QUEREMOS LAS ONDAS! UNA BREVE HISTORIA DEL MOVIMIENTO DE RADIOS LIBRES EN ESPAÑA, DE LA TRANSICIÓN A LOS PRIMEROS GOBIERNOS SOCIALISTAS - Dialnet
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Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 ISSN: 1696-2060 ¡QUEREMOS LAS ONDAS! UNA BREVE HISTORIA DEL MOVIMIENTO DE RADIOS LIBRES EN ESPAÑA, DE LA TRANSICIÓN A LOS PRIMEROS GOBIERNOS SOCIALISTAS (1976-1989) WE WANT THE AIRWAVES! A BRIEF HISTORY OF THE FREE RADIO MOVEMENT IN SPAIN, FROM THE TRANSITION TO THE FIRST SOCIALIST GOVERNMENTS (1976-1989) José Emilio Pérez Martínez* * Sorbonne Université, Francia. E-mail: joseemiliopm@gmail.com Recibido: 24 noviembre 2020 / Revisado: 21 enero 2021 / Aceptado: 6 febrero 2021 / Publicado: 26 febrero 2021 Resumen: Las radios libres llegaron a España a INTRODUCCIÓN E finales de la década de 1970, muy influenciadas por los ejemplos de Francia e Italia, con la inten- l movimiento de las radios libres apareció ción de implantar un nuevo modelo comunicati- con fuerza en el Estado español en los pri- vo y dar voz a aquellas personas y colectivos que meros compases de la década de 1980, aun- no tenían representación en los medios genera- que pueden encontrarse sus precedentes en los listas. El artículo se centra en su evolución du- últimos años de la anterior. Muy influenciadas rante su primera época, entre 1976 y 1989, aten- por los casos de Italia y Francia, anteriores en el diendo a cómo se expandieron por el país, cuáles tiempo, estas emisoras conocieron, hasta 1989, fueron sus características y cómo se relacionaron sus años de mayor expansión y protagonismo, si- con las autoridades en un contexto en el que la guiendo aquella máxima del movimiento italiano legislación no las reconocía. que, parafraseando al presidente Mao Tse-Tung, clamaba: “¡Que cientos de flores florezcan, que Palabras clave: radios libres, comunicación al- cientos de radios emitan!”. ternativa, libertad de expresión, radios comuni- tarias, LOT A pesar de la importancia que alcanzaron, rese- ñables son sus apariciones en la prensa periódica Abstract: Free radio stations arrived in Spain at de todo signo, estas emisoras han permanecido the end of the 1970s, heavily influenced by the tradicionalmente en los márgenes del discurso examples of France and Italy, with the intention historiográfico. Este vacío ha sido notable du- of implementing a new communication model rante años y sólo en los últimos tiempos han and giving a voice to those people and groups ido apareciendo investigaciones que venían a that were not represented in the generalist me- reconstruir el pasado de este movimiento social dia. The article focuses on their evolution du- que, con cambios, sobrevive hoy en día bajo la ring their first period, between 1976 and 1989, misma denominación o la de radios comunita- looking at how they expanded throughout the rias. country, what their characteristics were and how they related to the authorities in a context whe- A la vista de este hecho, el presente artículo pre- re the legislation did not recognise them. tende recuperar su primera etapa, la que va de 1976 a 1989, de la aparición de las primeras emi- Keywords: free radios, alternative communica- soras que podrían considerarse libres al concur- tion, freedom of speech, community radios, LOT so de licencias puesto en marcha por el gobier- © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 131
¡Queremos las ondas! Una breve historia José Emilio Pérez Martínez no del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), de la radiodifusión alternativa. En primer lugar que supuso el primer punto de inflexión grave en debemos tener en cuenta que si bien es cierto la historia del movimiento. que en otras latitudes el fenómeno recibió el nombre de “radios comunitarias” –América La- Problematizaremos el propio concepto de radio tina2 o Canadá3, por ejemplo– el caso que nos libre y la categorización de este tipo de emisoras, ocupa, debido a las influencias recibidas de Ita- realidades complejas dada la heterogeneidad de lia4 y Francia5, optó, de forma unánime, en esta estos proyectos, y sobre las que no existe un con- primera fase por la denominación de libre, y senso, reflexionaremos sobre su periodización e solamente hacia el final de la década de 1980, intentaremos desvelar qué papel tuvieron estos y los primeros años de la de 1990, aparecerán proyectos en la sociedad española de aquellos con pujanza otras denominaciones como las de complejos años, cuáles fueron sus contenidos y “culturales” y la ya señalada “comunitarias”, que cómo fueron sus relaciones con las distintas au- han de entenderse en sus distintos contextos toridades. regionales, ya que su emergencia respondió, en muchos casos, a desarrollos concretos del mo- Para la realización de este trabajo nos apoyare- vimiento en los distintos territorios del Estado, mos, principalmente, en dos pilares. En primer como se ha estudiado para el caso de Madrid6. lugar, en un importante vaciado bibliográfico en el que se han recogido los trabajos que han A pesar de su heterogeneidad, es posible esta- precedido a este, tanto desde la Historia como blecer unos mínimos comunes a la gran mayoría desde los Estudios de Comunicación1. Estos su- de proyectos que se integraron en el movimien- ponen la base sobre la que se desarrolla la in- to de las radios libres y que las habría diferen- vestigación que aquí presentamos. En segundo ciado del resto de formas de radiodifusión con lugar, en un acerbo documental, recopilado du- las que compartieron las ondas: aquellas de ti- rante años de investigación y trabajo de campo, tularidad pública, las emisoras comerciales, las que se compone de una serie de documentos de municipales y las radios piratas. Como primera distinta tipología producidos por las propias ra- característica debemos señalar que la propie- dios, la prensa generalista del momento y algu- dad de estas emisoras era privada, pero con nas publicaciones alternativas que dieron cabida un marcado carácter asociativo, es decir, estos a la problemática de estas radios en sus páginas. proyectos pertenecían directamente a la ciuda- danía. Incidiendo en esta línea hemos de desta- El artículo queda, por lo tanto, estructurado de car su carácter abierto, constituyendo espacios la siguiente manera: en un primer momento que tenían como vocación la incorporación a las nos acercaremos a la definición de las emisoras mismas de amplios sectores sociales. La apuesta libres, a continuación, y a lo largo de tres epígra- por un modelo de toma de decisiones horizontal, fes, reconstruiremos el marco cronológico an- basado en la asamblea, y la defensa de su inde- teriormente propuesto y, para concluir, presen- pendencia –tanto política, como económica–, de taremos algunas reflexiones sobre el papel de cara a no perder su libertad a la hora de generar estas emisoras, así como su presente y su futuro. contenidos, serían otras dos características de- 1. RADIOS LIBRES: DEFINICIÓN DE UN FENÓ- finitorias de este fenómeno. Finalmente, debe- MENO HETEROGÉNEO mos señalar la ausencia de ánimo de lucro y la defensa de una nueva forma de entender las di- Como hemos señalado, delimitar este tipo de námicas comunicativas, basadas en la participa- emisoras se torna complejo debido a su hetero- geneidad, hecho que ha provocado que sea difí- cil encontrar una definición estándar que aúne 2 Pulleiro, Adrián, La radio alternativa en América La- todas las particularidades existentes en el campo tina, Buenos Aires, Cooperativa El Río Suena, 2012. 