HÁBITOS ALIMENTARIOS Y RIESGO DE CANCER DE PIEL NO MELANOMA DIET AND RISK OF NON MELANOMA SKIN CANCER

Página creada Susana Monardes
 
SEGUIR LEYENDO
Rev Chil Nutr Vol. 38, Nº1, Marzo 2011

                            HÁBITOS ALIMENTARIOS Y RIESGO
                            DE CANCER DE PIEL NO MELANOMA

                                      DIET AND RISK OF NON
                                     MELANOMA SKIN CANCER

             María Susana Dagatti (1), Agustina Bertola Compagnucci (1), Stella Maris Pezzotto (1,2)

                            (1) Instituto de Inmunología. Facultad de Ciencias Médicas.
                    (2) Consejo de Investigaciones, Universidad Nacional de Rosario. Argentina.

                                                   ABSTRACT
A case-control study was carried out in order to analyze the association between diet and risk of non melanoma
skin cancer -basal cell carcinoma (BCC) and squamous cell carcinoma (SCC), with adjustments for demographic,
anthropometric and phenotypic characteristics, sunburns history, skin cancer family history, sun-exposure history
and skin sensitivity to sun exposure. A full-body skin examination was performed. Dietary data were obtained
applying a standardized semi-quantitative questionnaire of consumption frequency. Cases (n=27; age: 65,5±15,1
years) and controls (n=37; age: 63,9±12,3 years) were attended at the same facilities. A decreased risk of BCC and
SCC tumors (Adjusted Odd Ratio=0.10; IC 95%= 0.02-0.63; p=0.01) was found for high intakes of green leafy
vegetables (more than 40 gr/day). However, results obtained for fruits, cruciferous, vitamin A and carotene-rich
vegetables and other vegetables were not statistically significant.
Key words: Skin cancer; basal cell carcinoma; squamous cell carcinoma; risk factors; diet.

     Este trabajo fue recibido el 7 de Julio de 2009 y aceptado para ser publicado el 20 de Noviembre de 2010.

                   INTRODUCCIÓN                               entre poblaciones lo que estaría determinado en gran
     El carcinoma basocelular (CBC) y el carcinoma            medida por factores ambientales y sería independiente
Espinocelular (CEC) representan la mayor proporción           de los factores genéticos poblacionales. Diversos estu-
de casos de cáncer de piel no melanoma. Ambos tienen          dios han demostrado la importancia de la nutrición en el
su origen en el queratinocito, célula que se ubica en la      desarrollo de cáncer, estimándose que hasta un 40% de
epidermis cutánea (1). La incidencia de esta patología        los tumores podría ser prevenido a través de mantener
se encuentra en permanente ascenso en la mayoría de           una dieta adecuada y estilos de vida saludables (9). Se
los países de occidente (2-4).                                han obtenido evidencias de que los factores dietarios
     La asociación de esta patología con la exposición        podrían prevenir el CEC y CBC, entre otros tumores
solar ha sido documentada en numerosas publicaciones,         cutáneos (10). Estudios in vitro y en animales sugieren
considerándose importante en su patogénesis tanto la          que la ingesta de antioxidantes, como las vitaminas C y
exposición solar continua como la intermitente. Entre los     E y b-carotenos (11-13), podrían proteger contra el daño
factores de riesgo más importantes han sido estudiados        oxidativo a la piel, neutralizando ciertos radicales libres
el fototipo de piel, la historia de quemaduras solares, los   (14). En la actualidad la dieta se sigue investigando a fin
antecedentes familiares de cáncer de piel y la presencia      de evaluar si ejercería un efecto protector en el desarrollo
de lesiones previas, tales como queratosis actínicas y        de este tipo de cáncer (15).
nevos atípicos (5-8).                                              Este estudio se desarrolló en Rosario, uno de los
     Se ha documentado que la dieta jugaría un papel          mayores centros urbanos de la República Argentina,
sustancial en el desarrollo de diversos tipos de cáncer.      ciudad de aproximadamente 1.000.000 de habitantes. La
Datos epidemiológicos han revelado que el riesgo de           misma se halla situada a orillas del río Paraná y su clima
desarrollar un tumor maligno presenta una gran variación      es templado (Lat. 32´56´S). Debido a que los estudios

