ANGLICISMOS Y GALICISMOS EN EL MUNDO DEPORTIVO DE PRINCIPIOS DEL XX
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1 ANGLICISMOS Y GALICISMOS EN EL MUNDO DEPORTIVO DE PRINCIPIOS DEL XX Lario de Oñate, Mª del Carmen, Universidad de Cádiz, Cádiz. Vázquez Amador, María, Universidad de Cádiz, Cádiz. Palabras clave: Anglicismos (anglicisms, anglizismus,), galicismos (gallicisms, gallizismus ), lenguaje deportivo ( sport language, Sport-sprache), Terminología (terminology, terminologie), lexicología (lexicology, Lexikologie) Introducción El lenguaje es el medio de comunicación entre los seres humanos a través de signos orales y escritos que poseen un significado y define a un grupo social; su cultura, valores, creencias y costumbres. El contacto entre lenguas es una realidad que ha existido siempre. No existen sitios tan alejados o aislados como para que no haya habido contacto entre diferentes lenguas y por tanto han existido intercambios lingüísticos de diversa índole. Dentro del lenguaje el léxico es la parte más dinámica, siempre en continua evolución y expansión, es, sin lugar a dudas, la parte de la lengua más afectada por la interferencia con otras lenguas. El español ha pasado por influencias de muchas lenguas. Hasta el siglo XVIII, la lengua que ejerció mayor influencia en el idioma español fue el francés, mientras que posteriormente, la influencia anglosajona ejercida sobre nuestro país queda patente en el lenguaje. Según Rodríguez González (1999) ya desde finales del siglo XIX y principios del XX, una gran parte de los préstamos en nuestro lenguaje proceden del inglés y están relacionados con el deporte, la moda, la navegación, etc. … the late 19th century and early 20th century saw the first important wave of anglicisms in many domains Duch as music, dance, drinks, dress, breeds of dogs, motorcars, and especially sports. During this period, people started to play or to hear about sports such as football, golf, polo, tennis, horse- racing, boxing and hockey and became familiar with some of the English terminology (Rodríguez González, 1999: 104).
2 A partir de la segunda mitad del siglo XX, la influencia procede mayoritariamente de los Estados Unidos debido a su importancia en la política, economía, ciencia, etc. Según Crystal ( 2003: 120-121): In the late nineteenth century it was the language of the leading economic power – the USA. [...] During the first half of the twentieth century English gradually became a leading language of international political, academic, and community meetings Una de las razones por las que la influencia inglesa fue mucho más notable que la francesa fue porque durante el siglo XVIII, el único medio de transmisión era el libro, pero ya en el siglo XIX aparecieron distintos mecanismos de comunicación, tal como explica Alfaro (1948: 105-106): El galicismo tenía el libro como vehículo casi único. El anglicismo tiene varios conductos de penetración por donde se cuela como corriente ora impetuosa, ora sutil, siempre efectiva. Las agencias noticiosas, la prensa periódica, la industria, el comercio, las ciencias, el cinematógrafo, los deportes, los viajes, las mayores y más estrechas relaciones internacionales y sociales entre los países de habla española y los de habla inglesa [...] son las causas de que el inglés sea lengua con la cual es forzoso mantener un intenso contacto diario, ya directo, ya indirecto. A principios de los años 90, los estudiosos ya ven el anglicismo como un proceso en el que unas voces inglesas han ido arraigando, formando derivados, desplazando a sus competidores hispánicos y convirtiéndose finalmente en voces tan españolas que el hablante medio no es consciente de su origen inglés, mientras que otras se han ido perdiendo o han sido sustituidas por vocablos españoles. De hecho, Latorre Ceballos (1991: 765-773), que estudió este proceso en el ámbito del fútbol, distingue dos etapas diacrónicas en el proceso del préstamo: Fase de acomodación, donde “la lengua donante ocupa todas las casillas que la lengua receptora no ha llenado con vocablos propios” Fase de respuesta, donde “los usuarios de la lengua receptora proponen alternativas a los préstamos” La mayoría de los autores parecen coincidir en que el canal por el que entran más préstamos en la lengua son los medios de comunicación, y como afirma Ávila (2004) todos los medios de información, desde los primeros como la imprenta hasta los más recientes como Internet, han contribuido, de una u otra manera, en la conformación de la unidad lingüística. Y son también de interés las afirmaciones de diversos autores como Gómez Capuz (2000) y Pratt (1980) que basándose en la teoría del triple camino
