Teoría Insider-Outsider y temporalidad en el mercado de trabajo español1
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Teoría Insider-Outsider y temporalidad en el mercado 1 de trabajo español JESÚS FERREIRO, EVA BEA, M.ª CARMEN GÓMEZ Y M.ª ÁNGELES INTXAUSTI* INTRODUCCIÓN tan explicar la existencia de lo que con fre- cuencia se denomina como equilibrios de no- E l tradicional tratamiento neoclásico vaciado de mercado o cuasi-equilibrios. La del funcionamiento del mercado de teoría insider-outsider es una de estas teorí- trabajo contrasta profundamente as. El presente trabajo, trata de contrastar la con la realidad de dicho mercado. Así, los validez del modelo insider-outsider como mercados de trabajo se caracterizan por la herramienta interpretativa del mercado de permanencia en el tiempo de situaciones de trabajo español, analizando si resultados cla- no-equilibrio, fundamentalmente excesos de ve del funcionamiento del mercado de trabajo oferta, es decir, situaciones de desempleo, en España (existencia de desempleo masivo, compatibles con una rigidez asimétrica de los crecimiento salarial, segmentación laboral, salarios reales (siendo estos rígidos a la baja diferencias salariales entre categorías de tra- pero no al alza). En este sentido, la evolución bajadores, rotación salarial, etc.) pueden ser de los resultados en materia de empleo y des- explicados a la luz de dicho modelo. empleo parece ejercer una mayor presión alcista sobre los salarios cuando el mercado de trabajo registra resultados positivos que a EL MODELO INSIDER-OUTSIDER la inversa. En un mercado de trabajo perfectamente Esta constatación ha llevado al desarrollo competitivo cualquier shock, tanto si tiene su de teorías del mercado de trabajo que inten- origen en el lado de la oferta (un shock tecno- lógico, p.ej.) o de demanda (resultado de un descenso en el nivel de gasto), que aleje al * Departamento de Economía Aplicada V. Universi- mercado del punto de equilibrio es instantá- dad del País Vasco. neamente resuelto por medio de un ajuste de 1 El presente trabajo se inscribe en un proyecto de los precios, es decir, mediante la correspon- investigación financiado por la Bilbao Bizkaia Kutxa en el marco de la «1ª Convocatoria UPV/EHU Cajas BBK, diente variación de los salarios reales. La per- Kutxa y Vital de Ayudas para la Realización de Estudios y fecta flexibilidad de los salarios reales elimi- Proyectos de Investigación». na los potenciales excesos de oferta (redu- REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 31
INFORMES Y ESTUDIOS ciendo los salarios reales) o de demanda (ele- La teoría insider-outsider (Lindbeck y vándolos), situando de manera permanente Snower, 1988; Lindbeck, 1994) estudia las al mercado en un punto de equilibrio o, cuan- razones que explican el establecimiento y do menos, haciendo que tienda hacia este permanencia en el tiempo de salarios reales punto a una velocidad inversamente propor- superiores al nivel de equlibrio (neoclásico). cional a la rigidez de los salarios reales. En La diferencia con respecto a otro tipo de plan- esta situación, el desempleo tiene siempre teamientos como los defendidos en enfoques una naturaleza voluntaria y un carácter de naturaleza neoclásica como la «teoría de la transitorio o temporal. En la medida que la tasa natural», la «teoría de la sustitución respuesta salarial a los desajustes en el mer- intertemporal» o la «teoría del ciclo económi- cado de trabajo sea inmediata, es decir, cuan- co real» (Snower, 1997) radica en que la exis- do la elasticidad del salario real respecto a los tencia de desempleo no es el resultado de cambios en las ofertas y demandas de trabajo decisiones optimizadoras adoptadas por ofe- tienda a infinito, el salario vigente resultará rentes y demandantes de trabajo en un mer- siempre un salario de vaciado de mercado y, cado eficiente (Lindbeck, 1992) tal y como por lo tanto, cualquier trabajador que desee plantean los modelos de inspiración neoclási- trabajar podrá hacerlo al salario de equili- ca. Para la teoría insider-outsider el desem- brio. pleo es involuntario, como resultado de la dis- criminación que sufren los parados en el mer- La existencia de desempleo permanente cado de trabajo y que les impide acceder a un en una economía aparece vinculada a la exis- puesto de trabajo en condiciones similares, tencia de un salario real «excesivo» –enten- principalmente salariales, a las que disfrutan diendo como tal a aquel salario real que supe- los trabajadores en activo (Lindbeck y Sno- ra al salario de equilibrio o de vaciado de mer- wer, 1988). Como resultado, y partiendo de la cado– rígido a la baja. Desde el punto de vista premisa de la naturaleza involuntaria del teórico, cara a analizar las causas explicati- desempleo, el tratamiento de los mercados de vas no tanto del surgimiento sino más bien de trabajo basado en los enfoques de vaciado de la permanencia en el tiempo del desempleo, mercado resultaría de escasa validez inter- resulta clave conocer las razones que expli- pretativa (Lindbeck, 1992). can la rigidez a la baja de los salarios reales, Para la teoría insider-outsider, la clave de esto es, conocer, en primer lugar, porqué el la marginación laboral sufrida por los desem- salario real vigente supera al salario de pleados, y, por lo tanto, la causa última de vaciado de mercado; y, en segundo lugar, por- que el desempleo no se refleje en un descenso qué la existencia de un exceso de oferta no de los salarios reales, se halla en el compor- presiona a la baja al nivel de salarios vigente, tamiento adoptado por los trabajadores ocu- puesto que, en principio, si el desempleo fue- pados en los procesos de fijación salarial. De ra involuntario el bienestar de los trabajado- acuerdo con esta teoría, los trabajadores ocu- res desempleados aumentaría aunque acep- pados (insiders) ejercen un poder de mercado tasen trabajar a un salario inferior al vigente, en los procesos de fijación salarial que les es decir, inferior al salario percibido por los permite elevar sus salarios por encima del trabajadores ya ocupados. Desde el punto de salario de vaciado de mercado (el correspon- vista de la política económica, la resolución diente con su nivel de productividad) sin que del problema del desempleo masivo, si es que ello implique, como ocurriría en un modelo fuera involuntario y/o permanente, exigiría de competencia perfecta, la pérdida de su actuar sobre las causas explicativas de la puesto de trabajo y su sustitución por otro existencia de un salario real excesivo, adop- trabajador cuya remuneración sí se corres- tando aquellas medidas que posibilitaran un ponda con el salario de equilibrio. La existen- descenso en dichos salarios. cia de costes de rotación laboral, entendiendo REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 32
