(RE)INVERTIR EN - LA HABANA 2021 Violaine Jolivet y colaboradores - Papyrus
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(RE)INVERTIR EN LA HABANA ANÁLISIS ESPACIALES DE LOS PRECIOS DE LA VIVIENDA EN LOS MUNICIPIOS CENTRALES DE LA CAPITAL CUBANA Violaine Jolivet y colaboradores 2021
Jolivet V., Iñiguez L., Alba Carmichael M., García Pleyan C., C Núñez R., 2021, (Re)invertir en La Habana. Análisis espaciales de los precios de la vivienda en los municipios centrales de la capital cubana, Informe de investigación, 36 p. Asistente de investigación, cartógrafo y coautor: Mateo Alba Carmichael Asesores y coautores: Luisa Iñiguez (Geógrafa Prof. Flacso-Cuba), Carlos García Pleyan (Urbanista- La Habana) y Ricardo Núñez (economista urbano, PNUD- Cuba) Revisión del español : Maritza Cristina Garcia Pallas Proyecto CRSH – Canadian Social Sciences and Humanities Research Council Grant CRSH 430-2018-00400 - 2018-2021 ISBN: 978-2-921903-11-0 (RE)INVERTIR EN LA HABANA. Análisis Espaciales de los Precios de la Vivienda en los Municipios Centrales de la Capital Cubana © 2021 por Violaine Jolivet, Luisa Iñiguez, Mateo Alba Carmichael, Carlos García Pleyán y Ricardo C. Núñez está bajo la licencia Creative Commons: CC BY-NC-ND 4.0 1
PRÓLOGO © V.Jolivet , Vedado, 2018 En el año 2003 comencé mi primer trabajo de campo en La Habana, auspiciada por el Departamento de Geografía de la Universidad de La Habana y supervisada por Sonia Montiel. Me propuse comprender cómo el desarrollo del turismo en La Habana Vieja y la patrimonialización del lugar a través de su nominación como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y la acción de la Oficina del Historiador de la Ciudad estaban transformando la dinámica socioespacial de este barrio, aún muy degradado en aquel entonces. Después de 10 años y un doctorado acerca del impacto de la migración cubana en la trayectoria urbana de Miami, regresé a hacer un estudio de campo en La Habana, ahora como profesora de la Universidad de Montreal. Esta ciudad, que me cautiva particularmente y que había conocido durante las últimas sacudidas del período especial, entre 2003 y 2009, empezó a cambiar a mayor ritmo mientras mantenía siempre cierta inmovilidad. Las excursiones de 2015 y 2017 fueron sin duda las más elocuentes; por un lado, La Habana se encontraba en un estado de agitación, nuevos lugares culturales y turísticos, grandes hoteles en construcción y casas renovadas se estaban vendiendo o rentando por Airbnb. Por otro lado, los recurrentes problemas de vivienda de la capital, los colapsos y las construcciones informales continuaban sucediendo regularmente. Durante esas dos visitas del 2015 y 2017 estaba en busca de colaboradores cubanos que pudiesen ayudarme a entender las mutaciones socio-espaciales de los barrios centrales de esta ciudad socialista a partir de 2011 con la reintroducción de la posibilidad de que los cubanos vendan o compren una casa. Llegué a esto gracias a mi encuentro con Ricardo Núñez, economista urbano que trabaja en el PNUD, que me fue presentado por un amigo común, Jorge Mario Egozcue Sánchez, y a mi acercamiento con la FLASCO- Cuba, donde el equipo de dirección y la Dra. Luisa Iñiguez aceptaron acoger y colaborar en mi proyecto. Luisa fue también quien me presentó a Carlos García Pleyan, urbanista incansable. Este trabajo tampoco pudiera haber visto la luz sin la participación de Mateo Alba Carmichael que trabaja conmigo desde el 2017, primero como asistente de investigación en el programa de maestría y luego como ingeniero de investigación. Los mapas presentados aquí fueron hechos por él. También queremos agradecer calurosamente al compañero Rodolphe Gonzalès (ingeniero geoweb de la Universidad de Montreal), su implicación en el desarrollo del scrapper y el acompañamiento de Mateo en las técnicas de la geoweb fueron de gran apoyo. 2
CONTENIDO: Prólogo................................................................................................................................................................................... 2 INTRODUCCIÓN: Reinvertir en La Habana........................................................... 4 Contexto ...................................................................................................................... 7 Las tantas Habanas: mosaico socio-espacial ................................................................................................................... 7 Reglementación de la vivienda bajo la revolución – el caso de la permuta ............................................................. 10 Liberalización de la compra-venta en 2011 y marco legal .......................................................................................... 12 Metodología: mapear al precio potential en el mercado habanero emergente .........14 Digitalización del mercado y web-scapping .................................................................................................................. 14 Límites en la metodología................................................................................................................................................. 17 Analisis de los precios: ¿Qué se vende y a cuánto? ...................................................18 Vivienda a la venta ............................................................................................................................................................. 18 Precio por metro cuadrado según el municipio de La Habana a lo largo de los últimos años ............................ 20 Los precios de venta a lo ancho de La Habana ............................................................................................................ 21 Centralización del mercado inmobiliario.................................................................. 23 La concentración de los anuncios y la centralización del mercado ........................................................................... 24 Los precios al metro cuadrado, centralización del valor al ancho del mercado habanero .................................... 25 Correlación espacial de los precios al metro cuadrado................................................................................................ 27 Discusión y conclusión: recapitalización de la centralidad y gentrificación ........... 29 Valor de cambio y valor del suelo, la centralidad como activo territorial ................................................................ 29 Reinvertir en La Habana en una perspectiva globalizada ........................................................................................... 30 Bibliografía .......................................................................................................................................................................... 32 Indice de figuras ................................................................................................................................................................. 34 Anexos ................................................................................................................................................................................. 35 3
