De la dimensión social a la dimensión simbólico-identitaria de la integración regional. Aportes del Centro de Estudios de Integración Latinoamericana

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Revista MERCOSUR de políticas sociales. 5(1), 13-38, junio 2021.
                 ISSN 2523-0891 (impreso) - ISSN: 2663-2047 (online)

                                 ARTÍCULO ORIGINAL

    De la dimensión social a la dimensión simbólico-
   identitaria de la integración regional. Aportes del
  Centro de Estudios de Integración Latinoamericana
 “Manuel Ugarte” de la Universidad Nacional de Lanús,
                        Argentina
      Da dimensão identitária à dimensão simbólico-identitária da
  integração regional. Aportes do Centro de Estudios de Integración
 latinoamericana “Manuel Ugarte”, da Universidad Nacional de Lanús,
                               Argentina
                                    Mara Espasande1
                                     Ernesto Dufour2

Resumen: El presente artículo da cuenta de la perspectiva epistemológica del Centro de
Estudios de Integración Latinoamericana “Manuel Ugarte” de la Universidad Nacional
de Lanús (CEIL-UNLa). En el trabajo compartiremos las premisas epistémicas que
orientan los proyectos del CEIL-UNLa las cuales proponen el pasaje del “giro social”,
propio de la experiencia de integración regional desplegada a inicios del siglo XXI hacia
la dimensión simbólico-identitaria de la integración latinoamericana o giro territorial,
con base en las categorías de la geografía política y cultural y en la revisión histórica
del proceso de formación territorial. En ese sentido, presentaremos dos proyectos
desarrollados por el CEIL-UNLa, el Atlas Histórico de América Latina y el Caribe.
Aportes para la descolonización cultural y pedagógica, publicado por la UNLa en el año
2016 y la Plataforma de Contenidos del Centro Ugarte, puesta en línea en año 2018,
fundados en el horizonte epistémico aquí presentado.
Palabras clave: integración regional, Centro Manuel Ugarte, Latinoamérica, perspectiva
epistémica.

Resumo: O presente artigo descreve a perspectiva epistemológica do Centro de

1 Universidad Nacional de Lanús, Argentina.
2 Universidad de Buenos Aires, Argentina.
Email: revistapuntosur@gmail.com
Recibido: 24/7/2020. Aceptado: 20/06/2021.
doi: 10.28917/ism.2021-v5-1-13

          Artículo publicado en acceso abierto bajo la Licencia Creative Commons.

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Estudos de Integração Latino-Americana “Manuel Ugarte” da Universidade Nacional
de Lanús (CEIL-UNLa). No trabalho, compartilharemos as premissas epistêmicas
que norteiam os projetos CEIL-UNLa que propõem a passagem da “virada social”,
típica da experiência de integração regional implantada no início do século XXI em
direção à dimensão de identidade simbólica da integração latino-americana ou virada
territorial, com base nas categorias de geografia política e cultural e na revisão histórica
do processo de formação territorial. Nesse sentido, apresentaremos dois projetos
desenvolvidos pelo CEIL-UNLa, o Atlas Histórico da América Latina e do Caribe,
publicado pela UNLa em 2016, e a Plataforma de Conteúdo do Centro Ugarte, online
desde 2018, ambas iniciativas configuram contribuições para a descolonização cultural
e pedagógica.
Palavras-chave: integração regional, Centro Manuel Ugarte, América Latina,
perspectiva
epistêmico.

       La futura cultura de América solo podrá florecer en concordancia con los centros que guardan el aroma
                                                                                               de los orígenes.
                                                                                        Manuel Ugarte, 1943
           Nos propusimos averiguar si América Latina es un simple campo geográfico donde conviven veinte
              Naciones diferentes o si, en realidad, estamos en presencia de una Nación mutilada, con veinte
                                           provincias a la deriva, erigidas en Estados más o menos soberanos.
                                                                                       Jorge A. Ramos, 1968

1. Introdución

      El presente trabajo da cuenta                      Plataforma de contenidos de Nuestra América2.
de la perspectiva epistemológica del                           La Universidad Nacional de Lanús
Centro de Estudios de Integración                        (UNLa) tiene algunas características
Latinoamericana “Manuel Ugarte” de la                    distintivas respecto de otras casas de
Universidad Nacional de Lanús (CEIL–                     estudio dentro del sistema universitario
UNLa), situada en el conurbano sur de                    nacional. La UNLa se define como
la ciudad de Buenos Aires. Desde dicha                   universidad urbana comprometida al tomar
perspectiva se desprenden el conjunto                    como motor de la producción de
de proyectos y actividades realizadas en                 conocimientoslos problemas concretos
el CEIL, dos de los cuales se presentan                  de la comunidad. Partir de problemas
al final de este artículo, el Atlas Histórico            reales en la producción y enseñanza
de América Latina y el Caribe. Aportes para              de conocimientos (que solo en una
la descolonización cultural y pedagógica1 y la           segunda instancia devienen problemas
                                                         cognoscitivos) y no desde disciplinas

1 Disponible en: http://atlaslatinoamericano.            2 Disponible en: http://centrougarte.unla.
unla.edu.ar/                                             edu.ar/

