EL TRABAJO DOMÉSTICO NO REMUNERADO EN LA ECONOMÍA

Página creada Dario Gomis
 
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EL TRABAJO
                   DOMÉSTICO
               NO REMUNERADO
               EN LA ECONOMÍA
                                                                            Fabiola Campillo*

                    Este trabajo parte de la revisión de dos escuelas económicas: la neoclásica y
                la marxista y muestra cómo, desde ángulos opuestos, las dos corrientes de pen-
                samiento que iluminaron la economía de fines del siglo XIX y el XX, lograron
                tener los mismos supuestos conceptuales sexistas y recrearon la exclusión pa-
                triarcal en el trabajo doméstico femenino.

                *   Socióloga colombiana. Especialista en desarrollo rural de la Sorbonne, Francia. Fue responsa-
                    ble de los temas de género, mujer y desarrollo para los países de América Latina en la FAO y
                    el Instituto Interamericano de Cooperación Agrícola. En la actualidad es consultora interna-
                    cional para varias agencias de cooperación de Naciones Unidas y también no gubernamenta-
                    les. Presidenta de Consultorías FUTURA.

98   NÓMADAS
Introducción                                   Las necesarias interrelaciones       a la otra economía, la del cuidado y
                                          entre las dos economías hacen que         la reproducción. Se da una mirada a
    Las mujeres del mundo se en-          medidas de política en la esfera          los principales enfoques económicos
cuentran en la encrucijada entre la       macroeconómica tengan efectos en          de los últimos tiempos, el de la teoría
participación en la producción eco-       la esfera microeconómica y al mismo       neoclásica y el del marxismo, para
nómicamente remunerada –opcio-            tiempo, las relaciones sociales en la     descubrir que a pesar de tantos ele-
nal para algunas y necesaria para la      esfera microeconómica, condicionen        mentos en que son divergentes, cuen-
sobrevivencia para la gran mayoría–       la respuesta de la población a las me-    tan con aspectos comunes en la
y el trabajo para garantizar la repro-    didas de carácter macro. En concre-       consideración del trabajo doméstico.
ducción biológica y social de los         to, las relaciones entre mujeres y        El principal es el de no conectar la
miembros del hogar. Es la                                                                      separación de los trabajos
encrucijada entre la calle                                                                     para la producción y para
y la casa. En la primera,                                                                      el cuidado con la desigual-
los espacios para ellas son                                                                    dad e inequidades entre
todavía restringidos y                                                                         hombres y mujeres.
discriminados. En la se-
gunda, el trabajo es arduo,                                                                        La primera parte in-
no reconocido, pero se                                                                        troduce el concepto de
acompaña de legitimidad                                                                       actividades o trabajo do-
social.                                                                                       méstico, realizado en el ho-
                                                                                              gar, por miembros del hogar
    La economía real se                                                                       y para satisfacer necesidades
mueve en dos ámbitos, el                                                                      de los mismos, sin pasar por
de la economía de la pro-                                                                     el mercado. Es realizado, en
ducción y el de la econo-                                                                     todo el mundo, mayori-
mía del cuidado, la                                                                           tariamente por las mujeres
reproducción y el bienes-                                                                     quienes garantizan tanto la
tar de las personas. Como                                                                     reproducción biológica de
bien lo define Diane                                                                          la especie y la unidad fami-
Elson “Tenemos dos eco-                                                                       liar, como la reproducción
nomías: una economía en                                                                       social de los miembros de la
la que las personas reci-                                                                     misma. A diferencia de la
ben un salario por produ-                                                                     biológica, que atiende al
cir cosas que se venden en                                                                    proceso de dar vida, pro-
los mercados o que se fi-                                                                     crear y hacer crecer a los
nancian a través de                                                                           seres, la reproducción social
impuestos. Esta es la econo-                                                                  incluye no sólo la alimen-
mía de los bienes, la que                                                                     tación de los miembros del
todo el mundo considera “la Fabricante de instrumentos musicales, Colombia. Foto O. Jordán    hogar, sino elementos no
economía” propiamente                                                                         materiales que conforman
dicha, y por otro lado tenemos la hombres, de diferentes edades y con la socialización: la transmisión de va-
economía oculta, invisible, la eco- intereses diversos, explicará el com- lores, identidades y roles, el desarro-
nomía del cuidado” (Elson 1995). portamiento social que es posible pre- llo de capacidades y habilidades para
Lo que las diferencia es que el tra- ver o los efectos diferenciados que las desempeñarse en la vida, las normas
bajo que se realiza en la segunda no políticas macro pueden generar.                de comportamiento, etcétera.
es remunerado, no se contabiliza y,
sobre todo, es realizado principal-         Este trabajo pretende mostrar               No se considera en este ensayo
mente por las mujeres del mundo, cómo la economía de la producción, el trabajo doméstico remunerado
sin distinción de edad, raza o etnia. o mejor sus pensadores, perciben o no pues en la medida en que es

                                                                                                         NÓMADAS        99
transado en el mercado, hace parte       1. Elementos que                         jeres en unidades económicas adi-
de la economía productiva. Conti-           definen el trabajo                    neradas, como el de demostrar la
núa en la segunda parte con una             doméstico                             fuerza pecuniaria de su unidad so-
revisión de los principales enfoques                                              cial mediante un notable consumo
económicos, señalando los puntos             Son varios los y las autoras que     improductivo (Veblen 1954: 68 ci-
en común con respecto a las rela-        han tratado de delimitar y estable-      tado por Koch).
ciones de género.                        cer la naturaleza del trabajo domés-
                                         tico. Ya desde inicios de siglo hubo     Las tareas que no se remune-
     La tercera parte discute acerca     referencias a este trabajo, siempre      ran pero que potencialmente
de los efectos de la disociación en-     asociadas al estatus de la mujer. Ulla   podrían serlo
tre una y otra economía, efectos que     Koch (1996) descubre dos ensayos
tienen resultados aún más                                                                      En una etapa poste-
desalentadores en la des-                                                                  rior, la consolidación del
igualdad de género. Di-                                                                    proceso de industrializa-
chos efectos se refieren a                                                                 ción hizo posible la sepa-
la transferencia de valor                                                                  ración neta entre los
de la economía producti-                                                                   espacios económicos para
va a la reproductiva, a las                                                                la producción de mercan-
oportunidades diferencia-                                                                  cías en las fábricas y el
das que tienen mujeres y                                                                   espacio de la casa para la
hombres para entrar y per-                                                                 producción de bienes y
manecer en los mercados                                                                    servicios para el consumo
de trabajo, al trabajo pro-                                                                de los miembros del
ductivo que se esconde en                                                                  hogar. Margaret Reid
el trabajo doméstico y por                                                                 introdujo un estudio pio-
tanto se subestima, al di-                                                                 nero sobre el trabajo
seño de políticas y progra-                                                                doméstico en 1934,
mas sociales y a los                                                                       “Economic of Household
registros estadísticos.                                                                    Production”, en el cual de-
                                                                                           finió así esta categoría: “la
    La cuarta parte presen-                                                                producción en el hogar
ta algunos intentos de                                                                     consiste en esas activida-
medición del trabajo no                                                                    des no remuneradas que
remunerado, indicando ci-                                                                  son llevadas a cabo por y
fras de la magnitud del                                                                    para sus miembros; acti-
mismo que se oculta en los                                                                 vidades que podrían ser
sistemas actuales de cuen-                                                                 reemplazadas por bienes
tas nacionales. En la                                                                      de mercado o servicios
quinta se incluyen consi-                                                                  pagados, si circunstancias
deraciones sobre el proble-                                                                tales como ingreso, con-
ma en el contexto actual                                                                   diciones del mercado o
de globalización económi- Carniceros, mercado de Saint-Honoré, París, 1968. Foto H.C.B.    inclinaciones personales
ca y se cierra con una con-                                                                permitieran que el servi-
clusión sobre lo imprescindible de del economista Veblen sobre la ins- cio fuera delegado en alguien fuera
incluir el trabajo de la economía del titución matrimonial y los roles de del grupo del hogar” (citado por
cuidado y el bienestar en cualquier las mujeres, publicados hace un si- Gardiner 1996: 148).
paradigma de desarrollo que tenga glo “The barbarian status of women y
entre sus postulados la equidad y la the Economic theory of women’s dress”.         El trabajo doméstico incluye el
eficiencia económica.                 Veblen se refiere al papel de las mu- cuidado de los niños y las niñas, de

