LOS NUEVOS CENTROS PÚBLICOS NO UNIVERSITARIOS DE INVESTIGACIÓN: EL PROGRAMA IMDEA
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LOS NUEVOS CENTROS PÚBLICOS NO UNIVERSITARIOS
DE INVESTIGACIÓN: EL PROGRAMA IMDEA
Alfonso GONZÁLEZ HERMOSO DE MENDOZA
Universidad Complutense de Madrid
Resumen Abstract
La falta de legitimidad en el Gobierno de los responsables de la The lack of legitimacy in the government of those responsible for
política científica en algunas ocasiones, en otras la falta de criterio o scientific policy on some occasions, the lack of criterion on others, or
una mezcla de ambas, ha hecho que en las últimas décadas la política a mixture of both, has meant that in recent decades scientific policy
científica haya estado caracterizada por su irrelevancia. Las institucio- has been characterized by its irrelevance. Scientific institutions require
nes científicas requieren de una regulación homologable internacio- internationally homologated regulation and stable and adequate
nalmente y de una financiación estable y adecuada. De igual modo, funding. It also remains urgent to build a framework of national
sigue siendo urgente construir un marco de prioridades nacionales priorities that links science to social, cultural and economic demands.
que vincule la ciencia a las demandas sociales, culturales y económicas. However, this situation has not been an obstacle promoting successful
Sin embargo, esta situación no ha sido obstáculo para que se hayan initiatives, both by the Regional Administrations and by the Central
promovido iniciativas que han resultado exitosas, tanto por parte de Administration, as is the case of the IMDEA program.
las administraciones autonómicas como por parte de la Administración
General del Estado (AGE), como es el caso del programa IMDEA. Keywords: science, research, IMDEA, technology, innovation.
Palabras clave: ciencia, investigación, IMDEA, tecnología, innovación. JEL classification: O31, O32, O38.
«Ya el venturoso tiempo está cercano Sin embargo, las instituciones públicas se han
en que los buenos españoles vean mostrado incapaces de propiciar un debate relativo
que, de esta filosófica oficina, a las expectativas que, en tanto que sociedad, pro-
el amor de las ciencias se difunde, yectamos en la ciencia y, en consecuencia, sobre
y en la nación rápidamente cunde». cómo debemos organizar y dotar al sistema nacio-
nal de ciencia y tecnología. La comprensión de la
(Tomás de Iriarte. Epistolario a Dalmiro.
ciencia como un proyecto colectivo, que nos une y
Acerca del Real Gabinete de Historia Natural. 1774).
nos hace crecer como comunidad, es ante todo una
propuesta de valores dirigida a la construcción de la
«Una ciencia rigurosa y viva es un requisito
equidad y la convivencialidad, por más que con fre-
esencial en sociedades democráticas en el mundo
cuencia pueda aparecer revestida de solucionismo
abierto y global en el que vivimos y en las que la
tecnológico o desarrollismo. La política científica
reflexión científica es imprescindible para afrontar
es un programa de país que supone enfrentarse a
los retos que tienen ante él».
una transformación cultural, administrativa y pro-
(Pere Puigomenech. ductiva. La recomendada lectura del denominado
Por qué y cómo se hace la ciencia. 2021). «Pacto por la ciencia» (1), de 8 de marzo del año
2021, promovido por el grupo de comunicación
I. INTRODUCCIÓN Atresmedia y el Ministerio de Ciencia e Innovación,
al que se han adherido múltiples actores del siste-
L
A irrelevancia puede que sea la consideración ma, invita a una triste reflexión sobre la ambición
que mejor defina el papel de la política cien- que reserva nuestro país al futuro de la ciencia, pese
tífica en las últimas décadas en España. Esta a que en la situación en que nos ha situado la crisis
situación es compatible, incluso complementaria, de la COVID-19 parece más necesario que nunca
con decisiones de alto valor simbólico como son reivindicar una propuesta transformadora.
la creación de ministerios con competencias ex-
clusivas en la materia, liderados por profesionales La visión actual de la ciencia, en nuestro país,
de prestigio, o la aprobación de leyes nacionales y está despojada de los elementos ideológicos que
autonómicas fruto de amplios consensos. pudo tener la impulsada por Ramón Menéndez
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Pelayo, o las dudas esencialistas sobre el «ser de logro de consolidar una comunidad de investigado-
España» recogidas por Pedro Laín Entralgo. España res públicos cimentada alrededor de las prácticas in-
es un actor global y exitoso, semejable en su cultu- ternacionales, y eficiente en la gestión de los recur-
ra, economía y bienestar a los países de su entorno, sos públicos. En 1986, en paralelo al impulso que
en los que respetando los distintos matices, la polí- supuso la incorporación de España a la Comunidad
tica científica no solo se configura como encuentro Económica Europea, para la consolidación de la
más allá de los debates partidistas, sino que cons- democracia y la economía de mercado, la Ley
tituye el motor de su competitividad y bienestar. de la Ciencia se propuso promover el tercer pilar de
La debilidad de la política científica en nuestro país la prosperidad de los países occidentales: el cono-
hay que encontrarla en razones exclusivamente de cimiento científico y el respeto de los valores de la
oportunidad y competencia. ciencia como soporte de la convivencia.
La necesidad de una política científica se reivin- Treinta y cinco años después, las contradicciones
dica tanto desde la ciencia política («una sociedad se acumulan en el sistema nacional de ciencia y tec-
donde solo la ciencia es considerada como la ver- nología, y las instituciones científicas dan muestras
dad, el conflicto de intereses económicos y políticos de fatiga a la espera de la homologación interna-
tiene que asumir la característica del discurso cien- cional de las condiciones en las que desarrollan su
tífico» señala Ulrick Beck), como desde la ciencia actividad. El bucle de diagnósticos y recomendacio-
económica. Incluso desde las posiciones menos nes en el que se halla inmerso el sistema nacional
inclinadas a la intervención pública, como las de de ciencia (basta con referirse al Informe anual de
Milton Friedman, se acepta una política científica la Fundación COTEC) (4), así como la progresiva
que dé apoyo a la competitividad de las empresas pérdida de competitividad de nuestra industria
nacionales. La financiación pública de la investiga- de la investigación, al igual que la falta de mate-
ción básica constituye el soporte de la política in- rialización de los extenuantes ejercicios de diseño
dustrial en los países desarrollados, convirtiéndose estratégico a los que se ha sometido a los centros
en una constante demanda empresarial. El Comité de investigación, hace pensar que la confianza en el
de Desarrollo Económico de EE. UU., asociación de futuro del sistema de ciencia y tecnología depende
la que forman parte las principales empresas del más del optimismo que de la esperanza.