3 Senecal, Michel, Televisiones y radios comunitarias, Barcelona, Mitre, 1986. 1 A lo largo de estas páginas irán apareciendo refe- 4 Prado, Emilio, Las radios libres, Barcelona, Mitre, rencias tanto a estudios clásicos como a investigacio- 1983. nes más recientes. Queremos, no obstante, señalar la 5 Lefebvre, Thierry, La bataille des radios libres 1977- labor que viene realizando en los últimos tiempos la 1981, París, Nouveau Monde Editions, 2008. Red de Investigación en Comunicación Comunitaria, 6 Pérez Martínez, José Emilio, “La radio libre en Ma- Alternativa y Participativa (RICCAP), cuyos trabajos drid (1976-1989): los orígenes del movimiento por la sobre el Tercer Sector de la Comunicación están ayu- libertad de emisión”, Commons: revista de comunica- dando a una mejor comprensión de estas radios. ción y ciudadanía digital, 7/1 (2018), pp. 112-143. 132 © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142
José Emilio Pérez Martínez ¡Queremos las ondas! Una breve historia ción y el feedback emisor-receptor, como otras queda fuera de consideración, pues se corres- particularidades de estas emisoras. ponde con lo que en el panorama de la radio- difusión estatal se conoce históricamente como Algunos autores apuntan como elemento clave “radios piratas”, es decir, emisoras comerciales en la diferenciación de este tipo de proyectos sin licencia. Sobre el resto de categorías habría el carácter local de sus emisiones7, una reali- que hacer, sin embargo, algunas matizaciones11. dad común que, sin embargo, debe ser proble- matizada. Al hablar de grandes urbes tenemos La única categoría aplicable de forma íntegra constancia de que fueron múltiples los proyectos sería la de emisoras “epicúreas”: “aquellas que que tuvieron un alcance que Rosa Franquet de- emiten [y debemos incluir aquí un en principio] nomina “metropolitano”, es decir, que su men- por el simple placer de emitir que experimentan saje llegaba –o pretendía llegar– al total de la quienes las operan”12. Uno de los casos más re- ciudad en la que se emplazaba la emisora8. Las levantes fue la madrileña La Cadena del Water, madrileñas Onda Verde y Radio Cero, por ejem- un proyecto puesto en marcha por un grupo ce- plo, constituyeron dos ejemplos de radios “me- rrado de personas que no perseguía con su pra- tropolitanas”, algo que fue causa de importantes xis nada más allá del disfrute de comunicar. Sin debates dentro de algunos colectivos e incluso embargo, y de ahí el en principio, esta emisora dentro del propio movimiento. La primera es un cumplió, gracias a su forma de entender la ra- claro ejemplo de disensiones internas en un pro- diodifusión, con algunos de los planteamientos yecto anterior, Onda Verde Vallekana, que quedó propios de las radios libres13. dividido en dos grupos. Por un lado, aquellos que querían llegar a todo Madrid y fundaron Onda Dentro de las “revolucionarias” y las “sectoria- Verde. Por otro, los que preferían un modelo les”, Aguilera reconocía la existencia de radios de alcance local centrado en el barrio, que años “de partido”, “políticas”, que, aunque fueron más tarde fundarían Radio Vallekas. Radio Cero, comunes en Italia, son una modalidad que no tal y como recogen algunos testimonios, al in- podemos reconocer para España14. El término tentar llegar desde sus céntricos estudios a todo se utilizó a lo largo de la década de 1980, pero Madrid, terminó interfiriendo la labor de otras siempre como una forma de señalar que una emisoras, como Radio Albatros, radio del barrio emisora no estaría cumpliendo con el principio de Ventilla, en el norte de la ciudad9. de autonomía política. Recurrentes fueron, a este respecto, las disensiones entre sectores del Algunos investigadores han intentado establecer movimiento de las radios libres y el Movimiento categorías de emisoras dentro de esta diversidad Comunista (MC). a la que ya hemos hecho referencia. Destaca el modelo propuesto por Miguel Aguilera, que di- La intensa actividad de este partido dentro de ferenciaba varios tipos de radios libres dentro de la radiodifusión alternativa y su participación este espectro: comerciales, revolucionarias, sec- en la promoción de este tipo de radios o en sus toriales y epicúreas. Una clasificación derivada asambleas terminó generando rupturas y des- de la observación del fenómeno italiano y que, acuerdos. Por lo tanto, la denominación de ra- aunque algunos autores la han aplicado recien- dio “de partido” constituyó una grave acusación temente al caso que aquí nos ocupa, no es posi- esgrimida, en ocasiones, al existir diferencias en ble importarla en su totalidad para las emisoras los planteamientos sobre hacia dónde debían españolas10. Como ya hemos señalado en otros caminar las radios libres. Txomin Barullo Irratia trabajos, la categoría de emisoras comerciales 11 Pérez Martínez, José Emilio, Una historia de la radio 7 García Gil, Samuel et al., “Espacios alternativos de libre madrileña (1976-1989) (Documento de trabajo/ libertad durante la Transición. Breve historia de las ra- Seminario de investigación), Universidad Compluten- dios libres en España (1976-1983)”, Revista Latina de se de Madrid, 2012, pp. 11 y 12. Comunicación Social, 73 (2018), p. 1.182. 12 Aguilera, Miguel, Radios libres y radios piratas, Ma- 8 Franquet, Rosa, “Las radios libres”, en Prado, Emilio drid, Forja, 1985, p. 67. (coord.), La FM en el marco general del impacto de 13 Pérez Martínez, José Emilio, “La Cadena del Water las nuevas tecnologías en la vida cultural española, (1976-1989): análisis de una arradio” en Barrio Alon- s.l., s.e., p. 178. so, Ángeles et al (eds.), Nuevos horizontes del pasado. 9 Carmona, Mario, “Contracultura. Las radios libres”, Culturas políticas, identidades y formas de represen- Cuaderno Gris, 1 (1987), pp. 14-16. tación, Santander, Universidad de Cantabria, 2011, 10 García Gil, Samuel et al., “Espacios alternativos…”, pp. 58 y ss. op. cit., p. 1.183 y ss. 14 Aguilera, Miguel, Radios libres…, op. cit., p. 74 © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 133
