VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA - ANALOGÍAS, ESCENAS PRIMARIAS Y UNA POÉTICA PARA EL MITO EN LA PRIMERA VERSIÓN DE EL ETERNAUTA * - Revistas ...
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ASTRÁGALO. Cultura de la Arquitectura y de la Ciudad, 28 (2021). ISSNe: 2469-0503
Attribution-NonCommercial-ShareAlike. Article
https://dx.doi.org/10.12795/astragalo.2021.i28.07
Received: 06/15/2021 Approved: 08/15/2021
VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA
ANALOGÍAS, ESCENAS PRIMARIAS Y UNA POÉTICA PARA EL MITO
EN LA PRIMERA VERSIÓN DE EL ETERNAUTA *
Roldán, Julián Matías
Universidad Abierta Interamericana, Facultad de Arquitectura, Centro de Altos Estudios en
Arquitectura y urbanismo, Buenos Aires, Argentina, JulianMatias.Roldan@alumnos.uai.edu.ar
julianmatiasroldan@gmail.com
RESUMEN ABSTRACT
El presente artículo tiene como objetivo ana- The present article aims to critically analyze the
lizar críticamente la historieta El Eternauta comic strip El Eternauta by referring to some so-
haciendo referencia a algunos eventos sociopo- ciopolitical, economic and urban events from
líticos, económicos y urbanos del momento en the time it was originally published. As Laura
que se publicó originalmente. Tal como marca Vázquez (2010) notes, some of these events had
Laura Vázquez (2010) algunos de estos hechos influence on editorial policies -which sought to
influyeron tanto en las políticas editoriales (que make their publications profitable in a context
buscaban hacer rentables sus publicaciones en of economic adversity and which had even had
un contexto de adversidad económica y que in- an impact on Oesterheld himself, who had had
cluso había repercutido en el mismo Oesterheld to close his Frontera publishing project- in the
que había tenido que cerrar su proyecto editorial publication formats, conditions and means of
Frontera), como en los formatos de publicación, circulation, -many were changed to be publis-
condiciones y medios de circulación (muchas se hed every fortnight or monthly- “as well as in
transformaron en quincenales o mensuales), the themes of these comics and in the ways of
“como también en los temas de estas historietas approaching them in response to a certain si-
y en los modos de abordarlos como respuesta a tuation” (Vázquez, 2010: 63). These socio-eco-
determinada coyuntura” (Vázquez, 2010: 63). nomic conditions marked certain policies and
* Las imágenes aparecidas en este artículo se pueden reproducir por gentileza de las familias Oesterheld y Solano López.
|| 149 ||VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA Esas condiciones socioeconómicas marcaron actions in relation to the mode of production determinadas políticas y acciones en relación of anything urban, and this new configuration al modo de producción de lo urbano y esa nueva of the metropolitan structured new social dy- configuración de lo metropolitano estructuró namics and functioned as a stage for new urban dinámicas sociales y funcionó como escenario actors as a result of the possibilities of ascen- para nuevos actores urbanos producto de las ding in the social hierarchy. The emergence of posibilidades de ascenso social. La emergencia the popular classes in the city can be read cri- de las clases populares en la ciudad puede leer- tically in various texts written during this pe- se críticamente en diversos textos del momento riod and El Eternauta is not exempt. Sasturain histórico y El Eternauta no queda exento. Sas- (1995) marks the importance of the change of turain (1995) marca la importancia del cambio address for the development of the adventure del domicilio para el desarrollo de la aventura en in Oesterheld’s work, a transformation that la obra de Oesterheld. Una transformación que achieves, complemented with the graphic poe- logra, complementada con la poética gráfica de tics of Solano López, to configure a primary sce- Solano López, configurar una escena primaria ne (Berman, 1991) that acquires the capacity (Berman, 1991) que adquiere la capacidad de to resonate with the reader in a deeply original resonar en el lector de un modo profundamen- way that makes El Eternauta a classic of the co- te original que hace que El Eternauta se vuelva mic with multiple interpretations. Here, we will un clásico de la historieta, maleable a diversas analyze some of the various possible analogies interpretaciones. Analizaremos aquí algunas with which it can be interpreted based on the de esas analogías posibles. authors before named. Palabras clave: Eternauta, historieta ar- Key words: Eternauta, Argentinian comics, gentina, escenas primarias, Oesterheld, primary scenes, Oesterheld, Solano López. Solano López. RESUMO O presente artigo tem como objetivo analisar - muitos se transformaram em quinzenais ou criticamente da história em quadrinhos El Eter- mensais - “bem como nos temas desses qua- nauta referindo-se a alguns eventos sócio-políti- drinhos e nas formas de abordá-los em resposta cos, econômicos e urbanos, da época em que foi a uma determinada situação” (Vázquez, 2010: originalmente publicado. Como assinala Laura 63). Essas condições socioeconômicas marca- Vázquez (2010), alguns desses eventos influen- ram algumas políticas e ações em relação ao ciaram nas políticas editoriais - que buscaram modo de produção do urbano, e essa nova con- rentabilizar suas publicações em um contexto figuração metropolitana, estruturou dinâmicas de adversidade econômica e que impactaram até sociais, funcionando como palco para novos ato- o próprio Oesterheld, o que levou a encerrar seu res urbanos em decorrência das possibilidades Projeto editorial Frontera- como nos formatos de ascensão social. O surgimento das classes de publicação, condições e meios de circulação, populares na cidade pode ser lido de forma crí- 150 || ASTRAGALO Nº 28 | Septiembre 2021 | Articles | ISSN 2469-0503
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tica em vários textos do momento histórico e ginal, que faz de El Eternauta um clássico dos
El Eternauta não está isenta. Sasturain (1995) quadrinhos com múltiplas interpretações. Ana-
marca a importância da mudança de domicílio lisaremos aqui algumas das várias analogias
para o desenvolvimento da aventura na obra de possíveis com as quais eles podem interpretar e
Oesterheld, uma transformação que consegue, com base nos autores antes citados.
complementada com a poética gráfica de Solano
López, configurar uma cena primária (Berman, Palavras-chave: Eternauta, quadrinhos
1991), que adquire a capacidade para ressoar argentinos, cenas primárias, Oesterheld,
com o leitor de uma forma profundamente ori- Solano López.
