Juventudes en América Latina y el Caribe en perspectiva: panorama de la situación, desafíos e intervenciones promisorias
←
→
Transcripción del contenido de la página
Si su navegador no muestra la página correctamente, lea el contenido de la página a continuación
DOI: 10.1590/1413-81232021267.07272021 2565
Juventudes en América Latina y el Caribe en perspectiva:
artigo article
panorama de la situación, desafíos e intervenciones promisorias
Youth in Latin America and the Caribbean in perspective:
overview of the situation, challenges and promising interventions
José Roberto Luna Manzanero (https://orcid.org/0000-0002-8650-743X) 1
Abstract This article approaches, from a youth Resumen Este artículo aborda, desde la perspec-
perspective, an overview of the situation of you- tiva de juventud, un panorama de la situación
th in Latin America and the Caribbean based on de las juventudes en América Latina y el Caribe
global and regional socio-economic and demo- a partir de indicadores socioeconómicos y demo-
graphic indicators. It provides an intersectional gráficos globales y regionales. Provee un análisis
analysis of the oppressions and challenges that interseccional de las opresiones y desafíos que en-
young people face to achieve their full potential frentan las personas jóvenes para alcanzar su pleno
within a complex structure of power relations, desarrollo dentro de un entramado de relaciones
inequality, exclusion, discrimination and violen- de poder, desigualdad, exclusión, discriminación
ce. Based on the evidence, it highlights effective y violencia. Con base en evidencias, destaca inter-
and promising interventions for guiding invest- venciones eficaces y promisorias que orienten la
ment in youth through public policies, budgets inversión en juventud mediante políticas públicas,
and programmes at scale, as measures for redis- presupuestos y programas a escala, como medidas
tributing power and resources that contribute to redistributivas del poder y los recursos que contri-
the fulfilment of their human rights, autonomy, buyan al disfrute de sus derechos humanos, la au-
emancipation and agency to participate in public tonomía, emancipación y agencia para participar
affairs that affect them. en asuntos públicos que les afectan.
Key words Youth, Violence and health, Sexual Palabras clave Juventudes, Violencia y salud,
and reproductive health and rights, Promising Derechos sexuales y derechos reproductivos, Prác-
practices, Latin America and the Caribbean ticas promisorias, América Latina y el Caribe
1
Technical Division, Sexual
and Reproductive Health
Branch, United Nations
Population Fund (UNFPA).
605 Third Avenue, New York
NY 10158 USA.
jluna@unfpa.org2566
Luna JR
Introducción cuales 66 millones estaban en situación de pobre-
za extrema. Entre 25 y 30 millones de personas
El mundo es hoy el hogar de 1,800 millones de en las Américas corren el riesgo de caer de nuevo
jóvenes, quienes representan una cuarta parte de en la pobreza, incluyendo a las juventudes quie-
la población global y constituyen una fuerza vital nes enfrentan las consecuencias de la desigualdad
que se desarrolla en medio de cambios históricos a través de la falta de oportunidades educativas,
y transformaciones políticas, sociales, económi- vocacionales y de empleo decente. En 2016, sólo
cas y ambientales que determinan su presente y el 59,5% de las personas jóvenes entre 20-24 años
futuro1. habían completado la educación secundaria, mos-
Este artículo tiene como objetivos: a) ofrecer trando además desigualdades socioeconómicas;
un análisis panorámico de la situación de las ju- el 83,5% del quinto quintil había completado
ventudes en América Latina y el Caribe (ALC); b) este nivel educativo versus el 35,4% del primer
analizar interseccionalmente las opresiones y de- quintil. Esta situación también se refleja en el ac-
safíos que enfrentan para su desarrollo; y c) des- ceso a la formación profesional y universitaria, y
tacar prácticas promisorias basadas en evidencia la estratificada calidad educativa; inaccesible para
que orienten la inversión en políticas públicas a todas las personas jóvenes3,4.
escala. La metodología utilizada partió de la revi- Según datos censales disponibles en 2010, en
sión de literatura global y regional en torno a los ALC la población indígena era aproximadamente
principales indicadores socioeconómicos y de- 42 millones de personas quienes representaban el
mográficos desde la perspectiva de juventudes; el 8% de la población total. Si bien la pobreza afecta
análisis interseccional de los desafíos identifica- a muchos sectores de la población de la región,
dos a partir de los datos y la realidad; y la revisión ésta afecta desproporcionadamente a los pueblos
de evidencias, marcos normativos y estándares indígenas. El 43% de los hogares indígenas viven
internacionales para identificar prácticas promi- en pobreza y el 24% en pobreza extrema, limi-
sorias implementadas en la región que orienten tando las oportunidades de vida y desarrollo de
inversiones públicas. las personas, incluyendo a las juventudes5. Los
Las juventudes representan oportunidades pueblos afrodescendientes representan el 24% de
para el desarrollo de los países y de la región de la población, equivalente a 130 millones de per-
ALC, no obstante, el contexto sostenido de des- sonas quienes enfrentan desigualdades y brechas
igualdad estructural limita sus oportunidades de de equidad que impactan su pleno desarrollo6.