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI como tales los costes derivados de una poten- bajadores ocupados (insiders) y parados (out- cial sustitución de un trabajador ocupado por siders), la cual afecta a los procesos de fijación un trabajador procedente del desempleo, salarial beneficiando a los trabajadores ocu- impide a las empresas (hace que éstas renun- pados en perjuicio de los trabajadores desem- cien a) despedir a trabajadores en activo sus- pleados. El modelo añade una nueva fuente tituyéndolos por otros trabajadores proce- de segmentación al considerar una tercera dentes del desempleo cuya retribución se categoría de trabajadores: los «entrantes», o corresponda con el salario de equilibrio. La sea, trabajadores que, procedentes del des- razón estriba en que aunque los nuevos tra- empleo, acaban de acceder a un puesto de tra- bajadores percibieran salarios inferiores a bajo en una empresa con la perspectiva de los trabajadores a los que sustituyen, los cos- acceder a la situación de insiders, pero cuya tes de rotación laboral (derivados de los cos- actual posición laboral no se asocia con costes tes implícitos en las actividades de contrata- elevados de rotación laboral, lo que resulta en ción, formación y despido; de los costes deri- un menor poder de mercado para los entran- vados de las actividades de cooperación y/u tes en relación con los insiders. Existe así en hostigamiento de los trabajadores insiders las empresas un mercado laboral interno hacia los entrantes; y de los costes derivados dual o segmentado donde coexisten dos tipos de las respuestas de la productividad y de trabajadores: los insiders y los entrantes, esfuerzo de los trabajadores en activo ante siendo éstos últimos los nuevos trabajadores cambios en la seguridad en el empleo) resul- contratados por la empresa. tarían superiores al potencial beneficio deri- El esquema de funcionamiento del merca- vado de la diferencia entre los salarios de do de trabajo sería el representado en la Figu- ambos trabajadores (el nuevo trabajador ra 1. Dentro de las empresas existiría un gru- contratado y el despedido). po de trabajadores protegidos de la amenaza de despido (los insiders) cuyas salarios se La existencia de costes de rotación laboral establecen con cierta independencia de los implica que los procesos de fijación salarial desequilibrios existentes en el mercado de quedan disociados, al menos parcialmente, de trabajo. Fuera de las empresas se encontrarí- la situación general del mercado de trabajo y an los desempleados, quienes no perciben de los potenciales desequilibrios que en él se ingresos salariales 3 , y cuya capacidad de generen2 ya que los trabajadores ocupados negociación y de influencia en los procesos de (insiders) ejercerían el poder de mercado deri- negociación salarial sería nula. Los trabaja- vado de los costes de rotación exclusivamente dores parados entrarían en las empresas ocu- en su propio beneficio, sin considerar los inte- pando la posición de «entrantes», pudiendo reses y el bienestar de los trabajadores desem- algunos de ellos en el futuro acceder a la cate- pleados, cuya situación y bienestar mejorarían goría de insiders. Los flujos normales entre si dispusieran de un puesto de trabajo aunque las empresas y el desempleo serían los refleja- percibieran un salario inferior al de los traba- dos en las flechas: los parados accederían a un jadores previamente ocupados. puesto de trabajo convirtiéndose inicialmente en entrantes; con el paso del tiempo algunos Ahora bien, la teoría insider-outsider no de estos entrantes adquirirían la condición de sólo plantea la existencia de una única seg- insiders. Por otra parte, tanto los insiders mentación en el mercado de trabajo entre tra- como los entrantes pueden perder su puesto de trabajo convirtiéndose en parados. 2 Esta disociación es, no obstante, asimétrica: un exceso de demanda en el mercado de trabajo puede tra- ducirse en una presión alcista sobre los salarios reales, 3 Pudiendo, no obstante, percibir algún tipo de ren- pero, por el contrario, el desempleo no tiene porqué ta sustitutiva de los ingresos salariales, como, por ejem- suponer un descenso en el nivel de salarios reales. plo, un subsidio por desempleo. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 33
INFORMES Y ESTUDIOS Los elevados costes de rotación laboral aís- Como consecuencia de sus menores costes lan, al menos parcialmente, a los trabajado- de rotación laboral, el poder de mercado de res insiders, de la existencia de excesos de los entrantes es inferior al de los insiders aun oferta en el mercado de trabajo, lo que les cuando, sin embargo, sea superior al de los permite fijar sus salarios con relativa inde- parados. El resultado es un mercado de tra- pendencia del número y de la evolución de los bajo segmentado entre trabajadores insiders, desempleados. Al mismo tiempo, de la misma entrantes y desempleados, que posibilita a forma que la probabilidad para un insider de los insiders ejercer su poder de mercado sin perder su puesto de trabajo engrosando el considerar los intereses de los entrantes (con- colectivo de parados es muy pequeña, la pro- vertirse en insiders) y de los parados (conver- babilidad para un parado de convertirse en tirse, al menos inicialmente, en entrantes), lo insider también es pequeña, incluso inferior a que tiene como resultado el que el salario de la anterior. En realidad, el mecanismo nor- un insider supere al salario de un entrante y mal de entrada de los desempleados en las que el salario de un entrante supere al salario empresas es a través de su conversión en de vaciado de mercado. De hecho, en ausencia «entrantes». Para estos trabajadores, los cos- de un salario de reserva (como, por ejemplo, tes de rotación entre entrantes y parados son pueden ser las prestaciones por desempleo) relativamente bajos, inferiores a los costes de podemos suponer que los trabajadores des- rotación entre insiders y parados y entre insi- empleados estarían dispuestos a trabajar por ders y entrantes. En términos de probabilida- un salario similar al de equilibrio. Así, la des esto implica que: diferencia o brecha salarial máxima existen- i) la probabilidad de que un insider se te entre el salario de los entrantes y el salario convierta en parado es inferior a la pro- de equilibrio vendría determinada por los babilidad de que un entrante se con- costes de rotación entre entrantes y parados, vierta en parado: Pi,p < Pe,p; de la misma forma que la diferencia máxima ii) la probabilidad de que un parado se entre el salario de un insider y el de un convierta en entrante es superior a la entrante vendría determinada por los costes probabilidad de que un parado se con- de rotación laboral entre insiders y entran- vierta en insider: Pp,e > Pp,i; tes. iii) la probabilidad de que un entrante se La hipótesis arriba expuesta supone que convierta en insider es inferior a la de los trabajadores entrantes también ejercen convertirse en parado Pe,i > Pe,p. un cierto poder de mercado en relación con los REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 34
