SAINT DOMINIC CHURCH Paquete Para La Misa En Vivo - EL PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO - 28 DE NOVIEMBRE DE 2021 - St. Dominic Catholic ...

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SAINT DOMINIC CHURCH
                  Paquete Para La Misa En Vivo
                         www.saintdominics.org

EL PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO - 28 DE NOVIEMBRE DE 2021
SAINT DOMINIC CHURCH Paquete Para La Misa En Vivo - EL PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO - 28 DE NOVIEMBRE DE 2021 - St. Dominic Catholic ...
28
PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO
                             IGLESIA DE STO. DOMINGO
                             LOS ANGELES, CALIFORNIA
                              28 DE NOVIEMBRE DE 2021

                                RITOS INTRODUCTORIOS

Sacerdote:
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre, y la comunión del Espíritu Santo estén con todos
ustedes.
Pueblo: Y con tu espíritu.

Bendición de la Corona de Adviento:

       Sacerdote:
       Oh Dios benévolo, que tus bendiciones desciendan sobre nosotros
       mientras encendemos las velas de esta corona de Adviento,
       un símbolo de tu luz en nuestra oscuridad humana.
       Que tu Hijo, Jesús, venga pronto mientras esperamos su paz,
       justicia y luz en nuestro mundo quebrantado.
       Te lo pedimos en su nombre, Jesús, Emmanuel,
       Dios con nosotros, por los siglos de los siglos.
       Pueblo: Amén

La Primera Vela de la Corona de Adviento Se Enciende:

       Lector:
       Ahora invitamos a N. a pasar al frente y encender nuestra primera vela, la vela de la
       esperanza.

       Que esta vela refleje la luz de Cristo
       que nos capacita para trabajar hacia un mundo nuevo
       donde todo el pueblo de Dios tenga las bendiciones
       del alimento, el amparo y las necesidades de la vida.

       Responsorio: Cantado por coro y congregación

Bendición y aspersión de la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe:

       Sacerdote:
       Mientras nos preparamos para la venida de Cristo Jesús,
       suplicamos la ayuda de Nuestra Señora de Guadalupe
       a quien veneramos como nuestra inspiración e intercesor.
       Su aparición en el Tepeyac en México hace 500 años
       validó la dignidad de todas las personas, especialmente los oprimidos.
Durante esta temporada de Adviento,
       anhelamos un mundo que revele la luz de su abrazo compasivo.

Rito Penitencial

       Cantor: Tú que has sido enviado a sanar los corazones: Señor ten piedad,
       Pueblo: Señor, ten piedad.
       Cantor: Tú que has venido a llamar a los pecadores; Cristo ten piedad
       Pueblo: Cristo ten piedad.
       Cantor: Tú que estás sentado a la derecha del Padre para interceder por nosotros: Señor
               ten piedad,
       Pueblo: Señor, ten piedad.

       Sacerdote: Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados
       y nos lleve a la vida nueva.
       Pueblo: Amén.

                                       Oración Colecta

Sacerdote:
Concede a tus fieles, Dios todopoderoso, el deseo de salir al encuentro de Cristo, que
viene a nosotros, para que, mediante la práctica de las buenas obras, colocados un día a
su derecha, merezcamos poseer el reino celestial.
Por nuestro Señor Jesucristo…Amén.

                               LITURGIA DE LA PALABRA

                                       Primera lectura:
                                         Jer 33, 14-16

“Se acercan los días, dice el Señor, en que cumpliré la promesa que hice a la casa de Israel y
a la casa de Judá.
En aquellos días y en aquella hora, yo haré nacer del tronco de David un vástago santo, que
ejercerá la justicia y el derecho en la tierra. Entonces Judá estará a salvo, Jerusalén estará
segura y la llamarán ‘el Señor es nuestra justicia’ ”.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