100    NÓMADAS
los ancianos de ambos sexos, la lim-     Características de lugar y forma         miembros del hogar al trabajo o la
pieza de la casa y sus alrededores, el   del trabajo doméstico                    escuela, la recolección de agua y de
cuidado de la ropa, la transformación                                             leña para proveer energía a los hoga-
de alimentos, el transporte de niños         Luisella Goldschmidth-Cler-          res en comunidades rurales.
y niñas, y las compras relativas a to-   mont ilustra las características comu-   (Goldschmidt-Clermont 1987).
das estas tareas. Es realizado princi-   nes al trabajo doméstico: el sitio de
palmente por mujeres: esposas,           la casa y sus alrededores inmediatos     Un trabajo artesanal
madres, hijas, amas de casa y cuenta     son el principal lugar de producción
con la contribución de los miembros      y consumo; el trabajo es suplido por         El trabajo doméstico difiere del
dependientes que están en el hogar,      miembros del hogar, mayoritaria-         trabajo denominado económico, no
cuando su edad y condición de sa-        mente por mujeres y niños(as); los       sólo por el hecho de que no se remu-
lud les permite                                                                                       nera, sino por la
realizarlo.                                                                                           naturaleza y for-
                                                                                                      ma que asume el
    En la distin-                                                                                     proceso de gene-
ción entre la                                                                                         rar bienes y servi-
parte de las acti-                                                                                    cios para que los
vidades domés-                                                                                        consuman los
ticas que es                                                                                          miembros del ho-
económica y la                                                                                        gar sin pasar por
que no lo es,                                                                                         el mercado. Es la
Reid introdujo el                                                                                     forma como se or-
llamado criterio                                                                                      ganiza, sin una
de “tercera per-                                                                                      división de tareas
sona”, en lo que                                                                                      fijas, con secuen-
fue respaldada                                                                                        cias y horarios
más tarde por                                                                                         flexibles, depen-
otras economis-                                                                                       diendo de las
tas. Según este                                                                                       oportunidades de
criterio, si una                                                                                      manejo del tiem-
actividad del ho-                                                                                     po y gustos de
gar puede y es                                                                                        quienes lo con-
delegada a un(a)                                                                                      ducen y la no
trabajador(a)                                                                                         estandarización
asalariada, la                                                                                        del proceso y sus
actividad debe                                                                                        productos, lo que
considerarse                                                                                          lo hace artesanal
económicamente                           Colombia, 1960. Foto E. Pérez Arbeláez                       (Todaro y Galvez
productiva.                                                                                           1997). El trabajo
                                         bienes y servicios son directamente      doméstico es definido así por algunas
    Como se ve, esta definición se       consumidos por miembros del hogar        autoras como un trabajo de carácter
centra en el enfoque de que lo eco-      o de la comunidad sin mediar tran-       artesanal, aunque contenga elemen-
nómicamente productivo es lo que se      sacciones monetarias.                    tos de progreso tecnológico.
monetiza, independientemente del
valor que pueda tener el servicio o          Existe otro tipo de actividades          Otros elementos se relacionan
bien generado, para resolver necesi-     que se relacionan cercanamente con       con las condiciones en que se realiza
dades. Esta manera de abordar el pro-    las actividades domésticas en conte-     el proceso de trabajo: En primer lu-
blema se mantendrá hasta los años        nido, modo de producción y desti-        gar, él o la trabajadora no están sepa-
setenta.                                 no, tales como el transporte de los      rados de los medios de producción ni

                                                                                                       NÓMADAS      101
sujetos a una división técnica del tra-    “por medio de la producción de                     mayor nivel de desarrollo,
bajo; conservan en todo momento el         valores de uso que no se venden                    pero aún en este caso queda
control y dirección del proceso. En        en el mercado, el trabajo domésti-                 un remanente del trabajo do-
segundo lugar, su campo de acción no       co mantiene una mercancía que se                   méstico que realizan las mu-
es fácil de determinar, pues en algu-      transa o se transará en el merca-                  jeres en su hogar;
nas tareas se confunde con expresio-       do” (Ibid: 132).                                c) utilizando equipos y tecnolo-
nes de afecto y valores como                                                                  gía que ahorran tiempo pero
solidaridad, altruismo, protección a           Aunque, como ya dijimos, la                    no eliminan el trabajo ni des-
los más frágiles, todo lo cual ayuda a     mayor parte del trabajo doméstico lo               cargan la responsabilidad.
entender que este trabajo tenga rela-      realizan las mujeres en los hogares,               Estas dos últimas formas re-
ción con la economía de                                                                           quieren ingresos sufi-
mercado, por medio de vín-                                                                        cientes para realizar la
culos ideológicos. Por últi-                                                                      sustitución.
mo, tampoco hay una
separación de las funciones                                                                             Amplios grupos de
de dirección y coordina-                                                                            mujeres en sociedades ur-
ción, de un lado, y las de                                                                          banas de América Latina,
realización práctica de bie-                                                                        como en el caso de las ciu-
nes y servicios, de otro.                                                                           dades capitales de Chile,
                                                                                                    Perú y Bolivia, han inven-
Del valor de uso al valor                                                                           tado formas comunitarias
de cambio                                                                                           de sustitución del trabajo
                                                                                                    doméstico no contenidas
     En una óptica marxista,                                                                        en la lista anterior, como
De Barbieri (1975) hace                                                                             los denominados “come-
énfasis en que el objeto prin-                                                                      dores populares” y “ollas
cipal del trabajo doméstico                                                                         comunes”, las cuales no
es atender a las necesidades                                                                        son otra cosa que nuevas
de consumo individual de                                                                            formas de sobrevivencia
las personas que integran el                                                                        que conjugan el trabajo
hogar y asegurar el mante-                                                                          doméstico y el productivo
nimiento, reposición y re-                                                                          fuera del hogar. Lo que
producción de la fuerza de                                                                          muchos saludan como un
trabajo. Pero a diferencia de                                                                       gran progreso organizativo
algunos bienes y servicios                                                                          de las mujeres, y lo es,
que pueden satisfacer estas      Construcción del edificio Empire State, N. Y., 1931. Foto Hine     también puede ser visto
necesidades de manera so-                                                                           como una forma colecti-
cializada (salud, alimentación en es- este trabajo puede ser sustituido me- va, más eficiente, de paliar la crisis y
cuelas, etc.) se realiza en la esfera diante diferentes formas:                         eludir la responsabilidad estatal.
privada. Para la autora, en tanto no
son bienes que pasan por el mercado,          a) contratando trabajadoras y                  En síntesis, estamos frente a un
se consideran valores de uso, trabajo              trabajadores domésticos, caso trabajo de tipo artesanal, que se rea-
útil, pero no creador de valor.                    típico de las sociedades del liza en los hogares y por sus miem-
                                                   mundo en desarrollo donde bros, vinculado al mercado como
     Como veremos más adelante                     hay abundancia de mano de insumo para la venta de otro produc-
en la revisión de la consideración                 obra a bajo precio;                  to, la fuerza o capacidad de trabajo,
del trabajo doméstico en las teo-             b) adquiriendo mercancías en el regulado por mecanismos ideológicos
rías económicas, las feministas                    mercado, lo que es más gene- y valorativos, al que no se le asigna
marxistas ponen el acento en que                   ralizado en sociedades con valor sino sólo en tanto puede ser sus-