país, afirma en el informe, La prosperidad por
medio de la investigación (2), publicado en el año Sin embargo, en nuestro país se dan circuns-
1996, que «la industria depende de los fundamen- tancias muy favorables para promover una política
tos intelectuales proporcionados por los investiga- científica ambiciosa. Así, podemos destacar el lugar
dores básicos en los sectores no lucrativos y públi- preeminente que la Constitución de 1978 concede
cos, para sus servicios y productos innovadores», a la ciencia. Esta relevancia se ve reflejada tanto
y se llega a calificar a los investigadores públicos en su relación con los ciudadanos, al incluir la in-
como «el cofre del tesoro de la nación». vestigación científica en el marco de los derechos
fundamentales de más alto rango (art. 20 CE), cuya
En las páginas que siguen, se propone primero promoción «en beneficio del interés general» es una
valorar brevemente tanto el marco nacional para obligación de los todos los poderes públicos (art. 44
la ciencia y tecnología como el establecido en la CE), como en su tratamiento competencial, al dotar
Comunidad de Madrid para dedicar la mayor parte al Estado de exclusividad para la «coordinación ge-
del texto a la evaluación detenida de la experiencia neral» (art. 149.15); poder excepcional únicamente
de los IMDEA. El trabajo se cierra con unas breves compartido en la Constitución con materias tan
conclusiones. sensibles para el bienestar de la sociedad como la
sanitaria y la económica. Por otra parte, y como
muestra de esta relevancia estratégica, cabe subra-
II. MARCO NACIONAL yar que la política científica es de las pocas compe-
tencias ejecutivas que no han sido transferidas a las
En España, los límites del debate sobre la política comunidades autónomas. Circunstancia que no ha
científica permanecen inalterados desde aquellos impedido que un importante número de comunida-
establecidos por la esperanzadora Ley de la Ciencia des autónomas haya considerado necesario dotarse
de 1986, (Ley 13/1986, de 14 de abril, de Fomento de marcos legales propios para organizar y vincular
y Coordinación General de la Investigación Científi- la producción del conocimiento científico a las de-
ca y Técnica [3]), que alcanzó el nada desdeñable mandas de sus respectivos territorios (5).
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Asimismo, podemos señalar que la política una política científica en la que apenas existen ins-
científica es un espacio de consenso político, dis- trumentos vinculados a la «ciencia ciudadana» (11).
tante en su tratamiento por parte de los partidos La Declaración de Budapest (12) y su propuesta de
políticos de temas como la educación, usados para democratización de la ciencia, propugnada por la
la segmentación del voto. Lo demuestra el hecho Unesco, está todavía más alejada de nuestra política
de que la vigente Ley de Ciencia, Ley 14/2011, de 1 de científica que la visión economicista de la investiga-
junio, de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación (6), ción como un insumo de la innovación empresarial
fue aprobada solamente con tres votos en contra presentada en el documento coetáneo de la OCDE
en el Congreso de los Diputados. Esta ley supone denominado Manual de Oslo (13).
el punto de encuentro de los partidos políticos en
relación con la política científica. Su tramitación La responsabilidad de que la ciencia se haya
se caracterizó por la discreción (7). En cuanto a su entendido como un asunto propio de los científi-
contenido, cabe destacar la dificultad para encon- cos, más vinculado a la excelencia y a las carreras
trar un propósito que la justifique en su farragosa profesionales individuales que a su carácter trans-
redacción y dudosa técnica normativa. El sistema formador de la sociedad, proviene de la incapaci-
nacional de ciencia y tecnología sigue pendiente dad de los gestores institucionales. Entretanto, en
de una propuesta de articulación, en los distintos España, la ciencia, se mueve entre el entusiasmo
ámbitos de su acción, así como del establecimien- de las declaraciones políticas y la entropía de los
to de un marco regulatorio propio para el desa- laboratorios, a la espera del momento apropiado
rrollo de la actividad científica, en especial para para convertirse en lo que es. Diez años después de
flexibilizar la gestión de los centros públicos de in- la irrupción de la ley del 2011, es hora de reflexio-
vestigación, o de la fijación de un escenario finan- nar. Para progresar hay que saber retroceder, volver
ciero adecuado y estable. Su revisión, en proceso sobre las huellas dejadas por el enorme esfuerzo
de tramitación, a decir de la Confederación de de muchos y prepararse para dar un nuevo paso
Sociedades Científicas de España (COSCE) (8) no adelante.
parece que vaya a cambiar el rumbo de la política
científica. Nuevas leyes no significan necesaria-
mente mejores leyes. III. MARCO DE LA COMUNIDAD DE MADRID
El consenso de facto en la política científica tam- Visto el marco nacional es oportuno hacer una
bién puede vislumbrarse en los sucesivos planes y reflexión sobre la situación en la Comunidad de
estrategias nacionales de investigación. Propuestas, Madrid. Como característica del Sistema Madri-
que, al margen del partido gobernante en el mo- leño de Ciencia y Tecnología podemos destacar
mento de su aprobación, están caracterizadas por la debilidad de las políticas regionales, unida a la
su continuismo. Nos referimos a propuestas centra- dependencia de la política nacional y del gasto de
das en convocatorias de subvenciones que ignoran las grandes empresas. En un entorno global en el
los problemas estructurales y de precarización del que las áreas metropolitanas, con las que compite
personal investigador, vinculados a una asignación Madrid, están realizando extraordinarios esfuerzos,
de recursos dependiente de los ciclos económicos, tanto en inversión como en la vertebración y espe-
así como de una visión organicista de la política cialización de sus sistemas de ciencia y tecnología,
científica subsidiaria en sus objetivos de las políticas la carencia de una política propia puede suponer,
europeas. Propuestas que, a su vez, no son capaces a medio plazo, una importante amenaza para la
de plantear soluciones para vertebrar un sistema competitividad de la región.
complejo, e impulsar el cambio de unos actores
clave, como son las empresas. El reciente Plan Na- Una primera etapa, desarrollada entre el año
cional de Investigación 2021-2023 o la Estrategia 1990 y el año 1995, estuvo gestionada por la
Española de Ciencia, Tecnología e Innovación (9) Oficina Madrileña de Fomento de la Investigación
son un ejemplo de este continuismo de la ambición (OMFI), que realizó una política mimética del Plan
de la política científica española. Nacional de Investigación con un presupuesto mo-
desto, que solo alcanzó los 4,5 millones de euros.
