TRADUCTOR, TRAIDOR... TESTIMONIO DEL RESPONSABLE DE LA VERSIÓN INGLESA
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TRADUCTOR, TRAIDOR... TESTIMONIO DEL RESPONSABLE DE LA VERSIÓN INGLESA «Los límites de mi idioma representan los límites de mi mundo» «¿Cuál es su objetivo en filosofía? Enseñarle a la mosca cómo escapar del frasco» Ludwig Wittgenstein ROGER ABSALOM Cultural Research Institute Sheffield Hallam University Si bien no es mi intención embarcarme aquí en una extensa disertación acerca de los prin- cipios generales de la traducción, puede resultar útil efectuar unos pocos comentarios so- bre el tipo de problemas que enfrenta el traductor cuando aborda un texto creado por un razonador erudito cuyo pensamiento —y cuyo todo ser, en realidad— está empapado de un compromiso cultural, sentido desde lo más pro- interpretativa y decodificadora continua e interactiva fundo, que resuena a través de un amplio espectro —un trabajo de traducción, aun cuando están leyen- de disciplinas intelectuales. Me refiero, como estoy do en su lengua madre. seguro de que se habrán dado cuenta, a Giacomo Becattini, quien ha sido mi mentor, guía y amigo du- No obstante, a excepción de las formas de comuni- rante casi cuarenta años y me ha conducido a través cación (las ciencias físicas y matemáticas), que de la Divina comedia de la economía política del poseen un sistema de signos completamente distrito industrial e introducido en la noble ciencia de- racional y transparente, no puede existir una forma de nominada en inglés Pratología (1). lenguaje natural neutral desde el punto de vista emo- cional, menos aún cuando un autor, sin importar A pesar de que a nivel estructural los idiomas como cuán científicas sean sus intenciones, se siente com- tales difieren sólo en lo que deben transmitir y no en prometido con todas sus fuerzas en la búsqueda de lo que pueden transmitir, a nivel semiótico, la tra- las verdades de las cuales está convencido, para ducción debe encarar las condiciones materiales «enseñarle a la mosca cómo escapar del frasco». de los conceptos, sus formas lingüísticas y discursivas, los distintos significados y funciones que llegan a adquirir en diferentes situaciones culturales. Desde EL COLORIDO DEL LÉXICO DE BECATTINI luego, es cierto que donde se utiliza el idioma de una manera racional, como en los discursos de las cien- Según Roman Jacobson, lo que en términos de semi- cias humanas, el modelo gramatical reviste relativa- ótica puede resultar «intraducible» es el lenguaje mente una menor importancia, dado que lo que ex- generado «en bromas, sueños, magia, en pocas pal- perimentan los lectores es en sí mismo una acción abras, en aquello que uno llamaría mitología oral de 359 >Ei 159
R. ABSALOM todos los días, y en poesía sobre todo». En este senti- cursos de sus propios idiomas, e intentar insertarlas en do se puede pensar que nada escrito por Becattini la cultura receptora o, por el contrario, pueden negar debería ser, en el sentido estricto de la palabra, in- la existencia o, en todo caso, la relevancia, de tales traducible, desde el momento que él no alega ser diferencias y adecuar lo que pertenece a una cultura bromista, mago ni poeta. distinta mediante el uso de subterfugios metatex- tuales como gráficos, ilustraciones, paréntesis y notas Así y todo, la cuestión no es tan simple. Cuando tra- al pie explicativos. Deben decidir si el objetivo funda- bajaba para un organismo estadounidense en Bruse- mental debería ser la homogeneización de culturas las, informes de mi autoría recibieron duras críticas por e idiomas en una única cápsula global o, por el con- estar escritos en un inglés «colorido» y no en el buro- trario, abstenerse de cualquier reduccionismo seme- cratés plomizo, preferido por la Comisión. El discurso jante, tomar en cuenta las diferencias culturales y de- de Becattini está repleto de una amplia gama de scubrir la manera ingeniosa de acomodar las problemas de traducción que, a veces, rayan en lo in- características culturales distintivas que aparecen en traducible, y están originados precisamente en el «col- un texto. orido» del léxico e, inclusive, de estructuras que di- manan de su personalidad y, paradójicamente, de su Al traducir Il bruco e la farfalla de Becattini procuré búsqueda apasionada de la claridad. ¡Qué traición hallar el equivalente del «italiano colorido» del autor del traductor sería, a pesar de todo, reducir su vibrante en un «inglés colorido», en lugar de tomar el camino prosa de esa manera! de la traducción «totalitaria», es decir, un enfoque que tiende a minimizar el efecto emotivo de un