Desde la Puerta del Sol - La Razón de la Proa
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Desde la Puerta del Sol La Puerta del Sol madrileña, en la que se encuentra el punto kilométrico 0 de España, creemos es un buen enclave para formalizar un juicio de lo que pasa en el país, lo que podemos alargar a Hispanoamérica y al resto del mundo. Con esa idea nos hemos situado junto el oso y el madroño, desde donde saludar a nuestros amigos A l ritmo que vamos va a ser frecuente el uso de todas las palabras del diccionario que se tienen como escabrosas, cuando no son consideradas como obscenas por determinado público, por lo específicas que resultan para categóricos actos. Cierto que están en el diccionario junto a las otras «La masturbación mola», Emilio Álvarez en el lugar que las corresponde, ordenadas Frías alfabéticamente. Claro que por su uso frecu- Cruces destrozadas, Manuel Parra Celaya ente tampoco hemos de bajar de sus premios No me eches una mano, que me la echas Miguel de Cervantes, Príncipe de Asturias de al cuello, Carmen Posadas las letras y Nobel de literatura a Camilo José ¿Dónde está el defensor del pueblo y de Cela por haberlas incluido con soltura en sus los «inmigrantes»?, José Francisco escritos; ni al Académico de la Lengua Arturo Serrano Oceja Pérez Reverte, que tampoco se contiene de- Esperanza y misericordia, Cardenal masiado en el empleo de las palabras que Antonio Cañizares considera las más adecuadas para expresar ¿Legal y seguro? Muere una joven claramente lo que quiere decir, pues no se an- activista del pañuelo verde durante un da con muchos remilgos. aborto en Argentina, Walter Sánchez Silva El empleo de rotundas palabras para la mejor Corrompiendo a los niños, Rafael Nieto comprensión de lo que el escritor o el orador Los bares madrileños bautizan una intentan decir, no tienen por qué incitar la en- cerveza en homenaje a Ayuso como «La señanza pública de la práctica de los actos caña de España», Pelayo Barro que representan, y menos a un conjunto de Sonia Lago, nieta de un asesino y un críos jóvenes que ni siquiera han llegado a la ladrón: Largo Caballero, Eduardo García considerados de zagales de ambos sexos. Por Serrano más que el ser humano ya los tuvo en consi- deración desde la antigüedad, pues los aprendió por sí mismo el hombre desde que empezó a andar erecto, como continuador de los primates de los que recibieron su origen según nos cuenta Darwin, o lo que la Biblia nos dice tras expulsar el Creador a Adán y su mujer del paraíso: «El hombre se unió a su mujer Eva; ella concibió y dio a luz a
Caín». Luego vino todo el rollo de gente y más gente a lo largo de siglos, pasando algunos por lugares españoles como Atapuerca, Altamira, Tito Bustillo y muchas más, y todos supieron qué hacer para procrear sin que la jefa del clan les diera unas tablillas en las que se expusiera cómo funcionaba la cosa del sexo. ¡Lo descubrían por sí mismos! Ahora, después de haber pasado tanto tiempo para que el hombre aprendiera para qué servían los órganos sexuales, Sara Hernández, la alcaldesa de Getafe (Madrid), se lanza a tal ilustración de sus paisanos, para lo cual ha dotado de un librito a todos los jóvenes de primera enseñanza e institutos por creer que «Es gesto claro de este equipo de go- bierno el que todos los niños y niñas de Getafe, todos los adolescentes, todos los jó- venes y las jóvenes del municipio tengan relaciones sexuales claramente y eviden- temente satisfactorias, y claramente y evidentemente igualitarias». En cuyo libelo aparecen frases tan interesantes como que «la masturbación mola» o «apaga la tele y enciende tu clítoris». Naturalmente, la enseñanza de esta materia tan difícil de aprender estará en manos de «unos magníficos profesionales en la Concejalía de Educación y en la de Feminismos para que le puedan ayudar». Todo ello sufragado con dinero del Ayuntamiento. Esto nos da pie para pensar que los miembros de la Real Academia de la Lengua podría ampliar el significado de la palabra «masturbar», con una nueva acepción aportada por no pocos miembros de la Administración española que masturban con gran facilidad su cerebro para poner en marcha no pocas de las normas que crean para que el pueblo en general haga tonterías, barbaridades, estupideces, locuras, se empeñe en cambiar las materias académicas necesarias por otras que nada tienen que ver con la enseñanza y educación. Como ejemplo de esa práctica tenemos lo que en estos momentos entra por el ordena- dor, lo dicho por la ministra de trabajo: «el Gobierno multará a las empresas que no evalúen el estrés de sus empleados». Esta chica, tan amada por el enloquecido candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid, debe ser de las personas que se masturban todos los días el cerebro para parir alguna sandez. Como también le pasa al presidente del Gobierno, que en dos días ha cambiado tres ve- ces la intención de subir o no los impuestos, todo ello sabiendo que está vigilado por la UE y sus vaivenes puede interrumpir la llegada de ayudas monetarias a España. Los signos de masturbación de muchos dirigentes se manifiestan continuamente, y resul- taría el cuento de nunca acabar intentar ir reproduciendo sus genia- lidades. Pues decisiones parecidas a las de la alcaldesa de Getafe son tomadas por la Ministra de Igualdad casi todos los días, el mi- nistro del Interior tomando decisiones y medidas en contra de sí mismo o al menos de los cuerpos bajo su mando, etcétera. ¡Qué sensatos fueron los fenicios! No perdían el tiempo. Se dedica- ban al comercio en todos los aspectos posibles en su época, inven- tando una cantidad considerable de artilugios para que los produc- tos pudieran llegar a sitios lejanos, y, como muestra de uno de esos artilugios que ha llegado hasta nuestro tiempo con las mismas ca- racterísticas para cubrir las mismas necesidades de momentos tan lejanos, ahí está el botijo. Hoy nos acompaña un ejemplar salido de las manos de los alfareros de la firma Vila Clara, de La Bisbal, Gerona, que, como el de hace unos días, se carga por la boca superior disponiendo de un solo pitorro para escan- ciar el líquido que contiene.