3 de Meillet (1982) sostienen que los préstamos no entran directamente en la lengua general, sino que normalmente son términos que pertenecen al lenguaje específico de la lengua origen, pasan al lenguaje específico de la lengua receptora y después entran en el lenguaje común tomando un significado más general y, siendo accesibles al gran público/hablante medio. Uno de los rasgos característicos del lenguaje deportivo es la alta presencia de voces extranjeras. La mayoría de ellas proviene del inglés aunque también se encuentran ejemplos de vocablos provenientes de otras lenguas como el francés y el italiano. El objetivo de este estudio es analizar la interferencia lingüística que existe a principios del siglo XX mediante el análisis del periódico Mundo deportivo, publicado por primera vez en febrero de 1906, coincidiendo con el nacimiento del deporte como fenómeno social a principios del siglo XX. En la primera mitad del siglo XIX apareció en Londres el primer periódico especializado en deportes, Sportman, denominado más tarde Sporting Life. En Francia el primer periódico deportivo, Le Veló, se publicó en 1892 y en Italia, en 1896, salió de la rotativa La Gazetta dello Sport. Definición y tipología Por préstamo entendemos una palabra que se toma de otra lengua. Gómez Capuz (2004:9) define el préstamo como “el intercambio de elementos lingüísticos – generalmente léxicos, aunque no siempre – entre dos comunidades de habla o dos lenguas históricas”. Son muchos los autores que han estudiado el fenómeno de los anglicismos en la lengua española: Alfaro (1948), Fonfrías (1968), Lorenzo (1996), Medina (1996), Pratt (1980), Gómez Capuz (2000), Gimeno y Gimeno (2003), entre otros muchos. El Diccionario de la Real Academia Española (RAE) define el anglicismo como: “1. Giro o modo de hablar propio de la lengua inglesa. 2. Vocablo o giro de esta lengua empleado en otra. 3. Empleo de vocablos o giros ingleses en distintos idiomas.” E. Haugen en 1950, y posteriormente en 1953 y 1969, clasificó los préstamos léxicos en dos grandes apartados: el préstamo, en los casos en que hay importación lexemática en
4 la lengua receptora (corner); y el calco, cuando hay sustitución lexemática sin importación, es decir traducción en la lengua receptora (guardameta). Pratt (1980: 115), a su vez, define el anglicismo del siguiente modo: “Un anglicismo es un elemento lingüístico, o grupo de los mismos, que se emplea en el castellano peninsular contemporáneo y que tiene como étimo inmediato un modelo inglés”. Esta definición ha sido adoptada por muchos investigadores, ya que permite distinguir los préstamos que entran en una lengua directamente desde el inglés o a través de éste, aunque originariamente procede de otra lengua; sería el caso de muchos galicismos que entran en el español a través del inglés, considerándose por ello anglicismos. Aunque también es posible el caso contrario, muchos anglicismos han llegado al español por medio del francés. La primera distinción necesaria en cuanto a la tipología de los anglicismos es la siguiente (Medina, 1996: 20): anglicismos léxicos: “la influencia ejercida por la lengua inglesa en el terreno del vocabulario de una lengua, con variadas manifestaciones”. anglicismos sintácticos: “toda influencia ejercida por la estructura sintáctica de la lengua inglesa sobre el español”. Este trabajo se centra en los anglicismos léxicos. Emilio Lorenzo (1987) divide los anglicismos según el modo de su penetración en la lengua española y su grado de adaptación a esta lengua. Anglicismos crudos. Son aquellos que conservan la grafía y la pronunciación original (football, ring). Anglicismos en período de aclimatación. Se trata de vocablos cuya grafía o pronunciación está en proceso de adaptación a las normas españolas (sportivo, footballista). Anglicismos totalmente asimilados. Voces que en el pasado penetraron en el español directamente del inglés (chutar, raíl) o del francés (record) y hoy día ya están completamente integradas en el léxico español. Calcos. Palabras que expresan conceptos desconocidos en el idioma receptor en el momento de la penetración (goalkeeper por guardameta, football por balompié)