tex- Como bien saben los traductores, es posible que ex- to en la cultura receptora y facilita su fruición a nivel istan palabras, metáforas, metónimos, imágenes, tro- cognitivo simplificándolo con el propósito de eliminar pos particulares favoritos naturalizados en el idioma o, por lo menos, moderar el desafío de la pasión, la del autor que carecen de aceptación inmediata en ironía, el color local que no solamente informaron sus el idioma de destino. El traductor debe lograr que el opciones léxicas sino que constituyeron su más pro- lector no nativo reconozca estas peculiaridades léxi- funda inspiración. cas ligadas a discursos especializados en su función referencial, sin perder el «sabor» derivado de su fun- En toda clase de traducción, la «precisión» suele en- ción emotiva o connativa. terderse como el don supremo. Se da por sentado que el traductor puede transmitir cada una de las Asimismo, es esencial que el traductor intente mane- partículas de significado incluidas en el discurso orig- jar un sistema de equivalencias de enlaces intratex- inal y hacerlo de manera tal que también se repro- tuales, de manera tal que el juego de palabras que duzca el equilibrio del énfasis del original que define surge del instinto de un autor haga, por lo menos, un su «sabor». No obstante, la precisión debe ser sofisti- eco débil en la versión traducida. La transmisión de cada y esto exige, en particular, que la «unidad de información a través de las fronteras entre los idiomas sentido» sea un concepto flexible. Si bien algunas ve- y dentro de ellos, la interacción entre estructuras y ces es posible hallar un equivalente para cada tér- subestructuras diferentes, el «traspaso» semiótico de mino o expresión idiomática, con frecuencia es estructuras al «territorio» de otro idioma, dan forma a necesario que las unidades de sentido sean más ex- la generación del significado y, por ende, la produc- tensas y más complejas que ellos: oraciones com- ción de información nueva para el lector no nativo. pletas, tal vez o, en casos extremos, grupos de ora- Dicho de un modo simple, la versión traducida debe ciones completos. transmitir no sólo la luz, sino también el calor genera- do por el discurso, en tanto resulte posible. Consideremos un ejemplo sencillo: Se l’e’ cavata con una gamba rotta. En este caso, una traducción de Por supuesto, debemos aceptar que el «calce» de palabra por palabra no tendría ningún sentido: «to una traducción nunca puede ser perfecto, que in- himself he has drawn it out with a broken leg» («a él evitablemente el traductor es un traidor y que el pro- mismo lo alargó con una pierna rota»). Si sabemos ceso de traducción constituye, en el mejor de los ca- que la expresión idiomática cavarsela quiere decir sos, una interpretación racionalizada que nunca «to get away with» («actuar con impunidad»), permite por completo que el lector del metatexto lo podemos convertirla en nuestra unidad. Entonces: lea con todas las ambivalencias e interpretaciones «He has got away with a broken leg» («Escapó con diferentes posibles de las que dispone el lector del una pierna rota»). prototexto. En otras palabras, debemos aceptar la in- exorabilidad de la pérdida consecuencia de la tra- A simple vista, esta frase tiene sentido pero, aun así, ducción. no es una buena traducción en realidad. De hecho, podría resultar ambigua: ¿logró huir la persona a pe- Desde esta perspectiva, resulta fundamental que los sar de que tenía la pierna rota? Sólo si tomamos la to- traductores comprendan su misión: pueden tratar de talidad del concepto como una unidad de sentido preservar las diferencias culturales, dentro de los re- podemos obtener una traducción verdaderamente 160 359 >Ei
TRADUCTOR, TRAIDOR... TESTIMONIO DEL RESPONSABLE DE LA VERSIÓN INGLESA satisfactoria: «He has got off with nothing worse than probable que la «precisión» sea léxica y no referen- a broken leg» («Terminó nada más que con una pier- cial y, si el texto brinda la oportunidad de realizar un na rota»). ajuste apropiado a elementos contextuales, encon- trar la manera de compensar la pérdida conse- En este caso, debimos incorporar palabras que el cuencia de la traducción. original no contiene pero logramos una versión en in- glés que transmite al lector inglés el sentido en su to- Un elemento significativo en la dimensión del «sabor» talidad y lo que sugiere la versión original a un italiano. es lo que se podría denominar «eufonía». La «eu- fonía», en este contexto, comprende aquellos as- La oración mencionada constituye un ejemplo bas- pectos de un idioma que se toman en cuenta de tante claro, pero, con