Vota LIBERTAD Estamos hasta el moño de la dictadura totalitaria de inútiles e incapaces E n los días posteriores a la Semana Santa –justo antes de que volvieran a decretar en Cataluña el confinamiento comarcal–, mi esposa y yo nos permitimos unas jor- nadas de turismo, ya sin aglomeraciones. Elegimos para ello algunos de los parajes donde tuvo lugar la Batalla del Ebro, en el verano y otoño de 1938, tanto por interés por nuestra historia como por el hecho de que dos familiares murieron durante aquellos 115 días de combate. No quiero entrar en comentarios sobre errores, despropósitos y tergiversaciones, así co- mo de llamativos silencios y omisiones, que pueblan carteles informativos y folletos de la Memoria histórica, con intencionalidad partidista manifiesta (sí destacar la salvedad del Museo de Gandesa en punto al rigor y a la ecuanimidad). Uno no puede luchar contra los elementos, de forma que nos limitamos a rezar por todos los muertos del enfrenta- miento, sin distinción de bandos, pues aprendí, en la formación recibida en mi juventud, a todos como caídos por una España mejor: seguro que, hacer- tados o errados, esta era la idea que presidía en la mayoría de los comba- tientes. En estas líneas, me centro en concreto en el escamoteo y destrozo del signo de la cruz, No es novedad que, en algunas localidades españolas, los Consistori- os que se autodenominan progresistas hayan apeado de sus suportes y basa- mentos las cruces en recuerdo de los muertos en la guerra civil; ya no los símbolos del bando vencedor, sino la propia Cruz, como símbolo universal de reconcilia- ción, de paz, de fraternidad y, para los creyentes, de Resurrección, mención especial- mente oportuna en estas semanas de la Pascua cristiana. Tampoco es noticia la desaparición de algunas cruces que presidían muchas cimas mon- tañeras, referentes y acicate durante la ascensión; en este caso, la pobre coartada
progresista era una curiosa versión del Ecologismo Radical, al eliminar lo que considera- ban no puesto estrictamente por la Naturaleza, con descuido curioso de su Creador. Se ve que, para el progreso, estorba a todas luces el signo del Crucificado, que abrió a la Trascendencia a todos los seres humanos, incluidos los progresistas. En los recorridos por la Terra Alta de estos días, ya nos costó localizar, cerca de Gandesa, la llamada «Cresta de la Muerte», que corona el «Puig de l´Àliga»; ese punto cambió de manos repetidas veces durante la batalla, en medio de combates cuerpo a cuerpo de singular crudeza y heroísmo; pero alguien había decidido que la cruz que coronaba el Puig sobraba; el mapa y la brújula sustituyeron, en cuanto a la orientación en nuestro caso, al hito depuesto. No obstante, lo que más nos impresionó fue contemplar los monumentos destruidos que estaban erigidos en las posiciones de Punta Targa y Cuatro Caminos, cercanas a la localidad de Villalba de los Arcos; la primera fue defendida por el Ejército Popular repu- blicano y la segunda por el Tercio de Requetés «Nuestra Señora de Montserrat». Allí, la Hermandad fundada por los supervivientes de dicho Tercio había erigido sendos mono- litos, presididos por la Cruz, y con letras de Pax y un relieve que representaba dos manos entrelazadas; entre ambas antiguas posiciones enemigas unos mojones iban jalonando los Misterios del Rosario, que se rezaba por propios y ajenos, por amigos y antiguos ene- migos, sin discriminación. Pues bien, en ambos emplazamientos las cruces habían sido destrozadas a conciencia y triturado el relieve de las manos unidas. Allí se había hecho tábula rasa de la historia co- mún, la de los encuentros y desen- cuentros; ni los republicanos de «Punta Targa» ni los carlistas de «Cuatro Caminos» habían mereci- do la menor consideración para los salvajes que, a golpes de mazo, perpetraron el destrozo; ni rojos ni nacionales: odio a cualquier visión de España y, sobre todo, odio a la Cruz que los acogía ambos. Me informaron que el destrozo tuvo lugar en 2015, y que los protago- nistas del mismo fueron los separatistas del grupo Arrán: ignorantes de la historia, ad- versarios de España, sañudos contra la Cruz y desconocedores del inmenso decoro que significa dar la vida por una idea. Una impunidad absoluta los ampara, en este caso no hay delito de odio que valga. Por supuesto, tampoco se ve como factible que ninguna institución –municipal, autonómica, nacional– acometa la reconstrucción de ambos monumentos. Quieren encaminarnos a nuevos enfrentamientos civiles, está claro, que es lo que pare- cen perseguir los detentadores del monopolio de las «Memorias» y los destructores de los monumentos de reconciliación. Dios quiera que no lo logren su propósito, Pero estoy seguro de que, en el caso de que su odio promoviera nuevos conflictos, ellos se limitarían a acometer toda clase de fechorías y desmanes en la retaguardia, alejados lo más posible del peligro de los tiros. Porque, además de odiar, son cobardes.