                                                                                                                     15
DAGATTI M. Y COLS.

epidemiológicos de dicha patología en esta ciudad son         solar intermitente a los pacientes que realizaban activida-
escasos, es necesario comenzar a investigar la incidencia     des recreativas, vacacionales -al menos 10 días corridos
de la misma para tener un real conocimiento del proble-       en el año- y fines de semana. La categoría exposición
ma, que posiblemente sea subestimado.                         solar mínima fue asignada a aquellos pacientes que no
     El objetivo de este trabajo fue analizar la posible      realizaban actividades laborables ni recreativas al aire
acción de la dieta como factor de riesgo de desarrollar       libre, ni presentaban exposición solar vacacional.
cáncer cutáneo no melanoma de tipo CBC y CEC.                      La información sobre la dieta fue recolectada a tra-
                                                              vés de un cuestionario de frecuencia de consumo (FFQ)
                SUJETOS Y MÉTODOS                             semicuantitativo validado para su uso en Argentina (17).
     En la ciudad de Rosario, Argentina, se realizó un        Para calcular los gramos de consumo diario de cada
estudio epidemiológico analítico de casos y contro-           alimento, la cantidad de porciones se multiplicó por el
les. Los casos fueron individuos de ambos sexos con           gramaje de las mismas estandarizado para cada alimento
diagnóstico clínico e histológico de CBC o CEC que            en el FFQ, según lo reportado por cada encuestado y
concurrieron espontáneamente a la consulta dermato-           luego se convirtió a consumo diario. Posteriormente se
lógica. Los controles fueron pacientes que asistieron a       calculó el contenido de cada nutriente a través de tablas
las mismas instituciones por patologías distintas a las       de composición de alimentos (18).
mencionadas. Se excluyeron del estudio a los pacientes             Análisis estadístico: Para describir las variables
inmunodeprimidos, a aquellos que presentaron este             cuantitativas se calcularon medias ± errores estándar. La
tipo de tumor sobre úlceras o escaras previas, a quienes      comparación de estos valores entre casos y controles se
hubiesen realizado o estuvieran realizando tratamiento        realizó aplicando pruebas t de student. La significación
radiante, tratamientos con sustancias fotosensibilizantes,    estadística de las diferencias en la ingesta promedio de
a los procedentes de áreas endémicas de hidroarsenicis-       cada nutriente analizado entre casos y controles se eva-
mo crónico y a quienes padecían el síndrome del Nevo          luó a través de un análisis de covarianza, ajustando por
Basocelular.                                                  energía consumida. La significación de las diferencias
     En la anamnesis realizada se consignaron datos           entre proporciones se analizó utilizando pruebas de chi-
demográficos y antropométricos, características fenotípi-     cuadrado y prueba de la probabilidad exacta de Fisher,
cas, antecedentes familiares de cáncer de piel, exposición    según correspondiera.
solar laboral, vacacional y en el tiempo libre, uso de             Se calculó la mediana del consumo de cada grupo de
lámparas UV o camas solares, quemaduras solares en la         alimentos en el conjunto total de pacientes estudiados, y
infancia, en la adolescencia y en la última década y uso      se la utilizó para dicotomizar cada una de estas variables
de pantallas solares. Además se realizó un exhaustivo         en consumo bajo o alto. Se aplicó análisis de regresión
examen físico cutáneo.                                        logística múltiple para evaluar la asociación entre las
     Para clasificar a los pacientes según su tipo de piel    variables de interés y el riesgo de esta patología, ajus-
de acuerdo al color y la facilidad para broncearse con        tando por el efecto de las demás variables intervinientes
el sol, se utilizó la clasificación del Dr. T. Fitzpatrick    analizadas. Se estimaron los riesgos relativos a través
(16). Se trata de la observación del color de la piel en      del cálculo de los Odd-ratios (OR) como medidas de
las partes sin exponer o expuestas mínimamente al sol.        asociación entre el CBC y CEC y los factores de riesgo
Según esta clasificación, se consideran seis tipos de piel:   o de protección analizados. Se calcularon sus respectivos
Tipo I - Presenta intensas quemaduras solares, casi no        intervalos de confianza del 95% (IC 95%). Los datos
se pigmenta nunca y se descama de forma ostensible;           fueron procesados utilizando el programa STATA 6.0.
Tipo II - Se quema fácil e intensamente, pigmenta ligera-          Este estudio fue aprobado por la Comisión de Bioé-
mente y descama de forma notoria.; Tipo III - Se quema        tica de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad
moderadamente y se pigmenta correctamente.; Tipo              Nacional de Rosario, y todos los participantes firmaron
IV - Se quema moderada o mínimamente y pigmenta               un formulario de consentimiento informado.
con bastante facilidad y de forma inmediata al exponerse
al sol.; Tipo V - Raramente se quema, pigmenta con                               RESULTADOS
facilidad e intensidad; Tipo VI - No se quema nunca y             Se estudiaron 27 casos y 37 controles de ambos
pigmenta intensamente.                                        sexos, cuyos promedios de edad fueron 65,5 ± 2,9 y 63,9
     Para determinar la exposición solar habitual se tomó     ± 2,0, respectivamente (p=0,643). Las características
en cuenta en forma conjunta el número de horas que los        generales más relevantes de los pacientes estudiados
pacientes estuvieron expuestos al sol tanto en actividades    se muestran en la tabla 1. El 44% de los casos y 51%
cotidianas como laborales. Se consideró con exposición        de los controles eran de sexo masculino (p=0,58). El