Un tercer aspecto positivo es la alta valoración El marco de esta política fue definido por el primer
social (10) que se otorga a la ciencia y a los científi- Plan Regional de Investigación (14) aprobado en
cos en España. Es harto complicado establecer una 1990. En 1993 se publicó el Libro blanco de la in-
correlación positiva entre esta circunstancia y vestigación en la Comunidad de Madrid que recogía
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muchos de los tópicos que se repetirán formalmen- En el año 2015 se inicia una fase de reactivación
te en los sucesivos planes de investigación. que permitió recuperar la inversión existente en el
año 2008, así como la incorporación en el discurso
La segunda etapa se prolonga de 1995 a 2008 y se institucional del Gobierno regional de la importan-
caracteriza por la incorporación de una visión estraté- cia de la investigación para la sociedad madrileña.
gica promovida por la Ley 5/1998, de 7 de mayo, de En este sentido, se aprueba el V PRICIT 2016-2020,
Fomento de la Investigación Científica y la Innovación vinculado a la Estrategia R3 de la Unión Europea,
Tecnológica (15). Una ley disruptiva en su propuesta que contempla un incremento sostenido de los
organizativa y en su visión de la política científica, que presupuestos, hasta alcanzar los 111 millones de
pese a ser aprobada por unanimidad en la Asamblea euros, para investigación e innovación empresarial,
de Madrid, no ha llegado a aplicarse en sus aspectos y una propuesta de política científica, próxima en su
esenciales. En este período, se produjo un incremento acciones a la estatal.
significativo y sostenido de los fondos de I+D, al igual
que sucedió en el ámbito nacional, que llegaron a al-
canzar los 80 millones de euros, en el año 2008. Con el IV. PROPUESTA DE LOS IMDEA
III y IV Plan Regional de Investigación Científica e
Innovación Tecnológica (PRICIT) se pusieron en mar- El origen de los IMDEA hay que encontrarlo en
cha iniciativas novedosas caracterizadas por su afán el IV PRICIT 2005-2008 en cuyo capítulo VII se pre-
de complementariedad y especificidad. Entre estas, vé: «La creación de institutos capaces de aglutinar
podemos destacar: la firma de contratos programa investigadores e infraestructuras regionales y de
de investigación para financiar la actividad basal de incorporar nuevos científicos y equipamientos, en
universidades y Organismos Públicos de Investigación torno a programas de investigación flexibles y de
(OPI), las convocatorias dirigidas a los ayuntamientos interés regional, con un sistema de gestión propio,
para favorecer la ciencia ciudadana, los grandes even- es una prioridad para la política regional».
tos de cultura científica, como la Feria «Madrid es
Así, en el año 2005 se crea el primer instituto
Ciencia» o la «Semana de Ciencia», las convocatorias
de la red de IMDEA, en el área de Ciencias Sociales.
de proyectos dirigidas a vertebrar el sistema científico En el año 2006, se firmaron seis convenios entre la
en torno a problemas de interés regional, la creación Comunidad de Madrid y las universidades públicas
de redes de infraestructura de acceso compartido, la de la región por los que se les transferían once mi-
promoción de la ciencia en abierto y, sobre todo, una llones de euros para la puesta en marcha de los ins-
apuesta por la formación de investigadores, técnicos titutos. En paralelo, se procedía a la creación de las
de laboratorio y gestores de investigación. En este fundaciones, a través de la Fundación Madrimasd,
período se alcanzaron, en un año, los 2.000 beneficia- que dotaban de personalidad jurídica a los institutos
rios de ayudas de formación. Además, la Comunidad de investigación. A lo largo de 2007, se fueron ce-
de Madrid fue la primera administración que implan- lebrando los patronatos de constitución e iniciando
tó el 0-4 en los contratos predoctorales, las ayudas sus actividades en espacios cedidos por las universi-
complementarias a los becados para investigación o dades.
un sistema de evaluación y asesoramiento externo
durante el período formativo que vinculaba la beca El programa IMDEA nació con la voluntad de
al joven investigador. Corresponde a esta etapa el impulsar la transformación de la sociedad madri-
diseño y puesta en marcha del programa del Instituto leña desde el sistema de ciencia y tecnología. La
Madrileño de Estudios Avanzados (IMDEA). propuesta formaba parte de un marco más amplio
de actuaciones de apoyo a la ciencia y la tecnología
La tercera etapa de la conformación del actual que incluía la firma de un ambicioso sistema de
Sistema Madrileño de Ciencia y Tecnología abarca financiación de las universidades públicas, lo que
hasta el año 2015 y se caracteriza por el descenso de hubiera supuesto importantes dotaciones adicio-
la inversión en investigación. El único gasto que prác- nales para la investigación. El plan de financiación
ticamente se ejecuta es el de la financiación basal de nunca llegó a ejecutarse.
los IMDEA. Esta circunstancia se produjo en paralelo
a la caída de la nominativa a las universidades públi- Los nueve institutos inicialmente constituidos,
cas, principales actores del sistema regional. En este y los siete que han perdurado, presentan signifi-
período no hubo ninguna programación de política cativas diferencias entre sí derivadas, tanto de la
científica por parte del Gobierno regional. heterogénea financiación recibida como de los
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diferentes estilos directivos y modelos de relación autogobierno e independencia científica, así como
establecidos con el entorno académico y empresa- solventar las dificultades inherentes a la creación y
rial, como de la naturaleza de sus temáticas. puesta en funcionamiento de los institutos, en un
entorno lleno de incertidumbres políticas, de rece-
Las premisas sobre las que se fundamenta la pro- sión económica y de contención del gasto público.
puesta de creación del programa IMDEA se pueden En las renovaciones de los puestos de directores se
concretar en las siguientes ideas: ha utilizado la fórmula de convocatorias internacio-
nales para su selección.