T engo verdadera curiosidad por saber a qué nuevo grupo de mujeres logrará enfa- dar la ministra de Igualdad Irene Montero. ¿Serán las madres solteras?, ¿las muje- res en paro?, ¿las cabeza de familias monoparentales, quizá? Dado su historial, seguro que será uno afín a sus muy progresistas preocupaciones porque lo suyo es récord mundial de fuego amigo, toda una plusmarca de «no me eches una mano, que me la echas al cuello». Primero, fue su proyecto de Ley Trans el que logró concitar el rechazo unánime de los colectivos feministas. Hasta tal punto que, incluso a Carmen Calvo – siempre prudente a la hora de camuflar las cada vez más tensas relaciones entre los partidos que forman la coalición de gobierno–, no le importó discrepar públicamente. «Me preocupa –ha dicho– que se pueda elegir género sin más que la mera voluntad o el deseo, poniendo en riesgo los criterios de identidad del resto de los 47 millones de españoles». Recordemos que el borrador de Irene Montero planea permitir el cambio de sexo en el Registro Civil sin necesidad de aportar siquiera un informe médico o psico- lógico que acredite «disforia de género», como hasta ahora se requiere. También especifica que «podrá llevarlo a cabo cualquier persona a partir de los 16 años y sin el consentimiento paterno». Da la casualidad de que, hoy en día, un chico o chica que de- see hacerse un piercing, debe acreditar que ha cumplido los 16 años y presentar una autorización paterna. Apuesto a que Irene Montero no lo sabe. Apuesto a que cuando se entere fulmina esta ley fascista y superretrógrada que pisotea los derechos de niños y adolescentes. Vigilante siempre a todo lo que pueda mejorar la vida de nosotras, las mu- jeres, ahora ha emprendido una nueva lucha para erradicar otra horrible injus- ticia que nos atenaza. Ella la explica así: «Mujeres y niñas tienen derecho a ac- ceder en igualdad a los estudios y profe- siones científicas. Trabajaremos por eli- minar estereotipos machistas y barreras que impidan este objetivo y para hacer visibles a las mujeres pioneras que han hecho, hacen y harán ciencia». Al poco de publicar su plan en Twitter un sinfín de mujeres se hizo eco de su propuesta por la misma vía. Pero no exactamente del modo que ella esperaba. «Accedí a una carre- ra técnica superior hace 20 años por la nota de corte» –comentó una de las tuiteras. «Las mujeres rondábamos el 50%, ingenieras, químicas, telecos, biólogas… Facultades y Escuelas están llenas de mujeres, los únicos que trabajáis por fomentar estereotipos machistas sois vosotros». «Soy ingeniera desde hace más de 25 años» –explicó otra–. «No tuve impedimento alguno ni presión para elegir mi vocación. La única barrera existente es la nota de acceso. No estáis trabajando en nada». «Estudio ingeniería infor- mática» –escribió una tercera―. «Nunca nadie me dijo que no podía estudiar una inge- niería o grado científico, de hecho siempre me dijeron que las mujeres de estas carreras destacaban. Las feministas vivís en una realidad paralela». Esta idea de que las feministas –las de la onda Irene Montero, no el resto– viven en una realidad paralela, parece corroborarse con lo sucedido el pasado 6 de febrero. Ese día la ministra aseguró que Igualdad está trabajando por una ley de libertad sexual que reco- nozca la mutilación genital femenina como una forma de violencia machista. Espléndida
y meritoria iniciativa, qué duda cabe, si no fuera porque la mutilación genital está penada desde 2003, es decir, hace cerca de veinte años. Por estos y otros dislates trasnochados y/o faltos de la más elemental información yo, como madre de dos hijas que cursaron carreras de ciencias sin que ningún malvado ma- chista las discriminara, me gustaría hacerle una petición a la ministra de Igualdad. Como imagino que no entra en sus planes de dejar el ministerio y renunciar a todo que conlleva, solo le ruego una cosa. Que no haga nada. Que en lugar de promover leyes que a nadie contentan, se dedique a hacer crucigramas, por ejemplo. O a resolver sudokus, que es súper científico y ejercita la mente. Visto lo visto, es el mejor favor que puede hacernos a todos, y, en especial, a todas. (ABC) V uelvo a San Blas, al barrio de San Blas y a la Unidad Pastoral, que lo nuevo siem- pre ilusiona. En esta ocasión a la Parroquia Virgen del Mar, plaza de Peones, 3, que dicen que la titular es la virgen patrona de Santander o, también, la devoción popular en Almería. Aunque la imagen de la Virgen del Mar de aquí no se parece en nada a la de mi tierruca. Me encuentro con un párroco joven, no sé si de los más jóvenes de Madrid, Enrique Abanades García, que me cuenta lleva no mucho tiempo. Sinceramente, no lo parece. Su ilusión, las ganas de hacer bien las cosas, de servir, la pasión que pone al explicar desde el más pequeño detalle al proyecto más ambicioso suple lo que le falta en años. Recordemos. La Unidad Pastoral de San Blas –experiencia piloto de este Madrid en salida– está com- puesta por las parroquias de San Blas, San Joaquín, Virgen de la Candelaria y ésta, que además está dedicada a la Divina Misericordia desde los tiempos en los que estuvo de párroco Diego Martí- nez Linares, quien dejó, por cierto, unas preciosas pinturas que ilustran la capilla del sencillo y cuidado templo. Al párroco le acompaña el sacerdote Carlos Andrés Diosa Londoño, como vicario parroquial. Es natural de Medellín (Colombia). Los dos forman parte del equipo de sacerdo- tes de la Unidad Pastoral, un equipo bien conjuntado que trabaja sin un proyecto prefija- do, al compás del Espíritu, que es el que lleva la pauta. La parroquia Virgen del Mar tiene una feligresía mayor, con notable presencia de inmigrantes. Pero se palpa que aflora una nueva generación de familias que se acercan a la parroquia. Encuentran ese sabor de hogar, ese espíritu de familia tan necesario ante las inclemencias de la vida.