INTRODUCCIÓN: REINVERTIR EN LA HABANA © V. Jolivet, Miramar, 2017 Desde noviembre 2011, fue reintroducido por el decreto Ley-288 en Cuba la posibilidad de vender y comprar viviendas en la isla socialista según una limitación establecida desde el principio de la revolución de dos propiedades (principal y de veraneo) por individuo. Esa limitación oficial bajo el gobierno comunista protege el sector de la vivienda de formas de captación, especulación de bienes raíces y de la financiarización de la vivienda, que caracterizan los mercados inmobiliarios en el mundo capitalista1. La apertura de un mercado inmobiliario refleja un contexto de cambio en la isla, y aunque los nuevos procesos de liberalización y la privatización sean más visibles desde la década del 2010, estos procesos están arraigados con los cambios políticos y económicos que se han producido desde los años 90: el colapso del bloque socialista y la necesidad del Estado cubano de sobrevivir económicamente tras la desaparición de la URSS, su principal socio comercial, en un contexto de embargos comerciales y financieros impuestos por los Estados Unidos desde 1962. Cuba pasó de una conexión con el mundo basada principalmente en el internacionalismo socialista a una conexión progresiva con la globalización, en particular mediante la apertura de la isla al turismo de masa, la inserción de la doble moneda con un peso cubano convertible (CUC) indexado al dólar estadounidense y la autorización de empresas mixtas asociadas entre el Estado y compañías extranjeras. 1Una parte del análisis de este informe se encuentra en el artículo de Jolivet V. y Alba Carmichael, M., 2021: Reinvertir en La Habana. Mercantilización de la Vivienda, y Gentrificación en los Barrios Céntricos de una Ciudad Socialista Del Sur Global, International Journal of Cuban Studies, (disponible próximamente) 4
El traspaso del poder a Raúl Castro en 2008 coincidió con una aceleración de las reformas económicas sin abandonar el modelo socialista. Los Académicos y expertos tanto dentro como fuera de la isla, han destacado una diversificación de los actores y los motores del crecimiento económico durante la década 2000 que se refuerza con los lineamientos establecido por R. Castro en 2011 (Sanchez Egozcue y Triana, 2008; Brenner et al., 2014; Bobes et al., 2015). En una isla donde la especulación inmobiliaria y el crédito hipotecario fueron abolidos en las primeras horas de la revolución (Treffz, 2011), la reintroducción, después de cincuenta años, de un mercado inmobiliario y de sus mecanismos monetarios es un cambio considerable que testifica de cambios económicos y sociales más amplios que están sucediendo en la isla (Brenner et al, 2014, Perez-Lopez et al., 2019, Pleyan, 2020). En este estudio de geografía urbana, la vivienda y la reintroducción de su comercialización son un aporte relevante para entender cómo las reformas urbanas y las mutaciones socio- espaciales de los barrios céntricos dan testimonio de formas de mercantilización y transformaciones socioeconómicas que afectan el espacio urbano y la vida cotidiana de los habitantes de una ciudad socialista considerada durante mucho tiempo como "congelada" en el tiempo y en la que la renta del suelo fue abolida. (Re)invertir en La Habana propone, a través del análisis de la evolución y la espacialización de los precios y datos que recolectamos desde el 2015 sobre la compra-venta en la capital cubana, ofrecer una visión de formas de centralización y capitalización del espacio en un país como Cuba. Al mismo tiempo resalta la especificidad de esta capital socialista del Sur donde el 85% de los habitantes son propietarios-ocupantes de sus viviendas y el Estado sigue siendo el propietario del suelo. Nuestro análisis se centra más particularmente en los cuatro municipios centrales, La Habana Vieja, Centro Habana, Playa y Plaza considerados por los investigadores y los residentes como el centro de la ciudad por las densidades edilicias y de población y las actividades económicas y culturales que concentran (figura 1). Figura 1 : Ubicación y densidad de la población por manzana en los municipios centrales de La Habana 5
Este reporte reúne datos cuantitativos (precio, barrio y calle con coordenadas gps, superficie, año construcción, cuartos etc.) extraídos de anuncios de venta de vivienda en La Habana publicados por internet. Aquí se analizan los precios anunciados para informarnos acerca de la evolución del valor del suelo con respecto al tiempo y con respecto al espacio, comparando en particular barrios centrales con barrios periféricos de la ciudad de La Habana. Este permite tener una mejor idea de la evolución de los primeros ocho años del mercado inmobiliario habanero que concentra la mayoridad del mercado de la Isla. También puede permitir expandir teorías “globales” acerca de los efectos de los lugares centrales sobre el precio de la vivienda y la gentrificación y la valor del suelo urbano. A continuación se presentará el contexto en el que se da esta investigación y la metodología utilizada, que para esta parte del proyecto de investigación se resume en un análisis cuantitativo de los precios de propiedades a la venta y la concentración de anuncios inmobiliarios a través de las herramientas de análisis espaciales en geografía urbana. Este informe se estructurará en tres partes. La primera parte tratará de calificar el mercado inmobiliario de La Habana entre 2012 y 2020, en un contexto de opacidad y de poco acceso a los datos. La segunda parte, a través de los inmuebles en venta y la evolución de sus precios, retomará la cuestión de la centralidad en el valor mercantil de la vivienda y mostrará cómo los barrios centrales se ven más afectados por la actividad inmobiliaria. La tercera es una discusión a propósito del concepto de gentrificación y capitalización de la centralidad en La Habana. 6