ANALOGÍAS
Existen varias versiones de El Eternauta. Este mán Oesterheld y dibujada por Francisco Solano
trabajo se concentra en el análisis de la original, López. Una serie compilada por Ediciones Record
publicada en la revista Hora Cero Semanal entre en 1975 y que ha sido tomada de base para las
los años 1957 y 1959, guionada por Héctor Ger- sucesivas reimpresiones. Esta compilación fue
https://dx.doi.org/10.12795/astragalo.2021.i28.07 || 151VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA realizada casi en paralelo a la publicación de El Este abordaje intenta hacer foco en la Eternauta 2 en la revista Skorpio de la misma construcción visual del espacio urbano y arqui- editorial argentina. En el año 1969 se publicó tectónico que realiza Francisco Solano López, una errática y brillante reversión de la primera aunque sin desatender una visión con profun- parte en la revista Gente (editorial donde Oes- didad de campo que permite la conjugación di- terheld trabajaba) dibujada por Alberto Breccia námica con las disciplinas antes nombradas. Es con colaboración de su hijo Enrique. La versión importante destacar que la obra gráfica de los di- original funciona como disparador de una gran bujantes es indisociable de la obra escrita. Ambas cantidad de interpretaciones posibles por lo que conforman un todo: una obra artística indivisi- aún merece seguir siendo trabajada por la lite- ble. Texto y dibujo dan forma a una determinada ratura académica. En este caso se analizan al- configuración estética y también socio espacial. gunas de las analogías posibles: como metáfora Es común tratar al dibujo como mera ilustración de la opresión (o de muchas opresiones) y como de un guion. Una historieta es una obra que ex- una distopía para el Covid-19. Se puede encon- presa complementariedad entre texto y dibujo. trar una amplia gama de trabajos académicos Ambos se imbrican hasta que el código de la his- en relación a esta historieta y a Oesterheld en torieta que se está leyendo funciona. Un código particular. Es una obra que ha sido estudiada donde escritor y dibujante deben ser considera- desde la sociología, los estudios culturales y las dos autores. El guion del Eternauta de 1957 no es ciencias de la comunicación, entre otros cam- el mismo que el de 1969 por diversas razones de pos. Juan Sasturain en su artículo Oesterheld y formato y de medio: es otro momento histórico- el héroe nuevo aborda la obra del guionista con político, otro momento personal de Oesterheld, un sentido afecto y elabora un perfecto concep- pero fundamentalmente es un guion diferente to para definir la transformación que suscita porque es un dibujante diferente. En la versión en la historieta la irrupción de este autor: el original se da una confluencia de varios aspectos, cambio de domicilio para la aventura, uno de los como veremos más adelante: existía una colabo- ejes fundamentales del marco teórico de este ración previa entre dibujante y escritor (en la de trabajo en construcción. Laura Vázquez, en 1969 sucede lo mismo con Breccia), se conocían el capítulo La otra invasión: industria y política laboralmente y, si bien se pueden distinguir te- de su tesis de doctorado El oficio de las viñetas, mas e intereses presentes y dispersos en toda la expone las diversas tramas (socioeconómicas, obra previa de Oesterheld, también emerge una políticas, culturales) que marcan el modo de solicitud particular del mismo Solano López ha- producción de El Eternauta. Por otra parte, cia Oesterheld: le pide que el guion tenga un tono Laura Fernández, en su libro Historieta y resis- que le permitiera desarrollar cierto tratamiento tencia: arte y política en Oesterheld (1968-1978), gráfico mediante el uso de un pincel que le ha- aborda la versión de Oesterheld y Breccia en la bilitara trabajar el preciosismo en los detalles y revista Gente (entre otras historietas) y la defi- extensos planos de sombra que terminan dando ne como parte de un proceso de radicalización un tono realista (que contribuye al verosímil de política que se puede ver en toda la obra del la historia) y expresionista al mismo tiempo, que guionista durante esta etapa. son los que dan el clima al relato. 152 || ASTRAGALO Nº 28 | Septiembre 2021 | Articles | ISSN 2469-0503
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1.1 EL ETERNAUTA COMO METÁFORA son sorprendidos por una extraña nevada fos-
POLÍTICA DE LA OPRESIÓN forescente que mata a quien toca. Un hecho que
descubren fortuitamente (tenían las ventanas
El Eternauta es considerada, incluso por el mis- cerradas porque era invierno y por eso no en-
mo Oesterheld (Trillo, 1980), como la gran tran copos) al intentar entender el por qué de
historieta de ciencia ficción argentina: una re- tanto silencio en la calle. Lo confirman cuan-
versión de Robinson Crusoe desplazada, con do Polsky, uno de los amigos, sale a la calle con
un náufrago colectivo y la ciudad en vez de la el objetivo de rescatar a su familia. La muerte
isla. Un guionista de historietas (un alter ego los rodea y se ven obligados a salir para conse-
de Oesterheld con otro rostro) en una noche guir víveres y armas para defenderse. Con los
cualquiera de trabajo, recibe una aparición en recursos disponibles en la casa y el ingenio de
el estudio de su casa: el Eternauta empieza a los protagonistas arman un traje aislante que
contar su historia, una historia que sucede en el los proteja en sus salidas exploratorias. El pri-
año 1963, años después de ese primer encuen- mero que sale es Juan Salvo, después los otros.
tro. En un chalet arquetípico del conurbano Algunas exploraciones y otros trajes aislantes
bonaerense, una familia y un grupo de amigos después, finalmente son encontrados por un
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diezmado ejército nacional que los recluta para por otro el emergente en la geopolítica, después
la acción junto con otros sobrevivientes. Así de la Segunda Guerra Mundial, de las grandes
empieza el desgarramiento de Juan Salvo. Su instituciones internacionales y su impronta en
mujer e hija se quedan en la casa mientras los el despliegue territorial sobre los países tercer-
hombres emprenden un derrotero de batallas y mundistas y que pueden vislumbrarse incluso
muertes y van conociendo al enemigo: primero en las primeras acciones pro capital internacio-
Cascarudos (insectos gigantes), después Gurbos nal frondizista.