16
HÁBITOS ALIMENTARIOS Y RIESGO DE CANCER DE PIEL NO MELANOMA

índice de masa corporal promedio (IMC) fue similar en                       diferente entre casos y controles (p=0,012).
los casos y en los controles (p=0,323). El 37,1% de los                          Al analizar los resultados del examen físico cutáneo
casos y 64,8% de los controles tenían educación primaria                    se encontró que las queratosis actínicas fueron signi-
(completa o incompleta) y el 62,9% y 35,2% tenían edu-                      ficativamente más frecuentes (p= 0,004) en los casos
cación secundaria o superior, respectivamente (p=0,050).                    (74,1%) que en los controles (37,8). Además, el 66,7%
El 29,6% de los casos y 43,2% de los controles tenían                       de los casos y el 100% de los controles presentaban
exposición solar habitual, el resto de los pacientes tenía                  menos de 10 nevos (p
DAGATTI M. Y COLS.

muestra en la tabla 2, en la que se observa que los casos                     la intermitente (OR=0,26; p=0,043; IC 95%=0,07-0,96)
presentaron una tendencia a consumir más lácteos, gra-                        y un incremento del riesgo con la presencia de queratosis
sas y crucíferas (repollo, coliflor, brócoli, repollitos de                   actínicas (OR=2,33; p=0,01; IC 95%= 1,24-4,39).
Bruselas) y menos vegetales de hojas verdes (espinaca,
lechuga, apio y acelga) que los controles.                                                          DISCUSIÓN
     Tal como se expresara en la sección materiales y                              El cáncer de piel es más frecuente que cualquier
métodos, se realizó un análisis basado en modelos de                          otro tipo de cáncer y se ha documentado que la expo-
regresión logística múltiple para evaluar el efecto de cada                   sición solar contribuye a desarrollar las tres variedades
variable en forma individual sobre el riesgo de cáncer de                     de mayor incidencia, como lo son el CBC, CEC y el
piel no melanoma, ajustado por los posibles efectos con-                      melanoma cutáneo (6).
fundidores de las demás variables involucradas. Los OR                             Numerosos estudios examinaron la relación entre el
ajustados mediante esta técnica, comparando consumo                           riesgo de desarrollar CBC según los factores constitu-
alto versus bajo de los grupos de alimentos estudiados                        cionales de las personas y su exposición solar, hallando
se muestran en la tabla III. Los OR correspondientes                          asociación positiva entre el número de quemaduras sola-
a consumo alto de frutas, crucíferas, vegetales ricos                         res y este cáncer. La piel, cabello y ojos claros y la edad
en vitamina A y carotenos (zapallo, calabaza, batata,                         avanzada serían importantes factores de riesgo (19-21).
tomate y zanahoria) y otros vegetales (papa, remolacha,                       Otros estudios han sido realizados a fin de analizar si
cebolla, ajo, pimiento, ajíes enlatados y berenjenas) no                      la exposición solar de tipo laboral diaria o la ocasional
resultaron estadísticamente significativos. En cambio, la                     incidirían de distinta manera como factores de riesgo