Virgen del Mar está volcada en la caridad. Cada semana está desbordada ante las peti- ciones urgentes de comida. Es una especie de urgencias alimentarias de la zona. En la entrada hay un aviso que dice: «En Cáritas se necesitan: arroz, aceite, atún, Cola Cao, galletas, legumbres, foie gras, tomate frito y sopas de sobre». Más claro, agua. Atienden a una veintena de familias por semana que vienen a por los alimento básicos. En los últimos tiempos se percibe un incremento de demanda ante la prolongación de los ERTE y los problemas con el ingreso mínimo vital, que no se está recibiendo de forma regular. No lo olvidemos, la parroquia da alimentos de urgencia, no como una costumbre, sino de manera especial para solucionar la necesidad inmediata. El párroco destaca la estre- cha colaboración con el Ayuntamiento y con las asociaciones de la zona. Una colaboración en la asistencia básica, a través de los servicios, sociales, y en la salud. Ahora se está trabajando conjuntamente con el proyecto «Atender soledades». Pero la parroquia Virgen del Mar es también un potente foco de atención espiritual, una luz para la vida de los fieles a través de la devoción a la Divina Misericordia. Una devoción muy arraigada tanto en la parroquia como en la zona. Una devoción que tiene que ver con la realidad que cada uno vive, con el sufrimiento de las personas. No pocos fieles se sienten tocados en su corazón por el amor. Es el modo de Jesús de presentarse en su humanidad y de introducirnos en la lógica de su divinidad. Una devoción que se traduce en las obras de misericordia. Mañana, por cierto, es su gran fiesta. Se ha preparado en tres días, en los que se ha hablado de cómo la Divina Misericordia da forma al trabajo, a las comunidades parroquiales y a la espiritualidad personal y comunitaria. Cada martes de seis a siete de la tarde, en la parroquia hay una oración especial dedicada a la Divina Misericordia, una forma de hablar de la ternura de Jesús, como recuerda el Papa Fran- cisco. El otro pilar de la parroquia es la devoción eucarística. La experiencia del robo del sagra- rio, ocurrido el pasado 25 de octubre de 2019, hizo que la comunidad se volcara en la Eucaristía. Todos los viernes desde las tres de la tarde hasta las siete, se expone el Santísimo Sacramento para que los fieles se acerquen en actitud orante, de adoración, de agradecimiento por esa sencilla y elocuente presencia. (La Razón) H an pasado los días de la Semana Santa y los de la Pascua. Han pasado muchas cosas, siguen pasando muchas y graves cosas: la pandemia del covid sigue ahí, con menos fuerza, tal vez –eso quisiéramos–, pero sigue, y los miedos y temores, las tribulaciones y los sufrimientos, las pruebas y las heridas abiertas del Crucificado, en quien tenemos nuestra actual pasión, compartida por Él por puro amor, continúan; y al mismo tiempo continúa irrevocable la esperanza que trae el Resucitado, vencedor de toda muerte y de toda destrucción. Cuánta necesidad tenemos de la esperanza que obra en nosotros la misericordia divina! ¡Cuánta necesidad de la misericordia de Dios tiene nuestro mundo, la tenemos todos, nuestro mundo contemporáneo! Donde dominan el odio, las estrategias del mal, sin importar ni bien común ni bien de las personas; donde prima el interés propio o del grupo por encima de cualquier otra consideración razonable; donde prevalecen la lucha por el poder y el prestigio, la mentira
y el engaño, el dominio, la sed de venganza, la falta de concordia o la despreocupación por ella; donde imperan el miedo o las tiranías redivivas; donde la guerra y el hambre conducen al dolor y la muerte de inocentes en tantos lugares; donde la carrera arma- mentística no disminuye sino que se agranda amenazante; donde el terrorismo y el nar- cotráfico, el exilio, la marginación, y la pobreza agrandada, el acoso a la familia, el desentendimiento de los más pobres se acrecienta, como se acrecienta el número de los parados y los sin techo; donde, lejos de disminuir, están aumentando la pseudo cultura de la mentira, el relativismo, la negación de la verdad o su reducción a lo técnico, práctico o «científico»; donde se están segando tan cruel como indigna, injusta y despia- dadamente tantas vidas humanas por el aborto «legal» o la aprobación de leyes eutanásicas que no respetan la vida hu- mana ni la dignidad de la persona; donde no se está favoreciendo la ética del cui- dado, el acompañamiento o los cuidados paliativos justos; donde se está cami- nando por sendas de secularización y laicismo que olvidan a Dios y rechazan su reconocimiento y