(animales gigantes con una suerte de exoesque-
letos), pasando por los hombres robot domina- Si bien el gobierno de Frondizi (1958-1962) se
dos por un teledirector manejado a distancia inicia sobre el final de la publicación de la his-
por los Manos (seres análogos a los humanos torieta, esta puede leerse a la luz de una mirada
pero con decenas de dedos que les permiten co- (por lo menos) lúcida al respecto e incluso an-
mandar a estos grupos en las batallas), hasta ticipatoria: los sucesos de la invasión se desa-
por fin comprender que en realidad el gran ene- rrollan en el año 1963. Una mirada crítica en
migo son los intangibles Ellos. El desarrollo de relación a la aparición de la visión de Argentina
la historia se encuadra en el formato folletín de como un país periférico en la división interna-
continuará típico de las revistas del momento y cional del trabajo articulada por las economías
ese héroe que nace colectivo va intercambiando hegemónicas del orden global. La política eco-
rostros y rotando protagonismos: Juan Salvo, nómica desarrollista de Frondizi se confunde
Favalli y sobre todo Franco van alternándose el con aquella en donde la ortodoxia impone la
foco de la acción. extranjerización de la economía. Y si bien la
El Eternauta puede verse como una me- ley que permitió la inversión extranjera direc-
táfora de la opresión. Y puede serlo incluso ta tenía como fin el incentivo del desarrollo de
de opresiones de varios momentos históricos una industria pesada e hidrocarburífera (que
disímiles. En principio, del presente más in- se suponía el sector interno no podía llevar
mediato. El Eternauta se escribe durante la au- adelante) no tuvo una incidencia directa inme-
todenominada revolución libertadora iniciada en diata en la capacidad de ahorro interno y fue
el año 1955, un golpe de estado perpetrado con- limando la actividad industrial que la comple-
tra el segundo gobierno democrático de Juan mentaba. La emergente pyme industrial tiene
Perón, que da comienzo a la proscripción del a Juan Salvo como referente ineludible: en su
peronismo y sus símbolos en el año 1956 y que casa-taller fabrica transformadores. Este rasgo
perdura hasta el año 1973. Esto por un lado y que delinea el perfil de Juan Salvo, no puede
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dejar de leerse desde una perspectiva crítica: soslayable dimensión política en la obra y vida
la invasión paraliza la actividad productiva de del escritor, asesinado por esa dictadura junto
la familia. Los Ellos, inasibles e informes seres a sus cuatro hijas.
extraterrestres que dirigen la invasión, pueden El Eternauta puede leerse también como
leerse como aquel poder hegemónico global que anticipación, como un escenario premonitorio
empezaba a dominar los destinos de los países donde iba a ocurrir mucho de lo que estaba por
del tercer mundo. venir en los sucesivos golpes militares y espe-
Si bien en el año 1930, con Uriburu, cialmente en los años de plomo de la última
se inicia una serie larga de interrupciones del dictadura cívico-militar en la Argentina del año
orden democrático en la Argentina, es con el 1976 y que iba a terminar por extranjerizar la
golpe comandado por Aramburu y Rojas (la economía y supeditarla a los intereses de los
antedicha revolución libertadora) que se acele- países hegemónicos:
ra el ritmo con el que se suceden. Así podemos
“Las condiciones sociales y políticas,
encontrar un arco temporal entre el golpe del
impidieron que el proyecto prosperara
55 y el golpe del 76 (con el derrocamiento de
hasta que, años más tarde, el golpe de
María Estela Martínez de Perón) en el que pue-
estado de 1976, impuso la estrategia
de vislumbrarse un factor común, una visión
neoliberal la cual culminó, ya bajo un
sobre el desarrollo de la industrialización del
Gobierno constitucional, en la década
país como responsable de los conflictos sociales
de 1990, en su aplicación más extre-
y la inestabilidad política del país. Esta visión
ma. Entonces volvió a imperar la tesis
acompaña una parte importante de la justifi-
de la insuficiencia del ahorro interno
cación de los sucesivos golpes hasta llegar en
y el predominio incondicional y ab-
1976 al autodenominado proceso de reorganiza-
soluto del capital extranjero, en sus
ción nacional, la última dictadura cívico-militar
versiones de aplicaciones financieras
de la Argentina que logra darle un golpe mortal
(vía la deuda externa) y la inversión
al camino que se había iniciado con la sustitu-
privada directa. A través de esta úl-
ción de importaciones del primer gobierno de
tima, las filiales de corporaciones
Perón, el fomento de la industria pesada del se-
transnacionales se hicieron cargo
gundo y el desarrollismo frondizista, para dar
de la energía, las comunicaciones, el
paso a un nuevo paradigma económico basado
transporte y las mayores empresas”
en la primarización de la economía, la valoriza-
(Ferrer, 2016).
ción financiera, el endeudamiento externo, la
fuga de capitales y el desmembramiento de la Algunas características incluso sorprenden
clase obrera y sus organizaciones sindicales a por lo estrechamente análogo: lo subtenientes
través de la violencia y el terrorismo de Estado. de reserva son los civiles que lideran los gru-
El camino de Oesterheld como guionista no es pos de sobrevivientes en El Eternauta (como
ajeno a este derrotero y puede encontrarse en Juan Salvo) y tienen un lugar destacado en la
varios trabajos académicos, especialmente en el acción armada (por su instrucción militar) de
de Laura Fernández (2012) quien devela la in- organizaciones como Montoneros y ERP (Ejér-
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cito Revolucionario del Pueblo).1 “No nos juz- sino el hombre con familia, con ami-
gue mal, señor Salvo. Pero en las condiciones gos. Por eso la partida de truco, por
actuales debemos ser realistas al máximo: un eso la pequeña familia que duerme
simple soldado bien adiestrado tiene hoy el va- en el chalet de Vicente López, ajena
lor de un general en tiempos normales” dice el a la invasión que se viene. Ese fue el
Mayor que organizaba la improvisada milicia planteo, lo demás… lo demás creció
que iría a la vanguardia. “Está bien, Fava… mis solo, como crece sola, creemos, la vida
hombres y yo seremos la más apropiada perrita de cada día.(…) El héroe verdadero
Laika que hubieran podido encontrar. Cuando del Eternauta es el héroe colectivo,
usted disponga iniciamos el avance, Mayor” un grupo humano. Refleja así, aunque
responde Salvo, en un lúcido paralelismo que sin intención previa, mi sentir íntimo:
cifra el relato, lo cose con la carrera espacial y el único héroe verdadero es el héroe
enfatiza la debilidad en la que se veía inmerso: en grupo, nunca un héroe individual,
deja ver la desazón al saberse presa fácil de la nunca un hombre solo” (Oesterheld,
fuerza extraterrestre. Una mirada humanista 1975: 1).