ingesta alta (más de 40 gramos diarios) de vegetales de                       tanto para el CBC como para el CEC (22-26).
hojas verdes estaría actuando como un factor protector                             Davies y colaboradores plantean que se ha atribuido
significativo.                                                                el aumento de la incidencia de CBC y CEC al incremento
     Además, se encontraron disminuciones en el riesgo                        de la exposición solar. Sin embargo, dicho factor no ha
de desarrollar esta patología con la exposición solar                         sido aun suficientemente cuantificado. Esta patología se
habitual versus la intermitente (OR=0,16; p=0,049; IC                         ha manifestado principalmente en cabeza y cuello, zonas
95%=0,03-0,99) y con la exposición solar mínima versus                        siempre mas expuestas a la radiación solar. Estos autores

                                                                   TABLA 2

                Consumo promedio (media ± error estándar) de los diferentes de grupos de alimentos.

      Alimentos (gramos/día)                         Casosa              Controlesa               Casosb           Controlesb                 pc

      Vegetales ricos en vitamina A
      y carotenos1                                135,7±16,4             126,6±14,5            134,3±16,9          127,7±14,4                0,768
      Vegetales de hojas verdes2                    15,4±4,2              62,8±13,0             16,2±12,0           62,2±10,0                0,005
      Crucíferas3                                   32,8±5,4               15,4±6,1              32,6±6,6            15,5±5,6                0.053
      Otros vegetales  4
                                                   78,9±13,4              92,7±10,7             78,2±13,1           93,2±11,1                0.389
      Frutas ricas en vitaminas A y C       5
                                                  104,1±19,9             105,3±22,0            102,8±23,7          106,3±20,3                0,911
      Otras frutas                                178,6±20,1             145,8±16,8            180,3±20,0          144,5±17,1                0,181
      Carnes y fiambres                           195,6±19,0             204,8±23,4            185,9±20,5          211,8±17,5                0,344
      Lácteos                                     398,8±42,0             281,4±32,3            395,2±39,9          284,0±34,0                0,039
      Huevos                                         7,5±0,9                8,1±2,3               7,2±2,1             8,4±1,8                0,680
      Otras grasas                                   8,4±3,0                3,1±1,0               8,3±2,2             3,2±1,9                0,077
  1
    zapallo, calabaza, batata, tomate y zanahoria; 2espinaca, lechuga, apio y acelga; 3repollo, coliflor, brócoli, repollitos de Bruselas;
  4
    papa, remolacha, cebolla, ajo, pimiento, ajíes enlatados y berenjenas; 5cítricos, kiwi, ciruelas y cerezas.
  a
   Datos crudos. bDatos ajustados por energía total consumida.
  c
   Diferencias del consumo entre casos y controles, ajustadas por energía total consumida.