CONTEXTO © V. Jolivet, Centro Habana, 2020 Según nuestras estimaciones de la actividad inmobiliaria del país en 2020, es decir el total de inmuebles en venta en las plataformas utilizadas para nuestro estudio, La Habana concentra entre el 80 y el 85% del mercado inmobiliario en Cuba. Por lo tanto, conviene repasar primero el contexto de la capital cubana para analizar posteriormente las regulaciones en cuanto a la vivienda y el establecimiento del mercado inmobiliario, que constituye el núcleo de este estudio. LAS TANTAS HABANAS: MOSAICO SOCIO-ESPACIAL Para comprender la geografía de La Habana como capital del país toca considerar su delimitación como provincia, división político–administrativa aprobada en 1976. Se crea La Habana a partir del área de los municipios de La Habana, Marianao, y Guanabacoa, y parte de otros 8 municipios, sub-divididos finalmente en 15 municipios., Toca destacar que quedaron contenidas en ella, además de La Habana, la segunda ciudad más poblada del país -Marianao- según el Censo de 1953. Antes de 1959 casi todo el desarrollo económico de Cuba se estaba desarrollando en La Habana y con muy poca preocupación hacia las necesidades de las poblaciones más vulnerables. Se observaba una enorme segregación urbana entre los diferentes barrios de la ciudad capital (Trefftz, 2011). A partir de 1959, en La Habana la fiebre urbanizadora privada de las décadas precedentes fue eliminada, y la labor estatal creo nuevas urbanizaciones que rellenaban repartos de densidades bajas en general en las periferias de las antiguas ciudades ahora contenidas en ella, lo cual procuró reducir el desequilibrio centro-periferia en cuanto a servicios y espacios públicos (Muñoz y al 2019) 7
El recorte territorial que definía a la nueva provincia, contenía la desigual historia de la integración social y económica, y en consecuencia una elevada diferenciación sub-espacial entre barrios antiguos (algunos de ellos seculares), y repartos recientes de las varias ciudades que la integraban; pequeños asentamientos antiguos y recientes, urbanos o rurales, concentrados y dispersos, que cumplían funciones residenciales o combinadas con otras industriales, de recreación y hasta agropecuarias. La coexistencia de diversos espacios a lo largo del tiempo era una de las principales determinantes de la heterogeneidad interna de su territorio. La diferenciación de condiciones geográficas y ambientales, regularon el valor del suelo, y la diferenciación de las formas urbanas, así el litoral y el relieve de terrazas marinas, condicionó la construcción de atractivos barrios, pero también de otros donde se asentaba población pobre. En el avance de la urbanización hacia el oeste, barrios construidos por y para las clases económicas más altas de la ciudad y del país, se aproximaban a ciudades o barrios de pescadores. Cuando se crea la nueva Ciudad de La Habana bajo la revolución, había transcurrido poco más de una década de cambios económicos, sociales y también espaciales, necesarios para la construcción de las bases de la nueva sociedad. Junto a las reformas urbanas, se había avanzado en los planes de urbanizaciones nuevas de gran porte al este del territorio, y de otras que compactaban barrios residenciales muy poco densos, distribuidos en lo fundamental al oeste y sur del territorio, luego de haberse removido los más extensos y poblados barrios insalubres. Estos y otros procesos de localizaciones industriales, generalmente en barrios o asentamientos que tenían anteriormente estas funciones, provocaban valorizaciones y de- valorizaciones de partes de las ciudades y asentamientos antiguos sobre todo en las periferias que complicaban la heterogeneidad espacial del nuevo territorio. Las transformaciones en los flujos espaciales habían sido mucho más amplias e intensas. La población, elemento esencial del espacio, resultó influenciada por intensas corrientes de emigrantes-inmigrantes, que, con relativa sincronía, pero irregular intensidad temporal, se establecían desde los primeros años de la década del 1960. Decenas de miles de personas inmigraban desde diferentes partes del país, en especial de la oriental y otros tantos residentes emigraban al exterior del país. Muchos de estos migrantes se instalaron en los densos barrios centrales de Habana Vieja y Centro Habana. Con diferentes magnitudes, continuaban produciéndose cambios o intercambios de población en las áreas residenciales a expensas en lo fundamental de la emigración- inmigración, las permutas por vías alternas, y por el esencial y nunca suficientemente relevado crecimiento familiar, y la cohabitación de varias generaciones en los hogares. A fines de la década del 1980, la revolución espacial, había logrado crear pocas formas de origen “socialista”, y la acumulación del pasado en formas que Milton Santos llamará “rugosidades del espacio”, de origen capitalista, continuaban predominando tanto en área como en cantidad de población que en ellos residía, y que daban ya señales de intenso deterioro de su estado constructivo, tanto en la ciudad más compacta, como en las antiguas ciudades de su actual periferia. Por el contrario, las políticas económicas y sociales espaciales promovían la igualdad de oportunidades de vida, que lograban “invisibilizar” a La Habana que mantenía las formas 8
desiguales, y las desigualdades residuales o nuevas que distinguía los pocos habitantes que ya desde entonces recibían remesas o los que eran asiduos clientes de mercados paralelos. En el primer lustro de la década del Periodo Especial en tiempo de paz declarado en 1991, los efectos de la retracción del estado en la gestión territorial se expresaron con velocidades sorprendentes. Paralizadas muchas funciones productivas y de servicios, la construcción de viviendas, y con la continuada ausencia de mantenimiento del fondo edificado y de los espacios públicos, fuertemente deprimida la dotación de servicios de saneamiento básico, las formas urbanas continuaban su deterioro. El saldo migratorio pasa a un promedio anual por encima de 14 000 personas de ganancia neta, el más alto de todas las etapas con información disponible sobre migración interna para el territorio. (CEDEM, 1997) Desde finales de la década de los años 1990 e inicios del presente siglo, se apreció la recuperación o rediseño de inmuebles de alto patrón constructivo, concentrados en la parte norte-central y norte-occidental