sobre la guerra que también puede leerse en
Para Laura Vázquez la vida de Juan Salvo repro-
los relatos de Ernie Pike de Oesterheld. En este
duce la de una clase media tradicional que se
mismo episodio aparece Franco, el fundidor (así
puede ver en muchas de las ficciones de Oester-
se presenta), que se había hecho el mejor traje
held y donde se vislumbra “el culto al progreso,
de todos (según Salvo) y que se transforma en
la mística de la industrialización y el naciona-
una pieza fundamental del héroe colectivo que
lismo tecnológico” (Vázquez, 2010: 135). La
plantea el guionista. Franco, el obrero, “el tor-
familia de Juan Salvo es “una familia prome-
nero, que termina siendo quizás más héroe que
dio” en donde aparecen marcados ciertos este-
ninguno de los que iniciaron la historia” (Oes-
reotipos machistas característicos de la época y
terheld, 1975: 1).
que podrían incluso referir a la misma vida de
“Siempre me fascinó la idea del Rob- Oesterheld, afincada en su casa de Beccar, cha-
inson Crusoe. Me lo regalaron siendo let tomado de referencia por Solano López para
muy chico, debo haberlo leído más de escenificar la casa donde empieza la aventura de
veinte veces. El Eternauta, inicial- El Eternauta. Una vida pequeño-burguesa con
mente fue mi versión del Robinson. una mujer ama de casa (en el reparto de tareas
La soledad del hombre, rodeado, pre- post nevada le toca hacer el inventario de víve-
so, no ya por el mar sino por la muerte. res y preparar la comida) y que lo primero que
Tampoco el hombre solo de Robinson, añora frente a esa nueva vida robinsoniana es
“salir de compras por la Avenida Santa Fe”. Una
1 Estas organizaciones militantes de diversa extracción
familia que vive en un típico chalet del suburbio
social y conformación político-partidaria tomaron la
decisión (a principio de la década del 70) de desarrollar bonaerense, en el que Juan Salvo tiene su pe-
una lucha armada para llevar adelante una revolución queña industria. Para Vázquez “sus reuniones
que permitiera imponerse al sistema capitalista y cons-
truir un nuevo modelo. De base peronista en montone-
en la buhardilla le recuerdan la camaradería
ros y de base marxista para el ERP. adolescente de sus años de libertad. Cabe pre-
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guntarse si esos sobrevivientes se sienten ame- nes del proyecto nacional. Los sobrevivientes
nazados únicamente por la nevada mortífera o provienen de distintas clases sociales, reen-
si se trata de una metáfora que descansa sobre viando así un programa policlasista presente
una inquietud ideológica. La sensación de inva- en las estrategias del frondizismo” (Vázquez,
sión que experimentó la clase media frente a la 2010: 135). En definitiva el enemigo son los
irrupción de la clase obrera ya ha sido extensa- Ellos. Es interesante el giro que Oesterheld
mente analizada por la crítica y está presente parece darle a la redefinición de la palabra
en cuentos como el de Germán Rozenmacher utilizada para denominar al invasor extrate-
Cabecita negra y el de Julio Cortázar, Casa To- rrestre en los relatos de ciencia ficción: alie-
mada” (Vázquez, 2010: 135). nígena. Alien, proviene del latín y significa
otro. Oesterheld la desplaza y la reemplaza
Sin embargo, el desarrollo del relato y por Ellos. La falta de configuración formal de
la emergencia de la clase obrera como la pro- los Ellos rememora a ciertas películas clase
tagonista de la resistencia va ganando prota- B de terror o fantásticas de Hollywood como
gonismo a medida que avanza el relato. Eso Cat People de Jacques Tourneur en donde ese
da a la lectura de la totalidad de la historieta otro (el monstruo que acecha) nunca se ve,
un vuelco que puede leerse como crítica de siempre se presiente, se mantiene distante en
esa apacible vida burguesa amenazada por su forma, como mucho se percibe una sombra
el aluvión zoológico, como una inversión de que pasa raudamente: tácticas que lo trans-
esos dos relatos. Se vislumbra incluso una forman en algo mucho más desconcertante y
cierta épica alrededor del ascenso social pro- amenazante. Estas estrategias argumentales
movido por el peronismo y todavía presente presentes en El Eternauta son parte de la li-
en el período en que se suceden los hechos. La teratura fantástica del cine estadounidense.
serie “traduce en clave histórica las aspiracio- “La adaptación de novelas clásicas de ciencia
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ficción circuló durante la época en coleccio- arreglarse solos porque del mundo
nes accesibles. De ahí que no resulte extrava- desarrollado no llegará auxilio... Este
gante que Oesterheld hubiera atesorado en su proceso, vivido naturalmente por los
biblioteca una importante cantidad de pocket personajes (y el autor con ellos), reci-
books como recursos de producción” (Váz- birá un tratamiento diferente en la
quez, 2010: 134). En las series pulp, en las versión de la misma historia realiza-
películas de ciencia ficción y fantásticas de la da en 1969, ya con dibujos de Breccia.
época ese otro alienígena no era otra cosa que Allí, la Invasión es una evidencia ini-
una metáfora de la amenaza del comunismo cial y la soledad periférica de América
presente durante la guerra fría, un contra- Latina no será casual: el Poder de la
punto que definió los destinos de la carrera Tierra pacta con los Ellos (el poder cós-
espacial, todos temas presentes en la narra- mico, el Mal) y le entrega un sector del
tiva de Oesterheld. En la reversión de 1969 planeta a cambio de su supervivencia.
publicada en la revista Gente, la desilusión Un lugar común y habitualmente re-
del proyecto desarrollista es completamente accionario de la ciencia ficción se
evidente (incluso aparece un sesgo panfleta- convierte en parábola de la Historia
rio encubierto en la ficción) hasta en relación más cruda: explotación, desigualdad,
a la transformación del grupo heroico cuando dependencia” (Sasturain, 1995: 121).
