Religiosos en camino en la Iglesia del papa Francisco

Página creada Clara Sanguez
 
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                                         PERSPECTIVAS

                                           Religiosos en camino
                                en la Iglesia del papa Francisco

                                                                                Flavio Peloso, f.d.p.

              Quiero compartir algunas reflexiones acerca de lo que comporta para la vida consagrada
           estar en camino en la Iglesia del papa Francisco. Iglesia del papa Francisco significa la Igle-
           sia en una “nueva etapa evangelizadora que indica caminos para la marcha de la Iglesia en
           los próximos años” (EG 1).

        Una conversación de tres horas con el               bres y mujeres que pueden despertar al mundo.
        papa Francisco                                      La vida consagrada es profecía. Y hay necesidad
                                                            de esta profecía porque, como señaló Benedicto
           Fui uno de los 120 Superiores generales          XVI, “la Iglesia no crece por proselitismo, sino
        de Órdenes y Congregaciones masculinas              por atracción”». Sin embargo, advirtió que
        que el 29 de noviembre del año 2014 tuvi-           «es necesario ser profetas y no jugar a hacer de
        mos la gracia de pasar tres horas con el            profetas». «Dios –dijo también– nos pide salir
        papa Francisco, en el Vaticano, en el aula          del nido que nos retiene y ser enviados a las fron-
        del Sínodo. Fue un coloquio largo, frater-          teras del mundo, evitando la tentación de querer
        nal y paterno. Las distancias desaparecie-          domesticarlas. Esta es la forma más eficaz de
        ron de inmediato con el primer saludo y             imitar al Señor».
        los aplausos. El papa nos hablaba, en es-              Preguntado sobre la situación de las vo-
        pañol, con confianza –por esto había que-           caciones, el Papa subrayó que hay Iglesias
        rido que el encuentro fuera largo y a puer-         jóvenes que están dando nuevos frutos. Esto
        tas cerradas–, contaba sus experiencias, es-        nos obliga naturalmente a repensar la incul-
        cuchaba nuestras preguntas y comentarios,           turación del carisma. «El carisma es uno, pero,
        ofrecía líneas y ánimos para realizar la ta-        como decía san Ignacio, hay que vivirlo de acuer-
        rea de animadores de la vida consagrada1.           do a los lugares, los tiempos y las personas. El ca-
        Voy a referirme a algunos contenidos. El            risma no es una botella de agua destilada; el ca-
        Pontífice observó que la radicalidad                risma, como el agua, asume los sabores y los ele-
        evangélica se le pide a todos los cristianos,       mentos de la tierra por donde discurre». La in-
        pero los religiosos están llamados a seguir         culturación no tiene reglas fijas, tiene el
        al Señor de una manera especial: «Son hom-          espíritu que la regula, «pero debe evitarse tanto