5 Calcos semánticos. En este caso las expresiones españolas adquieren un nuevo significado que antes no tenían (audiencia ‘auditorio publico’, conferencia ‘asamblea, congreso’). Metodología Se ha creado un corpus con los 152 préstamos encontrados en los 10 ejemplares analizados del periódico Mundo Deportivo” correspondientes a dos periódicos anuales entre 1906 y 1910. Cada ejemplar consta de unas ocho páginas, dos de las cuales van generalmente dedicadas a anuncios publicitarios. Los titulares bajo los que se redactan los artículos del periódico son: Ciclismo, Esgrima, Náutica, Colombofilia, Atletismo, Foot-ball, Hípica, Lawn tennis y Tiro. La metodología seguida consistió en la lectura de los textos, la anotación de los anglicismos y galicismos encontrados y la clasificación de éstos según los criterios que a continuación se mencionan. 1. Lengua de origen (anglicismo o galicismo) 2. Morfología (adjetivo, sustantivo, verbo, adverbio) 3. Tipología: Anglicismos: o Crudo o Aclimatado o Asimilado Galicismos: o Crudo o Aclimatado o Asimilado 4. Voces relacionadas con un deporte concreto. 5. Voces deportivas generales o de otros campos (periodismo, gastronomía, etc.) Dentro de esta clasificación observaremos la evolución de préstamos crudos y en periodo de aclimatación; si hay coexistencia de distintas grafías; la evolución de préstamos y calcos y la evolución de los préstamos en periodo de aclimatación y si éstos en periodo de aclimatación admiten derivación.
6 Una vez organizada toda esta información se han cuantificado los préstamos atendiendo a su aceptación o no dentro de la lengua, es decir si han sido admitidos como préstamos por la RAE y su edición correspondiente o si no han sido admitidos, si han desaparecido en el uso de la lengua o si han adaptado su grafía a la lengua española. Análisis 1.- De los 152 préstamos lingüísticos registrados 82 son anglicismos, 60 son galicismos y 10 de los préstamos pertenecían a otras lenguas. Hemos cuantificado los derivados y las distintas grafías aunque no se han tenido en cuenta los plurales de palabras ya clasificadas. 2.- Con respecto a la morfología, el 94% de los anglicismos son sustantivos, el 4% adjetivos y el 2% verbos. Entre los galicismos el 81% son sustantivos, el 8% adjetivos, el 2% adverbios, el 2% verbos, y el 7% palabras compuestas. Claramente predominan los sustantivos en ambos grupos, aunque de manera más concluyente en el grupo de los anglicismos. 3.- Con respecto al tipo de préstamo, siguiendo la clasificación de Lorenzo, podemos decir que entre los anglicismos encontrados el 82% son crudos, es decir que mantienen la misma grafía que en la lengua de procedencia, 12 % están aclimatados, es decir, se encuentran en el proceso de aclimatación a la lengua española aunque todavía mantienen elementos extranjeros (sportivo, athletismo) y el 6% están asimilados a la lengua española, han evolucionado adaptándose a la grafía española de hoy en día (mitín).
7 Tipología 80% 60% 40% 20% 0% crudo asimilado aclimatado Gráfico 1: Tipología de anglicismos En cuanto a los galicismos el 86% son crudos, el 3% aclimatados y el 11% asimilados. Tipología 100% 80% 60% 40% 20% 0% crudo asimilado aclimatado Gráfico 2: Tipología de galicismos Esta diferencia en los porcentajes puede deberse al hecho de que las interferencias del francés estaban presentes en nuestra lengua desde el siglo XVIII, mientras que la irrupción de los anglicismos en la lengua castellana era un fenómeno algo más novedoso, y por tanto los vocablos no habían tenido tiempo de adaptarse a la norma de lengua todavía. En los mismos textos se puede encontrar la coexistencia entre anglicismos y galicismos crudos, aclimatados, asimilados y calcos.