pasa de la supervivencia a la resistencia:
“En algún trabajo anterior (El Etern- 1.2 UNA DISTOPÍA PARA EL COVID
auta no tiene quién lo escriba, Medios
y Comunicación N°17, julio 1982) Un hombre joven con escafandra entra al garaje
marcaba este hecho, señalando cómo de su casa en el suburbio bonaerense. Una casa
el grupo inicial se deshace (porque es- típica de un conurbano residencial y consolida-
taba constituido en función de la su- do de la provincia de Buenos Aires: un chalet
pervivencia desde la casa-isla) y toma como tantos, de dos plantas y buhardilla, con
otra forma y composición a la hora del revestimiento de piedra o ladrillo y ventanas de
combate (protagonismo del tornero madera. Antes de pasar hacia el resto del hogar,
Franco) mientras se descubren los realiza una operación de desinfección intensa:
límites de la solidaridad: habrá que hasta que el último copo no cae de su traje y
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pasa por la rendija del portón del garaje hacia los miles de virus zoonóticos latentes que lo-
afuera, no se quita la máscara que cubre su ros- graron atravesar la barrera de las especies,
tro ni el traje de goma ceñido al cuerpo que lo como la gripe aviar o la porcina (en este caso
acompaña en sus excursiones exteriores. Tam- producto de la ingesta de carne de murciélago)
poco apoya en el piso el fusil que sabrá usar para y que producen síntomas graves y la muerte en
defenderse cuando otros como él (conscientes los humanos. Esta última teoría también aso-
de su debilidad pero con miedo) intenten ma- cia el problema a la falta de higiene y control
tarlo para sacarle el traje y los víveres, como en los mercados populares y a la venta super-
ocurrió cuando entró en el almacén y su com- puesta de animales vivos con productos ya fae-
pañero Lucas iba y venía. Podría haber sido al nados. Aunque otras teorías más serias hacen
revés, podría haber salido él y entonces sería hincapié en que el hacinamiento de animales
otro el que nos hubiera contado esta historia, en grandes granjas industriales para consumo
porque sin traje ni escafandra no se sobrevive a humano potencian los contagios intraespecie y
la nevada mortal, una nevada fosforescente con la consiguiente aceleración de las mutaciones
copos redondos de crestas difusas, fatalmente que le permitirían al virus realizar el salto inte-
hermosos y muy cercanos a los modelados del respecies. Una historia que podría ser parte del
coronavirus Covid-19 del presente. argumento de literatura y cine de ciencia ficción
Algunas de estas escenas pueden encon- si no fuera real. Una realidad que nos asedió du-
trar su análoga en el presente. La del hombre rante el último año, al punto de parecerse en
joven que se desinfecta íntegro y desinfecta muchos aspectos al argumento del Eternauta.
los objetos con los que va a ingresar a su hogar La vida cotidiana se vio transformada, la ciu-
(su hábitat cotidiano) funciona de espejo de dad cambiada, los centros urbanos se volvieron
nuestras rutinas sanitarias cuando volvemos páramos cuasi desiertos (como en la ficción de
del afuera. La ciudad hostil, la del sálvese quien Oesterheld) sin gente circulando por las calles
pueda, también. Por suerte podemos reconocer- ni en sus espacios públicos. El perfil del cen-
nos en otras, más solidarias, espejo de las que tro financiero de la ciudad de Buenos Aires se
proponía Oesterheld cuando planteaba aquella modificó para siempre, las oficinas se vieron
situación Robinson: aislamiento forzoso, nece- obligadas a reconvertirse, la mayoría envió a
sidad de autosuficiencia (Sasturain, 1996: 152) sus empleados a hacer home-office (quienes ter-
se resuelve con un héroe colectivo. Un héroe que minaron alienados y con los gastos de servicios
se va forjando en la aventura, en el desarrollo de a cuenta propia) y muchas decidieron mudarse
la acción y que incluso va alternando su rostro, a los barrios, donde se podían conseguir más
pero que es siempre colectivo. metros cuadrados por el mismo costo y evitar
El Covid-19 es un virus que tiene un ori- así el foco de contagio que ocasiona el uso del
gen todavía difuso: algunas teorías sustentan transporte público. Todo el comercio anexo a
la versión que es un virus de diseño, escapado esas oficinas del centro se vio obligado a cerrar,
del laboratorio de Wuhan o que, al menos, es en muchos casos definitivamente, dejando va-
producto de una mala manipulación de virus cantes los alquileres de esos locales y muchos
existentes. Otras, que se trata de otro más de trabajadores desempleados. Un paisaje quizás
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análogo al que Juan Salvo, Favalli y Franco zan y mientras los ataques se van amplificando
fueron encontrando a medida se acercaban a y sofisticando. Esa sociedad representada en El
la Plaza de los Dos Congresos desde Vicente Eternauta del 57-59, tan bien definida por Laura
López, aunque sin tantos cuerpos sin vida acu- Vázquez como aquella que tiene fe en el progre-
mulados dentro de los edificios producto de la so de la ciencia: “el culto al progreso, la mística
nevada mortal. de la industrialización y el nacionalismo tecno-
lógico” (Vázquez, 2010: 135). Los sobrevivien-
El Covid-19 puede leerse como el pro- tes terminan siendo aquellos que tenían cierto
ducto reverso de la sociedad de consumo, hi- know-how técnico-científico y cierta inteligen-
perpoblada, hiperdensificada, una sociedad que cia práctica: los salva la fábrica de transforma-
no respetó ni respeta su medio ambiente: este dores de Juan Salvo, la física y la electrónica de
coronavirus como un mecanismo de regulación Favalli o el conocimiento práctico de Franco.
de las especies en términos darwinianos, un Polsky en cambio era luthier y es el primero que
enemigo invisible que asedia la vida cotidiana muere. Lucas era empleado bancario y su afición
hasta transformarla para siempre. Recluidos a la electrónica y su obsesión por construir un
todavía en su buhardilla, a salvo de la nevada contador geiger casero lo salvan por unos epi-
mortal gracias a las ventanas cerradas porque sodios pero no evitan su muerte. Si leemos El
era invierno, Juan Salvo, familia y amigos reco- Eternauta como una distopía de nuestro propio
nocen las inevitables pérdidas de lo cotidiano. presente debemos leerla a contrapelo: el asedio
Hacen un conteo del cambio: el futuro Eternau- de la nevada mortal-coronavirus, que convierte
ta piensa en que ya no hay más equipo nacional a las zonas urbanas en páramos, no es otra cosa
de fútbol, Lucas, que de golpe se quedó sin su que el producto del sistemático maltrato al me-
trabajo en el banco después de tanto sacrificio, dio ambiente por parte de esa misma fe ciega
Favalli sin su cátedra en la facultad. “Mejor en la ciencia y la técnica cuyo método para ali-
no pensar en todo lo que hemos perdido” dice mentar a la sobrepoblación mundial es a costa
Juan Salvo, un mantra que se repite en muchos de hipotecar su propia supervivencia.