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI desempleados. La elevación de los salarios de H: costes marginales de contratación y los primeros en relación con el salario de formación vaciado de mercado vendría explicada por el F: costes marginales de despido, interés inmediato de los entrantes en acceder a la condición de insiders (lo que les permiti- We < Wi ≤ (We + F) ría disponer de mayores salarios y de meno- R ≤ We ≤ (R + H) res probabilidades de perder sus puestos de Introduciendo el grado de utilización del trabajo). La elevación de sus salarios permite poder de mercado o de negociación de los insi- a los entrantes aislarse, al menos parcial- ders (α) y de los entrantes (β),: mente, de la existencia de bolsas de desem- pleados lo que les permite, en primer lugar, We < Wi ≤ α (We + F) obtener, al igual que los insiders, salarios R ≤ We ≤ β (R + H) reales superiores al salario de equilibrio, y, en segundo lugar, elevar sus probabilidades El resultado final es que cuanto más eleva- de acceder a la condición de insiders y, por da sea la movilidad o rotación laboral entre consiguiente, de acceder a mayores ingresos las tres categorías de trabajadores, o sea, salariales en el futuro. Mediante este com- cuanto mayor sea la probabilidad para un portamiento los trabajadores entrantes redu- trabajador perteneciente a una categoría de cen la probabilidad de los parados de conver- pasar a otra, más cercano será el salario real tirse en entrantes (Lindbeck y Snower, 2001). vigente en la economía al salario de vaciado Téngase presente que si partimos de la hipó- de mercado. Por lo tanto, cuanto más bajos tesis de que el poder de mercado de los insi- sean los costes de rotación laboral menor será ders permanece inalterado, cuanta mayor sea la tasa de desempleo en una economía y más la rotación entre parados y entrantes menor sensible será la evolución de los salarios rea- será el salario de los entrantes (y, por exten- les ante la existencia de desequilibrios en el sión, mayor será la brecha salarial entre tra- mercado de trabajo. bajadores insiders y entrantes) y menores serán las probabilidades para un entrante de Como se constata en las dos desigualdades acceder en el futuro a la condición de insider. anteriores, cuanto menores sean los costes de En todo caso, el nivel al cual se sitúen de despido, los cuales suponemos que sólo afec- manera efectiva los salarios de insiders y tan a los trabajadores insiders, más fácil, es entrantes dependerá del efectivo uso del decir, más barato, será sustituir un trabaja- poder de mercado que estos dispongan. Cuan- dor insider por un entrante y, por lo tanto, ta mayor sea la utilización de este poder de menor será la brecha salarial entre trabaja- negociación mayores serán las diferencias dores insiders y entrantes. Por su parte, salariales registradas entre insiders y cuanto más bajos sean los costes de contrata- entrantes, y mayor será la tasa de paro debi- ción y formación, y cuanto más bajo sea el do a la mayor brecha entre el salario de los salario de reserva (la retribución mínima exi- trabajadores ocupados (insiders y entrantes) gida por un desempleado para aceptar un con respecto al de equilibrio. puesto de trabajo, la cual, como ya hemos apuntado, depende de la existencia y nivel de En este sentido, y de acuerdo con lo plan- ingresos alternativos o sustitutivos de los teado por Lindbeck y Snower (1988), si deno- salarios) más fácil será sustituir un trabaja- minamos: dor entrante por un desempleado y, por tanto, Wi: salario de los trabajadores insiders más se acercará el salario de un entrante al We: salario de los trabajadores entrantes salario de reserva. En resumen, cuanto más R: salario de reserva de los trabajadores reducidos sean los costes de despido, los cos- desempleados tes de contratación y formación y el salario de REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 35
INFORMES Y ESTUDIOS reserva, más próximos serán los salarios de del modelo insider-outsider en un mercado de los trabajadores (insiders y entrantes) al trabajo como puede ser el español, debe com- salario de equilibrio y, por lo tanto, menor probarse previamente la coexistencia de será el tamaño del desempleo en una econo- niveles permanentes de desempleo masivo y mía. el mantenimiento, e incluso crecimiento, de los salarios reales4. En efecto, en un mercado El modelo insider-outsider aquí planteado de trabajo perfectamente competitivo la exis- difiere ligeramente del modelo «clásico» al tencia de desempleo implica un descenso de plantear la existencia de un diferencial sala- los salarios reales que conduce al mercado de rial entre los insiders y entrantes. En el trabajo a un punto de equilibrio, es decir, al modelo clásico los entrantes se corresponden pleno empleo. Por lo tanto, partiendo de la con los trabajadores contratados al inicio de previa existencia de desempleo, si se constata un periodo los cuales al mantenerse en sus que se registra un continuo descenso de los puestos de trabajo se convierten en insiders. salarios reales paralelo a un descenso de las En todo caso, los salarios de los entrantes y de tasas de desempleo, la capacidad interpreta- los insiders serían iguales. Esta hipótesis tiva del modelo insider-outsider quedaría contrasta con la realidad de economías como seriamente cuestionada5. puede ser la danesa, la sueca o la española en donde los estudios demuestran que los traba- El Gráfico 1 muestra como este principio jadores entrantes perciben un salario inferior básico del modelo insider-outsider se cumple al de los insiders, manteniéndose, sin embar- en el mercado de trabajo español. La perma- go, una cierta relación entre ambos salarios, nencia de elevadas tasas de desempleo no ha vinculándose el salario de los entrantes al de venido acompañada de un descenso continuo los trabajadores insiders (Ferreiro y Serrano, y sostenido de los salarios reales de los traba- 2001; Gottfries y Sjöstrom, 2000). jadores asalariados6 que hubiera podido lle- EL MERCADO DE TRABAJO EN 4 Suponemos que la persistencia de elevadas tasas ESPAÑA de paro es indicativa de la naturaleza involuntaria del desempleo y que, por lo tanto, la permanencia en el des- empleo no está vinculada a los procesos de búsqueda de Como recoge el modelo insider-outsider, la un puesto de trabajo (por lo que no todo el desempleo existencia de desempleo involuntario es com- existente adquiere la naturaleza de paro friccional) ni a patible con la existencia de salarios reales una decisión optimizadora de los agentes relacionada superiores al salario de vaciado de mercado. con la sustitución intertemporal entre ocio y trabajo. 