un genio como Giacomo Be- manera automática cada vez que hablamos o es- cattini, el traductor a menudo se ve obligado a de- cribimos en nuestro propio idioma pero que no van sentrañar varias capas de significado de manera a afectar la compresión básica del significado de un simultánea. Inclusive el título del libro que traduje pre- lector u oyente desde el punto de vista léxico o ref- senta un problema que excede la mera equivalen- erencial. En esencia, la eufonía constituye una cia léxica: bruco bien podría ser «worm» («gusano») opinión de lo que «suena inglés» o «suena bien» y la o «grub» («lombriz»), así como caterpillar («oruga»), frase en sí misma es significativa, dado que sólo es- en tanto que farfalla podría ser tanto moth («polilla») cuchando los elementos de nuestras traducciones a como butterfly («mariposa»). través del «oído de la mente» que podemos deter- minar si satisfacen este requisito. Otra dimensión de la impresión dada por el sonido del original en italiano está relacionada, en particu- En este sentido, lo eufónico no resulta necesaria- lar, al bruco, sus dos sílabas, lentas y oscuras, en con- mente «un sonido agradable (dulce-)»: puede ser traste con las cuatro sílabas ágiles del término equiv- áspero o disonante de propósito. Pero si recordamos alente en inglés. También difieren las connotaciones: que para el usuario nativo los términos incorporan, un bruco en italiano es más desagradable, un ene- además de una dimensión de significado, una de migo de los vegetales cuyo nombre parece hacer sonido o sonido imaginado que puede considerarse eco de brucola («a pustule») («una pústula»), mientras más o menos adecuada, es posible que nos ayude que butterfly («mariposa») en inglés nos remite no só- a encontrar la mejor manera de traducir un término, lo a un insecto bonito sino también a «una persona frase u oración particular. vestida ostentosamente, presumida, canchera» (OED). Sin importar que tan bueno sea un diccionario, el tra- ductor nunca debe considerarlo la galera de un ma- Entonces, el sentido intratextual de la frase en italiano go: es una herramienta y no podemos ir más allá de —aquél de un insecto desagradable que se con- las posibilidades inherentes a su diseño. Los dic- vierte en algo bello— no está equiparado en su to- cionarios se ocupan primordialmente de recoger los talidad en la versión en inglés, que sugiere un insec- significados de términos individuales. Los mejores to vulnerable, no desagradable que se convierte en también dan un paso más y recogen los significados algo un poco frívolo. En consecuencia, desde el pun- más comunes de frases idiomáticas breves, pero to de vista de las connotaciones, podría haber esta- ningún diccionario es, ni podría llegar a ser quizás, ex- do tentado de traducir bruco como «chrysalis» haustivo al respecto. Los diccionarios dicen poco y («crisálida») y farfalla como moth («polilla»). nada acerca de cómo pueden unirse los términos y, en consecuencia, no pueden ayudarnos a respon- Por otro lado, tal vez el esópico The Caterpillar and der el interrogante «¿suena natural en inglés esta the Butterfly («La Oruga y la Mariposa») transmitió manera de decirlo en este contexto?». mejor la metáfora biológica, sobre todo, debido a que Becattini desde un principio hizo referencia a el- Un traductor no debería necesitar recurrir a los dic- la como «our caterpillar» («nuestra oruga»), la pal- cionarios a menudo; su atención siempre estará abra en inglés —sospecho— que apela a su sensi- puesta en el edificio como un todo y no en los ladril- bilidad italiana. los individuales de los que está construido. El hecho de buscar un término en el diccionario y encontrar que éste propone otro término como significado tan ENTRE LA PRECISIÓN LÉXICA Y LA EUFONÍA sólo implica haber dado el primer paso hacia una tra- ducción. Desde luego, el hecho de considerar la precisión en esos términos totalizadores no implica excluir su apli- En un buen diccionario, gran cantidad de términos cación más restringida en la búsqueda de le mot técnicos y la mayoría de los no técnicos ofrecen más juste: con frecuencia, la unidad de sentido es el tér- de un significado. Cuál de ellos se elija depende de mino o la frase breve y debería usarse un equivalente una familiaridad cabal con los dos idiomas en exacto cuando existe; sin olvidar, no obstante, que es cuestión, un conocimiento profundo del contexto en 359 >Ei 161