obediencia; donde se están propiciando, de manera taimada, tan suicida, sin futuro y sin salida, la soberbia que piensa en el hombre como dueño absoluto de todo, y, al mismo tiempo, los siete pecados capitales; donde no se sabe ya qué es el bien y qué es el mal; donde las insti- tuciones educativas están fracasando por no educar, por paradójico que parezca; y un largo etcétera, uno se pregunta ¿cabe la esperanza? No es lo que digo un «Syllabus» de males de nuestro tiempo ni soy un pesimista que to- do o muchas cosas las ve mal, ni tampoco tengo una mirada moralizante o desviada. Es que veo con lucidez que necesitamos y podemos cambiar; que necesitamos volver a Dios revelado y presente y actuante en su Hijo, Jesucristo. A menudo el hombre de hoy vive como si Dios no existiera, e incluso el hombre contem- poráneo se pone a sí mismo en el lugar de Dios, pretende ocupar su puesto. Se arroga el derecho del Creador de interferir en el misterio de la vida humana, quiere decidir, me- diante manipulaciones, la vida del hombre y determinar los límites de la vida y de la muerte, del bien y del mal, de la verdad y la mentira, de lo verdadero y lo bello. Y, de este modo, tal vez sin proponérselo directamente, se observa una tendencia, dota- da de mucho poder, de superpoderosos dominadores del mundo, que quiere eliminar la religión, sobre todo la Iglesia católica presidida por Pedro, el cristianismo, y reducirlas a pura ética universal fabricada en laboratorio por un consenso de fuerzas en correlación, donde Dios no cuente, ni tampoco la verdad (que nos es dada, que es «aletheia», reve- lación, gratuidad). Se está intentando que Dios no cuente, en la vida pública y hasta en la privada. Pero el hombre, sin Dios, muere; la Muerte de Dios, base de una cultura de muerte, es la raíz y el vaticinio de la muerte del hombre. Esto es una regresión sin futuro, una huida al pasado, a la muerte, al sepulcro, a la tristeza irremisible que no puede triunfar el Amor, la desolación de que no puede triunfar la Vida sobre el odio, la transgresión, el pecado y la muerte. Pero la verdad, gracias a Dios, que tanto quiere al hombre, que es Amor con un corazón que es ternura y perdón sobre la miseria, y a su infinita misericordia, no es esa. La verdad la tenemos en Jesucristo –Verdad de Dios y del hombre– a quien Dios ha resucita-
do y que nos ha salvado y liberado del abismo. La resurrección de Jesucristo nos abre a la esperanza y señala caminos que nos conduce al verdadero futuro. ¡Es hora de la esperanza, de una esperanza grande, es hora de la alegría, es hora de que la Iglesia, animada por la fe, anuncie a Jesucristo! Sin ningún miedo, todo lo contrario: abrir las puertas a Cristo es la tarea de la Iglesia que ha de ser renovada interiormente, por la fe, por el Espíritu, con la oración, los sacramentos, con el amor a Dios sobre toda las cosas y aman- do a los demás como a nosotros mismos, singularmente a los muy preferidos del Señor, que son los últimos y los más ne- cesitados de su misericordia. Así será una Iglesia que admire a los demás por su alegría. Esto es lo que se espera de la Iglesia, de los cristianos. No lo olviden, es la hora de la fe, ahí está la victoria que vence a este mundo, del que antes daba algunas señales de riesgo. (ACI Prensa) M aría del Valle González López murió junto a su bebé tras someterse a un aborto «legal» en Argentina. Era partidaria de esta práctica. María del Valle González López tenía 23 años y era presidenta de la Juventud Radical en el municipio de La Paz en la provincia de Mendoza (Argentina). El domingo 11 de abril murió luego de someterse a un aborto legal en un hospital local, hecho que ha conmocionado al país al ser la primera muerte registrada luego de la apro- bación de la ley del aborto el 30 de diciembre. Según informa el diario argentino Clarín, la joven se dirigió el miércoles 7 de abril al hospital Arturo Illia en la localidad de La Paz «para solicitar un procedimiento de interrup- ción legal» del embarazo, término usado para referirse al aborto. «Allí le recetaron una medicación –se presu- me que misoprostol– y el viernes comenzó a sentirse mal. Fue derivada al principal centro de salud de la zona este de Mendoza, el hos- pital Perrupato, donde detectaron una infec- ción general que le habría provocado la muerte», indica Clarín. Cómo funciona el aborto por misoprostol El misoprostol es una prostaglandina que hace que el útero expulse lo que está en su interior. En el caso de un embarazo provoca que la madre pierda al niño por nacer, lo que puede generar que la mujer se desangre.