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o categorías generales. Esto implica el            formación de grado y la investigación en
desafío de llevar a la práctica una agenda         strictu senso. Se imbrican desde el momento
compartida en la cual la currícula es la           cero de toda práctica desarrollada en la
comunidad. Comunidad entendida en un               universidad.
sentido amplio y multiescalar, que abarca                 De esta manera, la condición
en un movimiento concéntrico tanto al              periférica de nuestra universidad (situada
distrito de Lanús y el área metropolitana          en el conurbano sur de Buenos Aires,
de Buenos Aires como a la Argentina y              habitado mayormente por familias
América Latina en su conjunto.                     trabajadoras cuyos hijo/as constituyen a
      Todo lo que hacemos como                     la primera generación de universitarios)
universidad tiene como foco el                     refiere no solo a una cuestión de
territorio –entendido no como mero                 tipo sociogeográfico o locacional
receptáculo físico sino como instancia             sino –además– a un posicionamiento
vital catalizadora de los conflictos que           epistémico y ético-político de franca
constituyen lo real– antes que “papers”            ruptura con el formalismo académico y
destinados a congresos especializados.             el racionalismo abstracto occidental.
Dentro de este adn institucional, la                      Desde        este    posicionamiento
Unidad latinoamericana junto con                   institucional nos preguntamos ¿cómo
la Causa Malvinas y la defensa de la               producir conocimientos (esto es,
Justicia social y los Derechos Humanos             proponer horizontes de acción) sobre el
constituyen valores fundantes de nuestra           problema de la Unidad latinoamericana
Universidad los cuales se encuentran               y los procesos de integración en curso?
plasmados en su estatuto universitario.            El planteo requiere, como premisa de
      En la UNLa, la producción                    trabajo, asumir a América Latina como
de conocimientos no apunta a                       algo más que la sola sumatoria de una
“problematizar       textos”     sino   de         veintena de países o mera referencia
textualizar problemas con el fin de generar        geográfica sino como problema (teórico,
herramientas de intervención que                   político, ontológico) estrechamente
coadyuven a su resolución. El problema             ligado a su unidad fundante y el proceso
real es lo que motoriza las prácticas de           de fragmentación consecuente, conflicto
producción de conocimiento y no al                 histórico todavía irresuelto.
revés. Se trata de no colocar “el carro                   A comienzos de 2014, la
pordelante del caballo”. En este sentido,          Universidad Nacional de Lanús
la llamada divulgación, extensión o                decidió crear el Centro de Estudios de
transferencia (términos signados por su            Integración Latinoamericana “Manuel
inspiración tecnocrática o elitista) son           Ugarte” (CEIL), incorporando entre sus
redefinidas bajo la idea de cooperación            competencias el trabajo de reflexión y
(Jaramillo, 2008). Dichas prácticas dejan          seguimiento que el Observatorio Malvinas
de concebirse como tareas tangenciales             de esta Universidad venía realizando
o secundarias de la labor universitaria y          desde 2009, en torno a la continuidad
se ubican en un mismo nivel de jerarquía           de la ocupación colonial por parte del
epistémica e institucional respecto de la          Reino Unido de Gran Bretaña sobre los

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archipiélagos de las Islas Malvinas, las           los mercados nacionales o desde el
Georgias del Sur, las Sandwich del Sur y           diseño de instituciones regionales –
sus mares circundantes. Con este punto             procesos, concepciones que otorgan el
de partida, las metas del Centro Ugarte            predominio como sujetos de integración
no podían ser otras que el estudio y la            a diplomáticos o actoresdirectamente
puesta en cuestión del (neo) colonialismo          involucrados        (empresas,       agencias
y su vigencia en la vida cultural, social,         estatales, redes societales) sino a partir de
económica y política de los pueblos de             la experiencia vital de, al decir de Felipe
la región y del continente. El Centro              Herrera, las anchas bases popularesy sus
Ugarte tiene como objetivo promover                espacios de solidaridad orgánica (Santos,
el conocimiento de los procesos de                 1996), también conceptualizados como
integración y mestizaje a través de                territorio usado (Santos, 1994).
abordajes situados en perspectiva                         En       las   páginas      siguientes
nacional y latinoamericana.                        compartiremos, sintéticamente, las
      Para ello, se torna necesario como           premisas epistémicas que orientan los
principio de método, remover dos                   proyectos del CEIL–UNLa las cuales
obstáculos epistémicos que impiden                 proponen el pasaje del “giro social”,
pensar la cuestión de la unidad en su              propio de la experiencia de integración
complejidad y multidimensionalidad.                regional desplegada a inicios del siglo XXI
Por un lado, interpelar las categorías del         hacia la dimensión simbólico –identitaria
regionalismo fundadas en la experiencia            de la integración latinoamericana o giro
europea habitualmente asumidas como                territorial, con base en las categorías de la
paradigma a seguir por parte de los                geografía política y cultural y en la revisión
proyectos de integración latinoamericana           histórica del proceso de formación
en general y el MERCOSUR en                        territorial. Por último, presentaremos dos
particular. Por otro, superar el                   proyectos desarrollados por el CEIL–
“nacionalismo metodológico de patria               UNLa, el Atlas Histórico de América Latina
chica” que ha hegemonizado buena parte             y el Caribe. Aportes para la descolonización
de los desarrollos de las ciencias sociales        cultural y pedagógica, publicado por la
latinoamericanas.      Estos     abordajes         UNLa en el año 2016 y la Plataforma de
tendieron a naturalizar la “escala                 Contenidosdel Centro Ugarte, puesta en línea
doméstica” como unidad de análisis                 en año 2018, fundados en el horizonte
por excelencia y asumir las formaciones            epistémico aquí presentado.
nacionales como entidades en buena
medida “autoengendradas” de carácter               2. La dimensión                simbólico–
a –histórico, prepolítico y a –espacial,           identitaria de la             integración
descontextualizadas de la región de la             regional
cual surgieron y son parte constitutiva e
inmanente.                                              La dimensión simbólico–identitaria
      El planteo implica asumir a                  de la integración latinoamericana
la integración latinoamericana no                  constituye una puerta de entrada
únicamente como la ampliación de                   al análisis poco frecuentada por la