– Independencia
– Red
La independencia científica es la seña de iden-
tidad de IMDEA. Los presidentes de los patronatos El proyecto IMDEA se conforma como una red.
de las fundaciones fueron elegidos entre investi- La constitución de cada uno de los institutos me-
gadores con reputadas carreras científicas interna- diante la figura de una fundación independiente
cionales y acreditada experiencia de gestión (16). solamente adquiere sentido desde la dimensión de
Asimismo, la presencia mayoritaria de científicos un proyecto común. IMDEA se justifica y configura
independientes fue una condición irrenunciable como una red que responde a una misión conjunta
para la conformación de sus respectivos patronatos. y a unos criterios de gestión compartidos. Es un
Dicha composición se vio completada por la pre- proyecto interdisciplinar que debe ser capaz de
sencia de la Administración regional, de las univer- aunar la mirada de diversos ámbitos de especializa-
sidades vinculadas, así como de otras instituciones ción para atender a problemas complejos de impac-
públicas y de empresas líderes en sus respectivos to social. Cada instituto es un nodo que da sentido
sectores. Por otra parte, a los consejos científicos de a los demás en una relación constante y dinámica.
los institutos se les asignó un papel determinante Pero, sobre todo, IMDEA es una red de valores que
en la gobernanza de los centros, tanto en la identifi- debe hacer fluir por el sistema madrileño de ciencia
cación de sus líneas de investigación y evaluación de y tecnología, público y privado.
su actividad como en la selección de sus directores
y de los futuros investigadores. – Impacto
La única garantía posible para que un centro IMDEA nace con la vocación de incidir en la
de investigación dedique sus recursos a promover sociedad. La independencia científica no significa
una investigación competitiva internacionalmente necesariamente independencia política a la hora
de manera eficiente es su autonomía. Desde este de concretar su esencial compromiso con la socie-
principio, se gestó la organización de los IMDEA. dad madrileña, a través de una investigación de
Una autonomía construida desde una rigurosa vanguardia, ejecutada desde una gestión eficiente.
selección inicial de los miembros de los órganos Inicialmente, se identificaron diez áreas de investi-
de gobierno y la apuesta por el desarrollo de pro- gación sobre las que proyectar la actividad de los
cedimientos administrativos flexibles, enmarcados futuros institutos. Ámbitos acordes con los inte-
en un sistema de rendición de cuentas exigente. reses prioritarios de una gran área metropolitana
El principio fundamental en la gestión del proyec- dotada, ya, de una importante oferta académica,
to IMDEA es la atribución, a sus directivos, de la como es la Comunidad de Madrid. Los nuevos
capacidad para la toma de decisiones científicas y centros de investigación deberían ser capaces de
administrativas, en un entorno de confianza, de- imbricar sus actividades en la realidad madrileña
finido y supervisado por expertos internacionales, para conseguir, de este modo, mejorar, de manera
así como por los principales actores del sistema efectiva, la competitividad de las empresas y la ca-
regional de investigación. lidad de las universidades, e incidir en el bienestar
de los madrileños. Junto a los siete IMDEA que per-
Mención especial merece el papel de los direc- sisten actualmente, (Agua, Energía, Redes digitales,
tores (17). Sin duda, una de las claves del éxito del Software, Alimentación, Materiales, y Nanociencia)
proyecto ha estado en la elección inicial de los di- se pusieron inicialmente en marcha otros dos, de-
rectores, tomada de acuerdo con las universidades, dicados a Ciencias Sociales y a Matemáticas; institu-
y en el compromiso asumido para dar viabilidad tos que cerraron en el año 2009 por problemas en
al proyecto. Sin su implicación y competencia, hu- su gestión. Quedó pendiente de llegar a un acuerdo
biera sido imposible hacer buena la propuesta de con la Consejería de Sanidad para la creación de un
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décimo IMDEA enfocado al ámbito de la biomedici- pueden encontrar un valor añadido ubicándose
na, en concreto en el área de envejecimiento. o desarrollando su actividad en entramados ricos
en conocimiento y personal altamente cualificado,
– Investigación como es la Comunidad de Madrid.
Los institutos IMDEA son centros de investiga- Esta visión del programa IMDEA, centrada en la
ción de vanguardia (18). La vocación de impacto investigación de vanguardia es claramente comple-
social y económico de IMDEA queda alejada en mentaria con la creación de empresas de base tec-
lo que a sus actividades se refiere de las que con nológica, desde los resultados de la investigación.
carácter general realizan los centros tecnológicos
(19) en España. El punto de encuentro entre la – Globalización
investigación de vanguardia, que se realiza en los
IMDEA, y las actividades empresariales se esta- La ciencia es un proyecto global. Los centros de
blece habitualmente en unos niveles de madurez investigación solo lo son si su actividad responde a
de la tecnología correspondientes a un TRL (20) una visión global. Una de las ideas motoras, desde
(technology readiness levels) de entre 1 y 3; aunque el inicio del programa IMDEA, fue la atracción de
excepcionalmente, en función de los sectores em- talento internacional a la Comunidad de Madrid y
presariales afectados y de los criterios hacia los que el mantenimiento del existente. Eso ha sido posible
van evolucionando los programas marco se pueda gracias a la adopción de un sistema de contratación
llegar hasta un TRL 6. del personal investigador basado en llamadas inter-
nacionales, que adoptan protocolos de selección
El programa IMDEA busca promover algo tan rigurosos, en los que se busca la idoneidad de la
difícil como necesario para el futuro de nuestro persona en relación con la aportación de valor que
país: la investigación en las empresas. Los institutos pueda realizar al proyecto en el que se desea que se
IMDEA pretenden ser un socio estable para empre- incorpore. El atractivo de la Comunidad de Madrid
sas que intervengan en mercados globales, y que para atraer talento en el mercado internacional,
lo hagan desde el control de la tecnología. Que las pese a las condiciones de las posiciones ofrecidas
empresas líderes madrileñas y españolas confíen en caracterizadas por la temporalidad y por retribucio-
la investigación para mejorar su productividad es nes medias/bajas, se ha demostrado muy alto.