R. ABSALOM conjunto y una comprensión adecuada del tema: es- de conservar no sólo el significado sino también el to significa que primero debe haberse leído y com- efecto del original. La elección correcta del registro prendido el texto en forma correcta. Cuando se tra- representa otro aspecto importante de este proceso ta de un texto especializado a nivel técnico o de hallar el equivalente del tono de la traducción. Re- académico, con su propio conjunto de terminologías sulta obvio que en un pasaje alegre hay que evitar ex- y conceptos, en ocasiones, arcanos, un traductor co- presiones pedantes o pomposas; en un sermón o mo yo, historiador de profesión más que economista una editorial (cuya similitud a menudo sorprende) hay político, debe esforzarse tanto cuanto sea necesario que evitar apartarse de la solemnidad de la situación. para introducirse lo suficiente en el tema desconoci- do, con el fin de producir una traducción que no Asimismo, debemos ir más allá de esos preceptos traicione su ignorancia con demasiada obviedad y generales debido a que, sobre todo en inglés, existen — lo que es aún más importante—, irrite o confunda numerosos matices de significado sutiles expresados al lector que sí posee conocimientos sobre el tema por sinónimos de términos comunes, en particular ad- que se trata. Por fortuna, en el caso de Il bruco e la jetivos y adverbios. Para triste un diccionario italiano- farfalla, el acceso electrónico de Becattini a fuentes inglés propone cinco palabras: «sad», «sorrowful», de consulta sobre tales temas sirvió en forma per- «grieved», «gloomy», «depressing» («triste») (2). De- manente como salvavidas para el traductor a punto penderá exclusivamente del contexto el que se elija de ahogarse. entre todos ellos. En este caso, el acceso inmediato del autor repre- Con la prosa de Becattini, que se entreteje con humor sentó un importante inconveniente: la variante Be- y, en ocasiones, critica con acerbo los lieux com- cattini del principio de Heisenberg. Algunas veces, el muns de otros autores pero, más a menudo, con su- traductor trabajó con afán durante horas o días para tileza y en broma, tan sólo mediante la sugerencia de descubrir más tarde que debían introducirse cam- reservas y salvedades que vacilan justo por encima bios drásticos debido a la tendencia del texto a la del texto, el traductor debe intentar mantener el juego desintegración y reintegración espontánea de sus el- de palabras que por momentos se acerca a la ementos. Becattini, por lo menos en este aspecto, se poesía y en ocasiones dejar a un lado lo ampuloso encuentra en la misma clase que Honoré de Balzac, para recurrir a expresiones coloquiales tomadas de la quien fue tristemente célebre porque sus primeros procacidad maligna del maledetto toscano («del borradores y, a veces, sus segundos y terceros bor- maldito toscano»). radores enloquecían a sus editores a la hora de re- visarlos… ¡Ése es uno de los castigos de trabajar para La redundancia representa uno de los obstáculos un genio! más comunes cuando de traducir del italiano al in- glés se trata. Algunas veces es necesario expandir La «personalidad» de un idioma radica en gran me- una proposición para traducirla: no obstante, del mis- dida en el almacenamiento y uso de expresiones id- mo modo, puede ocurrir lo contrario. En términos gen- iomáticas: el inglés es una lengua plagada de ellas, erales, el inglés genera una expresión más directa y el italiano, como idioma «nacional», apenas algo concisa de la misma noción: Non mi risulta afirma el menos, a pesar de que sus dialectos albergan un secretario italiano, mientras revisa la lista; su contra- tesoro de tales expresiones. El dialecto toscano de parte inglesa expresa: «It’s not here» («No está aquí.»). Florencia, la verdadera lengua madre de Giacomo No es casualidad que el texto en italiano de Il bruco Becattini, también sobresale por su riqueza de expre- e la farfalla ocupe unas veinte páginas más que la siones idiomáticas. Sin embargo, la mayoría de esas versión en inglés. La redundancia en la traducción expresiones idiomáticas del italiano poseen un equiv- puede manifestarse no sólo en el uso innecesario de alente más o menos aproximado en inglés, que el tra- palabras sino también con un énfasis que resulte hos- ductor debe procurar y examinar siempre antes de til al giro idiomático usual que exige una situación en recurrir a la mera interpretación o explicación del orig- particular. Esto es posible en cualquiera de los dos id- inal. Veamos un ejemplo sencillo: mettiamoci una iomas. pietra sopra puede «explicarse»: ‘Let’s forget all about it’ («Olvidemos todo») (o «Dejémoslo en el pasado») La única manera de superar estos obstáculos consiste o puede «traducirse»: «Let bygones be bygones» («Lo en tener siempre presente las diferencias impuestas pasado, olvidado»). sobre situaciones básicamente similares debido a la disimilitud de geografía, clima, costumbre, religión, política, entre otros; en pocas palabras, por toda la ELEGIR EL SIGNIFICADO, CONSERVAR EL REGISTRO gama de variaciones que existe entre el ser físico y cultural de dos países. El hallazgo de expresiones idiomáticas equivalentes constituye una parte de la tarea de traducir que sin Con bastante frecuencia encontramos ejemplos de lugar a dudas va más allá de la exigencia de pre- frases u oraciones que, a pesar de estar bien tra- cisión literaria: es una parte del intento del traductor ducidas desde el punto de vista de la precisión e, in- 162 359 >Ei