5 Estamos suponiendo que los costes de rotación La permanencia en el tiempo de desempleo se laboral y que el poder de mercado de los trabajadores explicaría por el mantenimiento de niveles en los procesos de negociación salarial permanecen salariales «excesivos». La causa estriba en inalterados, por lo que la existencia de un exceso de última instancia en el ejercicio por parte de oferta en el mercado de trabajo es el único elemento los trabajadores ocupados (insiders y entran- determinante y explicativo de la evolución de los sala- rios reales. Si se relaja este supuesto la evolución salarial tes) de su poder de mercado (consecuencia de podría venir explicada por los cambios en los costes de los costes de rotación laboral). El ejercicio del rotación laboral y en el poder de mercado de los traba- poder de mercado posibilita que los niveles y jadores, y ello con independencia de las tasas de des- la evolución de los ingresos de los trabajado- empleo existentes, lo que sí vendría a confirmar la vali- res ocupados se disocie, al menos parcialmen- dez del modelo insider-outsider. 6 Los datos sobre el crecimiento real de las ganan- te, de la existencia de situaciones de desequi- cias/mes de los trabajadores asalariados han sido obteni- librio en el mercado de trabajo, más concreta- dos a partir de los datos sobre ganancias/mes recogidos mente, de la existencia de desempleo. Para en la Encuesta Trimestral de Salarios elaborada por el poder hablar de la posible validez explicativa Instituto Nacional de Estadística, deflactando la tasa de REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 36
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI var al mercado de trabajo español a una dencia de la variable empleada (incrementos situación de equilibrio caracterizada por la salariales pactados en convenio o crecimiento inexistencia de desempleo involuntario. Des- de las ganancias mensuales), aceleración que de 1986 (último año de vigencia de las políti- perdura hasta 1993. Este comportamiento cas de rentas) hasta 1993, la evolución sala- salarial vendría a corroborar uno de los plan- rial no reflejó la presión que sobre el creci- teamientos del modelo insider-outsider: la miento de las remuneraciones de los trabaja- asimetría en la respuesta salarial ante la dores asalariados debieran haber ejercido las dinámica de la actividad económica, en gene- elevadas tasas de desempleo. De hecho, desde ral, y del mercado de trabajo, en particular: 1989 la elevación en las tasas de paro vino en épocas de recesión los salarios se mantie- acompañada de una aceleración en el creci- nen inalterados sin disminuir ante los incre- miento de las rentas salariales, con indepen- mentos en el desempleo, mientras que en Fuente: elaboración propia. épocas de expansión el poder negociador de los insiders aumenta lo que les permite obte- ner mayores incrementos en sus salarios (Lindbeck y Snower, 1988). crecimiento nominal de las ganancias/mes por el índice Las conclusiones arriba reseñadas siguen de precios al consumo elaborado por el INE. Los datos del manteniéndose cuando comparamos la evolu- año 2001 se han obtenido utilizando el índice de Costes ción de las retribuciones de los trabajadores Laborales elaborado por el INE. Por su parte, los creci- asalariados con la evolución del número total mientos salariales reales pactados en la negociación colectiva han sido elaborados a partir de los crecimientos de trabajadores asalariados7, como se refleja salariales medios nominales pactados en la negociación colectiva suministrados por el Boletín de Estadísticas Laborales del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales deflactados por el IPC anual. Las tasas de paro son las pro- 7 Datos elaborados a partir de la Encuesta de Pobla- porcionadas por la Encuesta de Población Activa del INE. ción Activa. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 37
INFORMES Y ESTUDIOS en el Gráfico 2. Durante el periodo 1986-1993 que por el contrario, el periodo de expansión se mantuvo la asimetría antes mencionada económica y de elevado crecimiento del en relación con la influencia de los resultados empleo registrado a lo largo del quinquenio del mercado de trabajo sobre la evolución 1986-1990 sí vino acompañado de un fuerte salarial: la crisis del trienio 1991-1993 ape- crecimiento salarial. nas afectó al crecimiento salarial, mientras Fuente: elaboración propia. Debe destacarse las excepciones que a este lizada o descentralizada (Calmfors y Drifill, comportamiento salarial representan los 1988) permite plantear como hipótesis que la periodos anteriores a 1986 y posteriores a validez de los modelos insider-outsider está 1994. Hasta 1986, los procesos de determina- condicionada por la estructura vigente de ción salarial en la economía española estuvie- negociación colectiva, de tal forma que el ron basados en una política de rentas consen- modelo insider-outsider tendría mayor signi- suada entre sindicatos, organizaciones ficado en aquellas economías donde predomi- empresariales y gobierno. De esta forma, el nan estructuras intermedias de negociación grado de centralización de la negociación colectiva, tal y como ocurre en la economía colectiva resultó muy alto (Revenga, 1994), lo española a partir de 1986 (Dolado y Jimeno, que permitió un crecimiento salarial compa- 1995; Milner, 1995; Toharia, 1998). Esta tible con la necesidad de reducir paulatina- hipótesis concuerda con los planteamientos mente las elevadas tasas de desempleo e defendidos por Flanagan (1999) para quien inflación por entonces registradas. En este las estructuras centralizadas de negociación sentido, la interiorización que se supone que colectiva permitieron que los procesos de fija- los trabajadores y sus organizaciones sindica- ción salarial reflejaran tanto la situación eco- les representantes hacen de los efectos exter- nómica general como la concreta situación del nos de los resultados de la negociación colec- mercado de trabajo, posibilitando un ajuste tiva cuando ésta está completamente centra- vía precios del exceso de oferta en él existen- REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 38