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        el relativismo como el uniformismo, e introducir      de los diversos Institutos deben ser respeta-
        en el gobierno central de las Órdenes y Congrega-     dos y promovidos porque son necesarios en
        ciones personas de diversas culturas, que expresen    las diócesis. «Nosotros, los obispos –dijo– tene-
        modos diferentes de vivir el carisma».                mos que entender que las personas consagradas
            El papa Francisco se detuvo largamente            no son material de ayuda, sino portadores de ca-
        sobre la formación que, en su opinión, se             rismas que enriquecen las diócesis». Las pre-
        basa en cuatro pilares fundamentales: «for-           guntas finales se refirieron a las fronteras de
        mación espiritual, intelectual, comunitaria y         la misión de los consagrados. «¿Qué fronte-
        apostólica. Cuando uno llega a la profesión per-      ras, qué periferias indica a los religiosos hoy?».
        petua, debe haber integrado en unidad estas           «Cada Instituto tiene que buscar las fronteras so-
        cuatro dimensiones». En la formación hay              bre la base de su propio carisma». El carisma
        que evitar cualquier forma de hipocresía y            da sensibilidades y prioridades diferentes,
        de clericalismo mediante el diálogo franco            pero lo que importa es que todos vayáis a
        y abierto sobre los distintos aspectos de la          las periferias.
        vida: «la formación es un obra de artesanía, no
        policíaca; debe tener lugar en un diálogo de pa-      ¿Una vida religiosa al “paso” del papa
        dres a hijos. El objetivo es formar religiosos que    Francisco?
        tengan un corazón tierno y no ácido como el vi-
        nagre. Todos somos pecadores, pero no corrup-            A la Iglesia de Pablo VI se la ha definido
        tos. Aceptamos a los pecadores, pero no a los co-     como dialogante, a la de Juan Pablo II triun-
        rrupto». Luego, respondiendo a una pre-               fante, a la de Benedicto penitente y a la de
        gunta sobre la vida comunitaria, dijo que             Francisco evangélica. Francisco quiere una
        tiene una fuerza de atracción enorme. Su-             Iglesia libre de mundanidades, gozosa del
        pone tener que aceptar las diferencias y              evangelio, pobre y sierva, cercana a la gen-
        también los conflictos. A veces es difícil            te, testigo de la misericordia de Dios. El
        vivir la vida fraterna, pero si no se vive, no        papa Francisco está situando a la Iglesia en
        somos fecundos. Particularmente conmo-                el camino de la fidelidad evangélica, con
        vedor fue su testimonio sobre hermanos                su ejemplo, con su compromiso y también
        con problemas.                                        con muchos mensajes. Este camino tam-
            «En toda familia existen problemas, y pensar      bién es el objetivo constitutivo de la vida
        o soñar con una comunidad sin hermanos con            consagrada: «Para seguir a Cristo más de cer-
        dificultades no es bueno, porque la realidad nos      ca». Especialmente los consagrados esta-
        dice que en todas partes, en cada familia, en cada    mos impelidos a emprender un movimien-
        grupo humano, hay conflictos. Por lo tanto, hay       to de conversión a Jesús y al evangelio sine
        que asumir los conflictos. Hay que llegar a la ter-   glosa, acogiendo la voluntad y las sorpresas
        nura, en la forma de mirar al hermano causa de        de Dios mediante el discernimiento de los
        conflicto. Nuestra caridad debe llegar hasta esta     signos de los tiempos y lugares, proceden-
        dimensión, que casi llamaría materna, de la ter-      tes sobre todo de las periferias existenciales
        nura. La fraternidad es algo muy delicado, muy        de la vida.
        delicado».
            Sobre las relaciones entre los religiosos y       Conversión de las actitudes personales
        los obispos, dijo que se trata de un punto
        crítico. Afirmó conocer por experiencia los           a) Religiosos centrados en lo esencial.
        posibles problemas, sea por parte de los re-
        ligiosos como de los obispos. Los carismas              Para nosotros lo esencial es “Dios

        Unidad y Carismas
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        Perspectivas                                                                                       13

