Por qué el reciclaje de plásticos es importante para el medio ambiente?

Opinión
¿Por qué el reciclaje de plásticos es importante para el
medio ambiente?

Eduardo de la Tijera Coeto-Artículo publicado con autorización expresa de reciclaplastico.org, Ciudad de México, México,
Enero 2010

El consumidor, las autoridades y algunos industriales piensan que es mejor degradar los
plásticos que reciclarlos. Revisemos este asunto…

1. El reciclaje de plásticos contribuye a conservar los recursos naturales y reducir
las emisiones al medio ambiente

Contribuye a conservar energía y recursos no renovables ya que aminora la necesidad de
extraerlos y consumirlos en la fabricación de materiales plásticos nuevos o vírgenes. El
reciclaje de una sola botella o de cinco bolsas de plástico permite conservar suficiente
energía para mantener encendido durante 6 horas un foco de 60 watts ya que, con todo y
la energía necesaria para recuperar y reprocesar esa botella o esas bolsas, se evita el
consumo de energía y recursos para producirlas a partir de material nuevo o virgen.

Degradarlos no contribuye a la conservación ya que la energía y los recursos no
renovables empleados para fabricar los plásticos no se pueden reaprovechar porque la
degradación los convierte en materiales distintos o en gases de efecto invernadero.

2. El reciclaje de plásticos incrementa la capacidad de los rellenos sanitarios o
tiraderos

La capacidad de los rellenos sanitarios se incrementa al evitar que los plásticos usados se
depositen en ellos y ocupen un volumen que puede ser aprovechado para disponer de
otros residuos urbanos. En Europa, el volumen de plásticos depositados en los rellenos no
creció entre 2005 y 2008 y, entre 1996 y 2008 se ha reducido en 1,1% anual.

La degradación no reduce los requerimientos en los rellenos sanitarios porque esta no es
instantánea, requiere de oxígeno, humedad y calor y antes de que se alcancen a degradar
significativamente, el relleno ya fue compactado y recubierto con tierra, interrumpiendo en
muchos casos el proceso de degradación. En los tiraderos, la degradación tampoco está
garantizada ya que la basura se acumula más rápido de lo que los plásticos se
degradarían.

3. El reciclaje contribuye a aminorar el impacto ambiental de los plásticos

Los impactos ambientales y los beneficios del reciclaje de los plásticos varían dependiendo
de las condiciones en las que se encuentren al término de su vida útil. Cuando el
consumidor final los desecha debidamente separados y relativamente limpios (libres de
contaminación con otros residuos) su reciclaje es técnica y económicamente factible con lo
cual se obtiene un beneficio ambiental por la reutilización de los recursos naturales
empleados como materia prima original (los hidrocarburos) y por el consumo de menores
cantidades de energía y agua que en su elaboración.

Como los plásticos degradables no son reciclables, sus materias primas ni los recursos de
donde provienen no se pueden reaprovechar. Además, al mezclar los plásticos
degradables con el resto de los plásticos usados hacen inviable el reciclaje de la mezcla.
Por último, muchos de los plásticos reciclados se convierten en productos durables como
alfombras, pisos, flejes o muebles en los que ninguna degradación es conveniente e
incluso puede resultar riesgosa para los consumidores.

4. Aunque no fuese posible reciclar ciertos plásticos, hay otras opciones para
reaprovecharlos

Cuando los plásticos usados están mezclados o muy sucios su reciclaje no es viable. Ante
esto se piensa que su degradación podría ser la opción más adecuada desde el punto de
vista ambiental. Sin embargo, aún mezclados y sucios, los plásticos tienen un poder
calorífico alto, similar al de los combustibles fósiles y son una fuente potencial de energía
que se puede recuperar mediante procesos controlados y con emisiones similares o
menores a las de las plantas termoeléctricas convencionales.

Dejar que los plásticos se degraden en rellenos sanitarios o tiraderos a cielo abierto impide
que la energía contenida en los plásticos mezclados o sucios se pueda recuperar.