¡Queremos las ondas! Una breve historia José Emilio Pérez Martínez en Bilbao15, Radio Bronka en Barcelona16 o Radio podrían ser “los ecologistas, las feministas, los Cero en Madrid fueron emisoras que, de alguna homosexuales, los movimientos vecinales, los manera, tuvieron contacto con el MC, recayendo marginados…”18. Tras analizar la estructura del sobre ellas este apelativo. Nunca una radio libre movimiento en España, creemos que estas dos española se reconoció como dependiente orgá- categorías deben ser fusionadas en una a la que nicamente de una organización política –partido denominaremos radios “sociales”. Y es que la in- o sindicato–, ni hemos localizado documenta- mensa mayoría de los proyectos puestos en mar- ción que lo pruebe, con lo que el apelativo de ra- cha en estos años, no clasificados como “epicú- dios “de partido” constituiría más un ataque que reos”, tuvieron en su horizonte la transformación una forma de clasificación en sí misma17. radical de la sociedad que les rodeaba. Aunque hubiesen sido puestas en marcha por colectivos Acerquémonos a los tipos restantes de acuerdo con vocaciones concretas, las radios libres die- con el modelo de Aguilera: las emisoras revolu- ron cabida en sus parrillas y colectivos a todas cionarias y las sectoriales. El primero encuadraría las luchas sociales –feminismo, antimilitarismo, a todas aquellas que “persiguen, principalmen- ecologismo, derechos de los homosexuales, te, la transformación radical de la sociedad a la etc.–, de forma que se supera esa idea de “sec- que se dirigen”, mientras que el segundo estaría torialidad”. Hay que añadir también, como fac- constituido por las radios “comprometidas prio- tor determinante de ese carácter “social” de las ritariamente, con algún sector en lucha” como emisoras, una plena consciencia de pertenencia a un movimiento social concreto, el de la libertad 15 Barea, Pedro, “Radio bilbaína, voluntarios y creati- de emisión, lo que sumado a que la idea de “re- vos, emprendedores y comerciantes, propagandistas volucionarias” parece no corresponderse con la e informadores…: un medio de comunicación que realidad estatal en aquellos años –muy distinta ‘construyó ciudad’”, Bidebarrieta, 16 (2005), p. 271. a los Anni di Piombo italianos–, hace que la idea 16 Salvattore/Radio Pica, História-anàlisi de les ràdios de emisora libre “social” sea una categoría más lliures a Catalunya i el seu futur, Barcelona, Roure Edi- apropiada para nuestro caso19. cions, 2014, p. 26. 17 Existieron casos como el de Radio Obrera, de Co- En cuanto al marco cronológico del presente tra- misiones Obreras, o La Voz de la España Nacional, bajo, coincidimos con la propuesta de Javier Gar- de la ultraderechista Alianza del Trabajo Nacional Sindicalista, que pese a pertenecer a organizacio- cía García, que divide la historia de la comunica- nes políticas fueron consideradas radios libres por la ción alternativa en España en cuatro momentos: prensa del momento (“Y tras la experiencia de las ra- la década de 1970, de marcado carácter contra- dios libres, ¿qué?”, La Vanguardia, 5 de julio de 1984 cultural, en la que la revista es el medio pree- y “Funcionarios de la policía”, El País, 7 de mayo de minente y que ve nacer las primeras emisoras 1980, respectivamente) o han sido así clasificadas en libres; la década de 1980, periodo de mayor cre- algunas investigaciones posteriores (para la primera cimiento e influencia de las radios; el descenso ver Pedrero Esteban, Luis Miguel, La radio musical generalizado de actividad en la década de 1990, en España. Historia y análisis, Madrid, IORT-RTVE, y la fase que iría de los 2000 a nuestro presen- 2000 y para la segunda: García Gil, Samuel et al., “Es- te, en el que las nuevas tecnologías y los nuevos pacios alternativos…”, op. cit., pp. 1.189-1.192). Su pertenencia a estructuras políticas organizadas las ciclos de movilización han dado empuje a estas alejaba totalmente de este movimiento, tal y como radios y a la comunicación alternativa20. Un pro- apuntó Francesc-Josep Deó, pionero de la radiodifu- sión libre, que las situaba fuera de este campo al re- 18 Aguilera, Miguel, Radios libres…, op. cit., p. 67. cordar aquellos años: “Muchos se apuntan a esto de 19 Este modelo está siendo progresivamente aceptado la radio; Comisiones Obreras pone en macha Radio por otros investigadores. Ver: Peñafiel, Carmen, “Les Obrera, la candidatura Unitat pel socialismo la utili- radios libres en Espagne: genèse d’un radio alternati- za en la campaña. Hasta la extrema derecha monta ve”, en Lefebvre, Thierry y Poulain, Sébastien, Radios su propio panfleto radiofónico, La Voz de la España libres, 30 ans de FM. La parole libérée?, París, L’Har- Nacional, emisora que también va a ser precintada. mattan, 2016, pp. 240 y 241; o Camps Durban, Eloi, Y los colectivos de radios libres sin padrinos…!” (Deó, Fem-nos escoltar! Història de les ràdios ciutadanes Francesc-Josep, “Un dret, Vell, afònic i amb arrugues”, de l’espai català de comunicació (1977-2017), Girona, QT Qaderns Tècnics, 27, 1990, p. 47). Para el caso de Editorial Gregal, 2019, p. 49. Radio Cero y su relación con el MC, ver: Pérez Martí- 20 García García, Javier, “Breve historia del Tercer Sec- nez, José Emilio, “Pacifismo, antimilitarismo y libertad tor de la Comunicación en España” en Alejandro Ba- de expresión en Madrid (1984-1990): Radio Cero, la rranquero (ed.), Juventud española y los medios del radio anti-OTAN”, Zer. Revista de estudios de comuni- Tercer Sector de la Comunicación, Madrid, Centro Rei- cación, 34 (47), pp. 85-104. na Sofía, 2016, pp. 17-19. 134 © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142