vida, por ello, a partir del análisis de la realidad, El desempleo juvenil, es otro factor estructural
la evidencia y el marco de derechos humanos e que marca las trayectorias de las juventudes en
igualdad de género; se proponen una serie de in- ALC donde la tasa de desocupación juvenil tri-
tervenciones promisorias que orienten la inver- plica la de la población adulta, uno de cada cinco
sión en juventudes como una medida de justicia jóvenes en la región busca trabajo y no lo en-
redistributiva que les permita generar agencia y cuentra. En 2019 las juventudes experimentaron
condiciones para su pleno desarrollo, con digni- impactos negativos en el campo laboral, la tasa de
dad y derechos humanos. desocupación juvenil aumentó 0,3 puntos y afec-
tó cerca del 20% de los jóvenes que buscan traba-
Situación actual de las juventudes, jo en la región7. Esto sumado a que uno de cada
un panorama de América Latina y el Caribe cinco jóvenes no estudia ni trabaja en la región
de ALC representando más de 20 millones de
En ALC se estima que actualmente viven alre- personas entre 15 y 24 años, situación que afec-
dedor de 165 millones de personas jóvenes entre ta principalmente a las mujeres jóvenes (66%) y
los 10 y los 24 años de edad, lo que significa que está ligado a condiciones de pobreza, vulnerabili-
una de cada cuatro personas en la región es jo- dad y exclusión, que en contextos como México y
ven2. Pese a los avances obtenidos en ALC en la Centroamérica se vincula, además, a la situación
reducción de la pobreza entre 2002-2014, a partir de violencia y delincuencia8. El trabajo de cuida-
de 2015 los niveles de pobreza y especialmente do afecta la capacidad de las mujeres, incluidas
de pobreza extrema aumentaron. En 2018, alre- las jóvenes, de obtener empleos, en ALC la dedi-
dedor del 30,1% de la población regional estaba cación de las mujeres al trabajo doméstico y de
bajo la línea de pobreza, mientras que un 10,7% cuidados no remunerado ronda entre un quinto
se encontraba bajo el umbral de la pobreza extre- y un tercio de su tiempo diario o semanal, mien-
ma. Aproximadamente 185 millones de personas tras que los hombres dedican cerca del 10% y
se encontraban en situación de pobreza, de las más del 43% de las mujeres declara que no busca2567
Ciência & Saúde Coletiva, 26(7):2565-2573, 2021
un empleo remunerado porque debe atender ta- ambos cónyuges son menores de 18 años– en ALC
reas de cuidado, trabajo doméstico o por la pro- la prevalencia (25%) es decir, una de cada cuatro
hibición de algún familiar9. mujeres jóvenes contrajo matrimonio por prime-
La violencia, la situación socioeconómica, ra vez o mantenía una unión temprana antes de
la falta de empleo y oportunidades inducen la cumplir los 18 años, situación que no ha variado
movilidad humana de las juventudes en ALC. La en los últimos 25 años. Los datos son más alar-
migración interna e internacional, incluida la mantes en países cuya prevalencia supera el 30%,
migración intrarregional, adquiere característi- tales como la República Dominicana, Nicaragua,
cas particulares según la subregión; las personas Honduras y Belice. Asimismo, México, Brasil y
de México y Centroamérica suelen emigrar ha- Colombia se encuentran entre los países con la
cia Estados Unidos, mientras en Sudamérica la mayor incidencia de matrimonio infantil a nivel
predominancia es la migración entre países. En global. En términos de masculinidades, los países
Centroamérica la situación socioeconómica y la de ALC tienen unas de las tasas más elevadas de
violencia fomentan la migración de mujeres, ni- matrimonio infantil de varones en el mundo. De
ñas, niños y adolescentes10 quienes incluso viajan los 10 países que cuentan con datos disponibles, 9
no acompañados poniendo en riesgo su vida e in- se ubican por encima del promedio mundial17,18.
tegridad en el tránsito, donde pueden ser víctimas Los homicidios son la tercera causa de mor-
de una serie de violaciones de derechos, incluida talidad para los hombres a nivel global. Según
la violencia sexual, la explotación y el tráfico de datos de 133 países, en países de ingresos bajos
personas. La migración forzada afecta a países y medianos, las tasas estimadas de homicidio más
centroamericanos por violencia social y económi- elevadas se registran en la región de las Américas,
ca, a Colombia producto de la violencia emanada con 28,5 homicidios por 100.000 habitantes, se-
del conflicto armado interno y a Venezuela por la guida por África con una tasa de 10,9 homicidios
crisis económica y sociopolítica11,12. por 100.000 habitantes19. Un análisis realizado
Aunque la tasa de fecundidad total ha ido dis- con base en la Encuesta Mundial de Salud Escolar
minuyendo en ALC a lo largo de un poco más de demuestra que los hombres jóvenes tienen mayor
tres décadas, la tasa de fecundidad en adolescen- probabilidad de involucrarse en actos violentos,
tes solo ha disminuido ligeramente durante ese como la agresión y peleas físicas, en comparación
período y sigue siendo la segunda más alta del a sus compañeras mujeres. No obstante, la inti-
mundo, sólo superada por África Subsahariana. midación, no presenta especificidad por sexo20.