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI te, al menos hasta mediados de los ochenta. mas laborales aprobadas en los años 1994 y En otros términos, el que las organizaciones 1997, las cuales tuvieron como efecto directo sindicales recojan en mayor o menor medida el reducir el poder negociador de los trabaja- los intereses de los insiders (entendiendo dores trabajadores a jornada completa con como tales a los asalariados en general) o de contratos indefinidos (Ferreiro y Serrano, los outsiders (desempleados) parece estar 2001). Ambas reformas adoptaron medidas directamente relacionado con la estructura con el objetivo de reducir los costes de rota- de la negociación colectiva: en estructuras ción laboral y reducir el poder de negociación centralizadas de negociación colectiva los sin- de los trabajadores con contrato indefinido. dicatos tendrían como objetivo incrementos Así, se adoptaron múltiples medidas de salariales compatibles con el incremento en diversa naturaleza, entre las que destacan8: el nivel de empleo mientras que en una el estímulo a la movilidad geográfica y funcio- estructura intermedia de negociación colecti- nal; la existencia de cláusulas de descuelgue va el único objetivo sería la maximización de en la negociación colectiva; la eliminación de los incrementos salariales. la ultraactividad de los convenios colectivos Por otra parte, a partir de 1994 la modera- vencidos; el estímulo concedido al componen- ción registrada en los incrementos reales de te variable de los salarios; la sustitución de los salarios reflejaría las consecuencias sobre las Ordenanzas Laborales y Reglamentacio- la evolución salarial derivadas de las refor- nes de Trabajo por disposiciones emanadas Fuente: elaboración propia. 8 Para un análisis más detallado del contenido de las reformas laborales de los años 1984, 1994 y 1997, véa- se Consejo Económico y Social (1995, 1996, 1998), F ERREIRO Y S ERRANO (2001) y R OJO (1998). REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 39
INFORMES Y ESTUDIOS de la negociación colectiva; la reducción de todos los años10. Céteris paribus, el descenso las indemnizaciones por despido como resul- acumulado en el valor real del SMI debiera tado de la clarificación de los criterios para haber conducido a una sostenida disminución definir un despido como objetivo y de las en las tasas de paro y a un continuo creci- menores indemnizaciones incorporadas al miento en las cifras de trabajadores asalaria- nuevo contrato indefinido creado en 1993; la dos, lo que está lejos de haberse producido, subvención a la contratación indefinida, etc9. como muestra el hecho de que la tasa de paro A estas medidas se habrían unido las refor- en 1999 era la misma que en 1982 a pesar del mas en el sistema de protección contra el des- descenso acumulado en un 14,3% en el SMI empleo aprobadas en los años 1992 y 1993 medido en términos reales. Por lo tanto, pode- que implicaron un endurecimiento en las con- mos descartar al salario mínimo interprofe- diciones de acceso a las prestaciones contri- sional como causa explicativa de la evolución butivas y asistenciales y una reducción en la del empleo asalariado y del desempleo en el mercado de trabajo español. cuantía de ambos tipos de prestaciones (Con- sejo Económico y Social, 1994 y 1995; Toha- Ahora bien, el modelo insider-outsider no ria, 1998). sólo distingue entre trabajadores ocupados y trabajadores parados. Como tuvimos ocasión Como señalan Lindbeck y Snower (2001), de exponer, introduce una nueva categoría una de las razones por las cuales el desem- analítica: la de los entrantes, entendiendo pleo no se traduce en una presión a la baja en como tales aquellos trabajadores que entran los salarios de los trabajadores ocupados es la a formar parte de la plantilla de las empresas existencia de un salario mínimo superior al procedentes de las filas del desempleo. En el salario de vaciado de mercado. Sin embargo, caso del mercado de trabajo español en abso- como se refleja en el Gráfico 3, la incidencia luto resulta descabellado plantear que la de los salarios mínimos parece ser mínima categoría de entrantes se corresponde con los sobre los resultados del mercado de trabajo. trabajadores con contrato temporal, como así Como se observa en el gráfico, desde 1982, reconoce el propio Lindbeck: «De hecho, en con las únicas excepciones de los años 1990, las sociedades en las que la legislación ofrece 1991, 1997 y 1998, el salario mínimo inter- a los trabajadores ocupados una seguridad de profesional para los trabajadores mayores de empleo especialmente buena, también cabe 18 años ha descendido en términos reales esperar que surja un mercado de trabajo secundario dentro de las empresas que pro- ducen en el sector primario de la economía. 9 La reforma aprobada en el año 2001 (RDL 5/2001, Más concretamente, cabe pensar que los de 2 de marzo) insiste en los criterios apuntados en la empresarios sólo recurren a los trabajadores reforma de 1997 al extender la figura de la contratación temporales –es decir, a los que tienen un con- indefinida creada en 1997 (con un menor coste de des- trato laboral (o un acuerdo informal)– duran- pido) a colectivos adicionales de trabajadores. Sin te un tiempo limitado (fijo). Este recurso se embargo, también introduce una indemnización en la ha utilizado, de hecho, recientemente a gran extinción de los contratos temporales. Los efectos sobre los salarios de esta reforma son inciertos. La brecha sala- escala en países tan distintos en otros aspec- rial entre trabajadores indefinidos y temporales debería reducirse tanto por el efecto generado a la baja sobre los salarios de los trabajadores indefinidos como por el efec- 10 Los datos sobre el salario mínimo interprofesional to alcista ejercido sobre los salarios de los trabajadores (SMI) para los trabajadores mayores de 18 años se han temporales. Sin embargo, la situación de estos trabaja- obtenido del Boletín de Estadísticas Laborales del Minis- dores mejoraría a expensas de los parados a no ser que terio de Trabajo y Asuntos Sociales, restándose de las se moderasen las demandas salariales de los trabajado- tasas de crecimiento del SMI las tasas de inflación medi- res temporales. das por el índice de precios al consumo. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 40
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI tos como España y Suecia, probablemente tos temporales. A partir de ese momento, el como consecuencia de la enorme seguridad de peso de los trabajadores temporales registra empleo de que disfrutan los trabajadores un lento aunque sostenido descenso, proceso ordinarios» (Lindbeck, 1994, p. 52). que se acelera, al menos en el caso del sector privado, tras la reforma de 1997, cuyo objeti- La segmentación planteada en el mercado vo principal fue, precisamente, reducir la español entre trabajadores con contrato tem- temporalidad en la economía española12. poral y trabajadores con contrato indefinido Este mercado de trabajo segmentado ha se refleja en el gráfico 411. La utilización de funcionado como compartimentos estancos, al los contratos temporales en puestos de traba- menos hasta finales de la década de los noven- jo de naturaleza permanente, autorizada a ta. Como refleja el Gráfico 5, elaborado a par- partir de la reforma laboral del año 1984, ha tir de los datos proporcionados por la EPA, el supuesto que un elevado porcentaje de traba- crecimiento del empleo asalariado registrado jadores disponga de este tipo de contratos con desde 1985 hasta 1992 vino acompañado de independencia de la naturaleza temporal o un aumento en los asalariados temporales y permanente de sus puestos de trabajo. El de un paralelo descenso de los asalariados peso máximo de estos contratos se alcanzó en indefinidos (los cuales siguen disminuyendo 1995 cuando el 34,8% del total de asalariados hasta 1994). Los trabajadores con contrato en el conjunto de la economía y el 40,7% en el temporal han asumido el rol de «entrantes» sector privado eran trabajadores con contra- que plantea el modelo insider-outsider. Fuente: elaboración propia. 11 Los datos recogidos en el Gráfico 4 muestran el porcentaje que suponen en ambos casos los asalariados con contrato temporal en relación con el total de asala- 12 Sobre las motivaciones y efectos de las reformas riados. Los datos proceden de la Encuesta de Población laborales en España y, concretamente, sobre la reforma Activa elaborada por el INE. del año 1997, véase F ERREIRO Y S ERRANO (2001). REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 41