        Solo”, seguir a Jesucristo, el testimonio             tual”, que «es buscar, en lugar de la gloria del
        del evangelio según el carisma. Siendo fie-           Señor, la gloria humana y el bienestar personal»
        les así es como podemos apoyar a nuestros             (EG 93-97). Francisco teme la mundanidad
        hermanos en el camino hacia el Señor. El              religiosa más que cualquier otro mal de la
        papa dice simplemente: «Invito a cada cris-           Iglesia. «¡Dios nos libre de una Iglesia munda-
        tiano, en cualquier lugar y situación que se en-      na bajo ropajes espirituales o pastorales! Esta
        cuentre, a renovar ahora mismo su encuentro           mundanidad hay que evitarla poniendo a la
        personal con Jesucristo o, al menos, a tomar la       Iglesia en movimiento de salida de sí misma, de
        decisión de dejarse encontrar por Él, de inten-       misión centrada en Jesucristo, de compromiso
        tarlo cada día sin descanso» (EG 3). Este es el       para con los pobres» (EG 97). Así es la Iglesia
        corazón de la renovación de la Iglesia pro-           que promueve el papa Francisco.
        movida por el papa Francisco. Por esto es-
        cribe, citando a su predecesor: «No se co-            c) Religiosos que se expresan con profunda hu-
        mienza a ser cristiano por una decisión ética o       manidad
        una gran idea, sino por el encuentro con un
        acontecimiento, con una Persona, que da un               Se nos invita a combatir con decisión la
        nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orien-     cultura del descarte, reconociendo y defen-
        tación decisiva» (EG 7).                              diendo los bienes fundamentales de toda
           Se nos pide una conversión seria al dis-           persona; estamos llamados a tener el coraje
        cipulado como condición esencial e indis-             de manifestar ternura, especialmente con
        pensable para llevar a cabo nuestra mi-               los más débiles y desfavorecidos:
        sión, conscientes de estar “en la intersec-              «Vosotros sabéis que estáis en este sistema
        ción del don”: todo lo que Dios nos ha                mundano, paganizado: están los que están (que
        dado con la fe, la vocación, el carisma, es-          caben) y los que no están (que no caben); los
        tamos llamados a darlo a los demás. Nues-             que no están en el sistema... están demás (so-
        tra primera tarea, profecía y servicio es la          bran), y los que están de más, son del descarte.
        santidad, ser de Dios, mediante la misericor-         Estas son las fronteras existenciales. Ahí debéis ir
        dia y la ternura.                                     vosotros. No con los satisfechos, con las personas
                                                              bien situadas, con las que no les falta nada»2.
        b) Religiosos que basan su autoridad en la au-           Y para mantener un estilo de vida que
        tenticidad                                            excluye a los otros, «se ha favorecido una glo-
                                                              balización de la indiferencia. Casi sin advertirlo,
           Nuestra credibilidad va unida a la corres-         nos volvemos incapaces de compadecernos ante
        pondencia de palabras y de gestos con la              los clamores de los otros, ya no lloramos ante el
        verdad de la vida. De la autenticidad se sigue        drama de los demás ni nos interesa ocuparnos de
        la autoridad, de la autoridad se sigue la pa-         ellos, como si todo fuera una responsabilidad aje-
        rresía y la alegría de la evangelización, «no         na a nosotros que no nos incumbe» (EG 54).
        como quien impone una nueva obligación, sino             Para responder a la cultura del descarte,
        como quien comparte una alegría, señala un ho-        el papa Francisco invita a la «revolución de la
        rizonte bello, ofrece un banquete deseable. La        ternura» (EG 88), una «ternura combativa»
        Iglesia no crece por proselitismo, sino por “atrac-   (EG 85). «Jesús quiere que toquemos la miseria
        ción”» (EG 14).                                       humana, que toquemos la carne sufriente de los
           El papa Francisco denuncia con frecuen-            demás... para que aceptemos de verdad entrar en
        cia y llama por su nombre las expresiones             contacto con la existencia concreta de los otros y
        más corrientes de la “mundanidad espiri-              conozcamos la fuerza de la ternura» (EG 270).