En algunos casos la hemorragia puede hacer que la madre entre en shock hipovolémico y muera. Por lo general, la mujer que toma misoprostol va luego a un centro de salud para hacerse un legrado y así quitar del útero cualquier resto del bebé. Si este legrado o raspado se realiza usando material no esterilizado adecuadamente o que está contaminado, este puede provocar una infección que podría llevar a la septicemia o infección generalizada, lo que puede ocasionar la muerte. El Dr. Luis Durand, médico cirujano argentino, explicó a ACI Prensa que aunque algunos afirman que la muerte de la joven podría haber ocurrido por «mala praxis», en realidad «el aborto no es una práctica médica. Hasta hace unos meses, para la ley argentina era un acto delictivo». «Ahora es un “instrumento legalizado” para supuestamente beneficiar a unos y castigar a otros, y eso no es un acto médico, independientemente que sea legal o no». «El acto médico siempre debe buscar mejorar la situación de todo aquel sobre quien interviene, aunque circunstancialmente pueda fallar y no lograrlo, pero nunca puede considerarse un acto médico, “interrumpir la vida” de cualquier ser humano en forma intencional o premeditada», precisó. «En el aborto la muerte para el bebé siempre es violenta. O se le inyectan sustancias que lo que- man en el útero, o lo extraen por desmembramiento, o es arrancado por contracciones uterinas extremas muriendo por asfixia», indicó el Dr. Durand. El médico resaltó también que «la infección general o septicemia en una mujer que toma misoprostol para abortar puede darse cuando la expulsión es in- completa y quedan restos del bebé en el útero materno. Por eso es una falacia decir que cualquier instru- mentación en un organismo pueda ser “segura”». La joven fallecida estudiaba Traba- jo Social en la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo). En cuanto se supo de su muerte, diversos acti- vistas y grupos provida en Argenti- na inundaron las redes con los hagstags #MurióPorAbortoLegal y #AbortoLegalMataIgual. La líder provida Guadalupe Batallán, escribió en su cuenta de Twitter este lunes que «María del Valle tenía 23 años y toda una vida por delante. Era estudiante y había llegado a ser presidente de la juventud radical en Mendoza. Abortó legalmente el miércoles y para el fin de semana ya estaba muerta. Te lo cuento yo porque las feministas se callan. #MurioPorAbortoLegal». «Si María hubiese muerto en la clandestinidad las feministas estarían rompiendo toda la ciudad, pero como María #MurioPorAbortoLegal y eso no les conviene, se borran», escribió por su parte Belén Lombardi, joven madre y activista provida. Clarín señala que la investigación de la muerte de María del Valle comenzó en la Fiscalía de Santa Rosa, pero por su complejidad pasa este lunes a la Fiscalía de San Martín. Los resultados de la autopsia deberían conocerse en las próximas horas aunque no se sabe exactamente cuándo se divulgarán. Martín Zeballos Ayerza de Abogados por la Vida en Argentina explicó a ACI Prensa que la joven fallecida «era una chica muy conocida porque era militante de la Unión Cívica Radical, partido histórico en Argentina».
Este partido, «si bien tiene en su carta de principios el derecho a la vida, fue captado por el progresismo, sobre todo en la Universidad de Buenos Aires» donde hay muchos «radicales verdes abortistas». En Argentina, explicó el también magíster en administración y políticas públicas, la Unión Cívica Radical tiene miembros abortistas y también provida. «Desde Rosario hacia el sur, en su mayor parte los radicales son abortistas. De Córdoba hacia el norte, los radicales son provida. Se podría decir, en general, que los radicales de las ciudades grandes son progresistas y los radicales de las ciudades del interior del país son próvida», resaltó Zeballos. En sus declaraciones a ACI Prensa, Zeballos también recordó que la senadora Silvia Elías de Pérez de Tucumán, una radical provida, votó en agosto de 2018 «a favor de las dos vidas» y en contra de la ley del aborto. «El comité radical tiene en Buenos Aires un lugar donde están los cuadros de grandes dirigentes mujeres del partido. Tras la votación de Pérez, descolgaron su cuadro por haber votado a favor de la vida. Dejó de ser dirigente notable por defender la vida desde la concepción». «Eso muestra la lucha y las contradicciones internas. El radicalismo es parte de Juntos por el Cambio que era parte del gobierno con el expresidente Mauricio Macri. Hoy dicen que son oposición, pero en realidad son la primera minoría progresista», concluyó Zeballos. (El Correo de España) L a corrupción de menores, vestida de progresismo, es otra de las lacras que tene- mos que padecer los sufridos súbditos de las democracias liberales de Occidente, por mucha «sociedad civil» que haya y por mucho ruido que hagamos unos pocos en los medios de comunicación libres. Una lacra promovida por la izquierda pero que la derecha, hasta ahora, ni ha querido ni ha sabido parar. Son numerosos los ejemplos que podríamos poner en los que las administraciones públicas (ayuntamientos, comunidades autónomas...) se atreven a inmiscuirse en la más tierna intimidad de nuestros niños y adolescentes, tratando de proyectar sobre ellos una ideología corrosiva, manipuladora, capaz de ensuciar incluso las mentes más inocen- tes. Sin que los padres (que en la mayoría de los casos, ni se enteran) puedan hacer nada para evitarlo. El Ayuntamiento de Getafe, en una inicia- tiva realmente repugnante, ha editado una guía titulada Rebeldes del género con la intención de que los niños y adolescentes de la localidad tengan relaciones sexuales satisfactorias. Esta cochinada de guía lanza a los chicos del municipio mensajes como «la masturbación mola» o «apaga la tele y enciende tu clítoris» (suponemos que dirigido a las niñas, aunque ya, a estas alturas, tampoco nos atrevemos a asegurarlo). Esto, en roman paladino, es corrupción de me- nores, así de claro. Pero la alcaldesa socialista, Sara Hernández, probablemente no tenga nada más importante de lo que ocuparse en Getafe que la entrepierna de los púberes.