102     NÓMADAS
tituido con bienes y servicios prove-     transables en el mercado nacional o         transferencia a la economía de mer-
nientes del mercado.                      internacional.                              cado, se incluyó en la agenda del
                                                                                      movimiento de las mujeres. En la III
                                               La no remuneración se deriva de        Conferencia, celebrada en Nairobi,
2. El trabajo                             las dos anteriores (no se ve ni se cuen-    en 1985, el plan de acción adoptado
   doméstico                              ta), pero esencialmente tiene que ver       por los gobiernos y denominado “Es-
   en las principales                     con:                                        trategias de Nairobi para el Avance
   corrientes                                                                         de la Mujer”, recomendó hacer es-
   económicas                                 • la creación de identidades de         fuerzos para medir y reflejar en las
                                                género basadas en la actual           estadísticas y cuentas nacionales, las
    Los estudios y debates de las mu-           división del trabajo: hombre          contribuciones no remuneradas de las
jeres sobre la división sexual del tra-         productor-mujer reproductora          mujeres a la agricultura, la produc-
bajo estimada como el eje de la                 y consumidora, hombre traba-          ción de alimentos, la reproducción y
subordinación de género,                                                                        las actividades domésticas.
han llamado la atención
sobre tres elementos carac-                                                                        Pero antes de estos
terísticos del trabajo do-                                                                     señalamientos de las mu-
méstico: su invisibilidad, su                                                                  jeres, ¿cómo abordó la teo-
no contabilidad y su no re-                                                                    ría económica el trabajo
muneración, todos los cua-                                                                     doméstico? Dos son los
les tienen relación entre                                                                      principales enfoques econó-
sí.                                                                                            micos que han iluminado el
                                                                                               desarrollo de la economía:
    La invisibilidad está re-                                                                  la economía neoclásica y la
lacionada con la aprecia-                                                                      marxista. Ambos enfoques
ción de las actividades del                                                                    han dejado por fuera de su
hogar como la expresión                                                                        análisis el meollo central
“natural”, por extensión,                                                                      del trabajo doméstico, aun-
de las funciones reproduc-                                                                     que por razones y supuestos
tivas femeninas. La ideo-                                                                      teóricos distintos.
logía patriarcal logró
incluir y legitimar en los                                                                           Quienes han revisado
roles de las mujeres, con-                                                                      en detalle la evolución de
sideradas ante todo madres                Colombia, c. 1945. Foto E. Pérez Arbeláez             las teorías económicas a la
o productoras biológicas                                                                        luz de las consideraciones
que procrean, dan a luz y amaman-               jador en lo público y econó-          de género (Elson; Gardiner; Benería,
tan, todas las actividades de cuidado           mico-mujer trabajadora en lo          Koch, Feldman, entre otras), en-
de los miembros del hogar y su re-              privado y doméstico;                  cuentran rasgos comunes entre los
producción social.                            • la abundancia de la mano de           dos grandes enfoques, en lo que se
                                                obra para desempeñar el tra-          refiere a las motivaciones, los su-
    La no contabilidad tiene que ver            bajo doméstico y su flexibili-        puestos, el uso de tiempo y la toma
con lo anterior y con la considera-             dad casi infinita para ajustarse      de decisiones.
ción de que lo que no produce direc-            a los cambios en el entorno
ta/riqueza, no se registra como un              macroeconómico.                       En cuanto a las motivaciones
proceso económico. De aquí que se
desarrollen sistemas contables orien-        Desde la II Conferencia Mundial               La Nueva Economía Doméstica
tados a unidades típicamente econó-       sobre la Mujer, en Copenhague en            que surge en los Estados Unidos con
micas, en tanto su propósito es la        1980, el tema del trabajo doméstico         Moncer y Becker en los años sesen-
producción de bienes y servicios          como espacio de subordinación y             ta, antecedidos por Reid en los trein-

                                                                                                          NÓMADAS       103
ta, señala que la motivación altruis-      especialización de las tareas ente        ración de plusvalor para quien se
ta en el hogar contrasta con la moti-      mujeres y hombres en las esferas de       apropia de ese trabajo y sus resultados.
vación por el propio interés en el         mercado y de lo doméstico, a su vez,
mercado. Este enfoque supone que los       redunda en una mayor productividad            A partir de la aplicación de la
miembros del hogar eligen la división      para ambos (Gardiner 1996).               dicotomía valor de uso/valor de cam-
del trabajo entre estas dos esferas, con                                             bio al estudio del trabajo doméstico,
el fin de maximizar el uso del tiempo.          Como lo señala Feldman (1992)        se generaron tres posiciones divergen-
                                           estos argumentos implican que com-        tes en el Debate sobre Trabajo Do-
    Por su parte, la teoría marxista       partir los roles y obligaciones socia-    méstico adelantado por economistas
sobre el trabajo doméstico, supone         les es menos eficiente que la división    marxistas en los años setenta: a) el
que la solidaridad de clase que se ma-     del trabajo entre la casa y el mercado.   trabajo doméstico genera plusvalor,
terializa en la esfera do-                                                                     por lo cual las amas de casa
méstica se opone a los                                                                         están vinculadas al proceso
intereses de clase que im-                                                                     de acumulación de capital
primen y dan dinámica al                                                                       y son agentes importantes
mercado. Mientras en éste                                                                      en la lucha de clases; b) el
las relaciones de poder                                                                        trabajo doméstico no gene-
condicionan la explota-                                                                        ra plusvalor y por lo tanto
ción de los trabajadores y                                                                     las mujeres tienen un po-
los beneficios que puedan                                                                      tencial revolucionario
recibir por el trabajo rea-                                                                    limitado; c) el trabajo do-
lizado, en la economía de                                                                      méstico es un modo de pro-
lo doméstico predominan                                                                        ducción separado, no
principios de solidaridad                                                                      capitalista pero subordina-
de clase que suponen in-                                                                       do al capitalismo (Koch
tereses comunes de los                                                                         1996).
miembros del hogar (Gar-
diner 1996).                                                                                       En la perspectiva de la
                                                                                               teoría marxista, los trabaja-
En cuanto a                                                                                    dores no tienen otra alter-
los supuestos                                                                                  nativa que vender su fuerza
                                                                                               de trabajo para ganarse la
     En la Nueva Econo-                                                                        vida, en un contexto de
mía Doméstica, el supues-                                                                      explotación al que se le
to central es que el                                                                           puede hacer resistencia des-
provecho que se deriva al                                                                      de el hogar donde los inte-
garantizar el consumo en                                                                       reses son comunes. Como
el hogar compensa el sa-                                                                       lo señala Koch, este enfo-
crificio de no participar en                                                                   que supone que las mujeres
el mercado de trabajo. El                                                                      son amas de casa en hoga-
                                       Taquígrafa, Colonia, 1928. Foto A. Sander
denominado “costo de                                                                           res de asalariados y que las
oportunidad” del trabajo se acompa-         El argumento más importante en           familias que devengan uno o más sa-
ña de otras hipótesis asociadas: que la teoría marxista es el de que el tra-         larios constituyen una unidad de in-
las tareas relativas al cuidado de los bajo que no pasa por el mercado, ge-          tereses comunes en cuanto a la
miembros del hogar se realizan de nera tan sólo una utilidad social, un              distribución y uso de la remuneración
manera más eficaz en el hogar que valor de uso, que difiere sustantiva-              recibida. Quienes anotaron que en las
en el mercado; que existen diferen- mente del que se mercantiliza, que               unidades familiares se vive una per-
cias intrínsecas de productividad en- conlleva un valor de cambio y con-             manente lucha de intereses entre sus
tre hombres y mujeres; que la tribuye económicamente a la gene-                      miembros sobre la magnitud y divi-