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literatura académica hegemonizada por                 distintas economías a integrar y, por otro,
los desarrollos teóricos provenientes,                la imposibilidad de alcanzar estadios de
principalmente, del campo de las                      supranacionalidad que implican la cesión
relaciones internacionales. Esta disciplina           de soberanía por parte de los estados a
toma a los procesos de integración                    instancias regionales superiores. Frente
regional como objeto primario de                      a estos constreñimientos duros, las
estudio tanto en sus enfoques realista                instituciones regionales fueron en la
como idealista, este último de fuerte                 práctica concreta, reducidas a organismos
matriz liberal y ambos inscriptos en el               intergubernamentales, sin presupuestos
paradigma del racionalismo occidental.                significativos ni poder de decisión
Tal paradigma toma la experiencia de la               y con escasa incidencia territorial,
Unión europea como modelo a seguir                    devinieron meras “sopinhas de letras”,
por parte de los proyectos de integración             al decir del geógrafo André Martin
regional a lo largo y ancho del mundo                 (1993), sin encarnadura en los millones
con un fuerte carácter prescriptivo.                  de ciudadano/as latinoamericano/
A estos enfoques se le agregan luego                  as de a pie. Por su parte, la perspectiva
los parámetros epistemológicos del                    constructivista entiende que tales
constructivismo, auto asumido como                    obstáculos pueden ser superados a partir
un enfoque superador de las tradiciones               de “procesos cognitivos” que incluyen
anteriores.                                           prácticas simbólicas de interacción
       Estos estudios predominantes                   social que permiten modelar identidades
oficiaron de marcos de referencia                     e intereses, tanto en las dirigencias
preferencial      de     las      acciones            como en el conjunto de las sociedades
gubernamentales en la instancia regional              involucradas en pos de objetivo de
configurada por los diferentes proyectos              construir una “cultura de la integración”
integradores latinoamericanos como                    que allane el camino de la misma.
ALALC, ALADI, MERCOSUR y CAN.                               En el caso de MERCOSUR, la
Desde el interior de estos enfoques, se               ampliación de la mirada comercialista e
identifican como factores centrales que               insitucionalista dominante desde 1991
motorizan la integración–siempre con la               hacia la dimensión social y cultural
experiencia de la Unión europea como                  comienza a configurarse a partir de su
telón de fondo a:                                     “giro social” en el año 2003. La afinidad
                                                      política de los gobiernos surgidos en
     – La necesidad de ampliar los mercados           los primeros años del siglo, en sintonía
     nacionales.                                      con la presión de renovadas demandas
     – Y el diseño de instituciones regionales        sociales, promovió una nueva agenda
     fuertes.                                         del MERCOSUR. A diferencia del
                                                      periodo precedente, los gobiernos
     Estas perspectivas de tipo                       plasmaron en un discurso común la
economicista e institucionalista se                   necesidad de profundizar del proceso
toparon con dos límites estructurales.                de integración incorporando las
Por un lado, las fuertes asimetrías de las            dimensiones social y productiva dentro

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de un paradigma de desarrollo inclusivo            Permanente de Revisión, la creación
de carácter multidimensional (García               del Instituto social del MERCOSUR,
Delgado, 2004). Se asumía así una nueva            el programa Somos MERCOSUR– una
concepción de integración, entendida               primera política regional de inspiración
como un“proyecto catalizador de valores,           constructivista – y la formalización de
tradiciones y una instancia de futuro              cumbres sociales.
compartido”3, conparticipación activa de                 Ahora bien, la afinidad política
la sociedad civil, a la par de una opción          no fue condición suficiente para la
estratégica para fortalecer la inserción de        concreción de las propuestas tendientes
la región en el mundo4. Sintéticamente,            a la profundización del proceso
los actores directamente involucrados              integrador. Los intentos por un “nuevo
propusieron a nivel discursivo, una                MERCOSUR” chocaron con la lógica
integración cualitativamente diferente             de la intergubernamentalidad inserta en
a la predominante en la década                     la estructura institucional heredada y el
anterior que apuntaba a revertir las               espíritu comercialista. La constelación
inconsistencias del modelo de gestión              de organismos y agencias institucionales
inicial en torno a las asimetrías                  generadas, si bien importantes desde el
estructurales, la falta de legitimidad             punto de vista de la nueva concepción,
política y la escasa participación social.         poseen      un     carácter   meramente
En el plano institucional hubo avances             consultivo y, por tanto, mantienen
en un intento a superar tales obstáculos.          intocado el déficit democrático del
Se promovieron nuevas instituciones y              proceso de integración que se plasma
diversas iniciativas con el fin de alcanzar        en la ausencia de representación del
los objetivos estratégicos planteados más          rico entramado social y cultural de
allá de la esfera económico-comercial,             nuestros países (Vázquez, 2008). En este
entre ellas, la propuesta de creación              esquema concentrado en los poderes
del Parlamento con voto directo y                  ejecutivos, las cancillerías mantuvieron
simultáneo, la implementación del                  un rol predominante en la definición de
FOCEM–Fondo para la Convergencia                   la agenda del bloque restando, incluso,
Estructural del MERCOSUR–, la                      densidad interministerial a la gestión de
reglamentación del protocolo de Olivos             los asuntos regionales (Vázquez, 2008).
para la solución de controversias y la                   Las políticas de carácter social e
puesta en funcionamiento del Tribunal              inspiración constructivista desplegadas,
                                                   como el programa Somos MERCOSUR
                                                   cuyo objetivo central buscaba la
3 Artículo 15 del documento firmado
                                                   conformación de una identidad
por los presidentes Kirchner y Lula, en            ciudadana regional o “mercosureña”
el Consenso de Buenos Aires, el 16 de              (Ferreira, 2006), podrían caracterizarse
octubre del 2003.                                  como insuficientes y poco penetrantes
4 Un hecho significativo de la nueva
sintonía regional lo marca el rechazo en           en función del objetivo propuesto al
la cumbre de Mar del Plata del 2005 a las          encontrarse constreñidas por el sesgo
presiones tendientes a imponer el ALCA             intergubernamental y comercialista de la
como eje central del encuentro.

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Espasande & Dufour. De la dimensión social a la dimensión simbólico-identitaria de la
                                  integración regional