5. El reciclaje alarga la vida útil de los plásticos
El reciclaje alarga la vida útil de los materiales plásticos ya que permite reutilizar los
materiales recuperados para convertirlos nuevamente –y varias veces- en productos
plásticos similares o diferentes a los originales. Los estudios de Ciclo de Vida realizados
en todo el mundo así lo demuestran.

6. El reciclaje de plásticos ya es una realidad que se respalda con hechos

En todo el mundo existen desde hace muchos años industrias de reciclaje de plásticos
bien establecidas y muy dinámicas.

*       En México, la generación de residuos plásticos ha crecido 6% al año mientras que
el crecimiento de la recolección supera el 17% anual.
*       En 2008, la industria del reciclaje de plásticos recolectó el 24,4% del volumen de
plásticos desechados por los consumidores, comercios e industria, destinando más de la
mitad para su reprocesamiento y reciclaje en el país y el resto a la exportación, con un
valor total de 740 millones de dólares.
*       Los materiales reciclados en 2008 representaron un ahorro de 960 millones de
dólares en materias primas a los fabricantes de plásticos que los consumieron.
*       La industria del reciclaje de plásticos de México se compone de 300 empresas que
dan empleo directo a más de 2.000 personas y generan empleos indirectos para más de
15 mil personas.

7. El reciclaje de plásticos funciona porque los residuos domésticos y comerciales
se pueden separar

Una parte de la separación de los residuos plásticos se realiza en los hogares y en los
comercios aunque la mayoría se realiza en plantas ubicadas en los tiraderos y rellenos
sanitarios o manualmente por los recicladores o pepenadores. Los pepenadores conocen
los diferentes plásticos y los pueden separar con eficiencia.

Los consumidores y los comercios tendrían que hacer una segunda separación para que
plásticos degradables no se mezclen con los reciclables y entregarlos a los servicios de
limpieza sin mezclarlos con los residuos orgánicos. De otra manera, los pepenadores y los
trabajadores de las plantas de separación en los tiraderos tendrían que separar los
plásticos degradables de los reciclables para evitar que se mezclen y con ello poderlos
vender a los recicladores.

8. Las regulaciones en el mundo están a favor del reciclaje

Las legislaciones al nivel de país, de estados o provincias y de municipios o condados
privilegian el reciclaje de los plásticos sobre cualquier otra opción de valorización de los

plásticos usados. En los Estados Unidos, de 63 iniciativas para regular el consumo de
bolsas de plástico, solamente 3 se refieren a su sustitución por biodegradables mientras
que 23 se refieren a programas de recuperación y reciclaje. El resto son iniciativas
tendientes a la prohibición o a la fijación de un impuesto a su consumo. De las 63
iniciativas, solamente 25 se han aprobado, 11 han sido rechazadas y el resto, 30 iniciativas
siguen pendientes de análisis y aprobación o rechazo. De las 25 aprobadas, 21
corresponden a programas de reciclaje y solamente una se refiere a plásticos
biodegradables. En Europa, la situación es similar.

En México, todas las iniciativas para regular el consumo de bolsas de plástico pretenden
sustituirlas por biodegradables y ninguna busca promover su reciclaje. No existe en el país
una norma que defina los requisitos que deben cumplir los materiales para considerarse
como biodegradables. Esto ha propiciado que lleguen al mercado materiales que se dicen
biodegradables sin que haya manera de demostrarlo.

Actualidad
El reciclaje como clave de la sostenibilidad en México
http://www.plastico.com/tp/secciones/TP/ES/MAIN/N/NOTICIAS4/doc_76473_HTML.html?idDo
cumento=76473

Equipo editorial de Tecnología del Plástico, Ciudad de México, México, 30 marzo

La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), por medio de la
Subsecretaría de Fomento y Normatividad Ambiental, en conjunto con la iniciativa Acuerdo
por la Sustentabilidad de los Plásticos (grupo de empresas productoras de resinas y
recicladoras de plásticos), organizaron los Foros sobre la Sustentabilidad de los Plásticos,
del 16 al 19 de marzo.