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        Conversión de las relaciones                          que les lleva a relativizar u ocultar su identidad
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        a) Religiosos que saben expresarse de forma               – «Otras veces estará simplemente en medio
        sencilla, directa y comprensible                      de todos con su cercanía sencilla y misericordio-
                                                              sa» (EG 31). Para no caer en una “acedia
           Sentimos la importancia de utilizar un             pastoral”, “egoísta” y “paralizante” (EG
        lenguaje real; de escuchar mucho para                 81), es necesario «no perder el contacto real con
        aprender las palabras que los otros puedan            el pueblo, en una despersonalización de la pasto-
        entender. Debemos tener cuidado de la co-             ral que lleva a prestar más atención a la organi-
        municación y de su pedagogía, buscando y              zación que a las personas» (EG 82).
        encontrando palabras de significado, que                  – «Y en ocasiones deberá caminar detrás del
        tocan el corazón de las personas porque               pueblo para ayudar a los rezagados y porque el
        son cercanas a sus vidas.                             rebaño mismo tiene su olfato para encontrar nue-
           El papa Francisco es un comunicador                vos caminos» (EG 31).
        eficaz y popular, no porque estudia o usa                 Se trata de «descubrir y transmitir la mística
        las técnicas de la comunicación, sino porque          de vivir juntos, de mezclarnos, de encontrarnos,
        tiene un corazón y una experiencia común              de tomarnos de los brazos, de apoyarnos, de par-
        con las personas a las que se dirige hoy              ticipar de esa marea algo caótica que puede con-
        “urbi et orbi”. Su comunicación es fruto de co-       vertirse en una verdadera experiencia de fraterni-
        munidad de vida, de simpatía pastoral, del            dad, en una caravana solidaria, en una santa pe-
        contacto y de la escucha vividos por largos           regrinación» (EG 87).
        años como sacerdote, obispo y ahora papa.
        Es cierto: cuando «el pastor conoce a sus ovejas      c) Religiosos que buscan la voluntad de Dios
        una a una [...] las ovejas le siguen, porque cono-    junto con los hermanos
        cen su voz» (cf. Jn 10, 1-16).
                                                                 Es indispensable «escuchar lo que el Señor
        b) Religiosos que caminan con los hermanos            nos quiere decir en su Palabra y dejarnos trans-
                                                              formar por el Espíritu. Es lo que llamamos lec-
           Como Jesús con los discípulos, hace-               tio divina» (EG 152). Estamos inmersos en
        mos el camino con los hermanos, espe-                 un mundo de pluralidad y confusión de ide-
        cialmente, los descartados de las perife-             as y de costumbres. «Sólo con el ejercicio de
        rias existenciales. Es el lugar pastoral de           discernimiento evangélico se intenta reconocer –a
        calificación de la Iglesia que Francisco              la luz del Espíritu– una llamada que Dios hace
        está promoviendo. Es el lugar vital y pas-            oír en una situación histórica determinada» (EG
        toral típico de la historia de los Institutos         154). El papa Francisco lo implementa en
        religiosos, a los que convertirnos decidi-            la Iglesia, promoviendo dinamismos y es-
        damente. «El ámbito en el que vosotros debéis         tructuras de participación y asesoramiento.
        trabajar es la calle. Dios os quiere callejeros, de      La persona consagrada es «un contempla-
        calle, en la calle» 3. En Evangelii gaudium el        tivo de la Palabra y también un contemplativo
        papa explica cómo debemos ser pastores                del pueblo», «para leer en los acontecimientos el
        “en la calle”, recurriendo a la imagen del            mensaje de Dios, es decir lo que el Señor desea
        buen pastor.                                          decir en una determinada circunstancia» (EG
           – «A veces estará delante para indicar el cami-    154). La búsqueda de la voluntad de Dios
        no y cuidar la esperanza del pueblo» (EG 31), su-     siempre involucra a la comunidad. En la
        perando «una especie de complejo de inferioridad      vida consagrada tenemos reconocidas diná-