INFORMES Y ESTUDIOS Fuente: elaboración propia. Como ya comentamos, para el modelo insi- diferencial salarial existente entre estos dos der-outsider las probabilidades de un traba- tipos de trabajadores. Esta sustitución se jador insider de convertirse en un desemplea- debería haber acelerado en el periodo 1992- do son menores que las probabilidades para 95, en donde la brecha salarial se amplía, un entrante de pasar a ser un desempleado. como ya veremos. De acuerdo con los planteamientos del mode- lo la existencia de altos costes de rotación Sin embargo, el análisis de los datos de la laboral debiera haber estabilizado el empleo evolución de los desempleados y de los traba- de los trabajadores insiders, lo que no ocurrió jadores asalariados con contrato indefinido en el mercado de trabajo español, donde los parecen descartar esta hipótesis, y de hecho trabajadores indefinidos disminuyeron hasta la protección de los trabajadores indefinidos 1994. En principio cabría suponer que la dis- en el mercado de trabajo español ante la ame- minución en el número de trabajadores inde- naza del desempleo ha sido sustancialmente finidos se hubiera debido a un proceso de sus- mayor que la disfrutada por otros colectivos. titución activa de trabajadores indefinidos El Gráfico 6 muestra las cifras de desem- por temporales, es decir, a un proceso de des- pleados que habían trabajado con anteriori- pido de trabajadores indefinidos y de sustitu- dad, mostrando, además, los trabajadores ción por trabajadores temporales. Este proce- que estaban en desempleo como resultado de so se habría generado porque los costes de un despido o suspensión por regulación y los rotación laboral derivados del reemplazo de trabajadores en paro como resultado de la un trabajador indefinido por uno temporal finalización de sus contratos temporales. Si habrían sido más que compensados por el suponemos de manera simplificadora que los REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 42
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI Fuente: elaboración propia. trabajadores despedidos son trabajadores con 1992 y 1994 el número de parados cuya causa contrato indefinido, se observa claramente el era el despido aumentó en 129.900 personas, escaso peso dentro de la población desemple- mientras que los parados cuya causa era la ada de los trabajadores indefinidos, incluso finalización de un contrato temporal no esta- durante la crisis de principios de los noventa: cional aumentaron en 387.600 trabajadores. mientras que el total de parados que habían Las empresas optaron por reducir el empleo trabajado con anterioridad aumentó entre indefinido una vez efectuado el ajuste en la 1990 y 1994 en 1.266.800 personas, los traba- plantilla de trabajadores temporales. jadores que entran en el paro como resultado de la extinción de contratos aumentan en ese En el caso del mercado de trabajo español mismo periodo en 746.600, pero los parados los costes de despido están directamente rela- cuya causa es el despido tan sólo aumentan cionados con la antigüedad del trabajador en en 160.600 personas. la empresa: aunque con límites, a igualdad de salario, cuanto mayor es la permanencia en el Es destacable comprobar, como ya recogen empleo mayor es el coste de despido. De otros estudios, que en épocas de recesión son acuerdo con los planteamientos del modelo los trabajadores temporales la principal insider-outsider, por lo tanto, a mayor anti- variable de ajuste de las plantillas (Estrada y güedad en el empleo mayor protección frente otros, 2002), lo que quedó patente en el Gráfi- al desempleo (Lindbeck y Snower, 2001). co 5. Entre 1990 y 1992, mientras que el número de parados cuya causa era el despido La Tabla 1 recoge la distribución de los aumentó en 30.700 personas, los parados parados despedidos en función de la antigüe- cuya causa era la finalización de un contrato dad en el último empleo, así como la distribu- temporal no estacional aumentaron en ción de los asalariados indefinidos de acuerdo 386.650 trabajadores. Solamente a partir de con la antigüedad en el empleo. Para analizar 1993 se produce un aumento notable en las los datos de la Tabla 1 suponemos que los cifras de despidos de tal suerte que entre parados despedidos disponían de un empleo REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 43
INFORMES Y ESTUDIOS indefinido, siendo estos trabajadores los que la crisis de principios de los noventa, en don- son objeto de despido o de expediente de regu- de en el trienio 1992-1994 se produce una lación, lo que implica suponer que los trabaja- fuerte destrucción de empleo asalariado, dores temporales pasan al paro al extinguirse incluido el indefinido, las plantillas de traba- o no ser renovado su contrato temporal13. jadores indefinidos se envejece, signo de que son los trabajadores indefinidos más anti- Destacan el elevado peso dentro del colec- guos los que pierden su empleo. Así entre tivo de parados despedidos de los trabajado- 1991 y 1994 la cifra de trabajadores indefini- res que habían permanecido en el puesto de trabajo previo durante un periodo inferior a 3 dos con duración en el empleo superior a 6 años así como el bajo porcentaje de los para- años desciende en 194.900 trabajadores (un dos despedidos que habían permanecido en descenso del –4.51%), mientras que los traba- su empleo anterior por un periodo superior a jadores indefinidos con duración entre 3 y 6 6 años, siempre en términos relativos, es años caen en 105.900 personas (-9.41%), y los decir comparando estos colectivos con la anti- asalariados indefinidos con una antigüedad güedad de los asalariados con contrato indefi- inferior a 3 años descienden en 327.400 per- nido. De hecho, se comprueba cómo durante sonas (-28.16%). TABLA 1. ANTIGÜEDAD EN EL EMPLEO DE ASALARIADOS CON CONTRATO INDEFINIDO Y DE PARADOS DESPEDIDOS (%) Fuente: elaboración propia. 13 Datos procedentes de la EPA. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 44