una cuestión propia de su modelo de negocio, en
cuya transición los IMDEA, al igual que el resto del – Competitividad
sistema público de I+D, puede dar un apoyo de-
terminante. Pero en último término es una decisión Desde la etapa inicial del diseño de los institu-
que está al margen de su responsabilidad. Sin em- tos, se consideró que una parte importante de su
presas que realicen investigación los resultados de financiación, entre el 30 por 100 y el 40 por 100 de
los IMDEA terminarán convirtiéndose en productos, su presupuesto, debía de proceder de la captación
impuestos y empleos de calidad fuera de nuestro de recursos externos, competitivos o bajo contra-
país. Asimismo, cabe destacar la responsabilidad tos públicos o privados. Se trata de un porcentaje
que tienen las empresas y entidades del sector pú- sobre el presupuesto que no compromete ni la
blico gestoras de los servicios esenciales, así como sostenibilidad, ni la estabilidad de los institutos, ni
las administraciones reguladoras, para conseguir elimina la posibilidad de definir líneas estratégicas
impulsar la transformación del sistema productivo propias, pero que permite medir su competitividad
desde la investigación, la producción industrial y la internacional y su alineamiento con los programas
soberanía tecnológica. europeos, así como con las demandas sociales y
económicas. Objetivos que han sido sobradamente
IMDEA no es una plataforma de servicios para las cumplidos gracias a la meritocrática selección de
empresas que no tengan otra ambición que innovar los investigadores y del personal de administración
desde la compra e integración de las tecnologías. y servicios, y a unos procedimientos de gestión efi-
Estos límites fundacionales de su actividad definen cientes, al menos inicialmente.
el tipo de empresas o instituciones públicas con las
cuales es factible colaborar. Entidades altamente – Transformación
innovadoras e internacionalizadas que soportan su
competitividad o la calidad del servicio público en La función de IMDEA trasciende de los propios
un uso intensivo de la tecnología. Empresas que centros. Las ventajas de las que disponen para la
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incorporación de personal internacional, la reali- autónomas. Tampoco se ha conseguido la implicación
zación de publicaciones de impacto, la gestión de de corporaciones privadas en la financiación basal de
infraestructuras, la búsqueda de socios o la cap- los institutos, si bien la contratación de proyectos con-
tación de proyectos competitivos están al servicio cretos es una fuente de ingresos muy relevante.
de la mejora del sistema madrileño de ciencia y
tecnología, tanto público como privado. IMDEA En el año 2020, se acordó en todos los patro-
es una plataforma abierta que tiene como objetivo natos de las fundaciones gestoras de los institutos
favorecer la movilidad de personal, el flujo de co- dar entrada a dos altos cargos de la Administración
nocimiento y la creación de redes de colaboración. regional cuyas competencias materiales estuvieran
directamente vinculadas a la explotación de tec-
Esto es así, de manera especial en relación con nologías desarrolladas por los institutos. Así, se
las universidades madrileñas. En la fase de creación, establece una relación directa entre los institutos
cada uno de los IMDEA tenía una especial vincula- IMDEA y el Canal de Isabel II, el Consorcio de Trans-
ción con una universidad. Relación que se concre- portes, Metro Madrid, Madrid Digital, IMIDRA, la
taba en la figura del director, la cual recaería en un red de hospitales públicos o el Centro de Innova-
profesor de la correspondiente universidad, y en la ción Digital de la Comunidad de Madrid; entidades
ubicación física del instituto en el entorno de dicha responsables de la prestación de servicios públicos
universidad. La única modificación destacable con altamente demandantes de tecnología.
respecto a la programación inicial fue la renuncia de
la Universidad Complutense de Madrid a acoger a
los institutos IMDEA de Nanociencia, de Alimenta- V. VALORACIÓN DE LOS IMDEA
ción y de Matemáticas, que pasaron al entorno de
la Universidad Autónoma de Madrid, por lo que su En el año 2014, cuando se instaló en su sede
dirección recayó en catedráticos de dicha universi- definitiva del campus de la Universidad Autónoma
dad y su ubicación al campus de Cantoblanco. de Madrid el IMDEA Alimentación, se da por culmi-
nada la fase de implantación de los institutos. Siete
– Productividad años después, el programa IMDEA está arraigado
en el Sistema Europeo de Ciencia y Tecnología y sus
Un aspecto importante en el diseño del pro- institutos gozan de gran reconocimiento, a la vez
grama IMDEA fue la localización de sus centros. que, paradójicamente, se encuentra en una situa-
Se buscó generar un reequilibrio territorial que ción crítica. Pese a no haber parado de crecer en
posibilitará la creación de focos de innovación en condiciones adversas, tanto en actividad como en
seis municipios distintos. IMDEA formaba parte de reputación, es el momento de consolidar el modelo,
la estrategia de creación de una red de parques de corregir errores y de resolver contradicciones que
científicos en la Comunidad de Madrid. El Parque comprometen su sostenibilidad.