En el evento se presentaron diversas ponencias de carácter técnico, científico, económico
y social respecto al uso del plástico y su disposición. Fueron abordados diversos temas
bajo los rubros de: Gestión integral de los residuos sólidos; residuos plásticos: valorización
o degradación; biodegradabilidad de los plásticos, así como ética y publicidad ambiental.

Jorge Barreda, director de ventas de plásticos básicos para la Región Norte de América
Latina de Dow Química, explicó que la valorización de los residuos es la base para
alcanzar la sustentabilidad en la industria debido a que la materia prima para producirlos
(petróleo) no es renovable. “Se debe trabajar más en el tema de recuperación y reciclaje,
porque ahí está un valor de diferenciación importante para la industria, incluso a nivel
competencia”, dijo.

Por su parte, Arturo Dávila, director ejecutivo de Sustenta, indicó que en México se tiene
un mal manejo integral de los residuos sólidos, lo que ha llevado a una situación
complicada para el país, que requiere soluciones prontas y concisas. “El sector industrial
es presentado como el culpable de todos los males generados por la contaminación del
ambiente. Sin embargo, esto es un trabajo de la sociedad en su conjunto, no sólo de un
sector específico”, comentó.

En su presentación “Reflexiones sobre el manejo integral y la biodegradabilidad de los
residuos”, Sergio Escalera, presidente de Sustenta, cuestionó la tendencia de las
autoridades a querer degradar los materiales plásticos cuando las leyes de residuos en
todo el país (la federal y las estatales) buscan impulsar la valorización de los residuos que
implica la conservación de recursos, mismos que se destruyen con la degradación.

“Si la degradabilidad hace que un material sea mejor que uno que no lo es, depende de
muchos factores, entre ellos el por qué es degradable. Si mediante la utilización de aditivos
o por su origen biológico, si proviene de derivados agrícolas alimenticios o de biomasa

residual de procesos agroindustriales, cómo será el proceso de disposición y manejo final,
cuál es la factibilidad de incorporarlo a procesos de recuperación o reciclaje, etcétera”,
agregó.

Así mismo, en el marco del foro, el director de Fomento Ambiental de la Secretaría del
Medio Ambiente y Recursos Naturales, César Chávez, presentó detalles del Programa
Nacional para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (PNPGIR). Esta iniciativa
tiene como fundamento desarrollar una política pública en todo el país que tenga como
sustento la separación, reutilización y reciclado, así como disposición final apropiada de
materiales.

“La diferencia de este programa de prevención es que aborda el tema desde una
perspectiva ambiental y no desde el punto de vista de infraestructura, como se hacía en
años pasados. Una de las premisas es transitar del modelo simple de recolección y
disposición final, al sistema de gestión integral de residuos, ya que en éste se habla de la
responsabilidad entre productores y consumidores", dijo Chávez.

Ponencias como las de Alejandro Sosa, director de la Iniciativa GEMI, sobre ética y
publicidad ambiental pusieron sobre la mesa la necesidad de llegar a una visión de
seriedad sobre este tema. “Si se desea tener la seriedad mencionada, se deben adoptar
códigos corporativos, pues de esta manera se tendrán verdaderos motivadores del
cambio. Parte de la complejidad del asunto de los problemas ambientales es que no se
tiene entre los actores un lenguaje común, por lo cual es muy complejo determinar si un
producto es o no sustentable y esto se evalúa de acuerdo con las prácticas que tiene cada
empresa”, explicó.

Para Sosa, es necesario que se regule a la publicidad de los productos que se anuncian
como amigables con el ambiente o verdes, pues dichos términos no se sustentan bajo
ninguna normatividad. “El consumidor debe ser crítico ante la información que brindan los
productos. Si uno dice material reciclado, degradable o biodegradable, el consumidor se
debe preguntar el por qué de esta información”, indicó.