José Emilio Pérez Martínez ¡Queremos las ondas! Una breve historia ceso que el mismo autor ha identificado como el aparato del Estado franquista comienza su de cambio progresivo de unas emisoras más rei- tránsito hacia un modelo democrático. Se trata vindicativas en los años que aquí nos ocupan, de una nueva forma de entender la radiodifusión hacia un modelo más inclusivo, con programas inspirada en los movimientos francés e italiano. dedicados a la de inclusión social de colectivos Dos fenómenos que se dieron a conocer en el como los jóvenes en riesgo de exclusión social o país por tres vías: la prensa generalista y alter- los mayores21. nativa, los contactos personales y la publicación de obras sobre el tema. Cabeceras como El País Aquí nos centraremos en las dos primeras etapas, publican desde bien temprano artículos, poco de 1976 a 1989, que abarcan desde la aparición celebratorios, sobre las radios libres francesas24 y de las primeras emisoras –Radio La Voz del Pobre revistas como Ajoblanco incluyen pequeños artí- y Radio Maduixa– al concurso de frecuencias del culos y entrevistas sobre las radios italianas25; la Plan Técnico Nacional. Hemos establecido tres celebración de encuentros internacionales como fases diferenciadas22: de 1976 a 1983, momento ALFREDO 78 en París26, la conferencia sobre co- en el que se celebra el VI Encuentro de la Coor- municación alternativa organizada celebrada en dinadora Estatal de Radios Libres en Villaverde Cambrils en 197927 o el encuentro de Longwy28 (Madrid), cuyo manifiesto sientas la bases teó- favorecen los contactos directos con estas reali- ricas del movimiento; entre 1983 y 1987, tras la dades29 y, finalmente, la aparición de obras como celebración del Encuentro, en mayo de ese año, el volumen recopilatorio De las ondas rojas a las y hasta la aprobación, el 18 de diciembre, de la radios libres30 o Alicia es el diablo cerrarían este Ley de Ordenación de las Telecomunicaciones círculo31. por el gobierno del PSOE; y, finalmente, de 1987 a 1989, el momento que va de la aprobación del Aparecen así, en este contexto, las primeras nuevo marco legal al mencionado concurso que protoemisoras libres: Radio La Voz del Pobre en solo otorga dos licencias al movimiento de radios Madrid, a finales de 1976, y Radio Maduixa en libres. Granollers, en 1977. Emisoras epicúreas ambas, 2. DE LAS PRIMERAS EMISORAS AL MANI- 1987, p. 17. FIESTO DE VILLAVERDE (1976-1983) 24 Ferrer, Esther, “Las radios libres, un fenómeno en auge”, El País, 5 de octubre de 1977. Así recogía, de forma sucinta y con algún peque- 25 “Controradio de Florencia”, Ajoblanco, 26 (1977), ño error, el nacimiento de las radios libres en pp. 10-12. España el famoso libro Radio is my bomb. A DIY 26 ALFREDO 78 es una reunión celebrada en París en- tre la italiana Federazione Radio Emitentti Demochra- manual for pirates: tique (FRED) y la francesa Association pour la Libéra- “A finales de la década de 1970 la radio es- tion des Ondes (ALO) en el año 1978 a la que acuden activistas españoles. pañola estaba prácticamente como antes 27 Las ponencias de este encuentro vieron la luz en un de la Segunda Guerra Mundial en el resto libro: Vidal Beneyto, José, Alternativas populares a las de Europa, gracias, por supuesto, a la dic- comunicaciones de masa, Madrid, Centro de Investi- tadura fascista del General Franco. Un año gaciones Sociológicas, 1979. después de su muerte se rompió el mono- 28 A este encuentro celebrado en 1979 acudieron polio estatal y un año más tarde las prime- representantes de Irlanda, Italia, Bélgica, Inglaterra, ras radios libres aparecieron, junto a las pri- Francia y de España. meras emisoras piratas”23. 29 Contactos que permitieron, por ejemplo, a Salvador Picarol introducir clandestinamente un aparato emi- Un movimiento que, en efecto, hace sus prime- sor comprado en Italia para poner en marcha entre ras apariciones en las ondas hertzianas mientras 1978 y 1979 la barcelonesa La Campana de Gràcia. Ver: Salvattore/Ràdio Pica, Història-anàlisi de les…, p. 21 García García, Javier, “Transformaciones y apren- 5 y 6. dizaje de las radios comunitarias en España: hacia 30 Esta obra recoge aportaciones internacionales so- un modelo de radio inclusiva”, Disertaciones, 10/1 bre los usos alternativos de la radiodifusión: Bassets, (2017), p. 33-39. Lluís (ed.), De las ondas rojas a las radios libres, Bar- 22 Pérez Martínez, José Emilio, Libertad de emisión, li- celona, Ed. Gustavo Gili, 1981. bertad de expresión. Una historia del movimiento de 31 Es la traducción de un libro editado por A/Traverso, radios libres en Madrid (1976-1989) (Tesis doctoral), colectivo fundador de la boloñesa Radio Alice, una Universidad Complutense de Madrid, 2019. de las emisoras italianas más reconocidas: Colectivo 23 Waves, Frear y Soap, Joanna, Radio is my bomb. Radios Libres, Alicia es el diablo, Barcelona, Editorial A DIY manual for pirates, Londres, Hooligan Press, Hacer, 1981. © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 135
¡Queremos las ondas! Una breve historia José Emilio Pérez Martínez la primera puesta en marcha por un grupo de Estas primeras experiencias –que emitían con amigos32 y la segunda por radioaficionados y con equipos autoconstruidos, con cierta precariedad una marcada línea musical33, que constituyen técnica y sin licencias– surgieron ligadas a movi- los antecedentes directos de lo que podríamos lizaciones sociales de distinto signo, que genera- considerar las primeras emisoras libres estricto ron un clima de contestación ideal para la crea- senso de España34. ción de proyectos de comunicación alternativa que dieran voz a aquellos sectores sociales que Estas emisoras se localizan en los dos focos prin- no la tenían: feministas, ecologistas, antimilita- cipales durante estos primeros años: Cataluña y ristas, etc. el País Vasco. En 1979 surge, en Barcelona, Ona Lliure, emisora que se ha considerado históri- Una vez comenzaron a aparecer las primeras camente la primera radio libre del Estado. Con emisoras se generaron también los primeros in- unos antecedentes que pueden situarse en la tentos de coordinación a nivel estatal. En junio asistencia a ALFREDO 78 y en las emisiones ex- de 1979 se celebró en Barcelona el I Encuentro perimentales de las Jornadas Antirrepresivas de de la Coordinadora Estatal de Radios Libres, pro- Santa María de Corcó en julio de 197835, esta movido por Ona Lliure, y unos meses después, radio se convertiría en un hito dentro del movi- en octubre, también en Barcelona, tenía lugar el miento –diversos cierres, uno de ellos en direc- segundo. Este vino marcado por los problemas to– y en motor y caldo de cultivo de la primera técnicos y los cierres y sanciones, derivados de generación de emisoras catalanas, dejando en el la necesidad de normalizar sus circunstancias ad- proceso los primeros textos teóricos sobre la ra- ministrativas. Aunque el gobierno de UCD reco- diodifusión libre del Estado36. gió la figura de “emisoras educativas y culturales sin ánimo de lucro” en su Plan Técnico Transito- Impulsada e inspirada por la experiencia de Ona rio del Servicio Público de Radiodifusión Sonora Lliure (1979-1980) fue surgiendo en Cataluña la en Frecuencia Modulada de 1979, las condicio- primera generación de emisoras libres. Podemos nes de concesión hacían que fuera casi imposible destacar, por ejemplo, a La Campana de Gràcia para este tipo de medios conseguirlas. (1979-1982, Gràcia), Contrarradio (1979-1980, Barcelona) o Ràdio