18
HÁBITOS ALIMENTARIOS Y RIESGO DE CANCER DE PIEL NO MELANOMA

sugieren que existe evidencia de que el incremento de                       asociación positiva entre estas patologías y la ingesta de
la ingesta de una dieta rica en grasas ha intensificado la                  una dieta rica en grasas, una asociación inconsistente con
sensibilidad de la piel a potenciales cancerígenos como la                  el retinol y una asociación leve con los b-carotenos. La
luz solar, particularmente en el CEC (27). Se debe tener                    evidencia para la asociación con la vitamina E, vitamina
presente que la dieta habitual en nuestro país presenta                     C, y el selenio fue débil. Los autores plantean que para
dichas características.                                                     clarificar estos puntos sería necesaria la realización de
     Desde hace algunos años se viene estudiando un                         nuevos estudios.
grupo específico de vitaminas con ciertas propiedades                            Se conoce que las verduras de hojas verdes contie-
y funciones en común, los antioxidantes. Estos se ca-                       nen una variedad de vitaminas, minerales y otras sus-
racterizan por tener la función de impedir o retrasar la                    tancias bioactivas que pueden proteger contra cánceres,
oxidación de diversas sustancias, principalmente de los                     tales como la luteína, las vitaminas C, E y ácido fólico,
ácidos grasos cuyas reacciones se producen tanto en                         flavonoides y fibras. Las verduras de hojas verdes ejer-
los alimentos como en el organismo humano, pudiendo                         cerían un efecto protector contra el desarrollo de CEC;
provocar en este último alteraciones fisiológicas im-                       que podría deberse a que la combinación de nutrientes
portantes (28).                                                             encontrada en estos alimentos proporciona un efecto
     El mecanismo primario por el cual las vitaminas A y                    anti-cancerígeno, o al hecho de que la ingesta de este
E tendrían un efecto protector en la carcinogénesis puede                   tipo de verduras estaría indicando un modelo de dieta
deberse a que actúan como antioxidantes y protectores                       saludable. En un estudio realizado en Nambour se en-
celulares contra el daño oxidativo, no descartándose la                     contró una correlación significativa entre el consumo de
existencia de otros posibles mecanismos involucrados                        verduras de hojas verdes y el consumo de otras frutas,
(29). Se sabe además que la vitamina A tendría ciertos                      otras verduras y pollo sin piel. Los autores sugieren que
efectos sobre el sistema inmune (30).                                       el consumo de verduras de hojas verdes, que son una
     La importancia de los factores dietéticos sobre                        fuente rica de ácido fólico, jugaría un papel importante
el desarrollo de CBC y CEC ha sido recientemente                            en la síntesis, reparación y metilación del ADN (32).
estudiada en una revisión sistemática de 26 trabajos                             Como mencionamos previamente, la exposición so-
publicados (31). Dicho análisis indicó que existiría una                    lar es el factor de riesgo más importante para desarrollar

                                                                  TABLA 3

                                  OR e intervalos de confianza del 95% para CBC y CCE
                                   según consumo de los distintos grupos de alimentos.

      Grupos de alimentos                                                                    OR*                  IC 95%                     p