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        micas de discernimiento comunitario y de                dad especialmente hacia los últimos, los dé-
        obediencia, pero se requiere una conversión             biles, los enfermos que son en medio de no-
        práctica, recordando que «en la vida cristiana          sotros la carne de Cristo. «Necesitamos ejerci-
        nunca se hace mucho si no es cuando se hace mu-         tarnos en el arte de escuchar, que es más que oír...
        cho la voluntad de Dios»4.                              La escucha nos ayuda a encontrar el gesto y la
                                                                palabra oportuna que nos desinstala de la tran-
        Conversión de las prospectivas y del es-                quila condición de espectadores» (EG 171).
        tilo de la misión                                           El papa Francisco habla del «lugar privile-
                                                                giado de los pobres en el Pueblo de Dios» (EG
        a) Religiosos "proféticos"                              197-201). Por una parte, propone la natura-
                                                                leza mística del encuentro con el prójimo y
           En todas nuestras actitudes y en nuestras            con los últimos: es «tocar la carne del Verbo»,
        opciones estamos llamados a reconocer y                 es «ver y servir a Cristo en el hombre»; por otra,
        hacer reconocer los signos que invitan al               pone de relieve la naturaleza apostólica de la
        cambio, se nos pide que expresemos pro-                 caridad al prójimo, que es en sí misma
        fecía, visión de futuro.                                evangelización. «Desde el corazón del Evange-
           «En la Iglesia los religiosos son llamados espe-     lio reconocemos la íntima conexión que existe en-
        cialmente a ser profetas que dan testimonio de          tre evangelización y promoción humana, que ne-
        cómo Jesús vive en este mundo, y que anuncian           cesariamente debe expresarse y desarrollarse en
        cómo será el Reino de Dios cuando llegue a su           toda acción evangelizadora» (EG 178).
        perfección. Un religioso no debe jamás renunciar
        a la profecía... Ser profetas implica, a veces, hacer   c) Religiosos alegres, portadores de esperanza
        ruido, no sé cómo decir... La profecía crea alboro-
        to... Pero en realidad su carisma es ser levadura:         Estamos llamados a reavivar la esperan-
        la profecía anuncia el espíritu del Evangelio»5.        za de nuestros hermanos, a caldear los co-
           A los consagrados se les pide una profecía           razones, testimoniando la valentía de abrir
        específica: vivir y testimoniar del modo más            nuevos caminos con fe y con esperanza.
        visible el signum fraternitatis que une los unos        Todo el mundo está sorprendido por este
        a los otros, superando las tentaciones de re-           papa feliz, confiado, sereno, sonriente, con
        traimiento individualista «hacia la privacidad          una espontaneidad alegre que viene de den-
        cómoda o hacia el reducido círculo de los más ínti-     tro. Todos advierten que su sonrisa no es
        mos, y renuncian al realismo de la dimensión so-        una «sonrisa de azafata de vuelo»7. Y explica:
        cial del Evangelio» (EG 88). La otra importan-          «La alegría del Evangelio llena el corazón y la
        te profecía de los religiosos es la del servitium       vida entera de los que se encuentran con Jesús
        caritatis6. «El Evangelio nos invita siempre a co-      Quienes se dejan salvar por Él son liberados del
        rrer el riesgo del encuentro con el rostro del otro,    pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aisla-
        con su presencia física que interpela, con su dolor     miento. Con Jesucristo siempre nace y renace la
        y sus reclamos, con su alegría que contagia en un       alegría» (EG 1). «Un evangelizador no debería
        constante cuerpo a cuerpo» (EG 88).                     tener permanentemente cara de funeral» (EG
                                                                10). Nuestra alegría, de discípulos misione-
        b) Religiosos que viven la cultura del encuentro        ros del amor de Dios, nace del encuentro
                                                                con Cristo, «nadie queda excluido de la alegría
           Somos invitados a promover y testimo-                reportada por el Señor» (EG 3).
        niar la “cultura del encuentro” como estilo                Como conclusión de estas notas, no me
        de vida y de misión, con gestos de proximi-             queda sino invitar no sólo a admirar al can-