En 2019, la tasa de fecundidad en adolescentes se La violencia contra las mujeres afecta a una de
calculaba en 61 nacimientos por cada 1000 muje- cada tres mujeres globalmente, quienes han sido
res de 15 a 19 años, en comparación con una tasa objeto de violencia física y/o sexual por parte de
de 42 en el resto del mundo13,14. Si bien la región la pareja o de violencia sexual fuera de la pare-
tiene una tasa de prevalencia de 57% en el uso ja a lo largo de su vida, 38% de las muertes de
de anticonceptivos modernos en adolescentes, la mujeres han sido ocasionadas por su pareja ín-
proporción de nacimientos de madres adolescen- tima y 7% de las mujeres han sido víctimas de
tes representa el 20% siendo la proporción regio- violencia sexual por alguien que no es su pareja21.
nal más alta del mundo15. Información oficial proporcionada al Observato-
La primera relación sexual, el primer matri- rio de Igualdad de Género de ALC de la Comi-
monio y el primer nacimiento son algunos de los sión Económica para América Latina y el Caribe
acontecimientos vitales que marcan las trayecto- (CEPAL), en 2019 al menos 4,555 mujeres de
rias de las personas jóvenes, en particular las de 18 países fueron víctimas de femicidio, la máxi-
las mujeres. La edad mediana de la primera re- ma expresión de la violencia contra las mujeres
lación sexual, el primer matrimonio y el primer y niñas22. La socialización de género inmersa en
nacimiento han aumentado en el África subsa- imaginarios sociales violentos y normas sociales
hariana, al igual que el primer matrimonio y el de género inequitativas sostenidas por sistemas
primer nacimiento en Asia y África septentrional. de poder patriarcales, hace que las juventudes en
En ALC, el momento del primer nacimiento no la región de ALC naturalicen la violencia machis-
cambió significativamente y la edad mediana re- ta. Un estudio realizado en 8 países con personas
gional de la primera relación sexual disminuyó jóvenes de 15 a 25 años de ALC muestra que en el
considerablemente16. grupo de adolescentes de 15 a 19 años el 65% de
Mientras otras regiones han logrado avances los hombres y 45% de las mujeres, creen que las
en la reducción del matrimonio infantil –matri- mujeres se hacen las difíciles, dicen no, pero en
monio o unión formal o informal en el que uno o realidad quieren decir sí, creencia que naturaliza2568
Luna JR
la violencia sexual; 87% de las personas jóvenes reflejar sociedades de bienestar social que brin-
creen que los hombres tienen mayor deseo sexual den garantías de derechos fundamentales en con-
que las mujeres, 77% percibe como normal que diciones de igualdad, libres de discriminación y
los hombres tengan relaciones sexuales con otras violencias.
personas y es mal visto si las mujeres lo hacen y; el
acoso callejero tiene un 77% de aceptación como Desafíos que enfrentan las juventudes
algo natural23. Otra manifestación de la violencia de América Latina y el Caribe
basada en género (VBG), es la violencia contra
las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e in- América Latina y el Caribe, si bien no es la
tersexuales (LGBTI) con base en su orientación región más pobre del mundo, es la región más
sexual o identidad de género. Diversas organiza- desigual28 esto estructura una serie de desafíos
ciones civiles en ALC señalan que la expectativa que se cruzan en los cuerpos y las vidas de millo-
de vida de las mujeres trans en la región es de 30 a nes de personas jóvenes y obstaculizan su pleno
35 años de edad y según información estadística desarrollo y bienestar. Hace 25 años tres grandes
recolectada por la Comisión Interamericana de hitos establecieron rutas globales para abordar
Derechos Humanos (CIDH) 80% de las personas estos desafíos: 1) Declaración y Programa de
trans asesinadas durante un período de 15 meses Acción de la Conferencia Mundial de Derechos
tenía 35 años de edad o menos24. Humanos, Viena 1993; 2) Programa de Acción de
La violencia autoinfligida es otra realidad que la Conferencia Internacional sobre Población y
viven las juventudes de ALC, según la Organiza- Desarrollo (CIPD) Cairo 1994; 3) Plataforma de
ción Mundial de la Salud (OMS) 2014, el suicidio Acción Mundial de la Cuarta Conferencia Mun-
es la cuarta causa de muerte entre las y los ado- dial sobre la Mujer, Beijing 199529-31 estos marcos
lescentes de 10 a 19 años de edad en las Américas. normativos establecieron un antes y un después
Estimaciones realizadas con base en los datos de en la comprensión de los derechos humanos de
la Encuesta Mundial de Salud Escolar muestran las mujeres, en particular, las relaciones entre los
que las jóvenes tienen mayores probabilidades asuntos de población y el desarrollo, el reconoci-
que los jóvenes varones de manifestar compor- miento de la sexualidad como un asunto de dere-
tamientos suicidas. La prevalencia de ideación chos y trazó una visión clara y visionaria respecto
suicida en varones oscilaba alrededor de 11% en a la urgencia de avanzar en asuntos de igualdad
Centroamérica y el Cono Sur, y 17% en el Caribe de género.
de habla inglesa, en mujeres oscilaba entre 19% El análisis del progreso a 25 años de la CIPD
en el Cono Sur y 26% en los países andinos. Los muestra que ha habido avances globales en la re-
intentos reales de suicidio en varones oscilaban ducción de embarazos en adolescentes y el matri-
entre 9% en Centroamérica y 17% en el Caribe monio infantil, aunque en ALC estos indicadores
de habla inglesa, en mujeres oscilaba entre 17% muestran brechas importantes que deben ser
en Centroamérica y 23% en los países andinos, abordadas de forma sistémica por los gobiernos,
respectivamente25. la sociedad civil, la academia y los generadores
Las personas jóvenes con discapacidad expe- de opinión pública. Se ha avanzado en la gene-
rimentan mayores riesgos de sufrir violencia. ración de evidencias, programas y políticas para
Globalmente, una de cada ocho personas adultas responder a la salud sexual y reproductiva (SSR)
vive con una discapacidad, esto equivale a más de de adolescentes y jóvenes, no obstante, alrededor
mil millones de personas. En ALC la proporción del mundo siguen existiendo resistencias que
es similar, las personas con discapacidad repre- impiden el avance en la provisión de un paque-
sentan alrededor del 13% de la población26. Las te integral de servicios de SSR para las personas
mujeres con discapacidad están expuestas a un jóvenes desde un marco que respete los derechos
mayor riesgo de sufrir violencia que los hombres sexuales y reproductivos (DSR). Otros indica-
con discapacidad y que las mujeres sin discapaci- dores como la violencia por parte de la pareja
dad, encontrándose en mayor desventaja que sus han empeorado, generando un nuevo llamado
pares hombres, con menos oportunidades labo- a abordar con mayor sistematicidad, programas
rales que las hace vulnerables a vivir en condicio- de masculinidades con base en evidencias y enfo-
nes de pobreza y subordinación, por lo tanto, con ques de género transformadores que involucren
menos poder y recursos para romper círculos de a hombres y niños en asuntos de igualdad entre
violencia y discriminación27. los géneros32,33.