8 Crudo Aclimatado Asimilado Calco Athletismo atletismo Automobilismo automovilismo foot-ball balompié boxe boxeo carroseries cajas Chassis chasis sport deporte team equipo garages garajes meeting mitin goal- portero keeper restaurant restauran restoranes stock stok yacht yate equipiers jugadores Cuadro1: Coexistencia de tipología de préstamos 4.- La mayor parte de los préstamos encontrados eran voces relacionadas con el deporte en general o con un deporte concreto (tenis, fútbol, etc.), aunque también hay otros vocablos que no pertenecían al mundo del deporte. El 56,6% de los anglicismos pertenecían a un deporte concreto, el 15,6% al mundo de deporte en general y el 22,8% no estaban relacionados con el deporte. El 47,6% de los galicismos pertenecían a un deporte concreto, el 7,6 pertenecían a un deporte en general y el 38,4% no estaban relacionados con el deporte. Los deportes en los que se utilizaban los anglicismos (50) son Atletismo, Automovilismo, Boxeo, Ciclismo, Esgrima, Fútbol, Hípica y Navegación. Destacan los anglicismos encontrados en el campo semántico del fútbol (32%) como penalty o corner; en el boxeo (18%) como ring o round y el automovilismo (12%) como starter o tyre.
9 Gráfico3: Anglicismos respecto a un deporte La mayoría de los galicismos relacionados con un deporte (31), en cambio, pertenecen al campo del automovilismo (42%) como garage o chasis; al atletismo (10%) con palabras como jeté y en cuanto al fútbol (10%) un ejemplo sería ballon. Galicismos respecto a un deporte 50% 40% 30% 20% 10% 0% o o xe o o a ol ca n t ism ilism o l i sm gr im útb ípi ació le B c Es F H g At ov Ci ve om N a t Au Gráfico 4: Galicismos respecto a un deporte Las voces deportivas generales que se encontraron fueron un 15% en los anglicismos (club, ex-recordman, leader, match, sportivo, o team); en el caso de los galicismos no superó el 9%, y aparecen las voces deportivas amateur, o equipiers. 5.- Los anglicismos pertenecientes a otros campos sin relación con el deporte representan un 23% con palabras como reporter, meeting o interview. Llama la atención
10 el alto porcentaje de galicismos no relacionados con el deporte (45%), entre ellos, restauran, matiné o croissant. El diccionario de la Real Academia de la Lengua recoge 39 de los anglicismos y 19 de los galicismos en distintas ediciones, siendo reconocido el primer anglicismo en la edición de 1869, (yacht, nombre dado a las embarcaciones de recreo en Inglaterra), y el primer galicismo en la edición de 1884, (gros, grueso). De los préstamos recogidos en el diccionario de la RAE cuatro vocablos, aunque son préstamos, aparecen directamente como palabras españolas (es el caso de dribling) los cuatro son anglicismos; todos los galicismos son fácilmente reconocibles (amateur, tournee) De los préstamos encontrados, 23 anglicismos (golf, record, cheque, …) y 11 galicismos (tour, tournee, …) han perdurado con la misma grafía hasta el día de hoy, 21 anglicismos (atlético, …) y 19 galicismos (garaje, …) han adaptado su grafía a las normas españolas y 25 anglicismos (back, frekick, …) y 31 galicismos (poids-lourds, voiturettes, …) han desaparecido, siendo sustituidos por vocablos españoles. En ocasiones se han encontrado vocablos y algún derivado, generalmente la palabra que ha perdurado es la que tenía la raíz, es el caso de tour, sport, etc. Conclusión El número de anglicismos encontrados en la prensa escrita es bastante superior al número de galicismos. Podemos decir que el flujo de préstamos procedentes del inglés en el ámbito deportivo no es algo nuevo ya que queda patente en la prensa publicada a principios del s. XX y que se debe fundamentalmente al complejo proceso de contacto entre lenguas; aunque algo inferior, también es llamativo el número de galicismos que aparecen en los mismos textos. La mayor parte de los anglicismos están relacionados con el fútbol, dato que resulta consecuente con el hecho de que dicho deporte procede de Inglaterra, de la misma manera, hay un elevado número de galicismos relacionados con el automovilismo, por exactamente la misma razón. Este dato consensúa la razón por la que aparecen estos extranjerismos; una necesidad de cubrir un vacío lingüístico que se produce con la aparición de un nuevo concepto o idea, en este caso las reglas y demás detalles de cada deporte.