diálogos de toda la historia (generalmente en
boca de Favalli) como reacción frente a todas las
pérdidas que van sufriendo a medida que avan-
160 || ASTRAGALO Nº 28 | Septiembre 2021 | Articles | ISSN 2469-0503Julián Matías Roldán
2. ESCENAS PRIMARIAS Y UNA con los que fueron creados (control de masas,
AVENTURA QUE CAMBIA DE higienismo o reproducción de capital burgués)
DOMICILIO y sirvieron para cristalizar una imagen distin-
ta para la ciudad nueva, que fue ampliamente
utilizada por la narrativa del periodo: la ciudad
“Oesterheld se encuentra con la Rea-
generó o cristalizó una escena primaria para
lidad por el camino de la Aventura
la literatura que contaba la ciudad moderna
y la Aventura se encuentra con la
(Berman, 1991). Este autor lo ejemplifica con
Argentina a través de Oesterheld. Ese
textos de Baudelaire referidos a París, como
es el fenómeno que constituye la origi-
La pérdida de la aureola y La mirada de los pobres
nalidad de El Eternauta de 1957-59 y
que no hubieran sido posibles sin el fango del
puede desglosarse en dos cuestiones:
macadam (el pavimento de las calles de los bu-
el domicilio de la aventura y la con-
levares, inventado por McAdam) y sin los cafés
figuración del enemigo” (Sasturain,
con grandes vidrieras sobre sus veredas donde
1996: 153).
los pobres (que salían de los oscuros confines
Para Sarmiento, la extensión despótica define el en donde sobrevivían) escrutaban desde afue-
carácter violento de una Argentina en construc- ra, incomodando a las incipientes clases medias
ción, una escena primaria (Berman, 1991) aso- sentadas en sus mesas. Pero, al mismo tiempo,
ciada a la barbarie y que sirve para justificar un podían ser sujetos observados: salían a la su-
proceso de dominación sobre el territorio ¿civi- perficie. La conformación de la ciudad moderna
lizatorio? La ciudad, las ciudades, ordenarían en Buenos Aires cristalizó sus propias escenas
un territorio y así los hábitos y las lógicas de primarias para su literatura. La realidad vista
la vida en sociedad. ¿Una nueva configuración por la ficción. O cómo la literatura introduce
urbana puede ser capaz de crear nuevas escenas y trata la ciudad moderna. En Borges y los dos
primarias? ¿La ciudad puede generar renovados linajes (el texto que Piglia escribe para la serie
puntos de encuentro para la literatura? Para La Argentina en pedazos, aparecida en la revista
Marshall Berman, los bulevares instrumen- Fierro en los primeros años de la década del 80
tados por el Barón de Haussmann durante el y que antecede la reversión en historieta de La
imperio de Napoleón III sobre la ciudad de Pa- historia del guerrero y la cautiva dibujada por Al-
rís (hasta entonces con preeminencia de tejido fredo Flores) se pueden inferir las huellas que
medieval) trascendieron los fines utilitarios deja la percepción de la ciudad en la literatura
https://dx.doi.org/10.12795/astragalo.2021.i28.07 || 161VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA de Borges. En el doble linaje que Piglia define ver, hay un arco opuesto y complementario al para la literatura de Borges pueden verse los mismo tiempo, como dos caras de una misma rastros de la dialéctica civilización-barbarie moneda. La primera comienza con la extensión instaurada por Sarmiento. La biblioteca pater- despótica definitoria de la violencia del hábitat na como rastro civilizatorio frente a vida bárba- del gaucho, condensada hiperbólicamente en ra en la campaña de la familia materna. Y en la la figura del caudillo. Esta primera alteridad es búsqueda de la orilla fundante de su literatura bárbara y opuesta a la ciudad que incuba la re- puede verse, de alguna manera, una reacción a pública y puede verse en las escenas primarias la ciudad moderna: la búsqueda de cierta edad representadas por Enrique Breccia para otras dorada (Sarlo, 1988: 31). Borges habla de la ciu- reversiones en historietas de la misma serie: El dad que estaba desapareciendo. La fundación matadero, de Echeverría, y Los dueños de la tie- mítica de Buenos Aires parece un oxímoron: rra, de Viñas. Después aparece un nuevo otro, el se lleva a cabo en una manzana entera pero en inmigrante europeo, que debería haber sido el mitad del campo. La manzana, representativa ejemplo que contagiara la civilización buscada de la ciudad, con su grilla que la subdivide ex- por Sarmiento. tendida hasta el infinito, tablero sobre el cual El rechazo o alejamiento de la ciudad prima la especulación de la tierra. Esa ciudad, como tema para Quiroga, lo que lo lleva a auto- en su fase expansiva, que comienza en el medio exiliarse en la selva, es el afán por renovar su del campo. Parece un contrasentido pero es re- literatura, expresa Piglia. Y en Cuentos de amor presentativa de las ambigüedades propias de la de locura y de muerte puede verse una re-esceni- modernización. Para la Buenos Aires moderna, ficación de tópicos del cuento policial y terror la extensión despótica sarmientina, el desierto (habitualmente desarrollados en ciudades) de pampa opuesto a la civilización brindada por la autores como Poe o Stevenson y que podrían ciudad que incubaba la república, se dio vuelta. leerse como relatos críticos de la ciudad de la La anexión de terrenos hasta la Avenida Gene- revolución industrial. El otro (para el autor ral Paz que permitió la extensión de la grilla ad afincado en la selva) es el que tenemos al lado, infinitum junto con la aparición y proliferación puede ser nuestra pareja, un amigo, un par: de la alteridad del inmigrante, contaminaron la uno mismo. ciudad. La extensión sin límites que acunaba la En algunos de los primeros relatos de barbarie ahora podía asociarse a la grilla fomen- Cortázar como Las puertas del Cielo o Casa tada por el capital especulativo. Como se puede Tomada ese otro ahora es el cabecita negra, 162 || ASTRAGALO Nº 28 | Septiembre 2021 | Articles | ISSN 2469-0503
Julián Matías Roldán
el migrante que viene del interior a buscar el Puede leerse como “una versión crítica de esa
progreso en la gran ciudad. Casa Tomada puede serie de textos que, desde El matadero de Eche-
leerse como una metáfora del peronismo que verría hasta La fiesta del monstruo de Borges y
invade la ciudad; en Las puertas del Cielo los po- Bioy, representan de un modo alucinado la mi-
bres son representados como monstruos que tología de ese mundo primitivo y brutal que se
se reúnen en las fiestas populares. “Ese mundo encarna en los cabecitas, en los monstruos, en
de los otros, de los monstruos, que invade y los representantes ficcionalizados de las clases
destruye el orden, contamina toda la realidad: populares” (Piglia:1991: 92). Este renovado
la fascinación que produce ese contagio es uno otro devenido del aluvión zoológico que invadía
de los grandes temas de la ficción de Julio Cor- la ciudad poco a poco fue también ascendiendo