El Avispero (1979-1981, San- Al primer encuentro de la Coordinadora asistie- ta Coloma de Gramanet), proyectos de corta du- ron colectivos de “Euskadi, Donosti, Lesaka, Bil- ración que sentaron las bases para lo que habría bao, Pamplona, Tolosa, Valencia, Granollers, Car- de venir. dedeu, Madrid” y no pudieron asistir colectivos de Barcelona, Andalucía, Extremadura, Galicia, En paralelo, el movimiento comenzó a desarro- Zamora y Salamanca38. La amplitud de territorios llarse en el País Vasco y Navarra, donde apareció representados apunta ya al progresivo desarro- una primera generación que puede identificarse llo del movimiento en todo el país. Por Valencia con Osina Irratia (1979-1979, Rentería), Satorra asistió el colectivo de Radio Galena, proyecto Irratia (1979-1980, Tolosa), cerrada en aplicación que nunca llegó a emitir pero que constituye el de la Ley Antiterrorista37 y Radio Paraíso (1980- primer intento de la capital del Turia39; y pare- 1988, Pamplona). ce que el grupo de Cardedeu fue el que terminó dando lugar a Ràdio Televisó Cardedeu, primera 32 Pérez Martínez, José Emilio, “Y decían ‘Hasta los televisión comunitaria del Estado. huevos’. De La Cadena del Water o cómo una nue- La semilla germinó y los encuentros de coordi- va forma de radio invadió nuestro dial (1982-1989)”, Ecléctica, 3 (2013), p. 68. nación comenzaron a sucederse, ampliando el 33 Camps Durban, Eloi, Fem-nos escoltar! ..., pp. 107 número de colectivos participantes y sus locali- y 108. zaciones: el tercero se celebró de nuevo en Bar- 34 De las cenizas de La Voz del Pobre surgirá La Cadena celona, el cuarto en Zaragoza en 1982 y el quinto del Water. en Pamplona, en el mismo año. 35 Martí, Josep María, La ràdio a Catalunya, Barcelo- na, Generalitat de Catalunya/Centre d’Investigació de Aparecieron nuevas emisoras en los nodos prin- la Comunicació, 1996, pp. 69 y 70. cipales de actividad, así como en otras regiones 36 Estos son “Propuesta para una radio libre” y “Ra- dios libres frente al sistema”, ambos están recogidos 38 Clement, Josep, “Radios libres”, Bicicleta, 19 (1979), en Colectivo Radios Libres, Alicia es el…, op. cit., pp. pp. 24 y 25. 19-22. 39 Ferris, Miguel Ángel, “Perfiles: Manolo Gallego”, 37 Ibid., p. 24. Rojo y Negro, 31 (1992), p. 16. 136 © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142
José Emilio Pérez Martínez ¡Queremos las ondas! Una breve historia que hasta entonces habían tenido un peso re- Radio Chicharra (Toledo, 1985), Radio Caribú lativamente inferior. Proyectos de esta primera (Valladolid, 1984), Radio PKO (Segovia, 1984), época fueron Eguzki Irratia (1982, Pamplona), Radio Guiniguada (Las Palmas de Gran Canaria) Radio PICA (1981, Barcelona), Radio Klara (1982, o Radio Iris (Aranda de Duero, Burgos, 1986). Valencia), o Radio Acción (1982-1983, Madrid). Las emisoras que surgieron durante estos años La victoria electoral del PSOE prometía aires de fueron proyectos heterogéneos, puestos en mar- cambio con respecto a la situación de estas emi- cha, principalmente, por grupos de jóvenes, co- soras. Sin embargo, y a diferencia de países veci- lectivos sociales de distinto signo o asociaciones nos como Francia, donde el gobierno Miterrand vecinales, que mantuvieron, pese a las dificul- normalizó la situación de estas emisoras, hubo tades técnicas, unas parrillas en las que predo- una notoria falta de voluntad política para regu- minaron los programas musicales, los espacios lar la situación de estas radios. contrainformativos y, como elemento más carac- terístico, un gran número de programas realiza- En mayo de 1983, organizado por las jovencí- dos por y para los movimientos sociales: desde simas Onda Sur (Madrid) y Radio QK (Oviedo), el feminismo hasta el movimiento antirrepresi- se celebró en el madrileño Ateneo Libertario de vo, pasando por el ecologismo, la luchas por los Villaverde el VI Encuentro de la Coordinadora Es- derechos del colectivo LGTBI42 o el antimilitaris- tatal de Radios Libres. Más de una veintena de mo. emisoras de todo el Estado acordaron el Mani- fiesto de Villaverde, un documento clave en el Su participación en las distintas luchas sociales que definieron su naturaleza como radios auto- que recorrieron las calles de los barrios de Espa- gestionadas por sus miembros e independientes ña en los años ochenta dotó a estas radios de ese de grupos políticos o económicos y como iniciati- carácter reivindicativo que señala García García; vas no profesionales, sin ánimo lucrativo y parti- una reivindicación influenciada por la izquierda cipativas, con el objetivo de satisfacer el derecho radical, con regusto contracultural y de confron- de toda persona individual o colectiva a expresar tación ideológica con la modernidad socialista, libremente sus opiniones40. cultura dominante en aquellos años43. 3. LOS AÑOS DE CRECIMIENTO (1983-1987) Querríamos destacar aquí dos ejemplos clarifi- cadores del compromiso reivindicativo de estas Tras la celebración del VI Encuentro en Villaver- radios. En primer lugar, es necesario señalar de, las radios libres comenzaron un periodo de que, en su afán por crear un modelo comunica- innegable expansión que se tradujo en la apa- tivo distinto, estas emisoras y su entorno más rición de emisoras repartidas por todo el país. cercano comenzaron a crear sus propias agen- Aunque realizar un censo completo y sistemá- cias de noticias, de cara a superar un modelo tico de las radios libres que salieron al aire en contrainformativo basado en la lectura crítica de estos años es una labor complicada, debido a la la prensa generalista. Tas-Tas, en el País Vasco, pronunciada escasez documental y lo efímero de y la Agencia de Noticias Alternativas (ANA), en muchos de estos proyectos,41 queremos dejar el Cataluña, ambas creadas en 1987, fueron los dos nombre de algunas de ellas, para ilustrar cómo primeros proyectos de este tipo. Muy pronto es- se expandieron más allá de los principales nú- tablecieron una red con otros colectivos, como el cleos de actividad del movimiento: Radio Legaña madrileño UPA, dando forma a un tejido que, a (Almería, 1983), Radio Lupa (Córdoba, 1985), Ra- través de contestadores automáticos y boletines dio Tururú (Cáceres, 1985), Radio Antoxo (A Rúa, en papel, intentaron desvelar aquello que que- 1984), Radio Kras (Gijón, 1985), Onda Vorde (Za- ragoza, 1986), Radio Funny (Valencia, 1986), Ra- 42 Para un acercamiento a la relación entre las emiso- dio Scándalo (Cartagena, 1984), Radio Manuela ras libres y las disidencias sexuales ver: Subirat, Pino, (Albacete, 1983), Radio Bigarda (Cuenca, 1984), Invertidos y rompepatrias. Marxismo, anarquismo y desobediencia sexuales y de género en el estado espa- 40 Coordinadora de Radios Libres, Manifiesto de Vi- ñol (1868-1982), Madrid, Editorial Imperdible, 2019, llaverde, original mecanografiado, archivo del autor, que en su versión on-line incluye un “Anexo: pequeña 1983. historia invertida de las Radios Libres”. Disponible en 41 Queremos señalar, no obstante, que nos encontra- www.invertidosyrompepatrias.noblogs.org/ [Consul- mos en estos momentos embarcados en el proyecto tado el 10 de noviembre de 2020]. de sistematizar el censo de emisoras libres existentes 43 García García, Javier, “Transformaciones y…”, op. en España en esta primera etapa (1976-1989). cit., pp. 33-39. © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 137