Científico de Madrid, TecnoAlcalá, TecnoGetafe,
Leganés Tecnológico, Móstoles Tecnológico y el Para llevar a cabo la valoración de la situación del
Parque de Montegancedo (Pozuelo) (21) fueron los programa nada mejor que seguir los objetivos inicia-
destinos elegidos para la localización de los institu- les tal como han sido identificados anteriormente.
tos IMDEA. De esta manera, se proponía generar
sinergias entre la política económica e industrial y – Independencia
la política científica de la región. La red de parques
tecnológicos se disolvió en el año 2010. La consolidación de instituciones científicas
en un plazo tan corto de tiempo es una labor de
– Compromiso enorme dificultad que merece ser reconocida por sí
misma. Este éxito ha sido posible gracias al mante-
El diseño y la financiación de IMDEA (22) ha corres- nimiento de la estructura de gobernanza diseñada
pondido a la Administración regional. La acción del inicialmente, respetuosa con la independencia cien-
Estado en ciencia en la Comunidad de Madrid se ca- tífica y la autonomía de gestión.
naliza fundamentalmente a través de los organismos
públicos de investigación de su titularidad, sin que fi- – Red
guras de colaboración como los institutos mixtos, o las
fundaciones o consorcios conjuntos, hayan tenido, en La asignatura pendiente. En este período, el
Madrid, el mismo desarrollo que en otras comunidades funcionamiento como red de IMDEA ha surgido
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fundamentalmente del acuerdo informal de los di- Desde el año 2007, se ha solicitado el registro
rectores. El cambio de etapa en la política regional, de 91 patentes, de las cuales 52 ya han sido conce-
apenas dos años después de la puesta en marcha didas, y de 23 desarrollos de software. Muchas de
del programa IMDEA, ha acarreado que los propó- las patentes se han solicitado en cotitularidad con
sitos de interdisciplinariedad de los institutos, así otros centros de investigación o con empresas (24).
como el objetivo de construcción de un espacio De igual manera, se han constituido ocho empre-
común y abierto de aprendizaje y servicio, no tu- sas fundamentadas en resultados de investigación
vieran la relevancia necesaria para estar presentes propios, que se encuentran en distintas fases de
en la agenda de un día a día azaroso. Cada uno financiación.
de los institutos se ha desarrollado de acuerdo con
la cuantía de los fondos recibidos y la idiosincrasia – Investigación
de sus respectivos equipos directivos, sin que haya
habido una coordinación sistemática más allá de los La combinación de excelencia científica e im-
aspectos formales o de iniciativas aisladas. pacto social no es un compromiso sencillo, sin
embargo, IMDEA lo ha convertido en una seña de
Parece claro que en estos quince años la situa- identidad. De acuerdo con los resultados recogidos
ción de IMDEA ha cambiado. Dado el grado de en las memorias anuales (25), podemos afirmar
madurez y relevancia de la iniciativa, sería necesario que, dado su tamaño y antigüedad, son centros
acordar un marco común que facilitara la colabora- muy productivos, en posiciones de privilegio en
ción en proyectos concretos y la homologación de rankings internacionales, como Nature Index (26).
los protocolos de funcionamiento en determinados
Tres de los IMDEA forman parte de la alianza
aspectos de gestión. Los procesos de selección
SOMMa (27), entre los cincuenta y siete centros
de personal, las condiciones de desempeño de la
Severo Ochoa y las Unidades María de Maeztu, que
actividad y la previsión de una carrera profesional
tienen como objetivo promover la excelencia espa-
interna, son un buen ejemplo de ello. ñola en investigación y potenciar su impacto social,
a nivel nacional e internacional. Se trata de una red
– Impacto
que reúne a los centros y unidades de investigación
españolas de mayor rendimiento y competitividad,
Los ámbitos de actividad elegidos en la puesta
en todas las disciplinas (28).
en marcha del programa IMDEA siguen plenamen-
te vigentes, como evidencia su alineación con los Según la Web of Science (WoS), desde el año
desafíos recogidos en los Objetivos de Desarrollo 2010, los investigadores de los institutos IMDEA
Sostenible (23) de la Agenda 2030 de la ONU. La han publicado más de 5.650 ponencias en con-
planificación realizada por los consejos científicos gresos internacionales o artículos en las revistas
ha permitido dirigir sus líneas de investigación, internacionales de mayor impacto, en sus respecti-
no sin asumir riesgos, hacia temas emergentes y vas áreas de conocimiento. Estos artículos han sido
de alto impacto. Este posicionamiento ha servido citados en más de 106.700 ocasiones por otros
para, en un corto período de tiempo, posicionar investigadores.
a los IMDEA como referentes de sus respectivos
campos. Igualmente, puede destacarse que han conse-
guido 14 programas del European Research Coun-
Los problemas a los que se enfrenta el pro- cil (29) (ERC), en sus distintas categorías, desde el
grama IMDEA, tales como el cambio climático, la año 2010. La red SOMMa declara haber consegui-
seguridad de las comunicaciones o la manipulación do 183 ayudas. El número de proyectos y contratos
genética, son objetos complejos cuya comprensión de investigación en los que han participado investi-
trasciende de los laboratorios y la experimentalidad. gadores de los institutos IMDEA, desde su creación,
Enfrentarse a estos desafíos demanda la interac- ha sido de 1.730. En 2020 han estado vigentes casi
ción con los conocimientos propios de las ciencias 270 proyectos y 95 contratos de investigación (30).
sociales y de las humanidades. En este sentido, los Entre los múltiples proyectos destacan aquellos
Institutos IMDEA han desarrollado capacidades financiados por la Unión Europea, y otros organis-
que permiten no solo identificar y llevar a cabo una mos internacionales, que han supuesto el 41 por
investigación de impacto, sino también valorar el 100 del total, y los nacionales, que han llegado a
impacto social de sus investigaciones. representar el 44 por 100.
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Dentro de las prioridades de los institutos figura Alimentación e IMDEA Software, forman parte del
la formación de jóvenes investigadores. Son muchas Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT).
las vías a través de las cuales se producen colabora- El primero de EIT Food y el segundo de EIT Digital. El
ciones con las universidades, pero merece una men- EIT es un organismo de la Unión Europea creado con
ción especial la relativa a las tesis doctorales. Entre el objetivo de fortalecer la capacidad de innovación
2010 y 2020 se han leído 310, 42 en el año 2020, de los países miembros de la Unión.
estando en curso 254. Desde la creación de los ins-
titutos IMDEA, sus investigadores han obtenido 600 En cuanto a la relación con las empresas, en
ayudas competitivas a la investigación destinadas a 2020, de los 601 proyectos y contratos que firmó
la contratación de personal. la red, aproximadamente un tercio fueron contratos
de investigación con empresas; fundamentalmente
– Global con corporaciones multinacionales.