institucionalidad creada. Dicho desafío              Por un lado, tales abordajes dejan de
difícilmente pueda generarse a partir                ladolas relaciones de poder real involucradas
de una cultura centrada únicamente                   en los procesos de integración que
en lo económico, tal como el propio                  operan por detrás y través de los diseños
nombre del espacio regional creado –                 institucionales y, por otro, tienden a
MERCOSUR– sobre determina. Pero                      reducir toda la complejidad multidimensional
tampoco puede generarse desde la sola                inherente a los procesos de integración –
sintonía política o ideológicaque deje de            propia de la heteróclita realidad territorial
lado –o le otorgue un carácter meramente             de la que son parte y pretenden incidir–
tangencial– a la dimensión subjetiva e               a unas pocas variables de análisis e
identitaria de los pueblos y sociedades              intervención. Una complejidad territorial
interpeladas por el proceso integrador.              que no debe restringirse a la crasa
La vigencia de la intergubernamentalidad             “fisicidad” de la espacialidad involucrada
y el énfasis en lo mercantil se encuentran           sino en su inmanencia con imaginarios,
estrechamente consustanciados con una                representaciones, necesidades vitales
identificación de lo nacional de carácter            y sentidos de pertenencia tanto de
restringido, entendido de un modo que                quienes la habitan y transitan como de
excluye el sentido de pertenencia a la               aquellos que la toman como objeto de
región.                                              intervención dentro del entramado de
       Este trabajo desarrolla una doble             intereses expresados en múltiples escalas.
interpelación o revisión crítica de la                     Desde esta perspectiva, los espacios
concepción teórica predominante en                   geográficos no solo son plausibles
la academia en materia de integración                de ser apropiados materialmente
latinoamericana signada por su matriz                sino también simbólica –al estimular
eurocéntrica a partir del horizonte de               ideas y valores– e identitariamente –al
sentido abierto por la tradición del                 formar parte de nuestra estructura de
pensamiento nacional-latinoamericano y               sentimientos y sentidos de pertenencia.
el vasto legado de unidad continental –              El conjunto vívido de representaciones,
muy particularmente la obra de Manuel                identificaciones y sentimientos que
Ugarte5 – y desde los dispositivos teóricos          los lugares nos inspiran y generan van
de la geografía contemporánea en su                  construyendo –también– los territorios
giro político y cultural. Específicamente,           en la medida que condicionan, promueven
desde la llamada geografía de los imaginarios        y/o obturan determinadas acciones y/u
(Lindón & Hiernax, 2012) y el concepto de            omisiones a partir y a través de ellos.
multi/transterritorialidad (Haesbaert, 2011).        Una densidad geocultural que, en tanto
       Se trata de fuentes teóricas que              símbolo, desborda todo territorio y, sin
permiten problematizar los enfoques                  embargo, no puede aprehenderse sino a
predominantes en dos aspectos centrales.             través de él (Litorales, 2002).
                                                           La dimensión simbólico-identitaria
                                                     de la integración latinoamericana si bien
5 Para conocer la obra de Manuel Ugarte              no es desconocida, en alguna medida,
ingresar a http://centrougarte.unla.edu.             aparece como un aspecto tangencial,
ar/#mugarte

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Revista MERCOSUR de políticas sociales. 5(1), 13-38, junio 2021

secundario o epifenoménico respecto de             mera plataforma de proyección de
los factores explicativos predominantes            particularismos, organizados a escala
antes mencionados.                                 nacional en sentido restringido. Esto es,
      Los aspectos culturales fueron               excluyentes de “lo americano” como
históricamente soslayados conforme a               parte constitutiva –ofundante– de la
la preeminencia de imperativos políticos           propia formación territorial.
y económicos de primer orden. Tales                      El problema remite a las
urgencias descansaban en el supuesto               representaciones y sentidos internalizados
que frente a la necesidadde ampliar el             respecto de “nuestra propia nación”
mercado y de adquirir mayor poder de               y de las otras ahora a integrar. Esto es,
negociación en la escena internacional,            “ser argentino”, “ser brasileño” ¿incluye
“lo cultural” aparecía como una cuestión           “ser latinoamericano?”. Jorge Luis
dada, conforme a la herencia colonial              Borges decía, sagaz y cínicamente, que
compartiday a una misma raíz lingüística y         había conocido a muchos peruanos,
religiosa. La cuestión no representaba un          brasileños y colombianos “pero nunca a
eje nodal a trabajar a nivel programático          un latinoamericano”. Esto es realmente
más allá de la promoción de una mayor              así en la medida que nadie, o muy pocos,
difusión de expresiones artísticas                 se reconocen como tal. Sentidos de
o culturales latinoamericanas. Por                 pertenencia internalizados que ofician
añadidura, se asumía que dadas ciertas             de marco perceptivo para las prácticas
condiciones político–institucionales y             políticas, sociales y culturales en la
materiales la identificación de los pueblos        instancia regional, tendientes tanto a
y sociedades con el proceso integrador             la ratificación de las formaciones
emergería de manera más o menos                    territoriales heredadas –esto es, el status
espontánea.                                        quo territorial, tal como lo conocemos,
      Sin embargo, la dimensión                    que asume a “América Latina” como un
simbólica-identitaria en sentido amplio            mero referente geográfico compuesto
–entendida como el conjunto de                     por la sumatoria de una treintena de
representaciones nacionales y regionales,          países, a modo de pacht-work; o bien,
imaginarios geográficos e identificaciones         hacia su reconfiguraciónen pos de una
de base territorial, “lealtades” respecto          nueva realidad territorial, directamente
del sí mismo como del “otro”                       vinculada       con     la    emergencia,
latinoamericano, ahora a integrar–; cobra          profundización –o relanzamiento– del
centralidad a partir de la plena vigencia          proyecto de unidad continental, más allá
de las llamadas por el pensamiento                 de esfera comercial o de la cooperación
nacional-latinoamericano        identidades        diplomática como comunidad de origen
de patria chica configuradas a partir del          y de destino.
advenimiento del orden oligárquico desde                 Desde esta perspectiva            de
mediados del siglo XIX, más allá de sus            nacionalidad restringida o de patria
eventuales erosiones, resignificaciones            chica, la “colisión” de los conjuntos
y/o reapropiaciones. De allí derivan               nacionales ampliados puede generar que
modos de concebir “lo regional” como               las notables asimetrías estructurales de