El panorama de la situación socioeconómica Los datos disponibles permiten hacer un aná-
y demográfica de las juventudes en ALC, dista de lisis interseccional de los desafíos que enfrentan las2569
Ciência & Saúde Coletiva, 26(7):2565-2573, 2021
juventudes por condición de edad, género, clase, las riendas de su historia personal, autonomía y
raza, orientación sexual e identidad de género y emancipación; y (d) Poder con: al participar co-
discapacidades, dentro de un sistema de relacio- lectivamente para alcanzar sociedades más justas
nes desiguales de poder que determina accesos, y equitativas, valorando la diversidad, y constru-
oportunidades, discriminación y exclusión: (a) yendo solidaridad intergeneracional34.
Adultismo: Juventudes experimentan discrimina-
ción, exclusión, abuso de poder y autoridad, me- Invertir en las juventudes en América
nores oportunidades de empleo decente y niveles Latina y el Caribe, intervenciones
de ingresos, desinversión, negación del derecho promisorias e instrumentos para la acción
a la participación, ejercicio de la sexualidad, au-
todeterminación, autonomía y emancipación; La evidencia global ha planteado que la in-
(b) Capacitismo: Juventudes con discapacidad versión en la salud de las y los adolescentes ge-
enfrentan discriminación, exclusión, invisibili- nera un triple dividendo, es decir beneficios en
zación, violencia, inaccesibilidad y desprotección el presente, en el futuro como personas adultas y
social; (c) Clasismo: viven desigualdad, migra- hasta la siguiente generación. Este triple dividen-
ción forzada, estratificación en el acceso y disfru- do podría tener efectos positivos en la salud, el
te de derechos como la educación, la salud –se- bienestar y en el desarrollo de capacidades para
xual y reproductiva, mental, nutricional, etc.−, la vida productiva y para la crianza efectiva de las
la seguridad, el empleo y la seguridad social; (d) generaciones venideras. Por ello, las inversiones
Heterosexismo: Juventudes LGBTI viven discri- a gran escala en la adolescencia y juventud de-
minación por orientación sexual e identidad de berían considerarse como estrategias esenciales e
género, violencia, acoso, exclusión, violencia sim- intergeneracionales para la salud y el bienestar de
bólica, vulneración de derechos, falta de acceso todas las sociedades35. Dichas inversiones en ju-
a servicios, suicidio, crímenes de odio y menor ventud deberían estar orientadas por la evidencia
expectativa de vida; (e) Racismo: Juventudes in- de intervenciones eficaces o promisorias, y obser-
dígenas y afrodescendientes enfrentan discrimi- var compromisos internacionales provenientes
nación, racismo, desigualdad, despojo de terri- de instrumentos normativos como el Programa
torios y recursos naturales, exclusión en salud, de Acción de la CIPD, la Plataforma de Acción de
educación, empleo e ingresos de forma sistémica Beijing, los Objetivos de Desarrollo Sostenible, así
e inaccesibilidad a servicios interculturales; mi- como documentos técnicos como la Estrategia
grantes, desplazados internos y refugiados sufren Mundial para la Salud de la Mujer, el Niño y el
discriminación y xenofobia; y (f) Sexismo: Muje- Adolescente (2016-2030), la Guía de Acción Ace-
res jóvenes sufren VBG, acoso callejero, violencia lerada para la Salud de Adolescentes (AA-HA! por
sexual y de pareja, discriminación, embarazo en sus siglas en inglés), la estrategia global de UN-
la adolescencia, matrimonio infantil, femicidios, FPA Mi Vida, Mi Cuerpo, Mi Mundo y la Serie de
suicidio, violencia epistémica y obstétrica. Hom- Orientaciones sobre Prevención de la Violencia de
bres jóvenes sufren la violencia social, homicida OMS; además de instrumentos regionales como
y física derivado de mandatos de la masculinidad el Consenso de Montevideo sobre Población y De-
hegemónica. sarrollo y su Guía Operacional y la iniciativa 165
Abordar los desafíos requiere transformar las Millones de Razones que delinean rutas estraté-
estructuras, las relaciones y la distribución del gicas a seguir para invertir en intervenciones a
poder y los recursos, y que las juventudes puedan niveles de las políticas en la región de ALC36-38.