Salmo Responsorial – consulte las páginas de música anteriores en su paquete

Segunda lectura – 1 Tesalonicenses 3, 12–4, 2
Hermanos: Que el Señor los llene y los haga rebosar de un amor mutuo y hacia todos los
demás, como el que yo les tengo a ustedes, para que él conserve sus corazones
irreprochables en la santidad ante Dios, nuestro Padre, hasta el día en que venga nuestro
Señor Jesús, en compañía de todos sus santos.
Por lo demás, hermanos, les rogamos y los exhortamos en el nombre del Señor Jesús a que
vivan como conviene, para agradar a Dios, según aprendieron de nosotros, a fin de que sigan
ustedes progresando. Ya conocen, en efecto, las instrucciones que les hemos dado de parte
del Señor Jesús.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

El Aleluya – consulte las páginas de música anteriores en su paquete

Evangelio – Lucas 21, 25-28. 34-36
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Habrá señales prodigiosas en el sol, en la luna
y en las estrellas. En la tierra, las naciones se llenarán de angustia y de miedo por el
estruendo de las olas del mar; la gente se morirá de terror y de angustiosa espera por las
cosas que vendrán sobre el mundo, pues hasta las estrellas se bambolearán. Entonces verán
venir al Hijo del hombre en una nube, con gran poder y majestad.
Cuando estas cosas comiencen a suceder, pongan atención y levanten la cabeza, porque se
acerca la hora de su liberación. Estén alerta, para que los vicios, con el libertinaje, la
embriaguez y las preocupaciones de esta vida no entorpezcan su mente y aquel día los
sorprenda desprevenidos; porque caerá de repente como una trampa sobre todos los
habitantes de la tierra.
Velen, pues, y hagan oración continuamente, para que puedan escapar de todo lo que ha de
suceder y comparecer seguros ante el Hijo del hombre.

Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

                                             Homilía

                                          Credo Niceno

                          Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso,
                  Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible e invisible.

                    Creo en un Solo Señor Jesucristo, Hijo único de Dios,
                          nacido del Padre antes de todos los siglos:
                 Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero,
                  engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre,
                                  por quien todo fue hecho.

             Que por nosotros los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo,
              (En las palabras que siguen, hasta se hizo hombre, todos se inclinan)
         y por obra del Espíritu Santo se encarnó de maría la Virgen, y se hizo hombre;
y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato, padeció y fue sepultado, y
resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre;
      y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.

     Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo que con el
          Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.

                     Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.
                  Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.
                  Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.
                                                Amén.

                                         Oración de los Fieles

Sacerdote:
Mientras anhelamos que Jesús venga a nosotros y a nuestro mundo nuevamente este Adviento, le
ofrecemos con confianza y esperanza nuestras oraciones por nosotros mismos y por los demás.

Lector: a cada petición responderemos… Señor, escucha nuestra oración.
1.     Que, por la intercesión de Nuestra Señora de Guadalupe, tengamos la fe y la
       determinación de buscar a Jesús en medio de la oscuridad de nuestros tiempos difíciles
       para que podamos llevar esperanza a los demás...
       Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

2.        Para que la Iglesia guíe a los católicos y a todas las personas a poner nuestra existencia
          terrenal en la perspectiva de la vida eterna con Dios...
          Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

3.        Por los líderes de los gobiernos, para que puedan dar esperanza a su pueblo a través del
          respeto mutuo, el diálogo y el trabajo conjunto para superar los muchos desafíos que
          enfrentamos...
          Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

4.        Por aquellos que han cedido al cinismo, la negatividad o la desesperación; que encuentren
          su esperanza y su fuerza en Jesús...
          Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

5.        Para continuar avanzando contra la pandemia, especialmente en aquellas áreas que están
          experimentando un aumento en las infecciones...
          Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

6.        Por las intenciones de Francisco Sánchez a quien recordamos de manera especial en esta
          Misa...
          Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.
 7.       Por todas las peticiones en nuestro Libro de Intenciones y las que tenemos en el silencio
           de nuestros corazones (PAUSA)...
Oremos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

Sacerdote:
Ven, Señor Jesús, ayúdanos a estar atentos y alertas a tu presencia amorosa todos los días, y
llénanos de fe y esperanza de que todo trabajará en nuestro bien. Tú que vives y reinas por los
siglos de los siglos. Amén.

Nuevamente les recordamos que sigan donando a la parroquia. Si gustan, en este momento del
Ofertorio, pueden preparar un cheque o efectivo para su donación y luego mandarla a la
parroquia. Gracias por su continua generosidad.

