El amenazado lince ibérico habitó en Italia hasta hace 40.000 años

Página creada Flavio Fontela
 
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El amenazado lince ibérico habitó en Italia hasta hace 40.000 años
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El amenazado lince ibérico habitó en Italia
hasta hace 40.000 años
Un equipo de paleontólogos ha descrito fósiles de lince ibérico de unos
40.000 años de antigüedad en el yacimiento de Ingarano, en Italia. Los
restos, extremadamente bien conservados, representan el registro más al
sur de Italia y más al este de Europa de la especie, que por causas
desconocidas se extinguió en ese momento en la zona, donde era de un
tamaño mayor, y quedó restringida a su área de distribución actual en la
Península.

SINC                               15/3/2021 11:25 CEST

Cráneo original restaurado digitalmente (izquierda) y recreación del aspecto en vida (derecha) del
ejemplar de Lynx pardinus de Ingarano. / Dawid A. Iurino / Sapienza Universitá di Roma

El lince ibérico (Lynx pardinus) es la especie de félido más amenazada del
mundo, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
(UICN). A comienzos del siglo XXI, la especie se encontraba en grave riesgo
de extinción, pero gracias a los enormes esfuerzos de conservación de los
últimos 20 años, fruto de un programa LIFE financiado por la Unión Europea,
en el último censo se alcanzaron casi los 900 ejemplares en libertad.
El amenazado lince ibérico habitó en Italia hasta hace 40.000 años
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    El trabajo incluye, además de mandíbulas y dientes,
  varios cráneos extraordinariamente bien conservados
que han permitido asignar los restos de forma indudable
                        a la especie ibérica

En la actualidad, su distribución se limita a determinadas zonas del Parque
Nacional de Doñana y otros pequeños reductos en el sur de la península
ibérica y Portugal. Sin embargo, el futuro de esta pequeña especie de félido
es incierta debido a la reducción de su hábitat y la dependencia del conejo
de campo, también en recesión y amenazado por varias enfermedades
infecciosas.

Si bien el conocimiento de la biología y ecología de esta especie han sido
elementos clave para su recuperación, su historia evolutiva y su origen como
especie era bastante desconocida. Ahora, un estudio, publicado en la revista
Quaternary Science Reviews por investigadores de la Sapienza Università di
Roma y el Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP), describe
unos 415 restos fósiles de 40.000 años de antigüedad de esta especie en el
yacimiento de Ingarano (cerca de Foggia, en el sureste de Italia).

El trabajo incluye, además de mandíbulas y dientes, varios cráneos
extraordinariamente bien conservados que han permitido asignar los restos
de forma indudable a la especie ibérica, gracias a los detalles observados en
las imágenes obtenidas por tomografía computarizada.

Cráneo fósil de Lynx pardinus (derecha) y modelo 3D del cráneo y la mandíbula (izquierda)
obtenido mediante tomografía computarizada. / Dawid A. Iurino / Sapizenza Università di Roma
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La extensión del lince fue mayor de lo que se pensaba
La localización de restos de lince de una antigüedad de 1,6 millones de
años en un yacimiento de Gavà (Barcelona) en 2015 permitió constatar que
el origen de esta especie se remonta a tiempos lejanos. “Hasta hace
relativamente poco se creía que esta especie había aparecido hace apenas
unos 40.000 o 50.000 años”, explica Joan Madurell, paleontólogo del ICP,
coautor del estudio que estudia la historia evolutiva del lince ibérico desde el
año 2010.

             Los ejemplares de Ingarano habrían sido bastante
             más grandes que los que actualmente sobreviven
                                en la Península

“Creemos que hace aproximadamente 1,8 millones de años, coincidiendo
con un periodo de glaciación, el lince quedó aislado en la península ibérica”,
comenta Madurell. Aquí se habría tenido que adaptar a cazar presas de
menor tamaño, como los conejos, y este hecho explicaría que su tamaño
corporal disminuyese en comparación con el lince boreal que habitaba en el
resto del continente.

Hace unos 600.000 años pudo salir de la Península y colonizar el sur de
Francia, donde también se han encontrado fósiles a lo largo de las últimas
décadas, y llegar hasta Italia, donde sobrevivió hasta hace unos 40.000
años.

“No sabemos cuáles fueron las causas precisas de su extinción en el resto
de Europa, pero no están relacionadas con la actividad humana”, indica
Madurell. Los análisis de ADN fósil de esta especie revelan que hace entre
40.000 y 50.000 años su diversidad genética ya era bastante baja, lo que
podría haber limitado su capacidad de adaptación a nuevos ambientes.

A diferencia del lince ibérico ( Lynx pardinus), el lince boreal (Lynx lynx) es
una especie ampliamente distribuida en la actualidad por los bosques
europeos y siberianos. Hasta mediados del siglo pasado todavía vivían
algunos individuos en los Pirineos que acabaron desapareciendo debido a la
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caza. Es un poco mayor; pesa entre 17 y 20 kilos, mientras que el ibérico
oscila entre los 13 y los 17 kilos. Los ejemplares de Ingarano, sin embargo,
habrían sido bastante más grandes que los que actualmente sobreviven en
la Península.

   Referencia:

   Mecozzi, B., et al. 2021. "The tale of a short-tailed cat: new outstanding
   Late Pleistocene fossils of Lynx pardinus from southern
   Italy". Quaternary Science Reviews . DOI:
   10.1016/j.quascirev.2021.106840

Derechos: Creative Commons.

 TAGS     LINCE IBÉRICO     EXTINCIÓN      FÓSILES     ANÁLISIS     CRÁNEOS

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