Esta guía se está distribuyendo ya en colegios e institutos, es decir, que se dirige a niños con una edad en la que de ninguna manera es aceptable que accedan a semejantes guarradas. Las niñas de Getafe, como las de Albacete o las de Mondragón, lo que tienen que hacer a esas edades es estudiar Lengua (para no dar patadas al diccionario como Pepiño Blanco), estudiar Historia de España (para no ser un zoquete como Rufián o como Adriana Lastra) y darle con denuedo a las Matemáticas (para no ser tan torpe como Echenique). Para conocer su intimidad ya tendrán tiempo, y ojalá lo hiciesen de la mano de la Iglesia Católica, y no de esta gentecilla metida en política. La guía asegura que la masturbación «no es pecado» y aprovecha para arremeter contra la Iglesia Católica, único freno conocido para las aberraciones sexuales de estos corrup- tores. Porque lo que el PSOE querría, al igual que el resto de partidos de inspiración mar- xista o liberal (o sea, progre) es llenar la sociedad de jóvenes alejados de una moral decente y de la pureza del alma, es decir, jóvenes que sean como animales. Lo de menos es que aprueben alguna asignatura o que suspendan hasta el recreo; lo principal es que sepan tocarse entre las piernas y se adentren lo antes posible no en la sexualidad, sino en la degeneración moral y el vicio. El socialismo perdió su razón de ser con la caída del muro de Berlín y el desastre del comunismo en Cuba y el resto de sus satélites. Una vez perdida la batalla de su ideología original, el socialismo (ahora mutado en progresismo radical) tiene en la ideología de gé- nero su único escenario de acción. Y naturalmente, lo mejor para iniciar a los chicos en la ideología de género es crear en ellos necesidades ficticias basadas en aberraciones. Por si fuese poco con la multitud de estímulos audiovisuales que invaden su intimidad, aho- ra también los colegios e institutos se dedi- can a esta forma de corromper a niños desde su más tierna infancia. La pregunta que uno se hace es si esto real- mente le importa a los padres de hoy. Porque esa es la cuestión. En qué están pensando los padres de esos chicos para permitir que el sitio donde se supone que tienen que aprender y formarse como personas en realidad les está convirtiendo en esclavos de sus impulsos más primarios. Probablemente, a muchos de esos padres no les importe o incluso estén de acuerdo con esa forma de corrupción. Y es que el mundo de hoy navega sin rumbo ni brújula moral hacia un horizonte bastante peor que el presente. (OKdiario) L a presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del Partido Popular a las elecciones del próximo 4 de mayo, Isabel Díaz Ayuso, ya tiene hasta su propia cer- veza. Una iniciativa para apoyar su candidatura ha puesto su rostro a las botellas de esta nueva cerveza, que lleva por nombre «La caña de España». Díaz Ayuso ha sido nombrada por los hosteleros, por aclamación popular, como su nueva «patrona» por el apoyo mostrado durante la pandemia al sector. Pero no se queda en
eso solamente, también hace de musa. Ha inspirado una pizza, la Madonna Ayuso, y hasta un plato de huevos con «patatas a lo Ayuso». «Con muchos huevos, como la presi- denta», contaba a OKdiario su creador. Ahora, para acompañar esas patatas con huevos y la pizza, un grupo de hosteleros junto a la empresa Damas Cer- veza Artesanal han lanza- do «La caña de España». Una cerveza que lleva el rostro de Ayuso en su bo- tella, sobre una bandera de España. La presenta- ción de la cerveza se ha realizado en el restaurante Carbón Negro, el mismo lugar donde OKdiario juntó a la presidenta Díaz Ayuso y al alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, pa- ra el acto en apoyo al sec- tor de la hostelería. «¡La presidenta es la caña!» Los productores de esta cerveza aseguran que «en el confinamiento, la hostelería estuvo allí: pusimos nuestras cocinas al servicio de cientos de causas solidarias. Después, abrimos nuestros bares y restaurantes (los que pudieron), hicimos un gran inversión para convertirles en lugares seguros en los que pudierais disfrutar juntos a vuestros familiares y amigos». En su comunicado de lanzamiento, advierten que «hoy por hoy, seguimos luchando: intentamos mantener nuestros negocios a flote y a miles de familias que dependen de ellos. Un camino que no está siendo fácil y en el que han sido pocos los que han querido luchar a nuestro lado». «Por eso, ha llegado el momento. Lanzamos “La Caña de España”, una cerveza madri- leña, de elaboración artesanal, surgi- da de la unión de este grupo de hos- teleros, “Hosteleros con Ayuso”, con la colaboración de Cerveza Damas. Con “la caña de España” defendemos nuestros bares y nuestros restauran- tes. Defendemos nuestra manera de vivir. ¡Y defendemos a una presiden- ta que es la caña!», concluyen. La cerveza se puede adquirir de momento en algunos locales, aunque la firma productora ha habilitado una dirección de correo electrónico (pedidos@cervezadamas.com) para aquellos hosteleros que quieran unirse a la iniciativa. Ayuso y la hostelería