      Vegetales ricos en vitamina A y carotenos1 (≥100 g/día)                                1,33                0,47-3,76                  0,59
      Vegetales de hojas verdes2 (≥ 40 g/día)                                                0,10                0,02-0,63                  0,01
      Crucíferas3 (≥ 20 g/día)                                                               1,32                0,98-2,04                  0,25
      Otros vegetales4 (≥ 80 g/día)                                                          0,96                0,35-2,64                  0,94
      Frutas ricas en vitaminas A y C5 (≥ 70 g/día)                                          1,02                0,37-2,81                  0,96
      Otras frutas (≥ 130 g/día)                                                             1,17                0,43-3,18                  0,76
      Carnes y fiambres (≥ 160 g/día)                                                        0,92                0,31-2,75                  0,88
      Lácteos (≥ 325 g/día)                                                                  2,71                0,97-7,61                  0,06
      Grasas (≥ 10 g/día)                                                                    1,35                0,49-3,75                  0,57
      Huevos (≥ 10 g/día)                                                                    1,43                0,45-4,53                  0,54
  1
   zapallo, calabaza, batata, tomate y zanahoria; 2espinaca, lechuga, apio y acelga; 3repollo, coliflor, brócoli, repollitos de Bruselas;
  4
   papa, remolacha, cebolla, ajo, pimiento, ajíes enlatados y berenjenas; 5cítricos, kiwi, ciruelas y cerezas.
  *
   Estimados a partir de un modelo logístico incluyendo los grupos de alimentos, la energía total consumida, la exposición solar,
  el fototipo de piel (I-II/III-IV) y la presencia de queratosis actínicas.

                                                                                                                                                 19
DAGATTI M. Y COLS.

CEC o CBC pero, a pesar de ello, un alto consumo de          Dirigir la correspondencia a:
vegetales de hojas verdes modificaría el efecto negativo         Dra.
de este factor.                                                  Stella M. Pezzotto
     Una limitación del presente estudio es el reducido          Instituto de Inmunología,
número de pacientes incorporados hasta este momento.             Facultad de Ciencias Médicas
Las ventajas del mismo están dadas por una recolección           Santa Fe 3100.
minuciosa de información sobre numerosas variables,              2000 Rosario
considerando no sólo las características fenotípicas de          Argentina
las personas entrevistadas, sus hábitos de exposición            Teléfono: + 54-341-155669150
solar y estilo de vida sino también las características          Fax: + 54-341-4804569
de la dieta. Se debe tener presente que la anamnesis             E-mail: spezzot@unr.edu.ar
alimentaria requiere un cuidadoso entrenamiento del
entrevistador y la realización de la misma demanda un                          BIBLIOGRAFÍA
tiempo importante. El FFQ es el método más apropiado         1. Jemal A, Murray T, Samuels A, Ghafoor A, Ward
para la obtención de datos sobre alimentación en estudios        E, Thun MJ. Cancer statistics 2003. CA Cancer J
epidemiológicos, debido a que permite categorizar a los          Clin. 2003; 53(1):5–26.
individuos en función del nivel de consumo de alimentos,     2. Greenlee RT, Hill-Harmon MB, Murray T, Thun
por ende puede discriminar aquellas personas que con-            M. Cancer statistics 2001. CA Cancer J Clin. 2001;