                                LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

Canto de Ofertorio – consulte las páginas de música anteriores en su paquete

Sacerdote:
    Bendito seas, Señor, Dios del Universo, por este pan, fruto de la tierra y del trabajo del
    hombre, que recibimos de tu generosidad y ahora te presentamos; él será para nosotros pan
    de vida.

Pueblo: Bendito seas por siempre, Señor.

Sacerdote:
    Bendito seas, Señor, Dios del universo, por este vino fruto de la vid y del trabajo del
    hombre, que recibimos de tu generosidad y ahora te presentamos; él será para nosotros
    bebida de salvación.

Pueblo: Bendito seas por siempre, Señor.

Sacerdote:
    Oremos, hermanos, para que este sacrificio, mío y de ustedes, sea agradable a Dios, Padre
    todopoderoso.

Pueblo:
   El Señor reciba de tus manos este sacrificio, para alabanza y gloria de su nombre,
   para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.

                                  Oración sobre las Ofrendas

Sacerdote:
Recibe, Señor, estos dones que te ofrecemos, tomados de los mismos bienes que nos has dado, y
haz que lo que nos das en el tiempo presente para aumento de nuestra devoción, se convierta para
nosotros en prenda de tu redención eterna.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
…Siguen el Prefacio y la Plegaria Eucarística…

                                  RITO DE LA COMUNIÓN

                                          Padre Nuestro

Fieles a la recomendación del Salvador, y siguiendo su divina enseñanza, nos atrevemos a decir:

Padre Nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no
nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.

Líbranos, Señor, de todos los males, y concédenos la paz en nuestros días, para que, ayudados
por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación,
aguardando la venida gloriosa de Jesucristo, nuestra esperanza.

¡Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor!

Señor Jesucristo, que dijiste a tus Apóstoles: “La paz les dejo, mi paz les doy”, no tomes en
cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesia y, conforme a tu palabra, concédele la paz y la
unidad. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
La paz del Señor sea siempre con ustedes. Y con tu espíritu.
Démonos fraternalmente la paz.

                                   Fracción del Pan: Se canta

                                            Comunión

Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Dichosos los invitados a la cena del
Señor.
Señor, yo no soy digno de que entres en mí casa, pero una palabra tuya bastará para
sanarme.

                                 Acto de Comunión Espiritual

                                          Creo, Jesús mío,
                            que estás real y verdaderamente en el cielo
                             y en el Santísimo Sacramento del Altar.

                                  Te amo sobre todas las cosas,
                                   y deseo vivamente recibirte
                                       dentro de mi alma.
Pero no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente,
                          ven al menos espiritualmente a mi corazón.

                                Y como si ya te hubiera recibido,
                                te abrazo y me uno del todo a ti.
                          Señor, no permitas que jamás me aparte de ti.
                                             Amén.

                                 Oración después de la Comunión

Sacerdote:
Te pedimos, Señor, que nos aprovechen los misterios en que hemos participado, mediante los
cuales, mientras caminamos en medio de las cosas pasajeras, nos inclinas ya desde ahora a
anhelar las realidades celestiales y a poner nuestro apoyo en las que han de durar para siempre.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

                                   RITO DE CONCLUSIÓN

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  1. St. Dominic's participará en la campaña de regalos navideños para jóvenes en riesgo y sus
      familias, patrocinada por el hogar juvenil Optimist. Encontrará una caja en la oficina
      parroquial para sus regalos de Navidad. Consulte el boletín para conocer todos los
      detalles.
  2. Las entradas para nuestra fabulosa cena con baile de Nochevieja están a la venta en la
      oficina parroquial. Por solo $50 podrán iniciar el Año Nuevo con otros feligreses, comer
      una comida deliciosa y bailar toda la noche.

                                Última Bendición y Despedida

Sacerdote: El Señor esté con todos ustedes.
Pueblo: Y con tu espíritu.
Sacerdote: La bendición de Dios, Padre, Hijo + y Espíritu Santo, descienda sobre todos ustedes
y permanezca para siempre.
Pueblo: Amén.
Sacerdote: Vayamos en paz, glorificando al Señor con nuestras vidas.
Pueblo: Demos gracias a Dios.