104     NÓMADAS
sión del trabajo doméstico, así como          Dos elementos centrales de la             Tal vez el asunto más escondido
sobre el uso de los ingresos, parecie-    desigualdad de género quedaron por        en estos enfoques es que el control
ron no encontrar mucho eco en los         fuera en estas teorías: en ningún caso    de ambos, decisiones y beneficios, lo
economistas marxistas.                    se puso en duda la elasticidad de la      tienen principalmente los hombres,
                                          jornada, simple o doble, realizada por    con lo cual el supuesto distributivo
Sobre el uso del tiempo                   las mujeres; las negociaciones sobre      se invalida. Estudios de todo tipo de
                                          la división del trabajo se realizan en    organizaciones, desde las ONGs has-
     En la teoría neoclásica, el tiem-    la esfera privada, espacio en el que      ta la banca internacional, han con-
po de trabajo es un bien escaso que       los hombres cuentan con una posi-         firmado que hay dos brechas en este
se regula entre los miembros del ho-      ción ventajosa.                           terreno. La primera es entre quienes
gar y los espacios de producción y re-                                              tienen y no tienen acceso a los re-
producción, atendiendo siempre al         En cuanto a las decisiones                cursos, decisiones y beneficios; la se-
criterio de eficiencia. En la teoría      y beneficios dentro del hogar             gunda, entre quienes tienen acceso
marxista esta regulación                                                                     pero no tienen control. En
tiene que ver con la                                                                         la primera hay una exclusión
abundancia de fuerza de                                                                      total de quienes no partici-
trabajo, la fuerza de reser-                                                                 pan, en la segunda una ex-
va y con la capacidad de                                                                     clusión parcial; ambas
negociación de la clase                                                                      conducen a restricciones en
trabajadora. Pero en am-                                                                     los derechos de las mujeres.
bos casos, históricamen-
te, esa regulación sólo se                                                                   Sesgos de género en los
materializó en la esfera de                                                                  enfoques económicos
la producción para el
mercado. Implícitamen-                                                                             En una revisión de la
te se supone que el tiem-                                                                      evolución histórica del estu-
po de las mujeres es de                                                                        dio del trabajo doméstico,
una infinita flexibilidad.                                                                     Koch encuentra que este
                                                                                               evolucionó desde los co-
    Trabajadores y patro-                                                                      mienzos de la industrializa-
nos han negociado his-                                                                         ción, cuando el problema del
tóricamente el tiempo de                                                                       trabajo fuera del mercado es-
trabajo por una unidad                                                                         taba relacionado con el
de salario recibido. En el        Sabanalarga, Colombia, 1960. Foto E. Pérez Arbeláez          estatus de las mujeres y su
caso de las trabajadoras                                                                       grado de independencia de
no remuneradas, la negociación dis-           En la economía neoclásica, las la sociedad, pasando por la consoli-
curre en la esfera privada y, por lo decisiones se basan en criterios de dación del desarrollo industrial, en
tanto, en apariencia no es objeto de eficiencia y como tal, son positivas la cual las mujeres llegan a ser consi-
regulación por las instituciones pú- para todos los miembros del hogar. deradas principalmente consumido-
blicas. En las sociedades capitalistas En la economía marxista el criterio ras –en la teoría neoclásica–, hasta
la tecnología parece haber sido la central es el del sacrificio por el sala- épocas recientes en las que el movi-
forma de ahorro en el tiempo del tra- rio recibido y lo importante es resis- miento de mujeres se centró en el
bajo no remunerado; en las socialis- tir a la explotación global de la estatus productivo de las mujeres y
tas, la socialización de servicios familia. Una vez más, se asume que en responder a la pregunta de ¿cuáles
públicos para el cuidado de miem- existe consenso de intereses en los son las causas de la opresión de las
bros del hogar (guarderías, unidades miembros del hogar y que los benefi- mujeres?
de salud, comedores en lugares de cios recibidos por el trabajo remune-
trabajo, por ejemplo) y provisión de rado se distribuyen de manera                        Se puede apreciar en el debate,
bienes por el Estado.                    igualitaria.                                 al interior de los dos enfoques y no

                                                                                                          NÓMADAS      105
entre ellos en torno al trabajo domés-             mente de los insumos impu-                que tengan. Los estudios de-
tico, que no existe un vínculo que                 tados al proceso de produc-               muestran que esos costos son
ligue conceptualmente la división del              ción de bienes y servicios en             diferenciados para mujeres y
trabajo entre hombres y mujeres y el               el hogar. Al ser las mujeres              hombres y están condiciona-
problema de la subordinación de las                quienes realizan mayorita-                dos por las oportunidades
últimas a los primeros. Por ello, el               riamente este proceso, su                 desiguales de educación, dis-
trabajo no remunerado puede man-                   trabajo es desvalorizado eco-             ponibilidad de tiempo y roles
tenerse invisible, no contabilizado y              nómica y, por consiguiente,               adscritos para cada género.
no retribuido económicamente.                      socialmente, dando lugar a             e) Que los hogares están formados
                                                   relaciones de subordinación               por, al menos, un trabajador
    La crítica a estas dos escuelas                y discriminación, contrarias              asalariado y otros miembros
de pensamiento reveló al                                                                        (mujeres y niños) depen-
menos cinco sesgos de                                                                           dientes del ingreso por éste
género:                                                                                         generado. Este supuesto que
                                                                                                pudo ser válido en ciertos
      a) Que la motivación                                                                      momentos históricos y en
         para realizar el tra-                                                                  determinados segmentos de
         bajo doméstico no                                                                      población, se ha demostra-
         remunerado dentro                                                                      do irreal en la segunda mi-
         de los hogares es                                                                      tad de este siglo con el
         única y compartida                                                                     proceso creciente de in-
         por todos los miem-                                                                    corporación de las muje-
         bros del hogar, llá-                                                                   res al mercado de trabajo
         mese altruismo para                                                                    y el incremento sosteni-
         garantizar la efi-                                                                     do de hogares con jefatu-
         ciencia, en un caso,                                                                   ra femenina.
         o solidaridad de cla-
         se, en el otro.
      b) Que los beneficios                                                                      3. Efectos
         de la división entre                                                                       del trabajo
         trabajo doméstico y                                                                        doméstico no
         trabajo remunera-                                                                          remunerado
         do y los ingresos                                                                          en manos
         obtenidos por quie-                                                                        de las mujeres
         nes realizan este
         último, son distri-                                                                          Mantener el trabajo
         buidos equitativa-                                                                      doméstico no remunerado
         mente por los                                                                           en manos de las mujeres y
         miembros del ho-                                                                        los menores, tiene efectos
         gar. Esto entraña                                                                       que se relacionan con sub-
         una concepción                                                                          sidios a la producción para
         del hogar como              Aquila degli Abruzzi, 1952. Foto H. Cartier-Bresson         el mercado, oportunidades
         unidad monolítica,                                                                      diferenciadas por género en
         igualitaria y armónica de in-             a las condiciones de igualdad el mercado laboral y los ingresos, la
         tereses de esos miembros, sin             del supuesto usado.                 orientación y la forma de organización
         consideración de su condi-           d) Que los miembros del hogar de los servicios sociales, el ocultamien-
         ción de sexo y edad.                      son libres para optar por el tra- to de algunos tipos de trabajo produc-
      c) Que sólo tiene valor lo que               bajo doméstico o remunerado, tivo y el mantenimiento de rígidos
         se comercia, independiente-               según el costo de oportunidad conceptos de trabajo y empleo.