11 Otro dato a tener en cuenta es la coexistencia de distintos vocablos para designar al mismo término. Ello es debido a su paso por diferentes fases en su proceso de adaptación desde que el término prestado entra en la lengua receptora hasta que se regulariza o desaparece. La RAE adopta por tanto una actitud moderada y toma como criterio para la aceptación de préstamos el grado de necesidad de su incorporación, admitiendo términos de uso frecuente que no tienen equivalente en español o que no se pueden expresar mediante ninguna palabra española. Resumiendo, el fenómeno del préstamo es como un camino con distintas bifurcaciones, los vocablos extranjeros entran en la lengua receptora a través de distintos medios, en este caso, la prensa escrita, y a partir de ahí toman distintos itinerarios hasta convertirse en vocablos propios. Algunos de ellos manteniéndose (crudos), otros adaptándose (aclimatados) y otros desapareciendo y siendo sustituidos por palabras en la lengua receptora (calcos o calcos semánticos) Bibliografía Alfaro, R.J. (1948): El anglicismo en el español contemporáneo. Bogotá: Boletín del Instituto "Caro y Cuervo". Ávila, R. (2004): “Lengua, dialecto y medios: unidad internacional y variación local del español”. Ponencia en el Congreso Internacional de la Lengua Española, Rosario 2004. Http://congresos de la lengua.es/rosario/ponencias/internacional/avila_r.htm. [4-6-2010] Crystal, D. (2003): English as a Global Language (Second edition). Cambridge: Cambridge University Press. Diccionario de la Real Academia Española (RAE): http://buscon.rae.es/draeI/ Fonfrías, E. J. (1968): El anglicismo en el español de Madrid. San Juan: El Club de Prensa.
12 Gimeno Menéndez, F. y Gimeno Menéndez, M. V. (2003): El desplazamiento lingüístico del español por el inglés. Madrid: Cátedra Gómez Capuz, J. (2000): Anglicismos en el español actual: Su estudio en el registro coloquial. Cádiz: Servicio Publicaciones Universidad de Cádiz . Gomez Capuz, J. (2004): Préstamos del español: lengua y sociedad. Madrid: Arco Libros. Haugen, F. (1950): “The Analysis of Linguistic Borrowings”, Language, Vol.26, pp. 210-30. Lorenzo, E (1987): “Anglicismos en la prensa”. En El lenguaje y los modos de comunicación. Actas de la I reunión de Academias de la lengua española sobre el lenguaje y los medios de comunicació. Madrid: Real Academia Española, 71-78. Lorenzo, E (1996) Anglicismos hispánicos. Madrid: Ed. Gredos. Latorre Ceballos, G. (1991): “Anglicismos en retirada: contacto, acomodación e intervención en un sistema léxico”. En Hernández, C. et al (eds.) El español de América. Actas del III Congreso Internacional de El Español de América, Valladolid: Junta de Castilla y León, 765-773 Medina López, J. (1996): El anglicismo en el español actual. Madrid: Arco/Libros. Meillet, A. (1982): Linguistique historique et linguistique général. Paris: Champion. Pratt, C. (1980): El anglicismo en el español peninsular contemporáneo. Madrid: Gredos, 1980 Rodríguez González, F. (1999): “Anglicisms in contemporary Spanish. An overview”. Atlantis, 21, 179-216.
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