ejercer ciudadanías con agencia que les permitan Las políticas públicas son instrumentos de ca-
acceder mediante la participación, a espacios, rácter político-técnicos que dirigen las acciones
redes y recursos que garanticen su bienestar y de los gobiernos, en asuntos de interés público y
derechos humanos. Esto implicaría que accedan que tendrán un impacto a escala en la vida de las
al: (a) Poder sobre: a través de políticas de redis- poblaciones39 las cuales para ser operativas deben
tribución de recursos y de reconocimiento, que traducir la voluntad política en programas, estra-
incluye, además, el ejercicio de los DSR; (b) Po- tegias, planes y presupuestos nacionales orien-
der para: mediante políticas sostenidas de acceso tados a implementar intervenciones basadas en
a conocimientos, habilidades y oportunidades evidencia como medidas de redistribución des-
para que las juventudes alcancen su pleno poten- tinadas a generar cambios sociales, económicos,
cial; (c) Poder dentro: Atañe a la agencia personal políticos y culturales que garanticen los derechos
ligada al sentido de identidad, autovalor y reco- y el bienestar de las juventudes. Entre las inter-
nocimiento de los propios derechos para tomar venciones eficaces y promisorias se destacan:2570
Luna JR
- Programas de educación integral en sexuali- las personas jóvenes en países como Argentina,
dad (EIS) este enfoque educativo basado en los Colombia, Chile, El Salvador, Ecuador, Guate-
derechos humanos y el género, cuando se aplica mala, México, Panamá y Uruguay, adhiriéndo-
dentro o fuera de la escuela ha demostrado te- se en su mayoría a las Normas Mundiales para
ner efectos positivos en retrasar el inicio de las mejorar la calidad de los servicios de atención de
relaciones sexuales, menor frecuencia en las re- salud de los adolescentes de OMS. Por ejemplo,
laciones sexuales, menor cantidad de parejas en Chile, según Páez (2018 apud Venkatraman et
sexuales y comportamientos de riesgo, y mayor al., 201943) a través de la implementación del Pro-
uso de condones y de anticonceptivos. Cuando se grama Salud Integral de Adolescentes y Jóvenes
implementan con un enfoque fuerte en género y durante el periodo 2000-2017 lograron una re-
empoderamiento muestran mayor eficacia40. Los ducción del 51% en la proporción de nacimien-
programas basados únicamente en la abstinen- tos en madres menores de 19 años. El programa
cia no han mostrado eficacia, pese a ello algunos fue llevado a escala a través de sistemas existentes,
países aún implementan este tipo de programas13 el desarrollo de capacidades y la regionalización
lo que representa la posibilidad de causar daño. gradual, garantizando su sostenibilidad mediante
Pese a diversas fuerzas de oposición, en ALC se el uso de datos, la incidencia y diálogo político,
ha impulsado la EIS desde hace más de medio si- permitiendo sostener el programa durante tres
glo, mediante la implementación de programas, períodos de gobiernos con distintas posiciones
la generación de enfoques ‒la interculturalidad, ideológicas43.
gestión de la diversidad, el abordaje con familias - Programas centrados en niñas adolescen-
y el trabajo en el campo de la discapacidad‒, he- tes (PCNA): la evidencia ha demostrado que, a
rramientas técnicas, pedagógicas y políticas. través de la construcción de activos protectores
- Programas de prevención de embarazos en ‒sociales, de salud, humanos, cognitivos y eco-
adolescentes (PEA): diversos países de ALC han nómicos‒ los programas de empoderamiento
adoptado planes y estrategias intersectoriales de para niñas adolescentes (10-14 años) permitían
PEA como respuesta a la alta tasa de fecundidad mejorar considerablemente la inscripción y per-
en adolescentes. Diversos países de la región han manencia en la escuela, los conocimientos sobre
adoptado programas de PEA con diversos niveles sexualidad y uso de anticonceptivos, y aumenta-
de eficacia, por ejemplo, Uruguay ha implemen- ban la edad del matrimonio44. Los PCNA buscan
tado leyes y políticas progresistas, fuertes res- alcanzar de manera dirigida a las niñas adoles-
puestas gubernamentales a nivel multisectorial centes en condiciones de mayor vulnerabilidad;
de la mano con la participación activa de la so- indígenas, afrodescendientes, rurales, pobres,
ciedad civil, lo cual ha conducido a descensos en que no viven con sus padres, migrantes, casa-
la fertilidad en adolescentes. Este abordaje mul- das o madres, trabajadoras domésticas, etc. Los
tisectorial ha incluido los programas Uruguay PCNA cuando son abordados desde el modelo
Crece Contigo, espacios de educación y cuidados ecológico pueden mejorar resultados en educa-
para hijas e hijos de estudiantes, servicios de sa- ción, salud, economía, capital social, actitudes de
lud sexual y reproductiva y el acceso a educación género más equitativas y sobre la violencia, ade-
integral en sexualidad fuera de la escuela. El país más aumentan su eficacia cuando se acompañan
ha obtenido resultados positivos, sin embargo, de transferencias de efectivo o en especie. En ALC
la implementación de programas ha encontrado se han implementado PCNA focalizados a nivel
desafíos ante la objeción de conciencia de pro- comunitario que han demostrado eficacia, por
veedores de salud, así como disparidades en la ejemplo, el Programa Abriendo Oportunidades en
formación docente en EIS que impactan la am- Guatemala que ha demostrado retrasar la edad
pliación a escala41. La inversión en políticas de del matrimonio y disminuir la violencia física y el
PEA debe observar la evidencia de OMS sobre las Programa Abriendo Futuros en México ha demos-
intervenciones eficaces para “Prevenir el embara- trado mejorar el conocimiento en SSR y elevar la
zo precoz y los resultados reproductivos adversos edad deseada para casarse o unirse45.