tázar” (Piglia, 1991: 42). Justamente en Cabe- socialmente y a la lógica de la incorporación
cita Negra de Rozenmacher ese otro es el pobre de los cuartos de servicio a ciertas tipologías de
que metió las patas en la fuente, el que se metió edificio en altura de las clases acomodadas o
entre los resquicios de la ciudad consolidada las dependencias al fondo de los negocios se le
(un poco al modo de los pobres en los cafés de fue suponiendo otra: la de ser beneficiario del
París) como fuerza de trabajo semiesclava que sistema de los loteos populares que les per-
servía a las clases medias y medias-altas (que mitía comprar un lote en cuotas en una zona
por supuesto también habían sido beneficia- medianamente alejada de la centralidad de la
rias del ascenso social) y podían darse el lujo estación del ferrocarril e ir autoconstruyén-
de tener mucama con cama adentro o depen- dose la casa poco a poco. Las clases populares
diente en el negocio. Para Piglia (1991: 91), Ca- lograron afincarse así en un conurbano en fase
becita Negra “puede considerarse una versión expansiva aunque con centralidades bien defi-
irónica de ‘Casa Tomada’ de Julio Cortázar”. nidas (e incluso consolidadas) alrededor de las
https://dx.doi.org/10.12795/astragalo.2021.i28.07 || 163VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA
estaciones del ferrocarril. Una centralidad que del conurbano originó la urbanización a su al-
justamente ocupaban la familia Oesterheld y rededor y la dinámica de los loteos populares
la familia Salvo con sus chalets a metros de la fue llenando las nuevas parcelas urbanas que
estación o de la avenida. Esas clases medias supieron ser campo pocos años atrás. Así se
pequeño burguesas (que tan bien se pueden fue construyendo otra escena primaria para la
ver representadas en El Eternauta) ocuparon literatura y, específicamente, para la historieta
al mismo tiempo parcelas del borde consoli- de la época. Una época en la que Oesterheld
dado de la Región Metropolitana de Buenos emerge como el gran artífice que propone una
Aires mediante chalets exentos de dos o tres gran renovación: un nuevo domicilio para la
plantas, con una considerable extensión de aventura (Sasturain, 1991). Un nuevo domi-
verde sobre su propia parcela y ubicados en las cilio construido a partir de la representación
cercanías de las centralidad dadas por las es- (realista, sintética y expresionista al mismo
taciones del ferrocarril o de las avenidas (como tiempo) de esas escenas primarias que Solano
Maipú o su continuación norte, Santa Fe). López supo documentar y sobre todo observar
En El Eternauta se escenifican dos frag- para dibujar. Una serie de estas escenas prima-
mentos de una disímil continuidad metropo- rias funciona para el desarrollo de la acción de
litana, dos modos de ser ciudad, separados por las historietas, escenarios que expresan con
la Avenida General Paz, el bulevar de circunva- claridad dinámicas socioeconómicas, trans-
lación que rodea la ciudad de Buenos Aires has- formaciones socio-urbanas, interpretaciones
ta el Riachuelo. La primera, signada por la isla de la historieta como metáforas políticas, un
donde sobrevivir: el chalet cercano a la aveni- leitmotiv predominante a la ahora de leer El
da o a la estación; por el otro la aventura, que Eternauta. Para Laura Vázquez:
deviene resistencia, y que se inicia con el com-
“lo sugerente del Eternauta de 1957
bate de la General Paz, pasando por el de River,
es que la historia obtiene su probabi-
o el de Avenida Las Heras hasta llegar a la pla-
lidad no solamente del ‘efecto de rea-
za de los Dos Congresos en el centro de la vida
lidad’ del contexto socio-político, sino
pública y política del país. Un área Metropoli-
del consenso creciente respecto de los
tana donde se distinguen en realidad dos fases
temas ideológicos que propone. Para
distintas de estructuración urbana, que se ase-
la narración centró su argumento en
mejan y que se diferencian al mismo tiempo.
la experiencia pequeño burguesa de
Dos espacios físicos marcados por lógicas de
un hombre común y padre de familia,
producción del territorio definidas por una es-
recluido en su hogar por una invasión
tructuración común: la manzana cuadrada y la
que se desata sobre Buenos Aires”.
huella del ferrocarril. El área Metropolitana de
Asimismo, “la invasión (que convier-
Buenos Aires está conformada por la Ciudad
te las zonas urbanas en páramos de-
de Buenos Aires y la Región Metropolitana de
soladores) sintetiza la idea de que el
Buenos Aires. En ambas, la estructura de las
espacio se ha desintegrado: el barrio,
vías férreas marcó su territorio y organizó su
la familia y el trabajo. Lo público y lo
crecimiento. La centralidad de las estaciones
privado atraviesan los lazos de una
164 || ASTRAGALO Nº 28 | Septiembre 2021 | Articles | ISSN 2469-0503Julián Matías Roldán
familia tipo afectada por la disolución la aparición de esa escena primaria que permite
de un orden, aparentemente más es- el desarrollo de esta aventura, otra aventura:
table, solidario y orgánico” (Vázquez,
“La Aventura, sabemos y hemos vis-
2010: 135).
to, tiene un aparente domicilio propio
Sasturain hace explícita (como se marca prece- donde habitan los héroes voladores,
dentemente) la importancia del desplazamien- los detectives privados, los matadores
to de lugar donde se desarrolla la historieta de veloces de disparo certero. Un espacio
aventuras, en este caso la de ciencia ficción: donde son verosímiles, pueden volar,
un “cambio de domicilio para la aventura”, disparar, investigar sin escándalo del
postula. Si bien Oesterheld venía situando lector/espectador. Es habitualmente
sus historietas en Argentina en varias de las un sitio donde se habla inglés y queda
series anteriores a El Eternauta , como en Rolo, lejos o por lo menos, no es aquí, el lu-
el marciano adoptivo, es probable que la locali- gar o la circunstancia de lectura y con-
zación de esta saga en el área metropolitana sumo del mensaje. Ahí está la clave: la
de Buenos Aires y la representación tan docu- aventura tiene un domicilio Natural
mentada de Solano López logren aportar una que es, en realidad, convencional, pro-
verosimilitud al relato que lo vuelve universal. ducto de la presión ideológica del im-
Es en El Eternauta donde se logra darle forma perialismo cultural. La aventura no
definitiva a ese nuevo locus, un nuevo domici- VIVE en EE.UU. sino en ese lugar re-
lio para la aventura y no es menor la técnica tórico y arbitrario que hace de EE.UU.
elegida por Solano López. Una técnica que le y su mundo (trasladado al universo
permite el preciosismo en el detalle y el gol- entero como escenario) el ámbito có-
pe de pincel expresionista al mismo tiempo. modo y aventurable por excelencia.