TRADUCTOR, TRAIDOR... TESTIMONIO DEL RESPONSABLE DE LA VERSIÓN INGLESA clusive, del tono, parecen extrañas en las circunstan- istiera alguna manera de expresar con exactitud los cias del pasaje. Es posible que esta extrañeza se de- identificadores locales como «Liverpudlians», «Brum- ba, de hecho, a consideraciones que nada tienen mies» o «Glaswegians» que se usan en inglés para que ver con el aspecto lingüístico, es decir, a diferen- hacer referencia a la gente oriunda de Liverpool, cias en las presunciones culturales —buenas o Birmingham y Glasgow. malas— entre los autores ingleses e italianos. A lo largo de las últimas décadas tuve el privilegio de Esta clase de situaciones obvias se presenta cuando ser invitado en varias ocasiones a traducir a Becattini tenemos que traducir pasajes que versan sobre el in- al inglés y abordar temas que abarcan desde la orig- tercambio de sentimientos íntimos o en los cuales se us- inal «Development of Light Industry in Tuscany», de an juramentos o insultos. ¿Cuánto debería el traductor gran influencia en la evolución de nuevas ideas, has- atenuar la extrañeza en tales instancias? Es inevitable ta ensayos y escritos sobre Prato, sobre la historia del que, si lo intenta, el resultado sea una especie de pensamiento económico y, más recientemente, so- perífrasis: una interpretación más que una traducción. bre lo que a mi criterio se convertirá en un monu- mento a la dedicación de toda una vida, su evalu- En general, se recomienda no alejarse demasiado ni ación concluyente de Alfred Marshall y Cambridge muy a menudo del original. El lector inglés menos in- School. formado de un texto en italiano traducido al inglés sabrá que los italianos son diferentes de él en algunos Para mí, que a menudo soy el traductor-traidor, resultó aspectos y que es probable que reaccionen de dis- un desafío intelectual y profesional del más alto nivel, tintas maneras ante algunas experiencias de vida. Un que, a pesar del arduo trabajo que me demandó, fue italiano puede declarar su amor con las palabras Ti gratificante en sumo grado. El hecho de trabajar con voglio bene y, sin duda, deberíamos traducirlas al in- Becattini constituyó una enseñaza permanente en sí glés como «I love you» («Te amo»). misma y estoy sumamente agradecido al hombre y su obra por los beneficios de su colaboración y amis- Pero, ¿que ocurre en el caso de Mamma mia!, tad. Si todavía logra tolerar de alguna manera mis Madonna!, Accipicchia!, Cavolo! O, inclusive, Vaf- deficiencias como traductor de su obra, sólo me res- fan’!? En esos casos, no se puede evitar el uso de la ta repetir la broma que me hizo alguna vez sobre el perífrasis, excepto que el contexto permita (con pésimo poeta amateur florentino que se disculpó con Mamma mia!, por ejemplo) dejar la frase sin traducir una dama desilusionada por sus esfuerzos: Signora, para darle ‘color local’. Tal vez, esa hubiera sido la che vuole? Si fa quel che si puole... Por fortuna, ¡eso, mejor manera de abordar una de las expresiones fa- de verdad, no se puede traducir! voritas de Becattini: i pratesi. La versión en inglés sue- na tosca («the people of Prato») («los habitantes de NOTAS Prato») en un contexto impregnado de formas par- ticulares de identificación local tan comunes en Italia, (1) Neologismo inventado por los diferentes autores que contribu- la tierra de cento città, donde paese hace referencia yeron en los volúmenes de «Prato, storia di una città». Prato fue al pueblo nativo de una persona más a menudo que el primer caso estudiado de distrito industrial en Italia, sentan- a una nación. Finalmente, opté por «Prato folk» («la do las bases de la moderna teoría del distrito industrial. gente de Prato»), en un intento por transmitir un toque (2) El diccionario español-inglés recoge hasta trece posibles equi- de su orgullo local pero todavía me gustaría que ex- valentes. 359 >Ei 163
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