106      NÓMADAS
3.1. Subsidio a la acumulación                 que mientras exista un con-       posibilidades de acceder a los secto-
del capital                                    tingente de trabajadoras no       res más dinámicos del empleo, de tra-
                                               pagadas e invisibles, los sala-   bajar la jornada completa y de no
    El primer efecto es el de subsidiar        rios se regularán tan solo por    interrumpir la vida laboral, de incre-
la producción para el mercado. Esto            la oferta y demanda de la fuer-   mentar sus niveles de entrenamien-
se realiza de varias maneras:                  za de trabajo que se realiza      to, son restringidas frente a las de los
                                               fuera del hogar, en la calle,     hombres. Durante décadas, los res-
    a) El trabajo doméstico subven-            como si no existiera una re-      ponsables de las decisiones del hogar
       ciona al sector empresarial en          lación de interdependencia        consideraron sin utilidad enviar a las
       el segmento no pago de la               entre ambos dominios del          niñas a la escuela, ya que no se pre-
       fuerza de trabajo. Al contar            trabajo.                          veían perspectivas de inserción en el
       con el trabajo                                                                      mercado laboral y, por lo
       abundante y en                                                                      tanto, no retribuirían la in-
       casos excedente                                                                     versión con ingresos adicio-
       de la mano de                                                                       nales en el futuro.
       obra femenina, en
       especial las amas                                                                      Las tareas domésticas in-
       de casa, hay una                                                                   clinan la balanza desfavora-
       transferencia de                                                                   blemente en el acceso de las
       valor, de la eco-                                                                  mujeres al mercado de tra-
       nomía de la casa                                                                   bajo. Según la CEPAL,
       a la economía de                                                                   “mientras el nivel de parti-
       mercado;                                                                           cipación en el mercado la-
    b) En condiciones                                                                     boral de los hombres que son
       de crisis, las amas                                                                jefes de hogar fluctúa entre
       de casa se ven                                                                     80% y 90%, el de las muje-
       obligadas a re-                                                                    res es de 40% a 60%, en las
       forzar la inten-                                                                   zonas urbanas”. (CEPAL
       sidad del trabajo                                                                  1995).
       doméstico para
       amortiguar los                                                                          Los datos de la OIT ana-
       efectos de la pér-                                                                 lizados por Rangel de Paiva
       dida en el poder                                                                   Abreu indican que “no obs-
       adquisitivo de los                                                                 tante ciertos avances de la
       salarios (Torres                                                                   participación femenina en
       1977); esto sigue                                                                  el trabajo de la región
       siendo cierto aún                                                                  (América Latina) las muje-
       en los casos de                                                                    res siguen representando, de
       mujeres que tra-                                                                   hecho, la mayor proporción
       bajan fuera del                                                                    de personas implicadas en
                                      Quindío, Colombia, 1999. Foto O. Jordán
       hogar;                                                                             ocupaciones más precarias
    c) Su efectos sobre los salarios. 3.2. Oportunidades diferenciadas           de los sectores formal e informal “
       Como lo destaca De Barbieri para la ubicación y permanencia               (Abreu 1995: 86).
       en su artículo “Notas para el de hombres y mujeres en los mer-
       estudio del trabajo de las mu- cados de trabajo                               No es claro pues que el acceso al
       jeres: El problema del traba-                                             trabajo en la calle, modifique las ata-
       jo doméstico” es el “efecto         Sin duda al asignar a las mujeres     duras con el trabajo doméstico. Como
       depresor” sobre los salarios la responsabilidad principal del cui-        lo anota Helen Safa con ocasión de
       que tiene dicho trabajo, ya dado de los miembros del hogar, sus           un estudio comparativo realizado en

                                                                                                       NÓMADAS      107
tres países caribeños, Cuba, Puerto       recorte sobre los nuevos ingresos     3.3. Organización de los servi-
Rico y República Dominicana, “en          generados.                            cios y políticas sociales, sobre los
parte, el confinamiento de las muje-                                            cimientos invisibles del trabajo
res a la casa ha sido reemplazado por         Los sesgos de género en las       doméstico
la segregación ocupacional, que per-      oportunidades laborales se hacen
mite a las mujeres una representación     más agudos en los últimos años en          El Estado no considera la posibi-
limitada en el lugar de trabajo en ocu-   los que las crisis económicas y los   lidad de socializar una serie de servi-
paciones femeninas que son a menu-        cambios sociales han generado un      cios de la esfera doméstica porque
do una extensión de sus roles             aumento significativo de los          existe el colchón de amortiguación a
femeninos, aún en profesiones tales       hogares del mundo en los que la       la satisfacción de necesidades huma-
como la enseñanza y la enferme-           única responsabilidad en su con-      nas que representa el trabajo no pa-
ría”(Safa 1995: 177).                     ducción económica la tienen las       gado en el hogar. La mayoría de las
                                          mujeres. La jefatura femenina de      políticas públicas se formulan hoy
    No es enton-                                                                                      con el supuesto
ces gratuito que                                                                                      implícito de que
la mayor partici-                                                                                     el Estado tiene
pación de las                                                                                         la obligación de
mujeres se dé en                                                                                      llenar el vacío
la base de la pi-                                                                                     que las mujeres
rámide ocupa-                                                                                         no pueden cum-
cional y que sus                                                                                      plir porque cada
condiciones de                                                                                        vez más tienen
contratación y                                                                                        que o eligen tra-
remuneración                                                                                          bajar por fuera
tiendan a ser más                                                                                     del hogar.
desventajosas.
                                                                                                     Así, algu-
     Adicionalmen-                                                                               nas políticas
te, en tiempos de                                                                                sociales inclu-
crisis, las amas de                                                                              yen en su jus-
casa se ven en-                                                                                  tificación los
frentadas a un di-                                                                               cambios que se
lema complejo:                                                                                   generan cuan-
salir al mercado                 Fabricando unas piernas de muñeca, 1936. Foto L. W. Hine        do las mujeres
porque los ingre-                                                                                dejan de aten-
sos del hogar no son suficientes y si- hogares en América Latina se der las labores domésticas (niñez
multáneamente, extender la acerca a un 25% en los 90, alcan- desatendida, drogas entre adoles-
inversión de tiempo para el trabajo zando cifras más elevadas en paí- centes, deserción escolar, etc.),
doméstico porque se han transferi- ses como Honduras y El Salvador. lo que en algunos casos culpa-
do al hogar la producción de bienes Según la Comisión Económica biliza a las mujeres por fenóme-
y servicios que antes prestaba el Es- para América Latina, “la extrema nos sociales producto aparente de
tado. Esto último puede paliarse, pobreza, particularmente en las su desatención al hogar, en lugar
como sucede mayoritariamente en zonas urbanas, afecta sobretodo a de hacer énfasis en que los servi-
sociedades en desarrollo en las cua- los hogares en los que no hay un cios sociales deben responder a
les hay abundancia de fuerza de tra- cónyuge varón y en que la jefa del los derechos que tienen todos los
bajo para realizar remuneradamente hogar debe encargarse de las ta- seres humanos a iguales oportu-
las actividades domésticas, con la reas domésticas, además de apor- nidades y beneficios y a satisfa-
contratación de empleadas y em- tar los recursos para su sustento”. cer sus necesidades en un contexto
pleados, pero ello tiene un efecto de (CEPAL 1995: 70).                             de igualdad.