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Espasande & Dufour. De la dimensión social a la dimensión simbólico-identitaria de la
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sus economías, los diferentes legados                                 cuestiones a considerar, a modo de
históricos de sus sistemas políticos y la                             precauciones de método. Primero, la
multiplicidad y heterogeneidad de las                                 identidad no se construye solo a partir de
formas socio–culturales cristalizadas                                 un mayor conocimiento cultural acerca
sean asumidas como elementos de                                       del otro, como cree el constructivismo
distanciamiento       y     fragmentación                             ingenuo. En principio porque “lo
antes que campos críticos de acción                                   simbólico” es expresión eufemística de
mancomunada.Valgan como ejemplos                                      relaciones de poder (Bourdieu, 1999),“es
sintomáticos, el conflicto entre Argentina                            un poder subordinado a estructuras de
y Uruguay en torno a la instalación de                                relaciones de fuerza no ya simbólicas
la planta papelera Botnia, años atrás, el                             sino estrictamente reales”, haciendo
reclamo histórico de Bolivia por el acceso                            esconder la carga de violencia que
al litoral marítimo, la clásica rivalidad                             encierran [las palabras] objetivamente y
entre Argentina y Chile en recíproca                                  transformándolas así en poder simbólico,
acusación del supuesto “expansionismo                                 capaz de producir efectos reales sin
trasandino”, las quejas en Brasil ante                                gasto aparente de energía” (Bourdieu,
la nacionalización de la Petrobrás por                                1999, p. 73). Estamos en presencia de
parte del gobierno de Evo Morales o                                   la politización de la cultura que aparece
las, más recientes, amenazas de escalada                              no solo como mero ornamento o juego
bélica de Colombia hacia Venezuela,                                   retórico sino como expresión en sí
el rechazo de migrantes venezolanos                                   misma de relaciones de poder a través
en la frontera con Brasil, o bien las                                 del registro simbólico. Elpoder como su
protestas desatadas en la opinión pública                             dimensión constitutiva. No hay proyecto
argentina ante la propuesta de trasladar                              de poder sin lógica cultural y viceversa.
a pacientes chilenos con coronavirus                                        En segundo término, es necesario
a hospitales argentinos6, entre muchos                                remarcar la distinción crucial entre
otros. Si bien los recelos y disputas de                              cultura e identidad que muchas veces
patria chica no alcanzan una rivalidad                                aparecen como equivalentes y no
extrema, de tipo hobbesiana, parecen                                  necesariamente lo son. Grimson (2011)
tener la fuerza suficiente para erosionar y                           entiende cultura como configuraciones
despotenciar cualquier intento integrador                             culturales, por ejemplo “el Tango”, en
que vise trascender los parámetros del                                tanto que refiere a identidad como los
regionalismo abierto de matriz neoliberal                             sentidos de pertenencia colectiva. Personas de
y el vínculo político apenas diplomático                              distintos países pueden aprender a bailar
y/o intergubernamental.                                               tango, pero no por eso sentirse parte
      Llegados a este punto, existen                                  de un mismo colectivo. Los sentidos de
                                                                      pertenencia, inescindibles de la condición
                                                                      humana, permiten vislumbrar el pasaje
6 Al respecto ver https://www.ambito.
                                                                      de la concepción de cultura como objeto,
com/mundo/chile/el–polemico–                                          práctica o actividad propia del paradigma
plan–del–diputado–no–que–propone–
t r a s l a d a r – p a c i e n t e s – c o ro n a v i r u s –
argentina–n5110445

                                                                 21
Revista MERCOSUR de políticas sociales. 5(1), 13-38, junio 2021

occidental hacia la cultura hecha cuerpo7.         retórico, sin encarnadura en la experiencia
      En      definitiva,   ¿es     posible        vital de millones de latinoamericano/as
concebir algún tipo de unidad política             de a pie.
continental sin la emergencia de un demo                 A partir del planteo se desprende
latinoamericano? O lo que es lo mismo, sin         la siguiente premisa ético–política: la
un sentido de pertenencia compartido.              eventual profundización o relanzamiento
“Sentido” entendido como algo más                  de la integración latinoamericana más
que mero significado o argumentación               allá de la esfera comercial o diplomática
teórica o ideológica sino como la unión            en pos de alcanzar mayores umbrales de
fecunda entre el sentir y pensar.                  unificación – o al menos coordinación–
      El     carácter     multidimensional         política, productiva y cultural debe
de los procesos regionales excede                  incluir como fundamento cohesionante
por mucho el rol de las cancillerías,              el involucramiento activo de las mayorías
grupos económicos, redes societarias e             populares latinoamericanas. Una mirada
incluso, la eventual sintonía o antipatía          unificadora, fundada en una fecunda
ideológica y personal de los mandatarios           tradición histórica, que surge en la
y mandatarias de la región o “diplomacia           arena y el ensayo político antes que en
presidencial”, característica del político         los ámbitos académicos y sus campos
período precedente. Los indudables                 disciplinarios. En definitiva, el sujeto de
avances de los proyectos de UNASUR                 la integración no puede ser otro más
y MERCOSUR, (ahora dramáticamente                  que los pueblos a través de la única
obturados y/o desustanciados) no                   entidad dotada de legitimidad soberana,
necesariamente derivan en el plano de              los estados nacionales –no el mercado
la estructura de sentimientos o habitus            u otros dispositivos de gobernanza
de las mayorías latinoamericanas en un             regional–, ahora revitalizados por
sentido de pertenencia compartida. De              las urgencias que le impone la actual
la misma manera, no es posible alcanzar            transfiguración del orden globaliza torio.
dicha identificación regional apelando –           Las dramáticas –y lacerantes– disputas
únicamente– a un latinoamericanismo                en los centros de poder mundial crean las
abstracto de carácter testimonial, lírico o        condiciones para su re empoderamiento
                                                   a través de la reconfiguración de su
                                                   territorialidad (entendida no en términos
7 Desde el pensamiento de Rodolfo                  normativo-jurisdiccionales sino político-
Kusch en su obra “Geocultura del hombre
americano (1976)”, los sentidos de                 estratégicos y culturales) más allá de sus
pertenencia pueden asumirse dentro del             límites westfalianos.
horizonte del estar–siendo. Dice el autor:
“Una cultura americana no ha de consistir
en ver alguna vez un cuadro y decir que            3. Formación estatal, pertenencia
ese cuadro es americano. Lo americano              territorial y desmembramiento
no es una cosa. Es simplemente la                  de América Latina
consecuencia de una profunda decisión
por lo americano entendido como un
despiadado aquí y ahora y, por ende, un                 En América Latina, el pasaje
enfrentamiento absoluto consigo mismo”             del Estado colonial al Estado-Nación
(Kusch, 1976, p. 71).