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI Esta mayor protección de los trabajadores dada es mayor que el porcentaje de asalaria- indefinidos más antiguos frente a la amenaza dos indefinidos con esa misma antigüedad, y del desempleo se muestra más claramente en viceversa. la Tabla 2, donde se mide la intensidad en el despido de los parados con una antigüedad x Vemos como los trabajadores indefinidos en su último empleo, el ratio entre el porcen- más afectados por el desempleo han sido en taje de parados despedidos con una antigüe- todo momento los asalariados indefinidos dad dada (x) en su último empleo entre el más recientes, los cuales no sólo están más total de parados despedidos y el porcentaje de afectados por los despidos más intensamente, asalariados indefinidos con una antigüedad sino que también fueron los más afectados (x) entre el total de indefinidos. Un ratio por la crisis de principios de los noventa, superior a la unidad supone que el porcentaje como se refleja en la elevación de su ratio de parados despedidos con una antigüedad correspondiente a los años 1991 a 1993. TABLA 2. INTENSIDAD EN EL DESPIDO DE LOS PARADOS Fuente: elaboración propia. Lo anteriormente afirmado concuerda con años14. Como ya señalamos, la evolución de los datos reflejados en el Gráfico 7. En este las cifras de asalariados sigue un patrón cla- gráfico se representan las tasas anuales de ramente cíclico. En el caso del total de asala- crecimiento del total de asalariados, de los riados indefinidos, este colectivo disminuye asalariados con contratos indefinidos, de los de manera continua hasta 1995, creciendo asalariados con contrato indefinido cuyo desde entonces. Sin embargo, este comporta- empleo actual tiene una duración superior a 3 años e inferior a 6 años y, finalmente, de los asalariados con contrato indefinido cuyo 14 Datos elaborados a partir de la Encuesta de Pobla- empleo actual tiene una duración superior a 6 ción Activa del INE. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 45
INFORMES Y ESTUDIOS Fuente: elaboración propia. miento no se reproduce en el caso de los tra- cifras del desempleo a través de una salida bajadores asalariados con mayor antigüedad traumática vía despidos. De esta forma, la en su puesto de trabajo, principalmente en el sustitución de trabajadores indefinidos por caso de los asalariados indefinidos con una temporales se debería a causas vegetativas antigüedad superior a 6 años, a los cuales se vinculados al rejuvenecimiento «natural» de les puede calificar de manera más apropiada las plantillas de las empresas: así durante el como insiders. Su evolución es muy estable y, periodo 1987-1994 mientras que el número de hecho resultan ser el colectivo menos afec- de trabajadores indefinidos con antigüedad tado no sólo por la destrucción de empleo superior a 6 años disminuyó en 262.900 per- indefinido que dura hasta 1994 sino también sonas (al pasar de 4.390.400 a 4.127.500), los por la crisis del periodo 1991-93, lo que da parados despedidos con una antigüedad en el buena muestra de la mayor protección de empleo anterior superior a 6 años tan sólo estos trabajadores frente al problema del des- aumentaron en 26.200 (de 132.800 pasaron a empleo. 159.000). Por lo tanto, la sustitución entre trabaja- Igualmente, como consecuencia de los dife- dores indefinidos y temporales ha sido pasi- rentes costes de rotación laboral, una de las va. La disminución en las cifras de asalaria- características esenciales del modelo insider- dos indefinidos de elevada antigüedad parece outsider es la escasa rotación entre los colec- haber seguido un curso natural, más produci- tivos de trabajadores insiders-indefinidos y do por la salida de los trabajadores de mayor entrantes-temporales, así como la elevada antigüedad del mercado de trabajo (a través rotación entre entrantes (movilidad entre de su jubilación) que por pasar a engrosar las trabajadores temporales y parados). La Tabla REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 46
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI 3 es buena muestra de ello, conteniendo cifras que se acompañan de los datos sobre información sobre los contratos registrados asalariados temporales e indefinidos, de en España en el periodo 1996-2001 de acuer- acuerdo con los datos proporcionados por el do con los datos proporcionados por el INEM, INE en la EPA. TABLA 3. CONTRATOS LABORALES FIRMADOS EN ESPAÑA Fuente: INEM e INE Simplificando, si sumamos el total de con- cual introduce una nueva modalidad contrac- tratos temporales y las prórrogas de los mis- tual de carácter indefinido dirigida a los tra- mos (como si éstas supusieran la firma de un bajadores desempleados16. Calculando esta nuevo contrato), vemos como cada asalariado probabilidad como el porcentaje de este tipo temporal habría firmado 3,44 contratos tem- de contratos firmados en el año t respecto al porales en 1996, 3,85 contratos en 1997, 4,19 número de desempleados del año t-1, la pro- contratos en 1998, 3,91 contratos en 1999, babilidad de que un parado se convirtiese en 3,70 contratos en el año 2000 y 3,59 contratos un trabajador indefinido era del 3,45% en en 2001. Estas cifras muestran la existencia 1997, 9,37% en 1998, 11,95% en 1999, el de una elevada rotación entre parados y asa- 15,49% en 2000 y el 10,20% en 2001. No tene- lariados temporales. Por otra parte, la proba- mos que olvidar, en cualquier caso, que los bilidad de que un trabajador temporal obten- parados que acceden a un puesto de trabajo ga un puesto de trabajo indefinido es baja: si resultan ser parados con experiencia laboral, calculamos esta probabilidad como el porcen- es decir, parados que previamente han dis- taje de los contratos temporales convertidos frutado de contratos temporales, por lo que en indefinidos en el año t respecto al total de esta probabilidad de acceder a un empleo asalariados temporales en t-1, estas cifras indefinido puede atribuirse en la práctica a suponen el 0,81% en 1996, el 8,73% en 1997, los trabajadores temporales. el 9,24% en 1998, el 11,64% en 1999, el 5,81% en el año 2000 y el 12,02% en 2001. En cualquier caso, teniendo en cuenta que la reforma de 1997 supuso la aceptación de Esta probabilidad puede ser comparada unos menores costes de despido para los tra- con la probabilidad de un desempleado de bajadores acogidos a la nueva modalidad de convertirse en un trabajador indefinido. Para contrato indefinido, el crecimiento en el ello, como variable aproximativa utilizamos empleo indefinido (y la consiguiente reduc- los datos relativos a los contratos indefinidos ción de la tasa de temporalidad) guarda una resultantes de la reforma laboral de 199715, la 15 Implícitamente suponemos que los contratos 16 Estos contratos supusieron la firma de 126.308 indefinidos ordinarios se dirigen a trabajadores que ya contratos indefinidos en 1997, 325.295 en 1998, disfrutaban de un contrato indefinido en otra empresa. 379.691 en 1999, 421.726 en 2000 y 253.578 en 2001. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 47