del territorio, de productividad espacial más elevada, tanto por las infraestructuras existentes en el entorno, como por las condiciones geográficas, a los que se asignan funciones de prioridad nacional, turismo y promoción de negocios y de otras actividades de servicios. Una segunda acción operaba en el marco del Programa de Restauración del Centro Histórico, que con autonomía financiera de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, conseguía estructurar y desarrollar proyectos novedosos de desarrollo integral del territorio. La Habana Vieja se fragmenta, a partir de este momento, en dos extensos sub-espacios: aquel donde se crean y renuevan de forma progresiva edificaciones, espacios públicos, se mejoran las condiciones de habitabilidad de su población; y el otro que espera. Pero, en ambos se organizan servicios equitativos de contenido social, cultural y otros, a expensas con una parte de los recursos financieros captados. Los programas recientes de construcción de viviendas se han ampliado desde el punto de vista cuantitativo y con mejoras cualitativas, que están aún lejos de satisfacer las necesidades y expectativas de la población en los 2020s. Una de las más importantes académicas del país, conocedora excepcional de La Habana afirma que: “La situación habitacional de La Habana es crítica pues muestra déficits acumulados de considerable magnitud, al no haberse logrado revertir la situación de avanzado deterioro de su fondo habitacional de más de medio millón de unidades, ni la satisfacción en niveles aceptables de la demanda de nuevas viviendas, debido a los bajos niveles de ejecución en relación a las necesidades, fundamentalmente de las condiciones precarias concentradas en las áreas centrales antiguas y en los asentamientos informales situados en los municipios de la periferia. […]No se ha logrado revertir el alto grado de deterioro acumulado del fondo edificado de la ciudad, en particular el de viviendas y de sus infraestructuras, cuya rehabilitación demanda cuantiosas inversiones y tecnologías avanzadas” (Rodríguez Rey, G.2020) En este contexto se aloja y parece avanzar el mercado inmobiliario reintroducido en 2011, aunque existía una forma de intercambio inmobiliario basada en la autorización legal desde el inicio de la revolución para permutar su vivienda sin intercambio monetario. La permuta es importante para entender cómo se creó un valor de cambio del suelo en La Habana y dio lugar a formas ilegales de transacciones inmobiliarias a partir de los 1980-1990. 9
REGLEMENTACIÓN DE LA VIVIENDA BAJO LA REVOLUCIÓN – EL CASO DE LA PERMUTA ©V.Jolivet Paseo del Prado, 2017 El triunfo de la Revolución trajo consigo nuevas estrategias económicas y sociales en favor de la equidad social. En el contexto de estas nuevas estrategias económicas se prohíbe todo tipo de capitalización a partir de la vivienda que debe mantener su utilidad primordial como techo bajo el cual se vive. Solo se puede tener una casa (y otra de veraneo) y se prohíbe la renta. La reglamentación estricta en torno a la vivienda a comienzos de la Revolución impide que las familias puedan mudarse a hogares más apropiados para sus necesidades cotidianas. Esta situación conlleva a permitir el cambio de vivienda bajo la reglamentación de la permuta2. La permuta permite apaciguar parcialmente las necesidades en vivienda de las familias cubanas y es, hasta el año 2011, el único mecanismo legal para particulares de realizar un cambio de propiedad (Núñez, 2007, 2012). A lo largo de la revolución las leyes en torno a la permuta y el procedimiento para realizar una evolucionan, pero las razones consideradas que indican la necesidad de cambiar de vivienda se mantienen. Además de la valorización de la vivienda según su arquitectura entra en juego, a partir de los años 1990, la utilización de la vivienda para montar un negocio. Numerosos hogares comienzan a solicitar licencias para operar restaurantes (paladares) o casas particulares, para la renta a nacionales o de manera más importante para extranjeros, que permiten un ingreso de dinero principalmente a través del sector del turismo. Esto provoca una valorización de propiedades de planta baja y con espacios que permiten acoger un comercio y propiedades 2Parte de esta sección se basa sobre la traducción por los autores de la publicación de Ricardo Núñez de 2007: La Permuta: an effective instrument for housing transactions in Cuba (No. IHS WP 19). 10
de buena arquitectura y situados en los barrios centrales con mayor atractivo turístico. Durante esta misma década se autoriza el ingreso de divisas internacionales al país. Este dinero entra por medio de conexiones transnacionales entre residentes cubanos y familiares o amigos en el extranjero, principalmente en los Estados Unidos. Según la “ética” y las regulaciones de la permuta se supone que las familias deben intercambiar entre ellas propiedades de “mismo” valor. Para esto el Estado concibe fórmulas de cálculo del valor de las propiedades principalmente según su área, su localización y su estado técnico-constructivo. Toda permuta entre propiedades con valores considerablemente diferentes puede estar sujeta a una investigación por las autoridades ya que no se permite completar la diferencia de valor de las propiedades por medio de pagos monetarios, y solo a partir de 1994 se permiten incluir otros objetos en la permuta como electrodomésticos o hasta automóviles (Núñez, 2007). En realidad, la necesidad o el deseo de unas familias en conseguir una mejor vivienda y de otras de conseguir dinero en efectivo provocan negociaciones por debajo de la mesa a las permutas legales. El Estado siempre estuvo consciente de estos procesos ilegales que terminaron por ser una parte propia de casi cada permuta. Con el tiempo, el Estado intenta obstruir estas negociaciones ilegales volviendo más complejo y tedioso el proceso legal y administrativo de la permuta. En paralelo se desarrolla todo un mecanismo comercial para-legal en torno a la permuta. Se crea el trabajo del permutero, la competencia principal de este individuo es de facilitar el diálogo y los trámites entre todos los actores, en particular la negociación entre las familias y el procedimiento administrativo con la autoridad municipal competente. Con un gobierno que intenta frenar las ilegalidades de las permutas al volver más difícil el proceso, el trabajo del permutero se vuelve de mayor importancia. Un buen permutero debe mantenerse bien informado ante cambios en las leyes y cualquier atajo jurídico que le puedan ganar tiempo o dinero a sus clientes (Núñez, 2007). Lo que se escondía detrás de las transacciones de permuta era un mercado inmobiliario informal. Finalmente, en 2011 el gobierno cubano modifica la Ley general de vivienda, permitiendo la compra y venta, con el objetivo de regular este mercado que se venía dando de manera escondida desde hace años. 11