en adolescentes en los países en desarrollo”42. - Programas de masculinidades con hombres
- Sistemas de salud que respondan a las nece- jóvenes: la revisión de evidencias señala que la es-
sidades de adolescentes y jóvenes: en el marco de trategias con hombres y niños que han demostra-
la Cobertura Universal de Salud estos programas do ser eficaces a nivel individual y comunitario
buscan responder a las necesidades específicas y para cambiar las actitudes y comportamientos
los derechos humanos de las juventudes. En ALC de género incluyen una combinación de educa-
se han implementado servicios amigables para ción entre pares, utilizando defensores o mode-2571
Ciência & Saúde Coletiva, 26(7):2565-2573, 2021
los masculinos, programas en medios de comu- de semana y días festivos, cuyas evaluaciones ob-
nicación a gran escala, programas en el lugar de servaron descenso de las principales expresiones
trabajo y programas comunitarios basados en de violencia, desarrollo de un mayor sentido de
derechos, cuyo objetivo es reducir la desigualdad pertenencia, aumento de la autoestima personal
entre los géneros y cambiar las normas sociales46. y comunitaria y rendimiento escolar. Esta inter-
En ALC se han generado las bases de los progra- vención ha sido replicada en Argentina, Guate-
mas para trabajar con jóvenes, el Programa H di- mala, México y Uruguay50.
señado por una alianza de organizaciones civiles,
se basa en el trabajo grupal participativo alrede- Aún quedan caminos abiertos por recorrer
dor de más de setenta actividades orientadas por
un currículo que aborda cuestiones de género, ALC tiene una larga experiencia en la imple-
sexualidad y salud reproductiva, paternidad y mentación de programas y políticas innovadoras
cuidado, prevención de violencia y del Virus de con enfoques y miradas críticas que buscan resol-
Inmunodeficiencia Humana (VIH). Ocho eva- ver los problemas estructurales. Algunas inter-
luaciones, en su mayoría cuasi experimentales, venciones aplican el modelo ecológico, la integra-
han demostrado efectos positivos en actitudes lidad y estrategias multicomponente que abordan
y comportamientos de género más equitativos, los derechos humanos, el género y la racialidad.
mejoras en la comunicación de la pareja, reduc- No obstante, los países enfrentan desafíos de in-
ción de la violencia basada en género y mejores versión pública, laicidad, democratización, in-
actitudes en torno al cuidado47. clusión y protección social, sostenibilidad y ex-
- Programas de prevención de violencia juvenil: pansión a escala de intervenciones dirigidas para
con base en la perspectiva de juventud se desta- las juventudes, lo cual permita alcanzar un triple
ca en este artículo la evidencia de intervencio- dividendo que sostenga cambios generacionales.
nes orientadas a cambios transformadores que En ALC iniciativas como la Declaración Mi-
tomen en cuenta el sistema patriarcal, desigual, nisterial Prevenir con Educación que convocó a los
discriminatorio y excluyente en el que se gesta sectores de salud y educación en torno a la EIS y
y perpetúa la violencia, añadido a la necesidad el acceso a servicios de SSR para las juventudes,
de abordarla desde una visión democrática, sis- así como mecanismos de observación, participa-
témica y respetuosa de los derechos humanos48. ción, incidencia política y auditoría social como
Una de las prácticas eficaces es la regulación de Mira que te Miro en torno a los DSR resultan
la venta y consumo de alcohol, se ha demostrado ser indispensables para la participación juvenil
que regular horarios de venta y consumo de alco- como parte del ejercicio de la ciudadanía, la exi-
hol en bares y restaurantes por las noches pueden gibilidad de derechos y el avance democrático en
reducir la violencia. Intervenciones promisorias la región.
para prevenir la violencia juvenil incluyen: a) la Alcanzar la salud como el completo estado
capacitación vocacional y el empleo que genera de bienestar para las juventudes en ALC, libres
oportunidades y previene que las juventudes se de violencias y opresión, donde sus derechos hu-
involucren en violencia o actos delictivos, b) los manos sean garantizados, incluyendo los DSR,
programas de justicia restaurativa que generan requiere asegurar que los sistemas y servicios pú-
procesos de mediación −entre las víctimas, vic- blicos respondan a sus necesidades, sean entrega-
timarios, las familias y el sistema de justicia− los dos a través de múltiples plataformas intersecto-
que incluyen orientación familiar son los que riales, fortaleciendo la participación juvenil y los
muestran los resultados más prometedores, c) las mecanismos de rendición de cuentas. Sólo así, los
medidas no privativas de libertad que generan al- cambios políticos e institucionales alcanzados por
ternativas distintas al encarcelamiento49. La expe- la demanda y acción de la ciudadanía podrán ser
riencia de las Escuelas Abiertas surgida en Brasil sostenidos en el tiempo y contribuirán a que cada
demostró resultados prometedores al ser imple- persona joven pueda decidir sobre su cuerpo, su
mentada abriendo las escuelas durante los fines vida y su mundo con dignidad y derechos51.2572
Luna JR
Referencias
1. United Nations Population Fund (UNFPA). My Body, 17. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNI-
My Life, My World Rights and choices for all adolescents CEF). Perfil del matrimonio infantil y las uniones tem-
and youth: a UNFPA global strategy. New York: UN- pranas en América Latina y el Caribe. Nueva York:
FPA; 2019. UNICEF; 2019.
2. Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNF- 18. Girls Not Brides. Matrimonio Infantil en América Lati-
PA). 165 Millones de Razones, Un llamado a la acción na y el Caribe. Londres: GNB; 2017.
para la inversión en adolescencia y juventud en América 19. Organización Mundial de la Salud (OMS). Informe so-
Latina y el Caribe. Panamá: UNFPA; 2018. bre la situación mundial de la prevención de la violencia
3. Comisión Económica para América Latina y el Caribe 2014.Resumen de Orientación. Ginebra: OMS; 2014.
(CEPAL). Panorama Social de América Latina, 2019. 20. Organización Panamericana de la Salud (OPS). Vio-
Santiago: CEPAL; 2019. lencia juvenil interpersonal en América Latina y el Ca-
4. Organización Panamericana de la Salud (OPS). La ribe de habla inglesa. Washington, D.C.: OPS-OMS;
salud de los adolescentes y jóvenes en la Región de las 2015.
Américas: la aplicación de la Estrategia y el Plan de ac- 21. World Health Organization (WHO). Global and re-
ción regionales sobre la salud de los adolescentes y jóve- gional estimates of violence against women: prevalence
nes (2010-2018). Washington, D.C: OPS; 2018. and health effects of intimate partner violence and non
5. Banco Mundial. Latinoamérica Indígena en el Siglo -partner sexual violence. Geneva: WHO; 2013.
XXI. Washington, D.C: Banco Mundial; 2015. 22. Comisión Económica para América Latina y el Caribe
6. Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNF- (CEPAL). Indicadores femicidio. Chile: CEPAL-Obser-
PA). Implicaciones del COVID-19 en la población afro- vatorio de Igualdad de Género de América Latina y el
descendiente de América Latina y el Caribe. Panamá: Caribe; 2018.
UNFPA; 2019. 23. OXFAM International. Informe Rompiendo moldes:
7. Organización Internacional del Trabajo (OIT). Pano- transformar imaginarios y normas sociales para elimi-
rama Laboral 2019 América Latina y el Caribe. Lima: nar la violencia contra las mujeres. Reino Unido: OX-
OIT; 2019. FAM International; 2018.
8. De Hoyos RE, Rogers H, Székely M. Ninis en América 24. Comisión Interamericana de Derechos Humanos
Latina: 20 millones de jóvenes en busca de oportunida- (CIDH). Violencia contra personas Lesbianas, Gay,
des. Washington, D.C.: Banco Mundial; 2016. Bisexuales, Trans e Intersex en América. Washington,
9. Comisión Económica para América Latina y el Caribe D.C.: OEA-CIDH; 2015.
(CEPAL). Los cuidados en América Latina y el Caribe. 25. Organización Panamericana de la Salud (OPS) Vio-
Textos seleccionados 2007-2018. Chile: CEPAL; 2018. lencia juvenil autoinfligida en América Latina y el Ca-
10. Organización Internacional de las Migraciones ribe de habla inglesa. Washington, D.C.: OPS-OMS;
(OIM). Informe sobre las Migraciones en el Mundo 2015.
2018. Ginebra: OIM; 2018. 26. Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Somos to-
11. Gómez GM, Astaiza GM, Souza MC. Las migraciones dos: Inclusión de las personas con discapacidad en Amé-
forzadas por la violencia: el caso de Colombia. Cien rica Latina y el Caribe. Washington, D.C.: IDB; 2019.
Saude Colet 2008; 13(5):1649-1660. 27. Luana M, Ortiz D, Urban AM. Violencia contra las
12. Comisión Interamericana de Derechos Humanos mujeres y niñas con discapacidad: América Latina y el
(CIDH). Resolución 2/18 Migración forzada de perso- Caribe. Washington, D.C.: IDB; 2019.
nas venezolanas. Washington, D.C.: CIDH-OEA; 2018. 28. Naciones Unidas. América Latina, no la más pobre pero
13. Organización Panamericana de la Salud (OPS). Fon- sí la más desigual [Internet]. 2018. Disponible en: ht-
do de Población de las Naciones Unidas (UNFPA). tps://news.un.org/es/story/2018/04/1431712.
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNI- 29. United Nations. Vienna Declaration and Programme of
CEF). Acelerar el progreso hacia la reducción del emba- Action. Geneva: OHCHR; 2020.
razo en la adolescencia en América Latina y el Caribe. 30. United Nations. International Conference on Popula-
Washington, D.C.: OPS; 2018. tion and Development Programme of Action. New York:
14. The World Bank Group. Data. Adolescent fertility rate UNFPA; 2014.
(births per 1,000 women ages 15-19). Washington, D.C: 31. Naciones Unidas (NU). Declaración y Plataforma de
The World Bank; 2021. Acción de Beijing. New York: UN Women; 2014.
15. Liang M, Simelane S, Fortuny G, Chalasani S, Weny 32. Caroline W. Kabiru. Adolescents’ Sexual and Repro-
K, Salazar P, Jenkins L, Moller AB, Venkatraman CM, ductive Health and Rights: What Has Been Achieved
Say L, Michielsen K, Engel DMC, Snow R. The State of in the 25 Years Since the 1994 International Confe-
Adolescents Sexual and Reproductive Health. J Ado- rence on Population and Development and What Re-
lesc Health 2019; 65:S3eS15. mains to Be Done? J Adolesc Health 2019; 65:S1eS2.