                                                                               N.º 93 - Enero - Marzo 2015
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        tante, y ni siquiera a aprender la canción,            enviado a este papa Francisco?». Espero que
        sino sobre todo a cantar efectivamente el              estas notas puedan servir para despertar es-
        “nuevo canto” entonado por el papa Fran-               tas mismas preguntas, deseos y decisiones.
        cisco. Entre nosotros hay quien apela a la
        prudencia: “mejor esperar”; “el entusiasmo                 1
        es grande, pero ¿hasta cuándo durará?”.                      No ha sido publicado el texto de lo dicho por
                                                               el papa Francisco a los Superiores generales. El P.
        Hay quien señala los muchos riesgos de ins-            Antonio Spadaro fue autorizado a redactar un re-
        trumentalización de un lenguaje más pasto-             sumen, revisado por el papa y publicado en La Ci-
        ral que doctrinal del papa Francisco. Existe           viltà Cattolica, Cuaderno nº 3925 del 4 enero 2014,
        el riesgo de minimizar la novedad de Fran-             pp. 3-17.
                                                                   2
                                                                     Texto de un vídeo mensaje del card. Bergoglio
        cisco; de no ver que el evangelio ha iniciado          a los Orionistas que iban a celebrar el Capítulo con
        un nuevo camino a través del mundo, y per-             el tema Solo la caridad salvará al mundo (9 noviem-
        manecer al margen, esperando que las co-               bre 2009).
                                                                   3
        sas estén más claras, que lleguen las refor-                 Ibid.
                                                                   4
        mas prometidas, que se vean los frutos, que                  S. Luis Orione, Escritos, 55, 13.
                                                                   5
                                                                     En la Entrevista en La Civiltà Cattolica.
        se produzcan las previsibles oposiciones.                  6
                                                                     Confessio trinitatis, signum fraternitatis y servitium
        En el aula del Sínodo, durante el encuentro            caritatis son las tres dimensiones y tareas de la vida
        con el papa Francisco, fue un sentimiento              consagrada expuestas en la Exhortación postsino-
        de alegría más que un sentido del deber, lo            dal Vita consecrata (1996).
                                                                   7
                                                                     Es una expresión que dijo Francisco, estando
        que me llevó a preguntarme: «¿Y qué debo               con las Clarisas de Asís, cerca de algunas herma-
        hacer yo? ¿Cómo debo cambiar? Mi Congrega-             nas: «sonríen con la sonrisa de una azafata de vuelo, pero
        ción, ¿cómo puede responder a Dios, que nos ha         no con la sonrisa de la alegría que viene desde dentro».

                             LAS RELACIONES NUEVAS QUE GENERA JESUSCRISTO
              «Hoy, que las redes y los instrumentos de la comunicación humana han alcanzado desarrollos
           inauditos, sentimos el desafío de descubrir y transmitir la mística de vivir juntos, de mezclarnos,
           de encontrarnos, de tomarnos de los brazos, de apoyarnos, de participar de esa marea algo caóti-
           ca que puede convertirse en una verdadera experiencia de fraternidad, en una caravana solidaria,
           en una santa peregrinación. De este modo, las mayores posibilidades de comunicación se tradu-
           cirán en más posibilidades de encuentro y de solidaridad entre todos […]. Salir de sí mismo para
           unirse a otros hace bien. Encerrarse en sí mismo es probar el amargo veneno de la inmanencia, y
           la humanidad saldrá perdiendo con cada opción egoísta que hagamos.
              El ideal cristiano siempre invitará a superar la sospecha, la desconfianza permanente, el te-
           mor a ser invadidos, las actitudes defensivas que nos impone el mundo actual. Muchos tratan de
           escapar de los demás hacia la privacidad cómoda o hacia el reducido círculo de los más íntimos,
           y renuncian al realismo de la dimensión social del Evangelio […]. La verdadera fe en el Hijo de
           Dios hecho carne es inseparable del don de sí, de la pertenencia a la comunidad, del servicio, de
           la reconciliación con la carne de los otros. El Hijo de Dios, en su encarnación, nos invitó a la re-
           volución de la ternura».
                                                                               Evangelii gaudium, nn. 87-88.

        Unidad y Carismas
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