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Espasande & Dufour. De la dimensión social a la dimensión simbólico-identitaria de la
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moderno requirió de la creación de                  sobre el Estado en América Latina
una entidad político-cultural-geográfica            permiten romper con la noción
al momento inexistente, la nación,                  naturalizante y su carácter supuestamente
asumida en sentido restringido o de                 universal que le asigna un comportamiento
“patria chica” que se superpuso a las               teleológico (es decir, pre–político) o
realidades territoriales preexistentes.             ineluctable fundado en la experiencia
Pero esta superposición no se desplegó              europea. La ruptura de la visión jurídico–
sobre “tabula rasa” sino, antes bien en             normativa predominante en el campo
“amalgama áspera” debido a las –en                  académico, constreñida a la formalidad
términos del geógrafo Milton Santos                 de tipo institucionalista y la reificación del
(1996)– rugosidades propias de las formas           estado que conlleva, posibilita incorporar
espaciales heredadas o materialidad                 al análisis dimensiones involucradas en
cristalizada de ordenes políticos pretéritos        su proceso de formación que fueron
con toda su densidad histórica y cultural.          soslayadas o invisibilizadas y que dan
Si bien no existía en América Latina una            cuenta de la complejidad sociopolítica
“identificación regional”, acorde a la              y territorial inherente al proceso. Desde
terminología actual, existía sí una doble           esta perspectiva, es posible resaltar que
pertenencia con base territorial. Por un            por tras –y a través– de la “forma estado”,
lado, el arraigo al lugar próximo, a la             con todo su conglomerado burocrático
ciudad, campaña o provincia y, por otro,            y jurídico–administrativo, lo que opera
un sentimiento americano más amplio                 es la cristalización de un orden político,
y abarcativo, política y culturalmente              vale decir, determinaciones de poder
ligante de realidades regionales diversas y         “triunfantes” encarnadas en sujetos
geográficamente distantes. Como destaca             históricos concretos en pugna con otros
Fermín Chávez (2012), en el periodo                 proyectos alternativos de ordenamiento
precedente existía un fuerte sentido                de las relaciones sociales, económicas y
comunidad compartida pero expresado                 culturales. “La administración burocrática
a otras escalas. La patria era la “patria           es la forma más racional de ejercer una
americana”, naturalmente imbricada a                dominación” (Weber, 2002, p. 224).
las identificaciones locales arraigadas.                  Este nuevo orden requirió como
A partir de la consolidación estatalista            condición de realización la fragmentación
hacia finales del siglo XIX de acuerdo a            del vasto territorio (latino) americano
los parámetros del estado-moderno, se               cuya unidad se forjó luego de tres siglos
abrió un camino de lucha constante por              del orden colonial. El proyecto unificador
la cuestión nacional irresuelta donde lo            de principios del siglo XIX presentado
latinoamericano (en contraposición a                por Bolívar, San Martín, Monteagudo,
lo “norte” americano) aparecía como                 Morazán –entre otros– fue derrotado por
horizonte de sentido para las diversas              el accionar diplomático y militar de las
fuerzas sociales, políticas y culturales que        potencias triunfantes (fundamentalmente
bregaron por quebrar la dependencia                 Gran Bretaña) en alianza con las
semicolonial.                                       burguesías comerciales de cada una de las
      Los estudios académicos recientes             “patrias chicas” del continente. Más allá

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de la formalidad soberana de las recientes            funcionales al orden político imperante.
unidades políticas, el nuevo orden implicó                   La “balcanización”9 –en términos
la implementación de distintas prácticas              de Ramos– del espacio hispánico marcó
políticas, financieras y diplomáticas –               una diferencia significativa respecto de
incluido el recurso militar – sumadas a               la América lusitana. Con el traslado de
formas de dominación sutiles de índole                la corte de la reina María I y el príncipe-
estrictamente cultural. De acuerdo al                 regente João de Bragança a tierras
pensamiento nacional-latinoamericano, a               americanas escoltada por la flota de
partir de la obra de autores como Jorge               guerra británica, el Brasil fue erigido
Abelardo Ramos8, Fermín Chávez y                      como su propio centro garantizando su
Arturo Jauretche, el papel de la cultura              unidad territorial frente a los intereses
en los países semicoloniales a diferencia             separatistas de las elites regionales, hecho
de las colonias donde el dispositivo de               que marca los cimientos de la singularidad
dominación por excelencia lo constituye               de la identidad nacional brasileña. Para el
el ejército de ocupación. La cultura en los           caso hispanoamericano, el pasado colonial
países semicoloniales adquiere un carácter            compartido forjó las condiciones para el
político a través de diversos aparatos de             surgimiento de un sentido de pertenencia
colonización pedagógica, tales como la                americano condensado en la expresión
escuela, la prensa, las principales obras             de Simón Bolívar “No somos indios ni
literarias y las universidades en tanto usinas        europeos sino americanos” (Bolívar,
de producción y reproducción de saberes               1814), estrechamente amalgamado
                                                      con los sentimientos de arraigo al
                                                      terruño o ámbitos locales en una
8 Dice Jorge Abelardo Ramos: “En las                  relación de continuidad o imbricación
naciones coloniales, despojadas del poder
político directo y sometidas a las fuerzas            –no de contraposición– con la “patria
de ocupación extranjera, los problemas                americana”.
de la penetración cultural pueden revestir                   El proyecto unificador anti
menos importancia para el imperialismo,
puesto que sus privilegios económicos                 absolutista implicaba el cuestionamiento
están asegurados por la persuasión de la              de la sociedad de castas al tiempo que ponía
artillería. La formación de una conciencia            en riesgo las políticas de libre comercio
nacional en ese tipo de países no encuentra
obstáculos, sino que, por el contrario, es            promovidas por los comerciantes y
estimulada por la simple presencia de la              diplomáticos británicos, las burguesías
potencia extranjera en suelo natal. Pero en           portuarias ligadas al comercio de
las semicolonias que gozan de un estatus
político independiente decorado por la                ultramar, hacendados, dueños de minas
ficción jurídica, aquella colonización se             y tierras cuyos productos eran requeridos
revela esencial, pues no dispone de otra              en el exterior. Tanto San Martín como
fuerza para asegurar la perpetuación del
dominio imperialista, y ya es sabido que
las ideas, en cierto grado de su evolución,
se truecan en fuerza material. De este                9 Dicho autor establece una analogía del
hecho nace la tremenda importancia de                 contexto latinoamericano con la situación
un estudio circunstanciado de la cultura              a inicios del siglo XX de la península
argentina o pseudo argentina, forjada                 Balcánica signada por la mutua hostilidad
por un signo de dictadura espiritual                  entre los estados y fuertes divisiones
oligárquica” (Ramos, 1954, p. 11).                    étnicas y culturales.