¡Queremos las ondas! Una breve historia José Emilio Pérez Martínez daba fuera del discurso de los medios generalis- dora de Radios Libres de Euskal Herria (1983) o tas. el Colectivo Pro-Radios Libres de Extremadura (1984). En segundo lugar, y como uno de los más claros ejemplos de su actividad en favor de la creación Y este trabajo de coordinación tuvo, también, su de una contrahegemonía, debemos señalar el vertiente internacional: emisoras españolas par- posicionamiento unánime de estas radios a favor ticiparon en 1983 en el nacimiento de la Asocia- del “no” en el referéndum sobre la permanencia ción Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) de España en la OTAN de 1986, enfrentándose al en Montreal y en 1987 en Forcalquier, Francia, ejecutivo socialista. Fueron un importante actor se fundó la Federación Europea de Radios Libres en la que se ha considerado la última batalla de (FERL), con el objetivo de defender la actividad y la izquierda española de aquellos años. Frente los derechos de este tipo de emisoras en el con- al uso de los aparatos del Estado por parte del tinente. En ambas organizaciones ocupó puestos Gobierno, estos pequeños medios de comunica- de responsabilidad Esteban Ibarra, de la madri- ción dieron voz a sus contendientes, le tomaron leña Onda Verde, que fue una de las figuras más el pulso a la calle e incluso llegaron a retransmitir activas del momento durante estos años. en directo marchas y manifestaciones. De acuer- do con Gonzalo Casanova: Uno de los principales problemas a los que tuvo que hacer frente este movimiento fueron los “Los meses previos al referéndum de 1986 cierres de emisoras que se fueron produciendo […] fueron el primer banco de pruebas rele- en aquellos años. Las radios libres se movían en vante en el que el conjunto de radios libres una situación que es posible caracterizar como sirvió para crear debate y animar la campa- “alegal”46. Como señalamos anteriormente los ña anti-OTAN ofreciendo una amplia contra- gobiernos de UCD reconocieron la existencia información o información alternativa a la de emisoras sin ánimo de lucro, pero no se fa- oficial. Por primera vez, se valora que solo cilitaron concesiones, por lo que el propio movi- las radios libres pueden cubrir “en caliente” miento amparó su actividad en el artículo 20 de la más rabiosa actualidad, contribuyendo a la Constitución de 1978 y los dictámenes de la generar bloques sociales amplios de oposi- UNESCO sobre la necesidad de democratizar las ción a las políticas oficiales”44. comunicaciones recogidas en el Informe McBri- de47. Esta situación dio lugar a una relativa per- Otra realidad característica de este tipo de emi- misividad por parte de las distintas autoridades, soras fue la promoción y defensa de las lenguas de forma que hubo regiones en las que las emi- distintas del español en las zonas en las que las soras gozaron de relativa tranquilidad, mientras hubiese. Ha sido una constante de este movi- que en otras se produjeron cierres, sanciones miento, por lo tanto, que parte o la totalidad de administrativas e incluso detenciones. las emisoras se haya realizado, en algunas emi- soras, en catalá, euskera, galego, valenciá, astu- En 1984 podemos destacar, por ejemplo, el ex- rianu o aragonés. El reconocimiento de las dis- pediente a las albaceteñas Radio Manuela o Ra- tintas lenguas que conviven en el Estado no es, dio Karacol por parte del Ministerio de Transpor- por lo tanto, algo simbólico, sino que ha formado tes, Turismo y Comunicaciones, el expediente parte del repertorio de reivindicaciones de este del Gobierno Civil a Radio Klara o el cierre, por movimiento45. parte de la Delegación del Gobierno en Navarra En consonancia con el crecimiento de emisoras, los esfuerzos para coordinar su actividad no ce- 46 Señalar a este respecto, y a modo de anécdota, que la edición digital del DLE, en su entrada “alegal” reco- saron. La Coordinadora Estatal mantuvo su ritmo ge el siguiente ejemplo de uso del término: “emisoras de reuniones anuales, en Madrid (1984), Alba- de radio alegales”. cete (1985) o Valencia (1986), mientras van sur- 47 El Informe MacBride fue el resultado del trabajo de giendo estructuras regionales como la Coordina- una comisión presidida por Séan MacBride, encarga- da por la UNESCO en 1977 para analizar la situación 44 Casanova, Gonzalo, Armarse sobre las ruinas. His- de los medios de comunicación. Defendió que la co- toria del movimiento autónomo en Madrid (1985- municación es un derecho fundamental y su demo- 1989), Madrid, Potencial Hardcore, 2002, p. 29. cratización. Ver: MacBride, Séan et al, Un solo mundo, 45 Señalar, por ejemplo, el caso de Radio Sele, que voces múltiples. Comunicación e información en nues- emitía exclusivamente en asturianu (Oviedo, 1986- tro tiempo, México/París, Fondo de Cultura Económi- 2011/2012). ca/UNESCO, 1980. 138 © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142
José Emilio Pérez Martínez ¡Queremos las ondas! Una breve historia de Radio Eltxo en Tafalla, localidad que llegó a español52. La proliferación de emisoras sin licen- paralizar toda su actividad durante cinco minu- cia para emitir, sumada a las presiones de las tos en protesta por la diligencia. Radio Omega emisoras comerciales, legales o no, para que se de Cáceres fue cerrada en este año y mientras repartiesen más frecuencias y mejorar sus pers- se producía este hecho, parece ser que uno de pectivas de negocio, llevó a que las radios muni- los policías implicados llego a decir: “¡¡Mi hijo cipales comenzasen a organizarse para normali- también oye esta emisora cada sábado porque zar su situación, y a que las libres comenzasen le gusta mucho y tengo que reconocer que a mí a resultar molestas tanto para las autoridades también!!”48. como para las emisoras comerciales y a que, en última instancia, el PSOE aprobase dicha ley. Al año siguiente uno de los cierres más sonados fue el de la vallisoletana Radio Caribú, lo que lle- La LOT eliminó la figura de emisoras “educativas vó a su colectivo a protestar durante la ceremo- y culturales sin ánimo de lucro” y fijó un marco nia de apertura de la Semana de Cine Internacio- general para regular el espectro radioeléctrico: nal de aquel año, la Seminci 85. atribuyó la explotación directa de la radiodifu- sión a las distintas Administraciones, su gestión Durante 1987 se produjo, en el contexto de las indirecta a personas físicas o jurídicas, establecía movilizaciones estudiantiles, la detención de una serie de importantes sanciones para aque- uno de los locutores de la madrileña La Cadena llos que infringiesen dicha regulación y anuncia- del Water. Ante la escalada represiva que se es- ba la elaboración de un Plan Técnico Nacional taba viviendo en aquellas manifestaciones, algu- que vendría a otorgar nuevas frecuencias a tra- nos oyentes aprovecharon la política de “micró- vés de un concurso. fonos abiertos” de la emisora para dar consejos sobre cómo rechazar las cargas policiales duran- Si uno se detiene en las infracciones que contem- te el Boletín Imperiodístico, su espacio contrain- plaba la LOT, no es difícil entrever que algunas de formativo. La persona al cargo de la emisión fue las “faltas” recogidas en ella parecían estar dise- detenida, los equipos requisados y periódicos ñadas específicamente para las emisoras libres: como El País pronto incluyeron a la radio como emitir sin licencia –por supuesto–, utilizar equi- uno de los colectivos que alentaban la violencia, pos no homologados –muchas emisoras usaban a pesar de quedar absuelto el locutor49. aparatos construidos por ellas mismas– o mani- pular los mismos, por ejemplo. Las infracciones Y en este mismo año, el Ayuntamiento de Ma- se sancionarían con multas de entre 50.000 y drid dio orden de clausurar Onda Verde, medi- 10.000.000 de pesetas, cantidad suficiente para da que despertó el rechazo de la FERL, que llegó hundir y hacer desaparecer a cualquiera de es- a ponerse en contacto con el Excmo. Alcalde D. tas emisoras, cuya supervivencia dependía de las Juan Barranco, para solicitarle que, inspirado en cuotas de los asociados y participantes o de re- “el carácter democrático que siempre ha carac- caudación de fondos a través de actividades con- terizado al Ayuntamiento de Madrid”, anulase la cretas como conciertos o casetas en las fiestas orden y apoyase “el proceso de legalización de de su barrio o pueblo. las radios libres”50. Cuesta, tras analizar estos puntos de la LOT, no Unos meses más tarde, el 18 de diciembre, el go- considerarla una herramienta de represión polí- bierno aprobó la Ley de Ordenación de las Tele- tica contra el movimiento de las radios libres y comunicaciones, conocida popularmente como de apoyo a la iniciativa empresarial. A este res- LOT51, con el objetivo de poner orden en lo que pecto, tan solo citar unas palabras de Ana Ballet- había venido a denominarse la “jungla del éter” bó Puig, representante del Grupo Parlamentario Socialista, en la Comisión, con competencia le- 48 Colectivo Pro-Radios Libres de Extremadura, Las ra- gislativa plena, del proyecto de Ley de Ordena- dios libres en Cáceres, 1, Cáceres, 1984, pp. 5 y 6. ción de las Telecomunicaciones: 49 Echevarría, Juan José, “Mataelefantes en el Rastro y por lsa nubes”, El País, 13 de febrero de 1987. “En todo caso, lo que sí es evidente es que 50 “A la atención del Exmo. Sr. Alcalde, Don Juan Ba- hemos tratado no sólo de incorporar algu- rranco”, La balsa de la medusa, 9, enero de 1989, p. nas de las enmiendas de la oposición, como 120. ya he citado, sino que hemos tratado de 51 “Ley 31/1987, de 18 de diciembre, de Ordenación de las Telecomunicaciones”, BOE, 303, 19 de diciem- 52 Prado, Emili, “La jungla del éter español”, El País, 23 bre de 1987, pp. 37.409-37.419. de diciembre de 1984. © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 139
¡Queremos las ondas! Una breve historia José Emilio Pérez Martínez tener contacto con los empresarios que se “al colega que pillaron en el asalto policial a ganan la vida con esto y hemos intentado la emisora del mes de febrero, le han puesto incorporar también esa voz que es, en defi- 100.000 pelas de fianza a pagar en 15 días, nitiva, la voz más experta, porque es la de la y si no… al mako. […]. Se anima a las radios gente que está afectada”53. libres a que organicen movidas. Recorda- mos que Eguzki Irratia fue asaltada, durante Unas declaraciones que manifiestan una voca- la visita de los putos reyes a Nafarroa, por ción clara de defensa de intereses comerciales, la policía nazional, que les incautó todo el a la larga conectados con intereses políticos, que material y detuvo a dos mozos, uno de ellos dejó en una posición de manifiesta debilidad a bajo la acusación de injurias al rey”54. todos aquellos proyectos que defendían una co- municación distinta. La equiparación de empre- El cierre de la segoviana Radio PKO fue motivo sas privadas y organizaciones sin ánimo de lucro también de protestas por parte de la FERL y de la en la disposición adicional sexta, la que regulaba Coordinadora Estatal55, que, ante esta situación, las concesiones, implica el no reconocimiento siguió convocando reuniones. Encuentros en explícito y específico de un tercer sector de la los que parecían crecer disensiones que venían comunicación, lo que hizo que este tipo de emi- gestándose desde hace años. El 12 de marzo soras llevase siempre las de perder en cualquier de 1988 se celebró en Rivas Vaciamadrid, aus- concurso ya que debía competir contra iniciati- piciado por la recién nacida Radio Cigüeña, un vas comerciales con el apoyo de importantes in- encuentro de la Coordinadora de Radios Libres tereses capitalistas. de Madrid en el que se presentó el proyecto de la Oficina de Coordinación de Radios Libres, 4. LA CARRERA POR LAS LICENCIAS (1987- proyecto auspiciado por Esteban Ibarra, y se pre- 1989) paró el XII Encuentro de la Coordinadora Estatal de Radios Libres, que habría de celebrarse dos La LOT fue percibida como una amenaza por las semanas después. radios libres: tanto el propio movimiento espa- ñol como la FERL se manifestaron contrarias a Los temas principales del mismo fueron cómo su aprobación pues no habían participado en su enfrentar la LOT y el Plan Técnico. Se presentó negociación a estas emisoras y al ser aprobada, un informe sobre la ley en el que se reconocía sus consecuencias y cómo encarar el futuro con- que no había nada que hacer en el marco de lo curso de licencias se convirtieron en dos temas jurídico y que se debía avanzar en un esfuerzo candentes en la agenda de estos medios. colectivo que quedó definido en una campaña con los siguientes puntos: La represión hacia el movimiento de las