108     NÓMADAS
En el marco de la privatización y      bajo agropecuario, incluyendo las        desarrollo de la agricultura y las so-
la delegación de actividades de ser-        actividades que no habían sido con-      ciedades rurales.
vicios a organizaciones de la socie-        sideradas como trabajo por parecer
dad civil, se produce otro recargo de       una extensión del trabajo doméstico          Como lo demuestra con no poco
funciones desde el Estado hacia el          o por subestimación del trabajo fe-      humor y mucho realismo Marylin
trabajo voluntario que, se presume,         menino por parte del o la informan-      Waring, en muchos países del Tercer
no cuesta y es realizado por mujeres y      te, habían dejado de contabilizarse      Mundo, el estiércol es recolectado,
otros miembros de las comunidades           como trabajadoras cerca de 5.5 mi-       tratado y transportado por las muje-
por motivaciones altruistas del mis-        llones de mujeres de las zonas rura-     res y constituye un elemento clave
mo tenor de las del trabajo domésti-        les. Oficialmente, ellas aparecían       en su economía, por su condición de
co. Es otra de las formas de abaratar       registradas como inactivas en las es-    fertilizante y combustible para coci-
las tareas de bienestar que correspon-      tadísticas oficiales. (Kleysen y Cam-    nar. La leche, las pieles, la carne y
den al sector público.                      pillo 1996).                             todos los derivados animales se in-
                                                                                     cluyen en las cuentas nacionales,
3.4. El trabajo                                                                                          pero el estiércol
productivo                                                                                               es dejado por fue-
escondido                                                                                                ra, a pesar del
en el trabajo                                                                                            valor económico
doméstico                                                                                                que pueda tener.
                                                                                                         En Nepal, se ha
     En las unida-                                                                                       estimado en 8
des productivas                                                                                          millones de to-
no totalmente                                                                                            neladas anuales
empresariales,                                                                                           de estiércol con-
como las unida-                                                                                          sumido como
des de produc-                                                                                           combustible, lo
ción campesinas,                                                                                         que puede signi-
las comunidades                                                                                          ficar enormes
indígenas, los                                                                                           ahorros en la im-
negocios del sec-                                                                                        portación de
tor informal de la                                                                                       combustible.
economía, mu-                                                                                            ¿Quién paga ese
chas actividades                                                                                         ahorro en las ar-
                                                   Colombia. Foto O. Jordán
estrictamente                                                                                            cas del Estado?
productivas y vinculadas al mercado,            En Pakistán, donde el índice ofi-    (Citada por CIID 1998).
no son contabilizadas ni considera-         cial de participación económica de
das trabajo por aparecer como una ex-       las mujeres en la agricultura era sólo        La combinación de la producción
tensión del trabajo doméstico. Tal es       del 7%, el Banco Mundial reestimó        de mercancías con el espacio domés-
el caso de la cría de animales meno-        esta cifra en 73%, con base en el cen-   tico es también fuente de un elevado
res o la huerta de frutales, de la parti-   so agrícola de 1981. Con los datos       subregistro del trabajo femenino. Es-
cipación de mujeres y niños en tareas       oficiales se había omitido el trabajo    tudios sobre el sector informal han
de cosecha y desyerbe, o de la tienda       de una cifra cercana a 12 millones de    generado datos e indicadores al res-
de la esquina que requiere del traba-       trabajadoras agrícolas. (Citado por      pecto. Para dar un ejemplo, en Bra-
jo de varios miembros de la familia.        British Council 1995). Si la tenden-     sil, más del 50% de las empleadas en
                                            cia parece ser la de ir poco a poco      pequeños establecimientos del sector
    Un estudio realizado por el IICA        encontrando, de millones en millo-       urbano realiza su trabajo en un con-
y el BID en 18 países de América            nes, a las trabajadoras rurales perdi-   texto doméstico (Abreu 1995: 86).
Latina demostró que al reestimar la         das, habría de esperarse un cambio       Ello puede dar como resultado que la
participación de las mujeres en el tra-     radical en las políticas orientadas al   actividad no se declare ni se registre

                                                                                                         NÓMADAS       109
como económica, que se considere           mas, espacios y procesos de trabajo       ción femenina en activas e inactivas
pero subestimadamente como una             que no seguían esas pautas. Mante-        según que produzcan o no bienes y
ayuda para producir otras mercancías.      ner estos conceptos, de manera rígi-      servicios orientados al mercado. El
Por otra parte, el trabajo que queda       da, significó enviar al rincón            asunto está en creer que las mujeres
oculto, no es imputado a los costos        vergonzante al trabajo usado en las       que trabajan fuera del hogar no se
de producción de las unidades eco-         formas no industriales de producción.     ocupan de las actividades domésticas.
nómicas que componen el sector in-                                                   Un estudio realizado en la Argenti-
formal de la economía, con lo cual             Este factor es causa y efecto del     na por Feijóo y Jelin, demostró que
hay una distorsión en la dinámica del      mantenimiento de la división del tra-     si se agrega el tiempo de trabajo de-
sector y en los ingresos que podría        bajo entre los sexos como un hecho        dicado a las tareas domésticas, “las
generar. Por la vía de precios por         natural al que se le asignan especiali-   mujeres con trabajos remunerados
debajo de los valores reales, estas uni-   dades cuasi biológicas. Causa porque      tienen una jornada laboral de 13
dades no empresariales están hacien-       al no registrarse como trabajo, se jus-   horas y una semana de trabajo de 91.3
do también una                                                                                            horas” (BID
transferencia de                                                                                          1996: 23).
valor al resto de
la sociedad.                                                                                                   Sin embar-
                                                                                                           go, se han reali-
     Aun cuando                                                                                            zado avances en
las estadísticas                                                                                           este terreno. Un
incluyen la cate-                                                                                          estudio de Anker
goría de “ayu-                                                                                             y Hein (1987),
dante familiar                                                                                             incluye una tipo-
sin remunera-                                                                                              logía de defini-
ción”, lo cierto es                                                                                        ciones de mano
que miembros de                                                                                            de obra que va de
los hogares pue-                                                                                           lo remunerado a
den no ser in-                                                                                             lo compuesto por
cluidos en ella,                                                                                           remunerado y no
especialmente                                                                                              remunerado, en
las mujeres si se                                                                                          la cual se registra
declaran amas de                                                                                           la definición de
                                               Burdeus, 1918. Foto L. W. Hine
casa o carecen de                                                                                          la OIT como la
elementos para medir en horas o días       tifica ideológicamente que las muje-      más incluyente para las actividades
el trabajo realizado para la produc-       res –en esencia desocupadas– las ni-      no remuneradas en manos de las mu-
ción de mercancías que se venden.          ñas y los niños ayuden a los hombres      jeres. Esta definición reza así “perso-
                                           a realizar, de la manera más eficiente    nas cuyas actividades generan
3.5. Se mantiene una rígida de-            posible, las labores que originan los     productos y servicios, independien-
finición de los conceptos de tra-          ingresos monetarios del hogar. Efec-      temente de que estos se vendan o no,
bajo y empleo                              to porque lo invisible carece de la       que deberían incluirse en las estadís-
                                           fuerza necesaria para cambiar las nor-    ticas sobre la renta nacional” (Anker
     Los conceptos de trabajo y em-        mas y enfoques que orientan el regis-     y Hein 1987: 17).
pleo usados por la economía se han         tro y evaluación de las actividades
formulado en el contexto de proce-         económicas.                                    Como se puede apreciar, no es
sos industriales, urbanos, con una ele-                                              posible develar la invisibilidad del
vada organización del trabajo y con              Otro aspecto importante es el       aporte que realiza el trabajo domésti-
claras formas de contratación entre        de que las estadísticas y los análisis    co sin modificaciones sustantivas en
patronos y trabajadores, aún cuando        económicos, en general, parten de un      las estadísticas sobre trabajo y empleo
en la humanidad han persistido for-        supuesto errado al dividir a la pobla-    (los conceptos usados, las metodo-