LaIniciativa GEMI es una organización empresarial no lucrativa creada en 1990, junto con
la Global Environmental Management Initiative (GEMI) en Estados Unidos, por un grupo de
empresas de clase mundial comprometidas en la búsqueda de la excelencia en medio
ambiente, salud y seguridad. Para alcanzar tal compromiso, GEMI desarrolló diversas
herramientas ambientales entre las cuales destaca el Environmental Self Assessment
Program, publicado en 1992. A escala mundial se le reconoce por haber acuñado en 1991
el término Total Quality Environmental Management, que vincula formalmente la
administración ambiental con la calidad total.

Otra ponencia que generó gran interés fue la de David Cornell sobre aditivos de
degradación en plásticos y sus efectos ambientales. Este ponente, director técnico de la
Asociación de Recicladores de Plásticos Posconsumo (APR, sigla en inglés), se refirió a
los riesgos de la presencia de materiales degradables de origen desconocido en una
corriente de residuos reciclables, y enfatizó en la necesidad de que los proveedores de
aditivos degradantes, en particular los de oxo, comprueben a satisfacción del reciclador
que sus productos no afectan los procesos ni los productos del reciclaje en su aplicación
final.

Juan Antonio Hernández, presidente de la recién creada comunidad de Industriales de las
Bolsas Plásticas de México (Inboplast), presentó en su conferencia datos sobre la
importancia que tiene el uso de material reciclado en la fabricación de bolsas que, en
momentos como los actuales, les permite seguir siendo competitivos. De no contar con
ese insumo, de convertirse en degradables las bolsas, la competitividad de la industria
estaría en gran riesgo. Por eso, informó que Inboplast está terminando de elaborar un

protocolo de pruebas semejante al de APR para que con él se demuestre la reciclabilidad
de los materiales degradables que los proveedores de aditivos oxo reivindican para sus
productos.

Eduardo de la Tijera Coeto, director general de Grupo Texne y reconocido consultor de la
industria, dijo que el reciclaje de plásticos es el factor crucial para el cuidado del ambiente,
porque se ayuda a la conservación de recursos como el petróleo y otras energías, así
como el reaprovechamiento del material. “No hay en el mundo una norma que defina
exactamente los requerimientos de los materiales para que sean considerados
biodegradables en las condiciones de disposición de México, en rellenos sanitarios. Las
reformas a la Ley de Residuos están mal desde sus bases”, explicó de la Tijera Coeto.

La industria del reciclaje de plásticos de México se compone de 300 empresas que dan
empleo directo a más de 2.000 personas y generan empleos indirectos para más de 15 mil
personas. El director de Grupo Texne añadió que el reciclaje de plásticos tiene gran
potencial en tanto sea posible separar los residuos desde la fuente que los genera.

Por la sustentabilidad del plástico

“La iniciativa Acuerdo por la Sustentabilidad de los Plásticos, -promotora de los Foros-, es
el resultado de la participación de distintas empresas, organizaciones y personas para
promover la sustentabilidad de los plásticos por medio de iniciativas y acciones como la
difusión, análisis y debate sobre el tema”, dijo Eduardo de la Tijera Coeto. El Acuerdo se
basa en ocho principios: Sustentabilidad, recursos, responsabilidad, gestión integral,
valorización, información, ciclo de vida así como ética y transparencia.

Entre los integrantes de esta iniciativa se encuentran: Centro de Investigación y Desarrollo
(CID-KUO), Cyclo-P, DAK Américas, Dow Química Mexicana, Grupo IDESA Petroquímica,
Grupo Simples, Grupo TEXNE, Invista, Pemex Petroquímica, PetStar, Polímero y Materias
Primas Internacionales (Polymat).

Con los foros se dio pie al análisis y a la discusión acerca de la sustentabilidad de los
plásticos en términos técnicos, económicos e incluso sociales, dejando atrás una etapa de
debate comercial y publicitario que mucho ha perjudicado a todos, comentó Eduardo de la
Tijera como una de las conclusiones del evento. Sin embargo, de la Tijera explicó que la
discusión no ha terminado, pues aunque hay consenso en los temas principales, quedan
asuntos específicos que requieren de mayor análisis y discusión para llegar a mejores
acuerdos en beneficio no solo de la industria sino también del propio consumidor, de las
autoridades y del medio ambiente mismo.