INFORMES Y ESTUDIOS evidente relación con la reducción de los cos- de acuerdo con las encuestas sobre distribu- tes de rotación laboral entre trabajadores ción y estructura salarial elaboradas por el indefinidos y temporales, facilitando a los Instituto Nacional de Estadística para los mismos su conversión en indefinidos-insi- años 1988, 1992 y 1995, en el año 1988 las ders17 (Ferreiro y Serrano, 2001). ganancias de un trabajador con contrato tem- La segmentación en el mercado de trabajo poral ascendían al 57,68% de las ganancias que acabamos de describir tiene su inmediato de un trabajador con contrato indefinido; esa reflejo en la brecha salarial existente entre brecha salarial pasó a ser el 59,4% en 1992 y ambos colectivos. Como muestra la Tabla 4, el 44,77% en 1995 (INE, 1992, 1995 y 1997). TABLA 4. GANANCIAS POR TRABAJADOR (miles de pesetas/año) Fuente: INE (1992, 1995, 1997). La existencia de este diferencial confirma un aumento en el diferencial de ganancias: los planteamientos del modelo insider-outsi- mientras que el crecimiento acumulado en der en lo que se refiere a las diferencias sala- términos reales de las ganancias de un traba- riales entre categorías de trabajadores. jador indefinido fue en el periodo 1988-1995 Igualmente, la evolución del diferencial de de un 23,2%, ese crecimiento fue negativo ganancias entre ambos colectivos de trabaja- para los trabajadores temporales: un –4,3%. dores es coherente con los postulados de la La escasa rotación entre trabajadores tempo- teoría insider-outsider. El aumento en las rales e indefinidos registrada hasta la refor- tasas de temporalidad, explicado tanto por el ma laboral del año 1997 habría permitido a descenso en el número de trabajadores indefi- los últimos mantener e incluso aumentar su nidos como por el incremento en el número de poder de mercado, consiguiendo crecimientos trabajadores temporales, se ha traducido en salariales reales positivos con independencia tanto del exceso de oferta registrado en el mercado de trabajo (los niveles de desempleo) como del proceso continuo de destrucción de 17 La anterior hipótesis de que eran los desemplea- dos con experiencia laboral previa (adquirida mediante empleo asalariado indefinido, tal y como pue- contratos temporales) los más beneficiados por el con- de comprobarse a partir de los datos refleja- trato indefinido de la reforma del año 97 lo corrobora el dos en los gráficos 1 y 2 relativos a los incre- hecho de que los contratos de este tipo han ido dismi- mentos salariales reales pactados en conve- nuyendo hasta alcanzar en el año 2001 la cifra de nio18. Por el contrario, los trabajadores tem- 253.578 contratos firmados de esta categoría. Por el porales sí se habrían visto influidos por la contrario, en el 2001 han aumentado las conversiones de contratos temporales en indefinido hasta las 472.600 situación del mercado de trabajo, sobre todo conversiones. De esta forma, la probabilidad, de acuer- do con las definiciones anteriores de que un parado se convirtiese en indefinido bajaron hasta el 10,20%, mientras que las probabilidades de un trabajador tem- 18 Los cuales vendrían teóricamente explicados por poral de convertirse en indefinido aumentaron hasta el el poder de mercado de los trabajadores ocupados, fun- 12,02%. damentalmente de los insiders. REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 48
JESÚS FERREIRO, EVA BEA, Mª CARMEN GÓMEZ y Mª ÁNGELES INTXAUSTI durante el periodo 1992-1995, durante el cual tras que las ganancias reales de los trabaja- se produce una fuerte destrucción de empleo dores temporales disminuyen en un 22%. asalariado temporal, que alcanza el 11,5% del empleo asalariado temporal existente en Este comportamiento de los salarios de los 1991. Su menor poder de mercado, derivado trabajadores temporales e indefinidos refleja tanto de sus bajos costes de rotación laboral el efecto negociación que la evolución de la (debido a la no existencia de costes por la ter- tasa de temporalidad ejerce sobre la brecha minación de sus contratos) como de la presión salarial entre ambos colectivos (Dolado y combinada ejercida por el desempleo y por la Bentolila, 1993; Jimeno y Toharia, 1993; destrucción de empleo temporal explican Bentolila y Dolado, 1994). La reducción del estos resultados. En efecto, entre 1988 y número de insiders y la concentración de los 1992, años en los que se produce un intenso mismos en los puestos de mayor productivi- crecimiento del empleo asalariado, el creci- dad (Alba-Ramírez y Alonso-Borrego, 1997; miento real de las ganancias de ambas cate- Serrano y otros, 1998), fenómeno acelerado gorías de trabajadores es similar: 19,1% para durante la crisis de principios de los noventa, los trabajadores indefinidos y 22,6% para los habría elevado el poder negociador de los tra- trabajadores temporales. Sin embargo, la bajadores indefinidos permitiendo obtener evolución se altera entre 1992 y 1995: las un crecimiento salarial positivo en términos ganancias de los trabajadores indefinidos reales que habría ampliado la brecha salarial aumentan un 3,5% en términos reales, mien- con respecto a los trabajadores temporales. TABLA 5. GANANCIAS DE ASALARIADOS TEMPORALES, INDEFINIDOS Y PARADOS (miles de pesetas/año) Fuente: Elaboración propia La relación entre el comportamiento sala- ingresos existente entre las tres categorías de rial de los trabajadores temporales e indefini- trabajadores estudiadas, corroborando el dos se reproduce cuando introducimos los modelo insider-outsider. Además, se com- ingresos de los trabajadores en situación de prueba como la crisis de principios de la déca- desempleo: Estos ingresos, los cuales pueden da de los noventa supone un reforzamiento de ser considerados como el salario de reserva de las posiciones de los trabajadores indefinidos los desempleados, se recogen en la columna 4 tanto en relación a los trabajadores tempora- de la Tabla 5. Estos ingresos los hemos calcu- les como frente a los desempleados. lado a partir de los datos correspondientes a las prestaciones por desempleo (en cuota bru- El modelo insider-outsider plantea, como ta) de nivel contributiva abonadas por el ya señalamos, que un descenso del salario de INEM 19 . Comprobamos la diferencia de taciones contributivas por desempleo en pesetas/día 19 Las prestaciones en términos anuales las hemos (Fuente: Anuario de Estadísticas Laborales y de Asuntos calculado multiplicando por 365 el importe de las pres- Sociales del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales). REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 51 49
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