sumen mucho un alimento o grupo de ellos en relación             51:15-36.
a las que lo consumen poco o no lo hacen nunca. Ade-         3. Michal Freedman D, Sigurdson A, Morin Doody M,
más, este método posee la característica de ser práctico,        Mabuchi K, Linet MS. Risk of Basal Cell Carci-
económico y proveer una adecuada información sobre               noma in Relation to Alcohol Intake and Smoking.
antiguas ingestas alimentarias (33).                             Cancer Epidemiology, Biomarkers Prevention.
     Los resultados preliminares de este estudio permiten        2003; 12:1540-1543.
identificar grupos de riesgo en los cuales la implementa-    4. Cantwell MM, Murray LJ, Catney D, Donnelly D,
ción de medidas preventivas simples tendría un rol fun-          Autier P, Boniol M, Fox C, Middleton RJ, Dolan
damental. Es necesario insistir en mejorar la educación          OM, Gavin AT. Second primary cancers in patients
acerca de los peligros del sol, así como la importancia          with skin cancer: a population-based study in North-
de una dieta saludable.                                          ern Ireland Br J Cancer. 2009 13; 100(1): 174–7.
                                                             5. Adami H.O, Hunter D, Trichopoulos D. Skin Cancer
                      RESUMEN                                    in Textbook of cancer epidemiology. Oxford Uni-
     Mediante un diseño de casos y controles se evaluó           versity Press 2002; Chap 13:281-301.
si la dieta habitual modifica el riesgo de desarrollar       6. Turgay AS, Sari D, Can M, Genc RE. Determination
cáncer de piel no melanoma: carcinomas basocelulares             of sunburn and skin cancer risk of outpatients in a
y carcinomas espinocelulares. En la consulta se consig-          dermatology polyclinic. Asian Pac J Cancer Prev.
naron datos demográficos, características fenotípicas            2005;6(2):143-6.
y antropométricas, antecedentes de quemadura solar,          7. Scotto J, Fears TR, Kraemer KH, Fraumeni JF Jr.
antecedentes familiares de cáncer de piel y hábitos de           Nonmelanoma skin cancer, in: Schottenfeld, D and
exposición solar, y se realizó un exhaustivo examen              Fraumeni, JF Jr. (eds.), Cancer Epidemiology and
físico cutáneo. La dieta fue evaluada por cuestionarios          Prevention, 2nd Ed. New York: Oxford University
semi-cuantitativos de frecuencia de consumo. Se estu-            Press, 1996.
diaron 27 casos (edad: 65,5±15,1 años) y 37 controles        8. Leiter U, Garbe C. Epidemiology of melanoma and
(63,9±12,3) que asistieron a las mismas instituciones por        nonmelanoma skin cancer--the role of sunlight. Adv
otras patologías. La ingesta alta de vegetales de hojas          Exp Med Biol. 2008;624:89-103.
verdes (más de 40 g/d) actuaría como factor protector        9. Pierart C, Rozowsky J. Papel de la nutrición en la
(Odd Ratio ajustado= 0,10; IC 95%= 0,02-0,63; p=0,01),           prevención del cáncer gastrointestinal. Rev Chil
modificando el efecto negativo de la exposición solar.           Nutr 2006; 33 (1): 8-13.
En cambio, los resultados obtenidos para frutas, crucí-      10. Ibiebele TI, van der Pols JC, Hughes MC, Marks
feras, vegetales ricos en vitamina A y carotenos y otros         GC, Williams GM, and Green A C. Dietary pattern
vegetales no resultaron estadísticamente significativos.         in association with squamous cell carcinoma of the
     Palabras clave: Cáncer cutáneo; carcinoma basoce-           skin: a prospective study. Am J Clin Nutr. 2007;
lular; carcinoma espinocelular; factores de riesgo; dieta.       85:1401–8.