Canto de Despedida – consulte las páginas de música anteriores en su paquete

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                                    Un Mensaje de Padre Roberto

Adviento – Ven, Señor Jesús
Adviento es el comienzo del año litúrgico de la Iglesia; la palabra "Adviento" significa
"venida". Es un tiempo de celebrar la primera venida de Jesús hace 2,000 años en Belén, y es un
tiempo de espera y de preparación para la Segunda
Venida de Jesús al final del tiempo. Nos unimos al
antiguo clamor de la Iglesia del Libro del Apocalipsis
(22, 20): "Mara na tha" – "Ven, Señor Jesús".
        Mas también es una oportunidad para
prepararnos para su venida a nuestras vidas aquí y
ahora. Las lecturas en las Misas de Domingo y entre
semana durante estas primeras semanas de Adviento a
menudo contienen imágenes de la Segunda Venida de
Jesús y el fin del mundo, y se nos recuerda estar atentos,
                                                                https://pbs.twimg.com/media/En_qQ__XMAA69Z0.
conscientes y despiertos para su venida. El color púrpura
                                                                jpg
o violeta fue a menudo reservado para el uso de la realeza
en el pasado, por lo que se utiliza en los ornamentos y decoraciones de la iglesia durante el
Adviento para simbolizar la llegada por Navidad de Jesús, nuestro Rey y la venida del reino de
Dios en su plenitud al final de los tiempos. Púrpura también simboliza la oración, la penitencia y
preparación.
        Una de las muchas hermosas tradiciones de Adviento es la Corona de Adviento con sus
cuatro velas. La Corona de Adviento tiene su origen en una tradición pagana europea que
consistía en prender velas durante el invierno para pedirle al dios sol que regresara con su luz y
calor. Los primeros misioneros aprovecharon esta tradición para evangelizar a las personas y les
enseñaron que debían aprovechar esta Corona de Adviento como medio para esperar a Cristo,
celebrar su natividad y rogarle que infunda su luz en sus almas.
        La corona está hecha de árboles de hoja perenne, lo que significa la vida eterna. Se forma
un círculo – que no tiene principio ni fin – que simboliza la eternidad de Dios. Las cuatro velas
representan las cuatro semanas de Adviento en las que esperamos el regreso del Mesías. Al
encender las velas cada semana se nos recuerda que Jesús es la luz del mundo; él es nuestra luz
en medio de la oscuridad durante este tiempo de espera. Y, encendiendo una vela más cada
semana simboliza nuestra creciente esperanza y alegría que Jesús viene a nosotros. La vela de
color rosa se enciende el tercer domingo de Adviento – llamado Domingo Gaudete (del latín,
"Alégrate") – precisamente para mostrar nuestra gozosa anticipación del inminente nacimiento
de Jesús en Navidad y su renacimiento en nuestras vidas ahora.
        Este Adviento en Santo Domingo nuestro tema es “Encontrar a Jesús en la Oscuridad”.
Ciertamente, estos han sido tiempos oscuros para todos nosotros mientras continuamos luchando
para superar la pandemia, las divisiones en nuestro país, nuestra Iglesia Católica y en todo el
mundo, los efectos del cambio climático, el azote del racismo y la injusticia, etc. Sin embargo,
Jesús seguramente está allí para ser encontrado, incluso en medio de nuestra oscuridad, por lo
que debemos continuar buscándolo en cada persona y situación que encontremos.
        Las cuatro semanas de Adviento tradicionalmente han sido: esperanza – amor – gozo –
paz. Entonces, nuestro desafío cada semana de Adviento será:
    • Semana 1: Encontrar a Jesús, encontrar esperanza, llevar la esperanza a los demás;
    • Semana 2: Encontrar a Jesús, encontrar el amor, llevar el amor a los demás;
    • Semana 3: Encontrar a Jesús, encontrar gozo, llevar la alegría a los demás;
    • Semana 4: Encontrar a Jesús, encontrar la paz, llevar la paz a los demás;
Que este tiempo de Adviento nos encuentre buscando juntos al Señor y encontrando en él nuestra
esperanza, amor, alegría y paz.
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