LIBERALIZACIÓN DE LA COMPRA-VENTA EN 2011 Y MARCO LEGAL © V.Jolivet Kholy, 2017 En el año 2011 el gobierno de Raúl Castro modificó la Ley de la Vivienda abriendo la posibilidad de la libre compraventa de viviendas y, con ello, el funcionamiento de un creciente mercado inmobiliario. Diez años después, se perciben ya los efectos en la geografía social y económica de las ciudades y se evidencian las carencias legislativas y tributarias de un marco regulatorio concebido para otra realidad socioeconómica.3 La autorización, además de permitir un mejor reacomodo entre la oferta y la demanda de vivienda, ha puesto en valor un activo prácticamente dormido que genera transacciones por valor de unos mil millones de dólares anuales. Por otro lado, la intervención de capital extranjero y de fondos de familiares residentes fuera del país, subieron anormalmente los precios en una primera etapa y crearon situaciones de ilegalidad (existencia de testaferros, posibles sobornos, etc.). Se evidencia ya, además, una cierta redistribución de la población en el territorio urbano en función Después de una etapa de grandes expectativas en el 2015, con la reanudación de las relaciones diplomáticas con EEUU, en estos momentos el mercado habanero muestra signos de contracción debido a las medidas coercitivas de la administración de Trump. A las restricciones migratorias externas, que disminuyen el interés por vender la vivienda para 3 Para mayor detalle se puede consultar el artículo del autor de esta parte a proposito del mercado inmobiliario. Pleyán, C. G. (2020). El mercado inmobiliario en Cuba: Carencias legislativas y tributarias. International Journal of Cuban Studies, 12(1), 135-148. 12
migrar, se añaden las limitaciones al envío de remesas y la disminución del turismo por la Covid19, lo que ha bajado la demanda y los precios de las habitaciones y casas de alquiler y ha congelado el segmento superior del mercado. Diez años después se evidencian las carencias legislativas y tributarias de un marco regulatorio concebido para otra realidad socioeconómica. La reforma del modelo económico y social en curso exigió una revisión de los instrumentos fiscales. Ello se materializó en la nueva Ley (113) del Sistema Tributario en el año 2012. De los 25 tributos previstos, solo dos impuestos tienen que ver directamente con la vivienda: el impuesto sobre la Propiedad de Viviendas y Solares Yermos (de un 2% sobre el valor de la propiedad, pero todavía no implantado) y otro sobre la Transmisión de Bienes y Herencias (de un 4% sobre el valor legal de los bienes o derechos que se transmitan). Dado que los precios inscritos en los títulos de propiedad son anormalmente bajos puesto que no han variado en 50 años, hubo que adoptar un nuevo valor referencial (Decreto Ley 343 de 2017) definido por las características constructivas de las viviendas, su tamaño y el nivel de urbanización de la zona en la que se sitúan. Si bien esta valoración es considerablemente mayor (entre 15 y 20 veces) que la que consta en los títulos de propiedad, todavía el valor está muy por debajo del precio de mercado (que puede llegar a ser 10 veces mayor). Hay que señalar que, a pesar de que la disposición del 2011 se refiere a la transmisión de la propiedad de una vivienda, ello atañe también indirectamente al suelo. De una parte, no hay vivienda que no transmita en su valoración financiera el valor del suelo sobre el que se asienta (Pleyán, 2020). De otra, la propia localización de esa vivienda, independientemente de sus valores intrínsecos (materiales, fecha deconstrucción, etc.) incide en su valor en términos de accesibilidad y de la infraestructura técnica y de servicios disponible en la zona. Si bien es verdad que Cuba pudo librarse durante más de 50 años de la especulación inmobiliaria a través de la nacionalización de la mayoría del suelo urbano no construido y de la asignación de un precio fijo, la apertura del mercado inmobiliario en 2011 ha puesto en evidencia resquicios que pueden crear fenómenos indeseados. Será importante encontrar mecanismos administrativos y jurídicos que limiten en la medida de lo posible la reaparición de fenómenos especulativos. La introducción de un valor referencial para el pago de los impuestos va en ese sentido, pero no parece suficiente. Será importante mantener el control del suelo actualmente público, pero también sería oportuno actuar en otras direcciones con el fin de ir circunscribiendo el mercado inmobiliario. 13
METODOLOGÍA: MAPEAR AL PRECIO POTENTIAL EN EL MERCADO HABANERO EMERGENTE © V.Jolivet Vedado, 2015 Cuando iniciamos este estudio cuantitativo en 2015, nuestros objetivos eran dos: calificar el mercado en relación a sus precios y espacializar los datos recolectados en un sistema de información geográfica (GIS) para investigar el papel de la centralidad en la distribución de los precios y los procesos de fijación del valor de cambio. DIGITALIZACIÓN DEL MERCADO Y WEB-SCAPPING La dificultad de obtener información verídica acerca del precio mercantil de la vivienda en Cuba a gran escala con el fin de realizar un análisis cuantitativo de peso nos llevó a analizar los precios de venta de propiedad en anuncios publicados por internet en un contexto de digitalización del mercado inmobiliario (Fields, Roger, 2019) y del “digital turn” en los estudios urbanos. En nuestro caso, aunque el método está vinculado con metodologías cuantitativas aplicadas en el campo del “urban or housing big data”, las muestras recogidas de 7075 anuncios a lo largo de 5 años (2015-2020) puede parecer pequeña, pero en el contexto de nuestro estudio ya es una base de datos importante en la que se pueden basar varios análisis cuantitativos y espaciales. La inspiración de este modo de proceder adaptado a la compra y venta inmobiliaria moderna, de recolecta de anuncios publicados por internet, provino de la lectura de otros artículos tratando otros mercados inmobiliarios o base de datos sobre vivienda (Palm, Danis. 2002, Rae, 2015, Boeing, G., & Waddell, 2017, Le Goix et al., 2019). Por otro lado, la obtención de información de venta en anuncios por internet nos permitió también sistematizar en gran parte la recolección de datos, lo cual nos permitió adquirir una mayor cantidad de datos, mejorando de esta forma la fiabilidad cuantitativa de nuestros análisis. 14