Un dibujo que utilizó una profusa documen- Ejemplos claros son la historieta y el
tación fotográfica pero que sin embargo logra cine en sus formas más clásicas: la
una ajustada síntesis que hace que cada per- universalización del western, género
sonaje, cada fondo, cada escenario resuene en creado a partir de la estilización y el
el lector. Y quizás en eso radique su valor de manipuleo de circunstancias históri-
verdad. En el cambio de domicilio propuesto cas particulares de EE.UU. en el siglo
por Oesterheld y en la representación que lo- XIX, vale como modelo” (Sasturain,
gra Solano con esa técnica, quizás se conjugue 1995: 121).
https://dx.doi.org/10.12795/astragalo.2021.i28.07 || 165VARIACIONES SOBRE EL ETERNAUTA
Para Sasturain, un cambio de domicilio de de cada elemento: la circunstancia argentina
la Aventura no consiste solamente, en “trasla- se convierte en materia aventurable porque
dar la acción al suelo patrio” o intercalar pala- hay otros valores en juego, el héroe es otro, el
bras o modismos autóctonos o “hacer aparecer Enemigo –ese motor inmóvil, aristotélico, no es
regularmente la sombra del obelisco contra el más un estereotipo. En esas modulaciones del
horizonte”. Oesterheld no sólo propuso el tras- Mal anda otra de las claves.” (Sasturain, 1995:
lado físico de la aventura a estas latitudes, los 123). De ese cambio de domicilio para la aven-
conceptos del héroe y de la aventura reconoci- tura, combinado con la estética de Solano Ló-
bles en las historietas de Randall (el oeste de pez, se produce una nueva escena primaria para
los EEUU) o de Ernie Pike (distintos escenarios la historieta: el AMBA, la ciudad y el conurbano,
de la segunda guerra mundial) “son los mismos una escena primaria que logra una capacidad de
que, al entrar en contacto con la circunstancia resonancia en el lector, que construye un nuevo
argentina producen (natural y lógicamente) el verosímil para la aventura, en una nueva escena
ensanchamiento de lo imaginario posible: en El primaria que había llegado para quedarse.
Eternauta coinciden al fin un espacio y un tiem-
po donde se encuentran todos (autor, lector, 3. UNA POÉTICA PARA EL MITO
personajes) unidos por la mirada y los valores
de un modelo aventurero compartido” (Sastu-
“Le pedí a Oesterheld que me diera
rain, 1995: 123). Este cambio de domicilio no es
un guion que me permitiera trabajar
impositivo, es parte del recorrido de una profu-
los personajes con cierto juego de ex-
sa obra, “no se trata del imperativo voluntarista
presión y de humanidad, a través de
de hacer una historieta nacional sino la conse-
la técnica de usar el pincel de pelo de
cuencia, el punto de llegada de un proceso inter-
marta con una punta muy finita, unos
no, estructural, que remueve el sentido mismo
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pinceles que se usaban para las histo- la acción narrada, pero que sin embargo no se
rietas que hoy en día no se usan. Por yuxtaponen, no están diciendo lo mismo, el
eso se podían trabajar detalles muy trazo cuenta otras cosas, genera un clima. Pero
pequeños, y al mismo tiempo, con un esa forma que podríamos llamar expresionis-
golpe de pincel, vos podías darle som- ta, cuando la línea deja paso al plano de negro,
bra y expresión. Eso es lo que yo quería cuando el detalle se mezcla con la sombra,
trabajar y Oesterheld me lo dio servi- cuando la nieve se funde con el disparo de las
do en bandeja” (Solano López, 2007ª: armas, con las líneas cinéticas del movimiento,
10 en Vázquez, 2010: 134). entonces esa imagen se vuelve inespecífica, los
límites se difuminan, se vuelven forma pura y
Como se acaba de analizar, el cambio de domici-
cuando eso sucede es cuando logra su mayor ca-
lio no podría generar una nueva escena prima-
pacidad de resonancia: deja abierta una infini-
ria para la aventura si no fuera por la estética de
tud de interpretaciones al lector; crea un clima,
Solano López. Es posible que una parte del vero-
pero un clima que cada lector logra completar
símil del Eternauta de los cincuenta funcionara
a su modo, haciendo resonar sus memorias, sus
en su momento con la potencia suficiente para
deseos, su propio cotidiano, donde proyectar su
convertirlo en un clásico rápidamente porque
verdad. Solano López logra así configurar una
el estilo de Solano López respondía a una esté-
poética abierta, que tiene que llenar el lector y
tica extendida entre los lectores de historieta
que le imprime a la aventura de Oesterheld la
que se veían identificados con un cotidiano que
categoría de mito.
reconocían y les resultaba familiar. Una esté-
Solano activa ese mecanismo que, arti-
tica realista, profusamente documentada con
culado con el guion de Oesterheld, lo hace fun-
fotografías, característica de las historietas
cionar a la perfección como un receptáculo de
del momento: “Seguir el estilo de Campani fue
interpretaciones tan diversas. Interpretaciones
un condicionamiento impuesto por la Editorial
capaces de resonar como metáforas de la opre-
Abril al dibujante. El caso de la serie Bull Roc-
sión de su momento histórico (la Revolución
ket es ejemplificador en este punto” (Vázquez,
Libertadora o el desarrollismo) o posteriores
2010: 133). El formato también es caracterís-
(a modo anticipatorio) como el del Proceso de
tico del momento: una fórmula del tipo conti-
Reorganización Nacional; también es capaz de
nuará, en formato apaisado, de tres cuadritos
funcionar de receptáculo distópico de nuestra
por tira aproximadamente, con tres tiras por
realidad atravesada por el Covid-19. El Etern-
página, en donde se van combinando diversi-
auta logra condensar una amplia capacidad de
dad de tipologías de encuadre pero donde pre-
resonancia para volverse un clásico que tras-
dominan los planos americanos o generales con
ciende los tiempos.
fondos dibujados y que de algún modo ilustran
https://dx.doi.org/10.12795/astragalo.2021.i28.07 || 167También puede leer