20
HÁBITOS ALIMENTARIOS Y RIESGO DE CANCER DE PIEL NO MELANOMA

11. Rackett SC, Rothe MJ, Grant-Kels JM. Diet and                 22. Pipitone M, Robinson JK, Camara C, Chittineni
    dermatology. The role of dietary manipulation in the              B, Fisher SG. Skin cancer awareness in suburban
    prevention and treatment of cutaneous disorders. J                employees: a Hispanic perspective. J Am Acad
    Am Acad Dermatol. 1993;29:447–61.                                 Dermatol. 2002; 47(1):118-23.
12. Kagan VE, Kisin ER, Kawai K, Serinkan BF,                     23. Radespiel-Tröger M, Meyer M, Pfahlberg A, Lausen
    Osipov AN, Serbinova EA, Wolinsky I, Shvedova                     B, Uter W, Gefeller O.Outdoor work and skin cancer
    AA.Toward mechanism-based antioxidant interven-                   incidence: a registry-based study in Bavaria. Int
    tions: lessons from natural antioxidants. Ann N Y                 Arch Occup Environ Health. 2009;82(3):357-63.
    Acad Sci. 2002 ;959:188-98.                                   24. Almahroos M, Kurban AK. Ultraviolet carcinogen-
13. Sies H, Stahl W. Nutritional protection against                   esis in nonmelanoma skin cancer part II: review and
    skin damage from sunlight. Annu Rev Nutr.                         update on epidemiologic correlations. Skinmed.
    2004;24:173–200.                                                  2004;3(3):132-9.
14. Steenvoorden DP, Van Henegouwen GM. The use                   25. Heenan MG, Randell PJ. Case-control study of sun
    of endogenous antioxidants to improve photopro-                   exposure and squamous cell carcinoma of the skin.
    tection. J Photochem Photobiol B. 1997;41:1–10.                   Int J Cancer. 1998; 77(3):347-53.
15. Fung TT, Hunter HJ, Spiegelman D, Colditz GA,                 26. Kricker A, Armstrong BK, English DR, Heenan, PJ.
    Speizer FE, Willett WC. Vitamins and carotenoids                  Does intermittent sun exposure cause basal cell car-
    intake and the risk of basal cell carcinoma of the skin           cinoma? A case-control study in Western Australia.
    in women. Cancer Causes Control. 2002;13: 221-30.                 Int J Cancer. 1995; 60(4):489-94.
16. Fitzpatrick T. Dermatología en Medicina General               27. Davies TW, Treasure FP, Welch AA, Day NE. Diet
    7ª Ed. Médica Panamericana, 2009.                                 and basal cell skin cancer: results from the EPIC-
17. Navarro A, Osella AR, Guerra V, Muñoz SE, Lan-                    Norfolk cohort. Br J Dermatol. 2002; 146(6):1017-
    tieri MJ, Eynard AR. Reproducibility and validity                 22.
    of a food-frequency questionnaire in assessing                28. Zamora JD. Antioxidantes: micronutrientes en lucha
    dietary intakes and food habits in epidemiological                por la salud. Rev Chil Nutr 2007; 34(1): 17-26.
    cancer studies in Argentina. J Exp Clin Cancer Res.           29. McNaughton SA, Marks GC, Gaffney P, Williams
    2001;20(3):365-70.                                                G, Green AC.: Antioxidants and basal cell carcino-
18. Composition of Foods.: Raw, Processed, Prepared                   ma of the skin: a nested case-control study. Cancer
    U.S. Department of Agriculture, Agricultural Re-                  Causes Control. 2005;16(5):609-18.
    search Service, USDA Nutrient Data Laboratory.                30. La Vecchia C, Altieri A, Tavani A. Vegetables, fruit,
    USDA Nutrient Database for Standard Reference,                    antioxidants and cancer: a review of Italian studies.
    Release p. 14, 2001.                                              Eur J Nutr. 2001;40(6):261-7.
19. Saladi RN, Persaud AN. The causes of skin can-                31. McNaughton SA, Marks GC, Green AC. Role
    cer: a comprehensive review. Drugs Today (Barc).                  of dietary factors in the development of Basal
    2005; 41:37.                                                      Cell Cancer and Squamous Cell Cancer of
20. Van Dam RM, Huang Z, Rimm EB, Weinstock MA,                       the Skin. Cancer Epidemiol Biomarkers Prev.
    Spiegelman D, Colditz GA, Willett WC, Giovan-                     2005;14(7):1596-607.
    nucci E. Risk factors for basal cell carcinoma of             32. Hughes MC, van der Pols JC, Marks GC, Green. AC.
    the skin in men: results from the health profes-                  Food intake and risk of squamous cell carcinoma of
    sionals follow-up study. Am J Epidemiol. 1999;                    the skin in a community: The Nambour skin cancer
    150(5):459-68.                                                    cohort study. Int J Cancer 2006;119:1953–60.
21. Terkonda SP, Perdikis G. Non-melanotic skin                   33. Willett WC, Hu FB. Not the Time to Abandon the
    tumors of the upper extremity. Hand Clin. 2004;                   Food Frequency Questionnaire. Cancer Epidemiol
    20(3):293-301.                                                    Biomarkers Prev. 2006; 15: 1757-8.

                                                                                                                       21
También puede leer