Este enfoque moderno y cuantitativo de recolección de datos a gran escala permite nuevos métodos de análisis de problemáticas urbanas con la utilización de datos cuantitativos alternativos a aquellos emitidos por los dispositivos estadísticos nacionales oficiales (Batty, 2016). Desde luego no tenemos más que una visión parcial del número ventas inmobiliarias, ni tenemos el precio de venta final de cada transacción, pero en el contexto habanero en la cual esta información casi no existe, nuestra intención era de crear una base de datos cronológica y relativamente amplia, en un contexto de ciudad socialista del Sur, para que esta base pueda considerarse útil y analizable. Este análisis a partir de datos de anuncios obtenidos en varios sitios web de venta inmobiliaria comienza en 2015 y continúa hasta enero del 2021. Escogimos los sitios web que presentaban la mayor cantidad de anuncios, en los cuales se publicaban de manera constante nuevos anuncios y desde los cuales se facilitaba la extracción de la información necesaria. Obtuvimos datos de anuncios principalmente de detrasdelafachada.com, porlalivre.com y espaciocuba.com, además de cubahomesdirect.com y havanakeys.com. Hoy en día espaciocuba, cubahomesdirect y havanakeys no están en uso y vemos el surgimiento de la sección “vivienda” en otras plataformas como revolico.com con gran cantidad de anuncios cada día para La Habana. De cada anuncio se procedió a extraer como mínimo los datos de precio y la ubicación geográfica (con sus coordenadas en longitud y latitud). Además, se obtuvieron en lo posible los datos de: tipo de bien inmobiliario (principalmente apartamento o casa), número de habitaciones, número de baños, superficie en m2, piso del apartamento, año de construcción, dirección entre calles, el URL del anuncio y la fecha de publicación. También recolectamos en lo posible los párrafos descriptivos de la propiedad de cada anunciante. Entre 2015 y mitad de 2017 toda la información de los anuncios se extrajo manualmente copiando y pegando en una tabla los datos proviniendo de Porlalivre, Cubahomesdirect y Havanakeys. En 2017 llegan a fin las licencias de las agencias inmobiliarias en Cuba y con ello desaparecen los sitios web de cubahomesdirect y havanakeys. Para llenar este vacío: 1. se aumenta la cantidad de datos recolectada en Porlalivre y se comienza a recolectar por Detrasdelafachada ya que estos sitios web son usados por los cubanos y no tienen como objetivo primordial la inversión extranjera. 2. Introducimos el web scraping con el propósito de ser más exhaustivos, producir mayor cantidad de datos en un contexto de ausencia de estos, además la extracción manual de datos en gran cantidad toma mucho tiempo y es tedioso. Este método se puede aplicar solamente para las páginas de Detrasdelafachada y Espaciocuba que disponen de una construcción web que nos permite obtener la información necesaria, en particular las coordenadas geográficas. 3. Se continúa con regularidad la colecta manual de datos provenientes de Porlalivre, ya que este sitio no dispone las coordenadas geográficas de cada anuncio y se las tenemos que atribuir según la ubicación de cada uno. El web scraping permite recolectar de manera sistemática toda la información que requerimos de cada anuncio en un sitio web, esto nos permitió, para nuestra sorpresa, recolectar datos provenientes de anuncios creados antes del comienzo del proyecto con poco menos de 900 anuncios creados entre 2012 y 2014, además nos permitió recolectar en una mayor área. De hecho, desde que refinamos la colecta automática, no solo recolectamos los datos de los anuncios en nuestra área de estudio, sino que también ampliamos la colecta para incluir todos los municipios de la capital (ver figura 2). Desde 2018, esto nos permitió contextualizar mejor la evolución del mercado inmobiliario en los barrios centrales con respecto al resto de la ciudad. 15
Figura 2 : Repartición de los anuncios de la base de datos según los municipios entre 2012-2020 A lo largo de la colecta de anuncios, ya sea manualmente o por medio del webscrapping, se filtraron anuncios que eran claramente erróneos o no aportaban información. Descartamos anuncios que no indicaban ubicación geográfica y que no tenían un precio de venta o que indicaban un precio falso (comúnmente de $1 CUC). También se procedió a verificar por medio del URL de cada anuncio que estos no se repitieran. Durante la colecta manual se priorizaron los anuncios más completos, en particular aquellos que anunciaban la superficie de la vivienda, lo cual nos permitía tener el precio por m2. El resultado final hasta la fecha consiste en un total de 7075 anuncios distintos publicados entre 2012 y 2021, de estos 4522 indican la superficie de la vivienda. Provienen principalmente de “Detras de la fachada” y “Por la livre” como lo muestra el gráfico siguiente. Figura 3 : Sitios web de origen de los anuncios según el año de recolección Para cada barrio del estudio la distribución temporal de los anuncios es la siguiente. Resultando de las formas diversas de extraer los datos de los anuncios inmobiliarios explicada anteriormente tenemos aproximadamente 60% de los anuncios que provienen de “Detrás de la fachada”, 7% de “Espacio Cuba” y casi 33 % de “Por la livre”. 16