Un valor diferencial de los IMDEA ha sido su ca- – Transformación
pacidad para atraer talento en el mercado interna-
cional de la ciencia. En el año 2020, la plantilla de Todos los IMDEA tienen convenios firmados con
los IMDEA estaba compuesta de 882 investigadores las universidades con las que establecieron una re-
y de 87 gestores, en donde encontramos represen- lación preferente, inicialmente, además de contar
tación de más de 30 países. El 41 por 100 de los con representantes de las mismas en sus respec-
doctores que trabajan en los institutos son extranje- tivos patronatos. Parecería razonable que esta re-
ros. Detrás de estos datos se encuentra la alta inter- lación se institucionalizara con la creación de un
nacionalización de la actividad de los centros. El 32 Instituto de Investigación Interuniversitario que
por 100 de los 42 millones del presupuesto global diera una cobertura normalizada a todas las uni-
2020 de los IMDEA procede de recursos captados versidades públicas. Esta estructura propiciaría un
fuera de España. En este apartado es de destacar fácil encaje con otros actores del sistema regional;
la contratación de investigación por empresas ex- fundamentalmente los organismos públicos de in-
tranjeras que suponen más del 50 por 100 de los vestigación de titularidad estatal.
95 contratos realizados en el 2020. Esto evidencia
claramente que IMDEA contribuye de manera signi- Los temas que cubriría este marco común son
ficativa al aumento de competitividad global de los amplios, relevantes y de interés recíproco: desde la
sectores industriales en los que interviene. formación de investigadores, a la participación en
actividades docentes de los investigadores de los
– Competitividad IMDEA, al uso de las infraestructuras científicas y la
creación de laboratorios de investigación conjun-
Más de la mitad de los fondos presupuestados tos, pasando por el desarrollo de proyectos empre-
en los institutos, en 2020, proceden de la capta- sariales, el impacto de las citas, la explotación de
ción externa, alcanzando, en algunos institutos, los resultados de investigación o, de especial rele-
esta cantidad el 70 por 100. Cabe destacar, en este vancia, la movilidad del personal. Dada su flexibili-
apartado, el éxito en el programa europeo Horizonte dad y prestigio, IMDEA puede convertirse en una
2020 (31). Entre los años 2014 y 2020, IMDEA con- extraordinaria antena para la captación de talento
siguió retornos para España por un valor de 43 millo- para el sistema madrileño de ciencia y tecnología.
nes de euros, cantidad muy significativa comparada
con la nominativa asignada por la Comunidad de – Productividad
Madrid, durante el mismo período que fue de 130
millones de euros. Estos retornos sitúan al programa La participación de algunas de las empresas más
IMDEA como la decimoctava institución de España relevantes en sus respectivos sectores en los patro-
por los recursos conseguidos en el programa H2020, natos de los IMDEA, salvo casos excepcionales, no
con unas ratios por tamaño difíciles de superar. En ha tenido un impacto significativo en su actividad.
el ámbito de la Comunidad de Madrid, es la cuarta
institución, tanto del entorno público como privado, El hecho de que una parte importante del cono-
que más retornos consigue, solo por detrás de la Uni- cimiento que se desarrolla en los IMDEA se transfor-
versidad Politécnica de Madrid, la empresa Indra y la me en actividad económica fuera de España es un
Universidad Carlos III de Madrid. Otro aspecto que tema a destacar. Es necesario plantear una reflexión
merece ser reseñado es que dos institutos, IMDEA sobre cómo incidir desde las políticas públicas, y
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desde luego desde las políticas de investigación, rápida evolución de la tecnología está generando
en las estrategias de mejora de la productividad demandas de conocimiento, de manera acelerada.
y la competitividad de las empresas de nuestro
entorno. Sin un número importante de empresas – Compromiso
que integren en su modelo de negocio la investi-
gación, el esfuerzo público en promover la ciencia IMDEA se constituye y desarrolla como un pro-
y la tecnología está condenado a la ineficiencia. yecto propio de la Comunidad de Madrid. Lo hace
Por otro lado, resulta inasumible tener que acep- en un contexto de crisis económica, con fuertes
tar la inevitabilidad de la condición de ser un país restricciones para tener una estrategia de personal
consumidor y ensamblador de tecnología externa, adecuada a su crecimiento, y sin un marco de coor-
incapaz de tener una producción propia y de poder dinación general. El mantenimiento de esta situa-
mejorar la productividad de su economía desde la ción resulta hoy en día insostenible. Es el momento
tecnología. Dicho esto, queda mucho por hacer de revisar, desde la Administración regional, la fun-
para dar a conocer las capacidades de IMDEA, al ción que se quiere atribuir a IMDEA y los recursos y
tejido productivo. organización que ello conlleva.
Tampoco podemos olvidar que un apoyo desde En los últimos cinco años la aportación basal de
otras consejerías al programa IMDEA podría ser una la Comunidad de Madrid al programa IMDEA ha
pieza fundamental en la puesta en marcha de permanecido estable suponiendo entre el 20 por
una política industrial y de desarrollo local en la 100 y el 25 por 100 del gasto del programa regio-
Comunidad de Madrid. Así, los IMDEA podrían ver nal de investigación. Esta cantidad es ligeramente
incrementada su carta de servicios con la incorpo- inferior a un uno por mil del presupuesto general
ración de fab labs o science shop que hagan acce- de la Comunidad de Madrid. El programa IMDEA
sible su conocimiento a una parte más amplia de la necesita un marco presupuestario suficiente y esta-
sociedad y de las empresas. ble. Esto es, la firma con cada uno de los institutos
de un contrato programa, con una duración de
La relación de los institutos IMDEA como pro- seis años, que sirva para concertar con la Admi-
veedores de conocimiento de las entidades de la nistración regional sus respectivos objetivos, así
Comunidad de Madrid dedicadas a la prestación como la evaluación de su consecución, a la vez que
de los servicios públicos esenciales, como el Canal para dotarlos de los recursos adecuados. La extre-
de Isabel II, los hospitales públicos o Metro Madrid, ma dependencia actual de la financiación externa
ha sido prácticamente inexistente. Esto es así a competitiva está fuera de la lógica de los centros
pesar de que son instituciones con una capacidad de investigación nacionales e internacionales equi-
inconmensurable para coproducir tecnología diri- parables. Estos suelen tener prohibido depender
gida a satisfacer las crecientes necesidades de los en sus presupuestos de la captación de recursos
ciudadanos. La incorporación de la investigación en externos en límites superiores al 40 por 100. Esto
la misión y la estrategia de estas entidades, no solo es así porque la dependencia en porcentajes ma-
la promoción de la compra externa de tecnología yores imposibilita la planificación de los centros,
para realizar innovaciones, en colaboración con los fundamentalmente por razón de la cofinanciación,
institutos IMDEA, tendría efectos verdaderamente y lleva consigo la adquisición de obligaciones que
transformadores para la economía de la región. comprometen la sostenibilidad de los centros, e
Supondría la creación de entramados de empresas incluso personalmente a los gestores.