110     NÓMADAS
logías de registro, los informantes se-   transporte, en preparación de alimen-       mayoría pobre de la población y
leccionados, el tipo de tabulaciones      tos que antes podían obtenerse pro-         para las mujeres.
y análisis). También se requiere un       cesados, el de niñas que dejan de ir a
cambio en los sistemas de cuentas na-     la escuela por cubrir las tareas que rea-       Los costos sociales de la mayor
cionales utilizados (definición de las    lizaba su madre, quien ahora trabaja        aventura expansionista e integradora
unidades que se registran y de los        tiempo completo fuera del hogar, etc.       de regiones organizaciones y perso-
métodos de reportar los valores ge-                                                   nas, a través de sofisticados elemen-
nerados en la producción de bienes y                                                  tos tecnológicos cuyo uso se
servicios).                               4. Cambios                                  democratiza a velocidad vertiginosa,
                                             en el contexto                           son grandes: una menor remunera-
3.6. Una comprensión inadecua-               económico,                               ción de los y las trabajadoras vía la
da de las consecuencias de las               ¿cambios en la                           reducción y precarización del empleo
políticas macro en los niveles               economía del                             (según la OIT, el 30% de la fuerza
micro                                        cuidado?                                 laboral del mundo la constituyen
                                                                                                          personas que es-
     Al ignorar                                                                                           tán desempleadas
las actividades                                                                                           o subempleadas),
no remunera-                                                                                              el embate a las
das, subestimar                                                                                           conquistas y logros
las remuneradas                                                                                           sociales, la reduc-
y obviar las                                                                                              ción y privati-
transferencias                                                                                            zación de la
de tiempo entre                                                                                           seguridad social y
los hogares y el                                                                                          una creciente
mercado, la                                                                                               concentración de
economía pre-                                                                                             los ingresos. Se-
senta       una                                                                                           gún el Banco
visión incom-                                                                                             Mundial, en la re-
pleta e inade-                                                                                            gión de América
cuada de las                                                                                              Latina el 20% más
consecuencias                                                                                             pobre recibe el 4%
de las políticas                                                                                          del ingreso, mien-
macro en los                                  Bogotá, 1970. Cortesía Cinep
                                                                                                          tras el 10% más
hogares y, a su                                                                                           rico concentra el
turno, en las relaciones entre muje-          No cabe duda que los cambios            60% del ingreso, una de las distribu-
res y hombres.                            ocurridos en los años noventa se re-        ciones más desiguales del planeta (ver
                                          flejan en la división del trabajo, la       Minsburg 1997). Vale recordar que
    Los estudios sobre las consecuen-     intensidad y la modalidad del tra-          un contingente enorme de mujeres
cias sociales de las reformas econó-      bajo doméstico. La llamada                  están ubicadas en ese 20%, fenóme-
micas señalan que, en general, los        globalización de la economía, ca-           no que ha dado lugar a la llamada
estratos más bajos pagan un costo         racterizada por la expansión de las         “feminización de la pobreza”
mayor por los recortes en el gasto pú-    empresas transnacionales, la expan-
blico y se benefician menos de la li-     sión global del capital financiero y            Uno de los cambios más notorios
beralización de la economía. Pero lo      el crecimiento del intercambio co-          es el relativo a los sistemas de pro-
que han destacado menos es que la         mercial de bienes y servicios, junto        ducción y la demanda de mano de
economía del cuidado se recarga, se       con la conformación de bloques re-          obra. Según Van Osch, los nuevos
hace más intensiva en tiempo: el cui-     gionales comerciales, se ha acom-           sistemas de producción han genera-
dado a enfermos, en desplazamien-         pañado de varias condiciones                do una nueva estructura en la pirá-
tos a pie por el encarecimiento del       sociales poco favorables para la            mide del empleo: en la base, el

                                                                                                           NÓMADAS      111
trabajador no calificado con puesto     res están excesivamente representa-      reproducción y la realizan las muje-
fijo va siendo sustituido por “una      das. En casi todas las regiones del      res. Numerosos estudios han demos-
masa heterogénea multi-insertable,      mundo el trabajo de las mujeres au-      trado una carga adicional que se
con situaciones laborales inestables    mentó, pero sus condiciones de in-       transfiere hacia ellas: el cuidado de
y con una presencia creciente de las    serción al mercado de trabajo son mas    los enfermos que antes contaban con
mujeres y otros grupos sociales dis-    desfavorables.                           atención hospitalaria, el cuidado de
criminados”, por razón de origen                                                 niños y niñas al recortar servicios de
(inmigrantes) o de raza y etnia (Van       Los recortes de presupuesto a la      guardería infantiles y jornadas de
Osch 1996: 26); el estrato interme-     provisión de servicios sociales, por     tiempo doble en las escuelas o al pri-
dio de trabajadores calificados tien-   modificaciones en las prioridades de     vatizar esos servicios, por ejemplo.
de a reducirse entre otras
razones por el cambio tec-                                                                    Todos estos cambios, en
nológico con la incorpo-                                                                  ausencia de modificaciones
ración de sistemas más                                                                    sustantivas a la división del
“inteligentes” y menos de-                                                                trabajo, significan para las
pendientes de decisiones                                                                  mujeres:
humanas; en la cima de la
pirámide, se expande un                                                                   a) enfrentar restricciones
segmento compuesto por                                                                    para sustituir trabajo domés-
personas altamente califi-                                                                tico por bienes y servicios en
cadas, encargadas de la                                                                   el mercado;
planificación, coordina-                                                                  b) estar obligadas a inten-
ción y control de proce-                                                                  sificar la producción y trans-
sos que muchas veces van                                                                  formación de bienes en el
allende de fronteras na-                                                                  espacio doméstico ante la
cionales. “La antigua pi-                                                                 incerteza e inestabilidad del
rámide se transforma así                                                                  trabajo y los ingresos que
en un perfil de “reloj de                                                                 provienen de la calle;
arena”, en el cual las ma-                                                                c) recrear viejos hábitos de
yores oportunidades para                                                                  servicios de cuidado que ya
las mujeres están en la                                                                   habían salido del hogar;
base de la pirámide, en es-                                                               d) ampliar el número de
pecial en la proliferación                                                                horas/día trabajadas;
de empresas de zonas fran-                                                                e) sufrir el deterioro de las
cas y maquilas que son la                                                                 condiciones de salud física
“nueva palanca para la in-                                                                y mental.
serción de las economías
periféricas en el proceso                                                                     Pero no todo es negati-
de globalización” (Ob. cit:                                                               vo en la coyuntura actual.
27).                                                                                      Algunas estudiosas indican
                                                                                          que en países industria-
    Las diferencias de gé-               Bali, 1949. Foto H. Cartier-Bresson              lizados, las mujeres están
nero tienden a expresarse                                                                 respondiendo con mejor
en forma polarizada entre la capa de    asignación del gasto público, es uno     capacidad de ajuste a los cambios la-
trabajadores altamente calificados y    de los aspectos más claros de la polí-   borales, dada la flexibilidad en jor-
con ingresos elevados, en su mayoría    tica de ajuste estructural. Esta pro-    nadas y organización del tiempo que
hombres, y la periferia creciente de    puesta económica no presta atención      han adquirido en su doble condición
trabajadores no calificados, con em-    explícita a aquellas actividades que     de productoras y reproductoras. Así
pleos inestables en la cual las muje-   se realizan en la esfera social de la    Gardiner (1995) informa que en In-