LÍMITES EN LA METODOLOGÍA Este análisis cuantitativo del mercado inmobiliario habanero, a partir de los anuncios a la venta publicados en varios sitios web, nos permite tener una visión macroscópica de las características y del desarrollo de este mercado. La visión cuantitativa de este análisis se basa únicamente en lo que está disponible por internet, y somos conscientes que corresponde a tan solo una pequeña parte del mercado inmobiliario total de la ciudad, gran parte del mercado se desarrolla aún hoy en día por fuera de las plataformas de internet a través de pancartas de “Se Vende” en las ventanas, a través de la venta en mercados inmobiliarios presenciales o por medio de corredores. No sabemos en qué proporción los anuncios de venta inmobiliaria tienen importancia sobre el conjunto del mercado inmobiliario, pero se puede suponer que su importancia está en aumento siguiendo el incremento del acceso a internet de la población cubana (Jolivet 2017). Los datos con los que trabajamos provienen principalmente de 3 sitios web (detrasdelafachada.com, porlalivre.com y espaciocuba.com), estos tienen cierta importancia y peso, pero no comprenden todo el mercado en la web. Los anuncios en internet permiten también de manera más fácil el acceso de esta información a inversores-compradores en el extranjero. Como todo anuncio inmobiliario, la calidad de este y la veracidad de la información disponible depende del anunciante. La información de mayor importancia para realizar una venta (en particular el precio o el número de habitaciones y baños…) tiende a ser de mejor calidad, información complementaria como el año de construcción o el piso en el que se encuentra un apartamento tienden a estar menos completos. La compra y venta inmobiliaria en Cuba se puede realizar sin declarar el monto de la transacción real, el monto declarado, sobre el cual se cobran los impuestos tiende a ser una fracción considerablemente baja con respecto al valor real de la propiedad (Pleyán, 2020). Por esta razón el precio de venta en los anuncios inmobiliarios es más cercano al precio real que el precio de la propiedad declarado hacia el gobierno. Tras análisis de los anuncios se constató en varios casos que el precio anunciado es “NO NEGOCIABLE”, lo cual indica una cercanía al precio real, en otros casos el precio es indicado como “negociable”, esto indica que el “valor” atribuido a la propiedad es ligeramente inferior al precio anunciado. En promedio estimamos que los precios anunciados son una representación ligeramente superior al precio de venta “verídico” de la propiedad. Logramos confirmar esta hipótesis luego durante nuestro trabajo de campo en La Habana, el vendedor casi siempre anuncia un precio ligeramente más alto del que se espera obtener y el comprador negociará el precio, esto difiere de las tendencias en otros mercados en el mundo. Los datos en los cuales se basa este estudio fueron elaborados por los anunciantes, estos buscan idealmente poder vender (o permutar) su propiedad realizando un buen anuncio. Sucede a menudo que hay errores en los anuncios, algunos perceptibles que podemos filtrar y otros que no, pero la mayoría de los anuncios están en capacidad de representar verídicamente la propiedad que se está vendiendo. 17
ANALISIS DE LOS PRECIOS: ¿QUÉ SE VENDE Y A CUÁNTO? © V.Jolivet, Habana Vieja, 2015 VIVIENDA A LA VENTA Según los 7075 anuncios obtenemos un precio de venta medio para La Habana de 45 000 CUC, mientras que el promedio del valor de venta es de 78 247 CUC lo cual indica que existen propiedades que se anuncian muy caras por encima de las demás. Figura 4: Rango de precios de venta anunciados La figura 4 nos permite ver la distribución de frecuencias de los anuncios según el precio cada 5000 CUC. Vemos que la media de la distribución es de tan solo 20 000 CUC. 18
Se constata también que la mayoría de las transacciones de vivienda de La Habana se negocian en un rango de 15 000 a 40 000 CUC pero que en paralelo la mitad de los anuncios superan los 45 000, y el 10% de los anuncios tienen un precio superior a 160 000 CUC. Figura 5 : Precio de los anuncios según su año de construcción Existe un lazo particularmente importante en La Habana entre la calidad arquitectónica de un inmueble y el periodo en el que este se construyó, y por lo tanto un vínculo entre el año de construcción y el precio de venta. Se pueden diferenciar en particular tres épocas de construcción para la vivienda en Cuba. Las edificaciones anteriores a 1930 que comprenden en particular las edificaciones coloniales y neocoloniales, las décadas de 1930-1950 cuentan principalmente con casas y edificios de arquitectura art-decó y moderna de aquellas décadas, y finalmente aquellos posteriores a 1959 se construyeron después del triunfo de la revolución, generalmente edificios de espacios más pequeños siguiendo modelos de vivienda fácilmente replicables o de autoconstrucción. Si se analiza el precio de la vivienda según su año de construcción se obtiene el gráfico (figura 5) en el cual se puede apreciar por un lado que hay menos vivienda a la venta construida después de 1960 y por otro lado se constata que los precios inmobiliarios más altos son de aquellas viviendas que datan de antes de la revolución. Un cálculo de medianas nos indica un precio medio de 65 000 CUC para las viviendas construidas antes de 1950, de 60 000 CUC para aquellas construidas durante la década de los 50 y un precio medio de tan solo 32 000 CUC para las viviendas construidas después de 1959. Si hacemos un análisis de texto sobre nuestra base de datos en las descripciones de la vivienda de los anuncios de venta, aquellas propiedades que se describen como siendo de arquitectura “capitalista” se venden en promedio 5000 CUC por encima que las demás. 19
PRECIO POR METRO CUADRADO SEGÚN EL MUNICIPIO DE LA HABANA A LO LARGO DE LOS ÚLTIMOS AÑOS Figura 6 : Precio del m2 en La Habana Una parte importante de este proyecto se concentró en caracterizar el mercado inmobiliario y entender cómo ha evolucionado este desde que se forma a partir de noviembre del 2011. Los datos cuantitativos que recolectamos pueden ayudar a darnos una idea de la evolución de los precios de los anuncios publicados por internet. El gráfico de la figura 6 nos resume los resultados de la evolución de precios que logramos observar. Del 2012 al 2015 los datos están representados por una línea discontinua por ser menos fiables dado a que tenemos menos datos para estos años. De manera general observamos un aumento gradual en los precios entre 2012 y 2021, el precio medio para La Habana pasa de 400 CUC/m2 al final del 2012 a 613 CUC/m2 al finalizar el 2020. Aunque los precios hayan aumentado, el mercado no evoluciona de manera constante. Numerosos aspectos del contexto cubano pueden haber influenciado los precios de la vivienda en Cuba, aumentando o disminuyendo el valor, desde contextos económicos variables, políticas nacionales en materia de vivienda y políticas extranjeras de inversión, en particular la influencia de los Estados Unidos en la inversión privada y el turismo. Hoy en día, el final de la doble moneda y la pandemia mundial duradera del COVID también influyen en el alza o la baja de los precios del mercado. 20