radios libres se recrudeció, hasta el punto en que en a) Campaña informativa-defensiva en todas 1988 se asistió a uno de los cierres más duros de las radios. su historia. El 8 de febrero el rey don Juan Carlos y la reina doña Sofía visitaban de manera oficial b) Recogida de firmas y apoyos. Navarra; ese mismo día el programa de José Ja- c) Diseño de planificaciones regionales y vier Fabo Legarda en Eguzki Irratia comenzó a re- locales. cibir llamadas con mensajes “peyorativos” sobre sus majestades: “nos cagamos veinte veces en el d) 1ª semana de Mayo – CAMPAÑA ESTATAL Rey”, por ejemplo. La emisora fue clausurada a por la legalización de las radios libres. raíz de estos hechos, y la fiscalía pidió hasta siete años de cárcel para José Javier por un delito de e) Edición de cuñas, etc. injurias al rey, aunque finalmente fue absuelto, f) Resolución ante precintos: campaña y ya que no constó nunca que hubiera hecho suyas presencia ante todas las Delegaciones de las opiniones vertidas por sus oyentes. El cierre Telecomunicaciones. fue visto dentro del movimiento como una agre- sión, como recogía Tas-Tas: 54 Irola Irratia, Radio libre. Utopía comunicativa, Bil- bao, Irola Irratia, 2000, p. 11. 53 Cortes Generales, Diario de sesiones del Congreso 55 Beaumont, José F., “La Federación Europea de Ra- de los Diputados. Comisiones, 176, 20 de octubre de dios Libres pide nuevas licencias para España”, El País, 1987, p. 6.479. 16 de mayo de 1988. 140 © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142
José Emilio Pérez Martínez ¡Queremos las ondas! Una breve historia g) Relaciones con los grupos parlamenta- últimas nos constan las experiencias de la Agru- rios y propuestas de apoyo56. pación de Asociaciones Culturales de Comunica- ción de la Comunidad de Madrid (AACC-CAM), la Lo apremiante de la situación hizo que los En- Federación de Radios Libres de la Comunidad de cuentros se sucediesen, de forma que en junio la Madrid (FERALICOMA) o la catalana Associació Coordinadora se reunió en Hospitalet de Llobre- per a la Radiodifusió Lliure. gat y en octubre lo hizo en Zaragoza. Los debates fueron enconándose alrededor de puntos clave Los resultados del concurso fueron poco favora- –optar a subvenciones, emitir publicidad insti- bles para estas emisoras y solo dos concesiones tucional o la independencia de partidos y otras les fueron adjudicadas: una en Valencia para Ra- organizaciones–, lo que terminó dando lugar a dio Klara, en activo hoy en día, y otra para FERA- que parte del movimiento pasara a encuadrarse LICOMA, en el municipio de Chinchón, a 30 kms en la Coordinadora de Estatal de Radios Libres de la capital. Ambas coordinadoras, la de Radios Comunitarias, como alternativa a “la concepción Libres y la de Radios Comunitarias, mostraron su instrumental raquítica al servicio de algo o al- desacuerdo con el resultado y organizaron accio- guien, que algunas radios libres hoy en día aún nes de protesta. Algunas emisoras, por miedo a defienden”57. Esta ruptura, en la que se usó el las sanciones recogidas en la LOT, no volvieron anteriormente citado argumento de las “radios nunca a emitir y muchas otras, tras un tiempo de partido”, se produjo entre dos bloques que se prudencial, recuperaron su actividad y regresa- verían representados por Esteban Ibarra y Onda ron al éter. Verde, el sector de las “comunitarias”, y las que permanecieron como “libres” por Radio Cero y La LOT y el Plan Técnico pusieron fin a esta pri- su entorno, acusadas de servir al MC. mera época de las radios libres, su momento de mayor impacto social y político. La década si- A pesar de este clima generalizado, siguieron guiente será un momento de repliegue hacia los apareciendo emisoras por todo el país –Radio barrios, de adaptarse poco a poco a la nueva si- Piratona (Vigo, 1988), Radio Bronka (Barcelona, tuación sociopolítica del país y de una progresiva 1987), OMC Radio (Madrid, 1987) o Radio Mai implantación del modelo de radio comunitaria, (Zaragoza, 1988), por ejemplo– y se lograron con un formato más abierto, en sustitución de hitos que supusieron auténticos desafíos a las las emisoras reivindicativas de los años ochenta. autoridades. El más interesante fue, sin duda, la La irrupción de las nuevas tecnologías, de Inter- puesta en marcha el 14 de diciembre de 1988 de net y las redes sociales, lejos de enterrarlas, die- La Imagen del Invidente, la televisión de La Cade- ron un nuevo empujón a estas emisoras, que a na de Water, que en aquella jornada de huelga partir de los 2000 comenzaron a caminar hacia general en la que TVE paralizó su programación, ese modelo de radio inclusiva señalado por Gar- retransmitió contenido propio y capítulos graba- cía García y que conocieron un repunte con el dos de series de animación. Sustituir al por aquel ciclo de movilizaciones del 15M. Han continuado entonces único canal de televisión le supuso a la con su actividad hasta el día hoy; un momento emisora una sanción administrativa y una multa en el que, pese a su reconocimiento en la Ley Au- de 100.000 ptas. diovisual de 2010, siguen sin ver normalizada su situación y continúan siendo objeto de puntua- En esta situación, de poco sirvieron las reunio- les ataques por parte de sectores ultraconserva- nes con la Dirección General de Telecomunica- dores, como los sucedidos durante el Carnaval ciones de cara al concurso de frecuencias. El 12 de Madrid en 201658 o la retirada de subvencio- de marzo de 1989, como requisito previo para nes al tejido asociativo madrileño a propuesta de poder optar a una concesión, las radios libres Vox, una de las múltiples polémicas que rodea- suspendieron sus emisiones. Los proyectos téc- ron los primeros años del gobierno de José Luis nicos se presentaron de forma individual –Radio Martínez-Almeida59. Klara, La Cadena del Water u Onda Verde, por ejemplo– o de forma colectiva. De entre estas 58 “Carmena premia a la cerebro de los títeres proe- tarras con 55.000 euros ‘a dedo’”, OK Diario, 21 de 56 Coordinadora Estatal de Radios Libres, XII Encuen- noviembre de 2016. tros de Radios Libres, Madrid, 1988, p. 3. Fotocopia 59 Para otras polémicas ver: “Podemos incita al odio: de original manuscrito, archivo del autor. difunde pegatinas y pintadas con el lema ‘Almeida Ca- 57 Ibarra, Esteban, Radio Comunitaria. Aproximación a rapolla’”, OK Diario, 5 de julio de 2019 o García Funes, la radio comunitaria en España, Onda Verde, Madrid, Juan Carlos, “El todo por la parte. La polémica en tor- 1989, p. 7. Fotocopia de original, archivo del autor. no a los nombres de las víctimas en el memorial del © Historia Actual Online, 54 (1), 2021: 131-142 141
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