112    NÓMADAS
glaterra, la desregularización laboral   oposición al trabajo no regulado y no     más en la calle. Este escenario puede
y la inestabilidad en el empleo es vi-   remunerado que ejerce en la esfera        hacer posible una división del traba-
vida mejor por las mujeres, con es-      doméstica, a pesar de sus altos costos    jo flexible que combine tareas en el
trategias más flexibles. Los hombres,    sociales, podría eventualmente re-        ámbito doméstico y responsabilida-
dice la autora: “han sido vencidos       orientar la distribución del trabajo      des laborales en el ámbito público,
más que las mujeres por la cultura de    entre mujeres y hombres. Ellas y ellos    siempre y cuando se acompañe de:
la dependencia de los puestos de tra-    se ven obligados cada día más a tra-      a) estrategias para elevar y expandir
bajo y de las mujeres para que los       bajar con jornadas flexibles, períodos    la conciencia de los desbalances de
atiendan” (Gardiner 1995: 167).          no fijos y sin garantías de seguridad,    género y sus posibles soluciones; b)
                                         por lo cual parcialmente se equipa-       medidas concretas para contabilizar
     Como hipótesis se                                                                       y remunerar el trabajo
plantea, la realidad lo dirá,                                                                realizado en la esfera
que los hombres necesita-                                                                    doméstica.
rán la flexibilidad y auto-
suficiencia que las mujeres
se han visto obligadas a                                                                     Conclusión
desarrollar; ¿este elemen-
to, sumado a la disponibi-                                                                        Tras demostrar la cerca-
lidad de tiempo libre, dada                                                                  na e interdependiente rela-
la flexibilidad del trabajo,                                                                 ción del trabajo doméstico
puede apoyar una mejor                                                                       no remunerado con la di-
distribución de las tareas                                                                   námica de la economía pro-
doméstica entre todos los                                                                    ductiva y su condición de
miembros del hogar?                                                                          fuente de inequidad entre
                                                                                             los géneros, se hace obvio
    El Instituto Families                                                                    que cualquier paradigma de
and Work, de New York,                                                                       desarrollo humano que se
en un estudio nacional de                                                                    pretenda, equitativo y sos-
los cambios en la fuerza                                                                     tenible, debe incluir el
laboral, detectó que los                                                                     tema de modificaciones
hombres han aumentado                                                                        sustantivas al reconoci-
en casi una hora al día su                                                                   miento y tratamiento de la
participación en quehace-                                                                    economía de la reproduc-
res domésticos y que “el                                                                     ción social y el cuidado de
tiempo que las mujeres                                                                       las personas.
casadas que trabajan em-
plean en esas mismas ac-                                                                          Una primera razón
tividades se redujo en                                                                       guarda relación con propó-
media hora” (“¿Qué pasó                                                                      sitos de equidad y derechos
con la famosa guerra de los                    Linotipista. Foto L. W. Hine                  que son ineludibles en el
sexos? The Wall Street                                                                       contexto actual. Reconocer
Journal, Americas, en el Periódico La    ran sus condiciones de relacionarse       y retribuir el trabajo a quien lo reali-
Nación, 20-03-98, Costa Rica).           con la casa y la calle como espacios      za está consignado en todas las cartas
                                         de trabajo. Lo que hace unos años era     y documentos sobre derechos huma-
    La eliminación del trabajo asala-    impensable, hombres pasando media         nos aprobadas a nivel internacional.
riado, estable y ampliamente protec-     jornada en casa o tres meses entre un     Los derechos económicos han pasa-
tor de los individuos, como              trabajo y otro, se ha vuelto una reali-   do a ser considerados derechos cen-
paradigma del trabajo que las perso-     dad que se acompaña con la otra cara      trales tanto en las declaraciones que
nas debían obtener en la vida, en        de las mujeres trabajando cada vez        emergen de la Conferencia de Dere-

                                                                                                         NÓMADAS      113
chos Humanos en Viena (1993)              Acción de la IV Conferencia sobre             Hace cien años, ningún hombre de
como de la Cumbre Social realizada        la Mujer en Beijing (1995), cambios           gobierno se habría atrevido a afirmar
en Copenhague (1995).                     radicales frente al trabajo doméstico         que viviríamos en un mundo en el
                                          no pagado:                                    cual todas las mujeres, los indígenas
    Otra razón se refiere a la necesi-                                                  y las personas de piel negra, votaran
dad de eficacia de las orientaciones          a) de la invisibilidad a la visibilidad   y fueran elegidas. Vivimos en él. Hace
de política económica. Al garantizar             en todas las esferas: encuestas        cincuenta años, era inimaginable una
una adecuada interpretación de la                y censos, sistemas de cuentas          sociedad en la cual las mujeres con-
realidad económica, porque los da-               nacionales, en el lenguaje con         trolaran sus cuerpos y la reproducción
tos están completos y reflejan lo que            la denominación e identifica-          biológica. Esas sociedades se expan-
sucede en lugar de lo que se acostum-            ción correcta de las amas de           den por doquier. Hace solo veinticin-
bra creer, se apoya una más adecuada             casa como trabajadoras, etc.           co años ningún legislador se habría
toma de decisiones, con previsiones           b) en los sistemas de cuentas             atrevido a proponer una modifica-
confiables sobre los efectos de las me-          nacionales, incluyendo: la             ción en los códigos penales respecto
didas macroeconómica que se                      universalidad del registro             a la violencia sexual contra las mu-
adoptan.                                         sistemático en todos los países;       jeres en el hogar y la comunidad, que
                                                 el paso de las cuentas satélites a     dejara de catalogarla como un delito
     Por último y no menos importan-             las cuentas centrales;                 contra el honor para definirla como
te, por razones de sostenibilidad hu-         c) en la sociedad, dar el salto de        un delito contra la persona y castigar
mana. El final del siglo XX ha                   la sustitución a la correspon-         al agresor por ello. Hoy, la mayoría
demostrado el uso irresponsable que              sabilidad. Pasar del trabajo do-       de las legislaciones han cambiado o
la humanidad ha hecho de todos los               méstico pagado a otras                 están en proceso de cambio y los agre-
recursos: agua, aire, bosques, etc. En           mujeres, a la conciencia y res-        sores, aún si son miembros de la fa-
la totalidad de los casos, había un              ponsabilidad de compartir –            milia, pueden ir y en muchos casos
elemento común: la abundancia del                mujeres y hombres– los costos,         van, a la cárcel.
recurso y la presunción de no extin-             la gestión y los beneficios de
ción. Pero la presunción era incorrec-           la economía del cuidado y la                En el tema que nos ocupa, emerge
ta. Algo similar sucede con el trabajo           reproducción social;                   entonces la siguiente inquietud para
doméstico no remunerado de las                d) del voluntariado a la remu-            quienes se ocupan de la teoría y el
mujeres, parece infinitamente elás-              neración: en el gasto público,         diseño de modelos de desarrollo: ¿es
tico, pero pueden haber señales de               identificar y desarrollar meca-        la inequidad de género en la econo-
agotamiento. En condiciones de per-              nismos –directos o indirectos–         mía una de las últimas barreras para
sistencia y ensanchamiento de la                 de remuneración económica              eliminar? Todo parece indicar que sí.
pobreza, como las actuales, se produ-            al trabajo que realizan las mu-        ¿Es ella imposible de sortear?
ce un deterioro progresivo de las con-           jeres en el hogar.
diciones físicas y mentales de las
mujeres en los estratos pobres e              Estos puntos generan polémica y
indigentes, quienes deben enfrentar       en general se enfrentan con argumen-          Bibliografía
la doble carga del trabajo en la calle    tos acerca de la dificultades técnicas
y la casa.                                que entrañarían dichos cambios, lo            ABREU, Alice Rangel De Paiva, “Améri-
                                                                                           ca Latina: Globalización, género y tra-
                                          cual es compresible. Requieren de un             bajo”, en: Todaro, Rosalba; Rodríguez,
     En este contexto, un nuevo pa-       proceso largo y progresivo. Sin em-              Regina (ed.) El trabajo de las mujeres en
radigma de desarrollo que promueva        bargo, no por dificultades técnicas,             el tiempo global, Santiago de Chile,
                                                                                           1995, 222 p.
y aliente la igualdad y la equidad en-    la humanidad ha dejado de realizar
tre los géneros debería inducir, ade-     grandes cambios políticos ante la pre-        ANKER, Richard; HEIN, Catherine, Me-
                                                                                          dición de las actividades económicas de la
más de los derechos fundamentales         sión de las mujeres por sus derechos.           mujer, OIT, Ginebra, 1987.
conquistados por las mujeres en las       Este, como tantos otros grandes cam-
                                                                                        BANCO MUNDIAL, Toward Gender
últimas dos décadas y consignados         bios, responden a decisiones en el              Equality: The role of public policy.
adecuadamente en la Plataforma de         ámbito político y no tecnocrático.              Development in Practice, USA, 1995.

114    NÓMADAS
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