de base tecnológica coadyuvados por las demandas
de tecnología necesarias para la mejora de la calidad Los contratos programa, además, permitirían
y la eficiencia de los servicios públicos. Empresas de hacer una reprogramación sobre el conjunto de la
producción, en muchos casos industriales, con altas red. La distribución del presupuesto actual entre los
expectativas de crecimiento y una clara proyección institutos, y en consecuencia su distinto tamaño y
hacia mercados internacionales. Aproximarnos a ambición, responde, más que a una programación,
estos logros daría pleno sentido al programa IMDEA. a decisiones accidentales originadas en los momen-
tos de su creación.
Dado el éxito del modelo, también sería el mo-
mento, desde la Administración regional, de plan- Por otro lado, la gestión de los institutos se
tear, por qué no en colaboración con la AGE, la crea- ha burocratizado con el paso del tiempo, lo que
ción de nuevos institutos, en temáticas en las que la debería invitar a la Comunidad de Madrid a hacer
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una revisión de sus protocolos de funcionamiento Hacienda o de Trabajo, en otras simplemente de cri-
y del sistema de supervisión administrativa, a fin de terio, para dotar a las instituciones científicas de una
recuperar eficiencia y competitividad. regulación homologable internacionalmente y de
una financiación estable y adecuada, así como para
Las condiciones en las que los institutos IMDEA construir un marco de prioridades nacionales que
desarrollaban su actividad en los años iniciales de vincule la ciencia a las demandas sociales y econó-
su andadura, sujetos a severas restricciones para la micas explicitadas en las restante políticas públicas,
contratación de personal, ha originado que su per- y además hacerlo en coordinación con las restantes
sonal investigador estable esté, de media, por deba- administraciones del Estado, de manera especial con
jo del 15 por 100. En un mercado global en el que las comunidades autónomas, y con la política de la
cada día hay nuevos países y regiones que apuestan Unión Europea. Un programa a medio-largo plazo
por la investigación, para mejorar su competitividad que debe ser capaz, ineludiblemente, de incentivar
económica y alcanzar la «soberanía tecnológica», el cambio en el modelo de negocio de las empresas
las oportunidades para los investigadores de pres- españolas. Las políticas económicas en general, y las
tigio se disparan. La falta de estabilidad y de una industriales y las científicas en particular, deben pro-
proyección de carrera profesional, además de traer mover la mejora de la productividad y competitividad
consigo la pérdida constante del talento acumu- internacional de las empresas desde el desarrollo de
lado y la desmotivación para la incorporación de tecnología propia. En definitiva, necesitamos una
investigadores relevantes, supone un enorme riesgo política científica que recoja el compromiso real de
para la ejecución de los proyectos de investigación los poderes públicos en la ciencia, y como tal que
comprometidos, con las responsabilidades subsi- incorpore en su definición, ejecución y seguimiento,
guientes que ello conlleva. Por otra parte, equiparar junto a la comunidad científica, a todos los interesa-
las retribuciones de los investigadores con las co- dos y afectados. Una propuesta que crea y confíe en
rrespondientes franjas retributivas del personal de la la ciencia y en la sociedad española
administración general dificulta la contratación de
los investigadores con capacidad de atraer recursos Como última consideración cabe subrayar que el
y aportar valor diferencial a los institutos. programa IMDEA, como otras iniciativas regionales
y nacionales, ha contribuido de manera significativa
Además, no podemos olvidar que la prioridad a la mejora del sistema madrileño y nacional de cien-
en la contratación de investigadores, para alcan- cia y tecnología. Sin embargo, hay que destacar que
zar el tamaño crítico investigador de los centros, estas iniciativas solo adquieren verdadero sentido en
durante estos años, ha propiciado que la ratio de cuanto estén integradas en políticas científicas ambi-
ciosas que crean y confíen tanto en la ciencia como
estos en relación con el personal de administración
en la sociedad y la economía españolas. IMDEA
y de apoyo a la investigación esté muy lejos de la
necesita un marco que establezca un compromiso
existente en los centros con los que compiten en
efectivo de la Comunidad de Madrid para promover
la captación de recursos y publicaciones. La solu- un desarrollo económico y social soportado en la
ción de este problema limitante es prioritario para ciencia. En caso contrario, no dejará de ser una anéc-
el futuro de los centros. dota difícilmente sostenible en su propósito.
«Esperemos que Sísifo se desmitifique
VI. CONCLUSIONES alguna vez y que avancemos
por el camino que nos lleve de verdad
La política científica es, constitucionalmente, uno a constituirnos en una sociedad apoyada
de los instrumentos más relevantes de los que dispo- en los conocimientos científicos y técnicos».
ne el Estado para promover la vertebración territorial
y el bienestar de los ciudadanos. Pasado el impulso (Emilio Muñoz y Jesús Sebastián.
de modernización que supuso la ley de 1986, la El conocimiento científico como referente
política científica en las últimas décadas se ha ca- político en el siglo XXI).
racterizado por la carencia de un proyecto nacional,
más allá de la creación de ministerios específicos, o NOTAS
del consenso partidista en leyes o planes. Los res-
ponsables de la política científica han carecido, en (1) https://www.ciencia.gob.es/stfls/MICINN/Ministerio/FICHEROS/
pacto_por_la_ciencia_y_la_innovacion_actualizado_08_03_21.pdf
algunas ocasiones, de la legitimidad necesaria para
que sus criterios triunfaran frente a los Ministerios de (2) https://www.comunidad.madrid/publicacion/ref/00961
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