La aclamada gestión de la presidenta madrileña Díaz Ayuso, permitiendo que bares y restaurantes se hayan mantenido abiertos en la medida de lo posible durante la pan- demia, ha salvado del paro a un total de 10.270 trabajadores de la hostelería de la región. Así se desprende de los últimos datos del Ministerio de Trabajo que, desde febrero de 2020 a febrero de 2021, muestran una media nacional de destrucción de empleo del 23,3% en el sector de la hostelería, mientras que la media en Madrid se sitúa en el 18,1%. Es decir, que en la Comunidad de Madrid se destruyeron en esos 12 meses un total de 35.567 trabajos de hostelería, pasando de 196.713 a 161.146 trabajadores de este sec- tor, lo que equivale a un 18,1%, mientras que si Madrid hubiera destruido el mismo porcentaje de empleo que la media del resto de España, un 23,3%, se hubieran perdido 45.834. Un total 10.270 trabajadores más se hubieran ido a la cola del paro. (El Correo de España) E n respuesta al retrato, rigurosamente histórico, que el portavoz de VOX hizo de Francisco Largo Caballero, su nietecita Sonia Largo ha escrito una almibarada epístola que, de haber sido enviada a la factoría Walt Disney, hubiera servido como catón para dibujar a Bambi. Supongo que los nietos de Atila tendrán la misma visión de su abuelito que la cándida Sonia tiene del suyo, al que la Historia y sus cómplices y camaradas (socialistas, comunistas y anarquistas) ya calificaron no como al célebre caballo del bárbaro Rey de los Hunos, sino como acémila de Stalin. Pues eso fue esencialmente tu abuelito, Sonia, la mula del tirano soviético y del Terror Rojo en España. Tu abuelo, Sonia, era hijo de lo que hoy se llama, eufemís- ticamente, un maltratador; o sea, un miserable cabrón que majaba a palos a su mujer y eso, según toda la bibliografía psiquiátrica, imprime carácter, de ahí que su hijo, Francisco Largo Caballero, tratara a latigazos a España, a los españo- les y a tu añoradísima República, que él detestaba por bur- guesa y tu ignorancia oceánica evoca como la Arcadia Feliz. Tu árbol geneálogico, Sonia, es como para colgarse de una de sus ramas con una soga al cuello: bisnieta de un cobarde que apaleaba a su mujer y nieta de un asesino y un ladrón. Una familia tan ejemplar como la de Pablo Iglesias. Eso fue tu abuelo, Sonia, al que tu ignorancia y tu amnesia, la mala leche de tus biberones y la cheka idealizada como balneario-reformatorio de fascistas irredentos, te han hecho evocar como el abuelito de Heidi. Francisco Largo Caballero fue un asesino y un ladrón, además de un negrero con los trabajadores españoles. Siendo ministro de Trabajo en 1931, una delegación de mineros asturianos fue a visitarle al Ministerio para que les concediese 15 días anuales
de vacaciones pagadas. Tu abuelito, Sonia, los echó a patadas de su despacho argumen- tando que «una cosa es socialismo y otra cachondeo». Tuvieron que venir Franco y los falangistas para darles a los trabajadores españoles un mes de vacaciones pagadas, dos pagas extraordinarias, Seguridad Social y Mutualidades Laborales, entre otras muchas cosas. ¡Qué malos eran los fascistas que vencieron a tu abuelito, Sonia! En 1933 tu abuelito, Sonia, ya se había convertido en un cipayo de Stalin. Ya era un adicto a la sangre y a la tortura que abominaba de la vía parlamentaria, ensalzaba la violencia criminal revolucionaria y predicaba la guerra civil para imponer, al margen de la legalidad republicana, el modelo bolchevique de 1917. Así lo escribe él mismo en El Socialista (9-XI-1933): «Tenemos que luchar hasta que ondee, no la bandera tricolor de una República burguesa sino la roja de la revolución socialista». Que «socialismo y demo- cracia son términos antagónicos» no lo dijo Franco, lo berreó hasta la culminación de esa evidencia criminal tu abuelito, Sonia, el mismo que, caldeándose el pucherazo elec- toral de febrero de 1936, afirmó sin pudor y sin conciencia (no la tuvo jamás) que «para impedir el triunfo de las derechas iremos a la guerra civil». Dicho y hecho. Las amenazas de tu abuelito, Sonia, no eran fanfarronadas, eran sentencias de muerte. Fouché y Talleyrand eran el crimen y la mentira. Tu abuelito, Sonia, era, él solito, el crimen, el expolio y la traición. El mayor robo de la Historia de España lo perpetra Fran- cisco Largo Caballero en plena Guerra Civil expoliando, en octubre del 36, las reservas de oro del Banco de España para me- terselas en el bolsillo al Zar soviético que dirigía desde el Kremlin la matan- za de españoles mientras su verdu- go, tu abuelito, Sonia, dejaba a Espa- ña sin sangre en las venas y sin oro en sus arterias financieras. Ese era tu abuelito, Sonia, un ladrón y un asesino, además de un cobarde y un traidor que, cuando las Legiones de Franco entonaban ya el Peán de la Victoria, huyó como una rata abando- nando en la traición y el desamparo a sus compañeros, camaradas y cóm- plices, como Julián Besteiro que decía que tu abuelito, Sonia, era el responsable de la bolchevización del PSOE, el instigador de la Revolución de Asturias y de la declaración de independencia de Cataluña en 1934 y el principal muñidor de la Guerra Civil. Al igual que Atila no entró en Roma para destruirla, tu abuelito, Sonia, sólo hizo una cosa decente en su indecente vida: servir en el Consejo de Estado del Directorio Militar del General Primo de Rivera en 1924. Pero eso, bonita, tampoco te lo habrán contado, ¿ver- dad? Hala, guapa, sigue haciendo de Heidi buscando a su abuelito, pero no entre los bu- cólicos paisajes de los Alpes, encontrarás las huellas de sus zarpas y la guadaña de su aliento en los cementerios y en las chekas de toda España. A una de ellas se llevaron a mi abuelo, porque no encontraron a mi padre, unos hijoputas que venían a buscarle para invitarle a un paseo de parte de tu abuelito, Sonia.
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