido.
         Oigan lo que decía Carlos Ball en agosto de 1987: “Hace poco más de un año, como director
del Diario de Caracas, yo recibí instrucciones de suspender toda cobertura sobre cuatro temas que
disgustaban al gobierno y de no seguir publicando los artículos de José Vicente Rangel y Alfredo
Tarre Murzi, a mi jefe directo le decían desde Miraflores lo que debía o no aparecer en primera
página y lo que podía ser tratado o no en los editoriales y esto me lo comunicaban por teléfono,
en 1989 fueron suspendidas las garantías constitucionales como reacción a la explosión popular
llamada El Caracazo, se estableció la censura, funcionarios del gobierno, los censores, fueron es-
tacionados en las redacciones para controlar todo lo que se publicaba, poco más tarde en febrero
de 1992, luego de las acciones del Movimiento Bolivariano Revolucionario, MBR-200, dirigido
por el teniente coronel Hugo Chávez nuevamente se suspenden las garantías y se restablece la
censura de prensa, fueron decomisadas algunas publicaciones y suspendida YVKE Mundial”. Fue-
ron las últimas expresiones significativas de la censura y otra forma de restringir la libertad de
prensa, esa historia se cierra en los límites de la IV República y por eso debo terminar aquí.
         Desde que asumió Hugo Chávez la Presidencia se acabaron las censuras y otras formas de
represión a los medios.
         Se acabaron la llamada telefónica intimidatoria a los periódicos para exigir la publicación
o no de ciertas noticias, pero el proceso comienza, ese proceso de libertades comienza con una
constitución aprobada en referéndum popular que no sólo prohíbe la censura sino que lo hace
expresamente en dos artículos, los números 57 y 143 y ni siquiera decretado un Estado de emer-
gencia en Venezuela puede limitarse la libertad de informar, yo creo que una disposición como
ésta no existe en ninguna Constitución de ningún país del mundo.
         Un conocido periodista norteamericano, Manuel Falco, escribió en un periódico estadou-
nidense el 16 de abril de 2001 que “a pesar de que algunos editores de periódicos han sido sujeto
de amenazas y a pesar de que Chávez se queja amargamente de las críticas de los medios de
Estados Unidos, Venezuela disfruta de una sorprendente libertad de prensa, de hecho, tan libre
que es difícil creer algunas de las historias que aparecen sobre el gobierno casi a diario, finalmen-
te el gobierno no se ha esforzado en restringir huelgas o descontento popular, efectivamente las
calles de Caracas casi diariamente están paradas por manifestaciones populares, este panorama
apenas ha variado, cualquier visitante que se quede en Caracas varios días podrá ver en prensa
y en televisión y escuchar en radio cualquier tipo de noticias reales o supuestas, inventadas o no
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contra el gobierno y los artículos más radicalmente opositores llamando incluso al derrocamien-
to del presidente Nicolás Maduro sin que se intente silenciarlo, he creído y escrito que allí en los
medios reposa la gran parte de la fuerza del poder y el poder de la oposición. Lo que tampoco
tiene censura y límite son los despachos de las corresponsalías, agencias y servicios informativos
internacionales, responsables de la negativa imagen de Venezuela en la mayoría de los países del
mundo que sólo reciben sus versiones.
         Y a propósito quiero cerrar con dos hechos, uno fue la inesperada votación de Podemos en
España que con los medios de comunicación en contra y la mayoría de la opinión pública adversa
pudo abrirse paso y convertirse con casi millón y medio de votos en la cuarta fuerza electoral en
ese país, demostración de la fuerza de los principios del socialismo del siglo XXI que lo inspiraba;
y el otro hecho menos conocido, cuando se aproximaba la celebración del 19 de abril de 1810, los
200 años y de los movimientos que le continuaron en Bogotá, Buenos Aires, Santiago y México,
CNN abrió una campaña de promoción a los movimientos independentistas pero inesperada-
mente colocaban a Venezuela como el último de esos movimientos en julio de 1811 cuando se
declara la independencia con la evidente intención de impedir que la comunidad latinoamericana
asociara la historia de hoy con lo sucedido hace 200 años, después de algunas denuncias, entre
ellas la mía, desaparecieron la campaña y nunca más los programas anunciados y tan promocio-
nados aparecieron, de esa manera evitaban que los latinoamericanos asociaran lo que había ocu-
rrido en 1810 donde Venezuela fue vanguardia y promotor de los movimientos de independencia
con lo que ha ocurrido en los años más recientes.

Bueno, apenas algunos ejemplos, la censura contra Venezuela que ejerce el poder mediático mun-
dial, con eso quiero cerrar y agradecer los aplausos.

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