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Espasande & Dufour. De la dimensión social a la dimensión simbólico-identitaria de la
                                 integración regional

Bolívar interpretaron que no había                y sistemas de creencias y significados,
posibilidad de vencer militarmente al             de asimilaciones, adaptaciones, rechazos
absolutismo sino desplegando la lucha             y/o resistencias. Incluyela disposición
a escala continental. Este proyecto, que          de nutrirse de expresiones simbólicas
ligaba la suerte de la emancipación con el        provenientes de un centro como espacio
mantenimiento de la unidad continental,           referencial (Paradiso, 2007, p. 58). Las
fue políticamente derrotado. En este              relaciones centro-periferia, tanto como la
contexto, los grupos dominantes de                interdependencia económica asimétrica,
base portuaria, terrateniente y mercantil         incluyen aspectos de corte simbólico e
bregaron por usufructuar los beneficios           ideacional como elementos centrales de
que el comercio exterior dominado                 la subordinación de las nuevas naciones.
por Gran Bretaña les posibilitaba una                    En este marco, la construcción
vez abolido el antiguo monopolio                  de identidades nacionales durante el
español. Este proceso de paulatino                siglo XIX se encuentra dramáticamente
desmembramiento, que desanda tres                 signada por estas determinaciones
siglos de amalgama política, cultural y           estructurales condensadas en la
productiva del espacio americano, se dió          emergencia histórica de la estatalidad
de manera simultánea con la expansión             moderna. De acuerdo a Netl (en Oszlak,
del mercado capitalista mundial con               1982) en su estudio sobre la formación
sus centros y periferias. Los estados en          de los estados, la internalización de la
América latina son la resultante de la            identidad nacional –entendida como el
consolidación de regímenes formalmente            control ideológico de la dominación– es
soberanos de cuño oligárquicos luego              un atributo nodal de estatalidad que opera
de décadas de disputas sociohistóricas            en una misma jerarquía respecto de los
territorializadas en estrecho vínculo             restantes atributos del modelo propuesto
con los intereses los nuevos centros de           por el autor, a saber: externalización
poder mundial. Así, el surgimiento de             del poder, institucionalización de la
numerosas unidades políticas en América           autoridad y diferenciación del control.
Latina como entidades periféricas y el            Lo “identitario” no aparece entonces
establecimiento de una nueva división             como mero anexo “superestructural” o
internacional del trabajo aparecen no             epifenómeno de los restantes atributos
solo como procesos concomitantes sino             “duros” sino como el elemento central en
también co-constituidos.                          la legitimación y reproducción de la forma
      De esta manera, América Latina              estado propia del orden oligárquico.
emerge hacia fines del siglo XIX                  Orden de poder metabolizado, hecho
como espacio de condensación de                   cuerpo, a través de la identidad nacional
la periferidad (Paradiso, 2007/2008),             que de él se desprende. Un “hacer
concepto que abarca mucho más que                 cuerpo” que nunca es pasivo o inerme,
la sola subordinación económica del               sino que se encuentra en incesante
conjunto a los centros mundiales. Evoca           proceso de apropiación y reapropiación,
una compleja trama de relaciones de               siempre conflictiva, dentro del entramado
poder, construcciones culturales, ideas           de disputas de poder. Así, las identidades

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como expresión orden político que las              moderno “no arrasa” ni elimina las
originó, operan en un nivel ontológico,            formas segmentales y faccionales de
más allá –y más acá, (más acá en el                organización de los grupos humanos
sentido de la propia intimidad)– de las            en los distintos territorios considerados,
categorías políticas e institucionales en          puede cristalizarse de variadas maneras al
sentido estricto. El cuerpo, acaso, como           montarse sobre formas de poder social
el primer territorio10.                            existentes en regiones y localidades,
      Desde una perspectiva que resalta            muchas veces reinscribiéndolas. De
la importancia de la espacialidad en               esta manera, se cuestiona la perspectiva
los procesos de formación del estado               que ve la formación del estado como
latinoamericanos,       Ingrid    Bolívar          un proceso de homogeneización de
(2010)interpela los abordajes de tipo              territorios y grupos sociales de arriba
doctrinario –elaborados de acuerdo a               hacia abajo y desde un centro a las
la experiencia histórica de Francia y              periferias lo cual impide dar cuenta de
otros países centrales– que tienden a              las experiencias locales y regionales en
ignorar dos aspectos fundamentales:                juego. El Estado –ni ningún otro objeto
el fondo de poder social en el que se              o “constructo” social– no normatiza la
inscribe la formación del estado y las             espacialidad “a toque de trompeta”. El
dimensiones territoriales involucradas             planteo tiene la virtud de no apuntar a un
en la configuración estatal resituando             “relativismo o particularismo extremo”
las categorías tradicionales en el fondo           de la forma Estado porque los atributos
histórico, sociológico y espacial de las           de estatidad siguen vigentes en tanto
relaciones de poder.                               referencia a la totalidad de lo social pero
      Según      Bolívar     (2010),    la         su implantación “en acto”, es decir, en
modernización que supone la formación              terreno, con toda su densidad histórica
del estado no ha transformado                      cristalizada, adquiere singularidades que
la estratificación social basada en                no son meros excepcionalismos. Como
estamentos de clase. El estado                     destaca Pedro Borba (2014), el estudio
                                                   del estado en América Latina no solo le
                                                   agrega particularidades a la teoría general,
10 Para profundizar elvínculo entre cuerpo–        sino que es “en sí mismo” una expresión
espacio–poder ver Lindon, A. (2009). La            universal del Estado. La forma Estado
construcción socio espacial de la ciudad:         interpela a los espacios tanto como los
el sujeto cuerpo y el sujeto sentimiento.
Cuerpos, emociones y sociedad, 1,                  espacios –en cierto sentido– “negocian”,
6–20; Lindon, A. (2012), Corporalidades,           no desde una noción juridicista o
emociones y espacialidades. Hacia un               mercantilista, sino en términos de
renovado betweenness. Revista Brasileira
de Sociologia da Emoção, 1(33), 698–722            articulación, amalgama y/o decantación
y Castro–Gomez, S. (2014), “Cuerpos                socio territorial de las políticas estatales
racializados. Para una genealogía de la            desplegadas en el territorio, o bien, ante
colonialidad del poder en Colombia”. En:
H. Cardona y Z. Pedraza (Eds.), Al otro            la ausencia de ellas en el territorio.
lado del cuerpo. Estudios biopolíticos en                La perspectiva territorial permite
América Latina. Bogotá: Universidad de             problematizar aquello que fuera
los Andes, pp. 53–78.