16. Bongaarts J, Mensch BS, Blanc AK. Trends in the age
at reproductive transitions in the developing world:
The role of education. Pop Studies 2017; 71(2):139-
154.2573
Ciência & Saúde Coletiva, 26(7):2565-2573, 2021
33. Patton GC, Sawyer SM, Santelli, Ross DA, Afi fi R, 45. Population Council. Delivering Impact for Adolescent
Allen NB, Arora M, Azzopardi P, Baldwin W, Bonell Girls. Emerging Findings from Population Council Re-
C, Kakuma R, Kennedy E, Mahon J, McGovern T, search. New York: PC; 2018.
Mokdad AH, Patel V, Petroni S, Reavley N, Taiwo K, 46. Edström J, Hassink A, Shahrokh T, Stern E. Engen-
Waldfogel J, Wickremarathne D, Barroso C, Bhutta dering Men: A Collaborative Review of Evidence on
Z, Fatusi AO, Mattoo A, Diers J, Fang J, Ferguson J, Men and Boys in Social Change and Gender Equality,
Ssewamala F, Viner RM. Our future: a Lancet com- EMERGE Evidence Review. Washington, D.C.: Pro-
mission on adolescent health and wellbeing. Lancet mundo-US, Sonke Gender Justice and the Institute of
2016; 387:2423-2478. Development Studies; 2015.
34. Hillenbrand E, Karim N, Mohanraj P, Wu D. Measu- 47. Promundo. Program H. Washington, D.C.: Promun-
ring gender-transformative change A review of literatu- do; 2020.
re and promising practices. Atlanta: CARE USA; 2015. 48. Aguilar I. Prevención de las violencias en el Triángulo
35. Starrs AM, Ezeh AC, Barker G, Basu A, Bertrand JT, Norte de Centroamérica. Desafíos Actuales. Rev Aná-
Blum R, Coll-Seck A, Grover A, Laski L, Roa M, Sathar lisis Realidad Nacional 2020; 9(183):98-130.
ZA, Say L, Serour GI, Singh S, Stenberg K, Temmerman 49. Abdul Latif Jameel Poverty Action Lab (J-PAL) LAC.
M, Biddlecom A, Popinchalk A, Summers C, Ashford ¿Qué funciona para prevenir y reducir la violencia ju-
LS. Accelerate progress–sexual and reproductive heal- venil? Revisión sistemática de evidencias sobre preven-
th and rights for all: report of the Guttmacher–Lancet ción y reducción de la violencia juvenil con un análisis
Commission. Lancet 2018; 391:2642-2692. aplicado al contexto mexicano. República Dominicana:
36. Naciones Unidas (NU). Estrategia Mundial para la J-PAL; 2018.
Salud de la Mujer, el Niño y el Adolescente (2016-2030) 50. Rodríguez E. Escuelas Abiertas, prevención de la violen-
Sobrevivir, prosperar, transformar. Nueva York: NU; cia y fomento de la cohesión social en América Latina:
2015. experiencias destacadas y desafíos a encarar. Panamá:
37. World Health Organization (WHO). Global Accele- Parlatino-GIZ Prevenir; 2011.
rated Action for the Health of Adolescents (AA-HA!) 51. Engel DMC, Paul M, Chalasani S, Gonsalves L, Ross
Guidance to Support Country Implementation. Gene- DA, Venkatraman CM, Cole CB, Carvalho C, Hayes
va: WHO; 2017. B, Philipose A, Beadle S, Ferguson BJ. A Package of
38. Organización Mundial de la Salud (OMS). Prevención Sexual and Reproductive Health and Rights Interven-
de la Violencia: la evidencia. Serie de orientaciones so- tions - What Does It Mean for Adolescents? J Adolesc
bre prevención de la violencia. Texas: OPS; 2013. Health 2019; 65:S41eS50.
39. Aguilar L. Política Pública: Una visión panorámica. Bo-
livia: PNUD; 2012.
40. Naciones Unidas (NU). Orientaciones Técnicas Inter-
nacionales sobre educación en sexualidad. París: UNES-
CO; 2018.
41. Organización Mundial de la Salud (OMS). Directrices
de la OMS para la prevención del embarazo precoz y los
resultados reproductivos adversos en adolescentes de los
países en desarrollo. Ginebra: OMS; 2011.
42. Venkatraman CM, Ferguson J, Plesons M, Paul M,
Chalasani S, Amin A, Pallitto C, Sommers M, Avila R,
Biaukula KVE, Husain S, Janušonytė E, Mukherji A,
Nergiz AI, Phaladi G, Porter C, Sauvarin J, Camacho
AV, Engel DMC. The Political, Research, Programma-
tic, and Social Responses to Adolescent Sexual and Re-
productive Health and Rights in the 25 Years Since the
International Conference on Population and Develo-
pment. J Adolesc Health 2019; 65(6 Suppl.):S16-S40.
43. Venkatraman CM, Plesons M, Hadley A, Maddaleno
M, Oljira L, Tibebu S, Akwara E, Engel D. Lessons le-
arned from national government-led efforts to reduce Artículo presentado en 16/06/2020
adolescent pregnancy in Chile, England and Ethiopia. Aprobado en 31/03/2021
Scaling Early Childhood Matters 2019; 2019:50-56. Versión final presentada en 02/04/2021
44. Erulkar A, Muthengi E. Evaluation of Berhane Hewan:
A Program to Delay Child Marriage in Rural Ethiopia.
Int Perspect Sexual Reproductive Health 2009; 35(1):6- Editores Jefes: Romeu Gomes, Antônio Augusto Moura da
14. Silva
CC BY Este é um artigo publicado em acesso aberto sob uma licença Creative CommonsTambién puede leer