Al analizar los municipios se observa que los municipios de Plaza de la Revolución y Playa presentan las medias de precio más elevadas del mercado y se sitúan siempre por encima de la media de La Habana. Estos son los municipios donde con mayor claridad se expresa el crecimiento de los precios, al contrario del resto. Centro Habana, en particular en los últimos cinco años es el único de los cuatro municipios centrales que hemos estudiado que se sitúa por debajo de la media de La Habana. Por otro lado, La Habana Vieja es el municipio con los precios más inestables desde la formación del mercado, aunque casi siempre bien por encima de la media habanera tiene en su territorio las zonas de más alto valor patrimonial del país y barrios neocoloniales hoy más degradados similares a gran parte de Centro Habana. Toca resaltar que los cuatro municipios centrales presentados tienen precios considerablemente más altos que la media de los demás municipios. Al finalizar el 2020 Centro Habana tiene un precio medio de 500 CUC/m2, 696 CUC/m2 en Playa, 756 CUC/2m2 Habana Vieja y de 838 CUC/m2 en Plaza de La Revolución, mientras que el precio promedio de los demás municipios es de tan solo 315 CUC/m2. Este dato resalta la importancia que tiene la centralidad habanera y como la localización afecta de manera evidente el valor de la vivienda, de la misma manera que lo hace la calidad arquitectónica. LOS PRECIOS DE VENTA A LO ANCHO DE LA HABANA Figura 7 : Precios anunciados de venta en la provincia y “hot spots” del mercado 21
El mapa de la figura 7 da evidencia de la diferencia en los bienes raíces a la venta según cada municipio y barrio. Con nuestro enfoque en el centro de la ciudad, se observa claramente que casi todo el municipio de Plaza de la Revolución y la mayoría del barrio de Miramar en el municipio Playa tienen precios de venta por encima de la media de La Habana y como Centro Habana está casi completamente por debajo de la media. Por otro lado, se observa como la zona patrimonial de La Habana Vieja prensentaprecios por encima de la media mientras que en el mismo municipio el barrio de Jesús María, más al interior de la bahía y rodeado por espacios industriales, está por debajo. En Diez de Octubre el más poblado de los 15 municipios de La Habana se observa también como gran parte está por debajo de la media mientras que zonas como La Víbora, cuya fundación se remonta a la época colonial, están por encima. Este mapa indica también dónde se sitúa el 10% de los anuncios más caros recolectados (por encima de 160 000 CUC) y qué zonas tienen un precio medio por encima de este precio. Se identifica claramente la zona costera con gran parte de Miramar y Kolhy en Playa por encima de este rango de precio. Así resaltan los antiguos barrios de la burguesía donde residen en la actualidad la mayoría de las personas con altos estatus económico del país, se localizan embajadas y residencia de sus funcionarios, con propiedades amplias y de alta calidad arquitectónica y técnico-constructiva. 22
CENTRALIZACIÓN DEL MERCADO INMOBILIARIO © V. Jolivet, Miramar, 2015 En los estudios urbanos marxistas, el concepto de centralización permite demostrar la concentración de la renta en manos de la clase dominante. En el análisis de H. Lefebvre del capitalismo urbano, el autor resalta que hemos asistido a la transformación de los centros urbanos, después de la Segunda Guerra Mundial, en entidades retenidas por las élites para la reproducción del poder y del capital, donde la noción de centralidad sólo se piensa como una forma de centralización del poder político y económico, en contraste con la visión del filósofo y sociólogo de lo urbano, para quien la centralidad es ante todo una dimensión social de la ciudad, un elemento esencial del derecho a la ciudad (Lefebvre, 1968, 1991). En el caso concreto de este estudio en una ciudad socialista del Sur Global y en el estado actual del marco legislativo de la propiedad del suelo, parece imposible determinar con precisión si la concentración del mercado en manos de los más pudientes es real en La Habana, aunque varios autores han destacado el importante papel de procesos relacionados con sectores o situaciones que aportan ventajas económicas como el de trabajo por cuenta propia (TCP), lazos con los Cubanos en el exterior, el envío de remesas y otras formas de inversión extranjera en la conformación de este mercado (Bastian, 2018, Pleyán, 2020, Witjburg et al., 2020). Sin embargo, lo que sí es cierto en términos de nuestra base de datos es la concentración espacial del mercado y entonces del capital circulando o invirtiéndose, dentro de los barrios centrales. En este sentido puede ser interesante movilizar la teoría de la gentrificación como la presentó N. Smith en sus primeros trabajos (1979, 1987, 1996), donde los procesos de reinversión del centro de la ciudad por el capital se basan sobre esquemas especulativos del capitalismo urbano y las expectativas de una renta potencial mayor para los que invierten (rent-gap). 23
LA CONCENTRACIÓN DE LOS ANUNCIOS Y LA CENTRALIZACIÓN DEL MERCADO El mapa de densidad de anuncios de la figura 8 da evidencia de las altas densidades edilicias de Centro Habana pero resalta también el interés de venta en Plaza de la Revolución y Habana Vieja. Como observamos previamente sectores como Miramar y Kolhy con altos precios no tienen la mayor concentración de ventas dado a sus bajas densidades, pero en Plaza, por Rampa y en zonas del Vedado y en el norte de La Habana Vieja se constata que además de los altos precios se observa una alta concentración anuncios a la venta. En Buena Vista (Playa), en Príncipe (Plaza) y zonas de Diez de Octubre entre Cuatro Caminos y La Víbora también se observa cierta concentración de anuncios, aunque a menor precio, en contraste los anuncios en los municipios periféricos son más ocasionales y generalmente de precios considerablemente más bajos. Figura 8 : Densidad de anuncios de vivienda en Detrasdelafachada.com en los municipios centrales de La Habana Como se puede apreciar en el mapa la mayor parte de las ventas de vivienda anunciadas por internet están concentradas en los municipios centrales de La Habana, en particular en Plaza de La Revolución, Centro Habana y La Habana Vieja. En números brutos los municipios de La Habana que tienen el mayor número de anuncios son Plaza, Playa y Diez de Octubre. De hecho, solo el municipio de Plaza de la Revolución contiene el 21,9% de todos los anuncios de La Habana, o más del 15% de todos los anuncios de Cuba si tenemos en cuenta que La Habana concentra cerca del 80% de las transacciones inmobiliarias del país. Los cuatro 24
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