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presentado por los enfoques doctrinarios           que la mera sumatoria de recursos
y el funcional–estructuralismo como un             institucionales, económicos, culturales
movimiento continuo, homogeneizante,               y naturales. Son, ontológicamente
de carácter normativo de arriba a abajo            hablando, porque están. Esto es, se
y desde los centros a las periferias como          encuentran internalizadas, reapropiadas
si la espacialidad involucrada fuera una           y reactualizadas en el día a día de las
masa a moldear a antojo de los escultores,         ciudadanías de a pie. Para el caso
en este caso, las elites oligárquicas. Este        argentino, “la identidad nacional” de
último supuesto deja afuera del análisis           matriz iluminista basada en la dicotomía
a los sujetos históricos concretos que             “civilización y barbarie”11, equivalente
no pueden pensarse en abstracto, es                al Ordem e Progresso brasileño, constituyó
decir, escindidos del espacio habitado. El         la base de la autodenigración nacional.
concepto de lugar–palabra coloquial que            Dicha matriz fue ampliamente difundida
es tomada por el campo disciplinario de            por el sistema educativo que comenzó
la geografía como uno de sus conceptos             a institucionalizarse desde mediados del
centrales –incluye tanto la posición               siglo XIX, construyendo un universo
locacional de un espacio dado, sus                 de valores y creencias fundado en el
geoformas particulares y características           racionalismo europeo que incluía el
ambientales– que promueven o                       desprecio por lo propio, lo mestizo,
condicionan determinadas prácticas y               lo indígena, de la cultura autóctona y
usos sociales –tanto como una estructura           nativista. Se extendió a través de diversos
de sentimientos (Agnew,1987) ligada a los          mecanismos socio-institucionales –
sentidos de pertenencia asociados. El              principalmente la escuela– un relato
movimiento entonces es bidireccional y             histórico que invisibilizó el pasado
signado por la heterogeneidad propia del           (vívidamente presente) indígena y
real –geográfico antes que una dinámica            mestizo–criollo. Dicho relato escenificó
unívoca y homogénea. El planteo aquí               una Argentina “blanca” y “europeizada”
presentado incorpora junto con la                  como una entidad geográfica esencialista,
complejidad sociológica de las relaciones          pre política y, en buena medida,
de poder involucradas en la formación              “autoengedrada”.        Una       “nación”
de unidades políticas la dimensión                 escindida ontológicamente de la región
territorial, pero desde una concepción
que incluye la dimensión antropológica
–y hasta fenomenológica– del espacio               11 La expresión se corresponde al
                                                   subtítulo del libro Facundo o civilización
en tanto involucra las subjetividades,             y barbarie en las pampas argentinas
imaginarios y sentidos de pertenencia.             escrito, en 1845, por Domingo Faustino
      Desde la mirada aquí esbozada                Sarmiento. Es considerado uno de los
                                                   mayores exponentes de la literatura
“Argentina” por caso, “Uruguay” o                  hispanoamericana. Sarmiento presenta
cualquier otro país latinoamericano son            a la figura de Facundo Quiroga, notable
algo más que una idea, representación o            caudillo federal del norte argentino
                                                   amado por las masas populares, como
mero constructo del orden oligárquico.             un “personaje demoníaco”, síntesis de los
También son representan algo más                   males nacionales.

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de la que surge y es parte constitutiva.           fuera presentado a los latinoamericanos
      Este es el paradigma sarmientino             como paradigma a seguir manifiesta una
que configuró la Argentina moderna                 profunda brecha entre las ciudadanías
desde fines del siglo XIX pero que se              europeas y toda parafernalia tecnocrática
reactualiza incesantemente en los modos            de Bruselas. No solo la política continua
de percibir la realidad por parte de los           allí estructurada a nivel nacional sino
amplios sectores sociales imbuidos de la           también los sentidos de pertenencia
cultura urbana y ciudadana. Un modo de             permanecen arraigados en ese nivel
percibir que obliga a renegar –incluso–            a pesar de los profusos intercambios
de la propia genealogía familiar. Tal como         laborales y educativos promovidos por
afirma Fermín Chávez para el caso de               políticas activas de la UE.
Argentina: “el Iluminismo [se caracterizó                Desde el enfoque normativo
por] su carga de ahistoricismo, su                 tradicional pareciera que estamos en
propósito de hacer tabla rasa con el               un atolladero. Entre otras cosas porque
pasado e iluminar al mundo americano               ese salto de escalano refiere a una
por la fuerza de la razón” (Chávez,                mera cuestión de proporcionalidad,
2012, p. 188). Continúa diciendo: “se              sino que involucra una constelación
habla de un ´lavado de cerebros´ o,                de complejidades socio territoriales y
certeramente, de una colonización                  sedimentaciones culturales e identitarias
pedagógica” (Chávez, 2012, p. 188). Este           que bregan tanto por ratificar las
fenómeno fue entonces fundamental                  formaciones territoriales heredadas – o
para comprender el divorcio entre el “ser          incluso desustanciarlas sin que nada las
argentino” y el “ser latinoamericano”.             sustituya– tanto como las luchas por su
      Ahora bien, ¿puede la institución            reconfiguración y/o reapropiación.
Estado forjar algo para lo cual no está                  Para explorar otra matriz acerca
históricamente concebido? ¿Puede                   de América Latina es preciso recurrir al
ocuparsede “inventar” una nueva lealtad            vasto campo del pensamiento nacional–
y pertenencia más allá de sus fronteras? El        latinoamericano12 en sus múltiples
punto es que no existe algo parecido a un
“Estado–región”equivalente al estado–
nación con fuerza heurística , en términos         12    Por     citar   algunos      trabajos
de Methol Ferré (2009), Estado continental,        fundamentales de esta vertiente de
capaz de moldear el pilar identitario a            pensamiento, Creación de la pedagogía
                                                   nacional (1944) de Franz Tamayo, El
escala regional – atributo constitutivo de         porvenir de América Latina (1910) de
la forma Estado– de la misma manera                Manuel Ugarte, La utopía de América
que los arreglos institucionales surgidos          (1925) de Pedro Henríquez Ureña, Por la
                                                   emancipación de América Latina (1927)
de los proyectos de integración tampoco            de Víctor Raúl Haya de la Torre, 7 ensayos
son capaces configurar una legitimidad             de interpretación de la realidad peruana
efectiva –no formal– que la sostenga, tal          (1928) de José Carlos Mariátegui, En
                                                   torno a una filosofía americana (1942) de
como lo evidencia la Unión Europea y               Leopoldo Zea y obras de otro/as autore/
su crisis existencial (Sanahuja, 2012). Es         as de diferentes tradiciones tales como
elocuente como aquel constructo que nos            Arturo Jauretche, Fermín Chávez, Juan José
                                                   Hernández Arregui , Jorge Abelardo Ramos,

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